Amenaza latente Hugo Rico Bautista Reconociendo al enemigo El desarrollo de algunos avances tecnológicos ha permitido vivir de manera más confortable. Sin embargo, los costos que significa para el medio ambiente natural mantener el nivel de vida sobre todo de las sociedades industrializadas, tiene un impacto incuantificable sobre el planeta. La extracción de materias primas y los desechos de las actividades urbanas, industriales y agrícolas han dañado ecosistemas enteros y alteran la vida globalmente, uno de los problemas que todo esto acarrea son los contaminantes emergentes. En este artículo plantearé cómo todos y cada uno de nosotros contribuimos en la producción de esta contaminación silenciosa de forma continua y que representa una amenaza latente si el tema no es tratado con seriedad para tratar de remediar su efecto nocivo para el planeta. Existen numerosos grupos alrededor del mundo que se dedican a investigar y tratar de solucionar el problema de los contaminantes emergentes. En México están algunos de ellos que se dedican a detectar, Amenaza latente / CIENCIORAMA 1 observar y estudiar los daños a nivel local para proponer alternativas. Por esto espero causar con estas líneas el mismo interés que pones como cuando estás viendo un capítulo más de Juego de Tronos, el inicio de los Juegos Olímpicos o una pelea de El Canelo… Bueno, siendo realista, la atención no será la misma, de cualquier forma lo que pretendo es crear conciencia acerca de cómo afectan nuestras actividades diarias al entorno y en qué medida podemos modificarlas para tener un mundo más saludable. ¿Y tú cuánto aportas a la contaminación emergente? El pronóstico para el año 2000 era que el mundo se iba a acabar, pero para nuestra fortuna ¡no fue así!, la vida continuó como de costumbre: muchos niños siguen asistiendo a la escuela después de bañarse, desayunar y lavarse los dientes, muchas mujeres se maquillan con prisa mientras se dirigen al trabajo, muchas personas siguen fumando y los enfermos tomando sus medicamentos. Pocos se preguntan después de muchos años de hacer estas rutinas dos o tres veces al día, ¿qué pasa con el jabón con el que te lavas las manos antes de ir a comer o con el maquillaje, el gel, los tintes, la crema corporal, los fármacos y todos los productos que utilizamos de manera constante? La respuesta no es sencilla debido a la gran cantidad de consumibles utilizados, entre los que destacan productos de uso personal, por ejemplo fármacos, tensoactivos, plastificantes, productos de uso industrial y los destinados a la agricultura, entre otros. A gran parte de estos productos se les conoce como contaminantes emergentes y muchos de ellos tienen como destino final las aguas residuales; sin embargo, también se encuentran en menor proporción en el aire y en el suelo, su presencia en el medio ambiente no es natural, pues son generados por las actividades humanas. En general podríamos decir que los contaminantes emergentes son los que no tienen una regulación legal; no se tiene información sobre los posibles daños que ocasionan a Amenaza latente / CIENCIORAMA 2 la salud humana o ambiental y no suelen estar presentes en una alta concentración. Aunque muchos de ellos son removidos o tratados en las aguas residuales, su continua introducción en el ambiente puede ser un factor de riesgo toxicológico para los humanos, la flora y la fauna silvestre. Los contaminantes emergentes no son nuevos y la lista se incrementa día con día, pero fue hasta hace poco tiempo que con métodos analíticos modernos se logró detectar en el ambiente una nueva serie de compuestos que se utilizan con regularidad en las actividades humanas. Las investigaciones están dirigidas principalmente al análisis de cuerpos de aguas superficiales, residuales y potables. Sin embargo, hay algunos ejemplos de estos contaminantes localizados en el suelo, y que podrían entrar a la cadena alimenticia, por ejemplo fármacos como la carbamacepina indicada como antiepiléptico y la sulfametazina indicada como antibacteriano; ambas pueden migrar desde la matriz del suelo hasta los componentes aéreos de una planta. En un estudio realizado en la Universidad de Umeá en Suecia, también se detectó una gran variedad de antibióticos, como ofloxacina, ciprofloxacina, trimetoprima y doxiciclina en el suelo en cantidades pequeñas del orden de miligramos. Pero la cosa no queda ahí, en el Reino Unido en un estudio realizado en 2010 por la Agencia de Investigación de Alimentos y Medio Ambiente, se detectaron derivados de plaguicidas en aguas subterráneas, éstos se formaron a partir de compuestos como el DTT, el heptacloro y la atrazina; estas tres sustancias pertenecen a la lista de las sustancias tóxicas más utilizadas en el mundo. También en Pakistán se observó que residuos de diclofenaco, un antiinflamatorio, causaron la disminución de la población de buitres, debido a que les provocaba daños renales y gota visceral. Otro caso más fue el reportado en Winnipeg, Canadá, donde se observó que pequeñas cantidades de estrógenos, como el estrógeno sintético 17-etinilestradiol utilizado como anticonceptivo, causa la feminización de la familia de peces Pimephales promelas, aun a bajas concentraciones de 5-6 ng/L, causando Amenaza latente / CIENCIORAMA 3 un desequilibrio en la población de esta especie que podría llevarla a la extinción. Como vimos, los fármacos diseñados para humanos pueden causar problemas en otras especies, y los diseñados para animales podrían afectar diversas especies, incluyendo la humana, y ni hablar de los fármacos que usamos día a día y que pueden tener consecuencias dentro de nosotros mismos, ya que están diseñados para actuar sólo en ciertos tejidos, lo cual podría dañar otros órganos o crear resistencia a diferentes enfermedades para las cuales están diseñados y dejar de funcionar. ¿Y tú con cuál contribuyes más? En el agua clara que brota en la fuente… Muchos contaminantes emergentes tienen como destino final las aguas de ríos, lagunas, etc., y aunque gran parte de ellos se controlan con diversos métodos que garantizan la pureza y la calidad del agua que entra en las plantas purificadoras, se han encontrado algunos en los afluentes de las aguas residuales que ya han atravesado estos procesos. En este texto centraremos nuestra atención en algunos fármacos y compuestos químicos utilizados en el cuidado personal, que se piensa podrían tener efectos nocivos sobre el ser humano al acumularse en cuerpos de agua que éste consume. En las aguas residuales hay contaminantes macroscópicos como botellas y bolsas de plástico, madera, papel, cartón y microscópicos como compuestos químicos. Entre ellos algunos de los más peligrosos son los derivados de los halógenos, es decir, todos los que en su estructura química tienen al menos un átomo de cloro, bromo, flúor o yodo, como el DTT, el aldrín, el endosulfran y el endrín utilizados principalmente como insecticidas, y también los derivados del fenol, como el nonil fenol usado en una gran cantidad de detergentes –la Unión Europea prohibió su uso en 2003 por su impacto al medio ambiente–, los cíclicos aromáticos, como el diquat, un herbicida muy utilizado en medios agrícolas y los derivados Amenaza latente / CIENCIORAMA 4 de todos los anteriores por sus reacciones una vez que se incorporan al medio ambiente, entre muchos otros. Existen también otros contaminantes como la cafeína, la nicotina, los edulcorantes, y también se han encontrado drogas ilícitas como la anfetamina, la cocaína, la heroína, y algunos de sus metabolitos –compuestos derivados de estas sustancias–. Tanto las drogas ilícitas como sus metabolitos son difíciles de remover del agua por los tratamientos convencionales, se necesitan tratamientos avanzados de purificación para removerlos y son caros, lo que implica que muchos de ellos permanecen en aguas superficiales e incluso en el agua potable. Para tener una idea de lo grande y grave que puede ser este problema te cuento que en el 2004, en la revista American Chemical Society se publicó que la lista de sustancias químicas registradas contenía alrededor de 23 millones, claro que no todas son contaminantes, pero la cantidad de sustancias es enorme y en algunos casos no hay información suficiente de sus posibles daños toxicológicos. El tratamiento de aguas residuales es importante para remover los contaminantes de los cuerpos de agua y si esta actividad no se realiza, como es el caso de México donde sólo el 48.5% de aguas residuales generadas reciben tratamiento en una planta de aguas residuales –el resto es vertido nuevamente al suelo o reincorporado a los afluentes de aguas superficiales sin tratamiento previo–, se corre el riesgo de que los contaminantes entren a la cadena alimenticia, o que sean un foco de contaminación para la flora y la fauna silvestre. En general, el tratamiento de las aguas residuales consiste en tres o cuatro procesos, en los que primero se separan residuos sólidos grandes como latas, plásticos, madera, ramas de árbol y llantas por medio de rejillas que les impiden el paso. Posteriormente se separan los sólidos sedimentables y las partículas suspendidas en el agua. Después se aplica un tratamiento para determinar la demanda biológica de oxígeno, que es una medida de la cantidad de materia orgánica que hay en una muestra. Amenaza latente / CIENCIORAMA 5 Éste consiste básicamente en la degradación de materia orgánica por medio de bacterias y protozoarios en presencia de oxígeno para poder llevar a cabo la degradación y formar CO2 y H2O. Para finalizar se lleva a cabo la remoción de contaminantes específicos usualmente tóxicos, como los compuestos con nitrógeno y fósforo. Si es necesario se realiza un tratamiento avanzado que consiste en la remoción total de la materia orgánica y la desinfección del agua por medio de ozonización, osmosis, radiación UV o tratamientos con cloro. Figura 1. Planta de tratamiento de aguas residuales, donde se observan diferentes contenedores donde se llevan a cabo los diferentes procesos de purificación. Normalmente el tratamiento de las aguas residuales es bastante eficiente, sin embargo hoy en día se tienen dudas acerca de la calidad del agua de consumo humano debido a algunas investigaciones donde se comprueba la presencia de algunos contaminantes emergentes. Aunque se registran en cantidades muy pequeñas –los fármacos por ejemplo están por debajo de la dosis terapéutica, la concentración a la cual tienen efecto, por encima de ella puede tener efectos tóxicos–, pueden afectar a poblaciones en riesgo como bebés, mujeres embarazadas o adultos mayores. Amenaza latente / CIENCIORAMA 6 ¡Triclosán, llévelo llévelo… bara bara!. Entre los contaminantes emergentes más recurrentes hay algunos fármacos y compuestos de cuidado personal, particularmente tres: el ibuprofeno indicado como antiinflamatorio, usado comúnmente para los dolores de cabeza, dentales y musculares, el naproxeno indicado como analgésico, sus usos más comunes son para disminuir la fiebre corporal, inflamaciones y dolores corporales, y por último el triclosán, un antimicrobiano y fungicida utilizado en gran variedad de productos del hogar. Te recomiendo revisar el contenido de las pastas de dientes, los jabones para mano y los detergentes, es probable que encuentres un poco de este compuesto en alguno de ellos; de hecho es probable que en una gran cantidad de hogares se encuentre al menos uno de los tres productos mencionados. Una de las preocupaciones sobre los contaminantes emergentes en fármacos es que podrían alterar algunas vías metabólicas si llegan a la dosis terapéutica o provocar alteraciones endócrinas, es decir daños a nivel hormonal en humanos o en animales. Es importante aclarar que la detección de contaminantes emergentes en suelos o afluentes de aguas residuales en México ha mejorado considerablemente debido a que se están aplicando nuevos métodos para concentrar las muestras, separarlas y detectarlas en los compuestos por medio de cromatografía de gases y espectrometría de masas. La primera consiste en la separación de los compuestos químicos por medio de afinidades entre ellos; supongamos que tenemos un grupo de amigos, a unos les gusta el futbol, a otros el teatro y a los últimos la literatura, es así que el grupo se separará en tres pequeños grupos, de acuerdo a sus gustos. En el caso de los compuestos químicos se separan de acuerdo a sus propiedades químicas. Una vez separados se realiza la espectrometría de masas, un método para identificar compuestos de acuerdo a su peso molecular –suma de la masa de cada átomo del compuesto–, en general esta técnica consiste en suministrar energía al compuesto de tal manera que forme un ión –átomo con carga– que se fragmentará en otros de Amenaza latente / CIENCIORAMA 7 menor masa, de tal forma que el ión de mayor masa registrada se puede relacionar con el peso molecular del compuesto y las masas de menor tamaño corresponderán a la fragmentación del compuesto original. Cuando son compuestos conocidos como el ibuprofeno, el naproxeno y el triclosán, las cantidades registradas se comparan con los datos estándares, porque los resultados deben ser los mismos para compuestos idénticos. Figura 2. Espectro de masas del triclosán donde se observan las señales para la molécula completa de triclosán 286.94 y un fragmento del mismo 141.98. Estas señales corresponden a la formación de iones por el suministro de energía del sistema; estos iones pueden ser cuantificados en el equipo por su carga eléctrica, de tal forma que cada señal corresponde a un diferente fragmento de la molécula original. En México, el grupo de la Dra. Araceli Peña de la Facultad de Química de la UNAM, desarrolló una serie de investigaciones enfocadas a monitorear la presencia de ibuprofeno, naproxeno y triclosán en hortalizas como lechuga, cilantro, perejil, epazote, y espinacas, que fueron compradas en las cercanías del mercado de Xochimilco, y se tienen indicios de que son regados con afluentes de la planta de tratamiento de aguas residuales del Cerro de la Estrella en Iztapalapa, Ciudad de México. Amenaza latente / CIENCIORAMA 8 Figura 3. Estructuras del triclosán, ibuprofeno y naproxeno. Los resultados obtenidos son parcialmente tranquilizadores. Si el lector se abastece en esta zona de la Ciudad de México le interesará saber que no se encontró ninguno de los dos fármacos en las hortalizas monitoreadas, sin embargo, se encontró triclosán en cilantro, perejil, epazote y espinaca en concentraciones menores a 5.0 ng/g, es decir, por cada gramo de la hortaliza se encuentran 5 nano gramos de triclosán. Algunos de los efectos nocivos del triclosán son resistencia microbiana, irritaciones en la piel, disfunciones hormonales, alta incidencia de alergias. Uno de los subproductos del triclosán es el cloroformo cuando las aguas son tratadas con cloro, de acuerdo a la Agencia de Protección Medio Ambiental de los Estados Unidos, el cloroformo es un carcinogénico. Diversos estudios muestran la absorción de triclosán en humanos, por ejemplo en un estudio realizado en California en el año 2000 se encontró que el 60% de leche materna tenía triclosán. En otro estudio realizado en Atlanta, en los Estados Unidos, se hicieron análisis de 2,500 personas de diferentes edades y diferentes clases sociales; se encontró triclosán en la orina del 75%. Pero la cosa no acaba ahí, el triclosán también puede afectar a los animales, por ejemplo en ratones causa problemas en el sistema nervioso central, problemas genéticos en renacuajos, problemas hormonales en algunos tipos de peces, también en las ovejas puede bloquear algunas enzimas que alteran el desarrollo de los fetos. Por supuesto, muchos de estos estudios no se realizan en México porque no hay presupuesto para ello. Para lo que sí hay es para los sueldos de los jueces de la Suprema Corte, los diputados y senadores, Amenaza latente / CIENCIORAMA 9 para un avión presidencial de lujo y para incrementar los presupuestos de los partidos políticos. ¿Y a ti te interesa la política? ¿Y si las decisiones políticas afectan tu salud? ¿Si interfieren en la calidad de tu vida y la de tu familia? ¿Y si deteriora la calidad de tus alimentos? Definitivamente merecemos estudios que puedan informarnos correctamente y saber cuál es la calidad del agua que tomamos y la calidad de los alimentos que ingerimos. Imagen de portada: http://www.encuentos.com/leer/contaminacion-explicacion-para-ninos/ Imagen 1 tomada de http://www.consiliencejournal.org/blog/ Bibliografía de divulgación Becerril Bravo, J.I., “Contaminantes emergentes en el agua”, Revista Digital Universitaria 2009, 10. Bibliografía especializada Clarke, B.O., Smith, S.R., “Review of emerging organic contaminants in biosolids and assessment of international research priorities for the agricultural use of biosolids”, Environment International, 2011, 37, 226-247. Dhillon, G.S., Kaur, S., Pulicharla, R., Brar, S.K., Cledón, M., Verma, M., Surampalli, R.Y., “Environ. Triclosan: Current Status, Occurrence, Environmental Risks and Bioaccumulation Potential”, Int. J. Environ. Res. Public Health 2015, 12, 5657-5684. Fernández Reyes, F.B. Desarrollo de un método para la determinación de contaminantes emergentes en matrices vegetales utilizando extracción con barra magnética seguido de CG-EM, Tesis de Maestría UNAM 2012. Amenaza latente / CIENCIORAMA 10