RUTINA Guionista: Álvaro Loman e-mail: [email protected] web: http://e3f.blogspot.com INT. CUARTO OSCURO - NOCHE HOMBRE de mediana edad con signos evidentes de cansancio se encuentra sentado mirando al frente. Hay una grabadora en la mesa que está entre HOMBRE y POLICÍA, éste también de la misma edad, pero con símbolos de envejecimiento prematuro. POLICÍA: Puede empezar. HOMBRE: ¿Por donde empiezo? POLICÍA: No lo sé. Por donde creas necesario para que pueda entender la historia. HOMBRE: ¿Puedo fumar? El policía le tiende un cigarrillo al hombre y se lo enciende con un mechero. HOMBRE da una larga calada. HOMBRE: Gracias. Bien, supongo que todo se remonta a hace unos cinco años. Me habían echado del trabajo y con el dinero que ganaba mi mujer no teníamos para vivir. INT. TIMBA ILEGAL - NOCHE Se ve un local de juego, hay cuatro hombres en la mesa, uno de ellos es HOMBRE, MAFIOSO #1 reparte las cartas, todos fuman enormes puros. Una chica muy joven, quizás demasiado, se acerca a la mesa y deja unas bebidas. MAFIOSO GORDO, el más gordo y sudoroso de todos, le da una palmada en el culo, la chica reprime un insulto y se va mientras el hombre se ríe de forma asquerosa, casi demente. HOMBRE (Voz en off): Se me da bastante bien el póker, así que cogí los ahorros que teníamos y me fue a una de esas timbas ilegales. >>El caso es que jugué unas cuantas veces hasta hacerme amigo de los “habituales”. Normalmente ganaba y, aunque a mi mujer no le gustaba, reconocía a regañadientes que era una manera muy eficaz de llegar a fin de mes. Pero un día… MAFIOSO #1: Bueno, Maverick. Ya nos has limpiado todo el dinero unas cuantas veces y todavía no sabemos ni en que trabajas. HOMBRE (Medio sonriendo): Estoy trabajando. MAFIOSO #2: No jodas ¿En serio? HOMBRE: Sí, se me da bien esto y… bueno, tengo unos ahorros… (Juega su mano) Simplemente los aumento. Necesito este dinero, por eso no os dejo ganar. Los tres hombres se ríen, pero es una risa incómoda. MAFIOSO #1: La suerte del desesperado. Pero esto no es un trabajo de verdad, no tiene seguridad. Un día de mala suerte (Chasquea los dedos) y no comes ese mes. HOMBRE: Todos los trabajos tienen un riesgo. De todas formas, sigo buscando trabajo. MAFIOSO #1: Ah ¿Sí? ¿Y qué sabes hacer? HOMBRE: Jugar a las cartas. (Sonríe). No, ahora en serio. Era segurita en un supermercado. MAFIOSO GORDO: ¡Vaya, un hombre acción! (Se ríe) MAFIOSO #1: Tuviste que disparar alguna vez. HOMBRE: No, claro que no. No tenía pistola. Un par de veces tuve que echar a un ladrón, pero nada más. MAFIOSO #1: ¿Por qué te echaron? HOMBRE: Recorte de personal. MAFIOSO GORDO: Yo también era segurita. Me echaron porque no me mantenía en forma. MAFIOSO #2: Te echaron porque eres un gordo. MAFIOSO GORDO: Pues eso, lo que he dicho. MAFIOSO #1: Oye, pues yo tengo un trabajito para un hombre de acción como tú. HOMBRE: ¿En serio? MAFIOSO #1: Claro ¿Porqué iba a mentirte? INT. CUARTO OSCURO - NOCHE La imagen vuelve al cuarto oscuro. El hombre sigue fumando, se quita el cigarrillo de los labios un momento con manos temblorosas. Se ve como tiene éstas esposadas entre sí. HOMBRE: Acepté el trabajo sin ni siquiera saber que era. Me metieron en un coche y me dieron una pistola con silenciador. Era sencillo, pasamos con el coche al lado de un hombre, yo saqué la pistola por la ventanilla y disparé. POLICÍA: Podías haberte negado al saber de que se trataba. HOMBRE: Lo intenté, pero para entonces ya había dado el paso definitivo. Si me volvía atrás, me mataban. INT. CASA - NOCHE MUJER está viendo la televisión cuando de repente se abre la puerta y aparece HOMBRE. Está a punto de llorar. HOMBRE (Voz en off): Esa noche no pude dormir. Los remordimientos me pesaban demasiado. Mi mujer me estuvo intentando consolar. MUJER se levanta del sofá y ve al marido así, se acerca a él preocupada y él se echa a llorar en su hombro. POLICÍA: ¿Se lo contaste a tu mujer? HOMBRE (Voz en off): Sí, en ningún momento le mentí. Ella sabía lo que yo estaba haciendo. POLICÍA: ¿Te intentó disuadir? HOMBRE (Voz en off): Sí. INT. CUARTO OSCURO – NOCHE POLICÍA: ¿Por eso la mataste? HOMBRE (Voz en off): (Mirándole con furia) NO. Ella se resignó a que yo matara. Al principio yo tampoco quería volver a matar. Pero cuando nos quedamos sin dinero volví al local de los mafiosos. POLICÍA: ¿Con qué intenciones? HOMBRE: En principio quería volver al póker. Pero nada más aparecer por el local me ofrecieron otro trabajo. Les dije que no volvería a hacerlo y ellos se lo tomaron bien. O eso parecía en un principio. MAFIOSO #1 (Voz en off): Veo tus cuarenta y subo cuarenta más. INT. TIMBA ILEGAL – NOCHE HOMBRE: No voy. MAFIOSO #2: Venga, no seas quejica. HOMBRE: No me quiero arriesgar tanto. MAFIOSO #2: Tú tranquilo, si pierdes te cubrimos la siguiente. HOMBRE: No, no quiero deberos nada. MAFIOSO #1: ¿Por qué? ¿No estamos entre amigos? HOMBRE: No, de verdad, muchas gracias. Pero aquí me retiro. MAFIOSO #2: No seas así, has tenido una pequeña mala racha. Muchas veces te has recuperado de peores. HOMBRE: (Se queda pensativo) Está bien, las igualo. MAFIOSO #1: Enséñame tus cartas. Los dos muestran sus cartas y el mafioso 1 supera las cartas del otro. El interrogado se lleva las manos a la cabeza, abatido. Todos los mafiosos se ríen. HOMBRE (Voz en off): Al principio me cubrían las apuestas, pero llegó el momento en que debía demasiado, tuve que matar de nuevo. Esta vez me mandaron a mí solo. El objetivo estaba en su casa, sólo tenía que tocar a su puerta y, cuando abriera, dispararle a la cara. INT. PASILLO - DÍA Se ve al protagonista caminando por un pasillo con una pistola con silenciador en la mano. Llega a una puerta, toca a la puerta y levanta la pistola. Cuando se abre la puerta, aprieta el gatillo. El otro hombre cae hacia atrás a cámara lenta. El asesino no tiene ningún gesto en la cara, una mirada neutra. POLICÍA (Voz en off): ¿Quién era? HOMBRE (Voz en off): No lo sé. Puedo decirte su dirección, pero no sé su nombre y tampoco sé porqué querían matarle. El caso es que esa vez no me costó tanto apretar el gatillo, así que al volver al coche les dije que trabajaría para ellos de forma regular. INT. CUARTO OSCURO - NOCHE POLICÍA: Entiendo, pero ¿Y esto que tiene que ver con el asesinato de su esposa? HOMBRE: Ya falta poco para eso. El caso es que estuve durante años matando gente. Uno al mes, a veces más, a veces menos. Mi mujer me decía que lo dejara, incluso me buscó trabajo, pero yo estaba demasiado acomodado. Era mucho dinero por muy poco trabajo. POLICÍA: ¿Recuerdas sus nombres? HOMBRE: No sé ningún nombre, pero si quiere le puedo dar algunas direcciones que recuerdo y el nombre de mis jefes. HOMBRE da una larga calada. Se queda mirando al cigarrillo antes de seguir. HOMBRE: Algunos dirían que mi trabajo puede ser arriesgado o excitante, pero no es así. Es pura rutina. Toco a la puerta de la víctima, abre la puerta, disparo, me voy. Una y otra vez. Rutina total. No hay ni siquiera matices diferentes, ni una sola vez cambiaron los planes, nunca se vieron truncados por nada… VARIOS Se ven diferentes asesinatos, todos con el mismo modus operandi, él toca al timbre y cuando se abre la puerta, dispara. INT. CUARTO OSCURO - NOCHE HOMBRE: (Simula una pistola con los dedos) ¡Bang! Pero un día todo el trabajo era diferente. Tenía que matar a una persona en mi edificio, así que entré por el portal y, en vez de dirigirme a casa del objetivo… INT. CASA - NOCHE Se ve su mujer sentada en el sofá, leyendo un libro, tocan a la puerta, se levanta y va a abrir. Es su marido. HOMBRE (Voz en off): …me dirigí a mi casa (Dispara la pistola. La mujer cae al suelo mientras él la mira horrorizado) y maté a mi mujer. INT. CUARTO OSCURO – NOCHE El policía tiene cara de asombro. POLICÍA: ¿Qué? Por… ¿Por qué lo hiciste? HOMBRE: ¿Nunca te ha pasado que sales de tu casa para ir al cine o lo que sea y vas pensando en tus cosas y, cuando te das cuenta has ido caminando en dirección opuesta y estás en la puerta de tu trabajo? ¿Nunca la inercia, la rutina ha tirado tanto de ti como para hacer algo que no querías hacer? POLICÍA (Abatido): Dios mío ¿Quieres decir que te equivocaste? HOMBRE: (Con lágrimas en las mejillas) Sí, me dirigí a la puerta equivocada. Los dos se quedan varios segundos callados, mirando a la mesa. El policía apaga la grabadora y saca el casete. POLICÍA: Llevároslo, chicos. Ha admitido matar a decenas de personas, además de su mujer. Entra en la sala un policía que coge y levanta al acusado. HOMBRE: No. La única persona que maté fue a mi esposa, por ella me he entregado. POLICÍA: ¿Y el resto de personas de las que no conoces ni el nombre? HOMBRE: Si un hombre usa una espada para matar a otro, a quién metes en prisión ¿Al hombre o a la espada? POLICÍA: Al hombre, por supuesto. HOMBRE: Pues yo no soy el hombre, yo soy la espada. Mi jefe me empuñaba. POLICÍA: Llevároslo. Se llevan al acusado. El interrogador se dirige lentamente a la puerta y la cierra desde fuera, abatido. FIN