Tema 1: Orígenes de la humanidad Podemos considerar que África es la cuna de la Humanidad, allí se han ido hallando fósiles de la evolución de los primates hasta el hombre actual en millones de años. En la parte oriental del continente, especialmente en la zona de los grandes lagos, en el Valle del Rift es donde aparecen los primeros homínidos. En África se han encontrado los fósiles humanos más antiguos. Los primeros Homo Sapiens, que es lo que somos nosotros, así apareció por primera vez en este continente. Hace unos seis o siete millones de años, en África, y probablemente como resultado de distintas dietas, los homínidos se separaron de otras especies de simios primitivos. Se han identificado dos géneros principales de homínidos: a) Australopithecus: Presentes en el valle del Gran Rift africano al menos desde hace 4,1 millones de años, se vieron forzados a adaptarse al cambio de las condiciones climáticas del planeta Tierra para sobrevivir. Se hicieron más carnívoros que sus primos, el resto de los grandes simios, y comenzaron a andar sobre las dos piernas traseras en posición erguida (bipedalismo), lo cual les permitía mayor comodidad a la hora de recolectar alimentos o de cazar, al tener dos manos libres. Al seguir una dieta alta en calorías, la capacidad del cerebro aumentó en relación con su peso corporal. Como los bosques africanos continuaron retrocediendo, estos robustos Australopitthecus se adaptaron física y mentalmente a las nuevas sabanas, áridas y abiertas. Desarrollaron una mayor cooperación entre pequeñas bandas, alargando las horas de cacería y las distancias recorridas. Ninguno de los grandes simios ha sentido nunca el impulso social necesario para cazar y sin embargo, el Australopithecus triunfó en la sabana africana. Según fueron dominando la técnica del bipedalismo, se convirtieron en grandes simios andantes, pro, tal y como reconoce la mayoría de los especialistas, no en grandes simios parlantes. b) Homo: 1 Presentes en el valle del Gran Rift africano al menos desde hace 4,1 millones de años, se vieron forzados a adaptarse al cambio de las condiciones climáticas del planeta Tierra para sobrevivir. Parece que el lenguaje oral de los humanos surge por primera vez con el género HOMO. La mayoría de los investigadores actuales asumen que una especie del género Australopithecus (la africanus de Sudáfrica o la aferensis de África oriental) originó una línea evolutiva que fue a desembocar en nuestro género homo hace aproximadamente dos millones y medio de años (aunque es igualmente posible que el Homo represente un género de genealogía distinta). El individuo más antiguo que se ha identificado como homo, pertenece a la especie homo habilis. Especies fundamentales dentro del género Homo. Hoy en día la ciencia reconoce al menos tres especies fundamentales dentro del género Homo y son el; Homo Habilis, Homo Erectus y Homo Sapiens: 1) Homo Habilis. Características del homo habilis: Homo Habilis. El individuo más antiguo que se ha identificado como Homo, hace 2,4 millones de años, pertenece a la especie Homo Habilis. Apareció cuando en África volvió a cambiar el clima; pasó a ser más seco y más frío; los bosques pluviales se redujeron y los prados cubrieron extensiones más amplias. Los Australopithecus, que tenían un volumen cerebral de 400 a 500 cc., no estaban preparados, en términos evolutivos, para adaptarse a este nuevo entorno. El Homo Habilis, con un cerebro significativamente mayor, de 600 a 750cc, poseía unos atributos de los que carecía el austrolopithecus y que resultaban sumamente útiles. El Homo Habilis no poseía armas; vagaba, presa de carnívoros más rápidos y más poderosos. Sin embargo, construyó sencillas herramientas de piedra, tipo martillo. El Homo Habilis iba a ser también la primera criatura capaz de dominar el fuego. 2 Este cerebro de mayor volumen permitió la supervivencia de grupos más numerosos, capaces de conseguir de vez en cuando excedentes de comida. Esto a su vez facilitaba la formación de nuevos grupos, mayores y más complejos, que empezaban a exigir sociedades más elaboradas que favorecieran la propagación de los miembros que mostraban mayor capacidad mental. En este proceso el cerebro se desarrolló aún más, hasta el punto de que sólo en cráneos de Homo Habilis se observara por primera vez la protuberancia del área de Broca, la región del cerebro que resulta indispensable para la producción del lenguaje oral y de signos. Sin embargo ha habido que esperar hasta las dos últimas décadas del siglo XX para que la ciencia estudiara este tema en profundidad. Parece que hace 1,6 millones de años el pequeño agujero de las vértebras de la caja torácica a través del cual pasa la médula espinal del Homo Ergaster (una especie de homínidos que sucedió al Homo Habilis), era idéntico al agujero que hoy se puede observar en los primates actuales no humanos. Los nervios que se hallan en esta región medular controlan los músculos de la caja torácica que se utilizan concretamente para exhalar el aire. Cuando el agujero es muy pequeño, no se puede controlar la exhalación de aire que se necesita para hablar, el tejido nervioso es demasiado escaso. Estas dos especies primitivas de Homo conseguían emitir únicamente patrones fónicos breves, lentos y faltos de modulación, y no lenguaje articulado, que consiste en la organización sistemática de sonidos vocales significativos. Además la laringe, o caja vocal, se parecía todavía a la de los niños, que son anatómicamente incapaces de articular la mayor parte de los sonidos humanos hasta que la laringe queda colocada en una parte más baja de la garganta, cosa que ocurre cuando tienen un año o quizá algo más tarde (las laringes de los grandes simios no siguen esta evolución. Los cráneos de los primeros Homo Habilis muestran únicamente una ligera flexión en la base, lo cual indica que la laringe no había evolucionado hasta el nivel que adquiere en el adulto humano actual. Incluso en el caso de que los enlaces neuronales que permiten el habla estuvieran ya presentes, 3 parece que aún no habían hecho su aparición los órganos físicos necesarios para ello. Los atributos físicos que permiten producir lenguaje humano articulado parecen haberse desarrollado con bastante rapidez, en el periodo de entre 1,6 millones y 400.000 años. De la última fecha procede el primer fósil de homínido conservado que nos muestra la posible utilización del lenguaje oral. Esta posible utilización emerge con una especie totalmente nueva: 2) Homo Erectus. Características del Homo Erectus: Uno de los modelos actualmente más en boga sitúa al Homo Erectus como el primer homínido que abandonó África, siguiendo a las grandes manadas y dejando tras de sí un rastro de hachas de mano cuidadosamente elaboradas. El Homo Erectus, era más delgado, más alto, más rápido y más inteligente que los homínidos que le habían precedido. Del cuello para abajo, se parecía enormemente al hombre actual. Poseía un cuerpo muy potente y tenía la frente echada hacia atrás. Algunos especialistas creen que el exceso de energía que obtenían de una dieta predominante carnívora ocasionó el crecimiento del cerebro, que alcanzó los 800 -100cc., (el del Homo Sapiens oscila entre los 1.100 y los 1.400 cc.). Al poseer un cerebro mayor, fue capaz de inventar como ningún otro ser había hecho hasta entonces. Manufacturó la primera hacha. Despedazaba la caza con lascas y guijarros de piedra. Aparentemente emigró de África en una época temprana, casi al mismo tiempo que empezó a emerger como especie. Planificar de manera compleja presupone la existencia de procesos mentales complicados. Para que una sociedad lleve a cabo una compleja planificación (emigrar) tiene que haber un alto grado de cooperación social. Desde hace unos años los especialistas en la materia han jugado con la posibilidad de que el Homo Erectus fuera capaz de emitir lenguaje oral. A esta idea se llega tras reconocer la capacidad de organizarse socialmente. Sin embargo, es poco probable que el lenguaje representara una forma de habla similar a la que tenemos hoy en día. El agujero de la vértebra 4 inferior a través del cual pasa la médula seguía siendo demasiado pequeña para el Erectus controlara la exhalación de aire. Es muy posible que pudiera emitir enunciados breves y dotados de sentido, y puede que se estuviera desarrollando ya la sintaxis condicional; pero la anatomía aún impedía pronunciar enunciados complejos. Hasta la década de los noventa se creía que los humanos no habían llegado a Europa hasta hace medio millón de años. Sin embargo, están apareciendo datos arqueológicos que confirman la presencia mucho más temprano del Homo Erectus en este territorio. Y lógicamente esto tiene mucho que ver con la historia seguida por el lenguaje humano en Europa. En excavaciones de Atapuerca se han descubierto cien fósiles, presumiblemente de Homo Erectus. Hace unos 350.000 años el norte de Europa estaba envuelto en glaciares. Los humanos empezaron a desaparecer y a emigrar hacia el sur a tierras más cálidas. En excavaciones realizadas en la Gran Dolina de la sierra de Atapuerca, al norte de España, se han descubierto casi 32 humanos, que datan de hace 3000.000años. Uno de los cráneos al menos contenía un cerebro del mismo tamaño que el de un hombre actual. Los rasgos faciales de estos humanos primitivos se parecían a los de los primeros neandertales. No se sabe si esta población pertenecía a los últimos Homo Heidelbergensis, al temprano Homo Sapiens o si constituía una especie totalmente nueva de Homo. Como resultado de sucesivas migraciones, Europa quizá albergara en ese momento a muy distintas especies de homínidos. Las diferencias que muestran los fósiles hallados inducen a pensar que existía una diversidad “racial” muy notable entre la población de Homo Erectus, lo cual indica que se dio una libertad genética mayor de lo que hasta ahora se pensaba. La dureza del clima europeo obligó a mantener una dieta casi exclusivamente carnívora, lo cual exigía a su vez una planificación cada vez más compleja, con altos niveles de coordinación y organización, debido a las enormes dificultades que planteaba la caza en estas condiciones. En la Europa de la era glaciar quienes emigraban de latitudes más meridionales y cálidas tuvieron que desarrollar redes sociales complejas para sobrevivir, irse o morir. 5 3) Homo Sapiens. Características del Homo Sapiens: El Homo Sapiens apareció en África hace 150.000-1000.000 años; de allí se expandió a Oriente Próximo y Europa, donde sustituyó a los neandertales hace 30.000 años, y después a Asia, donde sustituyó al Homo Erectus. Hace 100.000 y 80.000 años otra capa de hielo se extendió por Europa. Los neandertales hubieron de emigrar de nuevo hacia el sur y el sureste hasta Oriente Próximo. De hecho, es muy posible que los neandertales y el Homo Sapiens tuvieran algún tipo de relación directa; puede que incluso se cruzaran unos con otro. Todo ello tuvo que influir sobre sus respectivas lenguas, y pudo producir cierto bilingüísmo entre ambas especies. Ambas culturas continuaron siendo indiferenciadas hasta hace unos 50.000 años, momento en el que aparecieron de repente nuevas tecnologías entre los homos sapiens: Armas arrojadizas. Hojas más afiladas para cortar. Por esta época, los hombres de “Cromagnon”, de la especie Sapiens, empezaron a asentarse en Europa introduciendo métodos muy complejos, refugios más eficaces y un vestido más elaborado. El pensamiento y el uso del lenguaje que caracterizan al hombre moderno se alcanzan con el Homo Sapiens de hace 35.000 años. El Homo Sapiens iba sustituyendo o absorbiendo, simultáneamente o alternativamente, a los Homo Erectus y a los neandertales que habitaban el Viejo Mundo, Experimentaron también una “explosión cultural” que se extendió desde entonces hasta hace 11.000 años y comenzaron a: Manufacturar artefactos en los que se representaban a sí mismo. Animales. Símbolos. Hacían grabados y molduras sobre las paredes de las cuevas. Sobre piedras planas. Inventaban herramientas nuevas Por estas fechas ya se utilizaba con seguridad el lenguaje articulado, tal y como lo hacemos en la actualidad. 6 Los homínidos dejaron de ser “simios parlantes” para convertirse en “simios simbólicos”. Lo que ahora importaba era el cerebro, no la fuerza. Hace unos 14.000 años el Homo Sapiens, la única especie de homínidos que había sobrevivido en su evolución, gozaba de miles de lenguas diferentes, agrupadas en cientos de familias lingüísticas que se extendían desde las Orcadas escocesas hasta Tasmania y desde Alaska a la Tierra del Fuego. En Oriente Próximo ya había muchos humanos que cultivaban trigo, avena cebada y recogían la cosecha con hoces de hueso que tenían hojas muy afiladas. Poco después, hace unos 12.000 años, el clima se hizo más cálido, con lo cual aumentaron las lluvias y la última capa de hielo quedó relegada a las regiones polares del norte. El nivel de los océanos creció enormemente, de manera que los antiguos pobladores quedaron separados para siempre. Y lo más interesante, el aumento de temperatura generó un tipo de grano mutante, un híbrido fértil de trigo silvestre y hierva de pasto, un tipo de trigo de 28 cromosomas cuya semilla se dispersaba de forma natural con el viento. Y todo ello trajo consigo una revolución biológica. Los humanos modernos del Viejo y del Nuevo Mundo, surgidos en media docena de “lugares originales”, podían sembrar y recolectar sin moverse de su tierra. Por primera vez empezaron a cultivar trigo y cebada y a domesticar ovejas y cabras, asentándose como agricultores de manera permanente. Los humanos permanecieron asentados en sus territorios durante generaciones. Aparecieron las primeras ciudades de adobe. Las variantes regionales empezaron a cobrar importancia y a ser reconocidas en otras tierras como “la lengua” de determinada región geográfica. El lenguaje humano quedaba desde ahora enraizado al territorio. En el siguiente cuadro queda reflejado, la posible evolución del lenguaje humano. Austrolopithecus Gestos, vocalización (gruñidos, chillidos, (Hace 4,1 millones de años) gemidos, etc.) 7 Homo habilis Gestos, vocalización (gruñidos, chillidos, (Hace, 2,4 millones de años) gemidos, etc.) Homo erectus Quizá breves expresiones, que incluirán (Hace 2 millones de años) frases condicionales A partir del homo erectus se produjeron al parecer dos divergencias principales Probablemente podían expresar procesos mentales complejos por medio de frases 1. Homo neanderthalensis elaboradas, lo que permitiría la existencia de (Hace 300.000 a 30.000 años) sociedades basadas en el lenguaje; pero esta especie humana no podía pronunciar los sonidos de (i), (a), ni (u). Probablemente podían expresar procesos 2. Homo sapiens mentales complejos por medio de frases (HACE 300.000 AÑOS) elaboradas, lo que permitiría la existencia de sociedades basadas en el lenguaje. 3. Humanos modernos Desde hace 150.000 años están presentes todos los rasgos físicos necesarios para el (Hace 150.000 años) lenguaje según hoy lo conocemos. En resumen: Los restos más antiguos de homo erectus datan de hace alrededor de 1.800.000 años, y los más recientes, de hace unos 300.000años. Los primeros restos del homo sapiens, en que se hallan evidencias periféricas indirectas, pero claras, de la posible presencia de habla, datan de unos 125.000 años. Estos ejemplos nos sirven para destacar un hecho evidente; el orden temporal de este tercer sentido del concepto de génesis abarca miles de años. 8 El lenguaje es un fiel ejemplo de lo que los evolucionistas han llamado exaptaciones. Surge como resultado de la coincidencia de varias adaptaciones que desencadenan un logro distinto al fin que lo provocó. En este caso hay tres progresos asociados a la aparición del lenguaje: El adoptar la postura erecta tiene dos consecuencias, por una parte se liberan las manos que se pueden ocupar en el uso de herramientas, por otra se produce una modificación de la estructura de la laringe, que posibilita la emisión sostenida de diferentes sonidos. Aumenta el sedentarismo y la participación en grupo. Su consecuencia es un aumento de la organización social, la necesidad de comunicarse y la estructuración de la realidad. Todo ello en recíproca colaboración con el aumento de la masa cerebral. Los factores a los que acabamos de aludir aparecieron de forma independiente, pero la suma de todos ellos sirvió de plataforma para la aparición del lenguaje, lo que contribuye a enfatizar su vinculación con los cambios evolutivos de la especie y, por tanto, sus raíces biológicas. Hay dos hechos cruciales que marcaron la evolución del continente: La desertificación del Sáhara y la aparición de la raza negra, dado que estos primeros seres humanos eran negros y posteriormente se fue perdiendo el color en otras especies al diversificarse por otros continentes, se fueron adapto a ese nuevo medio, con un clima más frío la pigmentación de la piel se fue haciendo más blanca porque ya no necesitaba toda la melanina para protegerse de los rayos solares. En este larguísimo proceso se generó la hominización, fueron adquiriendo el lenguaje, fabricaron utensilios, descubrieron el fuego, generaron pensamientos abstractos, en principio en una economía de cazadoresrecolectores nómadas. El Homo Ergaster y el Homo Erectus se expandieron por el mundo, pero los yacimientos más antiguos de estas especies están en África, luego en Europa y finalmente Asia. El Sáhara era un área con bosques que recibía grandes cantidades de lluvia, estaba verde, fluían ríos (wad o wadi) y era habitada por cocodrilos, elefantes, jirafas y grupos relativamente numerosos de seres humanos. Hubo periodos pluviales que probablemente coincidieron con el momento de las 4 9 glaciaciones que afectaron a Europa: Günz (comienza hace 1,1 millones de años), Mindel (580.000 años), Riss (200.000 años) y Würm. Uno de los desiertos más áridos en la actualidad, el Teneré, en el sur del Sáhara, era el fondo de un inmenso lago que fue muy rico en pesca. Estaba habitados por pescadores como demuestran los restos de arpones ganchos, puntas espinosas de piedra o hueso. Las pinturas rupestres de Tassili demuestran que jubo grupos de cazadores y pastores. El sorgo crecía silvestre, igual que el algodón, el trigo duro del antiguo Egipto estaba en el Ahaggar y hallamos también piedras de moler cereales. Además podemos ver pinturas de tiros con enganches a ruedas que atravesaban el Sáhara hasta el valle del Níger. Estos cambios climáticos propiciaron la expansión de esos pueblos del norte de África a otras regiones del mundo. Hace unos 10.000 años se produjeron cambios climáticos que influyeron en el surgimiento del Neolítico, que provocó una transición hacia una economía productiva, es decir, pasaron a ser pastores y agricultores. Progresivamente se fueron sedentarizando con actividades que permitieron un excedente de producción acumulable. De este modo, aparecieron las primeras aldeas y más tarde las ciudades, la cerámica y la utilización de metales. Esos cazadores en el Neolítico se transformaron en pastores. Hacia el final de esa época, alrededor del 2000 a.C. el arte nos desvela la llegada del caballo. Al principio de la Era Cristiana, el caballo fue siendo sustituido por le dromedario de Asia, más fuerte, más duradero y más apto para el transporte en el Sáhara, que se estaba convirtiendo en un desierto. La desertificación expulsó a sus habitantes hacia sus márgenes y hacia los ríos como el Nilo, el Níger y el Senegal, donde es posible hallar pastos para el ganado e incluso practicar la agricultura. Justamente en alguna de esas riberas será donde se desarrollen algunas de las grandes civilizaciones de la Antigüedad. 10