Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo o desprotección de los niños, niñas y adolescentes. Una propuesta a partir de la LDOIA 1 de octubre de 2010 Elaborado por: Carme Montserrat Ferran Casas Irma Bertran Miembros del ERIDIQV (Equipo de Investigación sobre Infancia, los Derechos de la Infancia y su Calidad de Vida). Institut de Recerca sobre Qualitat de Vida. Universitat de Girona Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Índice Introducción............................................................................................................ 3 1. Puntos de partida............................................................................................... 4 2. Aportaciones claves de los diferentes documentos…...................................... 9 2.1 Terminología empleada................................................................................... 9 2.2 Tipos de listados, criterios de valoración y derivación a los servicios.......... 13 2.3 Aspectos relevantes en cuanto a la derivación a los servicios y procesos de selección…......................................................................................................... 16 3. Propuesta de un listado de observaciones de situaciones de riesgo............... 18 3.1 Descripción del listado..................................................................................... 20 3.2 Uso del listado.................................................................................................. 29 4. Propuesta de criterios de valoración para la toma de decisiones a partir del listado de observaciones....................................................................................... 30 4.1 Situaciones sobrevenidas o de facto............................................................... 31 4.2 Preguntas claves.............................................................................................. 31 4.3 Árboles de decisión.......................................................................................... 32 4.4 Temporalidad y criterios de priorización...................................................... 36 5. Conclusiones...................................................................................................... 37 Glosario.................................................................................................................. 39 Referencias............................................................................................................. 40 Anexos..................................................................................................................... 41 Anexo 1: Situaciones de riesgo y de desamparo contempladas en la LDOIA.... 41 Anexo 2: Resumen del documento de bases de los SEAIAs.............................. 43 Para citar este informe: Montserrat, C., Casas, F. y Bertran, I. (2010). Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo o desprotección de los/las niño/as y adolescentes. Una propuesta a partir de la LDOIA. Institut de Recerca sobre Qualitat de Vida (UdG). Disponible en: www.udg.edu/eridiqv 2 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Introducción Muchos son los esfuerzos y avances que se han hecho en las últimas tres décadas en el ámbito de infancia en las diversas comunidades autónomas. En Cataluña, diferentes departamentos que tienen competencias (Acción Social y Ciudadanía, Educación, Salud, Interior, Justicia) han ido diseñando políticas, desarrollando programas y poniendo en marcha servicios dirigidos a la infancia, así como desplegando normativas de acuerdo con los nuevos contextos sociales y necesidades. Estos avances, sin embargo, han sufrido una fragmentación según si el acento recaía en el tema escolar, de protección social, de sanidad, de ocio o de las personas con discapacidad, por poner algunos ejemplos. Fragmentación que a veces ha supuesto una cierta falta de articulación entre las distintas intervenciones, o de desconocimiento entre servicios o grupos de profesionales. En este sentido, un paso importante, con un enfoque claramente más holístico y transversal con respecto a la infancia ha sido la última Ley 14/2010 de los derechos y las oportunidades en la infancia y adolescencia (LDOIA), aprobada por el Parlament de Catalunya, el 12/05/2010. Esta Ley contempla todos los niños, niñas y adolescentes como sujetos de derechos y destinatarios de las actuaciones públicas, e incluye los que se encuentran desprotegidos o en situación de riesgo; es decir, la protección no queda regulada en una legislación separada de la general para la infancia y adolescencia. En el ámbito de la infancia maltratada y en riesgo social, la Ley también da pasos importantes en el paradigma de la normalización y nos acerca a otros países europeos. La diversidad y la cantidad de programas, de protocolos, de planes de infancia territoriales, de listados de indicadores de riesgo y de circuitos que se han ido desarrollando las tres últimas décadas han sido y son muchos. Esta proliferación responde a la necesidad de estructurar la intervención dirigida a la infancia en riesgo, tanto a nivel de la atención primaria como especializada. Esta riqueza, sin embargo, también supone a veces aumentar la disparidad de actuaciones y las descoordinaciones que perjudican la eficiencia del sistema de protección. El panorama actual entre los diferentes niveles administrativos y territoriales requiere ahora de un esfuerzo de 3 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran articulación y de integración para ofrecer mensajes unitarios e instrumentos comunes, consensuados y abiertos a constantes mejoras, dado que las aportaciones de la investigación científica en este ámbito son continuas y dinámicas. En este sentido, para dotar de contenido el desarrollo del artículo 79 de la LDOIA1, el presente trabajo pretende ser una propuesta para los profesionales y personas en contacto en directo con la infancia con el objetivo de establecer unos criterios para decidir desde qué nivel - primario, especializado, de urgencia - se inicia la intervención en las diferentes situaciones de riesgo social o de desprotección de un niño o niña. Se parte de dos premisas: ⇒ Desarrollar una labor de integración de lo ya diseñado o realizado, procurando identificar las formulaciones y los criterios comunes entre ellos. ⇒ Ofrecer una propuesta abierta a mejoras y reajustes. 1. Puntos de partida A la hora de partir de lo ya hecho sabemos que podemos estar dejando fuera de la elección muchas experiencias y programas, que quizás ni conocemos, pero que merecerían ser tenidas en cuenta. Aunque nos hemos intentado centrar en las propuestas que aparentemente han tenido mayor alcance territorial o de participación de diferentes personas y servicios en los últimos años, resulta prácticamente inevitable que la elección tenga algún tipo de sesgo, lo que asumimos como limitación de entrada y que habrá que tener en cuenta. El trabajo de articulación que presentamos parte básicamente de: 1 Encargo hecho por la DGAIA al ERIDIQV de la UdG para desarrollar el artículo 79 de la LDOIA, que se refiere a: “Elaboración de listados de indicadores y de recomendaciones. El departamento competente en infancia y adolescencia, en colaboración con otros departamentos de la Generalitat, las universidades y los colegios profesionales y otras entidades dedicadas a los niños y adolescentes, debe elaborar listados de indicadores y factores de riesgo y listados de indicadores y factores de protección y resiliencia. Así mismo, debe formular las recomendaciones específicas para facilitar y promover la identificación de estos indicadores o factores y la valoración consiguiente de la situación del niño o del adolescente. Estos listados y recomendaciones se pueden actualizar y modificar siempre que lo aconsejen los avances en el conocimiento científico y profesional”. 4 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran a) La Ley 14/2010 de los derechos y las oportunidades en la infancia y adolescencia (LDOIA) (Mayo 2010). b) El Módulo de Apoyo a la Gestión del Riesgo (MSGR) social en la infancia y la adolescencia, insertado dentro del RUMI - Infancia responde (proceso de validación en el 2010). c) El documento de bases del servicio de los EAIAs (mayo 2010). Estos documentos contienen diferentes listados de indicadores y de observaciones sobre el riesgo (algunos también de protección y resiliencia), y diferentes criterios para la toma de decisiones a la hora de determinar el nivel de intervención. Las diferencias a veces son sólo semánticas, otras de contenido, y es urgente un trabajo de integración, evidentemente bajo el paraguas de la nueva ley (LDOIA), para que, tanto desde la atención primaria como desde la especializada, se sepa cuáles son los criterios comunes a todos, bien para aplicarlos, bien para discutirlos. Aportamos una breve explicación de cada uno de estos documentos (ver también anexos). a) La Ley 14/2010 de los derechos y las oportunidades en la infancia y adolescencia (LDOIA) El Título III de la LDOIA define la prevención, que entiende como el conjunto de actuaciones sociales destinadas a preservar el niño, la niña o el adolescente de las situaciones que son perjudiciales para su sano desarrollo integral o para su bienestar, haciendo un listado de las situaciones que pueden ser perjudiciales para ellos. Establece que la Generalitat debe emprender programas concretos de información y sensibilización ciudadana para promover el bienestar de la población infantil y adolescente, iniciando planes específicos a desarrollar en los barrios y entornos territoriales en los que se detecte una gran concentración de situaciones de desigualdad económica, escolar, cultural y de indicadores de riesgo para los niños, niñas y adolescentes; es decir, impulsando políticas de prevención del riesgo social. Por otro lado, la identificación de indicadores o factores de riesgo en un entorno familiar concreto debe generar programas de apoyo familiar, y estas competencias relativas a las intervenciones sociales preventivas, se establece que corresponden a los entes locales. 5 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran En el Título V (De la protección de los niños y adolescentes en situación de riesgo o desamparo), se distingue entre las situaciones de desamparo y de riesgo, manteniendo la competencia de la Generalitat, mediante el departamento que tiene atribuida esta competencia, cuando se trata de niños/as o adolescentes desamparados y atribuyéndola a los entes locales si afecta a niños/as o adolescentes en situación de riesgo que se encuentran en su territorio. Establece una lista de situaciones de riesgo y de desamparo con el fin de ayudar a los profesionales a decidir sobre cada niño, niña o adolescente (ver anexo 1). Incluye los siguientes criterios de valoración del riesgo (art. 103 y 104) a tener en cuenta: si la intervención del servicio consigue disminuir la situación de riesgo, o por el contrario, si se agrava o se cronifica o concurren un gran número de situaciones adversas; y si los progenitores colaboran u obstaculizan las intervenciones de los servicios. b) Módulo de apoyo a la gestión del riesgo social en la infancia y la adolescencia (MSGR) insertado en el RUMI - Infància respon (Infancia responde) El Módulo de Apoyo a la Gestión del Riesgo social en la infancia y la adolescencia (MSGR) es un programa informático para apoyar a los profesionales y personas en contacto con la infancia en la toma de decisiones sobre las intervenciones adecuadas ante las situaciones que pueden perjudicar su desarrollo o bienestar. Su elaboración ha sido fruto de un proceso participativo en el seno de la Secretaría de Infancia, que ha contado con la implicación de diferentes profesionales de otros departamentos y servicios, y se ha llevado a cabo con la colaboración científica del IRQV de la UdG, mediante un convenio (autores del presente informe). Pretende ser una herramienta para la detección, la prevención y la comunicación de las situaciones de riesgo o de maltrato intrafamiliar de los niños, niñas y adolescentes. Esta herramienta de apoyo deja explícito que no sustituye la decisión final que le corresponde adoptar al profesional o equipo interdisciplinario, respetando los canales existentes en el trabajo en red de los servicios implicados en la atención a la infancia y los protocolos territoriales establecidos. Pretende orientar a la persona usuaria del programa informático para que ante las situaciones observadas en niños, niñas o adolescentes (que podrían estar supuestamente 6 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran relacionadas con una situación de riesgo social o de maltrato intrafamiliar), pueda decidir sobre el nivel de intervención. Por lo tanto, sugiere una actuación sobre si: - Se debe seguir o iniciar un trabajo desde su propio servicio (escolar, sanitario, de ocio, social...). - Es necesario que el caso se trabaje desde los servicios sociales básicos (SSB). Estos podrán, en su caso, derivar a la EAIA. - Es necesario que el caso sea notificado a la DGAIA. En el programa informático se establecen observaciones y conjuntos de observaciones, que tienen asignado un nivel de gravedad (leve, moderada, grave) y que tienen en cuenta la edad del niño y la niña. Además, utiliza unos criterios para determinar el nivel de riesgo detectado y el nivel de intervención o acción recomendada y para valorar la posibilidad de recidiva o repetición de la situación que ha sufrido el niño o la niña. En el programa también se aporta información que podría ser crucial para el receptor del caso y poder valorar con más precisión el tipo y nivel de la intervención. Muestra también una lista inicial de factores de resiliencia. Asimismo, el MSGR ha sido sometido a un proceso de validación. Este proceso ha consistido en dos validaciones, una interna llevada a cabo por personal de la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGAIA), de la Secretaría de Infancia y Adolescencia (SIA) y del Instituto de Investigaciones sobre Calidad de Vida (IRQV) de la Universitat de Girona, y una externa dividida en dos grupos: los profesionales finalistas del sistema (de Educación, Salud, Policía y Servicios Sociales) y el grupo de expertos formado por profesionales de los ámbitos más directamente relacionados con el protección infantil (EAIA, EVAMI, ETCA, UDEPMI, EFI y Servicios Sociales Básicos). El proceso de validación se ha llevado a cabo en dos fases: las sesiones de presentación, donde se explicó el proyecto durante el primer trimestre de 2010 y se pidió la participación voluntaria de los asistentes para las futuras pruebas, y las sesiones de aplicación de las pruebas y recogida de resultados con los profesionales voluntarios. 7 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran En las sesiones de presentación del MSGR asistieron 838 profesionales de los cuatro ámbitos. De ellos, se apuntaron para las sesiones de las pruebas 427 profesionales, 90 de los cuales estaban relacionados directamente con los servicios de protección a la infancia. Estos formaron parte del grupo de expertos y las sesiones de pruebas fueron presenciales. Las sesiones con el resto de profesionales no expertos en protección infantil se llevaron a cabo on-line. Finalizadas todas las pruebas se llevó a cabo la recopilación de las enmiendas y se introdujeron los cambios oportunos. A finales de 2010 se hizo una última sesión de devolución dirigida a los profesionales de los cuatro ámbitos. c) Documento de bases del servicio de los EAIA (mayo 2010) Este documento ha sido fruto de un proceso participativo entre profesionales de los EAIA, de la DGAIA y grupos de expertos, para desarrollar y detallar las tareas de estos equipos clave en el sistema de protección a la infancia. El documento se enmarca en la LDOIA. En el anexo 2 aportamos un resumen del documento donde se definen las situaciones de riesgo para los niños y niñas, propias de ser atendidas por los servicios comunitarios. Son situaciones donde el desamparo no se ha producido y donde los objetivos de las intervenciones de los servicios básicos se centran en reducir el posible impacto negativo de los factores de desprotección y potenciar los factores protectores del núcleo de convivencia y de su entorno. Define también las situaciones de posible desamparo para los niños, propias de ser atendidas por los servicios sociales especializados. Establece los criterios de gravedad y riesgo en situaciones de maltrato o abandono infantil, según 22 bloques que se refieren a las características del incidente, los factores de riesgo o protección infantil existentes, las características del cuidador, del entorno familiar y la respuesta de la familia ante la intervención. Cada uno de los 22 bloques contiene los ítems correspondientes al tipo de riesgo de maltrato: bajo, moderado o grave. Estos 3 niveles de riesgo se corresponden a tres niveles de intervención: los Servicios Sociales Básicos, el EAIA y la DGAIA. 8 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Profundiza en las situaciones donde la separación del núcleo familiar tiene un carácter permanente o temporal, y las situaciones para el estudio regular o preferente, y en las que la DGAIA interviene en caso de necesidad inmediata de separación del niño, niña o adolescente de su núcleo familiar. En todos los casos, los niños, niñas y adolescentes que han de ser separados de sus progenitores tienen derecho a una calidad de vida y a una educación mejor que la que tenían en su casa. *** El trabajo que presentamos ha intentado identificar los elementos comunes o relevantes de estos documentos expuestos, y especialmente lo referente a los listados de las situaciones de riesgo, los criterios que exponen y las definiciones clave de los conceptos que emplean. A partir de aquí, se pretende: - Relacionar i articular la diferente terminología empleada. - Proponer un listado sintético que pueda ser adoptado por todos los servicios que lo deseen, pensando en lo que les puede ser de utilidad. - Proponer unos criterios de valoración del riesgo y de derivación al servicio correspondiente, que actúen como árbol de decisión. 2. Aportaciones clave de los diferentes documentos 2.1 Terminología empleada En algunos documentos se hallan listados de "situaciones de riesgo", en otros "de indicadores y factores de riesgo", en otros "de observaciones". A menudo, las respectivas definiciones obedecen a objetivos diferentes según la perspectiva desde la que se han elaborado (más generalista, más especializada, o menos). La LDOIA define los indicadores de riesgo como los datos que nos muestran que 9 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran hay probabilidades de que las situaciones sean perjudiciales para las personas implicadas. Por ejemplo, las faltas de asistencia a clase de forma continuada e injustificada nos indican un perjuicio para el niño o la niña. Además nos pueden estar alertando sobre el riesgo de que esté sufriendo algún tipo de maltrato: no va a clase por no mostrar las lesiones que le han producido los progenitores; no va a clase porque no lo acompañan al colegio; no va a clase porque la han enviado al país de origen para practicarle una ablación. Además, podemos referirnos a indicadores específicos de una determinada situación de maltrato - muchos de los indicadores de abuso sexual y de maltrato físico lo son - y otros más inespecíficos, que pueden alertarnos sobre más de un tipo de maltrato. Por otro lado, hay toda una serie de indicadores que también son compatibles con situaciones que no tienen que ver con un maltrato, como por ejemplo las dificultades en los aprendizajes escolares: los niños y niñas maltratados las tienen a menudo, pero también pueden presentarlas los otros niños y niñas. Ahora bien, partimos de la realidad de que muchos (o incluso quizás la mayoría) de los profesionales y personas en contacto directo con la infancia, no son necesariamente expertos en la identificación de indicadores de maltrato infantil. Trabajan con los niños, las niñas y los adolescentes en ámbitos muy diferentes y, desde cada ámbito de actuación los profesionales pueden observar situaciones o síntomas que les preocupan en mayor o menor grado. En vez de trabajar con un listado de indicadores de riesgo, la opción del Módulo de apoyo a la gestión del riesgo social (MSGR) es la de utilizar un listado de observaciones referentes al niño o adolescente y su familia, que sean fácilmente detectables desde cada ámbito de actuación (educación, sanidad, servicios sociales y cuerpos policiales). Epistemológicamente, la identificación de observaciones relevantes es previa al establecimiento de indicadores de riesgo. 10 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran La relación de observaciones incluidas en el MSGR se fundamenta en las siguientes premisas: Cualquier informante puede realizar aportaciones relevantes. De esta manera se fomenta la corresponsabilización en la acumulación de conocimiento. Tiene también un efecto didáctico. Las observaciones no son "sospechas", sino "constataciones" de diferentes grados y características. La base de la ciencia está en la observación de constancias. La recopilación de observaciones puede facilitar la aportación de aquellos datos fácilmente accesibles por parte de no expertos y profesionales no especializados. Cuanta más información se pueda analizar sobre una situación que pueda afectar negativamente a un niño o niña, mejor. Las situaciones que afectan negativamente a los niños y niñas pueden ser complejas, difíciles de identificar y prevenir, y sus consecuencias pueden ser no-proporcionales. Los riesgos sociales ("situacionales") para los niños y niñas son realidades complejas y borrosas. Las realidades complejas y borrosas a menudo son observadas de maneras diferentes por parte de observadores distintos. Para realizar una aproximación al conocimiento de realidades complejas necesitamos cuantas más observaciones mejor y de todos los diferentes agentes sociales implicados. A partir de aquí, se pueden identificar qué datos desprendidos de las observaciones realizadas son compatibles con indicadores de riesgo relativos a los diferentes tipos de maltrato infantil, algunos más específicos y otros más inespecíficos. Por ejemplo, el maestro observa que el niño viene siempre sucio, llega tarde, no trae el desayuno y se duerme en clase y es esto sobre lo que informa, sin pronunciarse sobre si estas observaciones nos pueden estar indicando una situación de negligencia. El MSGR muestra un listado de observaciones2 y de esta manera el programa informático le da 2 Se ha realizado también la asociación entre los indicadores que constan en la base de datos de la DGAIA (SINI@) y las observaciones del MSGR, con el objetivo que puedan migrar los datos entre los diferentes ficheros con la máxima precisión posible en cuanto a su equivalencia. 11 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran una respuesta sobre el posible maltrato que podría estar sufriendo el niño sobre el que se está recopilando información. La Ley (LDOIA), por su parte, muestra un listado de situaciones de riesgo y de desamparo. Son situaciones que perjudican a algunos niños y a niñas, y se diferencian por el grado de desprotección y de gravedad que le suponen al niño o niña. Ahora bien, para llegar a corroborar su existencia se necesitará observaciones e indicadores de dichas situaciones. Dicha Ley entiende por situación de riesgo aquella en que el desarrollo y el bienestar del niño o adolescente se ven limitados o perjudicados por cualquier circunstancia personal, social o familiar, siempre y cuando para su protección efectiva no sea necesaria la separación del núcleo familiar (Art. 102). El concepto de factor de riesgo se refiere a las condiciones o circunstancias del niño, niña, su familia o su entorno que pueden contribuir a la aparición o aumento de una situación perjudicial para ellos. Por ejemplo, vivir en una vivienda insalubre o no tener ninguna red de apoyo social. Por contraste, se entiende por factores de protección aquellos que potencian el desarrollo del niño o adolescente y que su presencia reduce las probabilidades de que aparezca una situación de maltrato. Por ejemplo, disfrutar de la figura de un pariente que cuide del niño o niña. Por otra parte, los factores de resiliencia se refieren a las características del propio niño, niña o de su entorno que pueden ayudarle a superar más satisfactoriamente situaciones vividas de riesgo o de maltrato reduciendo o minimizando los efectos que estas situaciones pueden suponer por su desarrollo integral. Otra cuestión es la distinción entre los conceptos de maltrato, desprotección y desamparo. El maltrato puede ser intrafamiliar o bien suceder fuera de la familia sin que ésta haya tenido nada que ver. Será cuando el maltrato haya sido debido al comportamiento de los progenitores o titulares de la guarda o tutela del niño o niña, y 12 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran éste quede desprotegido, cuando se hablará de desamparo3. Por otra parte, un niño o niña también puede quedar desprotegido por una situación sobrevenida, sin que haya sido previamente maltratado. Maltrato y desamparo Mal tra to Maltrato y desamparo Des em pa ro En la LDOIA se consideran desamparados los niños, niñas o adolescentes que se encuentran en una situación de hecho donde les faltan los elementos básicos para el desarrollo integral de su personalidad, siempre que para su protección efectiva sea preciso aplicar una medida que implique la separación del núcleo familiar (Art. 105). Finalmente, se deben diferenciar los conceptos de urgencia y gravedad del posible maltrato sobre el que se informa a un servicio. La urgencia suele venir determinada por la necesidad de emprender acciones lo antes posible para conseguir la protección del niño o niña sobre el que se informa. En este sentido puede tratarse de una situación muy grave de maltrato (abuso sexual), o puede tratarse de una situación sobrevenida (por ejemplo la muerte o la hospitalización del familiar que lo cuidaba) a partir de la cual necesitará un nuevo guardador pero que no habrá sufrido maltrato. Es más, incluso ante una situación grave quizás no sea necesario finalmente separar al niño de la familia porque el agresor ingresa en prisión y, por el contario, en una situación urgente, pero no de maltrato, puede que sea necesario implementar medidas protectoras inmediatas. 2.2. Tipos de listados, criterios de valoración y derivación a los servicios Después de analizar los diferentes documentos referidos con respecto a las situaciones 3 EL MSGR entiende por maltrato intrafamiliar el maltrato físico, psicológico, sexual o de cualquier otro tipo que sufre el niño o la niña, a manos de algún miembro de su núcleo familiar o cuando sus guardadores no lo han o la han protegido del maltrato producido por personas ajenas a su familia. 13 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran de riesgo sobre las que tratan y los criterios que utilizan para su valoración, encontramos elementos comunes, elementos diferentes pero no contradictorios que obedecen a la especificidad del servicio, y elementos que comportan una cierta confusión o quizás contradicción. El proceso para la valoración de las situaciones de riesgo que podemos extraer del material revisado suele tener 3 fases, tal como lo esquematizamos en el cuadro 1: Cuadro 1: Proceso para la valoración del riesgo 1. Se identifican unas situaciones de riesgo clasificadas por niveles de gravedad 2. Se aplican unos criterios de valoración que matizan el nivel de gravedad 3. Se decide sobre el tipo de servicio - básico, especializado, de urgencia - que debe asumir el caso Sobre el primer paso del proceso, constan diferentes listas - de indicadores o factores o situaciones de riesgo, o de observaciones - que tienen asignados diferentes niveles de gravedad y de intervención (cuadro 2): − La LDOIA distingue 2 niveles de gravedad, pero prevé 3 niveles de intervención (SSB, EAIA, DGAIA). − El MSGR (RUMI-Infancia Respon) distingue 3 niveles de gravedad y 3 niveles de intervención, que pueden ser 4: servicio de la red, SSB (incluye derivación al EAIA) y DGAIA. − El documento de los EAIA prevé 3 niveles de gravedad y 3 niveles de intervención (SSB, EAIA y DGAIA). Por ejemplo, aparte de los que contiene la LDOIA que tienen un carácter más general, la aplicación del MSGR (RUMI-Infancia responde) está pensada para las valoraciones que puedan hacer los profesionales no expertos en maltrato infantil desde los diferentes ámbitos, al contrario de los listados del documento de los EAIA que están pensados para los profesionales expertos en malos tratos. 14 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Cuadro 2: Tipos de listados, nivel de gravedad y nivel de intervención L E Y M S G R D o c E A I A Tipos de listados Concepto y nivel de gravedad Listado situaciones de riesgo Riesgo no grave (leve y moderado) Riesgo grave Desamparo SBB EAIA DGAIA Situación de vulnerabilidad sin que se pueda apreciar una situación de maltrato. Puede estar sufriendo o en riesgo de sufrir de forma moderada o leve una situación de maltrato La situación en la que puede estar sufriendo de forma grave o en riesgo de sufrir un maltrato Cualquier servicio de la red Listado situaciones de desamparo Listado observaciones de gravedad leve (amarillo) Listado observaciones de gravedad moderada (naranja) Listado observaciones de gravedad grave (rojo) Listado de indicadores de gravedad leve de gravedad moderada de gravedad grave Listado No / bajo riesgo de maltrato situación de RIESGO Riesgo moderado de maltrato de situación desamparo Riesgo grave de maltrato Nivel de intervención SSB SSB EAIA EAIA DGAIA SSB SSB EAIA EAIA DGAIA Algunas listas están concebidas para la selección en la fase inicial y otras para una fase más avanzada del proceso de intervención. El MSGR incide más en la selección del caso en una fase más inicial. De entrada contiene algoritmos para determinar si la situación de riesgo o maltrato es de tipo intrafamiliar, es decir, si los progenitores o los titulares de la tutela o la guarda han sido los responsables del maltrato o la desatención, la han consentido o no han protegido al niño o niña. En este sentido, en el MSGR, en caso de que no se marque ninguna casilla relativa a los progenitores, el sistema responde que no tiene datos para pronunciarse sobre el riesgo detectado ni la acción a recomendar. En cambio el documento de los EAIA hace más incidencia en elementos que se conocen durante el proceso de intervención en el ámbito familiar. 15 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran En cuanto a los criterios de valoración que aplican, cada uno de estos documentos establece criterios que pueden variar el nivel de gravedad atribuido inicialmente a cada ítem de la lista y por lo tanto pueden desviar la intervención a otro nivel (menos especializado o más). Estos criterios se utilizan también para valorar la posibilidad de recidiva o repetición de la situación que ha sufrido el niño o niña. En el cuadro 3 están marcados según los hemos encontrado en los respectivos documentos. Cuadro 3: Criterios para la valoración del riesgo / protección Criterios para la valoración del riesgo / protección LDOIA MSGR Doc EAIA ¿Hay que separarlo del núcleo de convivencia? X X La disposición de la familia a emprender acciones protectoras X X La edad X X La apreciación del riesgo (leve, moderado, grave) que el X X profesional le atribuye a la observación hecha. Severidad y / o frecuencia del maltrato Las explicaciones que dan los progenitores X X El grado de preocupación o conciencia del problema por parte X X de los progenitores La colaboración de los progenitores con el servicio X X X El acceso al niño del responsable de las lesiones X X El niño tiene un diagnóstico de enfermedad mental X X El niño tiene una discapacidad X X El núm. de notificaciones acumuladas sobre un mismo caso. La X X concurrencia de un gran núm. de situaciones adversas Los antecedentes de los progenitores y del niño X X Si la intervención del servicio logra disminuir el riesgo. El caso X X X mejora o se agrava Cronicidad de la situación X X Proximidad temporal del incidente X X Factores de riesgo en el contexto (1) X X Procedencia de la información (directa o indirecta) X El interés del niño es contrario a la reinserción en su familia de X origen La existencia de factores resiliencia (1) X X (1) El listado de factores de resiliencia y factores de riesgo con respecto al contexto social del niño/a están presentes en estos documentos que marcamos, pero contienen algunos ítems diferentes. A partir de aquí, optamos por un listado y unificamos estos criterios de valoración con el objetivo de que sean una herramienta básica de decisión sobre el nivel de intervención. 16 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran 2.3 Aspectos relevantes en cuanto a la derivación a los servicios y procesos de selección La situación de riesgo social que afecta a un niño o niña puede ser detectada por cualquier servicio de la red. Pero no todos los servicios tienen acceso directo al mismo tipo de recurso o respuestas. Si es la escuela o el hospital el servicio que detecta la situación de riesgo, podrá coordinarlo o derivarlo a los servicios sociales de base, además de trabajar con otros dispositivos de salud y educación, o bien notificar a la DGAIA si la situación lo requiere; pero respetando los circuitos actuales, no podrá derivarlo directamente al EAIA. Esta competencia la tienen los servicios sociales básicos, que como primer nivel del Sistema Público de Servicios Sociales, son los servicios destinados a dar respuestas a las personas en situación de vulnerabilidad o riesgo en el ámbito propio de la convivencia y la relación (doc los SEAIA, 2010). Si el caso entra directamente a la DGAIA a través de la Unidad de Urgencias (UDEPMI) o la sección territorial correspondiente, éste puede ser redirigido al EAIA y los Servicios Sociales Básicos. La segunda apreciación importante es que cuando el caso entra a través del servicio que sea, puede ser que haya sido atendido durante tiempo por parte de otros servicios, y por tanto, a pesar de ser "nuevo" por el servicio que lo acoge por primera vez, se deberá tener en cuenta la relación anterior familia-servicio y el resultado de esta relación en cuanto a la situación del niño o niña. Por otra parte, si no ha habido intervenciones previas, un problema puede ser la escasez de datos. La tercera cuestión se refiere a la especificidad del servicio que lo acoge. Por ejemplo, la atención telefónica como la que realiza el Teléfono de la infancia, tiene unas especificidades diferentes a la atención presencial, y pueden establecer algún criterio específico sobre la fiabilidad de la información que reciben. A partir de lo que enmarca la LDOIA, los servicios pueden recibir el caso según el cuadro 4: 17 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Cuadro 4: Servicio a intervenir según nivel de gravedad y / o desprotección Gravedad / desprotección Leve Moderada Grave Desamparo Servicio Cualquier servicio de la red primaria SBB EAIA DGAIA La LDOIA establece la protección inmediata por parte de la DGAIA cuando es conveniente separar al niño o niña de sus progenitores y buscarle un recurso alternativo. Por otra parte, cualquier servicio puede trabajar conjuntamente con otros, por lo tanto no hay un criterio de exclusividad de intervención por parte de un servicio. Además, la decisión inicial de una determinada derivación puede variar después de conocer más el caso. Recapitulando, el hecho de intentar establecer unos criterios que sirvan para la toma de decisiones cuando entra el caso en algún punto de la red de servicios, no nos indica que el caso es nuevo y además se deben respetar los circuitos establecidos en la actualidad. 3. Propuesta de un listado de observaciones relativas a una situación de riesgo No se pretende escribir un listado de indicadores nuevo porque entendemos que los que están elaborados obedecen a la necesidad y a la perspectiva del lugar que el servicio ocupa en la red (primarios, especializados, de urgencia), aparte de ser el fruto de consensos y procesos participativos destacados y a veces largos y complejos, que no se pueden desestimar. Nuestra propuesta es optar por el listado de observaciones del MSGR como guía de base. Los motivos de esta elección que exponemos a continuación son varios y ninguno de ellos desmerece el valor de las otras relaciones de indicadores presentes en otros documentos. Los motivos son: 18 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran − Su proceso de elaboración es el que ha implicado un abanico más amplio de profesionales y ámbitos de intervención, resultando un intento integrativo de diferentes lenguajes y experiencias. Participaron profesionales de los departamentos de sanidad, los cuerpos policiales, los servicios sociales, y de la educación, expertos en protección a la infancia e investigadores universitarios. − Las observaciones y criterios de valoración han sido sometidos a un amplio proceso de validación por parte de profesionales de servicios sociales de atención primaria y especializados del ámbito de la infancia, y de expertos, resultando un consenso ampliamente mayoritario. − Parte de las observaciones que pueden realizar los profesionales y personas en contacto con la infancia, sin necesidad de que tengan que pronunciarse sobre indicadores de maltrato. − A pesar de que incluye sólo cuatro ámbitos de actuación (educación, servicios sociales, cuerpos policiales y sanidad), permitiría fácilmente ampliarlo a otros (por ejemplo, el tiempo libre) e incluso a la recopilación de observaciones hechas por ciudadanos implicados. − Fue diseñado para ser insertado en la web RUMI-Infància-Respon de la Generalitat, a fin de llegar a constituir un instrumento común de los diferentes ámbitos. − Está abierto a mejoras y reajustes. − Epistemológicamente, las observaciones de hipotéticas situaciones relacionadas con riesgos sociales son previas al establecimiento de indicadores de riesgo. Por lo tanto, permiten una secuencia del trabajo profesional de menos a más especialización, preparando el trabajo de quienes deben tomar decisiones sobre la base de datos más especializadas. Es un listado pensado inicialmente para ayudar en la toma de decisiones sobre un caso que acaba de entrar al servicio o un incidente nuevo sobre un caso conocido, pero también puede ayudar en aquellas situaciones que hace tiempo que se conocen, en los que la duración de la intervención requiere una nueva toma de decisión. En vez de optar por un listado, se podía haber establecido equivalencias entre los listados aquí tratados (LDOIA, MSGR y doc EAIA) u otros que utilizan los demás 19 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran servicios, al igual que se ha hecho entre los indicadores que figuran a la base de datos de la DGAIA (Sini@) y los de MSGR. Pero es preferible, siempre que sea posible, la utilización de la misma lista, que incluya las diferentes perspectivas de los servicios y que quede abierta a las modificaciones que sean necesarias para ajustarnos a los criterios de fiabilidad y validez que se requieran. 3.1. Descripción del listado El listado de observaciones está agrupado de entrada en 5 grandes bloques. Los tres primeros contienen las observaciones referentes al niño, niña y adolescente: A. Aspecto físico y situación personal del niño o niña B. Área emocional y comportamental del niño o niña C. Desarrollo y aprendizaje del niño o niña El cuarto bloque contiene las observaciones referentes al comportamiento de los progenitores o guardadores respecto al niño o niña: D. Relación de los progenitores/guardadores con el niño o niña El quinto bloque son observaciones relativas al contexto y que actúan como factores de riesgo: E. Contexto social, familiar y personal del niño niña Todas las observaciones están agrupadas por conjuntos de observaciones temáticos (por ejemplo, la higiene del niño o niña) Todas las observaciones están asociadas a una franja de edad que nos indica: - la edad en la que podemos observar (por ejemplo, de 0 a 3 años las lesiones en la zona de los pañales) - la edad en que esa observación puede constituir un prejuicio para el niño (por ejemplo, abandono escolar en la etapa obligatoria) 20 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Cada conjunto de observaciones tiene asignada una gravedad inicial, tal y como se puede ver en el cuadro 5. Cuadro 5: Conjunto de observaciones y gravedad Gravedad leve Situación de vulnerabilidad sin que se pueda apreciar una (amarillo) situación de maltrato. Gravedad moderada Situación en la que puede estar sufriendo o en riesgo de (naranja) sufrir de forma moderada o leve un maltrato Gravedad grave La situación en la que puede estar sufriendo de forma grave (rojo) o en riesgo de sufrir un maltrato Algunas observaciones están asociadas a un tipo de maltrato en caso de que sean específicas de alguno de ellos, y otras nos alertan de una situación que puede ser perjudicial para los niños sin que estén asociadas a ninguna tipología en concreto. Cada ámbito de actuación contiene las observaciones que se pueden realizar desde el lugar que el servicio ocupa en la red y desestima las que son difíciles de observar desde su ámbito. Otras observaciones son más comunes a todos los servicios. Esto hace que algunas observaciones parezcan repetidas, pues según el ámbito con el cual se mostrarán, están redactadas de una manera u otra. Por ejemplo, en el conjunto A5, la número 7 “Presenta pagiocefalia/alopecia localizada” se muestra sólo en el ámbito de salud, mientras que en el resto de ámbitos se muestra como “Presenta falta de mechones de cabello” (núm. 6), significando ambas lo mismo. En el listado que se muestra a continuación figuran todas las observaciones, agrupadas por conjuntos y bloques, indicando la gravedad y la franja de edad (cuadro 6). Presentamos los conjuntos de observaciones ordenados de menor a mayor gravedad (amarillo, naranja, rojo), por lo que la numeración inicial queda alterada. 21 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Cuadro 6: Bloques (letra), conjuntos de observaciones (letra y núm.) y observaciones por gravedad y edad (números) A. ASPECTO FÍSICO Y SITUACIÓN PERSONAL DEL NIÑO/A EDAT A1. La higiene del niño/a es deficiente 1 Acude con la ropa sucia 2 Presenta olores desagradables 3 Acude con ropa y / o calzado inadecuados 4 Presenta una higiene corporal deficiente 5 Presenta lesiones cutáneas con enrojecimiento de la piel en la zona de los pañales A2. La alimentación del niño o niña es descuidada o insuficiente 1 Asiste a la escuela sin desayunar y no trae desayuno 2 Pide o roba comida, dice que pasa hambre, que en casa no le dan de comer 3 Hay indicios de una alimentación muy deficiente e inadecuada A3. El niño o niña muestra cansancio habitual 1 Se muestra cansado sin justificación 2 Se duerme en clase A7. El niño o niña sufrió, en el pasado, maltrato 1 Sufrió, en el pasado, algún tipo de abuso sexual 2 Sufrió, en el pasado, agresiones físicas 3 Sufrió, en el pasado, maltrato prenatal A4. Manifestaciones de dolencias físicas por parte del niño o niña 1 Se queja a menudo de dolor (dolor de estómago, dolor de cabeza ...) 2 Está constantemente enfermo 3 Presenta heridas, golpes, etc., que parecen producidas accidentalmente A9. Manifestaciones de otras personas, profesionales o miembros de la familia 1 Han observado situaciones que hacen pensar en un abuso sexual 2 Dicen que los progenitores / guardadores golpean al niños o niña 3 Sienten que el niño o niña recibe agresiones verbales y / o físicas (golpes, llantos, gritos, etc.) 4 Han observado que desatienden al niño o niña A11. El niño o niña ha sufrido desatenciones graves y / o agresiones antes de su nacimiento 1 Presenta el síndrome de abstinencia neonatal 2 Presenta enfermedades o trastornos asociados a consumo de tóxicos de la madre durante el embarazo 3 Tiene lesiones físicas o neurológicas por inadecuado control médico de la madre durante el embarazo A5. El niño o niña es receptor de violencia física 1 Presenta heridas o rozaduras 2 Presenta señales de mordeduras 3 Presenta golpes en el cuerpo 4 Presenta hematomas 5 Presenta quemaduras 6 Presenta falta de mechones de cabello 7 Presenta plagiocefalia / alopecia localizada 8 Presenta derrames oculares 9 Presenta hemorragias retinales 10 Presenta cortes o pinchazos 11 Presenta fracturas óseas 12 Presenta el síndrome del niño sacudido 0-17 3-17 0-17 0-17 0-3 1-17 3-17 0-17 1-17 6-17 1-17 1-17 1-17 2-17 1-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-3 0-3 0-3 0-3 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-3 22 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran 13 Presenta hemorragias internas 14 Presenta dolor en determinadas partes del cuerpo 15 Manifiesta o señala con gestos que sus progenitores son los causantes de las lesiones 16 Manifiesta que está siendo receptor de violencia física por parte de alguien de su entorno 17 Da explicaciones extrañas o poco convincentes con respecto a las lesiones que presenta A6. El niño o niña puede estar sufriendo actualmente abusos sexuales 1 Presenta dolor / picor en la zona anal / genital 2 Tiene molestias cuando camina o se sienta 3 Presenta ropa interior rasgada, manchada o con sangre 4 Es una niña o adolescente embarazada, especialmente si se niega a identificar al padre 5 Presenta contusiones o sangrado en los genitales externos, la zona vaginal o anal 6 Presenta una enfermedad de transmisión sexual 7 Presenta eritema y / o edema en la zona vulvar o anal 8 Se detecta semen en la boca, los genitales o en la ropa 9 Presenta alteraciones en el esfínter anal (apertura signo de la O, grietas o hematomas) 10 Presenta alteraciones de la membrana himenal 11 Hay indicios de que la están forzando en actividades sexuales (abuso sexual) 12 Explica que está sufriendo abusos sexuales por parte de alguien de su entorno 13 Manifiesta o señala con gestos que sus progenitores son los causantes del abuso sexual 14 Da explicaciones extrañas o poco convincentes con respecto a las lesiones que presenta A8. El niño o niña presenta síntomas compatibles con haber sufrido o estar en riesgo de sufrir mutilación genital femenina 1 Ha sufrido una mutilación genital femenina 2 Hay indicios de haber sufrido una mutilación: viene triste del viaje a su país, no quiere hablar 3 Hay indicios que hacen pensar que puede estar en riesgo de sufrir una mutilación genital femenina A10. Situaciones que hacen que el niño o niña se encuentre gravemente desprotegido 1 Está en una situación sobrevenida en la que nadie se hace cargo 2 Sufre una desatención alimenticia que por edad o condiciones especiales supone un riesgo de muerte 3 Ha sido abandonado intencionadamente 4 No recibe el tratamiento por una enfermedad grave, poniendo en riesgo su vida 5 La madre y / o el padre quiere dar el niño o la niña en adopción 6 No tiene ningún referente familiar en el país 7 Es una niña o adolescente embarazada (o madre) con graves dificultades personales y sociales 8 Sufre una situación de peligro grave por la que solicita protección inmediata 9 Sufre amenazas de muerte o abandono de los progenitores o guardadores 0-17 0-17 1-17 1-17 3-17 0-17 3-17 0-17 12-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 3-17 3-17 3-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 0-17 9-17 6-17 0-17 B. ÁREA EMOCIONAL Y COMPORTAMENTAL DEL NIÑO O NIÑA B1. Conductas disociales y/o agresivas del niño o niña 1 Comete pequeños hurtos fuera o dentro de la escuela 2 Manifiesta una conducta agresiva ante la presencia de la policía 3 Presenta una conducta agresiva física contra terceras personas 4 Presenta una conducta agresiva verbal contra terceras persones 5 Presenta una conducta destructiva con objetos 6 Se relaciona con un grupo de amigos conflictivos 7 Mantiene a menudo conductas de provocación (desafiante…) 8 Comete actos de vandalismo, racismo o xenofobia 9 Transgrede las normas sistemáticamente 6-17 6-17 6-17 6-17 6-17 6-17 6-17 10-17 6-17 23 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran B4. Manifestaciones de miedo y/o angustias 1 Manifiesta acciones defensivas ante cualquier aproximación física 2 No quiere hacer actividades que requieran mostrar partes del cuerpo (para esconder golpes…) 3 Parece tener miedo de sus progenitores o manifestarles rechazo 4 No quiere irse a casa 5 Muestra un alto nivel de ansiedad ante actividades normales como el cambio de pañales. 6 Presenta dificultades graves para calmarse en brazos de quien lo cuida. 7 Se preocupa mucho de estar a la altura de las expectativas de los progenitores o para ser aceptado. 8 Muestra sentimientos de culpabilidad de la situación vivida. 9 Manifiesta que no le dejan entrar en casa o que lo han echado o que quiere ingresar en un centro. 10 Muestra señales de ansiedad. 11 Manifiesta que quiere ingresar en un centro B5. Alteraciones en la relación con los demás 1 Manifiesta una familiaridad excesiva con extraños (marcha fácilmente con desconocidos) 2 Llama continuamente la atención 3 Realiza demandas continuadas de afectividad 4 No interacciona, no fija la mirada, a menudo parece ausente 5 Parece tener dificultad para formar vínculos afectivos estables 6 Presenta problemas de relación con el grupo de iguales B6. Otras manifestaciones de alteración del estado de ánimo 1 Muestra un aspecto triste y / o llora a menudo sin causa aparente 2 Se muestra pasivo y retraído y / o se aísla 3 Hace comentarios que parecen indicar que tiene una autoestima baja 4 Manifiesta a menudo conductas que corresponden a una edad inferior (conductas regresivas) 5 Falta de llanto y ausencia de queja ante el dolor 6 Se muestra inquieto, nervioso 7 Presenta trastornos de alimentación (vómitos, diarreas, anorexia del lactante) 8 Presenta desórdenes graves asociados con el dormir B7. El niño o niña presenta comportamientos de autoestimulación compulsiva 1 Realiza balanceos compulsivos 2 Presenta masturbación compulsiva 3 Se da cabezazos de forma voluntaria y repetida B9. El niño o niña está adoptando roles que no le corresponden por edad 1 Asume responsabilidades impropias de la edad con miembros de la familia o tareas de casa 2 Adopta un rol cuidador respecto a los progenitores (inversión de roles) B8. El niño o niña presenta comportamientos sexualizados inadecuados para la edad 1 Manifiesta conductas y preocupaciones sexuales o utiliza términos inadecuados para su edad 2 Acosa o agrede sexualmente a otros niños o adolescentes 3 Manifiesta, de forma recurrente, tener miedo a un embarazo o el sida 4 Muestra promiscuidad sexual B2. Conductas de riesgo hacia sí mismo 1 Deambula menudo por las calles en horario escolar y / o de noche 2 Se ha escapado de casa 3 Se expone a situaciones de riesgo (conducción temeraria, metring, mal uso de las tecnologías) 4 Dice cosas que indican que piensa a menudo en el suicidio o ha hecho un intento de suicidio 5 Se autolesiona 6 Se provoca el vómito, toma laxantes, se niega a comer ... 7 Presenta falta de autocontrol B3. El niño o niña consume sustancias tóxicas 1 Consume alcohol 3-17 6-17 3-17 3-12 0-3 0-3 4-17 4-17 6-17 3-17 6-17 3-12 3-17 3-17 1-12 3-17 3-17 1-17 3-17 4-17 3-17 0-12 0-17 0-17 0-17 3-17 3-17 1-17 4-17 4-17 3-17 4-17 6-17 12-17 3-16 6-17 6-17 6-17 6-17 6-17 6-17 6-17 24 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo 2 3 4 5 6 Montserrat, Casas y Bertran Consume otras drogas Consume otras sustancias estupefacientes Consume tabaco Se observan estados que sugieren que ha consumido (ojos enrojecidos, olor a alcohol, euforia...) Presenta síntomas compatibles con el síndrome de abstinencia 6-17 6-17 6-12 6-17 1-17 C. DESARROLLO Y APRENDIZAJE DEL NIÑO O NIÑA C1. . El niño o niña presenta dificultades destacables en los aprendizajes escolares 1 Manifiesta problemas de atención y concentración 3-17 2 No es constante en las actividades escolares y no hace los deberes con frecuencia 6-16 3 Está matriculado en un nivel inferior al que le corresponde por edad 6-16 4 Presenta dificultades de aprendizaje 3-17 5 Presenta cambios repentinos en su rendimiento escolar 3-17 6 Presenta repetidos cambios de centro escolar a lo largo de su escolaridad 3-17 C3. El niño o niña a menudo tiene dificultades en el control de esfínteres 1 Presenta problemas de enuresis, con relativa frecuencia 6-17 2 Presenta problemas de encopresis, con relativa frecuencia 6-17 C2. El niño o niña presenta un retraso en el desarrollo 1 Presenta retraso en la adquisición de capacidades verbales, cognitivas o sociales propias de la edad 0-17 2 No responde a los estímulos como sería de esperar por la edad 0-12 3 No se le observan habilidades y / o el tono motriz propios de la edad 0-17 4 Presenta peso y talla muy inferiores por la edad 0-17 5 No realiza juego imitativo o manipula los objetos de forma estereotipada sin deseo de explorar 0-6 C4. El niño o niña presenta problemas con la asistencia escolar 1 Marcha de clase o de la escuela ante cualquier contrariedad 3-17 2 Realiza faltas de asistencia injustificadas y / o absentismo escolar o laboral 3-17 3 Ha abandonado la escolaridad en la etapa obligatoria 3-16 D. RELACIÓN DE LOS PROGENITORES / GUARDADORES CON EL NIÑO O NIÑA D1. Los progenitores o guardadores manifiestan rechazo hacia el niño o niña 1 Manifiestan una imagen negativa del niño o niña y no le reconocen valores positivos 0-17 2 Le repiten que no le quieren 1-17 3 Se ríen de sus dificultades 1-17 4 Lo critican, avergüenzan, descalifican, insultan, ridiculizan o amenazan 1-17 5 Minimizan los episodios de pena, enfermedad o daño físico del niño 0-17 6 Manifiestan enojo cuando el niño o niña se hace daño 0-17 7 No se observa ningún expresión física de afecto del progenitor hacia el niño o niña 0-17 8 Muestran una relación de celos con el niño o niña, rivalizando por la atención de la pareja 0-17 9 Son conocedores de la situación de maltrato que sufre y no lo protegen 0-17 10 Son conocedores de la situación de abuso sexual que sufre y no lo protegen 0-17 11 No permiten al niño o niña contacto táctil con ellos (caricias, mimos, ternura ...) 0-17 12 Lo echan de casa o dicen que no quieren saber nada más de él o ella 0-17 13 Tratan de manera muy desigual a los hermanos 0-17 D2. El seguimiento y control de la salud del niño o niña no parece el adecuado 1 Lo traen enfermo a la escuela 0-17 25 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran 2 No atienden las enfermedades o daños físicos del niño o niña 0-17 3 No llevan a cabo las revisiones médicas 0-17 4 No tienen cuidado de las deficiencias visuales, auditivas, etc. del niño o niña 0-17 5 No siguen los tratamientos médicos y / o higiénicos que les indican 0-17 6 No asisten a los servicios especializados indicados o derivados (atención precoz, salud mental) 0-17 7 No aceptan la enfermedad del niño o niña y por tanto no le proporcionan la asistencia que necesita 0-17 D3. Hay sospechas de manipulación de la salud del niño o niña por parte de los progenitores 1 Llevan a menudo medicamentos a la escuela sin justificante médico 0-16 2 Le atribuyen a menudo enfermedades dudosas o síntomas no observados en la escuela o por el personal sanitario Realiza faltas de asistencia reiteradas por enfermedades sin justificación médica 0-17 4 5 3-17 0-17 6 Presenta síntomas recurrentes que desaparecen cuando lo separan de la familia y vuelven cuando está con ella Se observan múltiples ingresos hospitalarios 7 Se observan síntomas compatibles con una intoxicación por fármacos, drogas o alcohol 0-17 8 Promueven excesivos requerimientos médicos (pruebas, medicación, tratamientos) en el niño o niña 0-17 0-17 D4. Los progenitores o guardadores aíslan al niño o niña del entorno social 1 Se muestran extremadamente protectores o controladores 0-17 2 No le dejan estar con amigos 3-17 3 Evitan que se relacione con otros adultos que no sean ellos 3-17 4 Le repiten que no hay nadie más en el mundo en quien confiar aparte de ellos 3-17 5 Se muestran muy posesivos con respecto al niño o niña 0-17 6 Le mantienen retenida la documentación (pasaporte, DNI) 6-17 D5. Los progenitores o guardadores se despreocupan de las actividades escolares y de ocio del niño o niña 1 Se olvidan de recogerlo de la escuela o lo recogen o acompañan muy tarde 0-17 2 Se despreocupan por el ocio del niño o niña 3-17 3 No se preocupan por los contenidos de las actividades que realiza el niño o niña (violencia, pornografía) 3-17 4 No lo han escolarizado 3-16 5 Hay un abandono escolar consentido y / o favorecido 3-16 6 No asisten a las reuniones ni entrevistas con la escuela cuando se les cita 0-17 7 Son causantes o consentidores de las faltas de asistencia y / o absentismo escolar del niño/a 3-16 8 Desconocen el curso donde acude, el profesor, sus amigos, qué actividades realiza ... 3-16 9 No se preocupan de que lleve el material escolar (chándal ...) 3-12 D6. Los progenitores o guardadores no atienden las necesidades básicas del niño o niña 1 Desatienden sus necesidades básicas (alimentación, higiene ...) 0-17 2 No respetan los hábitos o rutinas que necesita (horas de sueño y descanso, las comidas …) 0-16 3 El niño o niña pasa muchas horas solo o encerrado en casa 0-12 4 El niño o niña pasa la mayor parte del día solo en casa y / o fuera del domicilio 0-12 5 Muestran un desconocimiento de las necesidades emocionales y de estimulación del niño o niña 0-17 6 No le facilitan la ayuda u orientación que necesita o no colaboran con los servicios que le atienden 0-17 7 Se encargan del niño o niña otros familiares, amigos o vecinos no adecuados 0-17 8 Se encargan del niño o niña otros familiares, amigos o vecinos por despreocupación de los progenitores 0-17 9 Se da una ausencia de supervisión del niño o niña (riesgo de accidentes domésticos) 0-17 10 Priorizan asuntos propios, en detrimento de la atención al niño o niña, pudiendo evitarlo 0-17 11 Lo dejan muchas horas solo en un piso donde vienen a menudo personas ajenas a la familia 0-17 12 Frecuentan con el niño o niña ambientes o locales no adecuados para éste (bares, discotecas ...) 0-12 13 Casi no lo visitan cuando está hospitalizado 0-17 26 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran D9. Los progenitores o guardadores manifiestan a menudo incapacidad de control del niño o niña 1 Se quejan a menudo que "no pueden" con el niño o niña, que es demasiado difícil 0-17 2 Manifiestan que quieren ingresarlo en un centro debido a su conducta 0-17 3 Manifiestan que le tienen miedo y / o que han recibido amenazas o les ha agredido 6-17 4 Manifiestan que tiene ataques de violencia incontrolable 3-17 D10 Los progenitores / guardadores muestran pautas educativas no adecuadas con el niño o niña 1 Utilizan el castigo físico como método habitual de disciplina 0-17 2 Utilizan habitualmente métodos o pautas educativas extremadamente rígidos y poco flexibles 0-17 3 No tienen en cuenta su opinión en ninguna de las decisiones que le afectan directamente 4-17 4 Lo presionan de forma desmedida para que saque buenas notas o destaque en alguna actividad 4-17 5 Le inculcan odio o prejuicios religiosos, étnicos, culturales o de otro tipo 3-17 6 El culpabilizan de los problemas familiares (no hace lo suficiente por ellos, se presentan como mártires) 1-17 7 Lo utilizan en el conflicto conyugal / de pareja 0-17 8 Inducen al niño o niña al consumo de tóxicos (cannabis, alcohol ...) 7-17 9 Le toleran absolutamente todos los comportamientos sin ponerle ningún límite 1-17 Utilizan pautas educativas incoherentes 1-17 10 D11. Los progenitores han desatendido gravemente y / o han agredido al niño o niña antes de nacer 1 La madre presenta abuso de alcohol u otras drogas durante el embarazo <0-3 2 La madre realiza un inadecuado control médico del embarazo que puede suponer un riesgo para el feto <0-3 3 Se da violencia contra la madre y el feto <0-3 4 La madre realiza conductas de riesgo para el feto (vive en la calle, no acepta ayuda) <0-3 5 La madre hace intentos de perder el niño o niña o lo rechaza durante la gestación <0-3 D14. El niño o niña está viviendo en un entorno familiar violento 1 Se dan relaciones violentas entre la pareja 0-17 2 Se da violencia física / psíquica manifiesta contra otros miembros de la familia 0-17 3 Hay agresiones mutuas entre progenitores e hijos 6-17 4 Se dan múltiples o cruzadas denuncias entre los miembros de la familia 0-17 5 Uno de los progenitores ha matado al otro 0-17 D7. Los progenitores o guardadores aterrorizan o intimidan al niño o niña 1 Lo aterrorizan (lo amenazan con mutilar-lo, matarlo, venderlo, rompen sus cosas) 0-17 2 Utilizan sistemáticamente el miedo como forma de disciplina 1-17 3 Muestran violencia manifiesta contra las personas delante del niño o niña 0-17 4 Han hecho intentos o han consumado un suicidio u homicidio ante el niño o niña 0-17 5 Lo amenazan en hacerle daño, dicen que no responden de sus actos 0-17 6 Utilizan un trato colérico y explosivo con el niño o niña 0-17 7 Muestran violencia manifiesta contra animales o cosas delante el niño o niña 0-17 D8. Los progenitores o guardadores pueden estar explotando o corrompiendo al niño o niña 1 Hay indicios de que podrían estar forzando o consintiendo una situación de explotación laboral 4-15 2 Fuerzan o consienten una situación de explotación laboral 4-15 3 Hay indicios de que podrían estar forzando al niño o niña en actividades sexuales 0-17 4 Lo utilizan en actividades sexuales (prostitución, pornografía, etc.) 0-17 5 Lo utilizan para la mendicidad 0-17 6 Lo utilizan en actividades disociales o delictivas (vandalismo, robos ...) 0-17 7 Hacen actos sexuales ante la presencia del niño o niña 0-17 8 Le suministran sustancias tóxicas (alcohol, cannabis, taba, etc) 0-6 D12. Situaciones que hacen que el niño o niña se encuentra gravemente desprotegido 27 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran 1 Han detenido a los progenitores o guardadores y no hay nadie que pueda hacerse cargo 0-17 2 Se le ha encontrado solo por la calle o en un domicilio y no se localiza nadie de la familia 0-16 3 No lo han recogido del colegio y la policía no localiza a nadie que pueda hacerse cargo 0-12 4 No lo han recogido del colegio y no se localiza a nadie que pueda hacerse cargo 0-12 5 Hay un ingreso hospitalario de los progenitores y no hay nadie que pueda hacerse cargo 0-16 6 Desatienden la alimentación que, por edad o condiciones especiales, le supone un riesgo de muerte 0-17 7 Ha sido abandonado intencionadamente 0-17 8 No siguen los tratamientos por enfermedades graves con alto riesgo para su vida 0-17 9 La madre y / o el padre quiere dar el niño en adopción 0 10 Menores sin referentes familiares en el territorio 0-17 11 Amenazan con matar al niño o niña 0-17 12 Amenazan con dar al niño o niña 0-17 13 Manifiestan un miedo angustioso a agredirle 0-17 D13. Los progenitores / guardadores pueden estar maltratando físicamente al niño o niña o abusando de él sexualmente 1 Pueden ser los causantes de las lesiones físicas que presenta 0-17 2 Pueden estar abusando sexualmente de el niño o niña 0-17 3 Pueden haber favorecido una mutilación genital femenina o están en riesgo de hacerlo 0-17 E. CONTEXTO SOCIAL, FAMILIAR Y PERSONAL DEL NIÑO/A E7. Los progenitores o guardadores tienen una historia personal de desprotección 1 Hay una historia personal de maltrato físico o de abuso sexual en los progenitores 0-17 2 Hay una historia personal de negligencia en los progenitores 0-17 3 De pequeños estuvieron institucionalizados en el sistema de protección 0-17 E8. Situación familiar de especial consideración 1 Alguno de los progenitores está en prisión 0-17 2 Ambos progenitores están en prisión 0-17 3 Los ingresos económicos familiares provienen de actividades presuntamente delictivas o no legales 0-17 3 Algunos de los progenitores ejerce la prostitución 0-17 E9. El núcleo familiar tiene dificultades sociales, económicas y / o de organización 1 No tiene apoyo social y / o familiar 0-17 2 Tiene insuficiencia de ingresos económicos para garantizar el cuidado básico del niño o niña 0-17 3 Los progenitores son adolescentes con graves dificultades económicas o falta de apoyo 0-17 4 Es un núcleo monoparental con graves dificultades económicas o con falta de apoyo 0-17 5 Hay graves deficiencias en las habilidades de organización y economía doméstica 0-17 6 Es un núcleo en situación de inmigración con graves dificultades económicas o legales o falta de apoyo 0-17 7 Se dan cambios constantes de domicilio 0-17 8 Hay cambios frecuentes de pareja y / o de los referentes adultos del niño o niña (cambios de cuidadores) 0-17 E10. El núcleo familiar vive en un contexto social de especial consideración 1 Viven en una situación de aislamiento en zona rural 0-17 2 Viven en un campamento provisional de caravanas 0-17 3 Habitan en una zona con concentración de población en situación de dificultad social 0-17 4 El contexto familiar, cultural o religioso es poco favorecedor de los derechos del niño o de la mujer 0-17 E11. Los guardadores o progenitores presentan un aspecto físico muy desfavorable 1 Su higiene corporal es muy deficiente 0-17 2 Presentan a menudo lesiones físicas 0-17 28 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo 3 Montserrat, Casas y Bertran Presentan un estado muy somnoliento 0-17 E12. Las condiciones personales del niño o niña le pueden hacer más vulnerable 1 Padece una enfermedad crónica 0-17 2 Tiene alguna discapacidad física, intelectual o sensorial 0-17 3 Presenta algún trastorno mental 0-17 4 Período postnatal difícil (irritabilidad / dificultad para calmarlo /largas hospitalizaciones) 0-1 E1. Los guardadores o progenitores pueden tener una adicción al alcohol u otras drogas 1 Presentan síntomas compatibles con un abuso de alcohol 0-17 2 Presentan síntomas compatibles con un abuso de otras drogas (que no sean el alcohol) 0-17 3 Presentan síntomas compatibles con consumo de otras sustancias estupefacientes diferentes del alcohol 0-17 4 Se observa la existencia de sustancias estupefacientes o tóxicas al alcance de los niños 0-17 E2. Los guardadores o progenitores pueden estar sufriendo algún trastorno mental 1 Presentan síntomas compatibles con algún trastorno mental 0-17 E3. Los guardadores presentan una discapacidad intelectual 1 Presentan dificultades compatibles con alguna discapacidad intelectual 0-17 E4. Los guardadores presentan una enfermedad física 1 Los progenitores sufren alguna enfermedad física grave 0-17 E5. La vivienda no presenta unas condiciones mínimas de habitabilidad e higiene para el niño o niña 1 Las condiciones de la vivienda son insalubres o peligrosas 0-17 2 La vivienda se encuentra en condiciones precarias de mantenimiento, equipamiento y orden 0-17 3 Hay hacinamiento (conviven muchas personas en una misma casa) 0-17 4 Han sido desahuciados o no tienen domicilio 0-17 E6. Antecedentes de violencia o de abuso sexual en la historia familiar 1 Alguno de los progenitores ha fallecido por causas violentas (asesinato, suicidio ...) 0-17 2 Uno de los progenitores agredió al otro 0-17 3 Algún hermano ha sufrido malos tratos físicos y / o abuso sexual 0-17 4 Uno de los progenitores tiene antecedentes de haber maltratado física o sexualmente a terceras personas 0-17 3.2. Uso del listado Para apreciar una situación de riesgo del niño o niña a sufrir una situación de maltrato intrafamiliar, se debería tener: Alguna observación relativa al niño o niña (bloques A o B o C) + Alguna observación relativa a la situación o relación que mantienen los progenitores / guardadores respecto al niño o niña (bloque D o los tres primeros del E) Si no se consideraran necesarias ambas observaciones, cabría la posibilidad de ingresar un niño maltratado físicamente, atendido en un hospital, sin que los progenitores tuvieran ninguna responsabilidad. O por el contrario, podríamos observar un trastorno 29 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran en alguno de los progenitores que no estuviera afectando al niño. Entendemos que hay una relación de interdependencia entre los bloques. El bloque E, sobre datos extraídos del contexto personal y social del niño son opcionales en el sentido que según sea el ámbito de actuación, es difícil saber qué tipo de vivienda tienen o los antecedentes familiares, por ejemplo. Además, actúan como factores que pueden aumentar el riesgo, pero por sí solos no nos indican ninguna tipología de maltrato. Ahora bien, hay una excepción, fruto de la complejidad que genera el tema que tratamos. Los tres primeros conjuntos de observaciones del bloque E sobre el contexto del niño hacen referencia a la drogadicción o alcoholismo de los progenitores, la enfermedad mental y la discapacidad psíquica respectivamente. Estos factores están, según las estadísticas y las investigaciones sobre protección infantil, especialmente presentes en situaciones de desprotección y la LDOIA también los contempla explícitamente. Es por este motivo que se les otorga el mismo peso que las otras observaciones del Bloque D dedicadas a la relación de los progenitores con sus hijos. A partir de ahí, el nivel del riesgo apreciado nos viene de entrada indicado por el color: si hemos marcado sólo observaciones amarillas estaremos ante un caso leve, si también hemos marcado algunas de naranjas nos indicará una gravedad moderada y si hemos seleccionado alguna de roja, el caso será grave. En caso de seleccionar observaciones que pertenecen a grupos de "colores" diferentes, prevalecerá el índice de gravedad más alto. Ahora bien, ¿es suficiente? ¿Sólo con esta primera valoración ya podemos decidir que los naranjas los derivamos a los SSB y los rojos a los EAIA o la DGAIA? No siempre. Por ejemplo, podemos estar ante una situación gravísima de abuso sexual pero que uno de los progenitores haya establecido protección hacia el niño, o bien, ante una situación menos grave pero que quede el niño o la niña totalmente desprotegido. Será diferente si los servicios ya han intentado ayudar a la familia durante un largo periodo de tiempo y la situación no mejora, a si la familia no ha tenido aún la oportunidad de rehacer la situación de perjuicio para el niño, por poner algunos ejemplos. Por lo tanto, aunque de entrada la priorización de los casos se hará en función de la gravedad (los rojos son los más prioritarios) se necesitan unos criterios para matizar algunas de las observaciones para poder tomar una decisión más precisa sobre la intervención que se requiere. 4. Propuesta de criterios de valoración para la toma de decisiones a partir de la lista de observaciones El objetivo es elaborar una propuesta para unificar los criterios de valoración de las situaciones de riesgo, de manera que sean aplicables desde los diferentes servicios. 30 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Dado que estos criterios deben ser lo más fiables posible, se parte del proceso de validación ya hecho con el MSGR. 4.1. Situaciones sobrevenidas o de facto De entrada será suficiente cuando se dé una sola de las siguientes observaciones, contenidas en los conjuntos de observaciones referentes al niño o a los progenitores, para notificar la situación a la DGAIA a fin de que se analice la situación y se decida si es preciso realizar una intervención protectora inmediata: A10. Situaciones que hacen que el niño o niña se encuentre gravemente desprotegido 1 Está en una situación sobrevenida en la que nadie se hace cargo 2 Sufre una desatención alimenticia que por edad o condiciones especiales supone un riesgo de muerte 3 Ha sido abandonado intencionadamente 4 No recibe el tratamiento por una enfermedad grave, poniendo en riesgo su vida 5 La madre y / o el padre quiere dar el niño o la niña en adopción 6 No tiene ningún referente familiar en el país 7 Es una niña o adolescente embarazada (o madre) con graves dificultades personales y sociales 8 Sufre una situación de peligro grave por la que solicita protección inmediata 9 Sufre amenazas de muerte o abandono de los progenitores o guardadores D12. Situaciones que hacen que el niño o niña se encuentra gravemente desprotegido 1 Han detenido a los progenitores o guardadores y no hay nadie que pueda hacerse cargo 2 Se le ha encontrado solo por la calle o en un domicilio y no se localiza nadie de la familia 3 No lo han recogido del colegio y la policía no localiza a nadie que pueda hacerse cargo 4 No lo han recogido del colegio y no se localiza a nadie que pueda hacerse cargo 5 Hay un ingreso hospitalario de los progenitores y no hay nadie que pueda hacerse cargo 6 Desatienden la alimentación que, por edad o condiciones especiales, le supone un riesgo de muerte 7 Ha sido abandonado intencionadamente 8 No siguen los tratamientos por enfermedades graves con alto riesgo para su vida 9 La madre y / o el padre quiere dar el niño en adopción 10 Menores sin referentes familiares en el territorio 11 Amenazan con matar al niño o niña 12 Amenazan con dar al niño o niña 13 Manifiestan un miedo angustioso a agredirle 4.2. Preguntas clave Para el resto de observaciones se deberá aplicar unos criterios de valoración adicionales. Una vez identificadas las observaciones que nos preocupan relativas a un niño o niña y visto el nivel de gravedad que se señale -leve, moderado o grave–, el profesional que atiende el caso se deberán plantear una serie de preguntas clave. Las respuestas pueden 31 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran considerarse, según el caso, como indicadores de riesgo y así, aumentarán el cálculo de las probabilidades de maltrato, o como indicadores de protección, y, por tanto, lo disminuirán. Preguntas clave sobre los progenitores o guardadores: - ¿El responsable de las lesiones sigue teniendo acceso al niño o niña? - ¿El maltrato o desatención proviene de ambos progenitores o guardadores? - ¿La familia muestra o puede realizar acciones protectoras? - ¿La familia muestra grado de preocupación o conciencia del perjuicio que sufre el niño? - ¿La familia da explicaciones coherentes sobre la situación sucedida? - ¿La familia colabora con el servicio para mejorar la situación del niño? Preguntas sobre el niño o niña: - ¿El niño tiene un diagnóstico de enfermedad mental? - ¿El niño tiene una discapacidad física, psíquica o sensorial? - ¿El niño sufre una enfermedad crónica? Preguntas referentes al profesional o servicio que lo atiende: - ¿Qué apreciación del riesgo le atribuye el profesional a la observación realizada? Grave, moderado, leve; frecuente o poco frecuente. - ¿Cuántas notificaciones tiene el caso? ¿Se da concurrencia de múltiples situaciones adversas? - ¿La intervención del servicio ha logrado disminuir el riesgo? ¿El caso mejora o se está agravando? 4.3. Árboles de decisión A continuación nos ponemos en los tres posibles escenarios iniciales: - Cuando las observaciones nos han indicado una situación grave (color rojo): Árbol de decisión A - Cuando las observaciones nos han indicado una situación moderada (color naranja): Árbol de decisión B - Cuando las observaciones nos han indicado una situación leve (color amarillo): Árbol de decisión C 32 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Árbol de decisión A Observaciones graves (rojo) Alguna observación relativa al niño o niña (bloques A o B o C) + Alguna observación relativa a la situación o relación que mantienen los progenitores/ guardadores respecto al niño o niña (bloque D o los tres primeros de la E) Cualquiera de estas preguntas que se puedan contestar puede ayudar en la decisión - - - ¿El responsable de las lesiones sigue teniendo acceso? ¿El maltrato o desatención proviene de ambos progenitores o guardadores? ¿Se da concurrencia de un gran número de situaciones adversas? NO EAIA SÍ DGAIA - ¿La familia puede hacer acciones protectoras? ¿La familia muestra grado de preocupación o conciencia del perjuicio que sufre el niño? ¿La familia da explicaciones coherentes sobre la situación sucedida? ¿La familia colabora con el servicio para mejorar la situación del niño? ¿La intervención del servicio ha logrado disminuir el riesgo? ¿El profesional le atribuye menos gravedad? NO SÍ DGAIA EAIA Sea la DGAIA y / o el EAIA, se deberán tener particularmente en cuenta las respuestas a las preguntas referentes al niño o niña a la hora de tomar la decisión, dado que pueden hacerlo más vulnerable o aumentar el riesgo de que sufra maltrato o las consecuencias del mismo: - ¿El niño o niña tiene un diagnóstico de enfermedad mental? -¿El niño o niña tiene una discapacidad física, psíquica o sensorial? - ¿El niño o niña sufre una enfermedad crónica? - Y especialmente su opinión, si por edad la puede dar, y siempre teniendo en cuenta su interés. 33 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Árbol de decisión B Observaciones de gravedad moderada (naranja) Alguna observación relativa al niño o niña (bloques A o B o C) + Alguna observación relativa a la situación o relación que mantienen los progenitores/ guardadores respecto al niño o niña (bloque D o los tres primeros de la E) Cualquiera de estas preguntas que se puedan contestar puede ayudar en la decisión - - ¿El maltrato o desatención proviene de ambos progenitores o guardadores? ¿Se da concurrencia de un gran número de situaciones adversas? - NO SSB SÍ EAIA ¿La familia puede hacer acciones protectoras? ¿La familia muestra grado de preocupación o conciencia del perjuicio que sufre el niño? ¿La familia da explicaciones coherentes sobre la situación sucedida? ¿La familia colabora con el servicio para mejorar la situación del niño? ¿La intervención del servicio ha logrado disminuir el riesgo? ¿El profesional le atribuye menos gravedad? NO EAIA SÍ SSB Sea la DGAIA y / o el EAIA, se deberán tener particularmente en cuenta las respuestas a las preguntas referentes al niño o niña a la hora de tomar la decisión, dado que pueden hacerlo más vulnerable o aumentar el riesgo de que sufra maltrato o las consecuencias del mismo: - ¿El niño o niña tiene un diagnóstico de enfermedad mental? -¿El niño o niña tiene una discapacidad física, psíquica o sensorial? - ¿El niño o niña sufre una enfermedad crónica? - Y especialmente su opinión, si por edad la puede dar, y siempre teniendo en cuenta su interés. 34 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Árbol de decisión C Observaciones de gravedad leve (amarillo) Alguna observación relativa al niño o niña (bloques A o B o C) + Alguna observación relativa a la situación o relación que mantienen los progenitores/ guardadores respecto al niño o niña (bloque D o los tres primeros de la E) Cualquiera de estas preguntas que se puedan contestar puede ayudar en la decisión - ¿Se da concurrencia de un gran número de situaciones adversas? - NO El servicio que lo ha detectado SÍ SSB ¿La familia muestra grado de preocupación o conciencia del perjuicio que sufre el niño ¿La familia da explicaciones coherentes sobre la situación sucedida? ¿La familia colabora con el servicio para mejorar la situación del niño? ¿La intervención del servicio ha logrado disminuir el riesgo? ¿El profesional le atribuye menos gravedad? NO SSB SÍ El servicio que lo ha detectado Sea la DGAIA y / o el EAIA, se deberán tener particularmente en cuenta las respuestas a las preguntas referentes al niño o niña a la hora de tomar la decisión, dado que pueden hacerlo más vulnerable o aumentar el riesgo de que sufra maltrato o las consecuencias del mismo: - ¿El niño o niña tiene un diagnóstico de enfermedad mental? -¿El niño o niña tiene una discapacidad física, psíquica o sensorial? - ¿El niño o niña sufre una enfermedad crónica? - Y especialmente su opinión, si por edad la puede dar, y siempre teniendo en cuenta su interés. 35 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Somos conscientes de que la concreción que muestran los árboles de decisión hasta aquí descritos puede parecer muy osada para unos, a la vez que necesaria para otros. Es en este sentido que sin ánimo de empezar a enumerar las contraindicaciones, posibles efectos secundarios e incompatibilidades, hay que situarlo en su punto justo: - Constituye una propuesta a partir de los documentos descritos y enmarcada en la LDOIA. - Se debe someter a un proceso de validación, partiendo del ya realizado con el MSGR. - El profesional siempre tendrá la última palabra y lógicamente puede tomar una decisión diferente a la que se le recomienda. Por ejemplo, puede que falten observaciones relevantes que reflejen la situación del niño o adolescente al que se refieren, o bien que el caso tenga más o menos gravedad de la indicada, o que se esté agravando, etc. La idea es que el profesional utilice primero el listado para identificar la situación delante de la que se encuentra y después le aplique el esquema del árbol de decisión para obtener la orientación que requiere, sea del ámbito que sea y ocupe el lugar que sea en la red y los circuitos establecidos. 4.4. Temporalidad y criterios de priorización El aspecto de la temporalidad va ligado, por un lado, a la tipología de servicio que recibe el caso y, por otro, a la gravedad y/o urgencia de la situación planteada. Los criterios de priorización van en función de la gravedad, y por tanto los casos que contengan observaciones muy graves y con derivación a la DGAIA (árbol de decisión A) serán los más prioritarios, seguidos de los graves con derivación al EAIA, y luego los de derivación a los SSB. La idea es que estos listados y árboles para la toma de decisión puedan ser utilizados en los diferentes momentos de valoración que se realizan en estos circuitos, así como desde cualquier servicio de la red, es decir que se adapten a cualquier punto del circuito donde se tenga que valorar una situación y tomar una decisión. A diferencia de otros aspectos que han sido desarrollados en los diversos documentos, el tema de delimitar el tiempo máximo necesario para valorar cada situación de riesgo y tomar una decisión, está poco contemplado. En este sentido, es necesaria previamente una labor de recogida de datos, considerando en primer lugar la perspectiva de los 36 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran servicios implicados. Se deberá saber con qué temporalidad están trabajando actualmente y cuál sería la deseada. A partir de aquí se tratará de consensuar los plazos, de acuerdo con la gravedad que presenta el caso. La valoración y toma de decisiones debe ser lo más ágil y adaptada posible a la situación del niño o la niña. En el apartado anterior se han propuesto los criterios sobre a qué servicio hay que dirigirse, y a continuación habrá que acotar los plazos, teniendo en cuenta que será diferente si se decide trabajar desde el mismo servicio que lo acoge, por ejemplo los Servicios Sociales Básicos, o bien hay una derivación al EAIA o la DGAIA. Por otra parte, en caso de ser atendido por la UDEPMI, será diferente si se deriva y se solicita la intervención de un EVAMI o la de los SSB, para mostrar algunos ejemplos. Para empezar podríamos sugerir la siguiente temporalidad y criterios de priorización: - Para las situaciones muy graves (ver los rojos del árbol de decisión A que se derivan a la DGAIA y las situaciones sobrevenidas o de facto) Prioritario - Para las situaciones graves (ver los rojos del árbol de decisión A que se derivan al EAIA) Preferente - Por los estudios regulares (ver los árboles de decisión B y C) Ordinario Esta podría ser una propuesta de partida sobre la que debatir con los servicios directamente implicados. 5. Conclusiones A lo largo de las dos últimas décadas hemos observado diferentes intensidades y resultados en cuanto al trabajo realizado por los profesionales, equipos y departamentos a la hora de consensuar conceptos y criterios. Se ha profundizado más en confeccionar listas de indicadores y criterios de valoración del riesgo y quizá menos en poner en común el tiempo que se necesita para llevar a cabo las valoraciones. Este hecho queda reflejado en este documento, donde recogiendo los indicadores y criterios de valoración, y sin cerrar la puerta a las modificaciones que sean necesarias, se propone un listado de base y unos árboles de decisión que tienen en cuenta los diferentes factores que pueden estar presentes en el caso y que hacen decantar la priorización del mismo. En cambio, la temporalidad propuesta es sólo un punto de partida para el debate y la 37 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran reformulación. Este documento pretende ser una guía para la toma de decisiones, bajo el amparo de la LDOIA, de los profesionales que trabajan con infancia, que se encuentran ante situaciones de riesgo o de maltrato de niños, niñas y adolescentes con quienes están en contacto. Somos conocedores que la mayoría de ellos utilizan protocolos de actuación que contienen diferentes listados de indicadores. Ahora bien el proceso de establecer equivalencias entre listados es compleja y queda expuesto a mucha variabilidad. Es por ello que puede ser interesante que por parte de los servicios, de forma progresiva, se empiecen a utilizar herramientas compartidas. La que aquí presentamos a partir del MSGR tiene voluntad de serlo. El instrumento debe permitir medir el riesgo y alcanzar el máximo de situaciones, y además el MSGR ya ha sido sometido a un primer proceso de validación. Por otra parte, utilizando las mismas herramientas, es decir, los mismos criterios, tenderemos a lograr mayor fiabilidad de las mismas, por lo tanto, sea cual sea el profesional que realice la valoración, el caso debería obtener la misma respuesta. Persiguiendo la mejora de esta fiabilidad y validez, la propuesta realizada está abierta a las revisiones y pilotajes que se crean oportunos por parte de los profesionales de la red y expertos. 38 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Glosario: DGAIA: Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia EAIA: Equipo de Atención a la Infancia y la Adolescencia ERIDIQV: Equipo de Investigación sobre Infancia, los Derechos del Niño y su Calidad de Vida EVAMI: Equipos de Valoración de Maltrato Infantil IRQV: Instituto de Investigación sobre Calidad de Vida LDOIA: La Ley 14/2010 de los derechos y las oportunidades en la infancia y adolescencia MSGR: Módulo de Apoyo a la Gestión del Riesgo RUMI: Registro Unificado de Maltrato Infantil SEAIA: Servicio de los Equipos de Atención a la Infancia y la Adolescencia Síni@: Sistema de información de la infancia y la adolescencia (base de datos de la DGAIA) SSB: Servicios Sociales Básicos UDEPMI: Unidad de Detección y Prevención del Maltrato Infantil UdG: Universidad de Girona 39 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Referencias La Ley 14/2010 de los derechos y las oportunidades en la infancia y adolescencia. DOGC núm. 5641, de 06.02.2010 Departamento de Acción Social y Ciudadanía (2010). El Módulo de Apoyo a la Gestión del Riesgo social en la infancia y la adolescencia, MSGR, insertado dentro del proyecto RUMI - Infancia responde. Elaborado conjuntamente entre la DGAIA y el IRQV de la UdG, en colaboración con otros profesionales. Disponible en: http://dixit.gencat.cat/portal/fitxes/espaisdixit/projecte_rumi/portada.html?pAmbit=f amilia Departamento de Acción Social y Ciudadanía (2010). El documento de bases del servicio de los EAIA. Elaborado por la DGAIA con la colaboración de profesionales de los EAIA. Documento multicopiado. 40 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Anexos Anexo 1: Situaciones de riesgo y de desamparo contempladas en la LDOIA CAPÍTULO II Las situaciones de riesgo Artículo 102 Definición y concepto 1. A efectos de lo establecido en esta ley, se entiende por situación de riesgo la situación en que el desarrollo y el bienestar del niño/a o el adolescente se ven limitados o perjudicados por cualquier circunstancia personal, social o familiar, siempre que para la protección efectiva del niño o el adolescente no sea necesaria la separación del núcleo familiar. 2. Son situaciones de riesgo: a) La falta de atención física o psíquica del niño/a o el adolescente por los progenitores, o por los titulares de la tutela o la guarda, que suponga un perjuicio leve para la salud física o emocional del niño o la adolescente. b) La dificultad grave para dispensar la atención física y psíquica adecuada al niño/a o adolescente por parte de los progenitores o los titulares de la tutela o la guarda. c) La utilización, por los progenitores o los titulares de la tutela o la guarda, del castigo físico o emocional sobre el niño, la niña o el adolescente que, sin constituir un episodio grave o un patrón crónico de violencia, perjudique el desarrollo. d) Las carencias que, debido a que no pueden ser adecuadamente compensadas en el ámbito familiar, ni impulsadas desde este mismo ámbito para su tratamiento mediante los servicios y recursos normalizados, puedan producir la marginación, la inadaptación o el desamparo de el/la niño/a o el adolescente. e) La falta de escolarización en edad obligatoria, el absentismo y el abandono escolar. f) El conflicto abierto y crónico entre los progenitores, separados o no, cuando anteponen sus necesidades a las del niño/a o del adolescente. g) La incapacidad o la imposibilidad de los progenitores o los titulares de la tutela o la guarda de controlar la conducta del niño/a o el adolescente que provoque un peligro evidente de hacerse daño o perjudicar a terceras personas. h) Las prácticas discriminatorias, los progenitores o titulares de la tutela o la guarda, contra las niños o las niñas, que supongan un perjuicio para su bienestar y su salud mental y física, incluyendo el riesgo de sufrir la ablación o la mutilación genital femenina y la violencia ejercida contra ellas. i) Cualquier otra circunstancia que, en caso de que persista, pueda evolucionar y derivar en el desamparo del niño/a o del adolescente. Artículo 103 Intervención de los servicios sociales 1. Los servicios sociales básicos deben valorar la existencia de una situación de riesgo y promover, en su caso, las medidas y los recursos de atención social y educativa que permitan disminuir o eliminar la situación de riesgo buscando la colaboración de los progenitores o de los titulares de la tutela o la guarda. 2. Los servicios sociales básicos deben designar un profesional o una profesional de referencia, para cada caso, del niño/a o el adolescente, al que corresponde evaluar su situación y hacer el seguimiento posterior. 3. Si el riesgo es grave y con la intervención de los servicios sociales básicos no se consigue disminuir o controlar la situación de riesgo, dichos servicios deben elevar el informe con la valoración de la situación de riesgo que persiste en el niño, la niña o el adolescente, el resultado de la intervención y la propuesta de medidas que consideren oportunas a los servicios sociales especializados en infancia y adolescencia. 4. Los servicios sociales especializados de atención a los niños, niñas y los adolescentes, atendiendo al informe y las medidas de atención propuestas, deben completar el estudio y elaborarán un compromiso socioeducativo dirigido a los progenitores o los titulares de la tutela y orientado a la superación del riesgo que rodea al niño/a o el adolescente, el cual debe contener la descripción y la acreditación de la situación de riesgo, su evaluación y concreción de las medidas que se aplicarán desde los servicios sociales básicos o desde otros servicios especializados para la superación de la situación perjudicial. 5. Antes de firmar el compromiso socioeducativo con los progenitores o, en su caso, con los titulares de la tutela o la guarda, hay que haber escuchado el adolescente, en todo caso, y el niño/a, si tiene suficiente conocimiento. 6. Si no se obtiene la colaboración de los progenitores, los titulares de la tutela o la guarda, o si se niegan a participar en la ejecución de las medidas acordadas y ello conlleva un peligro para el desarrollo o bienestar personal del niño/a o el adolescente, o si en el transcurso de la intervención se da cualquier otra situación de desamparo, los servicios especializados de atención a los niños y los adolescentes deben elaborar el informe propuesta y elevarlo al departamento competente para que incoe el procedimiento de desamparo correspondiente. (...) 41 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran CAPÍTULO III Protección de los niños y los adolescentes desamparados SECCIÓN PRIMERA El desamparo Artículo 105 Concepto 1. Se consideran desamparados/as los niños, niñas o los adolescentes que se encuentran en una situación de hecho en que les faltan los elementos básicos para el desarrollo integral de la personalidad, siempre que para su protección efectiva sea preciso aplicar una medida que implique la separación del núcleo familiar. 2. Son situaciones de desamparo: a) El abandono. b) Los malos tratos físicos o psíquicos, los abusos sexuales, la explotación u otras situaciones de la misma naturaleza efectuadas por las personas a las que corresponde la guarda o que se han llevado a cabo con el conocimiento y la tolerancia de estas personas. c) Los perjuicios graves al bebé causados por maltrato prenatal. A estos efectos, se entiende por maltrato prenatal la falta de cuidado del propio cuerpo, consciente o inconsciente, o la ingestión de drogas o sustancias psicotrópicas por parte de la mujer durante el proceso de gestación, así como el producido indirectamente al bebé por la persona que maltrata a la mujer en proceso de gestación. d) El ejercicio inadecuado de las funciones de guarda que comporte un peligro grave para el niño, la niña o el adolescente. e) El trastorno o alteración psíquica o la drogodependencia de los progenitores, o de los titulares de la tutela o la guarda, que repercuta gravemente en el desarrollo del niño/a o del adolescente. f) El suministro al niño/a o al adolescente de drogas, estupefacientes o cualquier otra sustancia psicotrópica o tóxica llevado a cabo por las personas a las que corresponde la guarda o por otras personas con su conocimiento y tolerancia. g) La inducción a la mendicidad, la delincuencia o la prostitución por parte de las personas encargadas de la guarda, o el ejercicio de dichas actividades llevado a cabo con su consentimiento o tolerancia, así como cualquier forma de explotación económica. h) La desatención física, psíquica o emocional grave o cronificada. i) La violencia machista o la existencia de circunstancias en el entorno sociofamiliar del niño/a o adolescente, cuando perjudiquen gravemente su desarrollo. j) La obstaculización por los progenitores o los titulares de la tutela o la guarda de las actuaciones de investigación o comprobación, o su falta de colaboración, cuando este comportamiento ponga en peligro la seguridad del niño o el adolescente, así como la negativa de los progenitores o los titulares de la tutela o la guarda a participar en la ejecución de las medidas adoptadas en situaciones de riesgo si ello conlleva la persistencia, la cronificación o agravamiento de estas situaciones. k) Las situaciones de riesgo que por su número, evolución, persistencia o agravamiento determinen la privación al niño o el adolescente los elementos básicos para el desarrollo integral de la personalidad. l) Cualquier otra situación de desatención o negligencia que atente contra la integridad física o psíquica del niño o el adolescente, o la existencia objetiva de otros factores que imposibiliten su desarrollo integral. Artículo 106 Procedimiento de desamparo En el momento que se tiene conocimiento de que un/a niño/a o adolescente puede encontrarse en situación de desamparo, el departamento competente en materia de protección de los menores desamparados debe incoar el expediente de desamparo. Antes del acuerdo de iniciación, el órgano competente puede abrir un período de información previa con el fin de conocer las circunstancias del caso concreto y la conveniencia o no de iniciar el procedimiento. 42 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran Anexo 2: Resumen del documento de bases del servicio de los EAIA (mayo 2010) Documento fruto de un proceso participativo entre profesionales de los EAIA, de la DGAIA y grupos de expertos. Desarrolla las tareas de estos equipos claves en el sistema de protección a la infancia. Los servicios sociales básicos, como primer nivel del Sistema Público de Servicios Sociales y garantía de más proximidad a los usuarios, son los servicios destinados a dar respuestas a las personas en vulnerabilidad o riesgo en el ámbito propio de la convivencia y la relación. Define como situaciones de riesgo para los niños/as, y propias de ser atendidas por los servicios comunitarios, aquellas en que hay: Información que un / a chico / a está recibiendo o puede recibir un trato no adecuado por parte de sus padres o responsables legales. Información que un / a chico / a está recibiendo o puede recibir agresiones o trato no adecuado por parte de otras personas y sus padres no son capaces o tienen serias dificultades para protegerlo. Información de un / a niño / a con problemas significativos de adaptación personal, familiar y / o social. Absentismo escolar frecuente o generalizado. Se aprecian, además de las situaciones de riesgo social, la presencia de factores de DESPROTECCIÓN: Padres y madres que acaban de tener un nuevo hijo, con otros hijos objeto de protección en el pasado. Jóvenes, objeto de protección cuando eran menores, que presentan dificultad o limitaciones en el cumplimiento de su rol parental. Figuras parentales con problemas graves de salud mental, síntomas de malestar emocional, o inmadurez. Padres y madres con capacidad intelectual limitada. Padres y madres que abusan del alcohol, drogas o fármacos o se sospecha que puedan hacerlo. Padres y madres jóvenes sin apoyo familiar y / o social. Padres y madres con serias dificultades para supervisar y / o poner límites a sus hijos. Familias con violencia doméstica. Familias donde los adultos están implicados en actividades marginales (prostitución,...) o ilegales. Padres y madres con actitudes violentas. Son situaciones donde el desamparo no se ha producido y donde los objetivos de las intervenciones de los servicios básicos se centran en eliminar o reducir el posible impacto negativo de los factores mencionados y potenciar los factores protectores del núcleo de convivencia y de su entorno. Define como situaciones de POSIBLE DESAMPARO para los niños, niñas, y propias de ser atendidas por los servicios sociales especializados, aquellas en que hay: Información de que las necesidades básicas del niño / a están siendo desatendidas. Información de que los padres están cometiendo agresiones o siendo negligentes hacia el niño/ a. En el citado documento se establecen los criterios de gravedad y riesgo en situaciones de maltrato / abandono infantil, según 22 bloques que se refieren a las características del incidente, los factores de riesgo o protección infantil existentes, los rasgos del cuidador, las características del entorno familiar y la respuesta ante la intervención. Cada uno de los 22 bloques contiene los ítems correspondientes cuando el riesgo es bajo, moderado o grave. Estos 3 niveles de riesgo se corresponden en tres niveles de intervención: El bajo riesgo de maltrato es propio de la atención de los Servicios Sociales Básicos El riesgo moderado de maltrato se sitúa en un intervalo que de ordinario será necesario el asesoramiento o la intervención del EAIA, dependiendo de la valoración global del conjunto de los indicadores. El riesgo grave, los Servicios especializados. Cuando una vez valorado el caso, se confirma la hipótesis de desamparo es necesario profundizar, sin duda, en la decisión de SEPARAR el niño / a de su núcleo convivencial. Esta propuesta se puede tomar con certeza e incluso con carácter PERMANENTE, si: Sus padres o guardadores renuncian a sus obligaciones y derechos como tales. Se evidencia claramente que los factores que han generado el desamparo son inmodificables. Han habido intentos anteriores sin éxito de modificación de la situación familiar y sin que ello sea atribuible a una intervención profesional inadecuada o insuficiente. Los padres o tutores se oponen totalmente o no quieren implicarse en un proceso de rehabilitación y / o tratamiento dirigido a capacitarlos en sus responsabilidades parentales. El interés del chico es contrario a la reinserción en su familia de origen. - 43 Criterios para la valoración de las situaciones de riesgo Montserrat, Casas y Bertran En el resto de situaciones de desamparo en que hay posibilidades de cambio, hay que introducir siempre el concepto de separación TEMPORAL e incluir el núcleo de origen en un programa de Intervención Familiar, con el fin de desarrollar las habilidades parentales o de recuperarse las, para hacer posible el objetivo de la reinserción familiar del niño / a que ha sido separado de su núcleo. En todos los casos, los niños y adolescentes que deben ser separados de sus padres tienen derecho a una calidad de vida ya una educación mejores que las que tenían en su casa El EAIA, como equipo especializado, interviene en aquellos casos que, por sus características, las personas niños o adolescentes se pueden encontrar en situaciones o riesgo de desamparo: Si con todos los datos recibidos se aprecia que se puede estar ante una situación de riesgo de desamparo, el Servicio Territorial derivará el caso directamente al EAIA, bien para estudio regular, bien para intervención preferente. Si no es así, pero hay indicadores de riesgo social, se derivará a los SBAS, que llevarán a cabo las actuaciones que les corresponden. Intervenciones preferentes: Son casos preferenciales que implican dar una respuesta rápida los siguientes: 1. Situaciones en las que hay que efectuar una intervención inmediata para proteger la integridad física o psíquica del menor ya que corre un riesgo inminente y manifiesto. La DGAIA interviene en caso de necesidad inmediata de separación del niño/a o adolescente de su núcleo familiar, en las siguientes situaciones: Abuso sexual activo Maltrato físico o psíquico presente Abandono efectivo y / o rechazo explícito por parte de los padres o adultos responsables Prostitución activa 2. Situaciones derivadas desde la Dirección General de Atención a la Infancia o desde Servicios sociales básicos en las que hay graves indicadores pero hay que valorar hasta qué punto la familia puede proteger al menor ya que la necesidad de separación no es manifiesta ni evidente. El EAIA intervine de manera prioritaria: Rechazo implícito por parte de los padres o adultos responsables. Indicios de malos tratos físicos o psíquicos. Indicios de abusos sexuales. Indicios de prostitución. Indicios de desatención por parte de los padres o cuidadores en menores con una enfermedad grave. Indicadores de desamparo en niños / as de 0 a 6 años. Embarazos de riesgo. No son situaciones preferentes aquellas otras en las que hay información suficiente de que no existe un peligro inmediato que la salud y / o seguridad básica del niño/ a y que este peligro no aumentará en el tiempo si las condiciones de la familia se mantienen (y no es previsible que cambien), lo que significa que no será necesario adoptar ninguna medida protectora de urgencia. ------------------------------------------------------------- Agradecemos la colaboración de Amina El Atmani en la traducción del informe. 44