Alma inmortal

IGLESIA DE DIOS
Departamento de Correspondencia
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material publicado por la Iglesia de Dios Universal bajo la dirección de Herbert
W. Armstrong (1892 – 1986).
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Departamento de Correspondencia
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Publicación ID: 1811TAI
¿Tiene USTED
un ALMA INMORTAL?
¿Por qué hay tanta confusión acerca de lo que ES el hombre? ¿Qué
acontece a los seres humanos cuando mueren? ¿Es la muerte meramente
la separación de un alma inmortal y el cuerpo? ¡Lea la sorprendente
PRUEBA en respuesta a estas preguntas que han confundido a millones!
por GARNER TED ARMSTRONG
L
o único seguro en la vida
dicen algunos – es la
muerte. Ese es un dicho muy
popular. Para el común de los
seres humanos, la muerte es
algo vago, lejano e irreal; algo
que puede sucederle a otra
persona. Generalmente el
hombre piensa que hay sólo
una sombría, nebulosa y
distante posibilidad de que le
suceda a él, y que ya se
preocupará
cuando
eso
acontezca.
Cuando el ciudadano común
lee las predicciones indicando
que muchas personas van a
morir en las carreteras
congestionadas de vehículos,
no puede creer de ninguna
manera, que una de dichas
personas pudiera ser él. Sin
embargo, el tremendo y
trágico saldo de vidas que se
pierden a consecuencia de
accidentes es asombroso.
Aunque a casi todos nos
gusta echar fuera de nuestra
mente tal idea, para evitar
pensar en ello, la muerte es
real. Es una parte integrante
de la vida. Todo organismo
viviente sigue el camino de
nacimiento,
crecimiento,
senilidad y muerte. ¡Millares
mueren
diariamente
a
consecuencia de accidentes
automovilísticos; a causa de
diversas enfermedades; de
indigencia e inanición; de
asesinatos o guerras! Al
mismo tiempo, millares de
nuevas vidas vienen a la
existencia – infinidad de niños
nacen diariamente en todo el
mundo.
¿Qué es eso que llamamos
vida, y que a la mayoría le
parece más importante que la
MUERTE?
La idea común
Hay literalmente docenas de
ideas diferentes acerca de lo
que sucede en el instante de
morir. Para muchos, es una
terrible partida hacia "otro
mundo" del cual no se
retorna. La mayoría de los
que profesan ser cristianos,
creen que la muerte es
meramente el acto de separar
el alma del cuerpo y que el
consciente
del
individuo
continúa viviendo en el alma.
La muerte, razonan ellos, no
es realmente muerte, sino la
continuación de LA VIDA bajo
diferentes circunstancias, y
en un "cuerpo" distinto.
Entre toda esta confusión que
envuelve a una de las más
importantes fases de nuestra
vida, usted oye a los
dirigentes de varias iglesias
argumentando que los seres
humanos tienen solamente
dos lugares a donde ir
después de la muerte: el cielo
o el infierno. Una gran iglesia
enseña que hay tres lugares:
cielo, purgatorio e infierno.
Otros entienden que hay
solamente un lugar, a saber,
el sepulcro, y que una
resurrección es necesaria
para impartir vida eterna al
hombre.
Pero, ¿qué hay de cierto en
todas estas ideas que difieren
entre sí?
¿Por qué hay tal confusión
aún entre las iglesias? ¿Los
que enseñan tal doctrina han
visto alguna vez un "alma"
volando
rápidamente
o
fugándose hacia el cielo o
rumbo al infierno? ¿HA
estado alguien allí, y regresa
luego para contarnos sus
experiencias?
¿Están conscientes los
muertos?
Tome
por
ejemplo
la
innovación en la medicina
1
moderna
respecto
del
"masaje al corazón", como
última medida de emergencia
para
preservar
la
vida
humana. ¡El paciente está
muerto! El médico, inclinado
sobre el silente cadáver para
auscultarlo
con
su
estetoscopio,
declara
el
cuerpo ¡MUERTO! Apresuradamente se hacen preparativos de última hora y tras
de sajar el cuerpo y abrirlo, el
médico empieza a masajear
el corazón de la persona
muerta, forzando a la sangre
a que empiece a fluir una vez
más. Después de varios
minutos, se percibe una débil
y pulsátil "vibración" de los
músculos del corazón. Gradualmente va desarrollándose un pulso regular y
uniforme, y el corazón que se
consideraba muerto, ¡empieza a palpitar! ¡Aquel cuerpo
no es ya "un cadáver"; su
corazón está funcionando
otra vez!
Esta no es una idea sacada
de la imaginación, sino una
descripción general de ciertos
casos que han ocurrido.
Pero, ¿dónde estuvieron tales
personas durante el tiempo
que permanecieron "muertas", debido a que su corazón
había cesado de palpitar?
¿Se fueron al cielo o al
infierno, y luego REGRESARON para incorporarse de
nuevo en el frágil cuerpo que
habían abandonado inmediatamente después de su
muerte? Y si "su" consciente
deja el cuerpo inmediatamente al tiempo de morir,
¿por qué es que no puede
ninguna de esas personas
recordar ALGO de lo que
ocurrió durante el tiempo en
que estuvieron "muertas"?
2
¿Nunca ha reflexionado que
si usted es un alma inmortal,
que puede pensar y discernir
después de dejar el cuerpo,
debería de permanecer en
aptitud de pensar y discernir
mientras
está
usted
inconsciente o en la condición
ya descrita?
Testamento? ¿Por qué la
Biblia continuamente enfatiza
la
resurrección
de
los
muertos?
¿Sería NECESARIA una resurrección, si
usted continuara viviendo
separado de su cuerpo?
¿Cómo puede usted
saberlo?
¡Es increíble, pero cierto, que
la mayoría no comprende lo
que el hombre es en realidad!
Sin embargo, Dios nos da
claramente la respuesta.
"Formó, pues el Eterno Dios
al hombre del polvo de la
tierra, y alentó en su nariz soplo de vida; y fue (vino a ser,
es la expresión originalmente
inspirada) el hombre ALMA
viviente" (Génesis 2:7).
¡Allí está la contestación! El
hombre vino a ser ALMA
viviente; eso ES el hombre:
un alma. ¡Fíjese que no se
afirma que el hombre tiene
alma, sino que es alma!
Cuando Dios colocó a Adán y
a Eva, quienes eran dos
ALMAS vivientes, en el Jardín
del Edén, expidió una orden:
"Y mandó el Eterno Dios al
hombre, diciendo: de todo
árbol del huerto comerás:
mas del árbol de ciencia del
bien y del mal no comerás de
él; porque el día que de él
comieres, morirás" (Génesis
2:16-17). Observe que Dios
estaba hablando al hombre
consciente,
y
Él
dijo,
"morirás", dirigiéndose al
hombre que era ALMA.
Cuando Dios dijo a Adán que
si tomaba la fruta prohibida,
de seguro moriría, estaba ya
informándolo
directamente
acerca del castigo que el
pecado trae consigo. El
inspirado
Apóstol
Pablo
escribió: "Porque la paga del
Puesto que "el alma" NO es
algo
que
pueda
ser
encontrado mediante pruebas
de laboratorio, o por métodos
científicos, y en vista de que
aún los que pertenecen a las
distintas
denominaciones
religiosas han mezclados
DIFERENTES ideas acerca
del "alma", y ya que ninguna
alma ha retornado para decirnos en qué lugar estuvo,
¿donde
encontraremos
entonces la única fuente de
conocimiento? ¿Cómo podríamos
solucionar
este
embrollado problema?
¡Hay sólo una FUENTE!
Dicha fuente es la revelación
del Creador Todopoderoso,
quien nos FORMO, y por lo
tanto, El debe ser el UNICO
que SABE la respuesta. ¿No
le parece lógico?
¡Pero, esa revelación no
muestra lo que la mayoría de
nosotros ha asumido, o lo
que se nos ha enseñado
como doctrina!
¿De dónde procedieron todas
estas ideas confusas y
diferentes? ¿Por qué las
iglesias enseñan que usted
tiene un alma inmortal? ¿Enseña la Biblia tal doctrina?
¿Hizo Cristo alguna indicación al respecto? ¿Creyeron
en ello los apóstoles, o la
Iglesia
del
Nuevo
Lo que ES el hombre
pecado es MUERTE: mas la
dádiva de Dios es vida eterna
EN Cristo Jesús Señor
nuestro" (Romanos 6:23).
Ezequiel fué dirigido por el
Espíritu
Santo
cuando
escribió: "...el alma que
pecare, esa morirá" (Ezequiel
18:4 y 20).
La muerte es la ausencia de
la vida, la cesación de la vida
– no la continuación de ésta,
bajo
circunstancias
diferentes. Fíjese en los dos
estados opuestos mencionados en Romanos 6:23.
Dios nos dice que la paga del
pecado es MUERTE, pero,
por el otro lado, ¡la DADIVA
DE DIOS (no algo inherente
que trajo usted al nacer), es
vida eterna en o mediante
Cristo Jesús! Si la vida eterna
es una DADIVA de Dios, y
viene solamente a través de
Cristo, ¿por qué es que los
humanos han asumido que
poseen ya vida eterna en
forma de "alma inmortal"?
Ezequiel dice que "el alma"
que
pecare,
MORIRA.
¡Puesto que el hombre es un
alma, y dado que el hombre
puede morir, y el alma puede
morir, ¡es obvio que el hombre y el alma son una misma
cosa!
La lengua hebrea
comprueba esta verdad
Cuando Dios sopló el aliento
que impartió vida al primer
hombre, éste vino a ser alma
viviente (Génesis 2:7). La
palabra hebrea que en esta
Escritura se emplea por alma,
es nephesh. Nephesh quiere
decir: "una criatura que
respira", es decir, animal o vitalidad,
y
es
también
traducida al español como
"bestia,
cuerpo,
aliento,
criatura,
hombre,
mente
mortal. (Vea el número 5315
de
Strong's
Exhaustive
Concordance.)
¡Nephesh no puede significar,
bajo ninguna circunstancia,
ALGO inmortal, eterno, extrafísico, o que posea otra vida
que no sea temporaria e
inmortal!
Abra su Biblia y lea el primer
capítulo
de
Génesis,
versículo 24, el cual dice: "Y
dijo Dios: produzca la tierra
seres vivientes (NEPHESH)
según su género, bestias y
serpientes y animales de la
tierra según su especie: y fue
así". Aquí la palabra acres, es
la IDENTICA voz hebrea que
se usa a TRAVES DE TODO
el Antiguo Testamento por el
vocablo alma.
Lea los versículos 20 y 21. Allí, la misma palabra nephesh,
se traduce otra vez como
"ánima viviente" y "cosa viva".
Por carecer de espacio, no
podemos reproducir cada uno
de los versículos donde esta
palabra
"nephesh"
es
empleada, pero para unas
cuantas referencias más, lea
Génesis 2:19; 9:10, 12, 15 y
16, donde la voz hebrea
"nephesh" es usada en cada
caso, y traducida como
"animales vivientes" y "alma
viviente".
Nephesh
fue
usada
originalmente en muchos
lugares donde los traductores
emplearon
la
palabra
"persona muerta" o "cuerpo
muerto" (Versión Moderna).
Lea Levítico 21:11: "No
entrará donde haya alguna
persona muerta (NEPHESH),
ni por su padre, o por su
madre se contaminará". ¡A un
nephesh se le llama persona
muerta en esta escritura! En
Números 6:6; 9: 6, 7 y 10;
19:11, 13 y 16, usted puede
encontrar idénticas interpretaciones,
cuando
la
palabra hebrea nephesh es
traducida al castellano como
"PERSONA MUERTA", o
"MUERTO".
El profeta Hageo usó la
misma palabra cuando dijo:
"Si un inmundo a causa de
cuerpo muerto (nephesh)
tocare alguna cosa de éstas,
¿será inmunda? (Hageo 2:
13).
¡Esas escrituras son claras y
precisas, y una absoluta y
conclusiva evidencia de que
la misma palabra traducida
como "alma", donde quiera
que aparece en el Antiguo
Testamento,
es
también
traducida
como
"cuerpo
muerto"!
¿Por
qué
los
hombres no quieren ver ni
encontrar en la inspirada
Palabra de Dios su verdadero
significado?
Con no pocas expresiones de
asombro, algunas personas
al
leer
su
Biblia,
se
encuentran con que muchas
de las tradiciones y suposiciones de los HOMBRES,
¡simplemente no están allí! Y
en cuanto a usted, ¿está
dispuesto a CAMBIAR sus
ideas cuando pueda COMPROBAR la verdad, NO
conforme a las vanas "ideas"
de los hombres, sino con la
simple, clara e inspirada
Palabra de Dios?
¡Usted ha leído ya – tomada
de su propia Biblia – la
PRUEBA de que un alma es
un ANIMAL, un CUERPO, y
que PUEDE MORIR!
3
¿Qué es la vida?
Cuando Dios alentó en la
nariz de Adán soplo de vida,
Él inició el proceso de
oxidación del oxígeno con la
sangre, la cual llevó entonces
el oxígeno a todas partes del
cuerpo, impartiéndole por lo
tanto, vida física animal. ¡La
vida de todo ser humano está
en la corriente sanguínea! Un
soldado herido en el campo
de batalla, lucha por detener
la sangre que fluye de sus
heridas, ¡porque sabe que la
pérdida de SANGRE significa
la PERDIDA DE LA VIDA! Lo
mismo ocurre en cada caso
en que las heridas sangran
abundantemente. Usted ya
sabe, y lo ha sabido toda su
vida, que la pérdida de
sangre causa la muerte –
exactamente como lo dice la
Biblia. Entonces ¿por qué
usted
ciegamente
ha
ASUMIDO en forma diferente
acerca de las ideas vagas,
brumosas y confusas sobre la
"inmortalidad" del alma?
¡Dios le dijo a Noé que la vida
de cualquier animal, o
nephesh
estaba
en
la
SANGRE! "Empero carne con
su vida (heb. nephesh) que
es su sangre, no comeréis"
(Génesis 9:4). Aquí, la
palabra “vida", viene de la
misma voz hebrea nephesh
que es traducida en todos los
demás pasajes como "alma"
o "cuerpo". Continúe leyendo
en el versículo 5, donde la
misma palabra es usada en
lugar
de
la
expresión
castellana
"vidas",
refiriéndose en esta vez a NOE
y a todos los hombres. ¡La
vida del hombre y la vida de
los animales es la misma!
¡Vida MORTAL!
4
"Porque la vida de la carne en
la sangre está... derramará su
sangre, y cubrirála con tierra:
Porque el alma (nephesh) de
TODA carne, su vida, está en
su sangre: por tanto he dicho
a los hijos de Israel: No
comeréis la sangre de
ninguna carne, porque la vida
de TODA carne es su
sangre".
(Lea
Levítico
17:11-14, donde cada palabra
traducida "vida", viene del
vocablo hebreo nephesh y se
indica que ésta es la vida
(sangre) de TODA carne,
incluyendo toda vida animal,
así como humana.)
Moisés dio a los Israelitas la
advertencia de Dios en el
sentido de que no comieran
carne con la sangre aún en
ella, "porque la sangre es el
alma (nephesh); y no has de
comer el alma juntamente
con su carne" (Deut. 12:23).
El alma o sea el hombre, por
lo tanto, se mantiene activa
por la circulación de la sangre
a través de sus venas, la cual
lleva oxígeno vivificante a las
células del cuerpo. Hay
muchas otras referencias
bíblicas donde la palabra
"vida" o "alma" está directamente conectada con la
sangre y la expresión original
es nephesh en todos los
casos. Vea Génesis 19:17,
19; 32:30; 44:30, así como
Éxodo 4:19; 21:23 y 21:30.
¡Cristo derramó su ALMA
por nosotros!
Recuerde que usted ha visto
ya ampliamente comprobado
que la vida o el alma de todo
animal
o
ser
humano,
consiste en la sangre vivificante que está en el
cuerpo.
Para
otra
sorprendente verdad, busque
el capítulo 53 de Isaías. En
esta profecía concerniente al
advenimiento del Mesías
prometido que habría de
morir por el mundo, Dios
demuestra que era el alma de
Cristo la que habría de ser
ofrendada por nosotros.
"Con todo eso, el Eterno
quiso quebrantarlo, sujetándole a padecimiento. Cuando
hubiere puesto su vida
(nephesh) en expiación por el
pecado..." (Isaías 53:10).
¿Cómo
murió
Cristo?
Cualquiera que conozca la
Biblia aún en forma extremadamente casual, sabe que
fue el derramamiento de su
SANGRE lo que le ocasionó
la muerte; no fue su corazón
quebrantado lo que le hizo
morir, como lo afirman
algunos que han propagado
esta "idea" sentimental, pero
falsa. Isaías 52:14 describe la
horrible
AZOTAINA
que
Cristo recibió antes de ser
obligado a arrastrar el
madero en que habría de ser
colgado, hasta el Calvario.
(Lea Mateo 27:26 y I Pedro
1:19.) ¡Cristo murió a causa
de la pérdida de SANGRE
vital! Su sangre fue "vertida"
(Mateo
26:
28)
y
"derramada"... por cuanto
derramó su alma (nephesh)
hasta la muerte, y con los
transgresores fue contado; y
él mismo llevó el pecado de
muchos,
y
por
los
transgresores
intercedió"
(Isaías
53:12,
Versión
Moderna).
¿Se fijó usted?
Cristo Jesús murió, porque
DESANGRO hasta morir – ¡la
Biblia expresamente afirma
que fue su ALMA la que se
derramó! ¡Por supuesto! ¡El
"alma" es la VIDA física y
temporánea del cuerpo humano, la cual puede morir
(Ezequiel 18:4 y 20), puede
ser cortada (Éxodo 31:14), y
ser enviada al sepulcro
(Salmo 30:3).
Nephesh es la palabra usada
para indicar “alma” en el
Antiguo
Testamento;
¡nephesh
NO
PUEDE
significar NUNCA, algo que
tenga relación con la vida
inmortal,
la
cual
es
suministrada por la oxidación
del oxígeno con la sangre!
El sorprendente origen
Puesto que la idea de la inmortalidad del alma no
procedió
del
Antiguo
Testamento, el cual fue la
única
escritura
inspirada
existente hasta mucho tiempo
después de los días de
Cristo, ¿de dónde vino
entonces tal idea?
¡Fué originada por los
GRIEGOS
paganos,
e
introducida a la "cristiandad"
apóstata
y
paganizada,
aproximadamente
DOS
SIGLOS después de Cristo!
Los griegos obtuvieron esta idea de los egipcios, quienes
la propagaron poco después
de la apostasía suscitada en
la torre de Babel.
Heródoto, famoso historiador
griego, que vivió en el siglo
quinto antes de Cristo,
escribió: "Los egipcios fueron
también los PRIMEROS que
afirmaron que el alma del
hombre es inmortal... Esta opinión fué adoptada como
propia por algunos griegos,
en diferentes períodos de
tiempo" (Euterpe, capítulo
123). Sócrates, el pervertido,
quien fué también un famoso
filósofo griego, viajó por
Egipto y consultó a los
egipcios respecto de esta
misma enseñanza. A su
regreso, enseñó este error
pagano a Platón, su más
famoso discípulo. Compare
las enseñanzas que en la
actualidad
imparten
las
iglesias, con lo que Platón
escribió en su libro Fedón: "El
alma
cuyo
inseparable
atributo es la vida, nunca
admitirá el opuesto de la vida,
es decir, la muerte. Así queda
demostrado que el alma es
inmortal, y por lo tanto, indestructible... ¿Creemos que
existe eso que se llama
muerte? Por supuesto. ¿Y no
es ésta sino la separación del
alma y el cuerpo? Morir es
lograr
esa
separación,
cuando el alma existe por sí
misma separada del cuerpo y
el cuerpo se desprende del
alma. Eso es la muerte...
meramente la separación del
alma y el cuerpo". ¡Platón, el
discípulo más íntimamente
relacionado con el pervertido
Sócrates, no creía que la
muerte era realmente la
muerte! Por el contrario, él la
concibió como el acto de
separar el "alma" del cuerpo.
¿Supone usted que las doctrinas de la mayoría de las iglesias modernas, han salido de
la Biblia directamente? ¿Cree
usted que todas las doctrinas
que se nos han enseñado
desde la niñez son las
verdaderas enseñanzas de la
propia revelación de Dios?
¡NO! ¡NO LO SON!
En lugar de seguir la revelación de Jesucristo, las
primeras iglesias apóstatas,
siguieron las enseñanzas de
los paganos.
Los primeros católicos
enseñan que el alma es
MORTAL
La introducción de las
supersticiones paganas en la
"cristiandad" moderna, fué
gradual. Por espacio de DOS
SIGLOS
las
iglesias
apóstatas continuaron enseñando y creyendo que el
alma
era
MORTAL,
exactamente como lo enseño
Cristo.
Uno de los antiguos "Padres"
llamado Justino, quien murió
en el año 165 d. de J.C.,
escribió: "Pero nuestro Señor
Jesucristo, siendo crucificado
y MUERTO, y habiendo
ascendido al cielo, reinó; y
por aquellas cosas que fueron publicadas en su nombre
entre todas las naciones por
los apóstoles, hay gozo
propuesto a aquellos que
esperan la INMORTALIDAD
PROMETIDA POR ÉL" (AnteNicene Fathers, Vol. I, p.
176).
Los primeros católicos sabían
que cuando Jesús murió,
como dice la Biblia, Él estaba
realmente MUERTO, no en
una morada de espíritus.
Ellos sabían también que Él
prometió futura inmortalidad a
los vencedores, no que el
hombre poseía ya un alma inmortal.
La doctrina católica cambió
A fines del siglo dos, una escuela de ciertos individuos
que
profesaban
ser
cristianos, en Alejandría,
Egipto, adoptó el platonismo
además de la Biblia, como su
credo. Uno de sus principales
maestros, Orígenes, escribió:
"las almas son inmortales".
5
Luego continúa hablando de
"los
platonistas,
quienes
creen en la inmortalidad del
alma" (Vol. IV; Págs. 314,
402).
¡Observe
que
esta
enseñanza
procedió
de
Platón, no de la Biblia!
Tertuliano, otro destacado
maestro de la misma época,
escribió: "Porque algunas
cosas son conocidas, aún por
naturaleza: la inmortalidad del
alma,
por
ejemplo,
es
admitida por muchos... Yo
usaré, por lo tanto, LA
OPINION
DE
PLATON,
cuando declara: "Todo alma
es inmortal" (Vol. III, p. 547).
Sin embargo, más tarde, en
el siglo cuarto, algunos
escritores
católicos
y
maestros,
tales
como
Arnobias dijeron de aquellos
que "tenían una extravagante
opinión
de
sí
mismos,
creyendo que las almas son
inmortales... ¿Dejaréis a un
lado vuestra ignorancia habitual, oh hombres que
consideráis a Dios como
vuestro Padre, y afirmáis que
sois inmortales, tal como lo
es El?" (Vol. IV, p. 440).
La verdad fué sumergiéndose
gradualmente
bajo
la
avalancha de paganismo; sin
embargo, hasta cerca del año
1513 d. de J.C., la Iglesia
Católica lanzó un decreto
contra los pocos fieles que
"se atrevieron a afirmar
respecto de la naturaleza del
alma racional, que ésta es
mortal" y dijo que aquellos
deberían ser "castigados
como herejes".
Durante la Reforma, en lugar
de volver a la "fe que ha sido
una vez dada", las iglesias
continuaron en los mismos
errores paganos que han sido
6
perpetuados sobre las ideas
de los hombres.
¿Cuál fué en realidad la
enseñanza de Cristo?
Muchos están firmemente
convencidos de que Jesús
impartió
enseñanzas
relacionadas
con
la
inmortalidad del alma, porque
según ellos, han sabido que
El en realidad inculcó tal
doctrina.
Pero, ¿es eso verdad?
Veamos lo que dice la Biblia.
Durante su ministerio, Jesús
envió a sus discípulos a cierta
misión de entrenamiento y les
dió instrucciones para su
viaje. La sabia que ellos
podrían
encontrarse
con
hombres que aborrecían la
verdad; que tratarían aún de
MATARLOS. Por esta razón,
Cristo dijo: "Y no temáis a los
que matan el cuerpo, mas al
alma no pueden matar: temed
antes a aquel que puede
destruir el alma y el cuerpo
en el Gehenna" (Mateo
10:28). La palabra "infierno"
está impropiamente traducida
al castellano del vocablo
griego Gehenna, mediante el
cual Cristo se refirió al "lago
de fuego" que Dios usará
para destruir a los inicuos.
¡Cristo dijo muy claramente
que el "alma" (psuche en
griego)
puede
ser
DESTRUIDA por el fuego!
Cuando el joven rico vino a
Jesús y le preguntó qué
podría hacer para OBTENER
la vida eterna, Cristo no le
informó que ya la poseía, en
la forma de un alma
"inmortal". Por el contrario, Él
le dijo: "...si quieres entrar en
la vida, GUARDA LOS
MANDAMIENTOS"
(Mateo
19:17).
El texto "áureo" de la Biblia es
una prueba más: "Porque de
tal manera amó Dios al
mundo, que ha dado a su Hijo
unigénito, para que todo
aquel que en Él cree, no se
pierda (PEREZCA) más (sino
que), tenga vida eterna". Aún
este pasaje bíblico tan
frecuentemente
citado,
demuestra que Cristo vino
para que los humanos NO
PERECIERAN, sino que por
el contrario, pudieran entrar
en la vida eterna.
Cristo dijo a los Judíos
cuando le contaron acerca de
los Galileos que fueron
muertos: "No, os digo; antes
si no os arrepintiereis, todos
PERECEREIS
igualmente"
(Lucas 13:3-5).
¿Y Lázaro?
Muchos de los que profesan
ser cristianos creen que las
bases para la doctrina de la
"inmortalidad" del alma se
encuentran en la parábola
pronunciada
por
Cristo
acerca de Lázaro y el Rico.
Pero,
la
mayoría
no
comprende lo que la Biblia
realmente dice en relación
con dicha parábola. Usted se
dará cuenta de que AMBOS,
el mendigo y el hombre rico,
MURIERON (Lucas 16:22).
La falta de espacio, no nos
permite
dar
aquí
una
explicación
amplia
y
detallada, pero usted puede
tenerla si solicita el folleto titulado "Lázaro y el Rico", el
cual le enviaremos a vuelta
de correo.
Muchas
preguntas
sorprendentes
se
precipitarían si la doctrina
acerca de la inmortalidad del
alma fuera verdad. ¿POR
QUE resucitó Cristo a su
amado amigo Lázaro si el
"alma" sale inmediatamente
que la persona expira y se va
en busca de su "galardón
celestial".
¿Por qué, si todo el propósito
de Cristo era SALVAR
NUESTRAS ALMAS, El llamó
a
Lázaro
para
que
VOLVIERA a vivir dentro de
su frágil cuerpo humano,
después de que había estado
experimentando
"celestial
bienaventuranza"
durante
CUATRO
DIAS
COMPLETOS? ¿Tiene eso
sentido? ¿Es lógico?
¡La respuesta es obvia!
Positivamente
Jesús
no
ENSEÑO tal doctrina de la
"inmortalidad del alma". Por el
contrario, El enseñó que el
"alma" está sujeta a perecer
si no se arrepiente, y que
Dios tiene el poder para
CONSUMIRLA en el fuego
del Gehenna, ¡lo cual es la
muerte segunda!
¿Qué enseñó al respecto la
Iglesia primitiva?
¡La principal enseñanza de la
iglesia "primitiva" del Nuevo
Testamento
tenía
como
núcleo central a nuestro
Señor
Jesucristo
y
su
resurrección de entre los
MUERTOS!
Pablo, en su inspirada carta a
los corintios, explicó: "Y si
Cristo es predicado que
resucitó de los muertos,
¿cómo dicen algunos entre
vosotros
que
no
hay
resurrección de muertos?
Porque si no hay resurrección
de muertos, Cristo tampoco
resucitó: Y si Cristo no
resucitó, vana es entonces
nuestra predicación, vana es
también vuestra fe" (I Corintios 15:12-14).
Pero, ¿por qué habría de ser
necesaria una resurrección
del cuerpo si el ALMA estaba
ya en el cielo? La respuesta
es SIMPLE – el Nuevo
Testamento lo comprueba –
¡EL ALMA NO VA AL CIELO,
SINO QUE MUERE Y
DESCIENDE
AL
SEPULCRO!
La única real ESPERANZA
de un Cristiano, según la
enseñanza de la Iglesia
original inspirada, era obtener
la resurrección. Ellos sabían y
entendían que el único
CAMINO para alcanzar la vida eterna, era mediante una
resurrección de entre los
muertos. "A fin de conocerle,
y la virtud de su resurrección,
y la participación de sus
padecimientos,
en
conformidad a su muerte, si
en alguna manera LLEGASE
a la resurrección de los
muertos" (Filipenses 3:10-11).
Pablo explicó repetidas veces
este gran misterio, y predicó
incesantemente
a
los
cristianos gentiles de su
tiempo. Pablo dijo: "Cristo fué
muerto por nuestros pecados"
(I Cor. 15:3), y prosiguió
explicando en el resto del
capítulo 15 de I Corintios, que
los muertos tendrían que ser
resucitados, pues de lo
contrario, toda nuestra fe es
vana (versículos 16-17); que
el hombre físico es terrenal
(versículo 47); ¡y que un
cambio
mediante
una
resurrección, es necesario
antes que tengamos vida
eterna! (versículo 52). El día
de Pentecostés, cuando la
Iglesia fué fundada, Dios inspiró al Apóstol Pedro cuando
dijo: "Varones hermanos, se
os puede libremente decir del
patriarca David, que MURIO,
y fué SEPULTADO, y su
sepulcro está con nosotros
hasta el día de hoy" (Hechos
2:29).
Pedro prosiguió diciendo:
"Porque David no subió a los
cielos..." (versículo 34). ¿Se
fijó usted? David, un hombre
conforme al propio corazón
de Dios, ¡NO estaba arriba en
el cielo!
¡Por supuesto que no! Cristo
nos dice también: "Y nadie
subió al cielo, sino el que
descendió del cielo, el Hijo
del hombre, que está en el
cielo" (Juan 3:13).
¿Cómo se define la palabra
"alma" en el Nuevo
Testamento?
Pero, ¿no hablaron los
apóstoles
del
Nuevo
Testamento acerca de la
"salvación de almas humanas"? preguntarán algunos.
Por ejemplo, leemos que en
los primeros días de la
verdadera Iglesia: "Así que
los que recibieron su palabra,
fueron bautizados: y fueron
añadidas a ellos aquel día
como tres mil personas". La
Versión Moderna lo traduce
así: "Aquellos pues que
recibieron su palabra fueron
bautizados; y se agregaron a
los discípulos en aquel mismo
día como tres mil almas"
(Hechos 2:11).
Pero
recuerde
que
su
Salvador dijo que las almas
pueden ser DESTRUIDAS.
¿Cuál es entonces la respuesta? La simple verdad es
que las almas de que se
habla en dicho pasaje,
indicando
que
se
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arrepintieron y se unieron a la
Iglesia, es meramente la
expresión que en castellano
puede significar "personas" o
"vidas". El griego comprueba
lo anterior.
¿Qué quiere decir "alma"?
¡Aunque le parezca increíble,
no hay ni una sola expresión
en todo el Nuevo Testamento
de la Biblia donde la palabra
"alma" tenga relación alguna
con la inmortalidad, la vida
eterna, o extra-física, algo
opuesto a la vida mortal y
temporánea!
La palabra alma, en griego,
se deriva de "psuche", que
quiere decir "aliento". Dicha
expresión viene de la raíz
"psucho" que es el verbo
griego "respirar", el cual
corresponde exactamente a
la voz hebrea nephesh, que
significa la vida temporaria de
los animales.
Ejemplos bíblicos
Vea un léxico de la Biblia,
para que se entere del uso
que se le da a la palabra
psuche a través del Nuevo
Testamento. Está empleada
dos veces para indicar animales
inferiores,
exactamente como la palabra
hebrea
nephesh
puede
significar la vida de dicha
clase de animales. Para
referencia, puede encontrar
dos escrituras en Apocalipsis
8:9 y 16:3, donde la palabra
es traducida "vida" y, "alma
viviente", cuando se refiere a
la vida de animales inferiores.
Psuche es empleada para
referirse al hombre como
individuo (exactamente como
nosotros hablamos de algún
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barco que naufragó con
determinadas almas a bordo,
o
que
muchas
almas
perdieron la vida en un
accidente
trenístico)
y
aparece 14 veces en el
Nuevo Testamento como
alma. El vocablo psuche,
empleado para designar la
vida del hombre que puede
perderse,
consumirse,
destruirse, salvarse, etc., etc.,
etc., ocurre 58 veces y es
traducida como vida o alma
alternativamente.
¡Habiendo comprobado el
uso de ambas voces tanto en
griego como en hebreo
podemos ver que no hay un
sólo pasaje en toda la Biblia
donde el alma tenga alguna
relación con la inmortalidad!
Un ardid de Satanás
¡Satanás el Diablo, el gran
engañador, que con tanto
éxito ha envuelto a todo el
mundo en falsas doctrinas
como ésta (Apo. 12:9), no
siempre ha usado los mismos
credos para engañar!
¡Para este tiempo, la mayoría
de los hombres cree ya en su
fábula de la inmortalidad del
alma. Por lo tanto, es fácil
para él hacer que sus
demonios y malos espíritus
se disfracen como "las almas
de los que se han ido"! Muchos han oído realmente o
visto,
manifestaciones
supernaturales y extra-físicas,
las cuales han sido la causa
de que esta doctrina pagana
se perpetúe aún más.
Durante los días de Saúl, la
gente no creía en la "inmortalidad" del alma. Por lo tanto,
cuando
Satanás
quería
engañar a alguno, mediante
la supuesta "invocación a los
muertos", usaba el CUERPO
entero en la forma de una
aparición, no simplemente
una voz o golpes secos, los
cuales, según se cree,
representan a los espíritus de
los que han muerto.
Lea en su propia Biblia en I
de Samuel, capítulo 28, el
relato de la visita de Saúl a la
pitonisa de Endor. ¡Este rey
de
Israel
en
su
desesperación, buscó una
mujer que tenía un espíritu
familiar (demonio), en lugar
de acudir a Dios! En vez de
disfrazarse como el alma de
Samuel,
el
espíritu
se
enmascaró como el CUERPO
RESUCITADO de Samuel.
Salomón sabía que el hombre
muere exactamente como
muere la bestia: "Porque el
suceso de los hijos de los
hombres, y el suceso del
animal, el mismo suceso es:
como mueren los unos, así
mueren los otros; y una
misma respiración tienen
todos; ni tiene más el hombre
que la bestia: porque todo es
vanidad" (Ecl. 3:19).
¿Lo leyó usted con sus
propios ojos en su Biblia? ¡La
Sagrada Escritura dice que la
muerte de un hombre es
exactamente como la muerte
de un perro o de un gato!
"Todo va a un LUGAR: todo
es hecho del POLVO, y todo
se tornará en el mismo polvo"
(Ecl. 3:20).
David, bajo la inspiración del
Espíritu de Dios, dijo lo
mismo: "No confíes en... hijo
de hombre, porque no hay en
él salud. Saldrá su espíritu
(aliento,
es
la
palabra
inspirada), tornaráse en su
tierra; en aquel día PERECERAN
sus
pensamientos"
(Salmo 146:3-4). ¡El sentido o
conocimiento perece – no
continúa existiendo en un
lugar diferente!
"¡Porque los que viven
SABEN que han de morir:
mas los muertos nada
saben!" (Ecl. 9:5).
¿Qué entendemos por
Infierno?
Pero usted ha asumido que
los que se hallan en el cielo
pueden oír los agudos gritos,
las danzas, los brincos y las
contorsiones de aquellos que
son torturados con suprema
agonía en el infierno, ¿no es
cierto?
¿En qué pasaje de la Biblia
leyó usted semejante cosa?
Si no ha solicitado el folleto
titulado "Lázaro y el Rico", en
el
cual
se
explica
ampliamente
este
falso
concepto,
hágalo
inmediatamente.
¿Se refirió Jesús alguna vez
al infierno de fuego? ¡Por supuesto que sí! Pero Jesús no
describió un lugar donde los
inicuos van a ser torturados
eternamente. Veamos lo que
El dijo: "E irán éstos al
tormento (castigo es la
palabra original inspirada)
eterno, y los justos a la vida
eterna"
(Mateo
25:46).
Observe que las palabras de
Jesús indican que los inicuos
recibirán un castigo eterno, y
no que van a ser castigados
eternamente, en lo cual hay
gran diferencia. "La paga del
pecado es muerte" (Romanos
6:23) y la muerte, que es la
ausencia de la vida, es por
TODA LA ETERNIDAD. Es
un castigo eterno, porque
permanecerán
MUERTOS
por toda la eternidad, ¡no van
a
continuar
viviendo
torturados en un ficticio
infierno en llamas!
Recuerde la advertencia de
Jesús en el sentido de que
temamos a QUIEN tiene
poder pare DESTRUIR el
alma en el Gehenna de fuego
(Mateo 10:28).
El profeta Malaquías nos da
una descripción de dicho
fuego, cuando dice: "Porque
he aquí, viene el día ardiendo
como un horno; y todos los
soberbios, y todos los que
hacen maldad, serán estopa;
y aquel día que vendrá, los
ABRASARA, ha dicho el
Eterno de los ejércitos, el cual
no les dejará ni raíz ni rama"
(Mal. 4:1). Fíjese: ellos van a
ser abrasados, totalmente
consumidos por el fuego – no
torturados por cierta clase de
fuego que no acaba de quemarlos.
"Mas
vosotros
(hablando a los justos)
hollaréis a los malos, los
cuales serán CENIZA bajo las
plantas de vuestros pies, en
el día que yo hago, ha dicho
el Eterno de los ejércitos"
(Mal. 4:3). ¿Lo entiende usted
ahora? Los inicuos serán
consumidos y sus residuos
serán simplemente cenizas y
vapores que dejará el fuego
que los destruya. ¡Ellos
estarán muertos por toda la
eternidad!
¡Sólo Dios es Eterno!
La
Biblia
dice
que
SOLAMENTE
Dios
tiene
inmortalidad. "Quien sólo
tiene inmortalidad, que habita
en luz inaccesible; a quien
ninguno de los hombres ha
visto ni puede ver: al cual sea
la honra y el imperio
sempiterno. Amén". (I Tim.
6:16.) La palabra "inmor-
talidad"
es
usada
UNICAMENTE
en
SEIS
PASAJES de la Biblia, a
saber: Romanos 2:7: I Cor.
15:53-54; I Tim. 6:16 y II Tim.
1:10.
Estudie
estas
escrituras. ¡En cada caso,
inmortalidad es algo que es
sacado a la luz; que debe ser
obtenido,
que
Dios
SOLAMENTE posee; y en
ningún caso, es algo que sea
ya del dominio del hombre!
El plan de Dios
Cristo proclamó el futuro Reino de Dios que gobernará al
mundo. El dijo a Nicodemo
que el hombre debe NACER
dentro de ese reino, el cual
es también una familia, ¡la
familia de Dios! (Lea el
capítulo 3 de Juan.)
A todo el mensaje del Nuevo
Testamento lo circunda la
enseñanza
del
nuevo
nacimiento dentro de esa
familia que gobernará al
mundo, después de alcanzar
la resurrección. Cristo fué
resucitado y dijo que el
tiempo
vendría
cuando
TODOS los muertos serían
resucitados.
¡Las
ideas
paganas de los hombres,
perpetradas por Satanás, el
archi-engañador del mundo,
han mantenido al hombre
ciego respecto de la sublime
GLORIA que le espera a todo
verdadero creyente! El plan
de Dios se está cumpliendo
cada día que pasa. Su plan
consiste en dar finalmente su
gratuito DON, LA VIDA
ETERNA, a seres humanos,
pecadores, mortales – después de que se hayan
arrepentido de sus pecados y
empezado a guardar las
sabias y perfectas leyes de
9
Dios.
“De cierto, de cierto os digo:
Vendrá hora, y ahora es,
cuando los muertos oirán la
voz del Hijo de Dios: y los
que oyeren vivirán, porque
como el Padre tiene vida en
sí mismo, así dió también al
Hijo que tuviese vida en sí
mismo... No os maravilléis de
esto; porque vendrá hora,
cuando todos los que están
en los sepulcros (no en el
cielo ni en el infierno) oirán su
voz; y los que hicieron bien,
saldrán a resurrección de
VIDA; mas los que hicieron
mal, a resurrección de condenación" (Juan 5:25-29).
¡Usted no tiene alma inmortal!
Usted es carnal, físico,
susceptible de MORIR. La
única manera de vivir por
toda
la
eternidad
es
ARREPENTIRSE; el UNICO
CAMINO
para
vivir
eternamente
es
el
ARREPENTIMIENTO, pues
de
lo
contrario,
usted
finalmente perecerá (Lucas
13:3).
La decisión está en sus
manos – ¡y es una decisión
que tiene que ver con toda
una eternidad! ¡Que Dios le
conceda hacer una sabia
elección!
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Fuente:
Radio Church of God 1962
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