Espacio interior

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Jacqueline Power Teories de l'espai interior
Ambiente
Espacio interior:
representación, ocupación,
bienestar e interioridad
Arquitectura
Autoría
Desjerarquización
Diseño
Bienestar
Diseño del espacio
Interioridad
Diseño integral
Ocupación
Disposición
En este artículo repasaremos el concepto de espacio según
se entiende y se trabaja en la disciplina del diseño interior/
arquitectura interior. En primer lugar describiremos el término
“interior”. A continuación analizaremos el espacio como un
concepto general antes de explorar qué es concretamente
el espacio para la disciplina del diseño interior/arquitectura
interior. ¿Cómo se entiende el espacio? ¿Cómo “ven” el espacio
los diseñadores de interiores/arquitectos de interiores?
Representación
Distribución
Espacio de trabajo
Teorías espaciales
Espacio urbano
Estancias de la ciudad
Hábitat estratégico
Interactividad
Luz
Nuevos consumidores
Prácticas experimentales
Proyecto
Retail
Sociocultural
Tecnología
Tendencias
Terreno doméstico
Triple bottom line
Introducción
La teórica de diseño interior Joanne Cys ha escrito:
“El diseño interior tiene una historia relativamente
corta y es algo generalmente aceptado que todavía se
está desarrollando como disciplina, como práctica
profesional y como campo de investigación”.1 Esto
es aplicable al diseño interior/arquitectura interior,
no solo en el contexto australiano, sino en todo el
mundo. Aquí no entraremos a discutir la nomenclatura de la disciplina y, conscientes de que es un
debate abierto, utilizaremos por igual los términos
“diseño interior” y “arquitectura interior”. Desde
una disciplina en busca de su identidad, tenemos
que reivindicar nuestro espacio propio, y para ello
tenemos que definir qué entendemos precisamente
por “espacio”, un término muy utilizado pero por
cuyo significado o multiplicidad en un sentido concreto de la disciplina rara vez nos preguntamos.
¿Qué es el espacio interior? ¿Qué queremos decir
Jacqueline Power
“¿Qué es el espacio
interior? ¿Qué queremos
decir realmente cuando
utilizamos la palabra
‘espacio’ en nuestros
estudios de diseño?”
La Dra. Jacqueline Power se dedica a la investigación en
el campo de la arquitectura interior y a la investigación
colaborativa en el campo del diseño de producto. La tesis
que terminó recientemente se centra en el primero de estos
campos, y concretamente en torno al espacio indígena en
el sudeste de Australia. Jacqueline Power es profesora de
diseño interior en la University of Tasmania.
1
Cys, J. “Developing a Discipline: Interior Design Education
and Research”. En: Leydecker, S., Designing Interior
Architecture: Concept, Typology, Material, Construction.
Basilea: Birkhäuser, 2013, p. 62.
realmente cuando utilizamos la palabra “espacio”
en nuestros estudios de diseño?
Empezaremos describiendo el “interior”. A partir del trabajo del historiador de la arquitectura
Charles Rice, veremos cómo ha ido cambiando el
uso de este término (en inglés) con el tiempo. Después introduciremos el concepto de espacio, para
pasar luego a examinar su conceptualización dentro
de la disciplina de interiores. Analizando el espacio
interior desde tres enfoques principales —en su relación con la representación, la ocupación y el bienestar— obtendremos un “marco aplicado” que nos
ayudará a trabajar tangiblemente con el espacio en
un formato de estudio de diseño. Los diseñadores
logran utilizar estos tres aspectos espaciales para
crear y manipular el espacio, mejorarlo y producir
espacios interiores significativos. Por último, nos
centraremos en el concepto de “interioridad”. A diferencia de la representación espacial, de la ocupación y del bienestar, la interioridad se exime de la
aplicación directa, llevando el espacio de lo real a
lo posible o, dicho de otra forma, desvinculando el
espacio de la forma arquitectónica.
11
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El interior
En la definición más sencilla, “interior” significa
“dentro” y suele hacer referencia a un edificio o una
estancia. En este sentido se lo asocia más con los
límites del envoltorio de un edificio o las superficies
presentadas por las formas arquitectónicas construidas. Un interior está inherentemente vinculado
al espacio definido por la forma arquitectónica, y
es al mismo tiempo parte de la estructura y lo que
hay dentro de ella. Sin embargo, el uso del término
inglés interior ha ido variando, aplicándose a contextos muy distintos a lo largo del tiempo. Charles
Rice, de quien dicen que es “posiblemente el académico más publicado y respetado de Australia en el
ámbito del diseño interior”, analiza el uso de esta
palabra. 2 Rice subraya que el uso del término interior en inglés ha cambiado varias veces a lo largo
de los siglos y expone esa evolución temporal explicando que “[interior] empezó a utilizarse en inglés
a finales del siglo xv para referirse a las divisiones
básicas entre dentro y fuera, y para describir la naturaleza espiritual y más interior del alma. A partir
de principios del siglo xviii, el concepto de interioridad se utilizó para designar un carácter más interior y un sentido de la subjetividad individual, y
desde mediados del mismo siglo, interior se empezó
a usar para señalar los asuntos propios de un estado, además de calificar el territorio que pertenece
a un país o región. Pero no fue hasta principios del
siglo xix cuando interior pasó a designar lo que el
diccionario Oxford English Dictionary (OED) define como ‘el interior de un edificio o estancia, sobre
todo en relación con su efecto artístico; también,
una imagen o representación del interior de un edificio o estancia. O, en el ámbito del teatro, un decorado representando la parte interior de un edificio
o una estancia’.” 3
Jacqueline Power Espacio interior
Básicamente, el término “interior” describe algo
que está dentro y, sin embargo, la descripción de
Rice deja claro que históricamente ha tenido un uso
mucho más amplio y se ha aplicado a ámbitos micro y macro por igual. Según argumenta el autor,
“interior” ha sido utilizada para hacer referencia a
conceptos muy diversos, desde edificios hasta personas y estados. Algunas definiciones de diccionario
también mencionan la técnica literaria del monólogo interior con la que se transmiten los pensamientos privados de un personaje.4 Cabe señalar que la
aplicación del término a estos conceptos divergentes
se produjo en distintos contextos, y no específicamente dentro del paradigma de construcción de edificios utilizado por la arquitectura para expresar sus
conceptos. Muchos de los usos de la palabra parecen
estar históricamente vinculados a nociones de propiedad (de tierra, de espacio y de pensamientos). En
todos esos usos, el término “interior” implica cierto
grado de aislamiento, de dejar fuera a las personas
y los conceptos para poder tener un mayor control
y propiedad, y este aspecto subyacente del término
revela cierta estrechez de miras históricamente asociada al nombre. 5 Dicho de otra forma, la idea de
interior implica que algo queda fuera, excluido de
lo de dentro, y el límite que distingue el interior del
exterior es esencial para la definición de ese espacio
interior. Como señala el filósofo Mark Kingwell, “el
interior siempre queda definido por al menos tres
agentes activos: dentro, fuera y —el más importante pero que se ve menos— el umbral que separa a
ambos”.6 La creación de este umbral entre dentro y
fuera es un interés común, un resultado de la reunión de la práctica del diseño interior/arquitectura
interior y la arquitectura. Sin embargo, un interior
no es simplemente algo formado por la arquitectura
y luego adornado por el diseño interior/arquitectura
2 Cys, J. “[un]disciplined”. Interior Design/Interior
Architecture Educators Association (IDEA) Journal (2006),
p. 25.
5 Power, J. South-East Australian Indigenous Space and its
Cosmological Origins (tesis doctoral). University of New
South Wales, 2013, p. 60.
3 Rice, C. “Rethinking Histories of the Interior”. The Journal of
Architecture, vol. 9, núm. 3 (2004), p. 276.
6 Kingwell, M. “Crossing the Threshold: Towards a Philosophy
of the Interior”. Queen’s Quarterly, vol. 113, núm. 1
(primavera 2006), p. 91.
4 s.v. “interior adjective”. Oxford Dictionary of English, 3ª ed.
Oxford: Oxford University Press, 2010.
12
interior. Las superficies que presenta la arquitectura
aportan un contenedor para el ornamento y el artificio, pero el espacio que queda dentro también es
maleable y adaptable. Entonces, ¿cuál es este espacio
creado, y a veces derivado, de la práctica de la arquitectura y el diseño interior/arquitectura interior?
Espacio
El concepto del espacio ha sido teorizado de diversas formas desde las disciplinas más variadas, incluyendo las ciencias, la geografía y, por supuesto,
la arquitectura. En A History of Aesthetics and the
Structuring of Space, Justin Wilwerding ofrece un
esclarecedor repaso de las tres formas principales en
las que se ha conceptualizado el espacio, y concluye
diciendo que “el análisis filosófico del espacio tiene una historia larga y sólida, pero de esta historia
podemos deducir el desarrollo de tres ideas pertinentes para nuestra cultura y para la práctica de los
diseñadores que diseñan espacios: el espacio es una
sustancia (perspectiva relativista; Aristóteles, Mach,
Einstein); el espacio es un vacío (perspectiva absolutista; Euclides, Newton); el espacio es un constructo
mental relativo (Leibniz)”.7
Las teorías del espacio están a veces vinculadas
con conceptos de lugar y tiempo.8 Wilwerding también hace referencia a los modelos cosmológicos que
precedieron a estas concepciones filosóficas y científicas del espacio.9 En mi investigación doctoral analicé una cosmología indígena australiana concreta
y su creación de un efecto espacial.10 Veremos este
modelo más adelante en relación con la interioridad.
Pese a que el concepto de espacio tenga una historia
tan larga, podríamos decir que, en la forma como
7 Wilwerding, J. “A History of Aesthetics and the
Structuring of Space”. En: Vaikla-Poldma, T. Meanings
of Designed Spaces. Nueva York: Fairchild Books, 2013,
p. 69.
8 “Tanto Mach como después Einstein opinaban que
el espacio, el tiempo, la masa y la energía estaban
inexorablemente vinculados y que el espacio es una
entidad”. Ibídem.
9 Ibid, p. 67.
lo entienden los diseñadores, el espacio es una idea
relativamente nueva.
Charles Rice ha explicado que el espacio “como
un concepto específicamente arquitectónico para
significar un volumen tridimensional no fue conceptualizado hasta finales del siglo xix, y se podría decir
que debe su conceptualización a la significancia cul-
“Las superficies que presenta
la arquitectura aportan
un contenedor para el
ornamento y el artificio,
pero el espacio que queda
dentro también es maleable
y adaptable”
tural del interior doméstico burgués”.11 Esto revela
que el interior (= dentro) no solo se ha visto influido por las concepciones del espacio, sino que, hasta
cierto punto, ha “conformado” a las teorías espaciales. Rice defiende que hay dos “grandes líneas de
teoría espacial atribuibles al estudio del interior”.12
Según él, “la literatura sobre el espacio se divide entre lo arquitectónico y lo poético: el espacio arquitectónico es visto en su particular emergencia histórica de finales del siglo xix, y la poética del espacio
doméstico es vista como perpetuamente disponible
para experimentar con ella”.13 Esta definición que
hace Rice de la teoría espacial centrada en el interior
subraya la forma concreta en la que debería tratarse
el concepto del espacio desde la disciplina.
10 Power, J. “Australian Indigenous Interiority and
Cosmology”. En: Traditional Dwellings and Settlements
Working Paper Series, vol. 224 (2010), p. 1-28.
11 Rice, C. The Emergence of the Interior: Architecture,
Modernity, Domesticity. Londres: Routledge, 2007, nota
13, p. 122.
12 Rice, C. The Doubleness of the Interior: Inhabitation and
Bourgeois Domesticity (tesis doctoral). University of New
South Wales, 2003, p. 27.
13 Ibid, p. 28.
13
Jacqueline Power Espacio interior
30 ELISAVA Temes de Disseny
Entonces, ¿cómo se entiende el espacio desde la
disciplina de interiores?
Espacio interior
Como ya se ha comentado, el espacio es algo específico de cada disciplina; pero la disciplina de interiores aún tiene que reivindicar el espacio en sus
propios términos. Wilwerding, por ejemplo, ha observado que “desde un punto de vista educacional y
disciplinar han sido raras las iniciativas consagradas al estudio de un elemento tan importante [el
espacio] en nuestra profesión”.14 Probablemente, el
espacio interior es a la vez todas y ninguna de las cosas descritas por otras disciplinas. No es un espacio
homogéneo que agrupe muchos conceptos diversos
de todas las disciplinas, sino una entidad compleja
que capta intereses concretos de la disciplina de interiores. Cuando el término “espacio” se utiliza en
el contexto de las disciplinas de diseño, se entiende
que “el espacio del que hablan los arquitectos (o los
diseñadores de interiores/arquitectos de interiores)
no es el espacio en general, sino una visión del mismo bastante específica de su profesión: una categoría inventada para sus fines propios”.15
La propia “profesión” de los arquitectos y los
diseñadores de interiores/arquitectos de interiores
puede hacer referencia a muchas conceptualizaciones diferentes del espacio. El término se puede
utilizar con un sentido objetivo, refiriéndose a su
capacidad de señalar la ubicación propia en el espacio utilizando la geometría cartesiana. Francis D.
K. Ching, por ejemplo, cuyos artículos constituyen
textos fundacionales en muchos cursos de arquitectura y de diseño, define el espacio como “el ámbito
tridimensional en el que los objetos y los acontecimientos se producen y tienen una posición y una
14 Wilwerding, J. Op. cit., p. 66.
15 Forty, A. Words and Buildings: A Vocabulary of Modern
Architecture. Londres: Thames & Hudson, 2000, p. 275.
16 Ching, F. D. K. A Visual Dictionary of Architecture. Nueva
York: John Wiley & Sons, 1995, p. 217.
17 Edwards, C. Interior Design: A Critical Introduction.
Oxford: Berg, 2011, p. 115.
14
dirección relativas, y en concreto una parte de ese
ámbito puesto aparte en un caso concreto para un
fin determinado”.16 El historiador del diseño Clive
Edwards explica que el “enfoque estático” cartesiano del espacio era, por ejemplo, “la base del ideal
decimonónico del Beaux Arts del siglo xix de planos
interiores del espacio basados en ejes y en aberturas jerárquicas”.17 En cambio, desde la disciplina de
interiores, el espacio también puede emplearse para
“Desde la disciplina de
interiores, el espacio
también puede emplearse
para encarnar tanto el
entorno físico construido
como el tejido social de
dicho entorno”
encarnar tanto el entorno físico construido como
el tejido social de dicho entorno.18 Según el filósofo
Gaston Bachelard, “el espacio habitado trasciende el
espacio geométrico”.19 Hemos visto pues las distintas formas en las que los diseñadores de interiores/
arquitectos de interiores reflexionan sobre el espacio
y desarrollan los constructos mentales, relativistas
y absolutistas del espacio que hemos mencionado.
Entonces, ¿cómo es el espacio interior? ¿Qué es el
espacio para nuestra disciplina?
Desde el diseño interior/arquitectura interior, el
espacio se trabaja específicamente de varias maneras. En un sentido práctico, el espacio se entiende
en su aplicación al diseño y en su potencialidad para
ser manipulado de distintas maneras a través de la
forma construida. Como he dicho al principio, soy
consciente de que el espacio en la esfera interior
genera debate en torno a los siguientes temas clave
(sobre todo en su enseñanza): representación del espacio, ocupación y uso del espacio y bienestar de los
usuarios en el espacio, tres categorías que se pueden
agrupar más ampliamente en las áreas de “comunicación” del espacio (representación), “experiencia”
del espacio (ocupación y uso) y “diseño” del espacio
(bienestar). Es necesaria una cuarta categoría, un
método teórico per trabajar con el espacio que sea
propio de la disciplina, el de “reflexionar” sobre los
atributos del espacio interior (interioridad).
Aunque de entrada podrían parecer simplificadas, estas categorías tienen que ver con la forma en
la que los diseñadores de interiores/arquitectos de
interiores se implican activamente con el espacio,
lo utilizan y lo teorizan. No obstante, las categorías
generales aquí descritas no son del todo nuevas.
Clive Edwards, por ejemplo, explicaba que “el entendimiento conceptual del espacio en relación con
esta experiencia de movimiento, construcción y representación es importante para los diseñadores de
interiores”.20 La novedad está posiblemente en que
las categorías aquí adoptadas distinguen entre la dedicación práctica y la dedicación teórica a conceptos
espaciales pertinentes al estudio de diseño interior.
Entonces, ¿cómo se utiliza el espacio en la práctica?
El espacio interior y su representación
En la disciplina de interiores, la capacidad de representar el espacio interior es un tema recurrente.
El prestigioso diseñador de interiores Ben Kelly ha
escrito: “Diseñar es comunicar”.21 La representación
mediante técnicas de dibujo ortogonal es esencial
18 Los “ajustes conductuales”, por ejemplo, comprenden
el “espacio, lo que le rodea y lo que contiene, así como
las personas y sus actividades”. Véase Lawson B. The
Language of Space. Oxford: Architectural Press, 2001,
p. 23.
20Edwards, C. Op. cit., p. 115.
19 Bachelard, G. The Poetics of Space (título original: La
Poétique de l’espace). Boston: Beacon Press, 1994, p. 47.
22 Evans, R. “The Developed Surface: An Enquiry into the
Brief Life of an Eighteenth-Century Drawing Technique”.
En: Weinthal, L. Toward a New Interior: An Anthology
of Interior Design Theory. Nueva York: Princeton
Architectural Press, 2011, p. 304.
21 Kelly, B. En: McDermott, C. Plans and Elevations: Ben Kelly
Design. Londres: Architecture Design and Technology
Press, 1990, sin paginar.
dentro de la práctica y se considera una aptitud vital que se enseña a los futuros profesionales durante su formación superior. La técnica ortogonal del
“interior de superficies desarrolladas”, en palabras
de Robin Evans, que permitió “invertir la arquitectura de dentro a fuera, para poder mostrar alzados
internos en lugar de externos en relación con un
plano de planta”, es un ejemplo de una aplicación
del dibujo ortogonal específica para interiores.22 Y,
hablando de la arquitectura, que comparte un mismo lenguaje de representación con la disciplina de
interiores, el filósofo Henri Lefebvre dice: “Dentro
de la práctica espacial de la sociedad moderna, el
arquitecto se acomoda en su propio espacio. Tiene una ‘representación de ese espacio’, vinculada a
elementos gráficos (hojas de papel, planos, alzados,
secciones, perspectiva de fachada, módulos, etc.).
Este espacio ‘concebido’ les parece ‘verdadero’ a los
que lo utilizan, a pesar de que —o tal vez porque—
es geométrico: porque es un medio para objetos, un
objeto en sí mismo y un locus de la objetivación de
planos”.23
Los dibujos ortogonales se perciben como si comunicaran espacio real, según argumenta Lefebvre.
Tal vez el poché —la técnica de dibujo para ilustrar el
espacio de construcción como un vacío que a veces
está coloreado pero sin indicar ninguno de los materiales de construcción reales necesarios— es el que
capta más claramente esta preocupación por la geometría. Al representar el espacio interior, el espacio
de construcción suele considerarse innecesario para
los dibujos de presentación, de manera que solo tienen el privilegio de la representación las superficies
presentadas hacia el interior.24 Lógicamente, los dibujos ortogonales no transmiten todos los atributos
asociados a un interior, por lo que tienen que com-
23 Lefebvre, H. The Production of Space (título original: La
production de l’espace). Oxford-Massachusetts-Victoria:
Blackwell Publishing, 1991, p. 361.
24 Loveday, T. “Construction, the Third Space of
Architecture”. Ponencia presentada en el congreso anual
de la Art Association of Australia and New Zealand
(AAANZ), Monash University, Victoria, diciembre de
2006.
15
30 ELISAVA Temes de Disseny
plementarse con renders y maquetas. No obstante,
tienen la ventaja de mostrar a la vez tanto el interior
como el exterior y el espacio de construcción. 25 La
disciplina de interiores trabaja principalmente la representación del espacio antes de que se haga realidad, lo que hace que sea fundamental transmitir la
totalidad de los atributos experenciales que puede llegar a comprender el espacio real que se va a habitar.
Podríamos decir incluso que la representación
interior del espacio falla si no hay imágenes renderizadas. Además de la representación técnica de las
imágenes ortogonales que documentan los aspectos
mensurables del espacio, para que tenga lugar una comunicación completa hay que transmitir el ambiente
del espacio interior. Los montajes y renders que transmiten el ambiente y cierto sentido de la materialidad
pueden no ser representaciones auténticas del espacio, pero precisamente por eso permiten imaginar y
conjurar el interior con los ojos de la mente. Un buen
montaje ofrece la oportunidad de imaginar y además
conserva la posibilidad de que ese espacio imaginado
cambie con cada visión individual de la obra.
El espacio interior y su ocupación
La ocupación 26 y el uso del espacio por parte de las
personas también es un aspecto muy importante en
la práctica del diseño interior/arquitectura interior.
Transciende la idea del cuerpo en el espacio ejemplificada por el Hombre de Vitruvio para abrazar
la sutil política de la participación humana. Saber
ver y comprender a las personas y sus deseos incide
en la conceptualización del espacio por parte de los
diseñadores de interiores/arquitectos de interiores,
que piensan en el espacio desde el punto de vista de
cómo podrán experimentarlo sus usuarios.
En su Theory of Proxemics, 27 el antropólogo Edward T. Hall expone una idea importante para estas
Jacqueline Power Espacio interior
concepciones del espacio interior al establecer tres
categorías: espacio fijo, espacio semifijo y espacio
informal. El más pertinente para nuestro tema es
el último, el espacio informal, que afecta a las “distancias mantenidas en los encuentros con otras personas”.28 Los cuatro niveles de espacio informal de
“Visto desde la perspectiva del
bienestar, el espacio no solo
tiene en cuenta la inmediatez
del espacio físico, sino que
la prolonga en el tiempo
para considerar los efectos
inmediatos del espacio en los
usuarios”
Hall (distancia íntima, distancia personal, distancia
social y distancia pública) varían según el grado
de implicación sensorial con respecto a los demás
usuarios del espacio. Cabe señalar cómo insiste Hall
en que su descripción de la proxémica espacial varía
culturalmente y que “la gente de distintas culturas
no solo habla idiomas diferentes, sino que, lo que
posiblemente es más importante, habita mundos
sensoriales diferentes”. 29 El primer paso necesario
para darle sentido a esos “mundos sensoriales” y a la
implicación con los demás en el espacio es desarrollar la empatía con los usuarios del espacio interior.
En una clase de proyectos de diseño les pedí a
mis alumnos que trabajaran a partir del concepto
de espacio informal de Hall. Para ello, los alumnos
formaron grupos y representaron sobre la moqueta
las cuatro distancias prescritas por Hall (con cinta
aislante extraíble). Luego, de pie desde las zonas
marcadas, se leyeron fragmentos del texto de Hall.
Pedí a los alumnos que tuvieran en cuenta todos sus
sentidos. ¿Qué podían oler a una distancia íntima?
¿Perfume? ¿Colonia? ¿Qué podían notar? ¿Un aliento cálido? Se les iban haciendo preguntas y se les pedía que grabaran sus observaciones al término de
cada zona experiencial. Se recurrió a la empatía con
el concepto espacial como herramienta para que los
alumnos encontraran un sentido a la teoría y se implicaran con ella, esto es, para que experimentaran
conscientemente su implicación con los demás en el
espacio.
El espacio del usuario es “vivido, no representado (ni concebido)”, según Lefebvre, lo que no deja
de contrastar con los aspectos de representación
antes comentados que interesan a la disciplina. 30
Lefe­bvre describe los términos “usuarios” y “habitantes” como “etiquetas torpes y peyorativas” que
llevan a la homogeneidad y a la “marginalización a
través de la práctica espacial”. 31 Pero, por cierto que
esto pueda ser, no es fácil renunciar a ellos desde
la conceptualización del espacio. Sin embargo, los
usuarios (a falta de un término mejor) son un punto
de interés central para el diseñador de interiores y el
arquitecto de interiores, tanto los usuarios del presente como los del futuro.
El espacio interior y el bienestar
La idea del espacio y su impacto en el bienestar de
los usuarios, tanto a corto como a largo plazo, es otra
conceptualización formulada por la disciplina de
interiores. Shashi Caan, diseñadora de interiores y
actual presidenta de la Federación Internacional de
30Lefebvre, H. Op. cit., p. 362.
31 Ibidem.
25 Ibidem.
26 Preferimos utilizar el término “ocupar” antes que “habitar”
porque somos conscientes de que no todos los espacios
interiores son para vivir.
27 Hall define “proxémica” como “el término que he acuñado
para las observaciones interrelacionadas y teorías del
empleo que el hombre hace del espacio como una
elaboración especializada de la cultura”. En: Hall, E. T. The
Hidden Dimension: Man’s Use of Space in Public and Private.
Londres: Bodley Head, 1969, p. 1.
28 Ibid, p. 105.
32 Caan, S. Rethinking Design and Interiors: Human Beings in
the Built Environment. Londres: Laurence King Publishing,
2011, p. 76.
33 Ibid, pp. 76-78.
Arquitectos/Diseñadores de Interior (IFI), ha afirmado que “el bienestar humano es la finalidad última del
diseño”.32 Caan sugiere que el bienestar se puede ver
influido por el uso de determinados elementos y principios de diseño en un espacio, así como por resultados más subjetivos como pueden ser algunos espacios
inspiradores.33 El color es un ejemplo de cómo los elementos y los principios de diseño se pueden aplicar al
diseño espacial y desencadenar cambios emocionales
y conductuales en los usuarios. Una estancia azul, por
ejemplo, puede hacer sentir que el tiempo se alarga,
en tanto que los espacios rojos y amarillos estimulan
la actividad y el apetito.34 El planteamiento del espacio desde el punto de vista de la salud y el bienestar
llega al punto de incluir propiedades de calidad de
aire interior (IAQ).35 La calidad IAQ de un espacio
puede tener efectos inmediatos en los usuarios del
mismo, así como consecuencias a largo plazo sobre
la salud. Visto desde la perspectiva del bienestar, el
espacio no solo tiene en cuenta la inmediatez del espacio físico, sino que la prolonga en el tiempo para
considerar los efectos inmediatos del espacio en los
usuarios.
Y, sin embargo, el bienestar no está confinado al
individuo en el espacio. También se puede concebir
en términos sociales, y la sostenibilidad nos da la
llave para entender ese bienestar. Así planteado, el
espacio combina muchos elementos independientes
pero que se integran entre sí y ejercen una influencia
tanto en el espacio físico como a través del espacio
temporal. Estamos ante posiblemente la elaboración
del espacio más difícil de trabajar, porque es abstracto y no se ve, si bien es cierto que también puede ser cuantificable. En la formación de los futuros
diseñadores, es fundamental elaborar el espacio en
términos de bienestar.
En el proceso de diseño, los usuarios del espacio
y su bienestar tienen que ser siempre una prioridad
absoluta. Así concebido, el espacio combina varios
aspectos diferentes: la selección de la materia que
ocupa el espacio interior, los efectos psicológicos
del espacio interior en la interioridad de cada cual
34Ibid, p. 111.
35 Véase por ejemplo Siegel, J. A. “Engineering the Indoor
Environment”. En: Weinthal, L. Op. cit., p. 349.
29 Ibid, p. 2.
16
17
30 ELISAVA Temes de Disseny
y un concepto del espacio espacio-temporal, en términos del impacto del interior en las generaciones
futuras más allá de la inmediatez del interior físico.
En cierto sentido, la conceptualización del espacio
a través del bienestar combina aspectos de teorías
más antiguas sobre el espacio, basadas en constructos espaciales mentales, absolutistas y relativistas.
El espacio se revela como el puente que conecta la
teoría y la práctica.
Entonces, ¿cómo se plantean el espacio los diseñadores de interiores en un sentido teórico?
Interioridad
Ningún análisis del espacio interior sería completo
sin un análisis de la interioridad. Es un concepto sobre el que se ha escrito mucho y que se ha descrito a
menudo, pero su aplicación suele quedarse siempre
en la teoría. El teórico de la arquitectura Michael
Benedikt describe lo que él llama “la sensación de
interioridad” como “estar sumergido, rodeado, encerrado”. Sin embargo, esa sensación “sale de las estancias y de otros entornos interiores y se extiende
a los entornos exteriores (calles, plazas y parques
rodeados de árboles y edificios)”.36 Como hemos dicho antes, interior = dentro, pero la interioridad se
libera de su armazón arquitectónico. La interioridad
es un sentido de lo interior que existe en situaciones en las que puede que no haya ningún interior
(= dentro). Como explica Christine McCarthy, por
ejemplo, “la interioridad no es ninguna garantía de
una ubicación interior”.37
La interioridad es un concepto del espacio que
cada vez se reivindica más desde la disciplina de in-
36Benedikt, M. “Environmental Stoicism and Place
Machismo”. Harvard Design Magazine, núm. 16 (Invierno/
Primavera 2002), p. 2.
37 McCarthy, C. “Toward a Definition of Interiority”. Space
and Culture, vol. 8, núm. 2 (mayo de 2005), p. 116.
38 Massola, A. Bunjil’s Cave: Myths, Legends and
Superstitions of the Aborigines of South-East Australia.
Melbourne: Lansdowne Press, 1968, p. 105.
Jacqueline Power Espacio interior
teriores. Mi tesis doctoral explora esta idea en relación con el espacio indígena australiano y con un
modelo cosmológico concreto que ha sido descrito
por el antropólogo Aldo Massola en los siguientes
términos: “En resumen, la tierra era un cuerpo circular plano, cubierto por un cielo abovedado cóncavo y sólido que se extendía hasta el horizonte. Se podría describir, quizás, como un plato tapado con un
cubreplatos. Al otro lado de aquella cubierta sólida
había una tierra bella llena de cosas buenas para comer y en la que nunca faltaba el agua. A aquel lugar
iban a parar los espíritus de todos los muertos…”.38
“El concepto real de
interioridad supone una
importante manera de
trabajar el espacio interior
que no está dentro pero sin
embargo posee los atributos
propios de ‘lo interior’”
Esta visión cosmológica era predominante en
partes del sudeste de Australia en la época de la colonización europea, aunque también se seguía en
otras partes del continente. La antropóloga Dianne
Johnson, en su texto Night Skies of Aboriginal Australia: A Noctuary, se refiere a la bóveda cóncava
descrita por Massola con la descriptiva expresión
“skydome” (bóveda o cúpula celeste). 39 La nomenclatura de Johnson para el modelo cosmológico
subraya la creación del espacio con reminiscencias
arquitectónicas formada por la presencia de una
bóveda astral. El modelo cosmológico de la bóveda
celestial constituye una forma evocadora de comprender la interioridad. Este modelo cosmológico
presenta una disposición espacial que está claramente definida, con una parte de dentro (el paisaje
terrestre debajo de la bóveda), una de fuera (el mundo celestial al otro lado de la bóveda) y una frontera
que separa ambas partes (el cielo). En esta disposición, la totalidad del paisaje terrestre que hay bajo
la bóveda presenta un interior, que no está definido
por una forma arquitectónica. La bóveda celeste es
un ejemplo de interioridad, que no queda confinada a una descripción teórica, como sí ocurre en la
literatura al respecto. El concepto real de interioridad supone una importante manera de trabajar el
espacio interior que no está dentro pero sin embargo
posee los atributos propios de “lo interior”.
Conclusiones
En este artículo hemos repasado el concepto de espacio según se entiende y se trabaja en la disciplina
del diseño interior/arquitectura interior. El artículo
defiende que el espacio para esta disciplina gira en
torno a los siguientes temas clave: la representación
del espacio, la ocupación y el uso del espacio y el
bienestar de los usuarios del espacio. Estas tres categorías que se relacionan con el uso práctico quedan
más ampliamente agrupadas en la “comunicación”
del espacio (representación), la “experiencia” del
espacio (ocupación y uso) y el “diseño” del espacio
(bienestar). El artículo sugiere que estas tres formas
de trabajar el espacio aportan un “marco aplicado”
que hace posible una implicación tangible con el espacio en un formato adecuado para un proyecto de
diseño. Por el contrario, la interioridad presenta un
medio teórico de implicarse con el espacio, que hace
frente a los tres planteamientos anteriores ofreciendo una forma concreta interior de “reflexionar” en
torno a los atributos del espacio interior en casos en
los que este espacio puede no estar dentro.
La complejidad del espacio como concepto teórico y como producto primario generado por la práctica interior subrayan la necesidad de que desde la
disciplina de interiores reivindiquemos nuestro espacio disciplinar, a saber, el Espacio Interior.
39 Johnson, D. D. Night Skies of Aboriginal Australia: A
Noctuary. Sídney: Oceania Publications, University of
Sydney, 1998, p. 13-14.
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