A.I085.L.XLIX ACEROS ZAPLA SI EJECUCIÓN FISCAL suprem a C o r t e: -ILa Sala A de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Penal Económico confirmó la decisión de la instancia anterior, que hizo lugar a la excepción de inhabilidad de título interpuesta por Aceros Zapla SA en el marco de la ejecución fiscal promovida por Estado Nacional a fin de obtener el cobro de una multa impuesta mediante la resolución 19/2011 de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (en adelante, CNDC). El título cuya ejecución se pretende se remonta al procedimiento iniciado por la CNDC con el objeto de realizar un seguímiento del precio del hierro redondo en el mercado interno a efectos de corroborar su comportamiento respecto de las cotizaciones internacionales. En el marco de esa investigación, y sobre la base de las atribuciones conferidas por los artículos 24, 50 Y 58 de la ley 25.156, la Comisión requírió a la ejecutada cierta información detallada sobre las ventas mensuales de la compañía. Frente al incumplimiento de lo requerido, dictó la resolución 19/2011 en la que impuso la multa a Aceros Zapla S.A. Ese acto fue consentido por la empresa en sede administrativa y, por lo tanto, adquírió firmeza. Promovida la ejecución, la demandada opuso excepción de inhabilidad de título. Planteó que no incumplió el requerimiento de información y sostuvo que la CNDC es incompetente para imponer sanciones (fs. 61/64). El Juzgado Nacional en lo Penal Económico N° 4 hizo lugar a la excepción (fs. 76/80), decisión que fue confirmada por el a quo. En lo sustancial, el tribunal entendió, sobre la base de lo dispuesto en los artículos 499 y 980 del Código Civil, que carece de fuerza ejecutiva el título que no corresponde a una obligación que tenga causa suficiente. Puntualizó que no tiene validez como instrumento público el acto otorgado fuera de los límites de las atribuciones del oficial público del que emana (fs. 115). 1 -II- Disconforme con esta decisión, el Estado Nacional dedujo recurso extraordinario (fs. 123/139), que fue desestimado por ausencia de sentencia definitiva (fs. 166), lo que motivó la presentación en queja (fs. 40/44 del cuaderno respectivo). Sostiene el recurrente, por un lado, que la sentencia es arbitraria porque se aparta de las constancias de la causa al soslayar que la resolución 19/11 se encuentra firme y consentida por no haber sido objeto de impugnación en el término oportuno por la sancionada. Asimismo indica que en el proceso de ejecución es inadmisible todo debate sobre la causa de la obligación y solo puede discutirse la excepción de inhabilidad de título ante la presencia de defectos extrinsecos del documento. Por otro lado, alega subsidiariamente que en el caso se interpretaron en forma incorrecta los artículos 24, 50 Y 58 de la ley 25.156, que es de naturaleza federal. Más específicamente, destaca que el artículo 58 establece que las causas en trámite a la fecha de entrada en vigencia de la ley 25.156 continuarán tramitando de acuerdo con sus disposiciones ante el órgano de aplicación de la ley 22.262, que subsistirá hasta la puesta en funcionamiento del Tribunal Nacional de Defensa de la Competencia. En este marco, recuerda que la derogada ley 22.262 establecía un sistema dual en virtud del cual la CNDC se encontraba facultada para decidir sobre la instrucción de las causas, entre otras materias que le competen. -III- A mi modo de ver, el recurso extraordinario intentado es formalmente admisible y fue incorrectamente denegado. Ello ya que, aun cuando la decisión que admitió la defensa de inhabilidad de título opuesta por la ejecutada no reviste ---en principio-- el carácter de definitiva, se configura un supuesto de gravedad institucional que toma procedente la queja, ya que la cuestión en debate puede afectar las facultades otorgadas a un organismo estatal (conf. dictamen de esta Procuración del 6 de diciembre de 2013 en la causa A.752, L.XLIV "ATVC y otros cl Estado Nacional-Mo de -2- A.I085.L.XLIX ACEROS ZAPLA SI EJECUCIÓN FISCAL Planificación y otros" y sus citas). A su vez, el modo en que fue resuelta la cuestión impide toda discusión posterior sobre la percepción de la multa. Por otra parte, el recurso resulta también admisible por cuanto se ha puesto en tela de juicio la interpretación los articulo s 24, 50 Y 58 de la ley 25.156, y la decisión apelada ha sido contraria al derecho que el recurrente fundó en ellos (art. 14, inc. 3 de la ley 48). -IV- Conforme tiene dicho el Tribunal, si el recurso extraordinario tiene dos fundamentos, uno de los cuales es que la sentencia recurrida es arbitraria, corresponde considerar este punto en primer término, pues de existir arbitrariedad no habría sentencia propiamente dicha (Fallos: 312: 1034; 329:3460, 4593 entre otros). Considero que en el caso se da el supuesto de excepción que justifica la aplicación de la doctrina de la arbitrariedad al haberse apartado inequívocamente el a quo de la solución prevista por el legislador (Fallos: 312:888 y 330: 1026). El tribunal al dar curso a la excepción inhabilidad de título con sustento en los articulos 499 y 980 del Código Civil se apartó de las reglas que regulan el proceso ejecutivo en el Código Procesal Civil y Comercial de la Nación (arts. 544, 604 y 605), aplicable al caso en atención a lo dispuesto por el artículo 56 de la ley 25.156 (texto entonces vigente). En efecto, el artículo 544, inciso 4, límita el planteo de la excepción de inhabilidad de título al estudio de las formas extrinsecas del título, sin que pueda discutirse mediante aquélla la legitímidad de la causa de la obligación. En ese marco, resulta ímprocedente la pretensión de Aceros Zapla S.A. de discutir en el marco de un proceso ejecutivo las atribuciones conferidas por los artículos 24, 50 y 58 de la ley 25.156 a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia para actuar en el marco de la investigación que inició. En efecto, las defensas opuestas por la ejecutada para cuestionar la procedencia de la ejecución no aluden a un vicio extrinseco del título sino a una discrepancia en la interpretación de la ley, cuyo 3 tratamiento excede el limitado ámbito de conocimiento de esta clase de procesos (Fallos: 311 :1199; 329:4379). -vA todo evento, sin peJjuicio de lo señalado en el punto anterior --que bastaria para hacer lugar al recurso-- cabe señalar que en cuanto a la interpretación de los artículos 24, 50 Y 58 de la ley 25.156 los agravios de la recurrente encuentran respuesta en mi dictamen de fecha 12 de junio de 2014 en la causa M.377, L. XLIX, "Mafinsa SA s/ Apelación Resolución Comisión Nacional de Defensa de la Competencia", a cuyos términos me remito en lo pertinente por razones de brevedad. -VIEn virtud de ello, considero que corresponde hacer lugar a la queja, admitir el recurso extraordinario y revocar la sentencia apelada. Buenos Aires, 1Zde febrero de 2015. ES COPIA IRMA ADRIANA GARCÍA NETTO -4-