“La Nación española y en su nombre las Cortes Constituyentes

Anuncio
“La Nación española y en su nombre las Cortes Constituyentes, elegidas por sufragio universal...
decretan y sancionan la siguiente Constitución.
Art. 16. Ningún español que se halle en el pleno goce de sus derechos civiles podrá ser privado del
derecho de votar en las elecciones de senadores, diputados a Cortes, diputados provinciales y concejales.
Art. 17. Tampoco podrá ser privado ningún español:
Del derecho de emitir libremente sus ideas...
Del derecho a reunirse pacíficamente.
Del derecho de asociarse para todos los fines de la vida humana...
Art. 21. La Nación se obliga a mantener el culto y los ministros de la religión católica. El ejercicio público
o privado de cualquier otro culto queda garantizado...
Art. 32. La soberanía reside esencialmente en la Nación, de la cual emanan todos los poderes.
Art. 33. La forma de Gobierno de la Nación española es la Monarquía.
Art. 34. La potestad de hacer las leyes reside en las Cortes. El Rey sanciona y promulga las leyes.
Art. 93. Se establecerá el juicio por jurados...
Art. 108. Las Cortes Constituyentes reformarán el sistema actual del gobierno de las provincias de
Ultramar, cuando hayan tomado asiento los diputados de Cuba y Puerto Rico…”
Artículos de la Constitución de 1869
CLASIFICACIÓN Y CONTEXTO
El texto es jurídico. Se trata de la Constitución elaborada en junio de 1869 por el parlamento
constituyente elegido por las elecciones de enero de ese mismo año. Las elecciones (por sufragio
universal) habían sido convocadas por el gobierno provisional que se había hecho cargo del poder tras la
victoriosa revolución de 1868 (“la Gloriosa”, que había provocado el exilio de Isabel II a Francia), y del
que Prim y Serrano eran los personajes más relevantes. El Parlamento estuvo dominado por políticos de
tendencia monárquica y progresista, lo que caracterizaría la redacción del texto legal.
El objetivo de la constitución fue el de construir el entramado legal para que en España se
consolidase un autentico régimen democrático bajo la forma de la monarquía.
ANALISIS Y COMENTARIO
La Constitución de 1869 recoge una amplísima declaración de derechos individuales, la más
extensa hasta entonces. Ejemplo de esto son los artículos 2, 3, 4, 21 y 26. Dentro de lo que es el marco
de la ideología liberal, se pretende establecer un marco apropiado para que se desenvuelva la libertad
de los ciudadanos, evitándose situaciones de autoritarismo gubernamental, como las ocurridas en época
de los gobiernos conservadores de Isabel II. Los tres primeros artículos citados se refieren básicamente a
las garantías judiciales de la poblaciónMención aparte merece el artículo 21 que por primera vez en España declara la libertad de
culto (aunque no el laicismo estatal, pues el gobierno se compromete a mantener el culto católico). Es la
primera vez que ocurre esto con una constitución. Hasta ahora todos los textos legales declaraban la
religión católica como la oficial, y la hacían obligatoria para los ciudadanos.
El artículo 32 establece la Soberanía Nacional. Este era uno de los elementos claves de la ideología
liberal, y había sido defendida por los progresistas (antes exaltados y radicales) y los demócratas (frente
a los conservadores partidarios de la soberanía compartida), pero salvo en la constitución del 12 este
principio no había sido recogido en los textos constitucionales promulgados (Estatuto real,
constituciones de 1837 y 45) en parte por las cesiones de los progresistas ante los moderados, en parte
por el triunfo de los segundos.
La forma del estado era el de monarquía.(Art 33).- La “Gloriosa” había sido iniciada por
militares unionistas y progresistas que habían logrado controlar los alzamientos populares y encauzarlos
a favor de la monarquía. Pero ni estos grupos, ni por supuesto los demócratas, querían a la familia de
Isabel II en el trono, por tanto una de las primeras preocupaciones del nuevo gobierno fue buscar un
candidato al trono. El elegido será Amadeo de Saboya, pero la decisión no fue fácil y hasta provocó
graves conflictos diplomáticos que fueron el origen de una guerra (franco-prusiana de 1870).
Los artículos 34, 35 y 36 recogen una clara división de poderes, uno de los hitos de la ideología
liberal. En el art. 34 se habla de las Cortes: la tarea legislativa se reserva en exclusiva al parlamento,
relegando al rey y a los ministros la tarea ejecutiva. En el art. 92 se instauran los Jurados. En el art.
108 se habla de una reforma de la administración de los territorios de ultramar.
Causas de la revolución de 1868
Desde 1863 se producen una serie de gobiernos de corta duración que marcan la crisis del
moderantismo. En 1866 los unionistas rompen con la Corte y en 1867 se unen a demócratas y
progresistas en contra de la reina. Estos dos grupos políticos habían abandonado sus diferencias y
habían firmado en 1866 el pacto de Ostende con un programa común: derrocamiento de Isabel II, nueva
constitución y sufragio universal. El alma del acuerdo había sido Prim, el cual intentaría varios
pronunciamientos en estos años. El relativo moderantismo del líder revolucionario acercó a los
unionistas Dulce y Serrano al pacto. La crisis financiera y la muerte de O´Donnell (1867) y Narváez
(1868), favorecieron las pretensiones de los conspirados, quienes se pronunciaron el 17 de septiembre
en la Bahía de Cádiz con la ayuda del almirante Topete, que subleva a la armada. Ante el anuncio de la
sublevación de estos militares liberales monárquicos, se suceden una serie de alzamientos populares en
las principales ciudades que adoptaron la forma de Juntas Revolucionarias, en las que tendrán un
protagonismo especial los elementos democráticos. La reina se exilia tras el combate de Alcolea y Prim
impulsa la formación de un gobierno provisional formado por progresistas y unionistas que se planteara
la democratización del país, pero también la moderación de la revolución para que no se altere el orden
social o se caiga en aventuras republicanas.
Juntas revolucionarias se constituyen en las principales ciudades en contra del gobierno y
asumiendo el control local. En estas Juntas tiene una gran importancia los elementos del partido
democrático. Representan los intereses de la pequeña burguesía (cercana a los intereses populares)
representados por Pi y Margal y sus proyectos sobre la República federal.
La actuación conjunta de estos dos grupos de objetivos diferentes responde a esa gran
coalición liberal-burguesa democrática contra Isabel II de unionistas, progresistas y demócratas. Los
moderados no saben que hacer. Un ejército es enviado sobre la columna del general Serrano que
avanza sobre Madrid pero es vencido tras breve combate en Alcolea. La reina que estaba en San
Sebastián cruza la frontera y se exilia en Francia. La Revolución ha triunfado.
Para evitar el auge de las ideas republicanas en la Juntas, Prim impulsa la formación de un
GOBIERNO PROVISIONAL formado por progresistas, Prim (Guerra), Ruiz Zorrilla (Fomento), Sagasta
(Gobernación. Reprimirá las primeras sublevaciones federalistas y unionistas como Topete (Marina). El
gobierno será presidido por Serrano. No hay demócratas. Su acción tendrá un doble sentido:
· Moderarán la revolución para que no caiga en avances sociales y veleidades republicanas según su
ideología monárquica. Para eso disolverán las Juntas revolucionarias, algunas de las cuales ya estaban
pidiendo la Republica Federal y la supresión de quintas, sustituyéndolas por ayuntamientos
democráticos
· Legislaran para instalar un sistema democrático:
-- Libertad de culto
-- Libertad de enseñanza
-- Sufragio universal (mayores de 25)
-- Libre asociación. Esto permitirá la llegada de la AIT a España implantándose en Madrid y Barcelona
grupos bakuninistas (anarquistas).
-- Libertad de imprenta
-- Supresión de impuestos indirectos.(Lo que provocó problemas fiscales al estado y a los
ayuntamientos)
Principios fundamentales de la Constitución de 1869.
La constitución de 1869 pretendía establecer una monarquía constitucional en España de signo
claramente democrático (reconocimiento del sufragio universal). El esquema del estado estaba marcado
por una clara división de poderes, en donde el legislativo estaría en manos de un parlamento bicameral
(el senado también era electivo), el judicial en los tribunales independientes, y el ejecutivo en los
ministros y el rey, al cual se habían limitado mucho en sus poderes con respecto a constituciones
anteriores.
Uno de los elementos más destacados es la amplitud de los derechos ciudadanos amparados
por el texto legal: libertad de imprenta, de enseñanza, de culto, de asociación (lo que permite la
aparición de la AIT en España), a la libertad (abolición de la esclavitud)... etc. Otro aspecto a destacar es
que frente al centralismo del periodo anterior, ahora se busca la descentralización. Por supuesto, los
alcaldes serán democráticos.
Cantonalismo y origen del movimiento obrero.
Tras la abdicación de Amadeo I de Saboya se proclamó la República. A los pocos meses de la
proclamación estallará el movimiento cantonal.
El cantonalismo fue un movimiento revolucionario que se dio en gran parte de las ciudades
andaluzas y el litoral levantino (excepto Cataluña). En él participaron importantes sectores populares,
pero especialmente destacaron los grupos de la baja burguesía. La ideología cantonalista no está
demasiado clara, responde a una concepción confederal del estado y trata de construir el estado desde
abajo. En ocasiones parece también responder a necesidades de la clase trabajadora, pero salvo en el
caso de Alcoy, los grupos del movimiento obrero (socialistas y anarquistas), apenas tienen incidencia.
Sorprende que las sublevaciones cantonales de julio de 1873 coincidan con el gobierno de Pi y Margal, el
cual trataba de dar una estructura federal a la república, pero la impaciencia y la desconfianza pudieron
más que la moderación. La actitud poco belicosa de Pi y Margall contra los sublevados le lleva a la
dimisión y a su sustitución por Salmerón, quien no duda de usar al ejército contra las ciudades
sublevadas. Durante su presidencia y la de Castelar se logra controlar la situación salvo en Cartagena (el
lugar donde se inició el proceso). Al ser plaza militar y contar con una parte de la flota aguantó hasta
enero de 1874.
El derecho a la libre asociación permitido por la Constitución de 1869 permitió el desarrollo de
las ideologías obreras en España y la formación de las primeras organizaciones legales. En los primeros
años hay una cierta identificación de los sectores obreros con el republicanismo federal que recoge
algunas de sus aspiraciones. La AIT manda delegados italianos (bakuninistas) que impulsan la formación
de núcleos iniciales en Madrid y Barcelona que van a crecer ante los sucesos posteriores del sexenio. En
1870 estos grupos originan la Federación Regional Española de la AIT que ya se expande además por
Valencia y Andalucía. Al ser mayoritaria la tendencia anarquista, la federación se opuso a participar en
política, lo que provocó la oposición y posterior expulsión de la federación madrileña (1872), seguidora
de las tesis marxistas, que será el germen del PSOE y la UGT. Los grupos conservadores culparan a la AIT
de la insurrección cantonalista de 1873 (especialmente a los grupos anarquistas, lo cual no esta nada
claro) lo que provocará su ilegalización. Las organizaciones obreras permanecerán en la clandestinidad
hasta 1888.
Descargar