Instituto Gal Einai La Dimensión Interior B”H VIDEO MEDITACIÓN DE LA SEMANA PARASHAT KEDOSHIM 5771 – “SERÁN SAGRADOS” 2. SALVAR DE LA MUERTE Está escrito en la Parashá de la semana “No chismosees entre tu pueblo, no te pares sobre a la sangre de tu prójimo, Yo soy Hashem.” 'לא תלך רכיל בעמֶך לא תעמד על דם רעֶך אני ה Lo telej rajil beameja, lo taamod al dam reeja, Aní Havaiá. Respecto a la prohibición muy grave de “lo taamod al dam reeja”, “no te pares sobre la sangre de tu prójimo”, está escrito que si alguien ve a una persona en peligro y no salta al río, al agua para salvar a alguien que se está ahogando, es una trasgresión tan grave como si él mismo derramara su sangre, que Dios nos salve de eso. Hay una pregunta en la Halajá, la ley judía, una pregunta muy dura, ¿debo exponerme a un posible peligro [safek sakaná] para salvar a mi compañero en peligro cierto [sakaná vadait]? Hay dos opiniones. Una dice que no, si para mí es un riesgo posible, que pueda, Dios no lo permita, llegar a morir al realizar esto, no estoy obligado a ponerme en peligro. Pero hay una segunda opinión que sí debo hacerlo. Si es seguro que él va morir y yo también, entonces no hay ningún motivo para que ambos muramos. Pero si para mí es un posible riesgo, puede ser que logre salvarlo y por supuesto salvarme a mí también. Por lo tanto si para mi compañero es un peligro seguro, o sea se encuentra en peligro de muerte, entonces es una obligación sagrada saltar al agua para salvarlo. En el Shulján Aruj, el Admur Hazakén determina que “safek nefashot lehakel”, “frenta a un riesgo incierto de muerte se aliviana”. Pero como es una expresión convencional, hay un discurso del Rebe donde dice que no es algo tan simple. De acuerdo a lo revelado parece que hay una inclinación a establecer que no hay una obligación absoluta y concreta que la persona se exponga a un posible peligro, para salvar a otro que se encuentra ante un peligro cierto. Para que entendamos bien esto, está escrito explícitamente que si una persona va a sufrir un sufrimiento extremadamente grande, en su esfuerzo por salvar a otro, está obligado a hacerlo, no hay discusión acerca del sufrimiento corporal. Y hay otra opinión incluso que si hay que perder un miembro del cuerpo para ayudar a salvar la vida de otro, por ejemplo si tienes que perder una mano, hay quien dice que también estás obligado a hacerlo. Pero si sólo hay que soportar un sufrimiento extremo, de acuerdo a todas las opiniones hay obligación de hacerlo. ¿Pero si hay que exponerse a un peligro de muerte? Esa es la pregunta. Si estás obligado a exponerte a un posible peligro para salvar a tu compañero que estuviera en peligro cierto. Hay una conferencia muy importante del Rebe, donde cuenta que los jasidim en la época en que el Rebe anterior estaba encarcelado y condenado a muerte, los jasidim hicieron todas las acciones y esfuerzos en aquel país que implicaban un peligro de muerte, no simplemente un posible peligro sino un peligro cierto. Y sin dudarlo todos arriesgaban su vida para salvarlo. Pero también, que con eso estuvieran salvando la vida del Rebe anterior, eso estaba en duda. Que después de todo el esfuerzo que hacían, había una duda muy grande que siquiera eso Derechos Reservados Instituto Gal Einai La Dimensión Interior – www.dimensiones.org – [email protected] Permitida su difusión citando el nombre del autor 2 pudiera ayudar a salvarlo. O sea que allí era a la inversa, se exponían a un peligro cierto para salvar al Rebe de un peligro dudoso. Y allí hubo un milagro tremendo, que todos salieron de esa situación sin daño alguno. Sin herida y sin daño y no le sucedió nada a nadie. Cuando el Rebe salió de la cárcel de milagro, dijo un discurso jasídico sobre el versículo: “Hashem li veozrai, vaaní eré vesonai”, “Hashem es en mí en los que me ayudan, veré [la caída] de mis enemigos”, del Salmo 118:7 que se dice en el Halel. ¿Qué significa “Hashem li veozrai”? Debería ser “Hashem está en mí y es mi ayuda”, pero dice “Hashem está en mí en los que me ayudan”. Explica el Rebe porqué el Rebe anterior eligió este verso: cuando hay que actuar para salvar a otro judío, y más todavía si hay que salvar a un alma general, pero esto se aplica en general a todo judío, el judío no actúa de acuerdo a consideraciones, al razonamiento, incluso de acuerdo al Shulján Aruj, sino que actúa en forma natural. Es el extremo de lo que llamamos la conciencia natural, actuando en forma completamente natural por el hecho de que está conectado a Hashem. En ese discurso el Rebe utiliza la expresión “amitat himatzu Itbaraj”, “la verdadera existencia bendita sea”. Y en vista de que está conectado con “la verdadera existencia bendita Sea”, una expresión que utiliza el Rambam al principio de su libro, entonces escribe el Rebe que incluso no se considera que se puso en peligro. Porque Hashem es todo y todo es Él, y quien está conectado, entregando la vida con mesirut nefesh a la verdadera existencia bendita Sea, en realidad no existe aquí ningún peligro, lo hace en forma natural, y así fue. Por esi está escrito “Hashem está en mí en los que me ayudan”, porque HaKadosh Baruj Hu actuó, entonces ese judío que actúa es Hashem mismo, “Hashem li veozrai”, ese “li”, “en mí” pasa a través del Rebe, pero “Hashem está conmigo con los que me ayudan”. Así está explicado, pero la expresión, la tremenda revelación es que aquel que actúa de esta manera, incluso no se pone en peligro para nada, no existe para nada el concepto de peligro. Y de esta manera logra verdaderamente salvar al amigo judío. Aquí era el propio Rebe. De acuerdo a esto se puede entender a uno de los sabios ajaronim. Quiere traer una prueba de la opinión que sí hay que ponerse en un posible peligro para salvar a tu compañero de un peligro cierto. De acuerdo a la Halajá no se dictamina de acuerdo a esta opinión, pero quiere traer una prueba de que se debe dictaminar de acuerdo a esta opinión (que hay que exponerse a un posible peligro) de la historia de Rabí Janina ben Dosa, que había en la ciudad un arod, un animal muy peligroso matando a personas en la ciudad. Le avisaron a Rabi Janina ben Dosa, que estaba este animal dañino, y qué hizo? Era experto en milagros. Entonces fue, se sacó el zapato y puso su talón, su pie dentro del hoyo donde se encontraba este animal llamado “arod”, más peligroso que una serpiente. Salió el animal, lo mordió en el pie, y en vez de matarlo a él, murió el animal. Entonces qué es lo que quiere aprender de esto el sabio? Que por cuanto que Rabi Janina ben Dosa sabía hacer milagros, para él no era un peligro cierto, pero se consideraba un peligro dudoso. También para rabí Janina ben Dosa, que haya puesto su pie en el hoyo del arod, se puso en un peligro “posible” para salvar a toda la congregación de un peligro cierto. De aquí quiere traer una prueba de la opinión que uno está obligado a ponerse en un posible peligro para salvar a alguien de un peligro cierto, y de esta manera “no te detendrás frente a la sangre de tu prójimo”. Pero de acuerdo a la explicación del Rebe que acabamos de traer, se puede explicar esto de otra manera, de forma muy simple, que no es una prueba tan valedera, porque aquí está claro (el Rebe no lo trae aquí) pero es el ejemplo más claro, el más perfecto de del mensaje que el Rebe quiere transmitirnos con esto. Que Rabí Janina ben Dosa no hizo cálculos: que como soy experto en milagros, entonces para mí es un peligro dudoso poner el Editorial Gal Einai - La Dimensión Interior – www.dimensiones.org – [email protected] 3 pie, y por eso yo decido como aquél que dijo que estoy obligado a ponerme en peligro dudoso para salvar a alguien de un peligro seguro. No es así. “Hashem está en mí en los que me ayudan. Rabí Janina Ben Dosa está conectado con “la Verdadera Existencia de Hashem”. Y hace las cosas con naturalidad, con una completa conciencia natural. No realiza ningún cálculo, y por lo tanto como dice el Rebe no es peligroso. No es peligroso, seguro que ese animal se va a morir. Y así fue. Que Hashem bendito sea nos otorgue el merito de llegar a ser como aquellos jasidim del Rebe anterior, que estaban conectados con la “Amitat Himatzú, “la verdadera Existencia” de Hashem, y entonces con mesirut nefesh, entregando la vida actuemos para el pueblo de Israel, para todo judío, y ni siquiera se considere, no piense que se está exponiendo a un peligro, es algo simple. Y entonces se va a cumplir el verso: “Hashem li veozrai, vaaní eré vesonai”, “Hashem está en mí en los que me ayudan, veré [la caída] de mis enemigos”. Editorial Gal Einai - La Dimensión Interior – www.dimensiones.org – [email protected]