FICHA TÉCNICA – MODALIDADES DE AYUDA 8 – COFINANCIACIÓN (INCLUIDAS LA FINANCIACIÓN ÍNTEGRA Y LAS CONTRIBUCIONES EN ESPECIES) I . Descripción El principio de cofinanciación implica que parte del coste de una acción o de los costes de funcionamiento de una entidad deben correr a cargo del beneficiario de la subvención o de contribuciones ajenas a la de la Comisión Europea. El objetivo del requisito de cofinanciación es que los beneficiarios sean responsables de la viabilidad operativa y financiera de sus proyectos. Las fuentes de financiación distintas a la subvención de la CE pueden ser (i) ingresos generados con la acción, (ii) recursos propios del organismo beneficiario (autofinanciación), (iii) contribuciones financieras de otros donantes o (iv) contribuciones en especies de terceras partes (en casos debidamente justificados). Las contribuciones en especies son contribuciones no económicas (bienes o servicios) de terceras partes que no impliquen gasto alguno para el beneficiario y que la Comisión Europea pueda reconocer como aportaciones financieras del beneficiario que cubran íntegramente o en parte la contribución a la cofinanciación que se le exige. El empleo por parte del beneficiario de su personal o equipamiento con el propósito de ejecutar la acción no representa una contribución en especies, dado que esa utilización constituye un coste para el beneficiario y por consiguiente podría considerarse un coste directo (o indirecto) de la acción. Si el beneficiario pretende cubrir ese coste por sí solo, se considera autofinanciación a partir de recursos propios. II . Marco legal El reglamento financiero (RF) actual estipula que una subvención no puede financiar la totalidad de los costes de una acción y tampoco la totalidad de los gastos de funcionamiento del organismo beneficiario (art. 113 RF). Sin embargo, puede financiarse íntegramente una acción si ello resulta indispensable para su realización (art. 169). En lo relativo a la ayuda exterior el reglamento financiero permite la financiación íntegra en una serie de casos: (i) ayuda humanitaria, (ii) ayudas en situaciones de crisis, (iii) acciones para la protección de la salud o los derechos fundamentales de los pueblos, (iv) acciones en las que sea interesante para la Unión ser el único donante, en particular para lograr la visibilidad de una acción de la Unión (art. 253 ND). En el último caso debe preverse la financiación íntegra en la decisión financiera de la Comisión. La Comisión Europea puede aceptar contribuciones en especies si se considera necesario o apropiado. El valor de tales aportaciones (i) no podrá ser superior a los gastos realmente efectuados por la tercera parte y debe contar con el respaldo de documentos contables, y (ii) tiene que ser acorde a los gastos admitidos en el mercado en cuestión (art. 172 ND). El reglamento financiero revisado propuesto por la Comisión permitiría más flexibilidad para la financiación íntegra. Los distintos casos en los que podría justificarse la financiación íntegra no aparecerían en el RF, que por el contrario incluiría la previsión general de que una acción fuera financiada íntegramente cuando resultara esencial para su realización. Sería responsabilidad de la Comisión Europea, en la decisión de financiación, aportar los motivos de la financiación íntegra (art. 253 ND). La propuesta de la Comisión permitiría asimismo una mayor flexibilidad en la cuestión de las contribuciones en especies, caso en el que el principio general seguiría siendo que la CE puede aceptar contribuciones en especies como cofinanciación si se considera necesario o apropiado. Dichas contribuciones no podrán superar su valor financiero equivalente y deberán ir respaldadas por documentos contables o, en todo caso, el coste generalmente aceptado en el mercado en cuestión. Las contribuciones en especies deben presentarse por separado en el presupuesto estimado. Su valor unitario se evaluará en el presupuesto provisional y no estará sujeto a cambios subsiguientes. Por último, las contribuciones en especies deberán cumplir la normativa nacional en cuanto a impuestos y seguridad social (art. 165a ND). Se prevé que el reglamento financiero revisado (una vez acordada su redacción final) entre en vigor en la segunda mitad de 2012. III . Necesidades cubiertas y grupos objetivo Necesidades § Respaldar las intervenciones de organizaciones de base y comunitarias de países en desarrollo (necesidad 2). § Ofrecer un apoyo eficaz a las autoridades locales y los esfuerzos de descentralización (necesidad 8). Grupos objetivo § Especialmente relevante para: las organizaciones de base y comunitarias de países en desarrollo y las autoridades locales, pero también para las organizaciones europeas. IV. Asuntos clave para la utilización de esta modalidad Se requiere flexibilidad en el empleo del principio de cofinanciación para explicar la diversidad de organizaciones y situaciones. Es especialmente cierto en el caso de las organizaciones locales que afrontan retos/limitaciones para aportar la contribución propia requerida. Las perspectivas de sostenibilidad (de las ventajas derivadas de la acción) y la cuestión de la dependencia financiera deben sopesarse bien en la etapa de selección al considerar la opción de financiación íntegra (p. ej., para subvenciones de valor reducido), teniendo en cuenta que el principio de cofinanciación está pensado para garantizar una mayor apropiación de la acción por parte del beneficiario. Al considerar la aceptación de contribuciones en especies (el trabajo voluntario o comunitario, la donación de mercancía, etcétera) se hacen necesarios criterios claros (tanto sobre los tipos de contribuciones en especies admisibles como sobre la cantidad hasta la que pueden considerarse), como puede concluirse de la experiencia de una serie de donantes (p. ej., USAID, AFD) que han creado esas pautas. El rol de las contribuciones en especies para alcanzar los objetivos propuestos debe considerarse adecuadamente en la etapa de selección. La operatividad de aceptar contribuciones en especies puede ser compleja, dada la necesidad de valorarlas en términos financieros. Teniendo en cuenta que los Estados miembros tienen normas distintas parar la cofinanciación de proyectos con fondos de la UE (también en lo relativo al IVA y otros impuestos), podría ser de utilidad analizar esta cuestión en el nivel de la Unión. V . Puntos fuertes y débiles Puntos fuertes § Puede facilitar el acceso de actores locales que de otro modo quedarían excluidos de la financiación de los donantes (en particular las organizaciones de base pequeñas y las AL, debido a sus sistemas internos de gestión y contabilidad); § Intensifica la conexión de los donantes con las organizaciones de base. Puntos débiles § Requiere mecanismos sólidos de monitoreo y evaluación por parte de los donantes para evaluar las contribuciones en especies; § Faltan recursos adecuados en las delegaciones de la UE para establecer dichos mecanismos; § Puede reducir el compromiso del beneficiario y las perspectivas de sostenibilidad. VI . Viabilidad La cofinanciación es por lo general bien recibida como principio que pretende promover la apropiación de la acción por parte del beneficiario. Sin embargo, y teniendo en cuenta la diversidad de actores y situaciones, se hace necesario un enfoque flexible, en función de la naturaleza de los actores y las acciones (es decir, la prestación de servicios básicos debe plantearse de forma distinta a la gobernanza y el cabildeo). Hay que cumplir una serie de requisitos para que tanto la financiación íntegra como las contribuciones en especies sean factibles, lo cual abarca la definición de criterios claros y la debida consideración a las perspectivas de sostenibilidad y el riesgo de dependencia financiera.