Historia Antigua Universal (Tema 15) El Siglo IV a. C. Stásis, crisis política y cambio espiritual en la Grecia Clásica Tema 15 Historia Antigua Universal 1 Sumario 1. La supuesta crisis del siglo IV a. C. en la historiografía. 1. 1. Jenofonte. Jenofonte. 1. 2. Tópicos historiográficos relacionados con la idea de crisis. crisis. 1. 3. Cuadro general sobre la época. 2. Los estados griegos tras las Guerras del Peloponeso. Peloponeso. 2. 1. El periodo de hegemonía espartana. 2. 2. El hundimiento de Atenas. 2. 3. Tebas y Macedonia como estados emergentes. 3. Dimensiones de la transformación política y social. 3. 1. Las nuevas formas de organización y acción política. 3. 2. El nuevo modelo de sociedad. 3. 3. Elementos económicos de la crisis. 4. El desarrollo cultural e intelectual griego en el siglo IV a. C. Tema 15 Fichas de Estudio - Prof. Dr. D. J. Andreu Historia Antigua Universal 2 Historia Antigua Universal (Tema 15) Valoración de la “crisis” del siglo IV La visión de la historiografía antigua y reciente Jenofonte nace en Atenas en el 428 a. C. Tras la expedición de Artajerjes pasó a Esparta, donde escribió sus dos obras más conocidas: - Las Helénicas en las que pretendía dar continuidad a las Historias de Tucídides lo que las convierte en la fuente principal para conocer este periodo. En ellas manifiesta una gran habilidad para la descripción de la estrategia militar y, por supuesto, para otorgar una gran personalidad psicológica a los protagonistas. La denominada crisis del siglo IV a. C., en realidad es sólo una fórmula convencional con la que la historiografía del siglo XIX ha venido a designar un amplio periodo de la Historia de Grecia que se abre cronológicamente entre dos épocas bien distintas, el final de la Grecia Clásica por un lado –con la derrota ateniense en las Guerras del Peloponeso (404 a. C.)– y por otro los inicios del mundo helenístico –victoria de Filipo II en Queronea (338 a. C.)– en el que la dominación macedonia marcará un nuevo rumbo para la Historia de la Hélade, que le conducirá a su conversión en prouincia romana. Fue un término acuñado por la historiografía tradicional ilustrada que consideraba que tras el clasicismo se perdían todos los elementos del espíritu original griego. Sin embargo, aunque, efectivamente, hay signos de transformación, también habrá otros de continuidad: - La Anábasis (que narra una expedición de mercenarios griegos de Ciro contra Persia) tiene también gran validez al describirnos la forma de gobierno y de organización política vigente entre los Persas así como aproximarnos al fenómeno del mercenariado, que, como veremos, entrará en auge en el siglo IV a. C. Tema 15 1. PERVIVENCIA DE LA DEMOCRACIA En la mayor parte de las póleis griegas se mantienen las bases del sistema democrático aunque, eso sí, adaptado a un nuevo contexto histórico y, además, sometido a revisión continua por parte de los intelectuales del momento. 2. MANTENIMIENTO DE LA RELIGIÓN TRADICIONAL Como veremos, la crisis religiosa y espiritual (concretada en la extensión cada vez mayor de los cultos mistéricos) es otro de los elementos que se suelen aportar a la hora de retratar los elementos de la crisis. Sin embargo, parece que durante el siglo IV a. C., con esa realidad convivió también el mantenimiento de la devoción por los cultos tradicionales. 3. SITUACIÓN INTERNACIONAL En realidad, parece que la crisis del siglo IV a. C., en realidad sentó sus bases sólo sobre las consecuencias de las Guerras del Peloponeso. La derrota de Atenas fue, en última instancia, el gran elemento crítico que puede cerrar el Clasicismo. Historia Antigua Universal 3 El Siglo IV: Cuadro General de la Época (I) 1. ¿Crisis o Cambio de Mentalidad? Habitualmente –y como suele suceder en la Historia después de cada época denominada “Clásica”–, el siglo IV a. C. es considerado además de un siglo puente entre las Guerras del Peloponeso y la forja del Imperio de Alejandro, un siglo de crisis. Si entendemos crisis como transformación, sí podemos rubricar dicha afirmación porque el siglo IV, aunque sí supone un cambio de mentalidad, no presenta síntomas de crisis en ninguna de sus áreas históricas: ¿Crisis Política? No parece que haya grandes cambios políticos en las póleis griegas. Las nuevas oligarquías que se imponen son casi democráticas y, además, resultado lógico del pensamiento antidemocrático que se forja en este momento. En cualquier caso, no debemos olvidar que la democracia era sólo un sistema de entre los diversos que se desarrollaron en la Grecia Clásica y que, quizás, no debemos leer la Historia Política de la Hélade desde los ojos de nuestro actual espíritu constitucionalista. Por otro lado, la profesionalización de la actividad política (sofística) y su vinculación a la palabra (retórica), serán sólo dos consecuencias esperables de un régimen político –el del Clasicismo– que, como vimos, tenía en las formas de participación ciudadana una de sus grandes sombras. ¿Crisis Social? Los conflictos sociales que se atestiguan en el siglo IV a. C. son, en realidad, perpetuaciones de viejos conflictos irresueltos (la situación de los ilotas en Esparta, p. ej.). Sí es cierto que ahora se acentúa la diferencia entre ricos (élite) y pobres y que los primeros activan sus sistemas de autorepresentación a través del fenómeno de las donaciones públicas (liturgiai) pero eso enriquece en gran medida la vida política y el papel de control social del pueblo sobre las instituciones. Tema 15 Fichas de Estudio - Prof. Dr. D. J. Andreu Historia Antigua Universal 4 Historia Antigua Universal (Tema 15) ¿Crisis de Mentalidades? Sí, si entendemos que, efectivamente, la conflagración civil de los griegos en dos bandos y la negligencia –e incluso culpabilidad– de sus respectivos regímenes políticos motiva una desazón que, como vimos, generó uno de los periodos de mayor esplendor de la cultura griega, en el que firman sus obras las mejores plumas de la Filosofía (Platón y Aristóteles) y del Drama griego (Aristófanes, Eurípides, Sófocles…). Esa desazón –y las continuas reflexiones sobre el enemigo, primero Persa y después Macedonio– motivarán, además, la aparición de una herramienta destinada a convertirse en esencial –sobre todo a partir de la República Romana– en el juego político: la palabra (p. ej.: Demóstenes y sus Filípicas). En esa crisis de mentalidad, además, hay que cobijar el origen de muchas realidades históricas de gran calado que nacen como consecuencia de la inestabilidad de la riqueza y la búsqueda de estabilidad por parte de la población (bancos, préstamos, fenómeno evergético…). Tema 15 Historia Antigua Universal 5 El Siglo IV: Cuadro General de la Época (y II) 2. Otros Rasgos Básicos de la Época 1. Internacionalización Política. Una de las novedades básicas del siglo IV a. C. es que, frente al auge de Esparta –como vencedora de las Guerras del Peloponeso– y el eclipse ateniense, toman un gran relieve nuevas póleis o nuevas confederaciones (koinoníai) políticas: Corinto, Tebas y Macedonia. Este sucesivo reparto del poder por parte de distintas póleis retrata muy bien el ciclo de inestabilidad en que la política helénica había entrado tras el final de la Guerra. Sólo Macedonia, que sabrá interpretar la vocación helénica que había mantenido unido –en otros tiempos– al pueblo griego, será capaz de liderar una nueva época. Y ese liderazgo contará, además, con lo mejor del periodo, la estrategia militar tebana y la cultura ática. 2. Aguda reflexión. El siglo IV a. C. es un periodo en el que Grecia pone en cuestión sus principios básicos, y lo hace a través de la reflexión a todos los niveles. Existe una reflexión política y diplomática propia de quienes recelan del nuevo estado de cosas (Jenofonte, Isócrates o Demóstenes, p. ej., que reflexionan sobre el auge de Macedonia), una reflexión doctrinal sobre las formas de poder (Platón y Aristóteles, especialmente el primero en la República y las Leyes), una reflexión estética sobre el papel del arte (Aristófanes o Eurípides), una reflexión sobre las propias concepciones y modelos artísticos (el canon de Praxíteles, p. ej., la monumentalización y acento del páthos trágico en las representaciones artísticas del periodo como el Grupo de Laoconte o el Altar de Zeus de Pérgamo, p. ej.) y, sobre todo, una vuelta hacia el saber humanista como pieza clave para la formación política (p. ej.: el círculo de sabios constituido por Filipo II de Macedonia con Aristóteles a la cabeza). Tema 15 Fichas de Estudio - Prof. Dr. D. J. Andreu Historia Antigua Universal 6 Historia Antigua Universal (Tema 15) 3. Profesionalización. El periodo anterior ha dejado claro que ni la estrategia militar ni la actividad política puede dejarse a la espontaneidad de grupos sociales que dependen de los bienes raíces agrarios –que ahora, además, se ven suplantados por los comerciales–. El triunfo espartano ha demostrado que la victoria es de las póleis que –en lo militar– se han especializado de forma profesional. Por eso asistimos a la profesionalización de la vida política –y por ello al surgir de la sofística como corriente de enseñanza para las clases advenedizas que deseaban dedicarse a la gestión política– y a la del ejército, generalizándose la figura del mercenario, que tanta importancia tendrá en el ejército alejandrino una vez que vaya avanzando la conquista del futuro Imperio Helenístico. 4. Experimentación. Efectivamente, en todos los terrenos, el siglo IV a. C. es un momento en que las instituciones –y también las personas y la producción ideológica– tratan de adaptarse a las nuevas circunstancias: se generalizan las escuelas retóricas, el fenómeno de las liturgiai ciudadanas como base para la promoción y propaganda política, la separación de la ley de validez general (nómos) de los decretos particulares (psephismáta), el sueldo para los asambleístas (misthós), la koinonía como sistema de agrupación de diversas póleis de cara a generar Estados más fuertes, la diversificación de las cajas de recaudación estatal (stratiotiká para los gastos de armamento y theoriká para gastos diversos…), etcétera. Historia Antigua Universal Tema 15 7 Los Estados Griegos en el siglo IV a. C. 1. El Estado Espartano Tras la victoria en las Guerras del Peloponeso, la situación de Esparta deriva hacia la del sistema imperialista que, de hecho, tanto había criticado ésta en Atenas. Como muestra, muchos de los aliados peloponesios empezaron a no verse representados por la Esparta posterior a las Guerras que, en última instancia, había impuesto a Atenas unas condiciones que, de hecho, sólo le beneficiaban a ella. Entre éstas –lideradas fundamentalmente por Lisandro– pueden destacarse: 1. Establecimiento de gobernadores espartanos (harmostai) en las comunidades antes aliadas de Atenas. 2. En las ciudades aliadas, instalación de decarquías (gobiernos designados) constituidas por grupos de oligarcas extremistas. La más conocida, sin duda, fue el régimen de los Treinta (404402 a. C.) por el que Esparta dirigía los destinos de Atenas de la mano de oligarcas radicales. Hay que hacer notar que, sin embargo, la oposición a este régimen, en realidad, apenas deseaba sino volver a una patriós politeía ancestral, es decir, a una especie de democracia en apariencia pero oligarquía en esencia con lo que, como vimos, las diferencias políticas entre los Treinta y la oposición política –que acabaría triunfando en el arcontado de Euclides en Atenas– no eran tan profundas. 3. Incorporación de la exigencia de un tributo a las comunidades aliadas algo que era novedoso en la Liga Peloponesia. 4. Entrega a los Persas –que con ello volverán a fortalecerse– de todas las comunidades del Asia Menor (expedición de Artajerjes). En realidad, las relaciones Persia/Esparta se convirtieron ahora en relaciones personales Ciro/Lisandro. Tema 15 Fichas de Estudio - Prof. Dr. D. J. Andreu Historia Antigua Universal 8 Historia Antigua Universal (Tema 15) Si ésa fue la situación política internacional que lideró la Esparta vencedora de las Guerras del Peloponeso, Esparta también vivió, en política interior, algunos conflictos que aceleraron también su transformación a lo largo del siglo IV a. C.: • Revueltas sociales. Aunque el conflicto ya era endémico en Esparta, en el año 398 a. C. tuvo un episodio álgido gracias al quehacer de Cinadón que, según las fuentes, abanderó la solicitud de derechos políticos de los no homoioi del régimen espartano, es decir, ilotas y también periecos, la mayoría descontentos con la situación de Esparta y que ya habían manifestado ese descontento durante la Guerra. • Problemas dinásticos. La sucesión del diarca espartano Agis, también en el 398 a. C., generó un problema sucesorio entre su hijo Leoquítides y su hermano Agesilao. Parece que en la solución del conflicto a favor de Agesilao medió el papel de Lisandro que buscaba manejar a aquél para que respaldara su política exterior. • Conflictos internacionales. Los episodios de crisis interna en Esparta acaecidos en esta época coincidieron con un cierto protagonismo de Atenas en cuestión militar –con Conón reedificando los Largos Muros y dirigiendo campañas para fortalecer la flota ateniense– y con la forja por su parte de continuas enemistades internacionales, especialmente con Tebas –que apoyará a los focenses en su guerra contra Esparta en el 395 a. C.– y con Beocia, que también experimentará un cierto acercamiento hacia Tebas, nueva potencia política del periodo. Historia Antigua Universal Tema 15 9 Los Estados Griegos en el siglo IV a. C. 2. El Estado Ateniense La historia política de Atenas tras su derrota en las Guerras del Peloponeso puede seguirse a partir de los siguientes hitos cronológicos e históricos: EL RÉGIMEN DE LOS TREINTA (404-402 a. C.) Como hemos visto con anterioridad, tras la derrota en las Guerras, Atenas era gestionada por un régimen de corte oligárquico. En realidad, Aristóteles en la Constitución de los Atenienses habla de cómo tras el 404 a. C. incluso la oposición a los Treinta –cuyo régimen generó un masivo exilio de ciudadanos atenienses– aspiraba a un régimen en apariencia democrático pero totalmente aristocrático como el que había caracterizado los inicios del arcaísmo. LA RESTAURACIÓN DEMOCRÁTICA: CONÓN (402-390 a. C.) Gracias a la acción de Euclides –arconte– y también de Rinón y Arquino se restauró la democracia en Atenas. Y dicha restauración se hizo reeditando, incluso, viejas leyes de ciudadanía como las promulgadas en su día por Pericles y que concedían el derecho cívico a los atenienses que eran hijos de padre y madre ateniense, ley que generó abiertas polémicas entre los grupos aristocráticos (Terámenes) pues consideraban que la ciudadanía sólo debía otorgarse a los que disfrutaban de propiedad. Pese a la restauración, acontecimientos como el del proceso de Sócrates (399 a. C) demuestran que la inestabilidad política era habitual en Atenas. En este ambiente tuvo una gran importancia Conón, general griego que abanderó en esta época la resistencia ateniense a perder la hegemonía política respecto de Esparta y que con su reconstrucción de los Largos Muros reactivó abiertamente el conflicto entre Atenas y Esparta. Éste tuvo su punto álgido en la Guerra de Corinto y la Paz de Antálcidas (390 a. C.). Tema 15 Fichas de Estudio - Prof. Dr. D. J. Andreu Historia Antigua Universal 10 Historia Antigua Universal (Tema 15) A LA SOMBRA DE LA HEGEMONÍA ESPARTANA (390-337 a. C.) La Guerra de Corinto supuso un enfrentamiento entre Esparta y una coalición de aliadas antiespartanas, a saber Atenas, Tebas, Corinto, Argos y Beocia. El resultado –la referida Paz de Antálcidas– confirmó a Esparta como la potencia hegemónica del Mediterráneo. Liderada por Trasibulo, ya desde el 393 a. C. Atenas había hecho –como hemos visto– intentos de recuperar su imperio marítimo. Dicha recuperación se llevó a término finalmente en el 377 a. C. cuando, según las fuentes, se constituyó una nueva symmachía ateniense que buscaba promover la autonomía de las ciudades de la órbita ateniense frente al arché espartano. Sin embargo, esta Liga prohibía el establecimiento de las antiguas cleruchíai y, además, sustituía el phorós por un fondo común (sýntaxis) más adaptado a la nueva situación política. Historia Antigua Universal Tema 15 11 Los Estados Griegos en el siglo IV a. C. 3. Tebas La hegemonía de Tebas es, junto con la de Macedonia, un claro ejemplo del ciclo de inestabilidad que vivían las póleis griegas tras las Guerras del Peloponeso. Varias fueron sus características y, al mismo tiempo, sus principales aportaciones: • En primer lugar, se trataba de una hegemonía (real desde en torno al 380 a. C. y, sobre todo desde el 371 a. C., con el enfrentamiento en Leuctra entre espartanos y tebanos) amparada en el carisma y peso específico de sus dos grandes líderes: Epaminondas –en la década de los setenta– y Pelópidas –en la de los sesenta–. Tanto es así que a su muerte de hecho, acabaría por hundirse dicho poder. • Por otro lado, era una hegemonía con un marcado cariz militar. Así, Tebas era reconocida en esta época como una fuerza de élite en lo castrense. Esa fuerza radicaba en sus batallones –el denominado “Batallón Sagrado”– y en unas estrategias militares de las que luego aprendería el propio Filipo de Macedonia. Ese cariz militar hace que, efectivamente, la hegemonía tebana se cifrara en torno de dos ejes: los enfrentamientos con Esparta (Tegira, 375 a. C., y Leuctra, 371 a. C.) y, también, las buenas relaciones con Persia, de cuya mano Pelópidas logró promover (371 a. C.) una paz entre todos los estados griegos. • Desde el punto de vista político, Tebas era una confederación –que desde el 395 a. C. había suscrito una alianza con Beocia, Atenas y Lócride– y en la que el sistema de gobierno era una democracia. Conforme a ella todos los beocios se reunían en la Asamblea o Sýnodos y Tebas, aunque reconocía el derecho ciudadano de todos los miembros de la koinonía se reservaba, sin duda, un mayor protagonismo en ella. Tema 15 Fichas de Estudio - Prof. Dr. D. J. Andreu Historia Antigua Universal 12 Historia Antigua Universal (Tema 15) Los Estados Griegos en el siglo IV a. C. 4. Macedonia Considerado por muchos –en la época inmediatamente anterior al final de las Guerras del Peloponeso– como un estado bárbaro –prácticamente “no griego”–, marcadamente rural y con el ambiente típico de frontera, sólo su posición de baluarte frente a las tribus bárbaras del norte fue consolidando el poder político del reino macedónico que, a la postre, acabaría por fusionar –sobre todo a través de Filipo II– elementos procedentes de la mejor Atenas –la del Clasicismo– y la más innovadora –sobre todo en cuestiones de estrategia militar– Tebas. Aunque abordaremos su desarrollo con más atención en el próximo tema, varias son las características de la Macedonia de esta época: • Desde el punto de vista político, Macedonia es una monarquía en cuyo sistema sucesorio existían, además, continuas injerencias tanto internas –por la entrada de pueblos del norte, como se ha dicho– como externas, dados los intereses de Tebas o de Atenas en apoyar a unos u otros candidatos. • El siglo IV a. C. se inicia en Macedonia con la muerte de Arquelao (393 a. C., al que le sucede Amintas), que había consolidado un reino de clara vocación helénica (llamó a su corte al pintor Zeuxis o al poeta Eurípides), bien comunicado y con un poderío militar que se iría consolidando en los reinados posteriores (Amintas II, Alejandro II, Tolomeo, y Pérdicas III) y que llevaría a Macedonia a diversos enfrentamientos con Atenas (por el dominio de Anfípolis) y con otros de sus vecinos griegos. • Será con el advenimiento de Filipo de Macedonia (en el 359 a. C.) cuando comiencen a sentarse las bases del desarrollo político y del liderazgo de Macedonia en la Historia de Grecia. Historia Antigua Universal Tema 15 13 Dimensiones de la “crisis” del siglo IV a. C. Características de la Vida Política 1. Enriquecimiento del debate entre los poderes del Estado con un mayor perfeccionamiento del legislativo que pasará a distinguir entre leyes de ámbito general (nómoi) y decretos (pséphismata) de aplicación jurídica concreta y práctica. 2. Pérdida de poder de los stratégoi –al generalirzarse el mercenariado militar– y auge del arcontado como magistratura ejecutiva. 3. Peso de las instituciones aristocráticas (boulé y gerusía). A ellas se les reserva el poder para tomar decisiones en casi todos los ámbitos públicos y privados. 4. Progresivo absentismo de la vida política generalizándose el misthós y también el monopolio de las magistraturas por parte de determinados euergétai habituados a las liturgiai públicas. 5. Ante la crisis económica que viven algunas comunidades –una manifestación de la misma fue, por ejemplo, la proliferación de la piratería en el Mediterráneo ante el declive de Atenas que, antes, la controlaba como Imperio Marítimo– se especializa también la caja tributaria (stratiotiká: impuestos para la guerra, theoriká: impuestos para otros fines…). La presión fiscal –que cada vez se especializa más agrupando a los contribuyentes en symmoríai (“cajas comunes”)– generará amplios conflictos entre ricos y pobres. 6. Generalización de la koinonía (federación de póleis) como confederación política (especialmente Tebas y Beocia) para fortalecer zonas en las que interesaba que fuera una pólis –la más fuerte del entorno– la que ejerciera el liderazgo. 7. Progresiva sucesión de la hegemonía de los Estados que, además, será también variable. Tema 15 Fichas de Estudio - Prof. Dr. D. J. Andreu Historia Antigua Universal 14 Historia Antigua Universal (Tema 15) Dimensiones de la crisis del siglo IV a. C. Características Económicas y Sociales 1. Separación cada vez mayor entre ricos y pobres. Ese abismo está detrás de problemas endémicos como los que se actualizan en Esparta (revueltas de ilotas y pericos) pero también en Atenas. 2. Mayor protagonismo de la revuelta popular –démos– en la transformación de las instituciones públicas. 3. Presión social del démos hacia los ricos para el desarrollo de liturgiai, es decir, de actos de “socialización de la riqueza” en beneficio de las comunidades. Surge así la figura del euergétes (fenómeno del evergetismo), encargado de embellecer la ciudad, organizar festejos públicos, y, en definitiva, tener con ella todo tipo de atenciones que, en aquel momento, se entendían lógicas derivaciones de su riqueza. 4. Nuevas formas de acción económica. Parece que pierden protagonismo los denominados bienes raíces y empiezan, sin embargo a surgir en torno de ellos nuevas fórmulas (enktésis) de arrendamiento, cesión, hipoteca… En paralelo a ello cada vez adquieren más importancia los denominados bienes muebles (artesanía, préstamos dinerarios, joyería, bienes de prestigio…) y el comercio generarlizándose en este terreno el denominado préstamo marítimo que se hacía a un comerciante (nauklerós) para que detectara nuevas posibilidades de enriquecimiento. 5. Cada vez mayor protagonismo de los bancos y del préstamo. Tema 15 Historia Antigua Universal 15 El desarrollo intelectual griego en el siglo IV Principales hitos de la vida artística y cultural Desarrollo Arquitectónico • Difusión de nuevos sistemas urbanísticos de carácter hipodámico que, de hecho, ya habían empezado a desarrollarse a finales del siglo anterior. Bajo dicho esquema se construyen Mesene, Megalópolis, Olinto, Priene… • Progresiva “petrificación” de los edificios que mejor representaban la conciencia cívica comunitaria. El ejemplo estándar es el del teatro de Epidauro, para 14.000 espectadores. • Continuación del florecimiento de la arquitectura religiosa, que investigó hacia nuevas formas (los thóloi, circulares, los capiteles corintios…) y que afectó no sólo a santuarios locales (Apolo Patroós en Atenas) sino también panhelénicos (Apolo en Delfos). Tema 15 Fichas de Estudio - Prof. Dr. D. J. Andreu Desarrollo Plástico/Estético • Transformación de las proporciones del canon de la figura humana (a partir de las obras de Praxíteles, cuya temática parece ponerse en relación con el auge de los cultos mistéricos antes referido. • Monumentalización del arte funerario en el que aparecen las primeras estelas con motivos decorados y se construyen grandes momumentos que mezclan lo arquitectónico y lo escultórico (Mausoleo de Halicarnaso). • Frente al desarrollo de las otras artes plásticas, la cerámica inició su decadencia hacia formas más estereotipadas. Muchos de los ceramistas desarrollaron ahora más labor como pintores. Desarrollo Intelectual • Florecimiento de los grandes círculos culturales como la Academia de Platón (organizada como un thiasos) a la que acudían a formarse desde auténticos intelectuales (caso de Aristóteles) como futuros políticos y estrategos atenienses (Aristónimo, Eudoxo de Cnido, Foción…). • Continuidad del gran auge del teatro, de la mano fundamentalmente de Aristófanes, artífice de las comedias que mejor recogen el espíritu más crítico del periodo (El Pluto, la Asamblea de las Mujeres…) y que, además, manifiestan un claro deseo de crítica hacia un cierto “comunismo” cívico. Historia Antigua Universal 16