ción al parecer tan sencilla, no es originario, sino derivado. Por otra

Anuncio
ción al parecer tan sencilla, no es originario, sino derivado. Por
otra parte, hay formas entre las Hepáticas que acusan un claro parentesco con las Pteridófitas, y estas relaciones de afinidad faltan
por completo en los Musgos. Tenemos que considerar, pues, como
síntesis de todo lo que acabamos de manifestar, que el grupo de los
Musgos ocupa un peldaño inferior en la escala de la serie vegetal,
respecto de las Hepáticas; pero tenemos que manifestar también, a
modo de complemento indispensable, que la derivación de éstas no
puede hacerse de los Musgos que viven en la actualidad, sino que
ha de ser referida a formas anteriores, y que las plantas que consti-
Fig. I. — Proloneraa con parte aérea y parto subterránea, de Leptobryum
r, rizoides. Según Wettstein."
pyriforme:
tuyen la numerosa clase de los Musgos han progresado más que las
Hepáticas en el desarrollo de los órganos apendiculares (hojas, esporogonios). Tenemos que decir, por último, para terminar este
asunto referente a la derivación filogenética de los Musgos, que se
advierten enormes dificultades cuando se pretende buscar a estas
plantas un parentesco, siquiera sea remoto, con cualesquiera de los
grupos de Algas, puesto que entre éstas y los Musgos no existen,
al parecer, formas intermedias de enlace.
Las dos generaciones o modos de reproducción que en las Muscíneas, lo mismo que en todas las demás plantas arquegoniadas,
b
Descargar