418 FERDINANDO CASADIEGOS CÁCERES Los agnados y los gentiles son herederos voluntarios y bajo JUSTINIANO, el agnado puede aceptar bajo beneficio de inventario. Por su parte, los acreedores hereditarios tienen derecho a la bonorum separatio en caso de sucesión ab intestato, lo mismo que en caso de sucesión testamentaria. Es necesario aplicar también a la sucesión legítima los efectos de la adquisición; las reglas del acrecentamiento; las de fideicomisos, porque aún muriendo intestado, se puede dejar por condicilo. Quedan por el contrario, extraños a la sucesión ab intestato todos los principios que conciernen a la designación del heredero testamentario y a la teoría de las leyes caducarias. 2.3. SUCESIÓN EN LA LEY DECENVIRAL O DE LAS DOCE TABLAS Dos rasgos característicos distinguían este primer sistema: • Preferencia de la familia civil sobre los parientes consanguíneos, y • La sucesión por clases, excluyéndose unas a otras en el orden que sean llamadas a recoger la herencia del difunto. En este sistema había tres clases de herederos ab-intestato: La de los sui heredes, o sea los descendientes legítimos bajo la patria potestad del causante al tiempo de morir. Entre estos descendientes estaban: la mujer in manu, el hijo adoptivo y el hijo póstumo, que es el concebido y no nacido en el momento de morir el causante. La sucesión de esta clase podría tener lugar in capita o in stirpes. • Tenía lugar in capita: cuando concurrían varios descendientes de un mismo grado a recoger la herencia. • Tenía lugar in stirpes: cuando había muerto un descendiente antes del causante, habiendo dejado a su vez descendientes. El conjunto de éstos descendientes iba a ocupar el lugar del premuerto y recibían como si hubiera sido una sola persona, la cuota que a éste último hubiera correspondido, para repartírsela por partes iguales. Es el origen del fenómeno jurídico conocido en las legislaciones modernas con el nombre de representación o sucesión por stirpes.