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UN SONETO
Caminamos destruidos, muertos,
Sin esperanza nos enfrentamos
Al futuro porque no nos amamos,
Ni apreciamos la belleza: ¡tuertos!
Cada vez nos cuesta más enfrentar,
Luchar, derribar, anticiparnos,
En tensión de futuro: amarnos,
Mirar, ¡tolerantes!, sin afrentar.
No escuchamos, ¡sorderas eternas!,
Al otro; imbuidos de yo, solos.
Moriremos y por las cavernas
Del odio seremos ratas, almas
Abandonadas, en la soledad
Del fin, nadie ayudará a esas almas.
POR TI (mk)
Encaminando mi alma cubierta
En total anhelo tuyo: sólo.
Mis ojos se enfrentan, con cierta
Energía, a ver los tuyos: sólo.
Jamás encontré cuerpo, en te ser,
Que atraiga tanto mi yo-deseante,
Al que busque, en la noche, comprender,
Asistir, desnudar: habitante.
Sólo tú, acabada la obscuridad,
Ese halo has sido, moviste calor
Importante, infierno feroz; amor.
Comprendí contigo que humanidad
Es todo aquello que atestigua por
Ideal un solo concepto: el amor.
IMPRESIÓN
¡Cuánta belleza encarna tu corazón,
cuán amable se ve mi deseo!
Viajo, ¡etéreamente!, hacia el ocaso,
El mar de tus ojos, amor infinito.
Estallido de fuerza, de ímpetu,
Ascenso corporal, casi espiritual,
Musa de la danza, Afrodita del deseo.
Interpreto tu cuerpo: es para mí
El Aiden que podrá sacarme de aquí.
Mortal sin ti, eterno, poderoso en ti.
INFIERNO
De tu alma, portento de natura,
La capa me sobrepasa, bien
Se acrecienta mi deseo, pura
Fuerza de unión total -¡placer!
De tu cuerpo, feliz hallazgo,
El calor me abrasa, apolínea
Forma la tuya. El parentazgo
De tu anhelo, Carne, en mi flirtea.
Placeres, amores, banquetes y
En tu calor hierve mi corazón;
Sólo.
Amargo placer: abrasado en Amor.
REAL
Soy, anhelante, soy.
Ser, amante, ser.
Instinto soy, intuyo.
Forma soy: placer.
Miembros existen: van.
Ser, voluntad, ser.
Atacar, ser, intuir.
Ente todo: saber.
Inteligencia, intuir.
Ser, amando, ser.
Liberado: soy.
Integrado: nacer.
AMOR POLIGONAL
Infinitamente imaginada,
Al verte, divinidad: Bella.
Constantemente soñada ella
Hoy sentida, liberada.
En mi alma dichosa, amada
Tu imagen: luna, sol, centella,
Luz terrenal sin par, estrella
Iluminando mi celada.
Conocimiento geométrico,
Curvado instinto sensorial.
Acicalado -¡metódico!-
Me dirijo a su área, psique
Amante del espacio, mental
Deseo de portento: ¡psique!
SUEÑO
He soñado.
Países sin fronteras, árboles quebrados de retoños,
Gentes llamadas Libertad. Soñadas.
Arco iris hirientes, irregulares con pinceladas de Paz,
Religiones en harapos huían de
Allí. Moribundas.
Provincias pobladas de pájaros, gaviotas
En torno a barcos cargados de Amor,
Marinos con remos de coral,
Sin cadenas. Delirantes.
Razas misceláneas, sin sumisión, sin ley,
Sin Dios, viajando al país del Más,
En buques de algodón, pintados
De Esperanza. Ansiosos.
Músicos sin director, improvisadores de nuevas
Utopías, salvajes, pero sin rencor: seguros,
Vestidos de Nada, obsesionados por
Ayudar al otro. Solidarios.
Soñé y al despertar: “¡noticias! ¡muertes!”
Me digo: “He despertado, ilusionado
Con una ilusión soñada”.
ROSA BREVE
Desdichado corazón soy
Que en ti ha clavado pasión,
Deseante con temor soy,
Pero tú alejada: no-amor.
DESEÁNDOTE DESDE UN RECUERDO (mnesteuon se ek mnemes)
Luz vislumbrada,
Anhelante perseguir en un sueño,
Utopía de una mejora constante,
Y un ligera melancolía en la tarde.
Todo un amplio vuelo de ensoñadas ilusiones
Y un mar de imágenes tuyas, de Belleza sonora.
Repaso de un recuerdo, tinieblas auríferas,
Colores que sólo vuelven tras de tu alma.
Viajando, mayeútica del tiempo, entrelazo
Mi mano a tu infinita altura y
Surco el aire en pos de cantar tu latitud,
Estrella sin cielo, solitaria, casi intransitable.
Una imagen de reliquias sentimentales y
Besos del aire en mi espalda, pasajes de
Cotidiana impresión que te me traen. (Auroleada por miles de colores del arco iris
hirientes).
Obstáculo de realidad, golpe maldito, cristal invisible,
Sólo la imaginación, el sueño y la voluntad sobrepasan
Su transparencia sensual. Sólo el amor...
He transgredido todo el azar y
Buscado mi ocasión: pasó, fugaz.
Ahora me impulso, trampolín de libertad,
En un recuerdo tuyo que acaricio en su cabellera negra.
INTROSPECCIÓN
Mi alma es un relámpago, instinto llameante,
Y divaga, tropieza, pero vive, arde...
En su crepúsculo nocturno no descansa
Y sigue, entre oníricas imágenes, previendo, creando...
Es Él un Dios para sí mismo, divinidad sin poder,
Se trata de la viva imagen del deseo, no de la opresión.
Se debe al anhelo, a los abismos sin fin;
Es todo un camino sin hollar.
Viaja en un tren sin locomotora,
Con el billete de la libertad
Y se une a las ratas de subterránea vida,
Confinándolas hacia el exterior.
Mezcla odios y amores –espinas y rosasPlantea hechizos y tardanzas, porque es rápido...
Ha tropezado, como queriendo aclarar su natural mortalidad.
En una piedra, mi alma ha tropezado en Ti,
Otro alma más bello, al que busca en lo obscuro,
Diáfanamente lo desea en el recuerdo...
LLANTO DE SALITRE (dolor de un imposible)
Compacto y creciente muro racional,
Crujiente de latidos sanguinolentos, coagulados, putrefactos...
Láminas de dolor adyacentes de fuego, exotéricas, risibles,
Distanciadoras, alejadas. Y este muro...
Rostros doloridos, arrastrados, caras del desgarro, pavorosas...
Una eterna faz de suciedad y la extrema belleza del deseo se pelean
Porque no han aprendido a hacer el amor
Entre la basura de las cloacas. Y ese muro...
Un incesante fluir de hormigas cojas, errabundas, religiosas, insensibles...
Amenizada por orquestas de ensordecedoras cigarras, que no saben de liras.
Salpicados de terror exclaman alabanzas a un desconocido grupo de dioses:
El papel moneda, la sangre humana, la felicidad fingida. Y aquel muro...
Rameras y empresarios, humanidades henchidas de asfalto sangrante
Calabazas cerebélicas en una rutinaria búsqueda del placer sin rostro, animal.
La maloliente ingravidez de las nubes, traslación de santos de madera.
Y muerte, sí, muerte beatificada. Y el muro...
Juveniles osamentas, drogados por el consumo y la sangre verde de Colombia
Desplazan terribles cadenas en sus carteles de marca atadas, fusionadas,
Gritan paz cuando no conocen a esa dama vestida de sedas orientales,
A esa eterna ave, desconocida del hombre. Y un muro...
Chantajistas, zorros, usureros legislativos, dictaduras, pucherazos, banderas,
Estandartes, yuppies, camellos, curas, intrépidos alocados, billetes de mil,
Andan por las calles con cara de comunistas o reaccionarios, pero no
No conocen la verdad del mundo. Algún muro...
Humo de fábrica, hierro de armas forjadas por niños, piedras del palacio.
Intratables dudas humanas, corrosión, poderes impuestos, gallinas degolladas,
Impertérritos azotes de látigos ultraterrenos, mortales choques del destino,
Fieros leones encumbrados por medallas de oro. Demasiado muro...
Ortigas cocidas, terrones resecos, ásperos, ultrajantes: menú marginal en
Hoteles jartumnianos de cinco tenedores sin mesa,
Caviar, delicias, coral blanco, puro, virginal: comida innecesaria en
Hombres sin alma de cinco misiles por bolsillo. Bastante muro...
Una falaz memoria de plagas, de langostas, de flagelaciones, de heridas...
Promesas, ambiguas promesas de panfleto dorado con letras grabadas de dolor,
Injusticia brama el viento helado, antártico, en el febrero de equis,
soledad grita un cuchillo que desgarra un intestino de cordero. Más muro...
Miss belicista, un cartón grabado de patriots, otro de mapas muertos,
Furia de mares azafranados, imposibles de navegar: nos hundimos...
Besos de coyote, de hiena voraz, bocados indigeribles de pólvora,
Pacifistas alaridos aplastados por un silencio, por la Nada. Por el muro...
Por el muro del dolor, de la razón grotesca, de la rosa suicida,
Un muro de la Razón, de la sagrada razón capitalista, del dolor como medio,
De la tortura como medio, ¿para qué fin?, Santo Dios, ¿para qué fin?
Un muro de meadas, de defecaciones, de cobardías: pintadas burguesas,
El muro de sus sinvergüenzas, de sus ambigüedades, de sus taparrabos...
El tabique infinito del Dolor que me separa del Amor, de la Paz, de Ti..................
FORMAS
Impulsado en gases, soñoliencias del pasado,
En sudor embriagador de recuerdos,
Busco un final: relajación.
Establecido en formas vaporosas, cerca de ti,
En la más total de las ambigüedades, insólito.
Llenos de dudas, ¡repleto!, sí, de inquietudes,
Me interiorizo en el espacio
Por una gran escalera sin peldaños: abismo del deseo
O ascensor de una sola dirección: subida.
En una ola de pensamientos, erguido,
Me acarrea tu viento, tu aire.
Forjando fuerzas, impelido, vaporoso...
Tras de la sombra de la vida, estás Tú
Pero, por desgracia, también la muerte.
EL HOMBRE I
¡Qué amarga la sangre del dolor!
Sabe como un ácido corrosivo, mezclado con agua.
Sólo,
Obscuro,
Auténticamente escarbado en su horizontal alma por la destrucción,
Camina un hombre por la calle del mundo hacia la plaza de la muerte,
Sin amor,
Sin paz,
Es el hombre de la huella invisible,
El hombre del traje roído de lágrimas,
El hombre armado con un fusil suicida,
El hombre inanimado,
El hombre pasivo,
El hombre dominado.
¿El hombre o la marioneta?
¿Un maniquí o huesos sin carne?
¿Un alambre de una jaula o un muñeco enjaulado?
Camina desolado, arruinado, estático, por inercia,
O ¿no camina? Es la calle eléctrica que le impulsa,
Él no se mueve, es un cadáver, un payaso para la risa de los transeúntes.
El hombre de los ojos negros pudo casarse con
La mujer de los ojos misteriosos;
Ahora ya no se puede divorciar de cónyuge actual:
La destrucción, la nada, la........................