4U BOLETÍN DE LA REAL SOCIEDAD ESPAÑOLA Aunque no se trate de ninguna especie rara sino de una tan vulgar en las dunas marinas, mediterráneas y atlánticas, como el Pancratium maritimum ó nardo marino, tengo algo que decir respecto de la existencia de esta especie en la costa de Motril, aunque no sea más que por desvanecer ideas erróneas, que allí gozan de cierto crédito. Nos habían indicado que en un solo punto de la costa vivían unas azucenas especiales, y que la leyenda relacionaba su existencia con la de la aparición en el mismo lugar de la Virgen patrona de la localidad, para la que alguien había propuesto por esto que cambiase su advocación por la de la Virgen de las Azucenas. Como era natural, quisimos ver de qué se trataba, y, en efecto, en cuanto llegamos al lugar marcado vimos que las famosas azucenas no eran otra cosa que el nardo marino tan común en los médanos, del que tantas veces he traído bulbos al Jardín Botánico, y a de Las Arenas (Vizcaya), y a de Fox de Douro (Portugal), ó ya de Salinas de Aviles (Asturias) y que es una de las especies características de las dunas de todas nuestras costas. Becogí en Motril bastantes bulbos de esta especie, que he cultivado en mi jardín y en el de la Facultad, habiendo tenido el gustó de verlos abundantemente floridos, en ambos jardines en el mes de Septiembre, y de comprobar su perfecta identidad con los que, procedentes de otras localidades y recogidos por mí, se cultivan desde hace años en uno y otro jardín. Su localización, en un punto determinado de la costa de Motril, se explica porque los cultivos de la hermosa vega motrileña ha desalojado las dunas, ocupando todo el terreno que el mar no invade en los temporales, y como los Pancratium tampoco pueden vivir al alcance de las aguas marinas, consérvanse sólo allí donde la actividad agrícola de los motrileños les ha dejado un pequeño médano habitable. Aunque esto desvanezca una leyenda más ó menos artificiosamente sostenida, he de decir que y a hace medio siglo, Boissier y Willkomm, separadamente, vieron dichas plantas en Motril, y las reconocieron como Pancratium maritimum y que esta especie es c o munísima en Almería, Cabo de Gata, Málaga, Conil, Sanlúcar y tantas otras localidades andaluzas, como lo es en todos los arenales de las costas de la Península desde Cataluña á las provincias vascas.