CUENCA DEL SAJA-BESAYA 1. CARACTERÍSTICAS GENERALES DE LA CUENCA La cuenca hidrográfica del río Saja-Besaya abarca una superficie aproximada de 1025 km2, que se corresponde con el valor de superficie de aportación más elevado en Cantabria y la sitúa entre las principales de la comunidad. Figura 1. Mapa Físico. Figura 2. Mapa Político. Sus límites oriental y occidental están definidos por las divisorias con las cuencas vertientes de los ríos Pas y Nansa, respectivamente. Por el Sur, la cuenca del río Saja-Besaya está delimitada por la divisoria con la cuenca del río Ebro. Al Norte, limita con la divisoria de pequeñas cuencas que vierten sus aguas directamente al Mar Cantábrico y con la Ría de Suances. En comparación con las cuencas hidrográficas de los principales ríos de Cantabria, se trata de una cuenca atípica, ya que su red de drenaje se halla constituida por dos ríos de importante longitud y gran relevancia: el río Saja y el río Besaya. La extensión superficial de la cuenca vertiente correspondiente a cada uno de ellos es muy parecida, lo cual ha llevado en ocasiones a una cierta confusión a la hora de denominar el tramo de río situado aguas abajo de la confluencia de los mismos. El río Saja nace en el término municipal de Mancomunidad de Campoo-Cabuérniga, a una altitud de unos 800 m, a partir de la unión de los ríos Corba y el Diablo. Su longitud es de unos 54 km hasta su confluencia con el río Besaya. Presenta inicialmente una orientación S-N, que va girando progresivamente a SW-NE a lo largo de su recorrido, para pasar a ser prácticamente W-E antes de unirse al río Besaya en Torrelavega. Dentro de la cuenca del río Saja se pueden distinguir claramente dos zonas. La primera de ellas se extiende desde la cabecera hasta la localidad de Los Tojos. Esta zona de la cuenca vertiente se halla delimitada por la Sierra de Bárcena Mayor, que la separa de la cuenca vecina del río Besaya, por la Sierra de Isar y por el Cueto de la Concilla, pudiendo diferenciarse en la misma dos subcuencas dividas por el Alto de Campucas: la del propio río Saja, con una extensión aproximada de 75 km2, que recoge las aguas procedentes del Cueto de la Concilla, de la Sierra de Isar y de la vertiente oeste del Alto de Campucas; y la del río Argonza. Este afluente, que se incorpora al río Saja, por su margen derecha, a la altura de la localidad de Los Tojos, nace a una altitud de unos 800 m, a partir de la unión de los ríos Hormigas y Las Fuentes. Su longitud, antes de unirse con el río Saja, es de unos 19 km. En esta zona de la cuenca del río Saja, los cursos de agua son, por lo general, cortos y de fuerte pendiente, y han excavado profundos valles en forma de V. La segunda parte de la cuenca del río Saja, que engloba la zona media y baja de la misma, se halla delimitada por la Sierra del Escudo de Cabuérniga y por los altos de Ibio y Mozagro, extendiéndose desde la localidad de Los Tojos hasta Torrelavega. En esta zona, el río, según avanza en su recorrido, va desarrollando amplias llanuras aluviales y recibe la incorporación, por la margen derecha, de los ríos Viaña y Bayones. La incorporación del río Viaña, que nace en el Alto de Urdía, a unos 700 m de altitud, y tiene una longitud de unos 7 km, se produce en la parte media de la cuenca del río Saja. En la zona media-baja se produce la incorporación del río Bayones, cuyo nacimiento se sitúa también en el Alto de Urdía, a unos 600 m de altitud, y cuya longitud es de 10 km. El río Besaya nace en Fuente del Besaya, al norte de Reinosa, presentando una longitud total de unos 47 km hasta su confluencia con el río Saja. A lo largo de su recorrido, el río Besaya discurre con una orientación S-N. En cuanto a su cuenca, se halla delimitada al Oeste por la Sierra de Bárcena Mayor y los picos de Ibio y Mozagro, mientras que al Este se sitúan los picos de Mediajo Frío y Bastrucos, el Monte de Tejas y el Monte Dobra. En la parte alta de la cuenca, el río Besaya se encaja, dando lugar a un valle en forma de V y con fuertes pendientes. En aquellas zonas en las que el río atraviesa una litología constituida por areniscas triásicas, se desarrollan numerosas gargantas, como es el caso de las Hoces de Bárcena. Los principales afluentes del río Besaya son los ríos Torina, León y Erecia, por la margen derecha, y los ríos Llares y Cieza, por la margen izquierda. El río Torina, que presenta una longitud total de unos 6.5 km, se halla regulado por el embalse de Alsa, como se indica más adelante. El río León nace al norte del embalse de Alsa, a unos 850 m de altitud, y su recorrido antes de la confluencia con el río Besaya es de unos 6 km. El río Erecia nace a unos 1.000 m de altitud, al norte del Pico de Mediajo Frío, y se incorpora al río Besaya en la localidad de Helguera, tras un recorrido de 10 km. En lo que se refiere a los principales afluentes del río Besaya por su margen izquierda, el río Llares que se incorpora a éste aguas abajo de Las Fraguas, nace en la vertiente Este de la Sierra de Bárcena Mayor a unos 550 m de altitud, siendo su longitud total de 9.2 km. Por su parte el río Cieza nace al Norte de la Sierra de Bárcena Mayor, a unos 600 m de altitud. Su longitud antes de su unión al Besaya es de 10.5 km. Tras la unión de los ríos Saja y Besaya, el río Saja-Besaya discurre en dirección S-N hasta desembocar en el Mar Cantábrico a través de la ría de Suances, que es navegable hasta el puerto de Requejada. Al igual que en el resto de las cuencas hidrográficas consideradas en el presente Estudio, en los párrafos anteriores se ha llevado a cabo una descripción de la red natural de drenaje de las cuencas de los ríos Saja y Besaya, destacando sus principales afluentes. Ahora bien, dicha exposición resultaría incompleta si no se hiciese mención a una serie de obras hidráulicas, construidas o en fase de proyecto, que pueden afectar, en mayor o menor medida, al régimen natural de circulación de caudales. En este sentido, hay que destacar, en primer lugar, la existencia de diversos azudes a lo largo del curso del río Saja, bastantes de los cuales se encuentran en desuso en la actualidad. El de mayor relevancia es el denominado azud de Sniace, que se encuentra ubicado inmediatamente aguas arriba de la confluencia con el río Besaya y cuyo aspecto es el que se muestra en la figura 3. Figura 3. Azud de Sniace, sobre el río Saja. En la cuenca del río Besaya, además de algunos azudes de poca relevancia, existen varias presas importantes, entre las que cabe destacar, en primer lugar, la presa de Alsa, situada en el río Torina, en el municipio de San Miguel de Aguayo. Se trata de una presa de tipo gravedad, recrecida, con planta ligeramente arqueada. Tiene una altura de 49.3 m y una longitud de coronación de 190 m. Da lugar a un embalse de casi 23 Hm3 de capacidad, que es el mayor de los existentes en la vertiente norte de Cantabria. La finalidad del citado embalse es la producción de energía hidroeléctrica, pudiéndose distinguir, no obstante, dos facetas diferentes en su explotación. Por una parte, se encarga de regular los caudales de la cabecera de la cuenca del río Torina, que son derivados posteriormente mediante un canal y turbinados en la central de Torina (figura 4), ubicada en las proximidades de Bárcena de Pie de Concha y puesta en explotación en el año 1921. Figura 4. Tubería forzada y central de Torina. Por otro lado, el citado embalse de Alsa constituye el depósito inferior del Salto Reversible de Aguayo. El depósito superior está constituido por el embalse de Mediajo y presenta la particularidad de ser totalmente artificial, ya que fue construido utilizando la roca excavada del fondo del vaso para formar una presa de escollera con pantalla bituminosa. Dicha presa, cuya altura es de 32 m, con una longitud de coronación de casi 2.800 m, que representa el 85 % del perímetro del embalse, se adapta a la orografía de la planicie elevada sobre la que se asienta. La capacidad del citado embalse superior es de 10 Hm3. La central hidroeléctrica del Salto Reversible de Aguayo está situada al pie de la presa de Alsa, en un edificio exento, como se puede ver en la fotografía aérea incluida en la figura 5. La conducción de alta presión entre la central y el depósito superior está formada por dos tuberías paralelas, que se bifurcan en la proximidad de la central, para dar servicio a los cuatro grupos que componen la misma. Dichas tuberías, que tienen una longitud de 1.360 m, son telescópicas, con un diámetro de 3.80 m en su mitad superior y 3.40 m en la inferior. Figura 5. Vista aérea del aprovechamiento hidroeléctrico reversible de Aguayo. La presa de Corrales de Buelna, ubicada sobre el río Besaya, en el término municipal de Arenas de Iguña, es propiedad del Ayuntamiento de Torrelavega, siendo su uso el de abastecimiento. Presenta una tipología de presa de gravedad, con una altura de 20 m y una longitud de coronación de 59 m, proporcionando un embalse de 0.1 Hm3 de capacidad. Asentada sobre calizas, su aliviadero tiene una capacidad de 590 m3/s. En la figura 6 se muestra una imagen de dicha presa. Figura 6. Presa de Corrales de Buelna, sobre el río Besaya. Dentro de las obras del nuevo Sistema de Abastecimiento a Cantabria, promovidas por el Ministerio de Medio Ambiente, se encuentra el denominado bitrasvase EbroBesaya, en el que está prevista la construcción de 50 km de tuberías. Todo ello formará parte, junto con las obras de la Autovía del Agua, de un nuevo sistema unificado de abastecimiento de agua a Cantabria. La conducción principal conducirá, al embalse del Ebro, durante el invierno, los caudales suministrados por las captaciones del río Irvienza. Durante los meses de verano, esta conducción funcionará en sentido contrario, hacia las zonas costeras. Se construirá además una conducción que transportará, al embalse del Ebro, los caudales captados en la cabecera del río Besaya. En la tabla 1.1 se recogen los volúmenes anuales máximos remontables y el promedio interanual en el periodo comprendido entre los años hidrológicos 1970/71 y 1994/95. Cuenca Volumen anual remontable (Hm3) Máximo Promedio Irvienza 6.07 2.71 Besaya 10.49 6.88 Tabla 1. Volúmenes anuales máximos y medios remontables en el periodo comprendido entre los años hidrológicos 1970/71 y 1994/95. 2. DESCRIPCIÓN GENERAL DEL MEDIO 2.1 Hidrología La red hídrica principal de la cuenca del río Saja está constituida por el río Saja y el río Argoza, los cuales confluyen después de haber transcurrido unos 5 km desde su nacimiento. Los principales afluentes que encuentra el río Saja tras esta unión son el arroyo de Viaña por la derecha a la altura de Renedo de Cabuérniga, el arroyo de Montea por la izquierda a la altura de Ruente, el río Bayones por la derecha tras pasar el pueblo de Ucieda, el arroyo de Las Navas a su paso por Cabezón de la Sal y el arroyo de Ceceja tras su paso por Casar de Periedo. En total el río Saja tiene un recorrido de unos 55 kilómetros desde su nacimiento hasta su confluencia con el río Besaya. En la Figura 7 se presenta un resumen de las principales características hidrológicas de la cuenca del Saja, con indicación de las aportaciones en diversos puntos de los cauces principales. Esta información se ha extraído del documento “Estudio de los recursos hídricos de los ríos de la vertiente norte de Cantabria”(GESHA, 2005a). 2.2 Geología y Litología El relieve de la cuenca del Saja es bastante accidentado, marcado por el fuerte desnivel producido por las estribaciones procedentes de la Sierra del Cordel (Cueto Hiján: 2085 m) y la Sierra del puerto de Palombera, situadas al sur de la cuenca. En la imagen de la Figura 7 basada en la cartografía a escala 1:25.000 de todo el territorio de la Comunidad Autónoma de Cantabria, se representa su topografía. En esta imagen se puede observar, la existencia de las cadenas montañosas mencionadas, las cuales se extienden de este a oeste, y la progresiva disminución de altitud según descendemos en la cuenca. La mayoría de afluentes del río Saja corren en dirección Oeste-este en valles relativamente encajados. No es hasta que el río Saja pasa por la localidad de Fresneda que comienza a abrirse el valle y empieza a desarrollarse una llanura de inundación con una relativa importancia en extensión. Localización UTM-X UTM-Y Área de aportación (km2) Lluvia anual (mm) Caudal medio (m3/s) Aportación anual (Hm3) Aportación anual (mm) Coeficiente de escorrentía Punto-01 396115,4 4780184,7 78,33 1474 2.396 75,56 964,6 0,65 Punto-02 396100 4780200 124,83 1350 3.277 103,34 827,9 0,61 Punto-03 396035,3 4780200 203,16 1398 5.674 178,94 880,8 0,63 Punto-04 399890,1 4793290,1 340,54 1343 8.748 275,88 810,1 0,6 Punto-05 414274,7 4801125,2 483,21 1325 12.024 379,19 784,7 0,59 Figura 7. Resumen de la información hidrológica estimada para diferentes puntos de cálculo de la cuenca del Saja. La litología de la cuenca del Saja está dominada por las formaciones Wealdenses y Purbeck (arcillas, areniscas y limolitas), con una presencia de más del 60% de la superficie total de la cuenca, constituyendo las calizas un 30%, tal y como se muestra en la Figura 8. Asimismo, cabe destacar la importancia de los depósitos aluviales en los tramos medios y bajos de la cuenca. Figura 8. Mapa del relieve de la cuenca del río Saja y características litológicas de la misma 2.3 Climatología La orografía y la proximidad del océano Atlántico confieren a la cuenca del Saja rasgos de dos tipos climáticos: La zona costera presenta un clima oceánico o atlántico con un gradiente pequeño de temperaturas anuales. En verano, la temperatura media es de 19 grados, y las temperaturas máximas y mínimas medias son de 22ºC y 16ºC, respectivamente. En invierno, la temperatura media es de 11ºC y los valores máximos y mínimos medios son de 14ºC y 8ºC, respectivamente. Por la tanto, se trata de un clima suave, con un gradiente térmico medio de 8 grados (Figura 9). La zona de mayor altitud de la cuenca se caracteriza por un clima continental de montaña, de condiciones extremas y variaciones bruscas de la temperatura. Por encima de los 1200 m la temperatura media invernal tiene valores negativos, por lo que el gradiente de temperatura resulta mayor del que se presenta en la zona costera. A modo de resumen de las características termométricas de la cuenca del Saja, en la Figura 9 se muestra el mapa de isotermas medias anuales. El mapa pone de manifiesto la existencia de un gradiente térmico medio superior a los 7ºC, disminuyendo desde la zona costera hacia el interior de la cuenca. Las diferencias en las condiciones climáticas influyen notablemente distribución espacial de la precipitación sobre la cuenca (Figura 9). en la Las zonas de la cuenca con mayor precipitación son la parte media y baja de la cuenca, registrándose un máximo de precipitación en la zona oriental correspondiente con el Escudo de la Sierra de Cabuérniga, en donde se superan los 1500 mm de lluvia anual. Por el contrario, las precipitaciones más bajas se registran en la zona sur, con valores de precipitación que no superan los 1250 mm anuales. Así pues, existe un débil gradiente de precipitación disminuyendo desde la zona baja- media hacia la parte más al sur de la cuenca. Figura 9. Variables climatológicas del río Saja: isotermas e isoyetas. 2.4 Geomorfología La cuenca hidrográfica del río Saja se puede dividir en 4 subcuencas (Figura 10) basándonos en las características geomorfológicas, climáticas, morfométricas e hidrológicas de las mismas (GESHA, 2005a). De forma general, a lo largo de la cuenca del río Saja es posible observar un gradiente ascendente de altitud y pendiente media desde la zona litoral hacia el interior de la región, con máximos, en ambos casos, en la subcuenca denominada Saja 1 localizada mayoritariamente en el municipio de la Comunidad de Campoo y parte de Los Tojos (Figura 11). Figura 10. Subcuencas definidas en la cuenca del río Saja (GESHA, 2005) Figura 11. Altitud y Pendiente Media de las Subcuencas definidas en la cuenca del río Saja (GESHA, 2005) 2.5 Características socioeconómicas Análisis demográfico y estructura poblacional En la Figura 12 se muestra la distribución geográfica de la densidad de población en los 11 municipios situados en la cuenca del Saja. En ella se puede apreciar que las densidades de población más elevadas se corresponden con los municipios situados en la zona baja de la cuenca, Reocín y Cabezón de la Sal con 224 y 236 hab/km2, respectivamente. Por el contrario los valores de menor densidad se asocian a los municipios más interiores: Los Tojos, Comunidad de Campoo (CampooCabuerniga) y Hermandad de Campoo de Suso, todos ellos con menos de 10 hab/km2. Por lo tanto los valores de densidad de población siguen un claro patrón incrementando su valor en dirección aguas abajo. Figura 12. Distribución de la población en la cuenca del río Saja. Mapa de densidad poblacional, a partir de los datos del censo del año 2004 (INE, 2005). Fuente: elaboración propia. 2.6 Análisis de usos y actividades La distribución de la población activa por sectores económicos en la cuenca del Saja se caracteriza por la concentración de la población activa en el sector servicios (sector terciario; 47 %) y en la industria y construcción (sector secundario; 52 %). Es llamativo que tan sólo un 1% de la población activa esté dedicada a actividades agropecuarias (sector primario; Figura 13). Estos datos reflejan una clara transformación en la estructura económica de la cuenca, tradicionalmente basada en las explotaciones agropecuarias. Por lo tanto también refleja un cambio drástico en los usos del suelo y el paisaje. 1% 47% 52% Sector primario Sector secundario Sector terciario Figura 13. Distribución de la población activa de la cuenca del Saja por sectores económicos. Fuente: ICANE 2006. En la tabla 2 se recoge la distribución de la población activa de la zona por municipios y sectores. De acuerdo con estos datos no se observa ningún patrón claro en la distribución geográfica los distintos sectores económicos. Los dos únicos municipios en los que el sector primario supera el 5% de la población activa son Udías (9,2 %) y Ruente (7,9 %). Por el contrario, hay municipios tradicionalmente dedicados a la ganadería, como Cabezón de la Sal y Los Tojos, en los que actualmente el sector primario no sobrepasa el 1% de la población activa. Los municipios con mayor porcentaje de población activa dedicada a la industria son Udías (49,5 %) y Mazcuerras (47,6%), mientras que la construcción domina en Reocín (37,3 %). El sector terciario muestra importantes porcentajes de ocupación en todos los municipios llegando a alcanzar el 90 % en Los tojos. Municipio Alfoz de Lloredo Reocín Udías Cabezón de la Sal Mazcuerras Ruente Cabuérniga Tojos (Los) Comunidad Campoo - Cabuérniga Hermandad de Campoo de Suso Enmedio Cuenca del Río Saja Población Activos Sector primario 2556 7704 841 8047 2031 996 1101 412 0 1955 3936 469 2919 109 2895 275 127 155 70 0 267 606 1,3 1,8 9,2 0,4 1,5 7,9 0,6 0,0 0,0 3,7 0,5 29579 7892 1,4 Sector secundario Industria Construcción 35,0 7,9 13,2 37,3 49,5 3,7 25,2 33,0 47,6 5,8 32,3 10,2 29,0 3,9 2,9 7,1 0,0 0,0 23,2 15,4 26,6 21,8 22,5 29,1 Sector terciario 55,9 47,6 37,6 41,5 45,1 49,6 66,5 90,0 0,0 57,7 51,2 47,0 Tabla 2. Datos de población total y población activa por municipios y sectores económicos (%) en los municipios presentes en la cuenca del Saja. Fuente: ICANE 2006. Sector primario Tal y como se puede observar en la Figura 14, el municipio de la cuenca del río Saja que presenta una mayor superficie de tierras labradas es Alfoz de Lloredo, con 89 ha labradas, más del doble que Mazcuerras (41 ha), segundo municipio con mayor extensión de tierras labradas. Campoo-Cabuerniga es el único municipio de los once sin tierras labradas. Udías Tojos (Los) Ruente Reocín Mazcuerras H. Campoo de Suso Campoo - Cabuérniga Campoo de Enmedio Cabuérniga Cabezón de la Sal Alfoz de Lloredo Hectáreas labradas 100 90 80 70 60 50 40 30 20 10 0 Figura 14. Hectáreas labradas en cada uno de los municipios de la cuenca del río Saja (Fuente: INE, Censo Agrario, 1999). En cuanto al número de cabezas de ganado (Figura 15), cabe resaltar el municipio de Reocín con casi 55.000 cabezas de ganado, lo que suponen el 42 % del total. De estas 55.00 cabezas de ganado, 46.000 se corresponden con aves. En el resto de municipios encuentran entre 3.000 y 12.000 cabezas, excepto Campoo-Cabuérniga (0 cabezas), aunque es una zona de pasto mancomunada de los municipios Hermandad de Campoo de Suso y Cabuérniga. En los municipios de la cuenca del Saja el número de explotaciones ganaderas están comprendidas entra las 57 de Los Tojos y las 434 presentes en Campoo de Enmedio, exceptuando a CampooCabuérniga, sin explotaciones ganaderas. Explotaciones ganaderas (x100) Cabezas de ganado (x1000) 60 50 40 30 20 Udías Tojos (Los) Ruente Reocín Mazcuerras H. Campoo de Suso Campoo - Cabuérniga Campoo de Enmedio Cabuérniga Cabezón de la Sal 0 Alfoz de Lloredo 10 Figura 15. Explotaciones ganaderas (cientos) y cabezas de ganado (miles) existentes en cada uno de los municipios de la cuenca del río Saja (Fuente: Gobierno de Cantabria, 2004) Sector secundario Los municipios que cuentan con un mayor número de empresas dedicadas a actividades propias del sector industrial coinciden con los municipios con mayor densidad de población. Según el censo del CNAE (2005), en Reocín se asientan 31 empresas de este sector y en Cabezón de la Sal 39. En ambos municipios predominan las empresas dedicadas a la producción de productos alimenticios, metálicos y minerales. En los municipios de Udías, Cabuerniga, Los Tojos y Campoo-Cabuerniga Cabuerniga no hay inventariada ninguna empresa del sector industrial. De igual manera las empresas dedicadas a la construcción son mayoritarias m en municipios de Cabezón de Sal con 74 empresas y Reocín con 39. Los municipios de Los Tojos y Campoo-Cabuerniga Cabuerniga no cuentan con empresas dedicadas a la construcción. Sector terciario Varios de los municipios de la cuenca del río Saja presentan un sector servicios con una elevada importancia económica. Cabe destacar el elevado número de establecimientos de hostelería, así como las numerosas plazas hoteleras disponibles en los municipios de Hermandad de Campoo de Suso, zona interior, Cabuérniga, en la zona media, y Cabezón de La Sal y Alfoz de Lloredo, en la zona más baja del Río Saja (Figura 16). Figura 16.. Número de plazas hoteleras y establecimientos de hostelería en los municipios de la cuenca de los Saja 2.7 Usos del suelo El análisis de los usos del suelo en la cuenca del río Saja permite corroborar la situación socioeconómica definida en apartados anteriores. En la cuenca predominan nan los suelos dedicados al cultivo, los cuales se extienden a ambos márgenes del río, principalmente en la zona baja, y los suelos forestales desarbolados y arbolados, estando estos presentes en las zonas de mayor pendiente, alejados de los principales núcleos n poblacionales (Figura Figura 17). 17 Figura 17. Usos del suelo en la cuenca del río Saja. 3. ANÁLISIS DE PRESIONES En los principales ríos de Cantabria se encuentran inventariadas un total de 2039 alteraciones, de las cuales más del 9 % se localizan en la cuenca del Saja (188; GESHA, 2005c). Como síntesis de estos resultados, en la Figura 18, se representa el porcentaje de los diferentes tipos de alteraciones existentes en la cuenca del río Saja respecto al total de las inventariadas en la misma. Si consideramos el número de afecciones en proporción a la longitud del río, en la cuenca del río Saja existen aproximadamente 1,5 registros por Km. recorrido, siendo dominantes las presiones correspondientes a ocupaciones de llanura y alteraciones de la continuidad fluvial, cada una de las cuales suponen el 29 % del total de presiones inventariadas en la cuenca del Saja. 2% 3% 7% Contaminación Puntual 20% Contaminación Difusa Alteración continuidad 29% Alteración hidrológica Ocupación de la llanura Alteración cauce Vegetación invasora 30% 9% Figura 18. Porcentaje de los diferentes tipos de alteraciones respecto al total de las inventariadas (Fuente: GESHA, 2005). Cabe resaltar que el grado de alteración no es uniforme a lo largo de todo el río, siendo la zona alta la mejor conservada y los tramos medios-bajos los más alterados, lo que puede asociarse al desarrollo urbanístico e industrial existente en el tramo medio de la cuenca. Así, la zona más elevada del Saja y el tributario Argoza presentan pocas presiones, asociadas, en su mayor parte, a las localidades de la zona. Este aspecto se refleja en la presencia de un bosque de ribera en buen estado. El río Saja no destaca especialmente por el número de alteraciones que registra (3.1 por kilómetro), aunque sí por la magnitud de las mismas. Éstas están principalmente concentradas en el tramo medio y bajo del río, asociadas a la elevada presión urbana e industrial que sufre la cuenca, especialmente desde Cabezón de la Sal hasta su desembocadura. A pesar de ello, el tramo alto del río, desde la cabecera hasta Renedo de Cabuérniga, está poco alterado y tiene elevado interés ambiental, manteniendo amplias áreas en muy buen estado de conservación (Figura 19). Hay que recordar que desde su cabecera hasta casi Cabezón, el cauce se encuentra incluido dentro del Lugar de Interés Comunitario “Río Saja”. Figura 19. Vista del río Saja en su cabecera. Muy diferente es la situación en el resto del río, donde la influencia de la gran actividad industrial que se desarrolla en la cuenca baja, junto con los importantes núcleos de población existentes (Cabezón de la Sal, Puente San Miguel, Torrelavega) se refleja en el grado de deterioro general del sistema fluvial (Figura 20). Las principales consecuencias directas de estas alteraciones derivan, fundamentalmente, de las fijaciones de márgenes existentes, de las detracciones de caudal y de los importantes vertidos de aguas residuales urbanas e industriales que recibe el río. Figura 20. Vista general del río Saja en la que se observa la elevada presión industrial y urbana que soporta en el entorno de Torrelavega. Este río es uno de los que más encauzamientos registra, con aproximadamente 5 km canalizados en ambas márgenes, lo que supone, aproximadamente, un 7 % de la longitud del río. Éstas están presentes a lo largo de todo su recorrido, aunque nuevamente son más significativas en la cuenca media y baja, desde Cabuérniga hasta Torrelavega. Dentro de estos destacan los encauzamientos existentes en Ruente, Cabezón de la Sal y Torrelavega. Asimismo, es destacable la existencia de 11 puntos de toma de caudal y 20 azudes que, junto con los numerosos puentes (31) alteran significativamente el régimen hídrico, la continuidad del sistema y las condiciones hidromorfológicas del cauce (Figura 21). Como referencia, indicar que el Saja registra el 27% de los puentes y el 17% de los azudes que se han valorado con afección “alta”. Figura 21. Azud junto al área industrial de Bridgestone (Puente San Miguel) para la derivación de caudal a la empresa Sniace, azud de Solvay (Viveda), en el límite con la zona estuarina, y canal de derivación de la central hidroeléctrica de Santa Lucía. Especial relevancia adquieren en esta cuenca los numerosos e importantes vertidos de aguas residuales industriales y urbanas, los cuales generan un deterioro generalizado y significativo de la calidad de las aguas desde Cabezón de la Sal y, especialmente, tras su paso por Puente San Miguel y Torrelavega. Cabe resaltar que, además de recibir las aguas residuales sin depurar del segundo núcleo de población de Cantabria, en las márgenes del río se asientan diversas industrias cuya actividad se asocia a la generación de sustancias contaminantes (Textil Santanderina, Azsa, Bridgestone, Sniace). Cabe resaltar que en su mayoría están incluidas en el registro EPER. Por último, indicar que en la cuenca baja se produce la ocupación de la ribera por extensas poblaciones de las especies invasoras Cortaderia selloana (plumero) y Reynoutria japonica (bambú japonés). La presencia de esta última tiene especial relevancia, dado que actualmente representa una amenaza para las especies nativas propias de la ribera, debido a su elevada capacidad de propagación y difícil erradicación (Figura 22). Figura 22. Aspecto del agua del río Saja tras pasar por Torrelavega y ribera colonizada por Reynoutria. El río Besaya es uno los más alterados de Cantabria. Como en el caso del Saja, las presiones más notables de este río son las derivadas de la actividad industrial y la elevada presión urbana que sufre su cuenca media y baja, fundamentalmente desde los Corrales de Buelna hasta su incorporación con el Saja en Torrelavega, incrementando aún más la carga contaminante de este último. A estas presiones hay que añadir que la carretera Santander-Reinosa y el trazado de la nueva autopista de unión con la meseta transcurren paralelamente al cauce desde las inmediaciones de la cabecera hasta Torrelavega. En el tramo medio son frecuentes las explotaciones ganaderas y las centrales hidroeléctricas, aunque es en la cuenca baja donde el desarrollo industrial tiene mayores repercusiones sobre el medio, tanto por su intensidad como por el tipo de actividad. Como más significativo, hay que resaltar el número y magnitud de los vertidos de aguas residuales urbanas e industriales que recibe el Besaya, los cuales representan el 13% de los inventariados y, lo que es más significativo, casi el 30% de los que se considera tienen un grado de afección máxima. Hay que tener en cuenta que las aguas residuales de Los Corrales de Buelna y Torrelavega no reciben ningún tipo de tratamiento previamente a su vertido. Dentro de las industrias que se ubican en su entorno, puede destacarse las metalúrgicas ubicadas en el entorno de los Corrales de Buelna (Fundimotor, Mecobusa), dado que las existentes en Torrelavega vierten en su mayoría al Saja o a la zona estuárica (p.ej. Solvay (Figura 23). Figura 23. Vertidos de aguas residuales en el entorno de Los Corrales de Buelna y Torrelavega. Además, como consecuencia de la intensa actividad industrial se producen numerosas tomas de caudal, que se incrementan con las destinadas al abastecimiento de los núcleos de población existentes (Corrales, Torrelavega) o para su aprovechamiento hidroeléctrico. Estas detracciones representan casi el 20% de todas las registradas en Cantabria y el 30% de las consideradas como de “alta” afección. Algunas de estas tomas pueden llegar a secar tramos de río en determinadas épocas del año. Este es el caso de la existente a la entrada de Los Corrales de Buelna, que abastece a las grandes fábricas de la zona (Figura 24). Asociados a estas detracciones existen numerosos azudes (20), destacando especialmente la presa que forma el embalse de Los Corrales de Buelna en Arenas de Iguña, destinada al abastecimiento urbano de Torrelavega y su comarca (Figura 25). Asimismo, están presentes otros elementos que alteran la continuidad del río, entre los que destacan por su número los puentes (50, el 14% de los inventariados en Cantabria), algunos de los cuales alteran de forma significativa el flujo del río. Figura 24. Azud y toma en los Corrales de Buelna, en la que se observa el cauce prácticamente seco. Figura 25. Azud de abastecimiento de una central hidroeléctrica en Santa Cruz (Molledo) y embalse de los Corrales de Buelna (Arenas de Iguña). El porcentaje de río encauzado es menor que en el Saja, aunque existen numerosos puntos con los márgenes y las riberas muy modificados. Asimismo, mencionar que se han registro dos encauzamientos del lecho, ambos calificados como de afección “alta” (Figura 26). Además, se han observado numerosas zonas donde se acumulan residuos sólidos de forma incontrolada (18), mayoritariamente escombros. Figura 26. Encauzamiento de los márgenes a la altura de Torrelavega y fijación del lecho en Las Caldas.