Nuevos retos tecnológicos de la Arquitectura y del Urbanismo Actuales Por Ángel Asenjo Díaz 24 de Octubre de 2.012 Angel Asenjo International S.L. Architecture, Engineering & Urban Planning OBJETIVO de la SOSTENIBILIDAD medioambiental → MÁS con MENOS El Reto Medioambiental Cuestiones de carácter AMBIENTAL Cuestiones de gestión de RECURSOS EMERGENTES Desarrollos época POST-INDUSTRIAL Nuevos planteamientos Disfunciones → NUEVA CIUDAD Desarrollo época POST-MODERNA MEDIOAMBIENTAL Control del Huella Ecológica Acciones de la ECOSISTEMA SOSTENIBILIDAD URBANO URBANO Cierre de los Ciclos (Singularidad) de la Materia y de la Energía SOCIAL SOSTENIBILIDAD URBANA Control del Huella Ecológica Cierre de los Ciclos de la Materia y de la Energía Controlar y Limitar la EXPANSIÓN RECICLAR Materiales Cerrar el CICLO del AGUA Fomentar las ENERGÍAS RENOVABLES Procurar el COMPOSTAJE Ciclo ATMOSFÉRICO Ciclo HIDROLÓGICO Ciclo de los MATERIALES y los RESIDUOS Ciclo ENERGÉTICO Ciudad SANA LA CIUDAD HABITABLE Ciudad SEGURA Indicadores CALIDAD. (Protagonista: El Peatón) (evaluación) Ciudad AMIGABLE Calidad del MEDIO AMBIENTE Calidad del AGUA Calidad del AIRE Indicadores de CALIDAD Calidad ACÚSTICA Seguridad VIAL Calidad de las VIVIENDAS Accesibilidad de ESPACIOS VERDES Estructuras Urbanas EXISTENTES CIUDAD HABITABLE NUEVOS Desarrollos Edificatorios CRITERIOS de EFICIENCIA AREAS AMBIENTALES diseñadas con CRITERIOS de EFICIENCIA En la utilización de AGUAS En el diseño de REDES INFRAESTRUCTURALES En la localización de ZONAS VERDES En la rehabilitación BIOCLIMÁTICA En la potenciación de ENERGÍAS RENOVABLES En la recuperación de ESPACIOS URBANOS degradados Uso Residencial máx. el 60% de la edificación AREA AMBIENTAL ↔ El BARRIO Usos Product. y Dotacionales máx. el 30% de los edificios (Usos variados y espacios diversos) Ordenación Áreas Libres del orden del 50% de la superficie ECOBARRIOS ↔ Desarrollos urbanos con CRITERIOS BIOCLIMÁTICOS ENSEÑANZAS del PASADO / Ahorro energético natural DESARROLLOS RECIENTES DESARROLLOS / Concebidos desde la energía barata URBANOS SOSTENIBLES (Devoradores de Energía ) ACTUALES y FUTUROS DESARROLLOS / Eficiencia Energética (Tradición + Nuevas Tecnologías) (Optimización de consumo) Eficiencia Energética REQUERIMIENTOS AVANCES TECNOLÓGICOS Sistemas de Gestión y Automatización SOCIEDAD ACTUAL (Sociedad del conocimiento) Tecnologías audiovisuales y de la comunicación RETOS ACTUALES ARQUITECTURA Y URBANISMO ↔ INCORPORAR TECNOLOGIAS AVANZADAS DISEÑO ACTUAL Fuerza Naturaleza Innovaciones Tecnológicas NUEVOS DESARROLLOS ACTUACIONES de REHABILITACIÓN CIUDAD HABITABLE Compatibles con SISTEMAS CONSTRUCTIVOS ↕ PROYECTOS ↕ NUEVAS TECNOLOGÍAS Compatibles con la FUNCIONALIDAD Compatibles con la ESTÉTICA La Vivienda Habitable ASOCIACIÓN KNX La Oficina Inteligente La Urbanización Inteligente OBJETIVO → La CIUDAD HABITABLE NUEVOS RETOS TECNOLOGICOS DE LA ARQUITECTURA Y DEL URBANISMO ACTUALES. Norman Foster, en uno de sus escritos recientes, nos dice que existen sólidas pruebas estadísticas, que demuestran las ventajas sociales de aumentar el consumo energético, ya que los países que consumen más energía tienen mayor esperanza de vida, menor mortalidad infantil, una educación más extendida y más libertad política. También nos dice, en el mismo artículo, que el aumento del consumo energético se traduce en una reducción del índice de natalidad, lo que influye en la estabilización del planeta, cuyos recursos, como todos sabemos, son limitados. En principio, desde un punto de vista estrictamente medioambiental, estas afirmaciones pueden ser interpretadas de forma incorrecta y producirnos incluso un cierto rechazo. Pero, si se profundiza en ellas, se concluye en que constituyen un lúcido análisis de la realidad, en la que estamos inmersos, ya que propone luchar por unos objetivos que hemos alcanzado en el mundo desarrollado, a los que no debemos de renunciar, con independencia de que además debamos de plantearnos su globalización. Todos coincidimos, en que la sostenibilidad medioambiental hoy día no es una cuestión de modas, sino una necesidad para la supervivencia de la humanidad, razón por la que alcanzarla debe ser un importante desafío, y también un objetivo en sí misma, pues hay que conseguir más con menos en los nuevos edificios y urbanizaciones que proyectemos, para lo que hemos de proponernos lograr en estos proyectos un balance energético positivo, de forma que además de producir cero carbono y cero residuos lleguen a generar más energía, de la que consumen para su funcionamiento, para que posteriormente se pueda transferir la energía sobrante a la red eléctrica general para compensar otras actuaciones, que necesariamente tengan que ser deficitarias. 1 Alcanzar este objetivo es absolutamente necesario, pues solo desde el modelo de la sostenibilidad medioambiental, nuestra urbanización, es decir, nuestras edificaciones residenciales, terciarias e industriales, podrán resolver los problemas de consumo energético, que actualmente tenemos planteados. En este sentido, y como ejemplo, quiero apuntar, que nuestro país en estos últimos años ha consumido energía en una cuantía del orden de 2GW por millón de habitantes y que, de forma aproximada, las edificaciones residenciales, terciarias e industriales consumen el 60% de la energía que se produce. Cuando a este consumo se le añaden los movimientos de las personas y el transporte de los bienes entre origen y destino, se alcanza un porcentaje próximo al 90 % de la indicada energía y el 10% restante de la misma se consume de forma diversa. Estos datos conforman un cuadro de consumos energéticos, que es insostenible, ya que actualmente los países desarrollados requieren una potencia instalada del orden de 1GW por millón de habitantes y se están planteando el objetivo recortar el consumo energético a la mitad aproximadamente. Es por ello, por lo que, desde la perspectiva de la sostenibilidad, la cuestión fundamental de cualquier edificación, y consecuentemente de cualquier desarrollo urbanístico, es plantearse el reto medioambiental, lo que nos obliga a introducir en estos desarrollos cuestiones de carácter ambiental y también de gestión de recursos energéticos, pues es la única forma de evaluar las consecuencias ambientales de un determinado desarrollo y plantear soluciones más equilibradas con el medio ambiente. Esto solo puede alcanzarse con la incorporación a estos procesos de las tecnologías avanzadas y las energías renovables como forma de aproximarnos a los objetivos del ahorro energético que nuestra sociedad tiene obligatoriamente que plantearse. 2 En los últimos años, en los desarrollos de la urbanización y de la edificación de nuestras ciudades se han apreciado importantes disfunciones, como consecuencia de la extraordinaria expansión habida en las mismas, primero en la época post-industrial y recientemente en la época post-moderna, en las que se ha producido una ocupación del territorio bastante desafortunada y poco controlada, razones por las que actualmente nos vemos obligados a replantearnos estos desarrollos urbanísticos y edificatorios, desde un punto de vista cualitativo y cuantitativo, que necesariamente han de ser objeto de revisión, para que en el futuro nos planteemos de forma distinta el desarrollo de nuestras ciudades. Estos hechos deben de inducir a los arquitectos y urbanistas a proponer nuevos planteamientos urbanísticos y arquitectónicos más sostenibles, lo que, sin lugar a dudas, los ciudadanos deben de demandar, no solo a los políticos, sino también a los profesionales, que obviamente estamos obligados a dar respuestas adecuadas al crecimiento del territorio, diseñando una nueva ciudad, cuyo desarrollo se debe llevar a cabo de forma más equilibrada, en consonancia con el lugar, con su medio físico y con su identidad cultural, como la vía más apropiada para alcanzar una mayor calidad de vida para los ciudadanos. La sostenibilidad, entendida como objetivo, debe de ser considerada como un equilibrio dinámico, como el camino por el que se puede llegar a alcanzar el nuevo modelo de ciudad antes indicado, para lo que se han de articular acciones a medio y largo plazo, a partir de las condiciones intrínsecas de cada lugar, de su medio y de su identidad. La sostenibilidad no es una variable unidimensional, ya que requiere de acciones de mejora de carácter ambiental, urbano y social en la escala global y en el largo plazo, de forma que las generaciones venideras puedan mantener y alcanzar una calidad de vida por todos deseada. 3 La sostenibilidad urbana, en desarrollos urbanísticos y arquitectónicos, requerirá resolver el control de la huella ecológica y el cierre de los ciclos de la materia y la energía, que son los elementos determinantes del ecosistema urbano, que se ha de desarrollar en todo caso apostando por la singularidad, entendida esta como objetivo para conseguir unos mejores desarrollos edificatorios y urbanísticos en el futuro. Desde esta perspectiva los urbanistas debemos de procurar la reducción de la huella ecológica de toda ciudad, para lo que hay que: 1) controlar y limitar la expansión del suelo urbano para desarrollarlo como ciudad compacta; 2) reciclar al máximo toda la materia para usarla como materia prima secundaria; 3) cerrar los ciclos del agua para separar las aguas blancas, grises y negras y su adecuada gestión y depuración; 4) fomentar el uso de energías renovables para la mejor respuesta del funcionamiento energético de las infraestructuras urbanas; y 5) procurar el compostaje de todo residuo vegetal para usarlo como fertilizante natural. Y de igual forma, los urbanistas también debemos de procurar el cierre de los ciclos de la materia y de la energía, que dan lugar a los flujos que discurren por la ciudad como parte del indicado ecosistema urbano. Estos ciclos son: 1) el ciclo atmosférico, cuyo objetivo es disminuir la contaminación atmosférica a través del transporte público y privado, así como de las calefacciones no contaminantes, y además controlar las emisiones industriales y disminuir el efecto de isla térmica a través del incremento de las zonas verdes en áreas centrales de la ciudad; 2) el ciclo hidrológico, cuyo objetivo es reducir las escorrentías superficiales y reservar y reutilizar las aguas de lluvia, además de reciclar las aguas grises para usos apropiados y reducir el consumo de agua potable controlando el regadío de las zonas verdes; 3) el ciclo de las materias y los residuos orgánicos para su tratamiento y gestión, para el 4 compostaje y el biogas, así como los residuos no orgánicos para su separación y clasificación, y por último 4) el ciclo energético, cuyo objetivo es el uso de energías renovables y no contaminantes para todas las actividades urbanas. Para llevar a cabo el control la reducción de la huella ecológica y el control de estos ciclos es necesaria la incorporación de tecnologías avanzadas, pues es la única vía de obtener los resultados necesarios para establecer estrategias correctoras y alcanzar los objetivos propuestos. De esta forma, podemos afirmar que, a partir de estos parámetros de la sostenibilidad urbana, se puede diseñar un medio urbano medioambientalmente más adecuado, o lo que es igual, podremos plantearnos alcanzar la ciudad habitable, que se puede llegar a conseguir llevando a cabo acciones de mejora ambiental, urbana y social, de forma que el protagonista de la ciudad sea el peatón, lo que obligará a adecuar la escala de los recorridos, procurando que las actividades comerciales y de ocio se integren en la red de espacios libres y zonas verdes de la ciudad en cantidad y calidad adecuadas. La ciudad habitable debe ser una ciudad sana, sin contaminación ni residuos, además de segura y amigable, para cuya evaluación se proponen indicadores de la calidad del medio ambiente, tales como la calidad del agua, la calidad del aire, la calidad acústica, la seguridad vial, la calidad de las vivi endas y la accesibilidad a los espacios verdes. Estos indicadores solo podrán ser evaluados con la utilización de las tecnologías indicadas, pues nos permitirá conocer los resultados necesarios para alcanzar la calidad ambiental deseada. 5 La ciudad habitable debe serlo, tanto en la transformación positiva de las estructuras urbanas heredadas del pasado, como en la creación de los nuevos desarrollos edificatorios que, en todo caso, deben ser ordenados a partir de la delimitación de áreas ambientales, en las que se han de establecer criterios de eficiencia, no solo en la utilización de las aguas, en el diseño de redes infraestructurales, y en la localización de las zonas verdes, sino también en la rehabilitación bioclimática, en la potenciación de las instalaciones de energías renovables y en la recuperación de espacios urbanos ambientalmente degradados. Un área ambiental puede ser el barrio, entendido este como lugar donde aparecen usos variados, de forma que el uso residencial alcance un porcentaje máximo del orden del sesenta por ciento, que se ha de combinar con los usos productivos y dotacionales, destinando una parte importante de la superficie de la ordenación a áreas libres, es decir, a zonas verdes, a equipamientos y a la red viaria. El reto actual de la arquitectura y el urbanismo es producir unos mejores desarrollos edificatorios y urbanísticos reduciendo el consumo de la energía y procurando, que esta energía sea lo más limpia posible, pues es la única forma de equilibrar los consumos energéticos en todo el mundo y, a la vez, alcanzar en cualquier lugar del planeta una calidad de vida semejante, a la que actualmente disfruta el mundo desarrollado. Este objetivo solo se puede conseguir con el modelo de desarrollo urbanístico, que hoy día se considera el más apropiado, que es la ciudad compacta y densamente poblada, pues es más sostenible que cualquier modelo de metrópoli dispersa, como demuestran los múltiples estudios urbanísticos realizados en relación a los mismos. Desde esta perspectiva, hemos de reconocer, que la creación de núcleos urbanos, o ciudades, con los criterios y objetivos expuestos, se nos presenta hoy día como una asignatura pendiente, pues realmente estamos creando ciudades totalmente desestructuradas, formadas por conjuntos residenciales, o parques empresariales, o comerciales, localizados según criterios de accesibilidad, o de precio de suelo, en lugar de con criterios de sostenibilidad, y esta conducta debe de ser definitivamente erradicada. En este 6 sentido, es interesante destacar las ordenaciones urbanísticas de reciente aparición en Europa, que han sido denominadas Ecobarrios, que son desarrollos urbanos planteados con criterios bioclimáticos, que constituyen un modelo de búsqueda para resolver las graves disfunciones de la ciudad actual, razón por la que, de alguna forma, se han convertido en el paradigma de los desarrollos urbanos sostenibles y han despertado un gran interés entre los intervinientes en el desarrollo de la ciudad. En todo caso, y con independencia de lo anteriormente indicado, debemos pensar, en que para alcanzar desarrollos urbanos sostenibles, en principio, el diseño de la edificación y del urbanismo, debe de estar basado en las enseñanzas del pasado, las que se puedan obtener del estudio de los edificios y de los espacios históricos, que fueron concebidos antes de que hubiera una energía barata, que es lo que ha permitido transformar artificialmente cualquier lugar o entorno para adaptarlo a un determinado diseño, entre los que podemos englobar a gran parte de los desarrollos edificatorios y urbanísticos de la modernidad reciente, que fueron concebidos por los proyectistas sin plantearse criterios de eficiencia energética, lo que ha dado lugar a desarrollos en muchos casos insostenibles, pues son auténticos devoradores de energía. Es por esto, por lo que los nuevos diseños, aunque se apoyen en las tradiciones pasadas, deben de ser necesariamente concebidos desde el respeto al medio ambiente y desde la aplicación de las tecnologías más avanzadas, conocidas y por conocer, pues es la única forma de optimizar los consumos energéticos, y de alcanzar los estándares de calidad de vida deseados. Estos avances tecnológicos, que permitirán alcanzar los indicados estándares de calidad, deberán resolver no solo aspectos de eficiencia energética y de implantación de sistemas de gestión y automatización, sino que habrán de dar respuesta a todos los requerimientos que pueda exigirnos la actual sociedad del conocimiento, lo que implica resolver también los problemas que nos plantean las tecnologías de la comunicación y audiovisuales, que indudablemente son parte de las formas de vida actuales. 7 La incorporación a la arquitectura y el urbanismo del conjunto de las tecnologías avanzadas anteriormente indicadas constituyen uno de los más importantes retos de la arquitectura y el urbanismo actuales, pues, de una forma u otra, todas ellas tienen que ser contempladas en los correspondientes proyectos arquitectónicos y urbanísticos que redactemos, lo que incidirá de forma necesaria en las edificaciones y urbanizaciones proyectadas, tanto en los aspectos de carácter constructivo como en los de carácter funcional y estético, lo que, en consecuencia, nos obligará a los arquitectos a tenerlas en cuenta y por ello a concebir la arquitectura y el urbanismo desde la consideración de estas tecnologías avanzadas. Hoy día, nos podemos proponer diseñar la arquitectura o el urbanismo a partir de la naturaleza y de las fuerzas naturales, y de esta forma alcanzaremos unos niveles de confortabilidad quizás superiores a los actuales con un consumo energético menor, pero esto no es suficiente, pues para dar respuesta a los requerimientos de la sociedad actual, hay que incorporar en la edificación y en la urbanización todas las innovaciones tecnológicas posibles, como única forma de impulsar la arquitectura y el urbanismo definitivamente hacia el futuro. Esta incorporación de las tecnologías avanzadas se deben de llevar a efecto no solo en las zonas urbanas, sino también en las zonas suburbanas y periurbanas, para que de esta forma se produzca un desarrollo más homogéneo en todo el ámbito de la urbanización, pues es la forma de producir desarrollos más equilibrados, o lo que es igual, medioambientalmente más sostenibles. Esta aplicación de las nuevas tecnologías no solo se debe de plantear en los nuevos desarrollos edificatorios y urbanísticos, sino también en las actuaciones de rehabilitación, entendidas éstas en sentido amplio, tanto en la edificación como en el medio urbano, procurando en ambos casos no solo restituir la arquitectura o el urbanismo a la forma en que se encontraban anteriormente, sino 8 también planteándonos como objetivo complementar los déficit de sostenibilidad, que puedan arrojar tanto las edificaciones como las urbanizaciones a rehabilitar, para adaptarlos a los actuales requerimientos de la sociedad y dar la respuesta adecuada a la calidad de vida exigida por los ciudadanos que habitan estos espacios. De esta forma, podemos afirmar, que para alcanzar los objetivos propuestos en los desarrollos indicados, estos se deben de articular según el modelo antes indicado de la ciudad habitable, para lo que es incuestionable, que la acción del diseñador esté apoyada de forma decidida en las nuevas tecnologías, pues esto nos permitirá conseguir unos estándares deseables de eficiencia energética, para lo que se requerirá implantar los sistemas de gestión y automatización y también incorporar las tecnologías de la comunicación, tal como hemos expuesto. Para ello, los ingenieros y los arquitectos han de colaborar en la búsqueda de respuestas técnicas y tecnológicas para procurar, que la implantación de estas tecnologías innovadoras se realice de forma compatible con los sistemas constructivos y respetando la funcionalidad, tanto de la arquitectura, como de urbanismo. Estas disciplinas para ser sostenibles están abocadas, sin lugar a dudas, a incorporar en los proyectos y consiguientemente en las obras estos avances de carácter tecnológico. En relación a todo lo expuesto anteriormente, queremos decir, que la aportación realizada a la arquitectura y al urbanismo por la Asociación KNX en la implantación de las indicadas tecnologías avanzadas y en la innovación de las mismas, ha sido importantísima, pero pensamos, que más importante es el camino que le queda por recorrer, pues hasta ahora la incorporación de las tecnologías KNX se han centrado principalmente en la búsqueda de la mejora del espacio residencial, las viviendas habitables, o del espacio destinado al trabajo, las oficinas inteligentes, o habitables, o la urbanización inteligente, pero a partir de ahora pensamos, que se debe de optar de forma más decidida por dar respuestas a requerimientos más amplios como son los de la ciudad habitable, es decir, los 9 del conjunto de todos los espacios habitables de la ciudad, con lo que se llevaría a cabo una auténtica aportación al mejor desarrollo de la edificación y de la urbanización, lo que esperamos se produzca lo antes posible gracias a la potencia de las firmas integrantes de esta asociación, pues forman parte de ella las empresas más prestigiadas del mundo en el campo de las tecnologías avanzadas, sobre todo en el campo de la domótica y de la inmótica, donde han cosechado grandes éxitos, hasta el punto de que hoy día la incorporación de estas tecnologías no se cuestionan, ni en el campo de la arquitectura, ni en el del urbanismo, y por ello están llamadas a formar parte de cualquier desarrollo edificatorio o urbanístico con la misma naturalidad, con la que hasta ahora se ha incorporado la electricidad, o la fontanería, o el saneamiento, en cualquier proyecto de esta naturaleza. Los arquitectos y urbanistas pensamos, que es extraordinario el trabajo de normalización y de sistematización realizado, tanto para la edificación, como para la urbanización, por la Asociación KNX para la aplicación de las nuevas tecnologías de la electrónica, pero de igual forma pensamos, que estos trabajos se deberían de ampliar en la medida de lo posible, al campo de la electrotecnia, al de las instalaciones de las nuevas tecnologías de la comunicación y audiovisual, pues es absolutamente necesaria su incorporación de la forma más fácil posible a los proyectos, para que tanto los arquitectos como los urbanistas podamos dar respuestas adecuadas a las demandas de la sociedad actual, razón por la que animamos a esta asociación, a que impulse estas ideas para hacer posible la ciudad habitable, como respuesta a las indicadas demandas. Como conclusión, aunque sea reiterativo, quiero sintetizar lo expuesto, indicando que necesariamente los futuros desarrollos arquitectónicos y urbanísticos de la sociedad del conocimiento deberán estar planteados desde ideas de carácter medioambiental, para lo que se requiere una importante aportación de las nuevas tecnologías, pues para alcanzar los objetivos de sostenibilidad es absolutamente necesario controlar el gasto energético, mediante la implantación de sistemas de gestión, automatización, comunicación y 10 audiovisual, lo que en deberá de plantearse desde el máximo respeto posible al medio ambiente, de forma que todas estas ideas pasen a ser una de las más importantes características de la arquitectura y el urbanismo del futuro, que tendrán que caminar de forma inseparable con estas tecnologías. Y, por último, como Arquitecto interesado en las cuestiones tecnológicas, aunque no versado en ellas, quiero dejar sobre la mesa de este congreso mi deseo, de que la Asociación KXN continúe innovando y avanzando en la búsqueda de las tecnologías más avanzadas, y aunque realmente desconozco el estado actual de estas investigaciones, pienso, que es la mejor forma de posibilitar su más fácil incorporación a la arquitectura y al urbanismo y, en consecuencia, es la forma más adecuada de dar las respuestas requeridas a la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos, que en definitiva es la razón por la que todos debemos de trabajar. Málaga, veinticuatro de octubre de dos mil doce.- 11