Ho¡s])ilflt Híivmih Servííuo f'eíitrnl d<* Ratliojiijrl» Jefe: Dr. rmf. HKOTOlí QUKIttEI.HAO LOS LINFATICOS DEL RIÑON Dres. NESTOR .(OSE CALDAS, JULIO CESAR SALV1DEA, PABLO SUAREZ ANSORENA y HECTOR OUÉIRELHAC Los linfáticos del r i ñ o n nacen de dos redes i n t e r c o m u n i c a d a s , u n a superficial y o t r a p r o f u n d a , y o t r a i n d e p e n d i e n t e , la de la c á p s u l a adiposa. La red superficial, a s i e n t a en la z o n a cortical ( r e d de J a z i e n s k y ) , naciendo desde la c á p s u l a m i s m a . Está c o n s t i t u i d a p o r finos canalitos q u e se a n a s t o m o s a n en plexos q u e rodean e s t r e c h a m e n t e la e s t r u c t u r a celular. La red p r o f u n d a se inicia en capilares q u e r o d e a n los d i f e r e n t e s segmentos t u b u l a r e s de la zona m e d u l a r . Son p a r t i c u l a r m e n t e importantes a l r e d e d o r de los vasos y en el intersticio, Estas dos c o r r i e n t e s se u n e n en la base de las p i r á m i d e s de Malpigh p a r a d a r origen a los plexos p e r i p a p i l a r e s , q u e atraviesan las c o l u m n a s de Bertini p a r a d e s e m b o c a r en el seno del r i ñ o n . E n la p e r i f e r i a de los cálices, se desarrollan n u m e r o s a s anastomosis t a n t o linfáticas c o m o venosas, lo que t r a n s f o r m a el ángulo cali? c o p a p i l a r en zona de gran actividad circulatoria. Los colectores A su llegada al hilio, los colectores linfáticos siguen los r a m o s a r t e r i a l e s y e s p e c i a l m e n t e los venosos del pedículo, d i s p o n i é n d o s e en: G r u p o a n t e r i o r , m e d i o y p o s t e r i o r , c o n p e q u e ñ a s variantes en cada lado. Fig. N*.1 1. Liflf«'tieos del R¡-fio TI FIGURA i El g r u p o a n t e r i o r d r e n a Ja valva a n t e r i o r del riñon, c o n s t a de tres o c u a t r o colectores, colocados p o r d e l a n t e de la vena prepiélica prim e r o y de la renal después, c r u z a n por delante y p o r d e t r á s de la vena cava inferior y d e s e m b o c a n en los ganglios c o r r e s p o n d i e n t e s . El g r u p o m e d i o c u e n t a c o n un solo colector a la izquierda y con dos a la derecha. LOS LINFATICOS I>EL RIÑON 415 El g r u p o posterior, con tres a la izquierda y c u a t r o a la derecha, sigue la cara posterior de la arteria retropiéiica y de la renal después. Los colectores derechos t e r m i n a n en los ganglios retrócavos, aplicados contra el pilar derecho del d i a f r a g m a , y los izquierdos, en los lateroaórticos homónimos. Ambos poseen a n a s t o m o s i s t r a n s d i a f r a g m á t i c a s con ganglios mediastínicos inferiores. Los ganglios Todos los colorectores linfáticos terminan en un sector de la cadena lumboaórtica, c o m p r e n d i d o e n t r e el origen de las a r t e r i a s renales y el de la mesentérica inferior. Pueden diferenciarse cinco g r u p o s ganglionares: Lacteroaórtico derecho, Lateroaórtico izquierdo, Retrócavo, Laterócavo (a la a l t u r a de la vena renal) y Reno-suprarrenal izquierdo. Se han descripto ganglios intercalares; p e r o nunca biliares. Estos g r u p o s reciben colectores de la cápsula s u p r a r r e n a l , hígado colon y testículo. 416 IHIÉÉÍ. N. .f. CALDAS Y COLABORADORKg No existiendo n o r m a l m e n t e circulación a contracorriente, no es posible opacificar este g r u p o linfático gangtionar, por inyección desde el dorso del pie, Fig. N" 3. Cuando se p r o d u c e un bloqueo del sistema canalicular, p o r encima del lugar de e m b o c a d u r a de ¡os colectores renales, la hipertensión resultante, ocasiona dilatación de los m i s m o s e incompetencia de su sistema valvular. Fig. Nv 4. En estas condiciones, puede presentarse r e f l u j o linfático desde las cadenas luinboaórtieas, siendo factible a h o r a sí, su opacificación. Fisto patología La circulación linfática de los m i e m b r o s inferiores y de las visceras abdominales, se resuelve en dos colectores que, junto con la gran vena linfática entérica, constituye o no la Cisterna de Pequet. En el 35 % de los casos en que la confluencia es b a j a , se origina el Conducto Torácico en la ya mencionada cister na, a la a l t u r a de L2. Habitual m e n t e la convergencia es m á s alta, no h a b i e n d o lugar a la formación de cisterna. El C. T. simple continuidad del colector izquierdo mas la confluencia del derecho, recibe los colectores intercostales, que, escalonándose en su recorrido endotorácico, constituyen la potencial vía de derivación en casos de oclusión de la principal. FIGURA 3 Cuando un proceso que ocupa lugar, se desarrolla en el mediastino, puede suceder que el C. T. se vea ocluido, va sea por compresión o p o r infiltración. No obstante, esto no es suficiente para que se desarrollen colecciones quilosas. Las a n a s t o m o s i s linfovenosas son suficientes p a r a derivar la linfa. Pero las posibilidades de h o m e o s t a s i s se ven s u p e r a d a s , c u a n d o el bloqueo es masivo y sucesivamente se ven afectadas la vía principal de derivación y luego las supletorias. E n esle m o m e n t o se producen fenómenos de permeación: Quilotórax, Quiloperitoneo, Quiluria y en algunos casos, d e r r a m e s quilosos en las extremidades. Fig. N? 2. LOS LINFATICOS DEL R L t O ^ Descripción de las 417 diapositivas Esta breve reseña nos permite interpretar fisíopatológicamente este estudio linlográfieo, en el que aparecen nítidamente opacificados los linfáticos posteriores de un joven paciente, portador de quiíüria y quilotórax. Fig. N" 3. FIGURA 4 Las dos primeras placas, muestran la opacificación de los linfáticos del pedículo renal y de los intercostales de los tres últimos espacios documentando de esta manera, su intercomunicación a través ele los ganglios del grupo retróeavo, con los colectores del grupo posterior. El siguiente, muestra la recanalizacíón del C. T. a través de los colectores intercostales izquierdos. En los restantes, la colocacion de un catéter en la arteria y vena renales, respectivamente, 1 acilita la identificación de estos elementos, demostrando simultáneamente una variante anatómica, y la coincidencia de los colectores linfáticos con el recorrido de la vena renal; facilita así mismo Ja tarea del cirujano, al indicarle la zona a explorar. La última placa, pone de manifiesto la estasis linfática, a través de las linfangiectasias en el territorio de los colectores renales e intercostales patológicos, en placa de más de 48 horas. Fig. N- 4.