PROPOSICIÓN CON PUNTO DE ACUERDO POR EL QUE SE LAMENTAN LOS HECHOS SUCEDIDOS EL JUEVES 28 DE ABRIL DE AÑO EN CURSO, EN LOS CUALES SE OBSTACULIZÓ EL PASO A UN VEHÍCULO DE EMERGENCIA QUE TRANSPORTABA A DOS MENORES DE EDAD PARA SER ATENDIDOS POR INTOXICACIÓN AL HOSPITAL DE LAS CULTURAS DE SAN CRISTÓBAL DE LAS CASAS EN EL ESTADO DE CHIAPAS. DEL SEN. JESÚS CASILLAS ROMERO, DEL GRUPO PARLAMENTARIO DEL PARTIDO REVOLUCIONARIO INSTITUCIONAL El suscrito, Senador JESÚS CASILLAS ROMERO, con fundamento en los artículos 8 numeral 1 fracción II y 276 del Reglamento del Senado de la República, someto a la consideración de esta honorable Comisión Permanente la siguiente proposición con Punto de Acuerdo que lamenta los hechos sucedidos el pasado jueves 28 de abril, en los cuales se obstaculizó el paso a un vehículo de emergencia que transportaba a dos menores de edad para ser atendidos por intoxicación al hospital de las Culturas de San Cristóbal de las Casas en el estado de Chiapas; lo anterior al tenor de las siguientes: CONSIDERACIONES Hemos dicho hasta el cansancio que la movilidad urbana es un elemento indispensable para la calidad de vida digna de toda persona. Constituye una condición básica para llevar una vida libre y autónoma, y como tal, un derecho fundamental que todos los ciudadanos deben tener garantizado. Sin embargo, a veces la capacidad de desplazamiento es más que eso. Constituye la diferencia entre la vida y la muerte, cuando esa necesidad de desplazamiento conlleva una emergencia. Esta reflexión, muy a colación de los lamentables hechos sucedidos la semana pasada en Chiapas. Me refiero a los hechos en los que dos niños murieron luego de que un grupo de manifestantes de “el Chañal”, en Chiapas, impidiera el paso de la ambulancia que los trasladaba al hospital para ser atendidos por una intoxicación. Los menores eran atendidos por ingerir medicamentos caducos y trasladados del Chañal a San Cristóbal de las Casas. Según testigos, los manifestantes golpearon la unidad de emergencia, rompieron vidrios, por lo que los padres de los niños bajaron y caminaron varios metros hasta que el conductor de un automóvil se ofreció a llevarlos al hospital donde perdieron la vida. Unas 30 personas mantenían un bloqueo desde el miércoles pasado y de acuerdo con indagatorias de la procuraduría estatal, dos menores indígenas resultaron intoxicados, por lo que su padre los internó en un hospital del municipio de El Chañal, en el Estado de Chiapas. Después fueron canalizados al hospital de las Culturas de San Cristóbal de las Casas, por lo que fueron movilizados en una ambulancia. El vehículo fue retenido a la altura del Poblado de San Antonio del Monte II, por esas 30 personas que protestaban contra las autoridades municipales. Los padres suplicaron ayuda a los manifestantes, pero no lo consiguieron, por lo que tuvieron que pedir ayuda y trasladar a los menores en un vehículo particular. Sin embargo se perdió tiempo valioso que culminó en la muerte de los dos menores de 7 y 10 años de edad respectivamente. La ambulancia fue dañada por los manifestantes que a pedradas rompieron los cristales y dañaron la carrocería. La intoxicación se originó cuando los menores ingirieron el contenido de ampolletas de penicilina que encontraron en un basurero donde jugaban. Duelo de derechos, inconciencia, necedad. Es una amalgama de varios de estos conceptos, en los que bajo la cortina del ejercicio de un derecho legítimo, la cobardía y rabia de la gente se volcó sobre quienes menos la debían. Dos pequeños en estado grave, a quienes les impidieron el acceso oportuno a la atención médica y perdieron la vida. Derecho a la libre manifestación, derecho a la salud, derecho a al libre tránsito y a la movilidad se conjugaron, para ser abrumados por la cerrazón de quienes consideraron que el derecho que supuestamente ejercían era superior a cualquier otro. Ahora son cómplices o coadyuvantes de homicidio. Y es que no se trata de una disyuntiva ni debate de cual derecho debe prevalecer sobre otro, es claro que el derecho a la salud y a la vida está por encima de cualquier cosa. Aquí no se está en juego ni en dilema de prelación, mucho menos de ponderación de derechos. Aquí el derecho a la protesta fue interpretado de manera sesgada. De manifestación pacífica pasó a ser una turba cerrada de razón que ayudó a que dos personitas con toda una vida por delante la perdieran. Se trata de un evento que debe llamarnos a la reflexión y adentrarnos en la regulación del derecho a la libre manifestación, que como regla y premisa básica debe considerar la salvaguarda del derecho a la movilidad y más en caso de emergencia. Ahora tenemos la evolución de una eventual manifestación, a lamentables hechos de muerte que desde esta tribuna condenamos y esperamos no queden en la impunidad, como así lo han sugerido las autoridades locales. No entraré en ponderación de derechos, la situación es más que clara y no admite debate para ello. Pero se hace necesario que poco a poco se emitan reglas que delineen donde empieza y termina un derecho para comenzar el del otro. De inicio, es necesario que estos hechos no queden en la impunidad. También, que no invadan ni envuelvan lastimosamente el derecho a la libre manifestación. Es necesario delimitar que ésta no se sujeta omnipotentemente al interés que la origina. Esta soberanía lamenta tan horribles acontecimientos, apela a la aplicación de la ley y se omita toda posibilidad de impunidad. Después de ello, reflexione sobre la necesidad de entrar a reglamentar el derecho a la libre manifestación, a efecto de evitar concepciones equívocas sobre su ejercicio. En mérito de lo anterior, me permito poner a la consideración de esta honorable Asamblea la siguiente proposición con punto de… ACUERDO PRIMERO.-La Comisión Permanente del honorable Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, lamenta los hechos sucedidos el pasado jueves 28 de abril, en el cual se obstaculizó el paso a un vehículo de emergencia que transportaba a dos menores de edad para ser atendidos por intoxicación al hospital de las Culturas de San Cristóbal de las Casas en el estado de Chiapas. SEGUNDO: La Comisión Permanente del honorable Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, hace patente su preocupación por los excesos en el ejercicio del derecho a la libre manifestación y hace un llamado a la conciencia para que este tipo de incidentes no se repita; apelando a la reflexión sobre la necesidad de reglamentación al derecho de protesta a efecto de que no se inmiscuya en conflicto con otros derechos, como lo es para el caso en cuestión, el de la vida y la salud, como el de la necesidad de desplazamiento de las personas. TERCERO: La Comisión Permanente del honorable Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, exhorta a las autoridades del Estado de Chiapas, para que los lamentables hechos del pasado jueves 28 de abril no queden en la impunidad y se castigue a los responsables. Atentamente Dado en la Ciudad de México, a los 3 días del mes de mayo de 2016 SENADOR JESÚS CASILLAS ROMERO