Comercio: una fuente clave de crecimiento y empleo para la UE Contribución de la Comisión al Consejo Europeo de los días 7 y 8 de febrero de 2013 CONTRIBUCIÓN DE LA COMISIÓN AL CONSEJO EUROPEO DE FEBRERO DEBATE SOBRE EL COMERCIO, EL CRECIMIENTO Y EL EMPLEO Ante el Consejo Europeo de 7 y 8 de febrero, en el presente documento se analiza cómo la profundización de las relaciones entre la UE y sus principales socios comerciales puede contribuir a una estrategia global para el crecimiento y la creación de empleo en Europa. El presente documento no abarca todo el ámbito de las relaciones comerciales, sino que se centra en la contribución que puede aportar la política comercial de la UE para impulsar el crecimiento y el empleo en Europa. No se tratan en él los demás objetivos de la política comercial de la UE, como promover el desarrollo en los países más pobres y proyectar los valores de la UE en el mundo. Nunca el comercio ha sido más importante para la economía de la Unión Europea. En las difíciles circunstancias económicas actuales, se ha convertido en un medio importante para lograr el crecimiento y la creación de empleo tan necesarios, sin hacer uso de la hacienda pública. Es la correa de transmisión que vincula a Europa con los nuevos centros del crecimiento mundial y constituye una fuente única de incremento de la productividad. La UE, que se está beneficiando de la globalización mucho más de lo que a veces se da a entender, está bien situada para beneficiarse de esta intensificación del comercio internacional. Ahora bien, el progreso en este ámbito no es sencillo. Internamente, la UE debe ampliar su capacidad para beneficiarse del comercio, ya que no todos los Estados miembros obtienen resultados igual de buenos en el mercado mundial. Externamente, exige un ambicioso programa de negociación comercial y aplicación de lo acordado. La Comisión ha empezado a desarrollar este programa. Llevarlo adelante exigirá una firme determinación, tanto de las instituciones de la UE como de los Estados miembros, si queremos tener éxito en el tratamiento de complejas cuestiones normativas, conseguir que participen los países emergentes, concluir negociaciones, aplicar nuestros acuerdos y hacer que se cumplan nuestros derechos. En definitiva, es importante asegurar que nuestro programa de comercio exterior refuerce el sistema de comercio multilateral centrado en la Organización Mundial del Comercio, que sigue siendo el activo más importante de Europa para responder a la globalización, especialmente en tiempos de crisis. 1. EL COMERCIO PUEDE SER UN POTENTE MOTOR PARA EL CRECIMIENTO Y LA CREACIÓN DE EMPLEO EN EUROPA Impulsar el comercio es una de las pocas maneras de reforzar el crecimiento económico sin hacer uso de las gravemente limitadas haciendas públicas. La contribución de la demanda exterior al PIB es por ahora la fuente más importante de crecimiento de la UE, ya que los componentes de la demanda interior —tanto pública como privada— siguen siendo débiles. De hecho, la contribución del comercio al PIB en 2012 (+0,9 puntos porcentuales) redujo en una cuarta parte la profundidad de la recesión en la UE, ayudando a compensar la influencia negativa de la demanda interior y las existencias (-1,2 puntos)1. La contribución de la demanda exterior al crecimiento económico aumentará con seguridad en el futuro, ya que se prevé que el 90 % del crecimiento económico mundial en los próximos 10-15 años se genere fuera de Europa, y un tercio de él tan solo en China2. Para que la recuperación económica sea sostenible, tendrá que consolidarse mediante vínculos más fuertes con los nuevos focos del crecimiento mundial. El aumento del comercio beneficia también al crecimiento por el lado de la oferta de la economía. La liberalización comercial constituye por sí misma una reforma estructural 1 Comisión Europea, Previsiones económicas europeas, otoño de 2012. 2 Jean Fouré, Agnès Bénassy-Quéré, Lionel Fontagné, «The Great Shift: Macroeconomic projections for the world economy at the 2050 horizon», CEPII Working Paper, febrero de 2012, n° 2012-3. 1 fundamental, al crear nuevas oportunidades de innovación y un crecimiento más fuerte de la productividad. Los flujos de comercio e inversión difunden las ideas nuevas y la innovación, las nuevas tecnologías y la investigación, conduciendo a mejoras de los productos y servicios que las personas y las empresas utilizan. Hace tiempo que se constata en los países de la UE que un aumento del 1 % de la apertura de la economía genera un aumento del 0,6 % de la productividad laboral3. Al operar tanto en el lado de la oferta como en el de la demanda, el comercio es una potente herramienta para impulsar el crecimiento económico. Por lo tanto, la política comercial es un componente esencial del pacto por el crecimiento de la UE. Más comercio es esencial también para la creación de empleo: unos 30 millones de puestos de trabajo en la UE dependen de las ventas al resto del mundo, lo que supone un incremento de 10 millones desde 1995. Como promedio, cada 1 000 millones EUR adicionales de exportaciones sustentan 15 000 nuevos puestos de trabajo en toda la UE4. 2. EUROPA ESTÁ BIEN SITUADA PARA BENEFICIARSE DEL COMERCIO, PERO HACEN FALTA LAS POLÍTICAS ADECUADAS A NIVEL EUROPEO PARA APROVECHAR LOS BENEFICIOS DE LA APERTURA COMERCIAL 2.1. La economía de la UE se beneficia de la globalización mucho más de lo que se suele creer. Europa se enfrenta al surgimiento de nuevos competidores y desafíos vinculados a la reorganización de la producción mundial, pero tiene los medios para responder con éxito. La UE sigue siendo el mayor exportador, importador, inversor extranjero directo y receptor de inversión extranjera directa del mundo. Es menos sabido que la UE ha conseguido mantener su porcentaje del 20 % de las exportaciones mundiales, pese al surgimiento de nuevos competidores, y mientras los porcentajes respectivos de Japón y los Estados Unidos disminuían drásticamente 5. Contrariamente a la creencia más difundida, la base industrial de la UE sigue siendo fuerte. La UE tiene un gran excedente comercial en el sector manufacturero, de casi 300 000 millones EUR, cifra que se ha multiplicado por cinco desde 2000. El excedente de la UE en los servicios se ha multiplicado por más de 20 en 10 años, hasta alcanzar los 100 000 millones EUR. La balanza comercial agrícola de la UE ha pasado del déficit al superávit. En conjunto, la balanza comercial de la UE en bienes y servicios es ligeramente negativa (74 000 millones EUR). No obstante, esta cantidad es relativamente pequeña si se compara con el comercio mundial o, por ejemplo, con el déficit de los Estados Unidos, y se debe únicamente a la fuerte dependencia energética. La UE tiene cerca del 28 % de los ingresos mundiales generados por la producción de bienes manufacturados, frente al 18 % que corresponde a los Estados Unidos y algo menos del 16 %, a China. El porcentaje de estos ingresos correspondiente a la UE se ha mantenido bastante estable desde 2000, mientras que el de los Estados Unidos –que era a grandes rasgos similar— ha disminuido drásticamente. Japón ha experimentado una caída aún mayor. De igual modo, el número de puestos de trabajo en los sectores de la industria y los servicios que están relacionados con la producción de bienes manufacturados ha aumentado en la UE en los últimos 15 años, hasta alcanzar los 35 millones, mientras que ha disminuido en los Estados Unidos y en Japón6 . 3 4 5 6 Comisión Europea, Reforzar el crecimiento de la productividad: mensajes clave del informe de 2007 sobre la competitividad europea. N. Sousa, «Extra-EU exports and employment», DG TRADE Chief Economist Note, nº 2, 2012. Basado en el comercio de mercancías, excluido el petróleo. (Fuente: «European Export Performance», CEPII Working Paper 2010-12, Octubre de 2012). Obsérvese que la cuota de la UE en el mercado mundial de servicios es mayor (25 % - Fuente: OMC). World Input Output Database (WIOD), www.wiod.org. 2 A pesar de la crisis económica y financiera, la UE sigue siendo un lugar atractivo en el que invertir; de hecho, es el mayor receptor de proyectos de inversión internacionales, creando y conservando empleos. Europa atrajo el 29 % de esos proyectos de inversión en 2011, el mismo nivel que Norteamérica, mientras que Asia y Oceanía recibieron el 25 % de los mismos7. El mercado único ha sido una piedra angular de la capacidad de la UE para promover sus intereses en un mundo globalizado. La profundización de las cadenas de valor europeas a raíz de la creación del mercado único y las sucesivas ampliaciones de la UE es la razón principal de que sea así. Las empresas de la UE exportan no solo gracias al valor que se crea en el Estado miembro en el que se asientan estadísticamente las exportaciones, sino también gracias a contribuciones procedentes de todo el mercado único. Es muy habitual que una exportación alemana incorpore valor creado en la República Checa, Bélgica o Polonia. La distribución de los puestos de trabajo creados por las exportaciones refleja esta situación. Por cada dos puestos de trabajo creados en un Estado miembro en el que se contabilizan las exportaciones, se crea uno en otro lugar de la UE8. El mercado único ha sido decisivo también para crear empresas competitivas a nivel mundial en Europa. Asimismo, ha promovido el desarrollo de reglas y estándares de gran calidad que contribuyen a la determinación de las normas globales. 2.2. Sin embargo, los resultados obtenidos por los distintos Estados miembros revelan diferencias en cuanto a competitividad Pese a que tienen la misma política comercial, las mismas condiciones exteriores y, para muchos de ellos, la misma moneda, los resultados comerciales de los distintos Estados miembros son extremadamente diversos. En los últimos diez años, la balanza comercial de dieciséis países ha empeorado, mientras que ha mejorado en cantidades comparables la de los otros once. Algunos Estados miembros han perdido rápidamente cuota de mercado en el comercio mundial, mientras que otros nunca han sido tan fuertes como ahora. Por consiguiente, la competitividad debe empezar con las políticas adecuadas a nivel nacional. La diferencia de rendimiento entre los distintos Estados miembros señala un problema de competitividad en aquellos países que no están obteniendo tan buenos resultados, más que un defecto de la política comercial. Como promedio, más de dos tercios del aumento del déficit de los países más rezagados se deben al comercio con otros Estados miembros de la UE, no con terceros países. Por lo tanto, deben afrontar esta situación potenciando su capacidad para competir dentro del mercado único. Esta idea no es nueva. La combinación de las razones que explican esta pérdida de competitividad, relacionadas y no relacionadas con los precios, es analizada por la Comisión, país por país, en los procedimientos de desequilibrio excesivo, y tenida en cuenta en las recomendaciones específicas por país. La solución suele radicar en la adopción de reformas nacionales en la educación, el mercado de trabajo, la innovación y, en términos más generales, todas las políticas que influyen en el entorno empresarial. Este es el objetivo de la Estrategia Europa 2020, un objetivo que sin duda se puede alcanzar: se observa ya que vuelve a equilibrarse la cuenta corriente de aquellos países que han emprendido reformas estructurales9. 2.3. El lugar de Europa en las cadenas de suministro mundiales reconfigura sus intereses El rápido desarrollo de las cadenas de valor regionales y mundiales ha constituido un cambio radical para las políticas comerciales. Hoy en día, los productos ya no se fabrican en un solo lugar de principio a fin, sino que se ensamblan en una larga serie de pasos, a menudo en diferentes partes del mundo. Esta nueva organización de la producción difumina las fronteras económicas y transforma las relaciones comerciales. Con frecuencia, una cantidad significativa del valor de una exportación china está producida en Europa. Incluso un iPhone, diseñado en 7 8 9 Agence Française pour l'Investissement International. N. Sousa (op. cit.). Informe de la Comisión, Informe sobre el mecanismo de alerta 2013, COM(2012) 751 final, de 28.11.2012. 3 California y fabricado en Guangdong, tiene un 12 % de aportación europea10. La misma pauta se repite en otros procesos de producción, desde los juguetes infantiles hasta los aviones reactores de pasajeros. Esto significa que las exportaciones y las importaciones nacionales ya no pueden abordarse desde una estrecha perspectiva mercantilista. No solo las exportaciones son esenciales para el crecimiento económico y la creación de empleo, sino también cada vez más las importaciones. Dos tercios de las importaciones de la UE son de materias primas, bienes intermedios y componentes necesarios para los procesos de producción de nuestras empresas. El porcentaje de importaciones extranjeras en las exportaciones de la UE ha aumentado en más de la mitad desde 1995, hasta alcanzar el 13 %11. Los cambios fundamentales en las cadenas de suministro mundiales implican que es más importante centrarse en dónde se añade valor a los productos que en dónde se contabilizan las exportaciones. El objetivo central de la política comercial de la UE debe ser mantener, y, cuando sea necesario, reinventar, el lugar de Europa en las cadenas de suministro mundiales. Si bien la industria manufacturera sigue teniendo una importancia central en la UE, hay que reconocer que, en muchos sectores, los países tienen ahora mucha menos capacidad para fabricar productos por sí solos. El comercio consiste cada vez más en la superposición de capas de valor, desde la I+D y el diseño hasta la fabricación de componentes, el montaje y la logística. «Standort Europa» sigue siendo un planteamiento válido, pero debe entenderse con inteligencia: debe tratar de «generar valor». En estas circunstancias, el aumento del coste de las importaciones reduce la competitividad de las empresas y su capacidad para vender en los mercados mundiales. Esta es una razón importante para que los países no recurran a medidas proteccionistas, pese a que tales tendencias suelen reaparecer en circunstancias económicas como las que afrontamos en la actualidad. Tenemos que estar en guardia frente a ellas, tanto en el extranjero como a nivel nacional. Otra observación que ayuda a comprender el planteamiento del valor añadido es la que se refiere a la importancia de los servicios para la fabricación. Los servicios representan actualmente alrededor del 40 % del valor que añadimos a los productos exportados desde Europa. Aproximadamente un tercio de los empleos generados por las exportaciones de productos manufacturados se encuentra actualmente en empresas que prestan servicios auxiliares a los exportadores de mercancías12. Unos servicios mejores y más baratos son una variable clave en la ecuación de la competitividad industrial. Aunque es importante centrarse en el desarrollo de la industria de la UE, lo es igualmente centrarse en el desarrollo de los servicios, cuyo rendimiento ha sido inferior al óptimo en los últimos años. Eliminar las barreras que aún persisten en el mercado único será esencial al respecto, pero liberalizar gradualmente y facilitar el comercio internacional de servicios es también una potente herramienta. En una sociedad del conocimiento, los activos intangibles son un componente crucial de muchos bienes y servicios. Europa necesita innovación para garantizar su ventaja comparativa frente a competidores con menores costes laborales, energéticos y de materias primas. Las inversiones de la UE en creatividad, investigación, diseño y calidad son un activo único de la economía europea, pero son también especialmente vulnerables al deficiente cumplimiento de los derechos de propiedad intelectual (DPI) en otros lugares. Una protección eficaz de los DPI es, por lo tanto, esencial para aprovechar plenamente el potencial del valor añadido europeo. Esta cuestión merece un lugar destacado en la política de comercio exterior europea. 10 11 12 Xing and Detert (2010), iSuppli, Chipworks. WIOD (op. cit.). WIOD (op. cit.). 4 3. LLEVAR ADELANTE UN PROGRAMA COMERCIAL AMBICIOSO PARA LA UE Con el fin de impulsar la capacidad de la UE para beneficiarse del comercio, la Comisión ha desarrollado un ambicioso programa de comercio bilateral con un potencial significativo. Ahora bien, es importante comprender que progresar en este ámbito no es sencillo y exige determinación. Es también fundamental que nuestro programa bilateral apoye el sistema comercial multilateral. 3.1. Un programa de comercio bilateral sin precedentes En los últimos años, pese a las dificultades para avanzar en el contexto multilateral, no hemos permanecido inactivos ante los rápidos cambios de la economía mundial. Hemos desarrollado un programa de política comercial de una escala sin precedentes: mientras que menos de una cuarta parte del comercio de la UE estaba regulado por acuerdos de libre comercio (ALC) antes de 2006, la conclusión de las negociaciones en curso elevaría esta cifra a la mitad de nuestro comercio, y estamos acelerando y profundizando este programa con la apertura de negociaciones para un acuerdo de mucho mayor alcance con Japón y la posibilidad de seguir la misma línea en el futuro próximo con los Estados Unidos. Si este programa se lleva a cabo, dos tercios del comercio exterior de la UE estarían cubiertos por acuerdos de libre comercio. En la actualidad, este es, con diferencia, el programa de política comercial más ambicioso del mundo. Estas negociaciones podrían impulsar el PIB de la UE en más de un 2 %, es decir, 250 000 millones EUR —cantidad equivalente al tamaño de la economía austriaca o danesa—, y sustentarían un aumento de más de dos millones de puestos de trabajo relacionados con el comercio en toda la UE13. La mayor parte de estos beneficios se obtendría a medio plazo, con la progresiva aplicación de los acuerdos. Ahora bien, aplicar este programa es crucial a corto plazo, ya que con ello se transmitiría una señal inequívoca de la determinación de la UE de realizar reformas en el interior y obtener mercados en el exterior. Esto tendría una repercusión inmediata en la confianza de los inversores. Centrarse en un programa ambicioso de comercio bilateral ha dado ya resultados, como el éxito en la aplicación de un ALC de nueva generación con Corea y la celebración de acuerdos similares con Colombia, Perú, América Central, Ucrania y, el más reciente, con Singapur. También están cerca de finalizar las negociaciones con Canadá. El ALC UE-Corea es un excelente ejemplo de nuestra política de acuerdos ambiciosos y recíprocos (véase el recuadro 1), mientras que la importancia de los ALC con Canadá y Singapur va más allá de los propios acuerdos: Singapur es también una puerta de entrada al resto de Asia, y Canadá podría sentar un precedente importante para cualquier acuerdo con los Estados Unidos. En Canadá, poder competir con los exportadores de los Estados Unidos en mayor igualdad de condiciones ofrece también ventajas claras a los operadores de la UE, por no mencionar que nuestro acuerdo con Canadá tendrá de hecho mayor alcance que el TLCAN, por ejemplo en el ámbito de la contratación pública. Todo esto demuestra que, incluso en tiempos difíciles, podemos realizar ambiciosos acuerdos comerciales que proporcionan beneficios concretos a la economía europea. De forma paralela, estamos aumentando también nuestro compromiso con los países vecinos, donde cabe esperar que una integración y una convergencia normativa profundas reporten ganancias económicas. Se están manteniendo, o pronto se iniciarán, profundas y amplias negociaciones de ALC con Georgia, Moldavia y Armenia, así como con Egipto, Jordania, Marruecos y Túnez. El nivel de integración que se quiere lograr es destacable, y la política de vecindad de la UE, basada en la fuerte relación y sinergia entre política comercial y política exterior, contribuye así a construir un ámbito de paz y prosperidad. 13 Comisión Europea, «External sources of growth – Progress report on EU trade and investment relationships with key economic partners», SWD (2012) 219, de 18.7.2012. 5 Recuadro 1: UE — Corea: un ALC de referencia que ya empieza a dar resultados El ALC UE-Corea, en vigor desde el 1 de julio de 2011, es el acuerdo comercial más ambicioso jamás celebrado y aplicado por la UE, y el primero en Asia. Ha confirmado claramente la credibilidad del compromiso de la UE con Asia, abriendo al mismo tiempo un mercado en rápida expansión en el Asia Oriental para las exportaciones de la UE. Ha dado lugar a un nivel sin precedentes de desarme arancelario (partiendo de casi un 99 % de aranceles en el plazo de cinco años) y a algunas disposiciones pioneras sobre barreras no arancelarias. Cuando el ALC se aplique completamente, los exportadores de la UE deberían ahorrarse hasta 1 600 millones EUR al año en aranceles. Aunque tal vez sea demasiado pronto para extraer conclusiones definitivas, nuestras exportaciones aumentaron un 37 % durante el primer año de aplicación del acuerdo (frente a un aumento del 1 % de nuestras importaciones). Este resultado de las exportaciones se debe, al menos en parte, a las nuevas oportunidades creadas por el ALC. Las exportaciones de los productos completamente liberalizados desde el principio aumentaron un 54 %, frente a un 35 % para los productos liberalizados parcialmente, y un 20 % para los productos no sujetos a liberalización inmediata. En comparación, las exportaciones de los mismos productos completamente liberalizados al resto del mundo aumentaron un 27 %. La diferencia de crecimiento entre las exportaciones de estos productos a Corea y al resto del mundo significa que el ALC ha generado ya potencialmente 2 200 millones EUR de exportaciones adicionales, o 2 700 millones EUR si se incluyen también los productos parcialmente liberalizados. Nuestro déficit comercial ha bajado a poco más de 3 500 millones EUR en 2011, desde más de 11 000 millones EUR en 2010 y bastante más de 16 000 millones EUR en 2007. 3.2. Condiciones para llevar adelante este programa Para que estos beneficios se hagan realidad debemos avanzar. Es esencial dar prioridad a aquellas negociaciones que reporten más beneficios en términos de crecimiento y empleo, principalmente con los Estados Unidos y Japón, pero también con las grandes economías emergentes de potencial a largo plazo. Esto plantea diversas dificultades, por ejemplo, resolver complejas cuestiones normativas o barreras no arancelarias, especialmente con nuestros grandes socios desarrollados; encontrar el equilibrio adecuado entre ambición y realismo, en particular en el modo de atraer la participación de los grandes países emergentes; y hacer más hincapié en la aplicación de nuestros acuerdos y el cumplimiento de nuestros derechos. a) Resolver complejas cuestiones normativas, especialmente con los Estados Unidos y Japón Más de dos tercios de los beneficios económicos de nuestro programa procederían de potenciales acuerdos con los Estados Unidos y con Japón, donde el mayor potencial estaría en resolver los obstáculos al comercio que aún existen al otro lado de las fronteras. La medida en que estos acuerdos promovieran una mayor aproximación y convergencia de nuestros respectivos enfoques de la regulación, tanto de bienes como de servicios, sería la prueba de fuego de su éxito. Al autorizar la apertura de negociaciones con Japón, los Estados miembros tuvieron el acierto de hacer de esta cuestión una prioridad del programa de negociación, junto con el tratamiento de las barreras no arancelarias. El Grupo de Alto Nivel sobre Empleo y Crecimiento UE/EE.UU., que deberá presentar pronto su informe final, ha situado también las cuestiones normativas en el centro de sus debates. Será crucial tener plenamente en cuenta las implicaciones de esta nueva generación de acuerdos «entre iguales» a la hora de plantear las negociaciones. Por primera vez, la UE va a negociar ALC con socios de tamaño y desarrollo económico similares a los suyos. Esto exige planteamientos diferentes, en particular en relación con las cuestiones normativas, lo que constituye un reto para nuestra manera de enfocar las negociaciones, así como para la coordinación entre negociadores y reguladores, entre las diferentes formaciones del Consejo y las 6 comisiones del Parlamento Europeo, así como entre el nivel de la UE y el de los Estados miembros. Nuestros socios únicamente se mostrarán flexibles en relación con los cambios normativos que queramos que realicen si nosotros somos capaces de mostrar una flexibilidad similar por nuestra parte. Esto no significa rebajar las normas y los estándares de la UE. Significa, para ambas partes, adoptar un planteamiento abierto y flexible al establecer las normas e intentar evitar, en la medida de lo posible, futuras fricciones comerciales. En última instancia, las normas pueden mejorar en el proceso. Comparar las respectivas soluciones normativas a cuestiones similares es una base muy sólida para asegurar que nuestros sistemas normativos estén construidos siempre en torno a las mejores normas. El impulso político será esencial para que los reguladores asuman este esfuerzo. Recuadro 2: la justificación de ALC integrales con los Estados Unidos y Japón - La relación económica de la UE con los Estados Unidos es para ambas partes de la máxima importancia, sin parangón en alcance e intensidad, como ilustran los niveles únicos de inversión mutua (2,4 billones EUR). La inversión total de los EE.UU. en la UE es el triple que su inversión en toda Asia, mientras que la inversión de la UE en los EE.UU. es unas ocho veces mayor que la inversión de la UE en la India y China tomadas en conjunto. Las empresas europeas en los Estados Unidos y las estadounidenses en Europa dan trabajo a más de 15 millones de empleados. La relación transatlántica tiene un enorme potencial que no está ni mucho menos totalmente explotado. Habida cuenta de los bajos aranceles medios (inferiores al 2 %), la clave para liberar este potencial es abordar los obstáculos no arancelarios, que consisten principalmente en procedimientos aduaneros y restricciones regulatorias «tras la frontera». Se derivan de sistemas divergentes de regulación de las normas técnicas, los procedimientos de evaluación de la conformidad, las restricciones sanitarias y fitosanitarias y las disposiciones en materia de seguridad. Estos obstáculos son más difíciles de resolver que los aranceles, especialmente en los acuerdos formales, ya que se basan en diferentes planteamientos de la regulación, que a menudo están profundamente arraigados en planteamientos históricos o sociales y en realidades políticas. El Grupo de Alto Nivel sobre Empleo y Crecimiento UE-EE.UU. creado en la cumbre UEEE.UU. de 2011 se ha dedicado activamente a encontrar maneras de aprovechar este potencial. Para cumplir el mandato de la Cumbre de crear empleo y crecimiento, cualquier futuro acuerdo tendría que ser transformador y lo más ambicioso posible en todos los ámbitos en forma de ALC integral. Un acuerdo de gran alcance entre las dos mayores economías del mundo daría sin duda un gran estímulo al crecimiento económico y enviaría una fuerte señal de liderazgo a los demás países. - La UE y Japón son la mayor economía y la cuarta economía más importante del mundo respectivamente. El mercado japonés es inmenso, pero las empresas de la UE tropiezan con serios obstáculos no arancelarios en forma de regulaciones discriminatorias, estándares únicos, comportamientos contrarios a la competencia, deficiente gobernanza corporativa y prácticas de contratación pública discriminatorias. El resultado es que Japón tiene uno de los coeficientes de penetración de las importaciones más bajos de todos los países de la OCDE (6 %, es decir, una quinta parte de la media de la OCDE). Asimismo, tiene el nivel más bajo de recepción de inversión extranjera directa (IED) de la OCDE. Sólo el 3 % del total de la IED europea está en Japón. La relación comercial y de inversión entre la UE y Japón está claramente en un nivel insuficiente y podría mejorar mucho. Durante los últimos cinco años, las exportaciones de mercancías de la UE a Japón disminuyeron una media del 6,1 % cada año, mientras que las exportaciones totales de la UE crecieron una media del 0,7 % anual. Japón era el tercer destino más importante de las exportaciones de la UE en 2003, mientras que actualmente ocupa tan solo el séptimo lugar. Existe un potencial claramente desaprovechado en sectores en los que la industria de la UE es muy competitiva, como el farmacéutico, el de los productos sanitarios y el alimentario. Japón es consciente de la necesidad de introducir reformas económicas. Los sucesivos gobiernos japoneses han practicado la doble estrategia de revitalizar las reformas 7 nacionales y, al mismo tiempo, promover alianzas estratégicas con socios comerciales clave. Interesa tanto a Japón como a la UE que esta estrategia prospere. La apertura recíproca del comercio y la inversión con Japón reportarían ganancias muy considerables a la economía europea, al mismo tiempo que confirmarían la determinación de la UE de fortalecer sus vínculos económicos con Asia Oriental. Antes de iniciar las negociaciones sobre un ALC, llevamos a cabo un riguroso ejercicio para definir el alcance y el nivel de un potencial acuerdo de ese tipo, con el fin de asegurar que proporcione soluciones eficaces para resolver los obstáculos al comercio e igualdad de condiciones de competencia en el mercado japonés. Esto es crucial en particular para los obstáculos no arancelarios y los de naturaleza normativa. Hemos acordado un sólido y ambicioso documento sobre la delimitación del alcance, que abarca mercancías, servicios, inversión, contratación pública, propiedad intelectual, desarrollo sostenible, facilitación del comercio, etc. Incluye también hojas de ruta para la solución de una lista (aunque no exhaustiva) de obstáculos no arancelarios en 10 ámbitos del comercio de mercancías, que en algunos casos llevarían a resultados concretos en los próximos meses y, en otros, a un resultado negociado que, si se obtiene lo deseado, sería análogo a las concesiones de la UE en materia de aranceles. Hemos llegado también a un acuerdo sobre acceso al mercado de la contratación pública de ferrocarriles. b) Encontrar el equilibrio adecuado entre ambición y realidad sobre el terreno, en particular para lograr la participación de los grandes países emergentes. El ascenso de las economías emergentes es una de las tendencias clave de nuestra época. Ha intensificado la competencia en términos de precio y calidad, así como de acceso a la energía y otras materias primas. Ha creado también un nuevo grupo de prósperos consumidores de clase media y oportunidades únicas de desarrollo. Mientras que las perspectivas de crecimiento económico en la UE siguen siendo limitadas a corto plazo, China se expandirá más de un 7 % en 2013, lo que equivaldría a crear las economías de Dinamarca, Suecia y Finlandia juntas. Muchos otros países de Asia o América Latina están siguiendo la misma trayectoria. La capacidad de la UE para beneficiarse de estos nuevos mercados emergentes será un punto de referencia importante de la contribución de la política comercial al empleo y el crecimiento en Europa. Saldremos ganando con una política comercial activa en relación con los países emergentes, donde hay perspectivas significativas de crecimiento y un gran potencial para una mayor apertura comercial. Muchos de ellos están ya significativamente más abiertos que hace diez o quince años, bien a consecuencia de acuerdos comerciales o de sus propias decisiones autónomas de liberalización14. Los aranceles de importación se han reducido de media, en China, del 19,6 % en 1996 al 4,2 % en 2009; en India, del 20,1 % al 8,2 %; y en Brasil, del 13,8 % al 7,6 %15. No obstante, todos ellos siguen manteniendo barreras importantes —arancelarias y no arancelarias— a las exportaciones de la UE y, en algunos casos, hay riesgo de que se invierta la tendencia de apertura16. La relación de la UE con los países emergentes está cambiando de naturaleza, al centrarse menos en el desarrollo y más en formas de asociación cada vez más equilibradas basadas en intereses mutuos y en un reparto equitativo de las responsabilidades globales. Nuestro mayor desafío estratégico es integrarlos en el sistema comercial mundial con arreglo a un nuevo «pacto» global. Estos países están aprovechando correctamente los beneficios de su creciente protagonismo en el comercio mundial. Sin embargo, a medida que se desarrolla su papel y los beneficios que obtienen del sistema comercial global, lo hace también su responsabilidad de participar plenamente en el mantenimiento de un régimen global favorable a la apertura. Este 14 15 16 La liberalización autónoma representa dos tercios de la liberalización comercial en los países en desarrollo en los últimos años (Banco Mundial, Perspectivas económicas mundiales). Arancel aplicado, media ponderada de todos los productos (%), 2010. Fuente: base de datos del Banco Mundial. Comisión Europea, Noveno Informe sobre medidas potencialmente restrictivas del comercio detectadas en el contexto de la crisis económica y financiera, septiembre de 2011 a 1 de mayo de 2012. 8 proceso atañe tanto a los aspectos económicos como a los aspectos políticos de la apertura. Nuestros ciudadanos europeos esperan que ellos se abran a nosotros como nosotros nos abrimos a ellos. El programa de ALC de la UE con las grandes economías emergentes, como la India, los países de la ASEAN y el Mercosur, es una poderosa herramienta para integrarlas en un sistema de intercambios comerciales abiertos. Puesto que el objetivo general de los ALC es eliminar todas las barreras arancelarias y no arancelarias al comercio, y la UE, al igual que otras economías avanzadas, está más abierta al comercio que sus socios emergentes, este programa restablecerá necesariamente el equilibrio entre los niveles de apertura, actualmente asimétricos, y promoverá una mayor igualdad en las condiciones de competencia. Por consiguiente, esta es una política recíproca por naturaleza. Nuestro concepto de la reciprocidad está encaminado a abrir los mercados de terceros países, no a cerrar los nuestros. El objetivo último es que las economías emergentes lleguen a nuestro nivel de apertura, lo que suelen entender como favorable para su propio interés, y no cerrar nuestros mercados y poner obstáculos en nuestras economías simplemente porque otros lo hacen. Este enfoque da resultados: como ya se ha mencionado, se ha suprimido el 99 % de los aranceles aplicados por Corea (además de numerosas barreras al comercio no arancelarias), mientras que los aranceles de Corea eran el doble que los de la UE antes del inicio de las negociaciones; y las negociaciones con Canadá deberían exceder de lo ya logrado entre las economías norteamericanas en el marco del TLCAN. Hemos presentado un instrumento para abrir los mercados de la contratación pública, que puede ayudar a mejorar nuestra influencia y nuestra postura negociadora con el fin de promover una mayor apertura. Ahora bien, la vía principal para tratar estas cuestiones sigue siendo animar a nuestros socios comerciales a negociar acuerdos con nosotros17. En la medida en que estén dispuestos a negociar compromisos sustanciales, es obvio que no serán necesarias medidas suplementarias. La UE es un negociador duro. Algunas negociaciones se están prolongando porque somos exigentes. Por ejemplo, el nivel de ambición en la negociación con la India va mucho más lejos de lo que la India ha acordado hasta ahora con otros socios, incluyendo cuestiones que anteriormente se habían descartado en el contexto de la OMC (como inversión y competencia), o excluidas en general en las negociaciones con otros socios bilaterales (contratación pública). Aunque intensificar nuestro compromiso con socios como la India es un interés estratégico de la UE, no estamos dispuestos a llegar a un acuerdo a cualquier precio. Pese a nuestro interés en negociar un acuerdo ambicioso con Japón, no nos engañamos acerca de la dificultad de obtener lo que necesitamos en futuras negociaciones. Por eso una cláusula de suspensión permitirá suspender las negociaciones al cabo de un año de haberlas iniciado, si Japón no cumple los compromisos formulados durante el ejercicio de delimitación del alcance. De igual modo, se establecerá un paralelismo estricto entre la eliminación de obstáculos no arancelarios por Japón y la eliminación de aranceles de la UE. Sin embargo, para que las negociaciones lleguen a buen término hace falta también realismo. Si bien es esencial aspirar a los niveles más elevados posible de apertura del mercado de nuestros socios comerciales, con los países emergentes, habida cuenta del nivel de asimetría inicial, tendremos que aceptar inevitablemente alguna asimetría limitada y periodos de evolución progresiva. Negociar consiste en ceder y obtener. No podemos esperar compromisos significativos de nuestros socios si no estamos dispuestos a tomar decisiones difíciles también en la UE. Los 17 Se han registrado últimamente progresos con varios socios clave: los ALC con Corea y Singapur han dado amplio acceso a los mercados de contratación pública, mientras que el acuerdo con Canadá debería proporcionar lo mismo, al ir más lejos que los acuerdos precedentes y cubrir también las entidades de ámbito subfederal. Con Japón se ha encontrado una línea concreta de avance en la adquisición de ferrocarriles, y hay grandes ambiciones puestas en las próximas negociaciones con Japón y los Estados Unidos. 9 intereses sectoriales, que a veces ofrecen una dura resistencia en las negociaciones, tienen que abordarse de manera realista. Esta resistencia no puede desestimarse de entrada, pero tampoco intereses puramente defensivos pueden determinar el destino de la economía europea. Las potenciales ganancias que nuestro programa comercial puede reportar a la economía de la UE deben sopesarse con estrechos intereses defensivos. Los acuerdos comerciales incorporan sistemáticamente periodos de transición, que permitan avanzar de forma fluida y progresiva, mientras se aplican cláusulas de salvaguardia para proteger a los productores de la UE de cambios imprevistos. Pero la política comercial no puede sustituir a otras políticas. La competencia extranjera rara vez es responsable de las dificultades sectoriales que desencadenan una actitud negativa frente al comercio. De hecho, para cada tipo de industria, suele haber tanto intereses ofensivos como defensivos. En todo caso, el balance de cualquier negociación debe valorarse en conjunto, teniendo en cuenta todos los sectores de la economía. Recuadro 3: relaciones de la UE con los grandes países emergentes China: Hay una tensión inherente entre el planteamiento estatal de puesta al día de China y nuestro deseo de promover la apertura y el respeto de las normas comerciales internacionales, aunque estas redunden en el interés de China a largo plazo. Sin embargo, China se ha convertido también en un pilar esencial de las estrategias de las empresas europeas, mientras la UE, por su parte, ha sido durante varios años el mayor socio comercial de aquel país. Nuestro programa con China se centra en la inversión, la contratación pública y los DPI. Ambas partes han confirmado su empeño en empezar pronto negociaciones sobre un acuerdo de inversión que sea «rico en sustancia», lo cual hemos dejado claro que para nosotros incluye el acceso al mercado. Mantenemos nuestro empeño de desarrollar un programa positivo con China. Si, tras el cambio de liderazgo, China quiere ampliar el programa de negociación (incluso con vistas a un ALC, como se sugirió en la última cumbre), la cuestión podría estudiarse siempre que China demuestre su disposición y su capacidad para celebrar un ALC amplio y profundo. ASEAN: Acaban de finalizar las negociaciones de un ALC sobre una base de gran calidad con Singapur. Hay negociaciones en curso con Vietnam y con Malasia, y, previa aprobación del Parlamento, deberían iniciarse con Tailandia en el primer semestre de 2013. Otros países de la ASEAN están mostrando también su disposición a renovar su compromiso después de varios años. En definitiva, los ALC bilaterales deberían servir como bloques de construcción para un acuerdo de región a región, que podría materializarse una vez que se alcance una masa crítica de ALC bilaterales con distintos países de la ASEAN, y una vez que estos países alcancen una mayor integración entre sí. India: las negociaciones de un ALC con la India son esenciales de cara al futuro, con implicaciones que van más allá de la India, ya que, si se logra un buen acuerdo, sería la primera vez que un gran país emergente participa en un ejercicio semejante de apertura recíproca del comercio. Estas negociaciones están ya muy avanzadas y nos enfrentamos ahora a las cuestiones más difíciles, de las que depende su conclusión. India sigue comprometida a encontrar soluciones, aunque no es fácil, ya que en algunos casos esto requiere un cambio de leyes y normativas. La cuestión clave es si será viable concluir las negociaciones manteniendo un nivel satisfactorio de ambición antes de que la India entre en periodo preelectoral, más adelante en 2013. Rusia: La adhesión de Rusia a la OMC el verano pasado fue un hito clave, al incorporar a este país al sistema comercial mundial, lo que proporciona un entorno empresarial más estable y previsible para los operadores de la UE y ayuda a evitar puntos de fricción comercial bilateral. Las reducciones de aranceles deberían generar unos 4 000 millones EUR adicionales de exportaciones de la UE cada año y deberían permitir a los exportadores de la UE ahorrar 2 500 millones EUR al año. A corto plazo, la prioridad debe seguir siendo que Rusia cumpla sus compromisos. 10 Las recientes medidas proteccionistas son una verdadera causa de preocupación. La UE defenderá con presteza sus intereses, recurriendo al mecanismo de solución de diferencias de la OMC si es necesario. Están en curso las negociaciones de un acuerdo sucesor del acuerdo de colaboración y cooperación, que requieren avances en las disposiciones sobre comercio e inversión. No obstante, esto sigue siendo difícil, mientras Rusia sigue muy comprometida con su propio proceso de integración económica regional. Mercosur: Las tendencias proteccionistas en la región y las últimas evoluciones internas en el Mercosur crean dificultades significativas para las negociaciones de ALC con este mercado, que no han avanzado conforme a lo deseado. Es mucho lo que está en juego para ambas partes, tanto en lo económico como en lo político, ya que se trata de crear la mayor zona de libre comercio del mundo entre dos regiones. c) Incrementar la aplicación de los acuerdos comerciales y el cumplimiento de los derechos de la UE. Mientras que las negociaciones comerciales son esenciales para preparar el futuro, la forma más eficaz de potenciar la contribución del comercio al crecimiento a corto plazo consiste en garantizar el cumplimiento estricto de los derechos de la UE en virtud de las normas actuales. Se trata también de una cuestión de equilibrio, ya que las normas deben ser respetadas por todos. La Comisión publicará su tercer informe anual al Consejo Europeo sobre los obstáculos al comercio y la inversión con ocasión del Consejo Europeo de primavera. En dicho informe se detallarán los progresos realizados en determinados ámbitos, pero también las nuevas barreras y tendencias negativas a la adopción de medidas proteccionistas en determinados socios estratégicos de la UE. Nos mantenemos firmes contra el comercio desleal. Nuestro compromiso de abrir mercados se asienta en nuestra capacidad para combatir las prácticas comerciales desleales, utilizando a tal efecto tanto medidas antidumping como antisubvenciones. No pretendemos anular las ventajas comparativas de nuestros socios, pero no dudamos en actuar cuando esas ventajas se refuerzan con prácticas desleales como, por ejemplo, las políticas de precios o de subsidios anticompetitivas u otros falseamientos de la competencia inducidos por los Estados. La UE es uno de los principales usuarios de los instrumentos de defensa de la competencia a escala mundial, junto con los EE.UU. y China. Cuando fallan todas las demás intervenciones, no dudamos en llevar a los países al sistema de solución de diferencias de la OMC. La UE lo ha utilizado activa y eficazmente, también en comparación con otros agentes. Por ejemplo, la UE ha promovido 32 casos ofensivos desde 2001, año en que China se incorporó a la OMC y ha ganado la gran mayoría de los mismos. Solo los Estados Unidos tienen un nivel comparable de casos ofensivos (36 durante el mismo periodo). En la actualidad estamos intensificando nuestros esfuerzos: en los últimos dos años, la UE ha llevado cinco nuevos casos ante la OMC, frente a los seis que promovió en el transcurso de los cuatro años precedentes. Los casos ofensivos de la UE están dirigidos contra actuaciones proteccionistas de alcance sistémico, como la preferencia dada por Canadá a la electricidad producida con equipo de fabricación canadiense, o las licencias a la importación de Argentina vinculadas a requisitos de resultados de las exportaciones. Estamos luchando también contra las restricciones impuestas por China a las exportaciones de tierras raras y otras materias primas esenciales para la industria europea, y hemos marcado un hito al ganar un primer caso contra las restricciones de China a las exportaciones de materias primas. Sin embargo, nuestra postura ofensiva contra el proteccionismo en el exterior solo será creíble si oponemos igual resistencia al proteccionismo dentro de la UE. También estamos cambiando de velocidad en la aplicación de los ALC, algo esencial para el futuro teniendo en cuenta el volumen actual de negociaciones bilaterales. El ALC UE-Corea hace hincapié, por primera vez, en la aplicación y el cumplimiento: además de las comisiones 11 temáticas, se han creado siete grupos de trabajo específicos para garantizar una aplicación adecuada, mientras que en los acuerdos anteriores esta tarea se encomendaba a una sola comisión que se reunían tan solo una vez al año. Los futuros acuerdos sobre inversión darán a los inversores la posibilidad de garantizar el cumplimiento por medio de mecanismos de solución de diferencias entre los inversores y el Estado. Los Estados miembros también tienen un gran papel que desempeñar en la aplicación de los acuerdos comerciales, en beneficio de sus propios operadores. Por ejemplo, la concesión de la categoría de exportador autorizado, requisito fundamental para que los exportadores de la UE se beneficien de las preferencias arancelarias abiertas por los ALC de la UE, se demora más de seis meses en algunos Estados miembros, mientras que se expide en menos de un día en otros. Los Estados miembros tienen también la responsabilidad de vigilar las prácticas desleales en el mercado de la UE: las normas técnicas aplicadas en la UE a los productos producidos en ella se aplican también a las importaciones que entran en la UE; sin embargo, en algunos casos, los productores extranjeros no cumplen los requisitos establecidos en la UE, sino que compiten de manera desleal con los productores de la UE y ponen en riesgo la seguridad y la protección de sus consumidores. Es preciso intensificar los controles, y esta es ante todo una responsabilidad nacional. 3.3. Un programa realista para el sistema de comercio multilateral La prioridad de la UE debe ser preservar y reforzar el sistema de comercio multilateral. Esta necesidad es especialmente acuciante en tiempos de crisis, cuando hay mucha tentación de recurrir al proteccionismo. Hay que encontrar un difícil equilibrio entre el punto muerto en que se encuentra actualmente el Programa de Doha para el Desarrollo y el papel incuestionado de la OMC a largo plazo. Debemos intentar avanzar dentro de la OMC cuando sea posible, pero velando al mismo tiempo por que nuestros ALC preparen el terreno para el siguiente nivel de liberalización y regulación multilaterales. a) Asegurarnos de que nuestro programa bilateral y plurilateral apoya el sistema comercial multilateral Los ALC, si se plantean minuciosamente, pueden basarse en las normas de la OMC para ir más lejos y más deprisa en la promoción de la apertura, al tratar cuestiones que aún no están maduras para un debate multilateral y preparar el terreno para el siguiente nivel de liberalización multilateral. Pueden abordarse muchos temas clave a través de los ALC, incluidos la inversión, la contratación pública, la competencia, cuestiones reglamentarias y el cumplimiento de los DPI, que en la actualidad no entran dentro de las competencias de la OMC. Los acuerdos ambiciosos, especialmente con los grandes países desarrollados, pueden tener alcance sistémico. Proporcionan un laboratorio para subsanar deficiencias del marco normativo multilateral y desarrollan soluciones normativas que pueden servir de base para el trabajo posterior a nivel multilateral. Este podría ser el caso, por ejemplo con los Estados Unidos, en ámbitos como las normas de origen preferenciales o las indicaciones geográficas. Cuanta más convergencia —y no solo equivalencia—normativa podamos alcanzar, mejor para el sistema multilateral. Conseguir acercar dos modelos normativos que son dominantes pero en parte antagónicos crearía un bien público global. Transmitiría una señal clara de que es posible converger, incluso partiendo desde posturas muy diferentes, y ofrecería soluciones normativas concretas para hacerlo, lo que facilitaría más negociaciones en la OMC18. La UE defiende planteamientos internacionales en sus acuerdos bilaterales. Nos referimos todo lo posible a las normas acordadas internacionalmente (o al menos a procesos plurilaterales) y, de este modo, utilizamos los acuerdos bilaterales como palanca para llevar a nuestros socios hacia estas disposiciones internacionales (véase el ejemplo de las normas de las Naciones Unidas 18 Los estudios económicos muestran también que potenciales ALC con los EE.UU. y Japón beneficiarían a terceros países, gracias a la propagación de los efectos positivos de las mejoras normativas y las medidas de transparencia, muchas de las cuales benefician a todos los países sobre una base erga omnes. 12 sobre vehículos y nuestros esfuerzos por lograr que Corea, Japón y otros países asiáticos se atuvieran a ellas). En el ejercicio de delimitación de alcance con Japón se hace referencia explícita al objetivo de promover una mayor convergencia de los requisitos nacionales de Japón con las normas internacionales pertinentes. A nivel plurilateral, la UE favorece los planteamientos no discriminatorios basados en la regla de la nación más favorecida, siguiendo el Acuerdo sobre las tecnologías de la información, cuando procede. Estaríamos dispuestos a apoyar un acuerdo plurilateral de este tipo sobre productos medioambientales en la OMC, a raíz de la apertura mostrada recientemente por los miembros de la APEC en este ámbito. Cuando este enfoque no discriminatorio no es posible porque no se puede alcanzar una masa crítica de participantes, tenemos que encuadrar todo lo posible las nuevas iniciativas en el sistema de la OMC y mantenerlas abiertas a todos los países que comparten la misma ambición, como hemos venido haciendo en el contexto de las incipientes negociaciones plurilaterales sobre servicios. En última instancia, lo que importa no es si se sigue la vía bilateral, plurilateral o multilateral, sino si nuestro enfoque de los acuerdos bilaterales y plurilaterales es abierto (en particular de cara a una mayor pluri- o multilateralización) o cerrado (esencialmente discriminatorio). b) Avanzar en la OMC Las negociaciones sobre los ámbitos de acceso a los mercados dentro del Programa de Doha para el Desarrollo (PDD) continúan en un punto muerto que no es probable que se resuelva en el futuro próximo. No obstante, el PDD tiene demasiado potencial como para abandonarlo. La UE sigue comprometida a contribuir a su conclusión. Como primer paso, es importante avanzar en ámbitos en los que el proceso multilateral podría progresar. Hay una perspectiva verosímil de que se concluya un acuerdo multilateral sobre facilitación del comercio y otras cuestiones en la próxima conferencia ministerial de la OMC, que se celebrará en diciembre de 2013. Los beneficios para la economía mundial de un acuerdo sobre facilitación del comercio serían comparables a todo lo que se espera ganar con la liberalización de bienes y servicios en el marco del PDD. Este avance positivo, beneficioso para todos los miembros de la OMC, sería crucial para el futuro en general del PDD. La UE está dispuesta a participar constructivamente después de la próxima conferencia ministerial de la OMC en el resto del Programa de Doha. Ahora bien, para llevar a cabo esta tarea, tenemos que analizar primero las causas profundas del actual atolladero. El verdadero atasco de la ronda no es institucional o técnico y ni siquiera está relacionado con el contenido real del programa, sino que tiene que ver más bien con la voluntad de los participantes de alcanzar un compromiso. Se deriva del hecho de que la OMC no ha evolucionado tan rápidamente como la realidad económica. El cambio fundamental en el poder económico relativo de los principales socios comerciales todavía no se ha reflejado plenamente en el sistema de la OMC. Hay un desequilibrio creciente entre la contribución de los grandes países emergentes al sistema comercial multilateral y los beneficios que obtienen de él. Esta tendencia, que ya era perceptible cuando se puso en marcha el Programa de Doha para el Desarrollo, ha aumentado de manera significativa desde entonces, y parece que va a seguir haciéndolo en el futuro. Reequilibrar la contribución relativa dentro del sistema entre países desarrollados y economías emergentes es un requisito imprescindible para que el sistema avance en el futuro. Esta es una gran cuestión, con una gran carga política, y por el momento no hay una actitud favorable a tratarla en serio. Sin embargo, no será posible lograr ningún cambio profundo en los procedimientos de trabajo de la OMC hasta que el sistema no haya superado este obstáculo. Los países emergentes deben mostrar más liderazgo y asumir más responsabilidad en la apertura de sus mercados al resto de los miembros de la OMC. En nuestra opinión, esto no implica plena reciprocidad de los compromisos con los países desarrollados como resultado del PDD, sino mayor proporcionalidad de su contribución respecto de las ventajas que obtienen del sistema. 13 ANEXO 1. La UE compite con los «pesos pesados» Población, PIB y resultados comerciales* de la UE, los EE.UU. y China, en porcentajes de las cifras mundiales totales Población (% del total mundial) PIB (2011) (paridad del poder adquisitivo, 2011) 25 25 19,3% 20 14,0% 10 7,2% 4,5% 5 5 0 0 UE EE.UU. China Comercio de bienes (2011) UE 20 20 13,3% 10,3% 10 24,8% 18,2% 15 10 5,7% 5 5 China (2011) 25 14,9% EE.UU. Comercio de servicios comerciales 25 15 18,5% 15 15 10 20,3% 20 0 0 UE EE.UU. China UE EE.UU. China Fuente: ONU, FMI, OMC, Comisión Europea * excluidos los datos del comercio intra-UE 2. La agenda comercial de la UE Acuerdos bilaterales – situación actual México Cariforum AELC Turquía Ucrania Balcanes EuroMed Corea del Sur América Central Singapur Columbia Perú Papúa Nueva Guinea Fiji Sudáfrica Chile Acuerdos en vigor Negociaciones concluidas Acuerdos bilaterales – próximos pasos Canadá Socios del Este Japón EuroMed Países del Golfo EE.UU. Malasia India Mercosur Negociaciones en curso 5 regiones africanas Vietnam Pacífico Tailandia Otros ASEAN Negociaciones en consideración 3. Resultados comerciales y de IED de la UE La UE mantiene una cuota muy importante de las exportaciones mundiales, superior a la de otras economías industrializadas Bienes Servicios 30% 30% 20% 20% 25% 25% 15% 15% 20% 20% 15% 15% 10% 10% 10% 10% 5% 5% 5% 5% 0% 0% 0% 0% UE China EE.UU. Japón Fuente: OMC Aumento de los excedentes de los sectores fabril y de servicios (€ bn) 500 400 300 200 Servicios 100 Sector fabril 2011 2010 2009 2008 2007 2006 2005 2004 2003 2002 2001 -100 2000 0 Combustibles minerales Agricultura -200 -300 -400 -500 Fuente: Eurostat Exportaciones e importaciones de bienes y servicios comerciales de la UE hacia y desde sus principales socios (2011) Rusia 132,8 millardos € 207,3 millardos € Japón 71,3 millardos € 84,1 millardos € Estados Unidos 413,8 millardos € 327,4 millardos € India 52,4 millardos € 49,4 millardos € China (+ Hong-Kong) 204,3 millardos € 324,3 millardos € Brasil 47,5 millardos € 43,4 millardos € Fuente: Comisión Europea Existencias de inversión entrante y saliente, desde y hacia sus principales socios (2011) Rusia 166,8 millardos € 53,1 millardos € Japón 85,8 millardos € 144,2 millardos € Estados Unidos 1421,0 millardos € 1344,2 millardos € China (+ Hong-Kong) 225,5 millardos € 78,9 millardos € India 46,4 millardos € 10,1 millardos € Brasil 238,9 millardos € 77,8 millardos € Fuente: Comisión Europea Diferentes tendencias sectoriales (balanza comercial de una selección de sectores, en millardos EUR) Agricultura y prod. alimentarios Automóviles Productos textiles Productos mineros Ferrocarriles y aeronaves Artículos de confección Siderurgia Generadores eléctricos Instrumentos científicos Productos químicos Maquinaria no eléctrica Equipos de oficina y telecomunicaciones Maquinaria eléctrica Artículos de uso personal y doméstico 150 Millardos Maquinaria no eléctrica EUR 100 Prod. químicos Automóviles 50 Ferrocarriles, aeronaves 0 Minería -50 Confección -100 Equipos de oficina y telecomunicaciones -150 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 Fuente: Comisión Europea La IED: un factor clave para el desarrollo económico interior y exterior (en millardos EUR) stocks 5500 Stocks salientes de la UE Stocks entrantes en la UE Salida de flujos de la UE hacia el resto del mundo Entrada en la UE de flujos de origen extra UE flujos Millardos EUR 600 550 500 450 400 350 300 250 200 150 100 50 0 5000 4500 4000 3500 3000 2500 2000 1500 1000 500 0 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 Fuente: Comisión Europea Resultados de exportación de los Estados miembros 2000-2010 Cambios en la cuota de exportaciones totales de los países de la UE (en %, 2000-2010) Cambios en la cuota del mercado de exportación mundial (en %, 2000-2010) 170 150 130 110 % 90 70 Ganancias 50 30 10 -10 FR UK IT DE -30 ES NL AT BE SE DK EL FI PT IE CY MT EU US JP PL CZ RO HU SK LU BG SI LT LV EE EU inward and outward investment stocksChina by main partner (2011) Pérdidas Fuente: Comisión Europea Corrección de los desequilibrios (selcción de Estados miembros de la UE) Reducción del déficit por cuenta corriente (2007-2014) Cambios en la composición del ajuste de cuenta corriente 2007-11 2011-14 Puntos porcentuales del PIB % del PIB 5 30 25 0 20 15 -5 10 -10 5 0 -15 -5 -10 2008 2010 2012 2014 2008 2010 2012 2014 2008 2010 2012 2014 2008 2010 2012 2014 2008 2010 2012 2014 -20 IE IE EL EL ES ES IT IT PT PT IE EL ES IT PT IE EL ES IT PT IE EL ES IT PT Exportaciones Importaciones Renta y transferencias Fuente: Comisión Europea 4. Importancia del comercio para la UE Contribuciones al crecimiento del PIB mundial (%): el 90% del crecimiento mundial se genera fuera de la UE 6 5 4 Resto del mundo 3 2 China 1 Japón 0 Estados Unidos -1 Unión Europea -2 -3 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016 Fuente: FMI, Perspectivas de la Economía Mundial Porcentaje del empleo orientado a la exportación en el empleo total: unos 30 millones de puestos de trabajo dependen del comercio fuera de la UE. (en %, últimas cifras disponibles) Más del 10% 8% - 10% 6% - 8% 4% - 6% Hasta un 4% Fuente: Comisión Europea