C.F.G.S. Animación de Actividades Físicas y Deportivas Asignatura: PRIMEROS AUXILIOS I.E.S. Seritium Jerez de la Frontera TEMA 6 QUEMADURAS Y URGENCIAS POR ALTERACIONES EN LA TERMORREGULACIÓN 1. QUEMADURAS. 1.1. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. 1.2. FACTORES DE LOS QUE DEPENDE SU GRAVEDAD. 1.2.1. Profundidad. 1.2.2. Extensión. 1.2.3. Complicaciones. 1.3. PRIMEROS AUXILIOS EN CASO DE QUEMADURA. 1.4. CASOS ESPECIALES: 1.4.1. Quemaduras químicas o causticaciones. 1.4.2. Quemaduras eléctricas. 2. URGENCIAS POR ALTERACIONES EN LA TERMORREGULACIÓN. 2.1. LESIONES PRODUCIDAS POR EXPOSICIÓN AL FRÍO. 2.1.1. Hipotermia. 2.1.2. Congelación. 2.1.3. Prevención de las lesiones producidas por el frío. 2.2. LESIONES PRODUCIDAS POR EXPOSICIÓN AL CALOR. 2.2.1. Hipertermia. 2.2.2. Prevención de las lesiones producidas por calor. 1. QUEMADURAS. 1.1. CONCEPTO Y CLASIFICACIÓN. Entendemos por quemadura a toda lesión local producida por el calor, en cualquiera de sus formas. La lesión térmica que afecta a los tejidos provoca la destrucción de estos. Aunque se trate de una lesión local, se pueden presentar complicaciones al aparecer grandes trastornos generales que afecten a órganos y sistemas y a su función. Serán estas complicaciones generales las que determinen la evolución del accidentado y no tan solo los daños de los tejidos quemados. Según el agente causante, distinguimos los siguientes tipos de quemaduras: - Físicas: o Térmicas: Calor: • Escaldaduras: se producen en derramamientos de líquidos muy calientes. Normalmente no son muy graves, aunque eso va a depender del líquido derramado y su densidad. • Llamas: suelen ser lesiones profundas. Existe una pérdida total de la dermis y coagulación intravascular debido al calor. Frío: • Congelaciones: se produce necrosis tisular (muerte de tejidos) por la acción del frío y se dan generalmente en dedos de pies y manos, orejas y punta de la nariz. o Eléctricas: pueden ser debidas a agentes atmosféricos (rayos), industriales (alta tensión) y terapéutico-médicas (infrarrojos, ultrasonidos, onda corta, rayos uva, láser, etc.) TEMA 6: Quemaduras y urgencias por alteraciones en la termorregulación (feb’06) Alejandro Jiménez Camacho. 1 de 11 C.F.G.S. Animación de Actividades Físicas y Deportivas Asignatura: PRIMEROS AUXILIOS - I.E.S. Seritium Jerez de la Frontera o Energía radiante: pueden ser debidas a una energía natural como es el sol, o bien radiaciones ionizantes del tipo de las que se producen en un microondas. o Rozamiento: son debidas al roce de la piel contra distintas superficies. Se trata de lo que conocemos como abrasión. Un ejemplo puede ser el deslizamiento de una cuerda en la mano. Químicas (causticaciones): son producidas por agentes químicos de tipo corrosivo, como por ejemplo el agua fuerte, la sosa cáustica, determinados ácidos, etc. Su gravedad va a depender de la dosis y su concentración. 1.2. FACTORES DE LOS QUE DEPENDE SU GRAVEDAD. Son varios los factores que van a aumentar la gravedad de una quemadura. Algunos de ellos son: - Localización: la quemadura puede afectar a cara, manos, pies, orificios nasales, genitales, etc. - Riesgo de infección - Edad: las edades extremas (niños y ancianos) son las de peor pronóstico. - Compromiso de la función respiratoria: inhalación de humos, hollín o gases tóxicos (monóxido de carbono, cloruro de hidrógeno, dióxido de azufre, etc.) - Patologías previas: enfermedades cardiovasculares, alcoholismo, etc. Sin embargo existen dos factores que son los más importantes y por tanto fundamentales para valorar la gravedad de una quemadura. Estos son: la profundidad y la extensión de la quemadura. La profundidad de una quemadura condicionará la cicatrización posterior y la afectación de estructuras internas. Su apreciación, a veces, es difícil. El peligro de muerte es directamente proporcional a la superficie quemada, debido fundamentalmente a la gran pérdida de líquidos que conlleva. 1.2.1. Profundidad de la quemadura. Según su profundidad las quemaduras se clasifican en tres grados: a) Primer grado: Afectan a la epidermis, siendo la lesión característica el eritema o enrojecimiento de la zona afectada. Son dolorosas, se produce inflamación en la zona y curan en 48 horas aproximadamente. Suelen producirse por exposición excesiva al sol o por escaldaduras. b) Segundo grado: Distinguimos dos tipos, la dérmica superficial y la dérmica profunda. a. Dérmica superficial: afectan a la epidermis y al tercio superior de la dermis. Se caracterizan por la aparición de ampollas (flictenas) y por debajo aparecería, en caso de que se abrieran, una coloración rojiza brillante, con gran exudado (supurantes). Curan espontáneamente por reepitelización (regeneración de las células). Son muy dolorosas. Ejemplos de ellas son las quemaduras producidas con el tubo de escape de una moto o por una plancha caliente. b. Dérmica profunda: afectan a la totalidad de la dermis. Se caracterizan por la aparición de flictenas y por debajo aparecería en caso de que se abrieran, una coloración blanca-rosada, menos exudativa que la anterior. Esto es debido a que las glándulas sudoríparas se han quemado también. Son poco dolorosas, debido también a que las terminaciones nerviosas se han quemado. TEMA 6: Quemaduras y urgencias por alteraciones en la termorregulación (feb’06) Alejandro Jiménez Camacho. 2 de 11 C.F.G.S. Animación de Actividades Físicas y Deportivas Asignatura: PRIMEROS AUXILIOS I.E.S. Seritium Jerez de la Frontera c) Tercer grado: Afectan a todas las capas de la piel (epidermis, dermis e hipodermis) e incluso pueden llegar a afectar a músculos, nervios, vasos sanguíneos, etc. Su aspecto irá desde escara blanca y seca hasta color negruzco. No son dolorosas por sí mismas ya que se destruyen las terminaciones nerviosas nociceptivas (que informan del dolor). La zona afectada suele estar como anestesiada. 1.2.2. Extensión. Para valorar la extensión de una quemadura de una forma rápida y precisa en una emergencia utilizaremos la regla de los “9” o de Wallace, que expresa la superficie corporal en porcentajes según la siguiente tabla: ZONA CORPORAL - Cabeza y cuello - Un miembro superior - Cara anterior del tronco (tórax y abdomen) - Cara posterior del tronco (espalda y lumbar) - Un miembro inferior - Periné (y palma de la mano) PORCENTAJE (adulto - niño) 9% - 18% 9% - 9% 18% - 18% 18% - 18% 18% - 13% 1% - 1% En el caso de que existan quemaduras de distintos grados, no se computarán las quemaduras de primer grado para valorar la superficie corporal afectada. 1.2.3. Complicaciones. - Infección: toda quemadura debe considerarse infectada por gérmenes procedentes de la propia flora bacteriana del individuo y por agentes externos. - Shock hipovolémico plasmorrágico: se produce como consecuencia de la extravasación (exudación) del plasma de los capilares. - Cicatrización anómala: cuanto más profunda es la quemadura más probable es que deje alguna cicatriz antiestética. 1.3. PRIMEROS AUXILIOS EN CASO DE QUEMADURA. Debemos buscar asistencia sanitaria o llamar a los servicios de emergencia en los siguientes casos: - La quemadura es extensa (del tamaño de la palma de la mano o más grande) - La quemadura es grave (de tercer grado) - No estamos seguros de la gravedad. - La quemadura es causada por sustancias químicas o electricidad. - La persona muestra signos de shock. - La persona inhaló humo. - Se sospecha o se sabe que la quemadura se debe a maltrato físico. - Hay otros síntomas asociados a las quemaduras. - Si el dolor aún está presente después de 48 horas. - Si se presentan signos de infección, aumento de dolor, enrojecimiento, inflamación, drenaje o pus, inflamación de ganglios linfáticos o fiebre. 1.3.1. PARA QUEMADURAS MENORES: a) Si no hay rupturas en la piel debemos dejar correr agua fría sobre el área quemada o bien sumergir el área en agua fría, pero no helada, durante por lo menos cinco minutos. Una toalla limpia, húmeda y fría también ayuda a reducir el dolor. TEMA 6: Quemaduras y urgencias por alteraciones en la termorregulación (feb’06) Alejandro Jiménez Camacho. 3 de 11 C.F.G.S. Animación de Actividades Físicas y Deportivas Asignatura: PRIMEROS AUXILIOS I.E.S. Seritium Jerez de la Frontera b) Calmar y dar confianza al accidentado. c) Tras refrescar la quemadura, cubrirla con un vendaje estéril. Si no tenemos vendas estériles podemos utilizar una toalla o trozo de tela limpio. d) Proteger la quemadura de presiones o ficciones. e) Una vez que se enfríe la piel podemos aplicar una crema para quemaduras. f) Las quemaduras menores suelen sanar sin tratamiento adicional. Sin embargo, en el caso de quemaduras de segundo grado que cubran un área de 5 a 8 centímetros de diámetro, o si el área quemada es en las manos, pies, cara, ingles, glúteos o una articulación importante, debemos tratarla como si fuera una quemadura grave. 1.3.2. PARA QUEMADURAS GRAVES: Una quemadura grave (profunda y/o extensa) es una urgencia vital que requiere ser tratada en un Centro Sanitario, por lo que además de unas medidas generales habrá que procurar un traslado lo más urgente posible. Estas medidas consisten en lo siguiente: a) Si la persona está ardiendo hay que impedir que corra, presa del pánico; hay que apagar las llamas envolviendo al accidentado con un material grueso para apagar las llamas (un abrigo, una manta, una alfombra o similar de algodón o lana, nunca de material sintético), haciéndola rodar por el suelo y rociándola con agua. b) Haremos una valoración del estado general (evaluación primaria), asegurando el mantenimiento de las constantes vitales. Buscaremos signos de inhalación de humos (quemaduras faciales, nariz y mucosas chamuscadas, esputos negruzcos, etc.). Las quemaduras en la cara originan un rápido edema y el riesgo de complicaciones respiratorias. Debemos mantener siempre abiertas las vías respiratorias y administrar oxígeno en caso de dificultad respiratoria. De ser necesario aplicaremos RCP. c) Refrescaremos la zona quemada inmediatamente, poniéndola bajo un chorro de agua fría (al menos 20’ o incluso más); esto evita la aparición de flictenas y alivia el dolor. En quemaduras demasiado extensas no se recomienda el enfriamiento con agua fría por el cuadro de hipotermia que se puede producir. d) Es fundamental mantener la máxima asepsia posible para evitar el gran riesgo de infección. e) Retiraremos anillos, relojes, pulseras, collares, corbatas, etc., para evitar que se estrangule la zona a consecuencia del edema que se producirá. f) Retirar la ropa quemada. Podemos recortarla con tijeras, salvo si parte de la ropa se encuentra adherida a la piel. Esa ropa se dejará pegada y no se arrancará por la fuerza. g) No pinchar ni romper las ampollas, ya que son la mejor defensa ante el riesgo de infección. La piel evitará la posible contaminación bacteriana en el seno de una flictena cerrada. Será en un centro sanitario donde lo harán posteriormente. h) No aplicar ningún producto farmacéutico, ya que sólo producen una sensación de alivio momentáneo, lo que sin duda, retrasará que el paciente acuda a un Centro Sanitario. i) Cubrir la zona quemada con gasas estériles o, en su defecto con paños, muy limpios (sábanas, fundas de almohada, etc.). El objetivo es absorber el exudado para evitar su infección. Cubrir a la víctima con una manta para evitar que pierda calor en exceso; debe mantenerse en ambientes ventilados; pero no fríos. TEMA 6: Quemaduras y urgencias por alteraciones en la termorregulación (feb’06) Alejandro Jiménez Camacho. 4 de 11 C.F.G.S. Animación de Actividades Físicas y Deportivas Asignatura: PRIMEROS AUXILIOS I.E.S. Seritium Jerez de la Frontera j) No vendar superficies quemadas unidas (por ejemplo los dedos), por el peligro de que al cicatrizar se queden pegadas. No poner vendajes compresivos ni muy voluminosos. Dejar que la zona quemada esté aireada (oxigenada), pero cubierta. k) No dar tabaco ni alcohol al herido, ya que empeorarían los problemas de riego sanguíneo en la zona quemada. l) Buscar otras posibles lesiones como pueden ser fracturas, hemorragias, etc. m) Si la quemadura es muy extensa y se va a demorar el traslado, aunque la prevención del shock es difícil, para reponer la pérdida de líquidos y electrolitos se le puede dar de beber, siempre que esté totalmente consciente, una bebida isotónica (1 litro de agua + 1 cucharadita de bicarbonato + 1 cucharadita de sal). Lo más adecuado sería que un Servicio de Urgencias Médicas iniciase la rehidratación en cuanto fuese posible. n) El traslado debería hacerse a un Centro Sanitario preparado para atender este tipo de lesiones. Durante el traslado se ha de prestar especial atención a la localización de las quemaduras; si afectan a las extremidades, elevar el miembro afectado. Si afectan a la cara y orejas, mantenerlo semi-sentado. Si es el cuello el afectado, trasladar sin almohada, con el cuello en extensión. Evitar trasladarlo con ropas mojadas (riesgo de hipotermia). Intentar tranquilizar a la víctima, que seguramente presentará ansiedad, angustia, estrés, miedo, dolor, etc. NO SE DEBE: - No aplicar ungüentos, aceites, hielo, medicamentos, cremas ni cualquier otro remedio casero en las quemaduras graves. - No respirar, soplar ni toser sobre la quemadura. - No tocar la piel muerta o ampollada. - No retirar la ropa que esté pegada a la piel. - No administrar nada a la persona por vía oral si hay una quemadura grave. - No sumergir una quemadura grave en agua fría, pues esto puede causar shock. - No colocar una almohada debajo de la cabeza si hay quemaduras de las vías respiratorias, porque esto puede cerrarlas. 1.4. CASOS ESPECIALES: 1.4.1. Quemaduras químicas o causticaciones. Se trata de quemaduras producidas por productos químicos o de tipo corrosivo. Suelen producirse cuando la piel entra en contacto con sustancias químicas (ácidos o álcalis) u otras sustancias corrosivas. Las lesiones son parecidas a las producidas por una quemadura térmica, aunque la acción corrosiva de los cáusticos se prolonga mientras queden vestigios del mismo en la zona alcanzada. El aspecto que presenta la quemadura variará desde el enrojecimiento o eritema, hasta la destrucción de los tejidos, según el tipo de producto químico y su concentración. Los primeros auxilios a aplicar en este caso de quemadura son: a) Retirar el producto químico del contacto con la piel lo antes posible. El tiempo que el producto químico esté en contacto con la piel va a determinar la gravedad de la quemadura. b) Lavar la zona con un chorro de agua abundante, pero no a presión. Un exceso de presión en el agua puede dañar los tejidos que han sido afectados. c) Retirar los objetos y ropas que estén en contacto con la piel. d) Mantener la zona afectada bajo el chorro de agua abundante durante 15-20 minutos. TEMA 6: Quemaduras y urgencias por alteraciones en la termorregulación (feb’06) Alejandro Jiménez Camacho. 5 de 11 C.F.G.S. Animación de Actividades Físicas y Deportivas Asignatura: PRIMEROS AUXILIOS I.E.S. Seritium Jerez de la Frontera e) Tratar después como el resto de las quemaduras. Cubrir la zona quemada y trasladar a un centro sanitario. Si la causticación se produce en los ojos aplicaremos las siguientes medidas: a) Lavar con agua abundante inmediatamente e intentar averiguar la naturaleza del producto químico a fin de buscar el neutralizante adecuado. (Por ejemplo, el ácido clorhídrico queda neutralizado con el bicarbonato; la sosa cáustica queda neutralizada con el vinagre) b) Las causticaciones oculares se deben lavar con agua, al menos, durante 30 minutos, incluso durante todo el tiempo que dure el traslado al centro sanitario. Esta acción es el factor más importante para determinar el pronóstico visual final. c) Está contraindicado el uso de ácidos o álcalis como neutralizantes. d) Periódicamente se limpiarán las partículas residuales. e) Trasladar urgentemente a un centro con servicio de oftalmología. 1.4.2. Quemaduras eléctricas. Se trata de una quemadura producida en el cuerpo humano por el paso de la corriente eléctrica desde un cable hasta tierra. Esta corriente eléctrica además de producir una quemadura, puede alterar el ritmo cardíaco llegando a causar incluso su parada (electrocución). Cuando alguien se electrocuta, la corriente entra en el cuerpo en el punto de contacto y viaja a lo largo del cuerpo por el camino de menor resistencia (los nervios y los vasos sanguíneos) quemándolos y destruyéndolos. Normalmente la corriente sale por donde el cuerpo toca el suelo o una superficie metálica. La quemadura eléctrica produce en su recorrido por el interior de nuestro cuerpo unas lesiones debidas a acciones electrolíticas y térmicas. La acción electrolítica hace que sean distintas las lesiones en el punto de entrada (costra seca y dura) de las producidas en el punto de salida (blandas como las producidas por los álcalis). En este tipo de accidente es frecuente la aparición de lesiones traumáticas asociadas (fracturas, heridas) secundarias a la caída o al lanzamiento de la víctima por acción de la descarga eléctrica. En consecuencia la gravedad de la quemadura vendrá dada por los órganos que puedan verse afectados en su recorrido por el interior del cuerpo y por las lesiones asociadas. Los primeros auxilios a aplicar en estos casos son los siguientes: a) Antes de intervenir debemos pensar detenidamente cuál va a ser nuestra actuación b) Debemos desconectar la corriente eléctrica antes de tocar a la víctima. Si esto no es posible, nos aislaremos con palos, cuerdas, etc (objetos aislantes), sin tocar a la víctima directamente. c) Comprobar las constantes vitales y actuar conforme a esa valoración. d) Cubrir la zona afectada (orificios de entrada y salida). e) Trasladar al hospital aunque las lesiones sean mínimas; pueden aparecer alteraciones tardías u órganos internos afectados. 1.4.3. Quemaduras solares. La práctica de actividades físicas en el medio natural hace que aumente la exposición a los rayos solares. Debemos tener especial cuidado TEMA 6: Quemaduras y urgencias por alteraciones en la termorregulación (feb’06) Alejandro Jiménez Camacho. 6 de 11 C.F.G.S. Animación de Actividades Físicas y Deportivas Asignatura: PRIMEROS AUXILIOS I.E.S. Seritium Jerez de la Frontera en prevenir los daños que esta exposición pueda provocar en nuestra piel. Una quemadura solar es el enrojecimiento de la piel que ocurre después de exponerse al sol o a otro tipo de luz ultravioleta. Para mayor información sobre quemaduras solares puedes consultar en el siguiente enlace: http://esportivo.wikispaces.com/PRIMEROS+AUXILIOS 2. URGENCIAS POR ALTERACIONES EN LA TERMORREGULACIÓN. El ser humano es un animal homeotermo. Esto quiere decir que para sobrevivir, tiene que ser capaz de mantener su temperatura corporal estable entre los 36 y los 37 ºC, independientemente de la temperatura que haya en el ambiente. Cualquier alteración en la temperatura corporal originará profundos cambios en el funcionamiento del organismo. Estos cambios pueden llegar a constituir una amenaza par la vida y, por tanto, una urgencia vital. En ocasiones, el mecanismo de la termorregulación falla o se ve sobrepasado, originándose lo que se denominan “urgencias por fallo en la termorregulación”. Estas pueden ser debidas tanto a un descenso de la temperatura corporal por debajo de los 35º C (hipotermia) como a un ascenso de la misma por encima de los 37º C (hipertermia). 2.1. LESIONES PRODUCIDAS POR EXPOSICIÓN AL FRÍO. 2.1.1. Hipotermia. Se considera que una persona presenta una hipotermia cuando su temperatura corporal desciende por debajo de los 35º C. Esto sucede en el momento en el que el organismo no es capaz de generar el calor necesario para contrarrestar las pérdidas producidas y su temperatura baja de los 37º C. Se trata de una urgencia vital que debemos atender con rapidez. Los factores de los que depende la aparición de una hipotermia, además de la presencia de frío, son: tiempo de exposición al frio, viento, humedad, contacto con superficies que roban calor, edad, existencia de enfermedades previas, lesiones que obligan a la inmovilización (contusiones, fracturas, etc), consumo de alcohol, desnutrición, entrenamiento, nivel de aclimatación, vestimenta utilizada, etc. Ante un caso de hipotermia deberemos trasladar a la víctima a un Centro Sanitario lo antes posible. Previamente será necesario adoptar las siguientes medidas: - Comprobar las constantes vitales e iniciar las maniobras de RCP si fueran necesarias. Recordar que es una de las situaciones en que está indicado su inicio, aún pasado un tiempo que podría considerarse excesivo. Un caso especial lo constituye la Hipotermia por inmersión, circunstancia en la que se prolonga la resistencia cerebral a la hipoxia, por lo que siempre estará indicado iniciar las maniobras de reanimación incluso después de transcurridos 20-25 minutos. - Mantenerlo en posición antishock si está consciente. - Proporcionarle bebidas calientes, si está consciente. Nunca dar comidas ni bebidas estimulantes (chocolate, café, té, etc.) ni alcohol. - Iniciar el recalentamiento cambiando las ropas si están mojadas, abrigándolo bien, colocándolo a cubierto y lejos de cualquier corriente de aire frío. - Si no es posible el traslado inmediato debemos proporcionarle un calor externo de cualquier manera posible. Lo más adecuado sería sumergir a la víctima en una bañera con agua entre 38-40º C. De no ser posible, aumentar la temperatura ambiente del lugar en que nos encontremos. - Evitar masajear las extremidades ya que podríamos provocar lesiones en los tejidos que tienen una temperatura demasiado baja. TEMA 6: Quemaduras y urgencias por alteraciones en la termorregulación (feb’06) Alejandro Jiménez Camacho. 7 de 11 C.F.G.S. Animación de Actividades Físicas y Deportivas Asignatura: PRIMEROS AUXILIOS I.E.S. Seritium Jerez de la Frontera 2.1.2. Congelación. Se entiende por congelación a toda lesión local producida por el frío. Se produce porque por efecto del frío intenso, se constriñen los vasos sanguíneos que llevan la sangre a la zona expuesta y se solidifica el agua del interior de las células. Como consecuencia de ello, el tejido se destruye por dos mecanismos: por congelación de tejidos y por detención del suministro de sangre a los tejidos por la obstrucción provocada por trombos y coágulos. Normalmente las zonas afectadas son las que están más expuestas al frío y más alejadas del centro del cuerpo, como son: manos, pies, cara (orejas, nariz y mejillas); ya que son las zonas más distales y menos protegidas por el riego sanguíneo. Para que se produzca una congelación, no sólo es preciso que una baja temperatura nos rodee, sino también la existencia de otros factores como son: humedad (efecto de inmersión), viento, cambio brusco de temperatura (vasoconstricción refleja), estado de ánimo (euforia, depresión, etc.; que influyen en el metabolismo), desnutrición, isquemia o falta de riego sanguíneo (no hay posibilidad de que la sangre circule y caliente la zona), falta de ejercicio muscular (el ejercicio favorece el bombeo de la sangre), cansancio, contacto con superficies que roban calor (metal, agua, hielo, ropas mojadas, corrientes de aire frío, etc.), edad (ancianos y niños son más sensibles), factores individuales (enfermedades, escasa tolerancia al frío, etc.) A la hora de atender a una persona con indicios de congelación debemos conocer la clasificación de las mismas. En función de su gravedad las congelaciones se clasifican en tres grupos: de Primer grado, de Segundo grado y de Tercer grado. Los signos y síntomas de cada una de ellas son distintos, así como su tratamiento. a) Congelaciones de Primer Grado. Se trata del caso más leve. En ella la piel, debido al vasoespasmo, sufre palidez extrema, sin dolor inicialmente. La sensación de frío en la zona, da paso al entumecimiento y a la disminución de la sensibilidad. Más adelante, hiperemia reactiva (congestión por aumento de irrigación) y sensación de múltiples pinchazos. Se trata de una lesión fácilmente reversible si se trata a tiempo. El ejemplo más típico es el sabañón (eritema pernio). b) Congelaciones de Segundo Grado. Cuando el frío se hace más duradero y/o intenso, se acentúan los síntomas. Los signos de esta lesión son una piel con aspecto de cera y una coloración morada apareciendo ampollas o flictenas, con un líquido en su interior que es plasma sanguíneo más glóbulos rojos, de ahí su color. Los síntomas que presenta el accidentado son los siguientes: sensación de tensión en la zona; inflamación o edema; dolor que aumenta al aplicar calor; al secarse las ampollas dejan los primeros días unas costras negruzcas. c) Congelaciones de Tercer Grado. En estos casos se produce la muerte o necrosis irreversible de los tejidos (incluidos los huesos); aparece una zona negra y bien delimitada de la piel sana. Los primeros auxilios a aplicar en casos de congelación son los siguientes: - Apartar al accidentado del ambiente frío para evitar que se agraven las lesiones. - Aflojar ropas apretadas, anillos y relojes de las zonas afectadas. - Mantener la calma del accidentado para evitar que aumente su Frecuencia Cardiaca; esto alteraría el flujo sanguíneo y dañaría más aún los tejidos congelados. También interesa que no se asuste, ya que esto aumentaría la sudoración y con ello se incrementaría su enfriamiento. - Si el accidentado tiene la ropa mojada se las cambiaremos por ropa seca. TEMA 6: Quemaduras y urgencias por alteraciones en la termorregulación (feb’06) Alejandro Jiménez Camacho. 8 de 11 C.F.G.S. Animación de Actividades Físicas y Deportivas Asignatura: PRIMEROS AUXILIOS I.E.S. Seritium Jerez de la Frontera - Si el accidentado está consciente le daremos de beber líquidos calientes y azucarados. - Nunca dejar fumar al accidentado, ya que produce una vasoconstricción periférica y por tanto dificulta el aporte sanguíneo. - No dar bebidas alcohólicas, ya que produce vasodilatación periférica y aumenta la pérdida de calor. - Recubrir las ampollas voluminosas. No emplear apósitos con vaselina; usar siempre apósitos secos. Nunca romper las ampollas, por el riesgo de infección. - Nunca frotar la lesión con hielo o agua helada. - No intentar descongelar, si hay que seguir caminando o en ambiente frío. - Recalentar aplicando suave presión sobre el área, sin frotar la zona. No aplicar calor intenso. - El recalentamiento será gradual, sumergiendo las partes afectadas en agua cuya temperatura se aumente gradualmente de 20º a 40º C. Si no se dispone de termómetro, se comprobará la temperatura del agua metiendo el codo en ella, debiendo estar agradablemente tibia, de lo contrario, si el agua está demasiado caliente se corre el riesgo de producir una quemadura en los tejidos dañados. - El baño debe prolongarse hasta que se haya logrado la recuperación (congelaciones reversibles) o hayan pasado al menos 20 minutos. Durante el baño, el paciente debe mover activamente la zona, los dedos por ejemplo, para evitar futuras retracciones en los tejidos. - No utilizar para el recalentamiento, el calor por radiación (estufas, radiadores, chimeneas, etc.) - Mantener las extremidades en su posición natural para evitar deformidades. - Una vez efectuado el recalentamiento, si la zona congelada no recupera la sensibilidad hay que cubrirla con un vendaje grueso y limpio de algodón y evacuar a un centro sanitario. - Es fundamental el reposo y la elevación de la zona, para prevenir el edema. - En las congelaciones de primer grado, es suficiente cubrirlas con un vendaje grueso de algodón que proporcione calor. - El traslado a un Centro Sanitario se hará lo antes posible. 2.1.3. Prevención de las lesiones producidas por el frío. Para prevenir las lesiones producidas por el frío deberíamos tomar las siguientes precauciones: - Mantener una buena hidratación y alimentación equilibrada durante la exposición al frío. - Ir bien abrigados, sobre todo en manos, pies y cara. - Cambiarse los calcetines y guantes siempre que estén húmedos. - No usar ropa apretada, ni cinturones o bandas elásticas que impidan la buena circulación de la sangre. - No abusar de las bebidas alcohólicas. - La deshidratación es un factor favorecedor de las congelaciones y por tanto habrá que prevenirla. 2.2. LESIONES PRODUCIDAS POR EXPOSICIÓN AL CALOR. 2.2.1. Hipertermia. Hablamos de hipertermia cuando la temperatura corporal aumenta por encima de los 37º C; son muchos los términos empleados para nombrar los distintos tipos de hipertermia: golpe de calor, insolación, agotamiento por calor, calambres por calor, etc. TEMA 6: Quemaduras y urgencias por alteraciones en la termorregulación (feb’06) Alejandro Jiménez Camacho. 9 de 11 C.F.G.S. Animación de Actividades Físicas y Deportivas Asignatura: PRIMEROS AUXILIOS I.E.S. Seritium Jerez de la Frontera El cuerpo humano elimina el exceso de calor corporal aumentando el flujo sanguíneo en la piel, esto provoca un aumento de la sudoración, que en contacto con el aire se evapora y ayuda a refrigerar el cuerpo. Sin embargo existen una serie de factores que pueden predisponer para que se de un caso de hipertermia, son los siguientes: - Un ambiente muy caliente y húmedo hace que el cuerpo no pueda perder calor por radiación o evaporación. - El ejercicio intenso en ambientes calurosos hace que el organismo pierda más de un litro de sudor por hora de actividad. El sudor se compone de líquido y electrolitos (sodio y cloro) que son necesarios para el normal funcionamiento del organismo. - La edad es otro factor a tener en cuenta. En el caso de los ancianos porque su sistema termorregulador está afectado y en el caso de los niños porque está inmaduro. - La deshidratación hace que se agoten antes de tiempo las reservas de agua en el organismo. - La ingesta de determinados medicamentos (fundamentalmente en ancianos) hace que se facilite la aparición de este tipo de alteraciones. - El entrenamiento y por tanto un buen estado de forma hace que la capacidad de soportar el calor sea mayor. - La aclimatación hace que conforme pasen los días en un ambiente caluroso se soporten mejor las altas temperaturas. - El tipo de ropa utilizada también es importante, tanto por el tipo de tejido como por el color de esta. Los colores oscuros absorbe más radiaciones solares y la ropa demasiado gruesa impiden la evaporación del sudor. - La superficie corporal expuesta directamente al sol hace que la pérdida de calor corporal sea mayor. - La constitución física hace que las personas con un exceso de grasa corporal tengan más problemas para termorregular en situaciones de calor. - La presencia de enfermedades hace que los mecanismos de termorregulación no funcionen correctamente. La hipertermia es una progresión de hechos que ocurren en un paciente con la temperatura interna aumentada. Una pequeña elevación es generalmente bien tolerada, pero si continúa el aumento, los signos y síntomas comienzan a aparecer, pudiendo ir desde una ligera desorientación a la inconsciencia y muerte, pasando por: - Calambres musculares. - Debilidad y fatiga. - Vértigos. - Alteración del comportamiento. - Piel pálida y caliente. - Sudoración profusa, que puede llegar a desaparecer si el cuadro avanza. - Náuseas y vómitos. - Calambres abdominales. - Cefalea. - Alucinaciones y delirios. - Pérdida de consciencia. - Taquicardia. Los primeros auxilios a aplicar van a depender de los distintos tipos de hipertermia que nos podamos encontrar; pero veamos cuáles son las medidas generales que debemos adoptar en estos casos: TEMA 6: Quemaduras y urgencias por alteraciones en la termorregulación (feb’06) Alejandro Jiménez Camacho. 10 de 11 C.F.G.S. Animación de Actividades Físicas y Deportivas Asignatura: PRIMEROS AUXILIOS - - - I.E.S. Seritium Jerez de la Frontera Situar al sujeto en un lugar fresco y aireado, disminuyendo su ropa o llegando incluso a desnudarlo. Cuando el sujeto está consciente y no tiene náuseas le daremos de beber agua o mejor aún una bebida isotónica. Evitar las bebidas alcohólicas. Podemos enfriarlo mediante compresas húmedas para secar el sudor y/o baños de agua templada, acompañados de masajes en miembros superiores e inferiores. Si el paciente está consciente lo colocaremos tumbado boca arriba con las piernas en alto. Si está inconsciente o vomita lo colocaremos en posición lateral y comprobaremos sus constantes vitales. Realizaremos el traslado a un Centro Sanitario siempre que el sujeto no se recupere después de todas las medidas anteriores. 2.2.2. Prevención de las lesiones producidas por calor. Evitar que el sol incida directamente sobre la cabeza; llevar la cabeza cubierta. No descuidar la hidratación cuando preveamos estar mucho tiempo sometido a altas temperaturas y ejercicio intenso. Debemos recordar que la sensación de sed es un síntoma de deshidratación, luego debemos beber siempre antes de que aparezca esta sensación. Cuando tengamos previsto pasar mucho tiempo sometido a altas temperaturas deberíamos aclimatarnos con el fin de evitar casos de hipertermia. BIBLIOGRAFÍA. - Martínez Varela, Pedro (1998). Anatomía, Fisiología y Primeros Auxilios. A Coruña. Xaniño S.L. - Varios (1997). Manual de Socorros y Emergencias. Madrid. Cruz Roja Española. - Varios (2000). Servicios Preventivos. Formación Básica en Socorros. Madrid. Cruz Roja. - Varios (1999). First Aid Manual (Emergency procedures for everyone at home, at work, or at leisure). London. Dorling Kindersley. - Varios (2001). Manual or Inflight Medical Care. London. British Airways. D.K. - Melinda J. Flegel (1999). Procedimientos de urgencia en la práctica deportiva. Barcelona. Paidotribo. 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