tros que nos indican el ruta. Las verdaderas estrellas de nuestra vida son personas que han sabido vivir rectamente. Ellas son luces de esperanza. Jesucristo es ciertamente la luz..., el sol que brilla sobre todas las tinieblas de la historia. Pero para llegar hasta Él necesitamos también luces cercanas, personas que dan luz reflejando la luz de Cristo, ofreciendo así orientación para nuestra travesía. Y ¿quién mejor que María podría ser para nosotros estrella de esperanza, Ella que con su « sí » abrió la puerta de nuestro mundo a Dios mismo; Ella que se convirtió en el Arca viviente de la Alianza, en la que Dios se hizo carne, se hizo uno de nosotros, plantó su tienda entre nosotros.” Canto: Magnificat 1.– Engrandece mi alma al Señor, En él goza mi espíritu. Ecce ancilla domini. Aleluya. Amén. 2.– Todos los pueblos te honrarán, porque fuiste grande. Tu nombre es santo Inmortal. Aleluya. Amén. 3.– Su brazo es de gran poder, dispersa a los orgullosos, derriba del trono a los soberbios. Aleluya. Amén. 4.– A Israel su Hijo Amado, auxilia con su Amor. Según lo dicho a Abraham. Aleluya. Amén. 5.– Magnificat, Magnificat, Magnificat. Amén Magnificat, Magnificat. Aleluya. Amén. (Bis) Power point: La esperanza, ancla de mi vida. Ambientación: El ancla de un barco, fijada en el fondo del mar, permite a la nave mantenerse firme en medio de olas y tormentas. Nuestra vida, como un barco que navega por el mar, necesita un anclaje firme para no ser zarandeada por los vaivenes de las olas. La esperanza es el “apoyo seguro que impide al barco ir a la deriva”, “Así, ancladas en Jesucristo, no tenemos miedo por mucho que se levanten las olas del mar”, porque entonces: todo lo podemos en Aquel en quien hemos depositado nuestra confianza. Canto: Tú eres mi ancla Y es que tu amor me da alegría. Tu amor me da esperanza, cuando más la necesito. Oh Jesús, tú eres mi calma, a tu lado estoy seguro contigo nada me falta. Tengo todo por delante. Gracias Dios por ser mi ancla. Yo quiero estar por siempre contigo. Yo quiero estar por siempre contigo. Yo quiero estar contigo Jesús. Yo quiero estar por siempre contigo. Música Música--silencio Canto: El ancla de mi fe. Jesús el ancla de mi fe. Jesús el ancla de mi fe. Él es escudo de mi vida, a él le ensalzo con amor. (Bis) Lectura bíblica: Hb. 6, 18-19 “La promesa de Dios… nos da brío y ánimo a nosotros los que buscamos refugio, agarrándonos a la esperanza que tenemos delante; esta es para nosotros como un ancla…, sólida y firme, que entra… hasta el lugar donde como precursor entró por nosotros Jesús…” Música Música--silencio Oración final: “La Vida es como un viaje por el mar de la historia, a menudo oscuro y borrascoso, un viaje en el que escudriñamos los as-