189-13-ST-F CÁMARA DE FAMILIA DE LA SECCIÓN DE OCCIDENTE: Santa Ana, a las once horas del día sábado veintiuno de diciembre del año dos mil trece.IDENTIFICACIÓN DE LAS DILIGENCIAS Las presentes diligencias de Ejecución de Acuerdos Conciliatorios celebrados en el proceso de divorcio procedente del Juzgado de Familia de Santa Tecla con Número Único de Identificación ST-F-180-106.2-07, promovidas por la adolecente [...]representada legalmente por su madre, señora [...], contra del señor [...],en relación a la cuota alimenticia fijada a favor de la referida adolescente.- La demandante y ejecutante es representada actualmente por el licenciado RODOLFO ALFREDO G.F., del domicilio de [..], en su calidad de apoderado; y el demandado y ejecutado, por la licenciada SANDRA ELIZABETH G.O., quien actúa conjuntamente con la licenciada SARA ELIZABETH M.M., en sus calidades de mandatarias, las tres personas últimamente nominadas son abogados.- A excepción de la adolescente […] todos son mayores de edad y del domicilio de Santa Tecla.- El expediente del incidente de apelación del que conoce este Tribunal Superior ha sido registrado con la referencia 189-13-STF.Por resolución de las 15 horas del día 7 de agosto del año 2013 (fs. 800 al 8003, 4ª pieza), el señor Juez de primera instancia: a) tuvo por parte a la licenciada Sandra Elizabeth G.O., en su calidad de apoderada del señor [...]; b) declaró sin lugar el tener por evacuada la prevención efectuada por el referido tribunal el día 12 de diciembre del año 2012; c) declaró sin lugar la suspensión de la ejecución contra el señor [...], por lo que ordenó dar trámite a las medidas ejecutivas peticionadas por el abogado de la parte ejecutante respecto de la cantidad en la que existía conformidad por parte del obligado; d) con base a las disposiciones ahí citadas y a fin de hacer efectiva la mora en la cuota alimenticia a cargo del señor M.M. en interés superior de la adolescente [...], “trabó embargo” en el salario del ejecutado y en virtud de lo adeudado ascendía a la cantidad un mil quinientos noventa y uno dólares con cuarenta y cuatro centavos ordenó librar oficio al pagador del la Empresa Fertica, S.A. de C.V. a fin de que descontaran del salario del ejecutado hasta por el monto adeudado y depositadas dichas cuotas en cuenta bancaria a nombre de la señora [...]; e) mandó a oír al licenciado G.F. para que se pronunciara dentro de tercer día sobre la disconformidad de la parte ejecutada según los planteamientos relacionados en el escrito de fs. 767 a 770, 4ª pieza y sobre lo relativo a la deuda en concepto de aguinaldo del año 2011 a cargo del ejecutado, ratificando o desistiendo de ello; f) tomó nota de la sentencia definitiva pronunciada por Juzgado Primero de Familia de San Salvador en el proceso de modificación de sentencia y ordenó agregarla al expediente; y g) previno a la licenciada Sandra Elizabeth G.O. para que dentro de tercero día manifestara si sustituía la representación legal ejercida por la licenciada Sara Elizabeth M. Inconforme tanto la parte ejecutada como la ejecutante con lo resuelto en el literal “d” de la providencia relacionada, ambas partes interpusieron recurso de apelación contra ella según escritos presentados por la licenciada G.O. y el licenciado G.F. a fs. 818 y 819 y 840, 5ª pieza, respectivamente.SUPLETORIEDAD DE LA LEGISLACIÓN PROCESAL COMÚN LA NORMATIVA APLICABLE.- El Código Procesal Civil y Mercantil, vigente desde el día 01 de julio del año 2010, en el art. 708 dispone que “Los procesos, procedimientos y diligencias que estuvieren en trámite al momento de entrar en vigencia el presente código, se continuarán y concluirán de conformidad a la normativa con la cual se iniciaron.” y según su art. 705 fue derogado el Código de Procedimientos Civiles (en lo sucesivo identificado sólo como “Pr.C.”), así como sus reformas posteriores.En el presente caso, la demanda para dar inicio al proceso fue presentada el 31 de enero del año 2007, es decir antes de la fecha citada en el párrafo precedente o sea que éste se encontraba en trámite cuando entró en vigencia el Código primeramente nominado, por lo que deberá continuarse y concluirse conforme a la legislación con la cual se inició, es decir de acuerdo con la Ley Procesal de Familia (en adelante identificada sólo como “Pr.F.), en cuyo Art. 218 dispone que “En todo lo que no estuviere expresamente regulado en la presente Ley, se aplicarán supletoriamente las disposiciones de las leyes especiales referentes a la familia y las del Código de Procedimientos Civiles, siempre que no se opongan a la naturaleza y finalidad de esta Ley.”.Por otra parte, las diligencias de la ejecución de la sentencia definitiva pronunciada en este proceso no son más que la continuación del mismo, es una etapa dentro de éste que se inició con la sola petición de la parte a cuyo favor se pronunció tal providencia (art. 172 Pr.F.), por lo que para su tramitación son de obligatoria aplicación las disposiciones del derogado Código de Procedimientos Civiles, como normativa supletoria.- LA PROCESABILIDAD DEL RECURSO DE APELACIÓN Para que la Cámara de Familia de la Sección de Occidente pueda entrar al conocimiento y decisión del fondo de los recursos de apelación interpuestos contra decisiones de las Juezas y de los Jueces de Familia de su comprensión territorial, pronunciadas en los procesos o diligencias de jurisdicción voluntarias de familia, es necesario e indispensable que la parte impugnante cumpla con ciertos y determinados requisitos contemplados en la Ley Procesal de Familia y en el presente caso por el Código de Procedimientos Civiles por ser la norma supletoria correspondiente .- Tales requerimientos legales son los que a continuación se indican y desarrollan: [1] la procedencia del recurso, [2] los sujetos de la apelación, [3] la forma de interposición, [4] el tiempo de interposición, [5] los puntos impugnados de la decisión, [6] la fundamentación del recurso, [7] la petición en concreto y [8] la resolución que se pretende.[1] LA PROCEDENCIA DEL RECURSO.- El recurso de apelación debe ser procedente, es decir que la resolución impugnada debe estar comprendida en la normativa procesal familiar o en la supletoria como apelable.- En otras palabras, la legislación debe conceder de manera expresa el recurso de apelación contra las decisiones judiciales que ella misma menciona en el art. 153 Pr.F..No obstante lo anterior, también se aplica supletoriamente el Código de Procedimientos Civiles, en virtud de lo establecido en el Art. 218 Pr.F.; en otras palabras, la enumeración de providencias apelables que formula el Art. 153 Pr.F. no es taxativa, sino que también son alzables otras resoluciones que no aparecen en dicha disposición, como es el caso de las decisiones judiciales que en forma anormal hacen finalizar procesos o diligencias de jurisdicción voluntaria, por ejemplo las que rechazan demandas, reconvenciones o solicitudes iniciales de dichas diligencias, por ser manifiestamente IMPROPONIBLES (Art. 197 Pr.C.) o las que declaran su IMPROCEDENCIA (Art. 45 Pr.F.) o su INEPTITUD, que son sentencias interlocutorias que producen el efecto de ponerle fin a los procesos o a las referidas diligencias, haciendo imposible su continuación, a las que la ley les concede el recurso de apelación en ambos efectos según se dispone en la parte final del inciso tercero del Art. 984 Pr.C..- Otro caso pero diferente a ese ejemplo es el de las resoluciones que DENIEGUEN medidas cautelares o de protección que, aún cuando no se citan en el literal “f)” del Art. 153 Pr.F., también son apelables por ser sentencias interlocutorias con fuerza de definitivas, pues pueden llegar a producir daños irreparables o de muy difícil reparación por la sentencia definitiva, las cuales se encuentran contempladas en los dos primeros incisos del Art. 984 Pr.C. como alzables en ambos efectos.[2] LOS SUJETOS DE LA APELACIÓN.- El (La) abogado(a) que interpone el recurso de apelación debe tener legitimidad procesal al efecto o sea que por ley se encuentre facultado(a) para apelar.- Es decir que las leyes le deberán reconocer expresamente el derecho de alzarse, como es el caso de los(as) apoderados(as) o de otros(as) representantes judiciales de las partes o de terceros interesados en el proceso y el Procurador de Familia adscrito al tribunal de familia de primera instancia (art. 154 Pr.F.).[3] LA FORMA DE INTERPOSICIÓN.- El recurso se debe interponer en forma ORAL o en forma ESCRITA, según la manera de cómo se haya pronunciado la providencia impugnada, excepto cuando se trate de una SENTENCIA DEFINITIVA, cuya ÚNICA forma de interposición es por ESCRITO.Si la providencia es una SENTENCIA INTERLOCUTORIA proveída en una audiencia o en una diligencia, por regla general, el recurso se debe de interponer en forma ORAL.- Pero si fue pronunciada por ESCRITO, necesariamente su proposición tendrá que ser de esa manera (arts. 148 inc. 1º y 156 incs. 1° y 2º Pr.F.).[4] EL TIEMPO DE INTERPOSICIÓN.- El recurso de apelación se debe interponer en los plazos establecidos por la normativa procesal de familia, dependiendo de la clase de providencia que se impugna y de la forma en que se haya interpuesto el recurso.Si la sentencia es INTERLOCUTORIA y ha sido pronunciada por ESCRITO, la apelación se debe proponer dentro de TRES DÍAS, contados desde el instante en que se haya tenido por efectuada su notificación.- Pero si la decisión fue proveída en forma ORAL en una audiencia o en una diligencia, el recurso se deberá interponer INMEDIATAMENTE después de su pronunciamiento (arts. 148 inc. 1º y 156 inc. 1º Pr.F.).Si la decisión impugnada es una SENTENCIA DEFINITIVA que fue pronunciada dentro los cinco días siguientes a la conclusión de la respectiva audiencia, la apelación se debe interponer por ESCRITO dentro de los CINCO DÍAS siguientes a la hora en que se tenga por efectuada la notificación.- Pero si la sentencia definitiva fue proveída en forma ORAL en la audiencia preliminar o en la de sentencia, según el caso, el plazo de CINCO DÍAS para presentar por ESCRITO el recurso de apelación se cuenta desde el momento en que concluya la audiencia, ya que de conformidad con la primera parte del cuarto inciso del art. 33 Pr.F. “Las resoluciones pronunciadas en audiencia se tendrán por notificadas a quienes estén presentes….”.- En el caso de las personas que no concurrieron a la audiencia, consideramos que para evitar la vulneración de los derechos constitucionales de audiencia, de defensa y de impugnación de la parte inasistente, la sentencia definitiva no debe de tenerse por notificada a quienes por cualquier causa no concurrieron a la audiencia (aunque la parte final del art. 33 Pr.F. establezca lo contrario), por lo que tal providencia se les debe hacer de su conocimiento en el lugar señalado o por el medio electrónico propuesto al efecto y el término de cinco días para apelar se iniciaría desde el siguiente día de su notificación en forma personal o desde el instante en que se tuvo por realizado tal acto de comunicación o desde el siguiente día a aquél en que se fijó el edicto en el tablero del tribunal, dependiendo del caso, pero no se contaría desde el momento en que concluyó la audiencia (arts. 34 inc. 6º, 148 inc. 2º y 156 incs. 1º y 2º Pr.F.).[5] LOS PUNTOS IMPUGNADOS DE LA DECISIÓN.- En el momento en que se interpone el recurso de apelación, ya sea en forma oral o en forma escrita, según sea el caso, el (la) recurrente debe indicar de manera precisa cuál(es) de los puntos que contiene la decisión judicial es el (son los) que impugna, especialmente cuando ésta contenga dos o más y alguno de ellos o todos le sea(n) desfavorable(s) (art. 148 inc. 2º Pr.F.).[6] LA FUNDAMENTACIÓN DEL RECURSO.- Siempre que el recurso de apelación se interponga de la SENTENCIA DEFINITIVA, tal medio de impugnación se debe fundamentar en la inobservancia de precepto(s) legal(es) o en la errónea aplicación de precepto(s) legal(es) o bien tanto en la inobservancia como de la errónea aplicación de precepto(s) legal(es), el (los) cual(es) debe(n) citarse y además se debe expresar en qué forma lo ha(n) sido (art. 158 inc. 1º Pr.F.).Sobre el particular debemos tener presente que la “INOBSERVANCIA” de precepto(s) legal(es) no es lo mismo que la “ERRÓNEA APLICACIÓN” del (de los) mismo(s).- En el primero de los casos (inobservancia), el juzgador ha dejado de aplicar determinada(s) norma(s) o sea que se trata de una omisión en la utilización de determinada(s) disposición (disposiciones) legal(es); y en el segundo de ellos (errónea aplicación), el funcionario judicial si ha aplicado cierto(s) precepto(s) legal(es), pero lo ha hecho en forma equivocada o de manera errada o que no viene(n) al caso sometido a su conocimiento y decisión; es decir que se ha(n) observado el (los) precepto(s) pero no en la forma debida.En cuanto a las sentencias interlocutorias, la ley no especifica cómo debe de fundamentarse el recurso de apelación, pero el (la) impugnante siempre debe hacerlo, expresando los motivos o causas que lo(a) han llevado a plantear la alzada o qué es lo que ha causado agravio, con el objetivo de dar elementos de convencimiento al Tribunal Superior que resolverá tal medio de impugnación, para que acceda a sus pretensiones de revocar o de modificar o de anular la decisión recurrida, según lo que haya planteado en su recurso de apelación.[7] LA PETICIÓN EN CONCRETO.- En el alegato oral o en el mismo escrito de interposición de la apelación, el recurrente deberá expresar la petición que concretamente formula a la respectiva Cámara de Familia, en el sentido de que debe solicitarle la “REVOCATORIA” o la “MODIFICACIÓN” o la “NULIDAD” de la providencia judicial que impugna, dependiendo de su pretensión (arts. 148 inc. 2º y 161 inc. 1º Pr.F.).Si solicita su ”REVOCATORIA” lo que persigue es que se dejen sin efecto todos los puntos que ella contiene.- Si pide su “MODIFICACIÓN” es con el objeto de que un(os) punto(s) de la misma se deje(n) sin efecto o que sea(n) revocado(s) o modificado(s) o cambiado(s) y que el (los) restante(s) quede(n) con todo valor y efecto o sea sin variación alguna.- Y si solicita la declaratoria de “NULIDAD” de la resolución, deberá especificar cuál ha sido el vicio procesal en que se ha incurrido, mencionando o singularizando o citando alguna(s) de las causas o motivos de nulidad específicamente contemplados en el Código Procesal Civil y Mercantil.En el último de los tres casos mencionados en el párrafo precedente (la petición en concreto de nulidad), deberá de especificarse cuál ha sido el vicio procesal en que ha incurrido el Juez de Familia, aclarando si se trata de alguna de las siete nulidades RELATIVAS contempladas en los Arts. 1116 a 1120 Pr.C. o de una de las tres nulidades ABSOLUTAS INCONVALIDABLES o insubsanables o irratificables, reguladas en el Art. 1130 Pr.C. o si se trata de alguna de las tres nulidades ABSOLUTAS CONVALIDABLES o subsanables o ratificables que se mencionan en el Art. 1131 Pr.C. (Arts. 148 inc. 2º y 161 inc. 1º Pr.F., 1089, 1091 a 1093 Pr.C.). [8] LA RESOLUCIÓN QUE SE PRETENDE.- El apelante también deberá indicar en el alegato verbal o en el expresado escrito de interposición del recurso, cuál es la resolución que pretende, pues además de formular la petición en concreto (la revocatoria o la modificación o la nulidad de la providencia), deberá especificar con precisión, con exactitud y con claridad qué es lo que desea que le resuelva la respectiva Cámara de Familia; es decir que si ésta ordena revocar o modificar o anular la providencia, deberá de indicar cuál es la decisión que espera de este Tribunal Superior, pero que conforme a derecho corresponda o sea que deberá tener un especial y diligente cuidado de que la resolución que espera del Tribunal de Segunda Instancia corresponda a la petición en concreto que le ha formulado.En otras palabras, la resolución que pretende debe ser congruente con la petición en concreto (art. 148 inc. 2º Pr.F.); por ejemplo, si la decisión impugnada fuera una sentencia definitiva por medio de la cual se declaró sin lugar una demanda de divorcio, el apelante (demandante) solicitaría que la Cámara de Familia “revoque” esa providencia (que es la petición en concreto) y como “resolución que pretende” tendría que solicitar a ese Tribunal Superior que decrete el divorcio que se ha demandado y que resuelva sobre sus puntos accesorios, que generalmente se refieren al caso en que hay hijos menores de edad o sea sobre su cuidado personal, el régimen de comunicación entre éstos y el progenitor que no tendrá el cuidado personal de ellos y cuantías de cuotas alimenticias en beneficio de ellos y a cargo del padre y/o de la madre.EL PODER DE LOS TRIBUNALES AD QUEM.- En cuanto a los dos últimos requisitos de procesabilidad del recurso de apelación (la petición en concreto y la resolución que se pretende), es de observar que tales exigencias se circunscriben al objetivo de dar competencia a los Tribunales de Familia de Segunda Instancia, con el fin ulterior de garantizar el principio de congruencia de las providencias judiciales y que, por otra parte, el juzgador no puede ni debe otorgar más ni menos de lo solicitado o exigido por las partes, por lo que en su decisión final deberá pronunciarse en forma exclusiva sobre los puntos planteados y sobre las cuestiones debatidas en el recurso interpuesto.LA CONCLUSIÓN.- Como consecuencia de lo expuesto resulta que cuando el (la) representante judicial de la parte agraviada interpone el recurso de apelación contra una decisión judicial con incumplimiento de alguno(s) de los requisitos que exige la ley o lo(s) omite, previa la motivación o el requerimiento o la prevención correspondientes, la respectiva Cámara de Familia, según el caso, se abstendrá de entrar al conocimiento y decisión del fondo del asunto, deberá declarar la improcedencia de tal medio de impugnación o su improponibilidad o su inadmisibilidad o la denegatoria de lo solicitado y ordenará la devolución del expediente del proceso (pieza principal) al tribunal de origen con certificación de lo proveído.EL EFECTO DE LA OMISIÓN DE REQUISITOS Los Magistrados de la Cámara de Familia de la Sección de Occidente somos de la opinión de que el efecto que produce la falta de cumplimiento de los requisitos de procesabilidad del recurso de apelación es el rechazo mediato o inmediato de éste por medio de: [1] la declaratoria de su improcedencia, [2] la declaratoria de su improponibilidad, [3] la declaratoria de su inadmisibilidad y [4] la denegatoria de la solicitud formulada por el apelante.[1] LA DECLARATORIA DE IMPROCEDENCIA.- Cuando no se cumple con el requisito contemplado en el N° 1 (la procedencia del recurso) o sea que la providencia recurrida no está contemplada en la legislación como apelable, esta Cámara con el fundamento legal del art. 153 Pr.F. declararía la “improcedencia del recurso”.[2] LA DECLARATORIA DE IMPROPONIBILIDAD.- Si no se cumple con el requisito N° 2 (los sujetos de la apelación), es decir que el recurso lo interpone una persona que no tiene derecho a hacerlo, ya sea porque la ley no se lo reconoce o por defectos de capacidad o de representación o de procuración o postulación del representante legal y/o del representante judicial de la parte apelante, según el caso, este Tribunal de Segunda Instancia con base en el art. 154 Pr.F. declararía la “improponibilidad del recurso”.[3] LA DECLARATORIA DE INADMISIBILIDAD.- En los casos en que no se cumpla con cualesquiera de los requisitos relacionados en el N° 3 (la forma de interposición del recurso) y en el N° 4 (el tiempo de su interposición), lo que ocurriría si el recurso ha sido se ha interpuesto en forma escrita cuando debió serlo oralmente o viceversa o si fue planteado extemporáneamente, esta Cámara de Familia con el apoyo del art. 148 inc. 1º Pr.F. declararía la “inadmisibilidad del recurso”.[4] LA DENEGATORIA DE LA SOLICITUD DEL APELANTE.- Y si no se cumplen cualesquiera de los requisitos identificados con el N° 5 (los puntos impugnados de la decisión), con el N° 6 (la fundamentación del recurso), con el N° 7 (la petición en concreto) o con el N° 8 (la resolución que se pretende), es decir que si se omite indicar el o los puntos impugnados de la decisión judicial o no es fundamentada la apelación o no se formulan la petición en concreto o la resolución que se pretende, este Tribunal de Segunda Instancia, declararía sin lugar las pretensiones del recurrente o sea que denegaría lo que le ha solicitado por medio del recurso de apelación.ANÁLISIS DE LOS RECURSOS INTERPUESTOS En virtud de que ambos apelantes han interpuesto sus recursos contra el mismo punto de la providencia de fs. 800 a 803, 4ª pieza, admisibilidad de la impugnación, el análisis sobre el primero de los requisitos de se hará por economía de manera conjunta, para ambas impugnaciones; al respecto se advierte que la ley exige que éste sea procedente, es decir que la resolución impugnada debe estar comprendida en la legislación procesal como apelable o que la ley le conceda expresamente tal medio de impugnación de las decisiones judiciales que ella misma menciona.Para entrar al análisis de este punto, los suscritos Magistrados estimamos necesario establecer qué clase o tipo de resolución es la decisión en relación al punto impugnado ya que ésta no se encuentra expresamente determinada en el Art. 153 Pr.F., ni se trata de una sentencia definitiva.- Al respecto El Art. 418 Pr.C. establece que “Sentencia interlocutoria es la que se da sobre algún artículo o incidente.- Definitiva es aquella en que el Juez, concluido el proceso, resuelve el asunto principal, condenando o absolviendo al demandado. Las sentencias interlocutorias se llaman también autos.”.- Sobre la sentencias interlocutorias el Código de Procedimientos establece que éstas pueden ser: a) simples, que son las relacionadas en el precitado artículo; b) con fuerza de definitivas, que son “las sentencias que producen daño irreparable o de difícil reparación por la definitiva” (Art. 984 inc. 2° Pr.C.); y c) que ponen fin al proceso; que son “las resoluciones que pongan término a cualquier clase de juicio, haciendo imposible su continuación” (Art. 984 inc. 3° Pr.C.).- De esta clasificación de conformidad al Art. 968 numeral 1° Pr.C. la ley les niega la apelación a “las sentencias interlocutorias que no tiene fuerza de definitiva y a los decretos de mera sustanciación, excepto los comprendidos en el artículo 984”; es decir que al analizar tales disposiciones queda claro que la últimamente citada se refiere a las sentencias interlocutorias simples, pues las otras dos mencionadas (con fuerza de definitiva y que ponen fin al proceso) a éstas si les concede apelación en ambos efectos el art. 984 Pr.C..Teniendo ya el marco de referencia legal, analizamos el punto impugnado y se advierte que en éste el señor Juez de Primera instancia lo que ordena es embargar el salario al manifestar “trabase embargo en el salario del ejecutado”, al respecto es necesario aclarar ciertos conceptos respecto a la naturaleza de las providencia pronunciadas en este tipo de diligencias de ejecución; de conformidad al Art. 594 inc. 1° Pr.C. “El juez reconocida la legitimidad de la persona y la fuerza del instrumento agregará éste desde luego, sin citación contraria, e inmediatamente decretará el embargo de bienes del ejecutado y librará el mandamiento respectivo aún antes de hacer saber a las partes esta providencia” (subrayado y negritas fuera del texto legal), es decir que una vez solicitada la ejecución o cumplimiento de una sentencia el Juez de Familia puede adoptar ejecutado, las siguientes decisiones: [A] decretar embargo en los bienes del demandado o entendiéndose tal orden de forma general a todos los bienes de éste ya que de conformidad al Art. 2212 del Código Civil (derecho general de prenda) “Toda obligación personal da al acreedor el derecho de perseguir su ejecución sobre todos los bienes raíces y muebles del deudor, sean presentes o futuros, exceptuándose solamente los no embargables, designados en el artículo 1488.”; [B] ordenar el libramiento del correspondiente mandamiento de embargo, Art. 594 inc. 1º Pr.C.; [C] comisionar en su caso para diligenciarlo a un Ejecutor de Embargos o a un Juez de Paz, Art. 612 inc. 1º Pr.C. o, a solicitud del interesado, el Juez podría trabar el embargo: [a] de inmuebles o cosas mercantiles o bienes o derechos inscritos en Registros Públicos, por medio de oficio librado al Registrador correspondiente o [b] de sueldos, salarios o pensiones que perciba el demandado, librando orden al pagador, jefe de oficina, patrono o institución donde labore el demandado o le enteren la pensión, con el objeto de que le retenga la suma de dinero proporcional que señala la ley y luego remita el producto de lo embargado a la oficina correspondiente (Art. 594 inc. 3º Pr.C.).- Esta resolución se debe notificar al representante judicial de la parte ejecutante y al Procurador de Familia, pero todavía NO SE DEBE NOTIFICAR al ejecutado o a su representante judicial (Art. 594 inc. 1º Pr.C.), a fin de evitar que enajene o grave sus bienes.En base a lo anterior queda claro que la decisión que decreta embargar los bienes no es igual a la providencia que “ordena trabar embargo”, la primera es una providencia que de conformidad al Art. 985 N° 15 Pr.C. admite apelación en el efecto devolutivo, y se refiere a la orden dada por el juez de que el ejecutado responda de la obligación por la que se le ejecuta con todos sus bienes y para tal efecto libra el mandamiento de embargo.- La segunda es únicamente un decreto de mera sustanciación, pues solamente da trámite o cumple lo ordenado mediante el decreto de embargo, trabando el embargo en uno o varios bienes específicos pertenecientes al obligado para hacer frente a la obligación afianzándolos para su posterior subasta; por lo anterior y no obstante advertir que el señor Juez de Primera Instancia omitió pronunciar el “decreto de embargo”; lo ordenado por dicho funcionario en el punto impugnado por las partes no es “decreto de embargo”, sino únicamente la ejecución de éste ordenando “trabar embargo” en el salario del obligado, es decir es un trámite de mera ejecución que no está resolviendo el fondo del asunto sometido a decisión, sino únicamente dándole trámite.advertimos que tal providencia En base a lo anterior en el punto impugnado es un decreto de mera sustanciación, que NO ES APELABLE, ya que no está contemplada como alzable en la enumeración de providencias que formula el Art. 153 Pr. F., y el Art. 986 numeral 1° Pr.C. les niega expresamente dicho recurso.De lo anterior resulta que la providencia recurrida no es alzable, por lo que el recurso interpuesto tanto por la licenciado G.O., apoderada de la parte ejecutada, como por el licenciado G.F., apoderado de la parte ejecutante, no es procedente; en consecuencia, no puede dársele trámite y resultaría infructuoso continuar analizando los demás requisitos exigidos para la admisión de los recursos, pues aunque se cumplieran, es improcedente por no cumplir con el primero de ellos.- En vista de lo cual así se pronunciará este Tribunal de Alzada.ACTOS DE COMUNICACIÓN Esta providencia se deberá notificar de la siguiente manera: a) al licenciado Rodolfo Alfredo G.F., apoderado de la ejecutante, mediante el telefacsímil N° 2226-9060 o 2226-9061, propuesto a fs. 655, 4ª pieza; b) a la licenciada Sandra Elizabeth G.O. y a la licenciada Sara Elizabeth M.M., apoderadas del ejecutado, mediante el telefacsímil N° 2298-0271, ofrecido a fs. 748 fte. y 805 vto., 5ª pieza, respectivamente.; y c) y a la licenciada María de los Ángeles C. Z., Procuradora de Familia del Juzgado de Familia de Santa Tecla, por edicto a fijar en el tablero judicial de este Tribunal de Alzada, por no haber señalado un lugar para citaciones y notificaciones en la sede del mismo, ni haber propuesto medio electrónico alguno al efecto, tal como lo disponen los Arts. 33 incs. 2º y 5º Pr.F., 220 y 1276 inc. 1º Pr.C.- Si por cualquier causa no fuere posible la transmisión por los expresados telefacsímiles, las notificaciones al los licenciados G.F. , G.O. y M.M. se les hará por medio de edicto a fijar en el tablero judicial de este Tribunal de Alzada, por no haberse señalado un lugar para citaciones y notificaciones en la sede del mismo.LA DECISIÓN En virtud de la motivación expuesta, de las disposiciones legales citadas y de lo que establecen los Arts. 149 y 160 inc. 2º Pr.F.: DECLÁRANSE INADMISIBLES POR IMPROCEDENTES LOS RECURSOS DE APELACIÓN interpuestos respecto al punto impugnado por la licenciada Sandra Elizabeth G.O. y el licenciado Rodolfo Alberto G.F., en las calidades en las que actúan, del decreto de sustanciación del señor Juez de Familia de Santa Tecla, pronunciado a las quince horas del día siete de agosto de dos mil trece en las diligencias relacionadas al inicio.- En su oportunidad devuélvase el expediente del proceso al tribunal de origen con certificación de esta providencia.- LA ANTERIOR SENTENCIA INTERLOCUTORIA FUE PRONUNCIADA POR LOS SEÑORES MAGISTRADOS Octavio Humberto Parada Cerna y Ana Guadalupe Zeledón Villalta.-