tardan en dar origen a las arborizaciones terminales, las cuales van

T O M O DEL C I N C U E N T E N A R I O . — M E M O R I A S
139
tardan en dar origen a las arborizaciones terminales, las cuales
van poco a poco diversificándose y adquiriendo forma y distribu­
ción diversa, aunque siempre, naturalmente, dentro de la formación
plexiforme del epióptico.
Los caracteres de los cuerpos celulares, así como los de sus
arborizaciones terminales, ofrecen ciertas diferencias y variaciones
F i g . 4. — P o r c i ó n d e las retinas intermediaria y p r o f u n d a d e un ojo c o m p u e s t o d e
crisálida d e Pieris c o g i d a a principios d e abril, d e s t i n a d a p r i n c i p a l m e n t e a m o s t r a r
r a s g o s d e las n e u r o n a s m o n o p o l a r e s d u r a n t e su d e s a r r o l l o .
en las distintas especies, sobre todo cuando se acercan al estado
perfecto o cuando lo alcanzan; pero de esas variaciones no podemos
ocuparnos aquí, por falta material de espacio.
La figura 4, que corresponde a una crisálida de Pieris cogida
a principios de abril, muestra dos grupos de esas neuronas (B, B'J,