Red Econolatin

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VENEZUELA
Julio 2010
Red Econolatin
Expertos Económicos de Universidades Latinoamericanas
Dr. D. Richard Obuchi
Instituto de Estudios Superiores de la
Administración de Venezuela
Para más información entre en www.econolatin.com
El Banco Central de Venezuela atribuyó los resultados negativos de la actividad económica
en el primer trimestre principalmente a tres elementos: 1) la restricción al acceso de divisas
para las importaciones de bienes y servicios, 2) la menor demanda agregada interna de
consumo e inversión, y 3) el racionamiento eléctrico. En vista de la influencia que estos
elementos tienen sobre el desempeño de la economía nacional, resulta oportuno revisar
brevemente diversos sucesos que señalan cómo evolucionan dichos elementos.
El acceso a las divisas. Durante los primeros meses del año, el restringido acceso a las
divisas trajo como consecuencia una subida en el precio del dólar permuta. Ésta fue
identificada por el gobierno nacional como causa de los altos niveles inflacionarios
registrados hasta el mes de abril. En este sentido, se decidió suspender las operaciones en
el mercado permuta, e implementar luego un sistema de asignación de divisas, con bandas
de precio definidas por el BCV. En este sistema, SITME, con bandas fijadas por debajo del
precio al que se adquiría el dólar antes del cambio en la regulación y en el que el método
para mantener las transacciones dentro de las bandas parece ser limitar la asignación de
papeles según la oferta que esté disponible, persiste un exceso de demanda de divisas. A
pesar de que en el mes de junio se reportó que entre enero y mayo había sucedido un
aumento de aproximadamente 20% interanual en la asignación de divisas a través de
Cadivi, también es cierto que los volúmenes de transacciones que se realizan en el SITME,
representan sólo una fracción de los montos que solían tramitarse a través del mercado
permuta. Esto representa una probable contracción de las importaciones de bienes e
insumos, y se convierte entonces en una traba a las operaciones de múltiples empresas
(que no tienen ninguna vía legal para obtener divisas fuera del sistema). Estas restricciones
contribuyen entonces a la escasez y al alza de precios, mientras desincentivan la inversión
extranjera pues dificultan la repatriación de capitales. Tal como indica el anuncio del
Presidente Hugo Chávez, que obligaría a las entidades financieras, bancos y casas de bolsa a
vender los bonos en divisas que tengan en sus portafolios para que exista oferta de dólares
en el SITME, detrás de estas restricciones se encuentra una cantidad inferior de divisas
disponibles. Si bien los precios del petróleo –principal fuente de ingresos- muestran una
recuperación con respecto al año anterior, la subida ha venido desacelerándose en el
transcurso del año, mientras por su parte la producción de crudo y derivados de Venezuela
parece decaer. Finalmente el descenso sostenido recientemente por las Reservas
Internacionales, es evidencia de la menor cantidad de recursos disponibles en divisas.
El racionamiento eléctrico. Luego de meses de estado de emergencia eléctrica, la entrada
del período de lluvias en el país logró aumentar los niveles de los principales embalses
hidroeléctricos generadores de este servicio a nivel nacional. Esta recuperación condujo al
gobierno a la suspensión del Plan de Racionamiento Eléctrico Programado. Sin embargo, los
planes de incorporación no se han desarrollado a la velocidad esperada, y las principales
incorporaciones han sido alternativas que no solucionan el problema a largo plazo
(barcazas de generación, por ejemplo). En definitiva, el sistema sigue presentando fallas en
la generación y transmisión. A pesar de la suspensión del racionamiento, diversas zonas del
interior del país siguen padeciendo recortes en el servicio, que afectan el bienestar de la
población además de las actividades económicas. Por su parte, se planifican modificaciones
en las instituciones que rigen, y actores que participan, en el sector eléctrico. A principios
del mes de junio, la Comisión Permanente de Energía y Minas de la Asamblea Nacional
(AN), aprobó por unanimidad el proyecto de ley del servicio eléctrico, que se basa en tres
principios: el servicio eléctrico como un derecho humano y no como una mercancía, el
dominio del Estado sobre el servicio y la visión socialista de la empresa prestadora del
servicio.
La caída de la demanda agregada. La persistente subida de los precios que afecta al poder
adquisitivo de la población, y el complejo escenario en el que debe desarrollarse cualquier
iniciativa empresarial, se ha traducido en menores niveles de consumo y actividad
económica en general. Tal vez el signo observado en junio más claro de este proceso, haya
sido la caída en los volúmenes de crédito. A pesar de que tradicionalmente en estas
situaciones el gobierno opta por aumentar el gasto público para estimular el crecimiento, la
cantidad inferior de recursos disponibles dificulta llevar a cabo este tipo de medidas. A
pesar de que el Ejecutivo Nacional cuenta con diversos fondos destinados al gasto
relativamente discrecional, dos ejemplos de la inferioridad de los recursos disponibles son:
1) la caída en los ingresos de PDVSA del año 2009 que vino acompañada de un descenso en
el monto destinado a aportes sociales; y 2) el uso de las ganancias de Cantv y BCV para
cubrir gasto corriente (pagos laborales e insuficiencias presupuestarias de los despachos,
entre otros compromisos). Sobre el gasto público, vale comentar que la AN ha aprobado
cuantiosos créditos adicionales (alrededor de Bs.F. 15.383 millones) para atender diversas
necesidades como: salud, educación, vivienda, seguridad social, pago de remuneraciones,
incrementos salariales, pensiones, jubilaciones, entre otros. Esto por un lado es signo de la
baja planificación fiscal y alta discrecionalidad en el uso de los recursos. Esto a su vez
implica que los recursos se mueven según sea el interés del Ejecutivo Nacional, por lo que
aumentos en la concesión de estos créditos podría estar señalando también el deseo de
promoción de la gestión del Presidente Chávez, de cara a las elecciones parlamentarias.
Avance hacia el socialismo. Para el avance hacia el modelo de país socialista que persigue
el Presidente Chávez, el mandatario solicitó el apoyo de los diputados de la AN para
obtener el control total de tierras, capitales y comercio por parte del Estado. Las actividades
económicas en Venezuela están ampliamente monitoreadas -especialmente aquellas en
sectores denominados estratégicos, entre los que destaca el sector agroalimentario- y
además se enfrentan al riesgo de expropiación. Tal como señaló Richard Canán, Ministro
del P.P. para el Comercio, seguirán las fiscalizaciones en el sector alimentos, y advirtió que
quienes incurran en irregularidades serán sancionados con multas, cierres, ocupación
temporal y hasta expropiación. Además de estas declaradas intenciones de ejercer control
directo sobre la economía, resalta que se han promovido diversos instrumentos legales que
pretenden fungir como marco para el nuevo sistema económico-social del país. Además de
la ley del servicio eléctrico (que establece el dominio del Estado en el sector), la Asamblea
Nacional se propone aprobar nuevas regulaciones para el sistema privado de atención
médica, la creación de comunas y el ejercicio de la economía comunal. Tal vez sea
pertinente acotar que el avance hacia el socialismo a ser ejecutado por un nuevo conjunto
de regulaciones, durante el mes de junio se vio acompañado por múltiples eventos de
promoción de los logros en educación, salud y producción, alcanzados por el Gobierno
Bolivariano.
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