-94-- ble, por ser el hidrógeno el más ligero de todos los elementos y el átomo de hidrógeno el más ligero de todos los átomos. ^, Es que todavía había sustancias más pequeñas? 0 bien : ^ Se trataba, por lo que se refiere a estas partículas, de un nuevo elemento, de un elemento prirnordiai? Finalmente se consiguió también determinar la carga eléctrica de una de estas partículas, que no son otra cosa que las que hemos llamado electrones, y resultó de nuevo a;go sorprendente. Cuando un átomo de hidrógeno, que de por sí es eléctricamente neutro, es decir, sin carga alguna, se carga, esto es, se ioniza, entonces adquiere, sin que nunca se puedan observar cargas más pequeñas, la misma carga que el electrón, que en último término no es otra cosa que el átomo de electricidad. Ya en este estado las cosas no es diffcil concebir cómo se ha alcanzado con tanta seguridad el conocimiento de la estructura del átomo, que nos está ocupando. Más detalles ahora nos alejarían de la cuestión fundamental. Es hora de interrumpir el descanso y proseguir la limpieza de la nieve que figuradamente venfamos efectuando. EL NUCLEO DEL ATOMO Sabemos ya varias cosas sobre la exi^tencia de electrones, modo de determinarlos en cada elemento, su particular disposición, etcétera. ^ Pero qué pasa con el núcleo del áto' mo, que, como hemos dicho, contiene la casi totalidad de su masa? Comencemos también aquí por lo más fácil. El átomo de hidrógeno, como el más ligero, tenía que ser también el más sencillo. Este átomo, según todos los ensayos, sólo se le puede ionizar simplemente, pudiendo por consiguiente admitir que sólo posee un electrón que se mueve en su círculo o su esfera alrededor del núcleo. El núcleo del átomo de hidrógeno es, pues, la menor cantidad conocida de materia, toda vez que hemos quedado en que el electrón es un átomo de electricidad, o, en otras palabras, de energía. COmo este núcleo, con su carga eléctrica positiva, es una importante piedra con ^tructiva de todos los átomos, se le ha dado un nombre especial; se le llama "protón". Un protón alrededor del cual circula un electrón (figura 2) es el átomo de hidrógeno, eléctricamente neutro, simplemente ionizable y de peso atómico 1. Hasta ahora todo va bien, sacando nueva prueba de .lá facilidad de todos los principios; ya veremos lo que dura. Sigue e1 helio, cuyo peso atómico es cuatro. Camo primer paso suponemo'3, cori el ^atrevimiento de ,Ia lógica empleada con precipitaeión, que su núcleo há de constar de cuatró protones, ya que su peso es cuatro veces el del -99- hídrógeno, y de pasc nos acordamos de que ya cien años atrás el inglés Proust estableció fa teoría de que todos los átomos estaban formados de átomos de hidrógeno (reencarnación del espíritu d^e Thales), teoría que entonces no pudo mantenerse. Pero la experiencia demuestra que el átomo de helío es doblement•e ionizable, debiendo contener por tanto dos electrones, confirmándose así lo que ya tenemos manifestado, y aquí empieza la complicación. Si el núcleo tiene cuatro cargas positivas, para ser eléctricamente neutro debiera tener cuatro electrones, lo que vemos no puede ser, y si sólo tien^ dos electrones o cargas n2gativas, deb.era contener sólo dos protones, lo que tampoco puede ser, pues su peso atómico es cuatro. Mas todo tiene arreglo en esta vida, hasta lo más grave, y no podría dejar d•e tenerlo ^una cosa tan pequeña como el átomo. Pensando, que para algo tenemos la cabeza sobre los hombros, y no simplemente para actuar de percha, recordamos que así como los electrones giran rápidamente alrededor del núcleo, pudiendo por tanto permanecer aislados de él, por razón de la ^ fuerza centrífuga, a pesar de s ^s electricidades de signos contrarios, que normalmente se atraen, el núcl^eo permanece en reposo, y suponemos ál de helio constituído por cuatro protones, por cuatro partículas cargadas todas de electricidad positiva, que naturalmente se tienen que repeler. Z Cómo pued^en, por - 97 _ , tanto subsistir en el nLícleo de ^^ati't^ ^^sir^^^ protones? Como bien dice Fleclx^r „çu}^ lec- +^^ tura nos ha sugex•ido rrxuchas de la^i`eoli^ide- w` ciones presentes, dos parejás de ti pra^$nes ' más tienen que parecerse a ^los pt^xe^á^ d^ -^ pugilistas en el ".•ing" que a^.do$ pácífi¢asmatrimonios. ^^•'` APARICION DEL NEUTRON Pues bien ; la- t^eoría no cede tan pronto. Primero probó a introducir electrones negativos en el núcleo, los cuales retendrían a los protones ene^migos con sus cargas opuestas; si metemos, en efecto, dos electrones en el núcleo compuesto de cuatro protones, tenemos como resultante dos cargas positxvas en el núcleo, a neutralizarse con los electrones planetarios. Pero después el inglés Chadwick descubrió ^una nueva partícula, el "neutrón", que no es otra cosa que un protón, de masa X, pero sin ninguna carga; partícula que si se introduce en el núcleo ^ del átomo aum^2nta su masa pero no su carga. Y la teoría admite, con buenas razones, que los protones y los neutrones, por la acción de fuerzas especiales, ^en realidad todavía no bien explicadas, ae atraen en el núcleo tan fuertemente, que la repulsión eléctrica entre protones no desempeña papel alguno. • Los neutrones se me presentan corno esaa