Esta presentación ofrece una visión general del modelo policial catalán y se centra especialmente en la actividad que desarrollada la policía de proximidad. Para ello, trata en primer lugar, la estructura de la de la Policía de la Generalitat –Mossos d’Esquadra (PG-ME) y el modelo policial sobre el cual se sustenta, y en segundo lugar, explica la organización y forma de trabajar de la policía de proximidad. Tal y como recoge la ley 4/2003 de Ordenación del Sistema de Seguridad Pública de Cataluña, para el desarrollo de políticas de seguridad eficaces es necesario llevar a cabo iniciativas y estrategias transversales que fomenten la convivencia y cohesión social. Para ello, señala que es fundamental un modelo de seguridad que sobrepase las limitaciones de las tradicionales concepciones de seguridad y orden público. Menciona además, la importancia de la implicación y participación de los diferentes servicios y de la sociedad civil (art.32, 33 y 34). El modelo policial de la PG-ME es el mixto, que se caracteriza por combinar aspectos de los modelos más tradicionales, el centralizado y descentralizado. El modelo mixto incorpora del modelo descentralizado, propio de países anglosajones, los servicios orientados a la proximidad de la policía con la comunidad. Por otro lado, del modelo centralizado, característico de países continentales, acoge la especialización de determinados servicios dirigidos principalmente a dar respuesta al crimen organizado. Bajo la estructura descentralizada se sitúan los servicios de policía comunitaria orientados a la resolución de problemas des de su vertiente más próxima al ciudadano. La implicación de la comunidad, el conocimiento mutuo entre la policía y la sociedad, y las políticas transversales con otros agentes sociales relacionados con el problema, son las principales características de este modelo policial. Para evaluar la eficacia de la actividad de los servicios de proximidad además de los datos cuantitativos relativos a la seguridad en las localidades, se consideran una serie de indicadores relacionados con la percepción de seguridad de los ciudadanos (encuesta de seguridad pública). De esta manera los datos cuantitativos tradicionales se complementan con valores cualitativos que permiten obtener una visión más amplia del conflicto, su resolución y la sensación de los ciudadanos al respecto. La implantación de los grupos de proximidad en las organizaciones policiales implica necesariamente la aceptación, por parte de sus integrantes, de una cultura y unos valores organizativos determinados que potencien la asunción de este modelo. La estrategia formativa es fundamental para apoyar este cambio organizativo, para ello es necesario diferenciar de la formación general, la específica y especializada. Esta formación especializada debe ir dirigida y orientada hacia este modelo organizativo descentralizado Como ejemplo del servicio de policía de proximidad de la PG-ME, presentamos la organización y estrategia llevada a cabo en la Región Policial Metropolitana de Barcelona (RPMB) en relación con este grupo. La PG-ME se organiza territorialmente en regiones policiales, las cuales engloban las áreas básicas policiales (ABP). La RPMB cuenta con 10 ABP, cada una de las comisarías de Barcelona tiene un grupo de policía de proximidad que centra su actividad en el contacto directo con los ciudadanos. El coordinador de proximidad es la figura que dirige a los agentes destinados al grupo de proximidad de cada comisaría, este es el responsable de recoger toda la información del territorio que luego será necesaria para elaborar planes de acción dirigidos a potenciar acciones de seguridad a través de un patrullaje dirigido y planificado. Los agentes destinados a los grupos de proximidad deben poseer ciertas cualidades especificas que les hagan ser más efectivos en sus funciones. Estas competencias se relacionan directamente con la capacidad de adaptación, la inteligencia emocional, las habilidades sociales, la empatía y la gestión de la información. Además estos agentes reciben una formación especifica que les permite adquirir los conocimientos necesarios para el desarrollo de su trabajo. Los grupos de proximidad de cada comisaría trabajan coordinadamente con las agentes destinados las Oficinas de Relaciones con la Comunidad que se encargan principalmente de promover canales de comunicación con las entidades y el tejido asociativo del territorio, para fomentar el conocimiento mutuo de la policía y de los colectivos sociales que conviven en cada zona. Como conclusión a todo lo expuesto, la presentación muestra como la PG-ME a través de los grupos de proximidad implantados en todas las comisarías del territorio, dotan de calidad el servicio de atención al ciudadano.