RESEÑA DEL AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1088/2008 PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN “FACULTAD DE LOS MINISTROS DE CULTO RELIGIOSO DE HEREDAR DE UN PARTICULAR” RESEÑA DEL AMPARO DIRECTO EN REVISIÓN 1088/2008 PRIMERA SALA DE LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN “FACULTAD DE LOS MINISTROS DE CULTO RELIGIOSO DE HEREDAR DE UN PARTICULAR” Cronista: Licenciado Saúl García Corona. En sesión de miércoles 17 de junio de 2009, la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolvió el amparo directo en revisión 1088/2008, mediante el cual se determinó, bajo una interpretación del antepenúltimo párrafo del artículo 130 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, los casos en que un ministro de Culto religioso puede heredar de un particular. El mencionado recurso de revisión derivó de la demanda de amparo que presentó una persona en contra de la sentencia de 16 de noviembre de 2007, dictada por la Octava Sala del Supremo Tribunal de Justicia en el Estado de Tamaulipas en el toca familiar 295/2007-1, relativo al recurso de apelación interpuesto por una asociación civil, en contra de la sentencia definitiva del 20 de agosto del mismo año, dictada en un juicio de sucesión testamentaria por el Juez Segundo de Primera Instancia de lo Familiar del Cuarto Distrito Judicial en el Estado de Tamaulipas. El origen de este asunto tuvo lugar cuando diversas personas demandaron de una asociación civil la nulidad de la disposición contenida en el testamento público abierto de un particular, en la que se instituyó a dicha asociación como heredera de un bien inmueble. La parte actora en el juicio natural argumentó que la determinación testamentaria mediante la que se hereda un bien inmueble a una asociación civil, se hizo en contravención a lo dispuesto en los artículos -1- 130, antepenúltimo párrafo, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, 1 2435 del Código Civil para el Estado de Tamaulipas 2 y 15 de la Ley de Asociaciones Religiosas, 3 en virtud de que la asociación demandada se encontraba integrada por ministros de culto, quienes están impedidos para adquirir bienes inmuebles por herencia, en términos de los preceptos indicados, por sí o por interpósita persona. Una vez seguido el procedimiento respectivo, el juez de primera instancia determinó procedente la acción mencionada y, en consecuencia, declaró la nulidad del testamento relativo. En contra de esta determinación, la asociación civil demandada interpuso recurso de apelación, del que conoció la Octava Sala del Supremo Tribunal de Justicia en el Estado de Tamaulipas y en el que se resolvió revocar la sentencia primigenia y absolver a la parte demandada de la acción de nulidad hecha valer en su contra. Al no encontrase de acuerdo con la decisión anterior, la parte actora en el juicio natural promovió juicio de amparo directo, el cual fue resuelto por el Primer Tribunal Colegiado en Materias Administrativa y Civil del Décimo Noveno Circuito, mismo que el 5 de junio de 2008 dictó la sentencia correspondiente en la que determinó negar el amparo y la protección de la Justicia Federal, ya que consideró que de lo dispuesto 1 Art. 130.- El principio histórico de la separación del Estado y las iglesias orienta las normas contenidas en el presente artículo. Las iglesias y demás agrupaciones religiosas se sujetarán a la ley. … Los ministros de cultos, sus ascendientes, descendientes, hermanos y cónyuges, así como las asociaciones religiosas a que aquellos pertenezcan, serán incapaces para heredar por testamento, de las personas a quienes los propios ministros hayan dirigido o auxiliado espiritualmente y no tengan parentesco dentro del cuarto grado. 2 ART. 2435.- Los ministros de los cultos no pueden ser herederos por testamento de los ministros del mismo culto o de un particular con quien no tengan parentesco civil o por consanguinidad dentro del cuarto grado. La misma incapacidad tienen los ascendientes o descendientes, cónyuges o hermanos de los ministros o quien viva con éstos en concubinato, respecto al testador a quien los ministros hayan prestado cualquiera clase de auxilios espirituales durante la enfermedad de que hubiere fallecido, así como respecto a la persona de quien hayan sido directores espirituales los mismos ministros, aun cuando la dirección espiritual no la hayan prestado durante la última enfermedad del testador. 3 ARTICULO 15.- Los ministros de culto, sus ascendientes, descendientes, hermanos, cónyuges, así como las asociaciones religiosas a las que aquellos pertenezcan, serán incapaces para heredar por testamento, de las personas a quienes los propios ministros hayan dirigido o auxiliado espiritualmente y no tengan parentesco dentro del cuarto grado, en los términos del artículo 1325 del Código Civil para el Distrito Federal en Materia Común y para toda la República en Materia Federal. -2- en los artículos 130, antepenúltimo párrafo, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, 2435 del Código Civil para el Estado de Tamaulipas y 15 de la Ley de Asociaciones Religiosas, no se desprende que exista alguna prohibición para que una asociación civil, cuya personalidad jurídica es distinta de la de sus miembros, pueda adquirir bienes inmuebles por herencia, aunque sus integrantes sean ministros de culto. Inconforme con este fallo, la parte quejosa interpuso recurso de revisión, el que fue remitido a la Suprema Corte de Justicia de la Nación para su sustanciación, por lo que una vez formado y registrado el expediente, se ordenó remitir los autos a la Primera Sala por corresponder a su especialidad la materia del asunto. La revisión del amparo originalmente fue turnada a la ponencia de la señora Ministra Olga Sánchez Cordero de García Villegas; sin embargo, en sesión de 27 de mayo de 2009, por mayoría de votos se desechó el proyecto presentado, por lo que se volvió a turnar para la elaboración de un nuevo proyecto de resolución a la ponencia del señor Ministro Sergio Armando Valls Hernández. De esta manera, en la sesión celebrada el día 17 de junio de 2009, el señor Ministro Valls Hernández puso a la consideración de los señores Ministros que integran la Primera Sala del más Alto Tribunal del país, su proyecto de sentencia, en el que proponía como puntos resolutivos, confirmar la sentencia recurrida y no amparar a los quejosos. En las consideraciones expuestas en la consulta presentada, se señaló en primer lugar que el estudio para la resolución del asunto se constreñiría a la interpretación constitucional del antepenúltimo párrafo del artículo 130 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, con el fin de determinar si la prohibición a heredar prevista en tal precepto resultaba o no aplicable a los sacerdotes respecto de aquellos con quienes no tengan un parentesco dentro del cuarto grado, -3- así como si dicha prohibición era aplicable a las asociaciones civiles integradas por ministros de culto. En ese orden y después de realizar un análisis a lo dispuesto en el aludido precepto constitucional, así como a lo establecido en los artículos 15 de la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público y 2435 del Código Civil para el Estado de Tamaulipas, en el proyecto se concluyó que los ministros de culto, sus ascendientes, descendientes, hermanos y cónyuges, así como las asociaciones religiosas a que aquéllos pertenezcan, serán incapaces para heredar por testamento, de las personas a quienes los propios ministros hayan dirigido o auxiliado espiritualmente y no tengan parentesco dentro del cuarto grado, con lo que quedaba claro que las normas constitucional y legal tienen como finalidad impedir que los sujetos enunciados hereden en ciertas condiciones. Posteriormente, en el proyecto presentado se realizó un estudio a lo establecido en la exposición de motivos de la reforma al artículo 130 de la Constitución Federal, publicada en el Diario Oficial de la Federación el 28 de enero de 1992, mediante lo cual se pudo colegir que el constituyente consideró necesario reconocer el derecho tanto de los ministros de culto como de las asociaciones religiosas para heredar por testamento. De acuerdo con dichas reformas, los sujetos antes mencionados pueden libremente heredar por testamento de aquéllos con quienes tuvieran una relación de parentesco dentro del cuarto grado, así como de cualquier otro particular, no emparentado dentro de dicho grado, con la salvedad de que no se trate de las personas a quienes hayan prestado auxilio espiritual. De igual modo, se concluyó que la prohibición se extendió a los ascendientes, descendientes, hermanos y cónyuges, así como a las -4- asociaciones religiosas a que pertenezcan los ministros de culto que hayan prestado el referido auxilio espiritual. En otro aspecto y para la correcta interpretación constitucional, se precisó que por ministro de culto debía entenderse a aquella persona a quien su propia iglesia o asociación le confiere las atribuciones de dirección y auxilio religioso de sus fieles, bajo la premisa de que lo primero, esto es, “dirección”, significa aconsejar en asuntos de conciencia a una persona y lo segundo, es decir, “auxilio religioso”, se refiere a la asistencia personal al moribundo en asuntos de fe, así fuere única, esporádica o permanente, por lo que no debe considerarse ministro a quien dirija o represente jurídicamente a un Iglesia o agrupación religiosa o a quien realice otras funciones religiosas. 4 De igual modo, se especificó que de conformidad con lo dispuesto en el artículo 130 Constitucional, inciso a), 5 las asociaciones religiosas son única y exclusivamente las iglesias y agrupaciones religiosas que obtengan su registro como tales, en términos de la ley reglamentaria, y cuyo objeto y finalidad sea justamente la propagación de su fe y la ministración de los ritos relativos. Por otro lado, se especificó que una asociación civil es una persona jurídica con patrimonio y personalidad jurídica propios, cuyo origen es el contrato por el que varios individuos consienten en reunirse de forma no transitoria para conseguir un fin común no prohibido por la ley y no preponderantemente económico. 6 4 Artículo 12 de la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público: ARTÍCULO 12. Para los efectos de esta Ley, se consideran ministros de culto a todas aquellas personas mayores de edad a quienes las asociaciones religiosas a que pertenezcan confieran ese carácter. Las asociaciones religiosas deberán notificar a la Secretaría de Gobernación su decisión al respecto. En caso de que las asociaciones religiosas omitan esa notificación, o en tratándose de iglesias o agrupaciones religiosas, se tendrán como ministros de culto a quienes ejerzan en ellas como principal ocupación, funciones de dirección, representación u organización”. 5 Art. 130.-… Corresponde exclusivamente al Congreso de la Unión legislar en materia de culto público y de iglesias y agrupaciones religiosas. La ley reglamentaria respectiva, que será de orden público, desarrollará y concretará las disposiciones siguientes: a) Las iglesias y las agrupaciones religiosas tendrán personalidad jurídica como asociaciones religiosas una vez que obtengan su correspondiente registro. La ley regulará dichas asociaciones y determinará las condiciones y requisitos para el registro constitutivo de las mismas; 6 Lo anterior de conformidad a lo establecido en el Código Civil para el Estado de Tamaulipas: -5- Por todos estos motivos fue que se determinó en el proyecto presentado por el señor Ministro ponente que resultaba infundado el agravio en el que la parte quejosa planteaba que conforme al antepenúltimo párrafo del artículo 130 constitucional, las personas que predican el culto público no pueden adquirir bienes por herencia de personas con las que no tengan parentesco dentro del cuatro grado, y que a través de la creación de la asociación civil se pretende hacer lo que las leyes prohíben a sus miembros en razón de la actividad que desarrollan, pues de acuerdo con la interpretación constitucional antes relatada en cuanto aludido precepto constitucional, un ministro de culto sí puede heredar de un particular con quien no guarde algún parentesco, siempre y cuando no haya prestado auxilio espiritual al autor del testamento, entendido esto último al momento de la muerte. En virtud de lo anterior, se concluyó que una asociación civil sí puede heredar de un particular, toda vez que la prohibición sólo incumbe a las asociaciones religiosas, que son un tipo de persona moral diferente de la civil, siempre y cuando uno de sus miembros no haya prestado auxilio espiritual al autor del testamento. Por último, en la consulta presentada por el señor Ministro Sergio Armando Valls Hernández, se precisó que la conclusión a la que se arribó no significaba transgredir el espíritu de la Constitución General, toda vez que cuando se habla de prohibiciones, la interpretación debe adecuarse al texto expreso de dicho ordenamiento, por lo que tampoco significaba consentir fraudes a la ley, ya que un bien o una masa hereditaria pueden ser perfectamente heredados a una asociación civil en la que uno o más socios sean ministros de culto, pero deben ser destinados a un fin lícito, pues de no ser así se seguirían las ART. 1996.- Cuando varios individuos convinieren en reunirse, de manera que no sea enteramente transitoria, para realizar un fin común que no está prohibido por la ley y que no tenga carácter preponderantemente económico, constituyen una asociación civil con patrimonio y personalidad jurídica propia. -6- consecuencias legales (civiles, penales y de otra índole) que correspondan. Las consideraciones anteriores fueron aprobadas por mayoría de tres votos de los señores Ministros José de Jesús Gudiño Pelayo, Juan N. Silva Meza y ponente Sergio A. Valls Hernández, por lo que el asunto se resolvió en los términos propuestos. La señora Ministra Olga Sánchez Cordero y el señor Ministro José Ramón Cossío Díaz votaron en contra de la propuesta presentada y manifestaron su intención de formular, en los respectivos votos particulares, los razonamientos por los cuales no se encontraban de acuerdo. De esta manera, en su voto particular la señora Ministra Sánchez Cordero señaló que en su opinión los agravios formulados por el recurrente resultaban fundados, pues se advertía que de lo que realmente se dolía el quejoso no era de la forma en que estaba constituida la asociación civil demandada, ni si sus fines eran o no lícitos, sino de que la misma estaba integrada por sacerdotes que practican el culto y, por lo tanto, estaban sujetos a la prohibición estipulada en el artículo 130 de la Ley Fundamental. En consecuencia, consideraba que para la resolución del asunto se debió determinar si con base en lo dispuesto por el aludido precepto constitucional y de acuerdo a lo expresado por las partes en sus respectivas acciones y excepciones, tomando en consideración el material probatorio que al efecto hubieren aportado en autos, se acreditaba la prohibición de que se trata y, por ende, resultaba nulo el testamento otorgado a favor de la referida asociación civil. Por su parte, el señor Ministro Cossío Díaz argumentó en su voto particular que se encontraba en contra del fallo adoptado por la mayoría, en virtud de que la conducta prohibida por el artículo 130 de la -7- Constitución General no es simplemente que ciertas personas hereden, sino que está referida a que los ministros de culto, o las personas determinadas por la norma, se beneficien patrimonialmente por medio del testamento de una persona a la cual auxiliaron o dirigieron espiritualmente. Por tal motivo, consideró que lo único que se debe hacer es comprobar que el sujeto del testamento es ministro de culto y auxilió o dirigió espiritualmente al testador, por lo que si se actualizan estos supuestos, es claro que se sigue la consecuencia jurídica, la nulidad de la cláusula testamentaria. Asimismo, precisó que desde su punto de vista la interpretación que se debe dar a la prohibición constitucional no debe quedarse sólo en el ministro de culto, sus parientes directos (ascendientes, descendientes, hermanos y cónyuges), o las asociaciones religiosas de las que sean miembros, sino que debe extenderse a cualquier otra sociedad o asociación a la que pertenezcan, puesto que el espíritu de la norma es que por ningún motivo dichas personas puedan heredar, ya que de lo contrario sería muy fácil evadir la prohibición constitucional, como sucedió en el juicio de garantías resuelto por la mayoría, toda vez que los ministros de culto que auxiliaron espiritualmente a la de cujus sí van a heredar, violando la prohibición constitucional, pues lo hicieron de manera indirecta, es decir, a través de una persona moral que no está expresamente comprendida en el texto del artículo 130 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. -8-