CASO PRÁCTICO SOBRE REESTRUCTURACIÓN DE LAS CONDICIONES DE LA DEUDA. CASO DE EMPRESAS EN CONCURSO. Gregorio Labatut Serer http://gregorio-labatut.blogspot.com.es/ Universidad de Valencia La Norma de Registro y Valoración (NRV) 9ª del Plan General de Contabilidad nos ofrece una solución para aquellos casos que entre deudor y acreedor se produzca una modificación de las condiciones (tanto en cuantía como en tiempo) en las que en un inicio, se estipulo para el pago de una deuda. Esta solución se explica en el punto 3.5 de la NRV 9ª: “Baja de pasivos financieros”. El aspecto clave se centra en determinar, si tras la restructuración de las condiciones de la deuda, ésta puede ser calificada de sustancialmente distinta, o no. La Norma indica bajo qué condiciones la reestructuración de la deuda se considerarán sustancialmente diferentes. Según la NRV, se considerará que la deuda, tras la reestructuración, es sustancialmente distinta, cuando el valor actual de los flujos de efectivo del nuevo pasivo financiero, incluyendo las comisiones netas cobradas o pagadas, sea diferente, al menos en un diez por ciento del valor actual de los flujos de efectivo remanentes del pasivo financiero original, actualizados ambos al tipo de interés efectivo de éste. En caso contrario, se considera que la deuda no es sustancialmente distinta. Esta consideración no es baladí, pues en función de ella se realizará un registro contable u otro, afectando al resultado del ejercicio. De este modo, puede producirse dos casos: 1. Que las nuevas condiciones de la deuda tras la reestructuración sean sustancialmente diferentes a las anteriores. En este coso, se dará de baja el pasivo financiero original y se reconocerá el nuevo pasivo por su valor razonable. La diferencia se contabilizará como un ingreso en la cuenta de pérdidas y ganancias del ejercicio, minorado, en su caso, en el importe de los costes de transacción atribuibles. Dicho resultado se mostrará en el margen financiero debiendo crear la empresa una partida específica con adecuada denominación si su importe es significativo. A tal efecto, se propone la siguiente denominación: “Ingresos financieros derivados de reestructuración de la deuda” (76xx). Esto implica, no modificar el Tipo de interés efectivo correspondiente a estas deudas que se pagarán en el futuro, pero se modifica por el contrario el valor inicial de la deuda, reconociendo la totalidad del cambio como un ingreso financiero del ejercicio. 2. Que las nuevas condiciones de la deuda, tras la reestructuración, no sean sustancialmente diferentes de las anteriores. Entonces no se dará de baja el pasivo financiero original, registrando, en su caso, el importe de las comisiones pagadas como un ajuste en su valor contable. Se calculará un nuevo tipo de interés efectivo, que será el que iguale el valor en libros del pasivo financiero en la fecha de modificación con los flujos de efectivo a pagar según las nuevas condiciones. Esto significa no modificar el valor de la deuda y reconocer un nuevo tipo de interés efectivo de la operación que se liquidará en un futuro. En este caso no se reconoce de inmediato el ingreso financiero 1 provocado por la reestructuración, sino que se pospone para el futuro descontándolo del tipo de interés efectivo, lo que provocará un menor coste financiero futuro. De este modo, si se produce un intercambio de instrumentos de deuda entre un prestamista y un prestatario, siempre que éstos tengan condiciones sustancialmente diferentes, se registrará la baja del pasivo financiero original y se reconocerá el nuevo pasivo financiero que surja, registrando en el resultado la diferencia como un ingreso financiero. En el caso de un intercambio de instrumentos de deuda que no tengan condiciones sustancialmente diferentes, el pasivo financiero original no se dará de baja del balance registrando el importe de las comisiones pagadas como un ajuste de su valor contable. El coste amortizado del pasivo financiero se determinará aplicando el tipo de interés efectivo, que será aquel que iguale el valor en libros del pasivo financiero en la fecha de modificación con los flujos de efectivo a pagar según las nuevas condiciones. Todo ello, bajo el paraguas del concepto de “deuda sustancialmente distinta”, en función de que sus modificaciones supongan una diferencia en más o en menos del 10 %. Todo esto, tiene transcendencia fiscal, pues obviamente, desde el punto de vista fiscal, se admite el criterio contable, salvo que se trate de una empresa concursada. El ICAC en su consulta número 1 del BOICAC número 76/diciembre 2008, vuelve a indicar los mismos criterios contables para las empresas concursadas. Como es sabido, en el caso de que la empresa incurra en la Ley Concursal (Ley 22/2003, de 9 de julio) por incumplimiento de sus obligaciones de pago, se puede producir dos situaciones: 1. Que no exista acuerdo de convenio de acreedores, en cuyo caso la empresa está condenada a la disolución. 2. Que exista convenio de acreedores, en este caso en base al plan de viabilidad aceptado por ellos, se acuerda la quita y espera de las deudas, esto es un nuevo plan de pago, provocando en algunos casos una novación en la cancelación de dichas deudas, como se indica en el art. 100, apartado 1, de la Ley Concursal: “La propuesta de convenio deberá contener proposiciones de quita o de espera, pudiendo acumular ambas (…)”. La consulta del ICAC regula la contabilidad de la empresa en concurso, en concreto aspectos informativos contenidos en la memoria y valoración de las deudas en las que se haya producido una novación. A estos efectos, en cuanto a la información a presentar por parte de la empresa concursada, en la memoria de sus cuentas anuales deberá incluirse toda información significativa sobre la situación concursal en la que se encuentre la empresa. En particular, si al cierre del ejercicio la empresa hubiera solicitado la declaración voluntaria de concurso deberá informarse de esta circunstancia en la memoria. En concreto, una empresa con un convenio aprobado en un procedimiento concursal y en ejecución a la fecha de aprobación de las cuentas anuales, señalará en su memoria la fecha de la sentencia de aprobación del convenio, características, situación de las deudas del convenio aprobado, y variaciones más significativas, indicando las producidas por quitas y por aplazamientos en la exigibilidad de los pasivos. 2 También se informará sobre el cumplimiento del convenio, precisando para las deudas más significativas lo siguiente: - deuda inicial con expresión de su plazo de vencimiento original y su tipo de interés efectivo, - deuda en el convenio aprobado, indicando el plazo de vencimiento y su tipo de interés efectivo, así como la parte de la deuda satisfecha de acuerdo con las condiciones del convenio. Asimismo, si no se hubieran formulado cuentas anuales desde el inicio de la solicitud de declaración de concurso hasta la sentencia de aprobación del convenio, también se informará sobre la fecha de la solicitud, juzgado y fecha del auto y propuesta de convenio, indicando los medios con los que cuenta para hacer frente a las deudas En cuanto a la valoración de las deudas afectadas, la empresa concursada deberá analizar si a raíz de la aprobación del convenio las nuevas condiciones de la deuda son “sustancialmente diferentes” de las anteriores, o no, indicando el mismo criterio establecido en la NRV 9ª, punto 3.5 del PGC, comentado anteriormente. Desde el punto de vista fiscal, y solamente en el caso de empresas en concurso, el Real Decreto Ley 4/2014 produjo una modificación de la Ley concursal 22/2003, en varios aspectos que facilitan la refinanciación de las deudas, y entre los que se modificó el art 19 Imputación temporal. Inscripción contable de ingresos y gastos del TRLIS, de tal modo, que se añade un nuevo apartado, apartado 14 a) dicho artículo, en el que se indica lo siguiente: «14. El ingreso correspondiente al registro contable de quitas y esperas consecuencia de la aplicación de la Ley 22/2003, de 9 de julio, Concursal, se imputará en la base imponible del deudor a medida que proceda registrar con posterioridad gastos financieros derivados de la misma deuda y hasta el límite del citado ingreso. No obstante, en el supuesto de que el importe del ingreso a que se refiere el párrafo anterior sea superior al importe total de gastos financieros pendientes de registrar, derivados de la misma deuda, la imputación de aquel en la base imponible se realizará proporcionalmente a los gastos financieros registrados en cada período impositivo respecto de los gastos financieros totales pendientes de registrar derivados de la misma deuda.» Esto significa, que a pesar de que contablemente las diferencias que se pueden producir por “quitas y esperas” se imputan al ejercicio en el que se aprueben, siempre que la variación de la deuda tenga condiciones sustancialmente diferentes, fiscalmente a partir del 1 de enero de 2014, no se reconocerá en el ejercicio del convenio este resultado positivo, sino que se pospone para los años siguientes proporcionalmente al registro de los gastos financieros que produzca la nueva deuda. Por ello, surge una nueva diferencia temporaria negativa entre la contabilidad y la fiscalidad, de modo que en el primer año no se reconoce los beneficios fiscal, posponiendo el mismo para años siguientes, lo que hará aparecer un “pasivos por diferencias temporarias imponibles”. La modificación de la Ley del Impuesto sobre sociedades a partir del 1 de enero de 2015, producida mediante Ley 27/2014, de 27 de noviembre, del Impuesto sobre 3 Sociedades, mantiene esta excepción al criterio contable, pues en el art. 11.13, dice lo siguiente: “13. El ingreso correspondiente al registro contable de quitas y esperas consecuencia de la aplicación de la Ley 22/2003, de 9 de julio, Concursal, se imputará en la base imponible del deudor a medida que proceda registrar con posterioridad gastos financieros derivados de la misma deuda y hasta el límite del citado ingreso. No obstante, en el supuesto de que el importe del ingreso a que se refiere el párrafo anterior sea superior al importe total de gastos financieros pendientes de registrar, derivados de la misma deuda, la imputación de aquel en la base imponible se realizará proporcionalmente a los gastos financieros registrados en cada período impositivo respecto de los gastos financieros totales pendientes de registrar derivados de la misma deuda”. En el cuadro 1 se resume lo expuesto: 4 REESTRUCTURACIÓN DE LA DEUDA. DEUDA SUSTANCIALMENTE DISTINTA Variación en un 10 % o más en la valoración de la deuda. Actualizados al tipo de interés efectivo anterior. CAMBIOS EN LA VALORACIÓN DE LAS DEUDAS Sustancialmente distintas Baja antiguo pasivo y reconocimiento del nuevo. Diferencia: Ingresos financiero Se modifica el valor de la deuda y no el TIE. Afecta a resultados del ejercicio No Sustancialmente distintas Mantenimiento pasivo original. Calculo del nuevo TIE. No se modifica el valor de la deuda, y se modifica el TIE Afecta a resultados del futuro. CRITERIO FISCAL CASO GENERAL EMPRESAS EN CONCURSO Se mantiene el criterio contable. Diferimiento en el reconocimiento del resultado. Se imputará en la base imponible del deudor a medida que proceda registrar con posterioridad gastos financieros derivados de la misma deuda. PASIVOS POR DIFERENCIAS TEMPORRIAS IMPONIBLES Cuadro núm. 1. Reestructuración de la deuda. 5 Veamos dos casos prácticos. CASO PRÁCTICO NÚM. 1. Se trata de una empresa en situación concursal. El plan de viabilidad es aceptado en convenio de acreedores y aprobado judicialmente. El convenio es aprobado por el conjunto de acreedores. Supongamos que existe una Deuda con la empresa A, por un importe de 500.000 euros. Este importe es el coste amortizado de la deuda ya vencida y cuyo tipo de interés efectivo fue del 5 %. Se acepta por parte del acreedor una quita del 10 % en esta deuda, y el calendario de pagos se establece del siguiente modo: 100.000 euros dentro de un año, 200.000 euros dentro de dos años y 150.000 euros dentro de tres años. Determinar la valoración de la deuda en la contabilidad de la empresa concursada a efectos contable y fiscales. SOLUCIÓN: En primer lugar tenemos que comprobar si se ha producido una variación en la valoración de las deudas por separado, inferior o superior al 10 %. Valor actual de la deuda original: 500.000 euros. Valor actual de los flujos de efectivo del nuevo pasivo financiero según las nuevas condiciones establecidas, calculadas al TIE anterior: 100.000 x (1+0,05)-1 + 200.000 x (1+0,05)-2 + 150.000 x (1+0,05)-3 = 406.219,63 euros. Diferencia: 500.000 – 406.219,63 = 93.780,37 euros. Proporción: (93.780,37/500.000) x 100 = 18,75 %. En consecuencia, se produce una diferencia superior al 10 %, por lo que la valoración de la nueva deuda es sustancialmente distinta a la anterior En este caso, se dará de baja el pasivo anterior y se dará de alta el nuevo valor, registrando la diferencia en ingresos financieros, en concreto en la cuenta (76x) Ingresos financieros derivados de convenios de acreedores. No afecta al cálculo del tipo de interés efectivo (TIE) que seguirá en el 5 %. 500.000 (52/17) Deudas a corto/largo plazo (antigua deuda) a a (52/17) Deudas a corto/largo plazo nueva deuda) (76x) Ingresos financieros derivados del convenio de acreedores 406.220 93.780 6 Como se observa en el año de la aprobación del convenio surge contablemente un beneficio de 93.780 euros. Pues bien, hasta ahora habría que tributar por ello, pero tras la modificación del art. 19 del TRLIS, no se tributará y se producirá un diferimiento de esta tributación para años siguientes, por lo que surgirá una diferencia temporaria negativa por 93.780 euros. Suponiendo que el tipo impositivo fuera del 30 % surgiría un pasivo por diferencias temporarias imponibles por 30 % sobre 93.780 = 28.134,11 euros. 28.134,11 (6301) Impuesto corriente a (479) Pasivos temporarias imponibles diferencias 28.134,11 El coste amortizado de la nueva deuda es de 406.220 euros, el cuadro de amortización de esta deuda al tipo de interés del 5 % anual, será el siguiente: AÑOS 0 1 2 3 TOTAL Capital 406.219,63 € 326.530,61 € 142.857,14 € 0,00 € Gasto financiero 20.310,98 € 16.326,53 € 7.142,86 € 43.780,37 € Cuota 100.000,00 € 200.000,00 € 150.000,00 € 450.000,00 € Amortización 79.689,02 € 183.673,47 € 142.857,14 € 406.219,63 € Obsérvese que en este caso el total de gastos financieros de ejercicios siguientes asciende a 43.780.37 euros, mientras que los Ingresos financieros que fiscalmente se difieren para ejercicios siguientes ascienden a 93.780 euros. Esto significa que los ingresos diferidos son superiores a los gastos financieros de ejercicios siguientes. Para realizar la imputación de los ingresos diferidos a ejercicios siguientes, se aplicará el punto 2 del art. 19.14, que dice: “No obstante, en el supuesto de que el importe del ingreso a que se refiere el párrafo anterior sea superior al importe total de gastos financieros pendientes de registrar, derivados de la misma deuda, la imputación de aquel en la base imponible se realizará proporcionalmente a los gastos financieros registrados en cada período impositivo respecto de los gastos financieros totales pendientes de registrar derivados de la misma deuda.» Esta parte proporcional será la siguiente: AÑOS 0 1 2 3 TOTAL Gasto financiero 20.310,98 € 16.326,53 € 7.142,86 € 43.780,37 € Proporción Imputación ingresos 43.507,43 € 34.972,48 € 15.300,46 € 93.780,37 € 7 El registro contable será: Primer año: 79.689,02 (52/17) Deudas a corto/largo plazo nueva deuda) 20.310,98 (66x) Gastos financieros a Tesorería 100.000 La imputación de ingresos correspondiente a la reversión de la diferencia temporaria negativa será por: 43.507,43 euros, y su efecto impositivo ascenderá a: 30 % sobre 43.507,43 = 13.052,23 (479) Pasivo 13.052,23 € difere.temp.imp. a (6301) Impuestos diferidos 13.052,23 € Segundo año: 183.673,47 (52/17) Deudas a corto/largo plazo nueva deuda) 16.326,53 (66x) Gastos financieros a Tesorería 200.000 La imputación de ingresos correspondiente a la reversión de la diferencia temporaria negativa será por: 34.972,48 euros, y su efecto impositivo ascenderá a: 30 % sobre 34.972,48 = 10.491,74 (479) Pasivo 10.491,74 € difere.temp.imp. a (6301) Impuestos diferidos 10.491,74 € Tercer año: 142.857,14 (52/17) Deudas a corto/largo plazo nueva deuda) 7.142,86 (66x) Gastos financieros a Tesorería 150.000 La imputación de ingresos correspondiente a la reversión de la diferencia temporaria negativa será por: 15.300,46 euros, y su efecto impositivo ascenderá a: 30 % sobre 15.300,46 = 4.590,14 (479) Pasivo 4.590,14 € difere.temp.imp. a (6301) Impuestos diferidos 4.590,14 € CASO PRÁCTICO NÚM. 2. Se trata, también de una empresa en situación concursal. El plan de viabilidad es aceptado en convenio de acreedores y aprobado judicialmente. El convenio es aprobado por el conjunto de acreedores. Deuda B: Deuda no comercial por un importe de 500.000 euros. Este importe es el coste amortizado de la deuda ya vencida y cuyo tipo de interés efectivo fue del 5 %. Se acepta por parte del acreedor una quita de 25.000 euros y un aplazamiento. El calendario de 8 pagos se establece del siguiente modo: 300.000 euros dentro seis meses, 150.000 euros dentro de un año y 25.000 euros dentro de dos años. SE PIDE: Determinar la valoración de la deuda en la contabilidad de la empresa concursada en los dos casos. SOLUCIÓN: Valor actual de la deuda original: 500.000 euros. Valor actual de los flujos de efectivo del nuevo pasivo financiero según las nuevas condiciones de la deuda, calculada al TIE anterior: 300.000 x (1+0,05)-1/2 + 150.000 x (1+0,05)-1 + 25.000 x (1+0,05)-2 = 458.302,90 euros. Diferencia: 500.000 – 458.302,90 = 41.697,10 euros. Proporción: (41.697,10/500.000) x 100 = 8,34 %. En consecuencia, se produce una diferencia inferior al 10 %, por lo que la valoración de la nueva deuda no es sustancialmente distinta a la anterior Por lo tanto, el pasivo original se mantiene en el mismo importe que tenía, esto es, por 500.000 euros. El cálculo del nuevo tipo de interés efectivo será el siguiente: 500.000 = 300.000 x (1+0,i)-1/2 + 150.000 x (1+i)-1 + 25.000 x (1+0i)-2 De donde i = 3,39823 % semestral1. Para calcular el tipo de interés anual equivalente, tendremos: Por lo tanto, el tipo de interés anual equivalente es 6,91193 % anual. De este modo, no se modifica el valor de la deuda que será de 500.000 euros. El cuadro de amortización será el siguiente: SEMESTRES 0 1 2 3 4 TOTAL CAPITAL 500.000 183.009 26.790 25.879 0 intereses amortización TOTAL 300.000,00 150.000,00 25.000,00 475.000,00 316.991,13 156.219,05 910,38 25.879,44 500.000,00 16.991,13 6.219,05 910,38 879,44 25.000,00 Primer semestre: 316.991,31 (52/17) Deudas a corto plazo a a 1 (57x) Tesorería (76x) Ingresos financieros derivados del convenio con los acreedores 300.000 16.991,13 Calculado con la hoja de cálculo Excel. Funciones. Financieras. TIR. 9 Segundo semestre: 156.219,05 (52/17) Deudas a corto plazo a a (57x) Tesorería (76x) Ingresos financieros derivados del convenio con los acreedores 150.000 6.219,95 (76x) Ingresos financieros derivados del convenio con los acreedores 910,38 Tercer semestre: 910,38 (52/17) Deudas a corto plazo a a Cuarto semestre: 25.879,44 (52/17) Deudas a corto plazo a a (57x) Tesorería (76x) Ingresos financieros derivados del convenio con los acreedores 25.000 879,44 Por lo tanto, la “quita” que produce un ingreso financiero, se reparte durante el aplazamiento concedido por la “espera”. No existiendo diferencia con el criterio fiscal. Un saludo cordial para todos los amables lectores. Un saludo para todos. Gregorio Labatut Serer http://gregorio-labatut.blogspot.com.es/ Profesor Titular de la Universidad de Valencia 10