(20151030 Como generar valor en las entregas de última milla para

Logística Urbana
Cómo generar valor en entregas de última milla
para ciudades, transportistas y minoristas
Realizado en exclusiva para:
Retos y oportunidades de entregas de la última milla para ciudades
La población mundial está concentrada en ciudades. Actualmente, más del cincuenta y dos por
ciento de la población vive en áreas urbanas, y se prevé que en 2050 este número llegue a ser del
67%. De la misma manera, el 64% de los trayectos se realizan en entornos urbanos y se espera
que la cantidad total de kilómetros urbanos recorridos se triplique en 2050. Se prevé una tendencia
similar en términos de distribución urbana de mercancías, siendo E-comerce el driver de crecimiento
más rápido en entregas urbanas, cosa que también impacta en la longitud y fragmentación de los
flujos logísticos en este tipo de zonas. Como un creciente número de vehículos implica un incremento de la congestión, contaminación del aire y ruido, que impacta negativamente a la seguridad
vial, a la calidad de vida y a la competitividad económica, cada vez más ciudades están experimentando problemas relacionados con las entregas de última milla.
Muchas ciudades han empezado a entender y a abordar los retos asociados con cuestiones de movilidad de pasajeros, desarrollando visiones y estrategias de movilidad urbana para el transporte de
pasajeros a nivel regional o entre ciudades. No obstante, se carece de estrategias globales para entregas de la última milla en ciudades.
La entrega de mercancías en la última milla es una cuestión difícil de gestionar ya que implica varios
niveles de complejidad. Además de la heterogeneidad de la mercancía transportada y de los medios
de transporte, la logística urbana incluye diversas palancas y múltiples stakeholders. Los stakeholders más importantes son las autoridades públicas, compañías de transporte y minoristas; teniendo
cada uno de ellos diferentes intereses y objetivos. Estos stakeholders acostumbran a carecer de un
entendimiento compartido del status quo y de las prioridades y las palancas de acción más apropiadas. Por un lado, las autoridades locales están interesadas en reducir la congestión, contaminación
y ruido; mientras que por otro, a las compañías de transporte y minoristas les interesa mantener los
costes bajo control mientras mantienen o incrementan los niveles de servicio. Esta complejidad
tiende a llevar al cumplimiento parcial, sub-óptimo o incluso contraproducente de decisiones y soluciones.
Una estrategia global puede contribuir a varios objetivos, cada uno de ellos influenciado por diversos
factores. Algunos de estos objetivos pueden incluso entrar en contradicción, por lo que hace falta
establecer cuidadosamente el orden de prioridad:
Figura 1: Evolución de la población urbana y de la demanda de movilidad de mercancias
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Reducción de la congestión urbana, influenciada por la distancia recorrida, capacidad y
longitud del vehículo y la facilidad de parada.
Reducción del número de camiones en la ciudad, influenciada por la capacidad del
vehículo, el ratio de llenado, y el nivel de congestión
Reducción de la contaminación, influenciada por el tipo de vehículo, distancia recorrida y
nivel de congestión.
Conservación de energía (incluyendo reducción de CO2), influenciada por tipo y edad del
vehículo, distancia recorrida y nivel de congestión
Reducción de ruido, influenciada por el tipo de vehículo, distancia recorrida y nivel de congestión
Desarrollo de los minoristas locales, influenciado por los costes de las soluciones, que se
definen por la calidad de servicio (rapidez, intervalos de tiempo de entrega, flexibilidad/reactividad, etc.)
Contribución a la política de vivienda (incremento del espacio de vivienda dentro de los
límites de la ciudad), influenciada por la ocupación en superficie de la plataforma logística urbana.
Además, existen condiciones límite que impactaran en la definición de una estrategia de entregas
de última milla apropiada: tendencias económicas, medioambientales, políticas y regulatorias, tecnológicas y de consumo.
Figura 2: Ecosistema de logística urbana
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Potenciales soluciones para idear estrategias de logística urbana apropiadas
Podemos distinguir cuatro categorías principales de soluciones:
1. Planificación regulatoria y del terreno
Estas medidas permiten a las autoridades imponer ciertas reglas y restricciones en el uso del transporte urbano y la planificación del terreno para la logística urbana. Los típicos ejemplos son:
Acceso restringido a ciertas áreas considerando un conjunto de criterios para vehículos (ej.
Emisiones, peso, medida)
Franjas horarias para ciertos vehículos y ciertas calles
Zonas exclusivas para entregas urbanas (en las que solo un o un número limitado de transportistas puede llevar a cabo las entregas)
Planificación urbanística para agrupar zonas específicas de minoristas y distribución con el
fin de reducir la expansión logística.
Todas estas medidas se aplican en combinación con otras palancas dado que pueden guiar el
comportamiento de los transportistas hacia mejores soluciones de entrega en la última milla. Las
restricciones y las franjas horarias son palancas maduras, ya que se han aplicado durante muchos
años en muchas ciudades. Como estas medidas implican un gran coste de capital para los transportistas (ej. Vehículos nuevos o adaptados), las ciudades deben alinearse para conseguir que los costes de cumplimiento sean lo menores posibles. Al tener costes tan elevados, se considera que la
implementación de estas medidas favorece a los operadores de transporte grandes frente a los más
pequeños. Las autoridades deben asegurarse que estas palancas se cumplan (ej. Multas), y priorizar el cumplimiento de las medidas existentes frente las que nuevas.
2. Infraestructura
Con el fin de cubrir mejor las necesidades del transporte urbano de mercancías, se han creado infraestructuras de transporte y logística alternativas o se han adaptado las existentes.
Los centros de distribución urbanos (CDU) reciben entregas en un almacén especializado
en los límites de la ciudad, dónde las mercancías se consolidan antes de ser enviadas al
centro para las entregas de última milla. El objetivo es incrementar el uso de los camiones
para optimizar el total de su distancia recorrida, que beneficia el nivel de congestión de la
ciudad y la calidad del aire. El impacto del CDU depende principalmente de la medida en que
puede incrementar el uso de camiones, que es influenciada por la naturaleza de los bienes,
los transportistas y la densidad local. Aunque muchos ya no estén operativos debido a la falta
de viabilidad financiera, se espera ver una segunda ola de implementaciones de CDUs, en
base a las lecciones aprendidas en implementaciones anteriores.
La inyección directa lleva la mercancía directamente a la ciudad usando medios de transporte masivo alternativos (ej. Barcos y trenes de mercancías), dónde las distancias cortas
son cubiertas mediantes furgonetas y otros medios de transporte. Esta medida no es efectiva
en costes para los transportistas en este momento debido al incremento de costes adicional
del transbordo, pero permite la entrega de mercancías urbanas en áreas restringidas.
o Usan modos de entrega mucho más ligeros (como triciclos)
o Dónde el acceso de camionesa centros históricos está muy restringido
o Cuando se imponen grandes cargos por congestión urbana
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Las ciudades pueden también reservar zonas de estacionamiento dedicadas a la carga y
descarga de camiones o dejar a los camiones usar las líneas de bus durante ciertas franjas
horarias. Esta medida se usa de manera genérica pero recientes implementaciones de esta
palanca usan reservas dinámicas de zonas de parking o una asignación dinámica del acceso a carriles bus para camiones, dependiendo de la franja horaria o de las condiciones de
tráfico.
La reciente oleada en E-commerce, ha llevado a un aumento de las parcelas de entrega. Los
puntos de recogida como Amazon Lockers, permiten a los transportistas entregar la mercancía a una única localización sin tener que ir puerta a puerta. También permiten a los clientes
recoger sus paquetes en función de su conveniencia, en localizaciones cerca de sus casas.
Figura 3: Ejemplos de soluciones
3. Incentivos financieros
Las autoridades públicas pueden dar incentivos financieros a los proveedores de transporte urbano
basándose en mecanismos de oferta-demanda, para dirigir sus decisiones de transporte y disminuir
las externalidades causadas por el transporte urbano de mercancías.
Los cargos por congestión urbana para ciertas carreteras o áreas de la ciudad pueden incentivar a los transportistas, igual que a los usuarios de coches, y reducir el tráfico en esas
áreas, con lo que la congestión disminuye. Otros beneficios incluyen una menor contaminación del aire y emisiones de gases de efecto invernadero. Los cargos pueden darse usando
cabinas de peaje o sistemas de recaudo automático basados en reconocimiento de matrículas o instalando un dispositivo de señalización en el vehículo. Implementar esta medida requiere fuertes inversiones que normalmente se realizan vía colaboraciones públicas o privadas y pueden ser políticamente sensibles
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Un precio variable inteligente dependiente de un conjunto de variables, tales como distancia recorrida, volumen de entrega, o la franja horaria pueden optimizar el sistema de peaje.
Esquemas de precio basados en sistemas de navegación por satélite globales pueden permitir una precisa fijación de precios basada en el uso en lugar de meras “tarifas de acceso”,
cobrando únicamente a aquellos vehículos que más contribuyen a la congestión. Los mecanismos de precios también pueden ser en función de la demanda, significando que el peaje
es cero cuando no hay tráfico pero que aumenta en relación al volumen de tráfico. Este tipo
de esquema se usa en San Diego.
Subsidios, reducción de impuestos y otros incentivos para fomentar la implementación
de palancas de infraestructura, equipo o tecnología. Normalmente, estas medidas se instauran a nivel local o regional y se dirigen a los proveedores de transporte, minoristas y proveedores de infraestructura. Los OEMs y los fabricantes de equipo pueden beneficiarse de incentivos a nivel regional o nacional.
4. Equipo y tecnología
Los equipos y tecnologías nuevos o mejorados reducen el impacto creado por las entregas de última milla, y permiten implementar estrategias de entrega este tipo.
Camiones más ecológicos (eléctricos, híbridos, de hidrógeno o gas natural) reducen el impacto en el medio ambiente causado por camiones de mercancías que circulan por la ciudad.
Varios proveedores logísticos, tales como DHL y UPS, están desarrollando furgonetas y camiones eléctricos en pequeña escala o proyectos piloto. No obstante, según el World Economic Forum, el coste total de propiedad de un camión eléctrico en Europa es aun alrededor
de un 40% más caro comparado con camiones con motores de combustión interna similar.
En China, el coste total de propiedad es comparable debido a los altos incentivos del gobierno por los camiones eléctricos.
Los medios de transporte alternativos pueden ser usados para reducir el impacto de las
entregas de última milla en términos de impacto medio ambiental (emisión GHG, contaminación del aire, ruido), al igual que de seguridad vial. Existe una gran multitud de medios de
transporte disponibles, tales como bicicletas, motocicletas eléctricas de mercancías, vehículos urbanos pequeños y eléctricos, triciclos y drones. Estos medios de transporte normalmente se combinan con otros medios de transporte de última milla, tales como centros de distribución urbanos e inyección directa.
Soluciones de Big Data para tomar decisiones sobre el negocio y sistemas de tráfico inteligente (STI) son soluciones ICT que permiten la optimización las entregas a nivel individual (ej. Transportistas) y a nivel de sistema (ej. Flujos de tráfico en la ciudad). Esto permite
una optimización de rutas a partir de información en tiempo real sobre el tráfico y una optimización de factor de carga mediante sistemas de intercambio de capacidad de carga entre diferentes actores logísticos. La mayoría de proveedores logísticos usan este tipo de sistemas
para la optimización de ruta, pero las primeras iniciativas a nivel de sistema ITS para cargas
siguen en una fase embrionaria. La optimización del flujo de mercancías debería ser parte de
una plataforma holística de ciudades inteligentes que también tuviera en cuenta otros mercados verticales.
Las soluciones de entrega crowdsource son soluciones de entrega de última milla basadas en crowdsourcing (tanto para profesionales del transporte como para individuales). Ofrecen soluciones de recogida desde un almacén local (normalmente directamente des de la
tienda) y hacen entregas de corta distancia (dentro de la ciudad) al comprador de Ecommerce.
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Factores de éxito para definir estrategias de logística urbana a nivel de sistema
Un prerrequisito para la mejora de las entregas de última milla es, por tanto, el alineamiento entre
los diferentes stakeholders para definir objetivos comunes relativos a la estrategia de este tipo de
entregas.
Para seleccionar el conjunto de soluciones más apropiadas, se necesita tener un entendimiento
común de su impacto en el contexto local al igual que su contribución con los diferentes objetivos. A
la vez, las soluciones escogidas deben tener en cuenta el área geográfica y el mix de categorías de
productos en su ámbito de aplicación /alcance. Esto requiere un ecosistema innovador formado por
diversos jugadores, privados y públicos, compartan una visión y objetivos para escoger el conjunto
de palancas adecuado que consiga esta visión comuna.
Para abordar la cuestión de entregas de última milla, se debe incluir una combinación de hasta siete
factores clave que juegan diferentes roles:
Las autoridades públicas y los responsables políticos son miembros claves del ecosistema. Son quienes imponen las regulaciones e introducen incentivos para maximizar el valor
de las entregas de última milla a nivel de sistema.
Normalmente, los proveedores de transporte e infraestructuras toman diversas iniciativas. Como estos actores distribuyen bienes, implementar las palancas de entregas de última
milla tiene un impacto importante en su negocio.
Los minoristas juegan un papel crítico en la definición de la estrategia logística urbana. Los
minoristas pueden hacer más eficiente el transporte y aprovechar las posibilidades de comercialización de la marca. No obstante, el potencial de mejora es más grande para los minoristas pequeños e independientes que para los grandes minoristas, quienes ya acostumbran a optimizar sus cadenas de valor, incluyendo las entregas de última milla dentro de sus
ciudades.
Las asociaciones de la industria también forman parte del ecosistema de entregas de última milla ya que representan las industrias involucradas para los responsables políticos, distribuyen mejores prácticas entre sus miembros y promueven la adopción de estándares comunes.
Los OEMs y fabricantes de equipo son los proveedores del ecosistema, ya que ofrecen los
medios de transporte y nuevas tecnologías que reducen el impacto de las mercancías urbanas.
Integradores de sistemas de conectividad y ICT juegan un papel importante cuando soluciones tecnológicas están involucradas (ej. Planificación dinámica de rutas y consolidación
de cargas entre diferentes transportistas).
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Figura 4: Actores involucrados en la logística de la última milla
En este complejo escenario de stakeholders, se deben tomar diferentes consideraciones a la hora
de elegir las palancas apropiadas:
Es necesario tener conocimiento compartido respeto al impacto de diferentes palancas
en el contexto local. La activación de una palanca específica puede influenciar positivamente un objetivo a la vez que influenciar negativamente a otro. Por ejemplo, cambiar todas las
entregas a camiones eléctricos implica una reducción de ruido y emisiones, pero podría simultáneamente incrementar los niveles de congestión debido a la poca carga, al igual que
impactar negativamente a los costes logísticos totales.
Algunas soluciones requieren unas inversiones de Capex más elevadas o un aumento de
los costes totales de transporte debido a los transbordos adicionales o el uso de un modo
de transporte más costoso. Son económicamente viables si tienen suficiente volumen y generan ganancias operativas significantes . De manera alternativa, requieren subsidios o acceso privilegiado al centro urbano.
No todas las palancas son atractivas para todos los tipos de consumidores finales.
Por ejemplo, los CDUs son menos interesantes para los grandes minoristas ya que ellos
mismos optimizan las cargas en los camiones antes de enviarlas a las tiendas de las ciudades. Esta palanca es solo aplicable cuando hay suficiente presencia de minoristas (independientes) sin una cadena de valor optimizada.
Las intervenciones financieras de autoridades públicas y locales se necesitan como
soporte para la viabilidad económica de estrategias logísticas urbanas con impacto positivo
en los objetivos importantes para las autoridades locales (ej. Congestión urbana, contaminación del aire y reducción de ruido)
Teniendo estos elementos en cuenta, hay un número de factores claves de éxito para el desarrollo de una estrategia logística urbana:
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Definir una visión compartida y objetivos comunes aceptados por todos los stakeholders del ecosistema. Cada actor tiene su propio conjunto de objetivos. Generalmente, los
minoristas y los proveedores de transporte y de infraestructuras quieren salvaguardar los niveles de servicio para sus clientes, a la vez que mantener márgenes de beneficio saludables.
Los responsables políticos, por otro lado, quieren instalar políticas que sean beneficiales tanto para residentes de la ciudad como para las empresas. En el contexto de entregas de última milla, estos objetivos pueden ser conflictivos. Como tal, es de suma importancia alinearse
en los objetivos que el ecosistema necesita conseguir antes de seleccionar e implementar el
conjunto de palancas de entregas de última milla.
Realizar un análisis de costo-beneficio detallado de cada palanca individualmente y en
combinación con otras palancas para permitir la evaluación de las sinergias, así como el impacto del conflicto
Utilizar pilotos y experimentos en áreas restringidas para llegar a un acuerdo sobre la estrategia más adecuada antes de comenzar una implementación completa
Armonizar las regulaciones para implementarlas a nivel de ciudad o distrito. Es importante
luchar por la armonización de los reglamentos a través de ciudades y regiones, para garantizar que las empresas de logística a nivel nacional puedan reducir sus costes de cumplimiento tanto como sea posible
Principales reflexiones
La necesidad de repensar y racionalizar la logística urbana está siendo empujada a un primer plano
debido al auge del número de envíos (agravado por el crecimiento de las compras en línea). También ha sido influenciada por la creciente atención al impacto negativo ecológico y social de las entregas accionadas por combustible en centros urbanos ya saturados.
No obstante, la logística urbana es una cuestión difícil de gestionar, ya que engloba diferentes niveles de complejidad. Aparte de la heterogeneidad de las mercancías transportadas y los medios de
transporte, la logística urbana engloba diferentes stakeholders, cada uno de los cuales tendrá unos
diferentes intereses y objetivos. Normalmente, estos stakeholders carecen de entendimiento del status quo, de las prioridades y de las palancas de acción más apropiadas.
Existen diversas soluciones para mejorar la entrega de mercancía en zonas urbanas y cada una
aporta beneficios en diferentes casos o situaciones. El factor clave de éxito para el desarrollo de una
estrategia logística urbana apropiada recae en la realización de un análisis coste-beneficio detallado
para cada palanca de acción de manera individualizada y en combinación con otras palancas. De
esta manera se favorece la detección de sinergias y posibles conflictos entre palancas. La aplicabilidad y relevancia de cada conjunto de soluciones deben, al mismo tiempo ser evaluados dentro del
contexto local. Además, también se requiere la elaboración de un conjunto adecuado de regulaciones e incentivos a poner en marcha con el fin de fomentar el éxito del desarrollo. Finalmente, una
vez ya se ha llegado a un acuerdo sobre la estrategia de logística urbana más apropiada, se deben
hacer diversos test a partir de pruebas piloto en áreas restringidas antes de la implementación final.
Las autoridades locales y regionales deberían:
Determinar los objetivos macro de las entregas de última milla y alinearlos con la estrategia
de otros city verticals y (en caso que exista) la estrategia de ciudad inteligente.
Definir la estrategia de entregas de última milla más relevante de acuerdo con las características de la ciudad (medida, población, densidad urbana, acceso a la infraestructura,…) y colaborar con transportistas, minoristas y otros stakeholders para dirigir la identificación de la
combinación correcta de palancas para conseguir esta estrategia.
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Luchar por la armonización de las regulaciones a nivel local (ej. Horas de entrega, regulaciones medio ambientales) dentro y fuera de las ciudades y de regiones para facilitar la aplicación de las medidas dentro de los límites de la ciudad y la región
Desarrollar planes de sanciones e incentivos financieros y operativos para fomentar la adaptación de los procesos de entrega de última milla hacia soluciones más sostenibles (ej. comodalidad y centros de distribución urbanos)
Los transportistas y minoristas deberían:
Colaborar con las autoridades públicas y otros actores a nivel de región y país para desarrollar un marco y objetivos compartidos para entrega de última milla.
Evaluar los costes y beneficios de las soluciones de entrega de última milla existentes en
función de las características de la ciudad
Identificar potenciales socios operativos y establecer ecosistemas de múltiples stakeholders
con otros actores para identificar nuevos modelos de negocio e implementar soluciones innovadoras de entrega de última milla (a nivel de ciudad, regional o nacional).
Identificar los activos clave a adquirir en la ciudad o región para llevar a cabo, de manera eficiente, las soluciones.
Determinar las enmiendas potenciales del modelo operativo y de negocio en las que se puedan incorporar soluciones de entrega de última milla
Los proveedores de ICT, los integradores de sistemas y los proveedores de servicios de análisis de Big Data deberían:
Apoyar proactivamente la identificación de soluciones y estándares innovadores de entregas
de última milla aprovechando las nuevas tecnologías
Contribuir a que se tenga conciencia de los innovadores esquemas de logística urbana
Identificar las regiones y ciudades más atractivas para las soluciones ya existentes basándose en las características de la ciudad y los niveles de madurez de las entregas de última milla.
Participar en ecosistemas de múltiples stakeholders e implementar soluciones de entrega de
última milla innovadoras.
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