Efecto del EEES en el ámbito de los estudiantes

Anuncio
RUNAE
EFECTO DEL ESPACIO EUROPEO DE EDUCACIÓN SUPERIOR EN EL ÁMBITO DE LOS
ESTUDIANTES
Documento aprobado en Reunión Plenaria de 12 de mayo de 2005 (Universidad Complutense)
de la Red Universitaria Nacional de Asuntos Estudiantiles
Conferencia Rectores de Universidades Españolas
Este es el documento elaborado por el Grupo de Trabajo dedicado al efecto del Espacio
Europeo de Educación Superior (E.E.E.S.) en los estudiantes universitarios, en sus reuniones
celebradas los días 3 de diciembre de 2004 y 25 de febrero de 2005 en la Universidad de
Barcelona. A la vista de los próximos acontecimientos vinculados con la puesta en marcha del
E.E.E.S., parece razonable prestar una cierta atención a los efectos directos que el alumnado
universitario recibirá en el desarrollo de los planes de estudios en su versión E.E.E.S. Antes de
relacionar de forma más o menos exhaustiva dichos efectos, queremos hacer constar dos
circunstancias previas que nos parecen cruciales para el buen desarrollo del proyecto europeo:
1. Los resultados obtenidos a lo largo de las distintas pruebas piloto en diferentes
Universidades españolas y los datos que se conocen de la repercusión de las mismas en
el alumnado, indican claramente que la puesta en marcha del proceso de Convergencia
Europea se está dando sin la suficiente presencia del alumnado. Parece obvio, pero
queremos recordar que es importante oír las propuestas y posiciones del alumnado,
para no generar un cuerpo normativo académico que entre en colisión con uno de los
actores fundamentales del proceso educativo en la Universidad. No es éste el momento
de hacer propuestas a este tenor, pero sí queremos recordar la imperiosa necesidad de
no olvidar este aspecto clave para el buen desarrollo del proyecto.
2. Además, a pesar de que es un argumento repetido hasta la saciedad, no deja de ser
cierto que todos los objetivos fijados requieren una fuerte inversión pública que haga
posible llevar a cabo las reformas que se precisan para que el E.E.E.S. sea una
autentica revolución académica y no un simple maquillaje. Por tanto, una premisa
ineludible de todo lo que aquí expondremos consiste en la voluntad de las
administraciones y Universidades de dotar con recursos suficientes las etapas,
objetivos, infraestructuras y personal precisos para acometer la dimensión real del
proyecto que nos ocupa.
Una vez expuesto lo anterior, podemos ahora relacionar todos los posibles efectos que en el
ámbito de los estudiantes entendemos como relevantes. Es evidente que la intensidad de los
mismos no será idéntica ni entre las distintas Universidades del sistema ni entre las diferentes
titulaciones, pero sí que en mayor o menor medida deberemos prestar atención a todos ellos
para reducir al mínimo parte de los riesgos asociados a toda nueva estructura académica de
actividad universitaria.
Efectos de carácter general:
9
Cuando hemos intentado poner en común las distintas acciones e ideas en torno al E.E.E.S.,
hemos puesto de manifiesto la necesidad de unificar criterios y, lo que es más importante,
unificar el discurso que se está trasladando a los estudiantes, puesto que la falta de
concreción genera un nivel de ruido en el sistema que no ayuda al entendimiento del
alumnado del verdadero alcance de la reforma europea. De este modo, recomendaríamos
en primer lugar establecer algún criterio común para que las Universidades difundan los
conceptos fundamentales del E.E.E.S. y, en segundo, la propia participación del alumnado
-1-
RUNAE
en la configuración de ese material para hacerlo más cercano, en voluntad y discurso, al
criterio del alumnado. A este efecto, se propone la confección de una página web
dependiente de C.R.U.E. y concretamente en el espacio de R.U.N.A.E. que permita ofrecer
información sobre el E.E.E.S. que sea especialmente relevante para los estudiantes
universitarios y que no pueda obtener en su propia Universidad.
9
La misma idea se percibe cuando se trata de establecer discursos similares entre las
administraciones educativas (ya sean autonómicas o estatales) y los responsables
académicos de las Universidades. Olvidamos con cierta rapidez que nuestro alumnado se
relaciona con universitarios de otras Universidades con los que confrontan opiniones e
informaciones y que en caso de que sus percepciones no coincidan (algo por ahora
bastante habitual en los temas de E.E.E.S.), volvemos a generar más confusión e
incertidumbre en el sistema. Así pues, recomendamos igualmente que la coordinación
interuniversitaria a la que nos referíamos en el punto anterior se extienda al papel de las
administraciones que, obviamente, tienen responsabilidad en la vigilancia del resultado
global del proyecto europeo.
Efectos antes de iniciar los estudios universitarios:
Parece obvio que para una adecuada transición entre el Bachillerato y la Universidad deben
darse ciertos mecanismos de coordinación entre ambos. Este discurso ya tradicional es, en
general, poco respetado por ambas partes de modo que la distancia entre ambas etapas
educativas puede ahora hacerse, si cabe, aún mayor. De ahí que sea importante manifestar
algunos puntos que entendemos de crucial importancia:
9
Fomentar la coordinación entre el Bachillerato, los Ciclos Formativos de Grado Superior
(C.F.G.S.) y las titulaciones universitarias, especialmente bajo las nuevas directrices del
E.E.E.S. La administración tiene la responsabilidad de informar claramente al profesorado y
alumnado de bachillerato, puesto que los futuros cambios universitarios les afectaran de
forma inevitable. Por ello es preciso abordar, con la mayor rapidez posible, ese proceso de
información al profesorado de Secundaria y Bachillerato al que nos referíamos, puesto que
permitirá garantizar el inicio de un nuevo tipo de enseñanza desde las etapas
preuniversitarias que faciliten una correcta transición a las titulaciones universitarias.
9
Recomendamos la creación de comisiones mixtas y paritarias entre Bachillerato y
Universidad para el estudio del mecanismo de transición bajo el enfoque europeo, habida
cuenta de que las habilidades, los requisitos, las destrezas que el E.E.E.S. exigirá de los
futuros estudiantes universitarios no se pueden improvisar en las aulas universitarias y
deben estar integradas también en su formación previa.
9
El desarrollo pedagógico y curricular del profesorado de bachillerato y secundaria parece
más exhaustivo, en cuanto a metodología docente que la tradición académica universitaria,
y entendemos que aquéllos incluso están más cerca del espíritu europeo que la mayor parte
del profesorado universitario, de forma que convendría rescatar la experiencia
preuniversitaria para una mejor definición y adecuación de los aspectos docentes
universitarios.
9
Las bases sobre las que se siente el acceso a la Universidad deberán estar más cerca de
espíritu del E.E.E.S. que de los meros contenidos. RUNAE se ha manifestado claramente en
el caso del decreto de acceso pero parece importante que sea cual sea el formato final de
ese Real Decreto, las acciones que se diseñen para ese acceso estén de acuerdo con las
contingencias del E.E.E.S.
-2-
RUNAE
9
El acceso a la Universidad no debe quedar circunscrito a una prueba, y define un ámbito de
influencia que afecta a los estudiantes y en el que intervienen diversos agentes, todos los
cuales deben corresponsabilizarse en este proceso. Por ello, la implantación del E.E.E.S.
tendrá también repercusión en la docencia de secundaria, pues aunque el bachillerato sea
finalista en sí mismo y no prepare exclusivamente para acceder a la Universidad, la
existencia y las características de las pruebas de acceso marcan de forma muy significativa
la docencia en Bachillerato.
9
Igualmente, la aplicación del E.E.E.S. requerirá de parte del alumnado algunas habilidades
y actitudes que hasta el momento no han sido especialmente tenidas en cuenta. Para que
esas habilidades y competencias sean claramente identificadas por el profesorado de
Bachillerato y Secundaria, será importante analizarlas y estudiar el mecanismo académico
más adecuado para su fomento. De entre todas queremos destacar algunas que por su
importancia merecen ya ser tenidas en cuenta:
o
o
o
o
o
o
o
Empleo instrumental de una segunda o tercera lengua (según comunidades).
Capacidad de buscar y manejar información.
Usuario competente en T.I.C.
Capacidad de trabajar en equipo.
Habilidad en la gestión del tiempo y responsabilidad sobre el propio trabajo.
Suficiente nivel de conocimientos.
Suficiente comprensión y expresión oral así como adecuada expresión escrita.
9
Un capítulo aparte merece el acceso a los segundos ciclos, especialmente aquellos que
tengan un carácter profesionalizador y/o que estén financiados por recursos públicos.
Entendemos que en estos casos debe diseñarse un sistema de acceso a estas titulaciones
de segundo nivel que garantice la igualdad de condiciones en todo el estado, basado en los
requisitos académicos que se adopten, pero cuya admisión final resida en los mismos
criterios que regulan el acceso a los primeros ciclos; especialmente en aquellos casos en
que la demanda pueda ser superior a la oferta.
9
En la misma línea, deberá buscarse un sistema simple de acceso a los segundos ciclos para
aquellos estudiantes que provengan de licenciaturas, ingenierías o arquitecturas del sistema
actual, puesto que la obtención de una titulación de postgrado Bolonia conlleva una
sobredimensión de la titulación.
9
Como resultado de la concepción de un E.E.E.S. parece claro que deberíamos tender a un
sistema universitario que promueva un acceso simple (con las debidas garantías
académicas) a la vez que múltiples puntos de salida que permita a los/las estudiantes su
ingreso a distintos tipos de estudios universitarios a lo largo de toda su vida. Ello quiere
decir que deberemos considerar un sistema ordenado en el tiempo con múltiples entradas y
salidas que configuren adecuadamente ese concepto de formación a lo largo de la vida (life
long learning). Para ello deberíamos ser capaces de asumir algunos aspectos que faciliten
este mecanismo, como convertir el proceso de homologación de titulaciones o de
reconocimiento y convalidación parciales de estudios superiores anteriores en un proceso
mucho más rápido, simple y eficiente de lo que ahora es. Al margen de lo que ello
supondría para los procesos de convalidación en los programas de movilidad, abriría la
puerta a una opción de acceso para estudiantes procedentes también del ámbito de la
formación profesional superior, quienes, habiendo cursado determinados estudios, no
deberían repetir contenidos y conceptos ya superados en su currículo. El concepto de
“mochila” que se pretende incorporar en los estudios superiores (no limitados
-3-
RUNAE
exclusivamente a los universitarios) adquiriría así su más absoluta dimensión real y al
servicio de los intereses del alumnado.
Efectos durante los estudios:
En este apartado, en el que la responsabilidad de las Universidades es claramente mayor y con
más repercusiones, los efectos en el alumnado son puras estimaciones y análisis de pruebas
parciales que, como hemos señalado, deberán ajustarse en base al tipo de Universidad y
titulación. Sin embargo, parece importante destacar algunos aspectos:
9
Efectos en los espacios que ocupa el alumnado: Parece necesario repensar la utilidad de
algunos espacios clásicos para su adecuación a las nuevas necesidades. Salas pequeñas de
trabajo, espacios habilitados para el trabajo cooperativo, espacios para el trabajo virtual y
la consulta on-line de información, etc..., que deberán ser adecuados, en un futuro
próximo, para las necesidades del entorno de la enseñanza/aprendizaje que promueve el
E.E.E.S.
9
Recursos materiales no discriminatorios: Del mismo modo, parece importante recordar que
no todos los estudiantes poseen los mismos recursos y que en la lógica del E.E.E.S. algunas
actividades requerirán del empleo de tecnologías que, por ahora, no están al alcance de
todo el alumnado. Por ejemplo, las conexiones a Internet o la disponibilidad de equipos
informáticos o el conocimiento suficiente de idiomas, debe ser moneda de curso común
entre el alumnado. Deberemos adoptar las medidas oportunas para que ello no sea motivo
de discriminación entre los estudiantes por razón de recursos.
9
Efectos en la actividad académica: En este apartado son muchos los factores a considerar,
de modo que en este documento hemos efectuado una selección de los más relevantes. De
este modo:
o
o
o
Habrá que establecer claramente la dimensión real de las convocatorias de los
exámenes como mecanismo de evaluación. Debemos transmitir claramente la idea
a los estudiantes de que la convergencia europea va a obligar a un replanteamiento
y diversificación de las técnicas y sistemas de evaluación. Ya no se tratará de
evaluar exclusivamente el nivel de conocimientos, sino también la adquisición de
otras habilidades, destrezas y aptitudes por parte de los estudiantes. En este
contexto, el examen clásico de conocimientos perderá peso en la evaluación global
y, en general, la superación de dicho examen no será condición suficiente para
superar la asignatura. Esto obligará a replantear el sentido de los exámenes
extraordinarios, que aunque se mantengan, no deberán ser entendidos como
prueba única de superación de una asignatura. Es fundamental que los estudiantes
perciban la importancia de la evaluación continua a lo largo del curso con el fin de
que la reforma del sistema de evaluación no sea entendida como lesiva a los
derechos del alumnado.
Deberemos reconsiderar los formatos de la política de becas como mecanismos de
solución directa y socialmente justa de algunos de los desajustes que hemos
mencionado en virtud de los distintos recursos económicos del alumnado.
Se impone estudiar de forma exhaustiva los efectos que el E.E.E.S. puede suponer
para el alumnado de dedicación o parcial a sus estudios. Ciertamente el porcentaje
de alumnado trabajador es alto y será preciso dotar a esta tipología de estudiante
de algunos mecanismos correctores para que el trabajo académico sea compatible
con las obligaciones laborales. Estrategias como las vías lentas o la desaparición,
con condiciones, de las restricciones de matricula y la opción de la formación no
-4-
RUNAE
o
o
o
o
o
o
presencial deben ser la base académica de lo que podría venir a llamarse Contrato
Programa entre el o la estudiante y su Universidad; puesto que de la
responsabilidad de estos dependerá en buena medida el rendimiento académico
que consigamos colectivamente.
La presencia de estudiantes extranjeros o con distintas competencias lingüísticas
obligan a las Universidades a ser creativos y eficientes en la acogida y servicios
para estos estudiantes, y a la administración a ser sensible con este perfil de
estudiantes que, lógicamente, se incrementará en el primer y segundo nivel
académico del E.E.E.S.
Igualmente, será necesario fomentar mejor y con mucha más intensidad las
posibilidades de movilidad de los estudiantes de nuestras Universidades para que la
puesta en práctica de la movilidad no sea una excepción, como hasta ahora, y que
cualquier estudiante entienda claramente la importancia de este tipo de actividad
académica, tanto en su formación como para mejorar su capacidad de encontrar
trabajo en el futuro. El fomento de la cultura de la movilidad durante los estudios, y
aspectos relacionados, tales como la adquisición de segundas o terceras lenguas,
puede, sin duda, favorecer la movilidad laboral posterior. En este contexto, los
estudiantes deben concienciarse de la previsible proliferación de titulaciones
conjuntas entre Universidades nacionales y del resto de Europa
Deberemos estudiar con mucha atención el papel de las tutorías en los programas
de acción tutorial, puesto que el seguimiento de las actividades del alumnado será
crucial en la actividad académica del E.E.E.S. La formación del profesorado tutor
será pieza fundamental para la actualización de este tipo de actividades académicas
y, del mismo modo, la información de que, a este respecto, disponga el alumnado
será, igualmente, factor importante para el correcto funcionamiento de los
programas de orientación interna y de seguimiento académico. Deberemos
reflexionar a fondo sobre la definición y las atribuciones de la figura del tutor
(tutoría de clase-asignatura versus tutoría de seguimiento académico) en el nuevo
contexto, para valorar y decidir si el alumnado debe tener en un mismo profesor al
tutor con el que consulta dudas de una asignatura del que hace seguimiento de su
estancia global en la Universidad.
Debemos avanzar tanto a los estudiantes como al profesorado la relevancia de las
Guías Didácticas ECTS como documento que contiene toda la información de una
asignatura o materia de interés para el estudiante (objetivos, competencias a
adquirir, contenido, metodologías docentes y de evaluación, cronograma o plan de
trabajo, bibliografía general y específica, etc.). Se trata de un instrumento con una
información bastante más rica que los tradicionales programas.
Debemos resaltar la necesidad de controlar, sobre todo en la fase inicial de
implantación de las nuevas titulaciones de grado y postgrado, que el número de
horas reales de trabajo exigidas a los estudiantes para la superación de una
determinada materia guarda correspondencia con el número de créditos europeos
(ECTS) asignados a la misma en el respectivo plan o programa de estudios.
Téngase en cuenta que cada crédito equivale a 25-30 horas de trabajo del alumno.
En la actualidad existe una clara falta de experiencia por parte del profesorado con
respecto a la medición del trabajo personal del estudiante, siendo este
precisamente el sentido de las experiencias piloto que se están realizando (enseñar
y entrenar a los profesores en el nuevo sistema de créditos, que ya no mide sus
horas de clase, sino las horas de trabajo del estudiante, incluidas claro está las
horas de clases teóricas y prácticas, así como las dedicadas a la evaluación).
Finalmente, no queremos dejar de lado la obligación imperiosa de establecer
programas de formación dirigidos al profesorado para garantizar la base de
preparación necesaria para acometer las reformas con garantías. De hecho, las
-5-
RUNAE
o
o
lagunas en los docentes son siempre causa de formación de escaso nivel en el
alumnado. Es preciso empezar a pensar en el nuevo perfil del personal docente.
Un aspecto importante es el de la regularización de las tasas públicas en cualquier
de los grados que lo consideremos. A este respecto, a pesar de que es una
competencia de las Comunidades Autónomas, recomendamos una cierta
homogeneidad de criterios que no generen especiales agravios comparativos entre
los distintos decretos de regulación de tasas y ello con especial atención a los
masters y doctorados.
Del mismo modo que hemos hecho referencia en apartados anteriores, puede ser
interesante establecer algunos parámetros generales para el establecimiento de
cierto calendario académico común que facilite la movilidad de los estudiantes y
que promocione,. A su vez, las prácticas externas en períodos no lectivos.
Efectos a la finalización de los estudios.
En este apartado la evolución tan importante de las Universidades en los últimos años, parece
habernos preparado mejor para la nueva concepción de los planes de estudio en el E.E.E.S. Sin
embargo, el alumnado recibirá alguna información que afectará al sector productivo que vivirá
al finalizar sus estudios y parece importante prestar atención, con tiempo, a estos fenómenos.
Cabe destacar:
9
9
9
9
9
9
La aparición de nuevos perfiles profesionales e incluso de nuevas profesiones, ligadas a la
aparición de los dos niveles en el E.E.E.S. El efecto de ello no es ahora predecible, pero los
Colegios y Asociaciones Profesionales serán activos a este respecto. Nuestros estudiantes
actuales ya recibirán algunos de los efectos de esta nueva regulación laboral.
Importancia del efecto académico de las prácticas externas. Importancia y necesidad de
incorporarlas en los nuevos planes de estudios, así como del fomento del control académico
de estas actividades del alumnado. No pueden convertirse en subcontratación sumergida ni
en actividades académicamente irrelevantes. Deberá dignificarse y dotarse de contenido
académico la figura del tutor de prácticas.
Fomentar en el alumnado la concepción del trabajo en un entorno transnacional.
Generar recursos y habilidades para el trabajo cooperativo y para la rápida adaptación a
entornos cambiantes.
Buscar todavía un mayor acercamiento entre el sector productivo y las Universidades. Este
proceso debe acometerse para que ambos mundos se conozcan mejor y exista la necesaria
complicidad propia de la Universidad actual. Sin embargo, debe procederse con absoluto
respecto a la autonomía universitaria que la protege de las exigencias del corto plazo que
son propias de las demandas del mercado y lejanas, a veces, de los criterios académicos.
En este punto se ha mejorado mucho en los últimos años, pero sigue habiendo aspectos no
resueltos que no deben repetirse en el E.E.E.S. y que el alumnado debería, en el nuevo
entorno, percibir como ya resueltos.
Uso del Suplemento al Diploma como la acreditación universitaria por excelencia de las
acciones académicas del alumnado. Este documento deberá convertirse en la carta de
presentación reconocida y con prestigio por parte del sector productivo.
Finalmente, desearíamos hacer notar la extrema importancia de que exista algún nivel de
coordinación entre las diversas sectoriales que intervienen el tema del E.E.E.S. para articular y
compartir información relevante. Por ello, RUNAE propone para resolver esta cuestión que,
como mínimo, se establezca algún sistema de coordinación entre las distintas comisiones
ejecutivas de las sectoriales.
Barcelona, 16 de abril de 2005 (versión 4.0)
-6-
Descargar