¿Me elegí yo? O ¿Me escogió Dios? Romanos 9:14-18; 10:12-21 Asunto: Predestinación 14 Entonces, ¿qué diremos? ¿Que Dios es injusto? ¡De ninguna manera! 15 Porque Dios dijo a Moisés: «Tendré misericordia del que yo quiera, y me compadeceré del que yo quiera.» 16 Así pues, no depende de que el hombre quiera o se esfuerce, sino de que Dios tenga misericordia. 17 Porque la Escritura le dice a Faraón: «Te he levantado precisamente para mostrar en ti mi poder, y para que mi nombre sea anunciado por toda la tierra.»18 De manera que Dios tiene misericordia de quien él quiere tenerla y endurece a quien él quiere endurecer. La doctrina de la elección incondicional de Dios es tan incomparable con la doctrina con que la mayoría de nosotros entendimos, y a pesar de produzca dificultad considerarla, está en la Biblia, así que no creo que sea difícil aceptar esta buena noticia. Se que algunos pueden estar un poco asombrados, mas luego que escuchen este mensaje de Romanos 9 y 10 se darán cuenta que es sencillo pasar el switch que nos en nuestra mente donde pensamos que nosotros escogimos ser salvos, a saber que es Dios quien eligió y no tu ni yo. Así que me esforzaré para mostrarles estas verdades bajo la forma en que Pablo lo explica, por medio de los judíos y su manera de creer. Es muy complicado, humanamente hablando, pero el Espíritu Santo de Dios y la Palabra lo harán posible. ¡Oremos IGLESIA! En el capítulo 9 el apóstol Pablo está abordando dos cosas que dieron “seguridad” al judío en cuanto a este tema: (1) Ser descendiente de Abraham y (2) Tener y guardar la ley. Y en el capítulo 10 él se está dirigiendo al problema que el pueblo hebreo presentó a no tener confianza en las promesas de Dios. Los judíos creían que por ser descendientes de Abraham ellos eran salvos. No quisieron creer, aunque estaba dicho por Dios y escrito es que en los planes de Dios estaban incluidos los gentiles, o sea, los no judíos. Y los gentiles (los salvo, naturalmente) llegamos a ver esta verdad que los judíos no vieron. El objetivo principal del mensaje en esta mañana es demostrar que Dios es justo y recto en su elección incondicional, y para ello la actitud del pueblo judío hacia Dios en esta materia nos lo va a hacer entender. He dividido el sermón en cuatro puntos principales: • Dios en Su justicia elige a quién quiere para sus propósitos (9:4-33). • El Evangelio es para todos los hombres (10:12-21) ¿Cómo ha afectado esto a nuestra credibilidad? Vamos a leer algunas porciones de estos dos capítulos: Romanos 9:14-18: 14 Entonces, ¿qué diremos? ¿Que Dios es injusto? ¡De ninguna manera! 15 Porque Dios dijo a Moisés: «Tendré misericordia del que yo quiera, y me compadeceré del que yo quiera.» 16 Así pues, no depende de que el hombre quiera o se esfuerce, sino de que Dios tenga misericordia. 17 Porque la Escritura le dice a Faraón: «Te he levantado precisamente para mostrar en ti mi poder, y para que mi nombre sea anunciado por toda la tierra.»18 De manera que Dios tiene misericordia de quien él quiere tenerla y endurece a quien él quiere endurecer. Romanos 10:12-21 “12 Porque no hay diferencia entre el que es judío y el que no lo es, pues el mismo que es Señor de todos, es rico para con todos los que lo invocan, 13 porque todo el que invoque el nombre del Señor será salvo. 14 Ahora bien, ¿cómo invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han 1 oído? ¿Y cómo oirán si no hay quien les predique? 15 ¿Y cómo predicarán si no son enviados? Como está escrito: «¡Cuán hermosa es la llegada de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas!» 16 Pero no todos obedecieron al evangelio; pues Isaías dice: «Señor, ¿quién ha creído a nuestro anuncio?» 17 Así que la fe proviene del oír, y el oír proviene de la palabra de Dios. 18 Pero yo pregunto: ¿En verdad no han oído? ¡Por supuesto que sí! «Por toda la tierra ha salido la voz de ellos, Y sus palabras han llegado hasta los confines de la tierra.» 19 Y vuelvo a preguntar: ¿En verdad Israel no ha comprendido esto? En primer lugar, Moisés dice: «Yo haré que ustedes sientan celos de un pueblo que no es pueblo; Y haré que ustedes se enojen con un pueblo insensato.» 20 También Isaías dice resueltamente: «Los que no me buscaban, me encontraron; me manifesté a los que no preguntaban por mí.» 21 Pero acerca de Israel dice: «Todo el día extendí mis manos a un pueblo rebelde y contestatario.» Trabajemos sobre esta porción y unos versículos antes y otros luego: 1) Dios en Su justicia elige a quién quiere para sus propósitos (9:4-33). Primero nos preguntamos: a) ¿Tiene derecho Dios a ser misericordioso y justo? Y la respuesta es SI, lo leímos del 14 al 18. - Es aquí donde Pablo inicia su enseñanza sobre la doctrina de la elección incondicional de Dios. En su gracia Dios escoge a quien el quiere haya hecho el bien o haya hecho el mal, y aun antes de nacer si así le conviene solo a Él. Eso no depende de los que somos, de lo que hacemos, de quien seamos, a que religión pertenecemos o en que cosas creemos… todo depende de Dios, es su decisión final. i) La elección de Dios. (9:14-16). (1) Y por eso ¿es injusto Dios? Pablo responde: «!De ninguna manera!». No hay injusticia alguna en Dios cuando incondicionalmente elige a quien quiere. (2) Al parecer esto no se ve bien, pero escucha iglesia, esto trae consigo una ¡Buena Noticia! No importa cuanta maldad hay en ti, no importa cuantos y que pecados has cometido, aunque te veas abominable ante Dios, o te mires inmaculado, recuerda que Romanos 3:23 dice “por cuanto todos pecaron y están destituidos de la gloria de Dios;” (3) Aquí es donde la Doctrina de la Elección Incondicional En Una Buena Noticia, porque significa que cuando le supliquemos a un incrédulo que crea en el evangelio, por mucha maldad que haya en él, no nos puede responder: «No puedo ser elegido; soy muy malo. He cometido muchos pecados». Y es entonces que se ve… ii) La dureza del hombre. (9:17-18). (1) El hombre iguala su pecado a la soberanía de Dios y se agobia en su desesperación, pensando que su pecaminosidad es soberana y se rinde a sus pecados, justificándose a si mismo. (2) El hombre no tiene derecho alguno, ni poder para auto declararse fuera del alcance de la elección de Dios. (3) Dios no se basa en nuestra justicia, solo espera tu arrepentimiento, tu conversión invocando el nombre de Señor por medio de Jesucristo quien murió por los pecadores, entre los cuales estás tú. No endurezcas tu corazón. Lo siguiente es una pregunta… b) ¿Tiene derecho el hombre a altercar con Dios? De ninguna manera (9:19-21) i) El hombre no tiene derecho de replicar contra Dios. ii) Dios es el alfarero, el barro está bajo su potestad, tu eres barro. Entonces… 2 c) ¿Quién tiene el derecho de identificar a los escogidos? Solo Dios y sus profecías (9:25-29) ¿Solamente judíos pudieron ser vasos de honra? i) Los elegidos son de todas las naciones (9:25-26). No es solo Israel, lo leemos a lo largo del Nuevo Testamento Mateo 28:19a.; Hechos 1:8b.; también en el Antiguo Testamento en Oseas 2:23 que dice: “La sembraré para mí en la tierra, y tendré compasión de la que no recibió compasión, y diré al que no era mi pueblo: Tú eres mi pueblo, y él dirá: Tú eres mi Dios.” Ese pueblo es el nuevo Israel, elegidos de Dios en Cristo, no en Abraham, aunque también se nos llame hijos de Abraham, no de una iglesia, o una denominación, o una organización religiosa, ¡NO! Elegidos en Cristo, el Hijo del Dios viviente… no obstante… ii) Los elegidos también son de Israel (9:27-29), pero solo de un remanente (Def. reserva para algo, un grupo de hombres y mujeres judíos que Dios se ha reservado, ha escogido) de ese pueblo (Oseas 10:22-23) “Pues aunque tu pueblo, oh Israel, sea como la arena del mar, sólo un remanente de él volverá; la destrucción está decidida, rebosando justicia. 23 Pues una destrucción completa, ya decretada, ejecutará el Señor, Dios de los ejércitos, en medio de toda la tierra”. Los judíos pensaron que todos los de la raza judía iban a ser salvos por ser descendientes de Abraham. El punto de Pablo es que solamente unos pocos iban a salvarse y que así siempre habían dicho los profetas. Luego vuele a mostrar como los gentiles pueden ser parte de esta remanente, pues….. iii) Los elegidos son los que buscan justicia por la fe y por la obras (9:30-32). En el capitulo uno de Romanos versículos 16-17 dice que en el evangelio se revela la justicia de Dios por medio de la fe, Pablo corona esta declaración con la frase de Habacuc 2:4 “El justo por la fe vivirá”. Y por ende… iv) Los elegidos son los que siguen a Cristo por la fe (9:33). Isaías 1:9 lo declara y Pablo los escribe diciendo: “Yo pongo en Sión una piedra de tropiezo y una roca de caída; pero el que crea en él, no será avergonzado”. Esa piedra, esa Roca es el Salvador, es el León de Judá, el Cordero inmolado por ti y por mi, Jesucristo. Y en segundo lugar… la justicia de la elección divina es privilegio sólo de Dios y… 2) El Evangelio es para todos los hombres (10:12-21) a) Dios trata a todos los hombres por igual (10:12) ya eso lo hemos tratado en punto pasado, no voy a redundar, solo a recordar que Dios hace como Él quiere, esa es su soberanía en la salvación de la humanidad. También entendemos que... b) Todos los hombres son salvos por la misma promesa (10:13) “porque todo el que invoque el nombre del Señor será salvo” invocar es: implorar, suplicar, rogar, invocar, clamar, demandar, apelar, pedir, todas estas palabra son sinónimos, el profeta Joel en su libro cap. 2:32 dice: “Y todo aquel que invoque el nombre del Señor será salvo, y entre ellos estará el remanente al cual el Señor ha llamado, porque en el monte de Sión y en Jerusalén habrá salvación, tal y como el Señor lo ha dicho.” parafraseado sería más o menos así: todo el que ruegue, el que pida a Dios en el nombre de Jesús la salvación la tendrá, pero ¿Cómo lo interpreta Pablo? Se debe notar que Pablo toma palabras del AT que se refieren a Jehovah y las aplica a Cristo. Es claro que en este versículo el sentido de la invocación a que se refiere no es meramente formal sino que se refiere a invocar al Señor con un profundo sentido de necesidad e incapacidad y en plena convicción de que se puede depender de él. 3 c) Pero la humanidad no puede ser salva sin la predicación del Evangelio por el pueblo de Dios (10:14-15). ¿Qué dice Pablo al respecto? “14 Ahora bien, ¿cómo invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán si no hay quien les predique? 15 ¿Y cómo predicarán si no son enviados? Como está escrito: «¡Cuán hermosa es la llegada de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas!»” i) Luego Pablo hace una serie de preguntas, para indicar cómo Dios precisa de todos los medios disponibles a fin de que las personas puedan invocar a Cristo para ser salvas. Dios envía a alguien a predicar el evangelio de Jesucristo, esta persona, comparte del el camino a la justicia y reconciliación con Dios, y para explicarles lo que Cristo ha provisto para el pecado. ii) Luego dice: “Como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas!” (Rom. 10:15), lo cual es una cita de Isaías 52:7. Este pasaje misionero nos habla de tres cosas sumamente importantes. Primero que nada, nos dice que la salvación viene solo por medio de Cristo, a toda persona, sin que importe su raza, estado social, o nacionalidad. En segundo lugar, nos demuestra la necesidad y derecho de toda persona de escuchar las buenas nuevas. Finalmente, nos indica que las personas que están espiritualmente perdidas no podrán escuchar el mensaje si alguien no se los predica y enseña. iii) Los misioneros no pueden ir si no son enviados. El pueblo de Dios tiene el gozo y responsabilidad de enviarlos. No obstante, el hecho de dar dinero para enviar a otros como misioneros no es sustituto para nuestra responsabilidad personal de testificar, este mensaje de Pablo es para todo creyente en cumplir la Gran Comisión. Hoy hemos aprendido que…. d) La Biblia enseña que el Evangelio es universal (10:16-18) y además que… e) La desobediencia de Israel prueba que el Evangelio es universal (10:19-21). i) La desobediencia de Israel no se dio por no escuchar la Palabra de Dios, fue todo lo contrario, Israel custodiaba las Escrituras, pero ese pueblo eligió no llevar el mensaje de Jehová al mundo. Ellos no eran ignorantes al mensaje de salvación. Vieron a Jesucristo, lo escucharon predicar, vieron como los gentiles se convertían a Cristo para salvación. ii) Dios los invitó: “Diles: Vivo yo, dice Jehová el Señor, que no quiero la muerte del impío, sino que se vuelva el impío de su camino, y que viva. Volveos, volveos de vuestros malos caminos; ¿por qué moriréis, oh casa de Israel?” (Ezequiel 33:11) Se negaron a aceptar la invitación de Dios, cerraron su mente y desobedecieron, no consideraron a Cristo como el Salvador de Israel “A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron.” Conclusión: Cito a John Piper…. Ningún pecado que usted haya cometido jamás puede impedir que usted sea uno de los elegidos de Dios. Dios fue, es, y siempre será libre. Y su registro anterior de pecados no fue, ni es obstáculo para que usted sea elegido: Invoque el nombre del Señor Jesús y será salvo. Permita que todas las alabanzas, para salvación suya, vayan a él y no a usted. Y cuando encuentre su descanso en Cristo por medio de la fe, gloríese en esto: «Las raíces de su seguridad crecen por siempre, hacia la eterna gracia de Dios». Amén. 4