APLICACIÓN DE LA AUTOPSIA PSICOLOGICA EN EL PROCESO PENAL COLOMBIANO VIVIANA ELIZABETH GÓMEZ BARBOSA MARIA CLAUDIA SAENZ RAMOS PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS DEPARTAMENTO DE DERECHO PENAL SANTAFE DE BOGOTA, D.C. 2000 APLICACIÓN DE LA AUTOPSIA PSICOLOGICA EN EL PROCESO PENAL COLOMBIANO MARIA CLAUDIA SAENZ RAMOS VIVIANA E. GÓMEZ BARBOSA Tesis para optar al titulo de Abogado Director LEONARDO RODRIGUEZ CELY Psicólogo PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS DEPARTAMENTO DE DERECHO PENAL SANTAFE DE BOGOTA, D.C. 2000 Este trabajo lo dedico a mi familia, especialmente a mis padres, Armando y Amparo, gracias por el soporte de amor; dedicación incondicional durante toda mi vida; sin el cual este sueño no sería realidad. De igual forma a Alfonso Eduardo, gracias por tu comprensión apoyo y nuestro amor. Y a Jesucristo y María guías de mi vida. María Claudia A Bertha y Jaime, mis padres, por su infinita confianza y apoyo en todos y cada uno de los pasos que he dado en mi vida. A Carol y Camilo, mis hermanos, por acompañarme en este camino con su alegría y su paciencia. A Oscar Eduardo, por estar ahí cuando lo necesite. A Dios, a esa fuerza espiritual que me brindó, por no dejarme desfallecer en los momentos en que pense rendirme. A todos GRACIAS, porque sin su respaldo este trabajo no hubiera sido lo que puede llegar a ser, Este trabajo es para ustedes. Viviana. AGRADECIMIENTOS Expresamos nuestros agradecimientos al Doctor Julio Andrés Sampedro quien nos dio a conocer la realidad de las cárceles colombianas a través del Voluntariado Penitenciario. De igual forma a los doctores Bernardo Gaitan Mahecha y Augusto Ibañez, Maestros, de quienes aprendimos el primer amor al Derecho Penal a través de sus clases y enseñanzas. Al doctor Andrés Ramírez sin el cual no podríamos llevar una excelente labor social en el Area de Derecho Penal en el Consultorio Jurídico de nuestra Universidad. Y al doctor Leonardo Rodríguez, por haber sido nuestro educador en áreas desconocidas como la Psicología, por su dedicación y entrega a la investigación interdisciplinaria. Gracias por estar siempre presto a ayudarnos sin lo cual nuestro trabajo no hubiera sido posible, por la confianza y amistad que nació y que perdurará siempre. CONTENIDO pág. 0. INTRODUCCIÓN 4 0.1 Problema 7 0.2 Objetivos 12 1. RELACIONES ENTRE EL DERECHO Y LA CIENCIA DE LA PSICOLOGIA:PSICOLOGIA JURIDICA 14 1.1 HISTORIA 14 1.2 DEFINICIÓN 23 1.3 CAMPOS DE APLICACIÓN 25 2. ASPECTOS LEGALES DEL HOMICIDIO Y DEL SUICIDIO 34 2.1 EL HOMICIDIO 34 2.1.1. Evolución normativa y concepto del homicidio 34 2.1.2. Definición legal en diferentes legislaciones 36 2.1.3. Antecedentes en Colombia 37 2.1.4. Clasificación del tipo 38 2.1.5. Elementos del tipo 39 1 2.1.5.1 Sujetos 39 2.1.5.2. Objeto: bien jurídico protegido 42 2.1.5.3. Elemento subjetivo: el dolo 43 2.1.6. Causalidad y medios de comisión 47 2.2 EL SUICIDIO 51 2.2.1 Historia 51 2.2.2 Fundamento jurídico 62 2.2.2.1 Elementos 65 2.2.2.1.1 Sujeto Activo 65 2.2.2.1.2 Sujeto Pasivo 66 2.2.2.1.3 Objeto Jurídico 66 2.2.2.1.4 Conducta 67 2.2.3 Aspectos psicológicos del suicidio 69 3. LA AUTOPSIA PSICOLOGICA 75 3.1 HISTORIA 75 3.2 DEFINICIÓN 76 3.3 ESTADO ACTUAL DE LA AUTOPSIA PSICOLÓGICA EN COLOMBIA 82 3.4 EXPERIENCIAS DEL PAP EN CUBA 92 4. LA AUTOPSIA PSICOLÓGICA COMO MEDIO DE PRUEBA 99 4.1 LA PRUEBA EN EL PROCESO PENAL COLOMBIANO 99 4.1.1 Concepto de prueba 100 4.1.2. Principios de la prueba en materia penal 102 4.1.3. El Método Reconstructivo 108 4.2 EL DICTAMEN PERICIAL 111 4.3 EL INDICIO 123 4.4 AUTOPSIA PSICOLÓGICA:¿DICTAMEN PERICIAL O INDICIO? 129 CONCLUSIONES BIBLIOGRAFIA 133 0. INTRODUCCION Considerando la dificultad probatoria para procesos por delitos contra la vida, se hace necesario por parte de los estudiosos del Derecho Penal unir esfuerzos intelectuales para que procedimientos como la autopsia psicológica, tengan acogida en los estrados judiciales reconociendo que se puede constituir como un medio de prueba importante para agilizar el funcionamiento de la administración de justicia; esta investigación se hace más urgente en nuestro país donde “no existe ningún documento escrito que defina el procedimiento de la autopsia psicológica razón por la cual este tema es casi desconocido para la mayoría de profesionales en el campo forense“1. 1 NUÑEZ FLETCHER, Laura Johanna et al. Propuesta para el dictamen forense en casos de muerte dudosa utilizando el procedimiento denominado Autopsia Psicológica. Bogotá: Facultad de Psicología. Pontificia Universidad Javeriana. Tesis de grado. 1999 p. 152. 4 Como énfasis de lo anterior, en Colombia, sólo encontramos sobre este tema, los estudios realizados por estudiantes de la Universidad Católica en la unidad segunda de vida, Fiscalía General de la Nación en 1994 y más recientemente la investigación realizada por estudiantes de psicología de la Pontificia Universidad Javeriana. Sin embargo, este procedimiento ha sido aplicado en el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses para hacer un estudio sobre los rasgos de personalidad suicida desde la siquiatría2. Es importante analizar la legislación de nuestro país, ya que esta dará la pauta y los lineamientos para que se pueda aplicar la psicología en el proceso penal colombiano, lo que constituye el tema central de esta tesis. 2 NUÑEZ op.cit. p. 221 5 Debe aclararse que con este trabajo no se pretende considerar el procedimiento de autopsia psicológica como la prueba reina en los procesos penales de muertes dudosas, por el contrario, el juez en su proceso intelectual está obligado a valorar todas las pruebas en conjunto; lo que se pretende, es abrir interrogantes en los estudiosos del tema, y verlo como una nueva alternativa para llegar a la justicia en el caso de muertes dudosas. 6 0.1 PROBLEMA Históricamente, en la práctica judicial colombiana, se refleja la ausencia de herramientas provenientes de las diferentes ciencias sociales, esto ha impedido una solución interdisciplinaria que permita no sólo conocer las causas, los medios, y efectos que originan el hecho punible, si no que además ha limitado el avance en investigaciones conjuntas para el beneficio del hombre y la sociedad. Sin duda la justificación de este trabajo, y la pregunta que quiere resolver es ¿cómo podría contribuir la Autopsia Psicológica al Derecho? si bien es cierto, la ciencia de la Psicología tiene los estudios ya mencionados, en el Derecho el tema es aún muy incipiente, razón por la cual no se permite que el Derecho Penal colombiano esté acorde con los avances del Derecho Penal internacional y en los cuales se ve una clara aplicación de 7 la autopsia psicológica en procesos judiciales en países como España, Estados Unidos, Argentina y México, Cuba. Una de las consecuencias de lo anterior, se da en los casos de Muertes Dudosas entendidas como aquellas en las que se desconoce la causa exacta de la muerte y además que ésta relacionada con la intervención de circunstancias externas al occiso. De acuerdo con el doctor Jorge Oswaldo González, Psicólogo Epidemiologo del Centro de Referencia Nacional sobre Violencia del Instituto Nacional de Medicina Legal, con quien tuvimos la oportunidad de entrevistarnos; la regla general es que el instrumento utilizado en Colombia para las muertes dudosas se limita a la Autopsia Medico Legal, y en algunos casos aislados se utiliza la autopsia psicológica, dejándose de lado la posibilidad de llegar a conocer por parte del juez la verdad de los hechos alrededor de una muerte. 8 Para el caso especifico de Colombia, el Instituto Nacional de Medicina Legal ha visto un incremento de estas muertes, así lo certifica la Base de datos de Patología Forense del INML y CF; datos existentes hasta Enero de 2000, los cuales nos interrogan aún más del procedimiento que en nuestro país se lleva a cabo para resolverlas. (Ver anexo 1) Existe entonces un vacío de conocimiento, una contradicción, por que a pesar de buscar la justicia en los casos particulares, no se utilizan en la práctica los avances de otras ciencias que pueden aportar nuevas herramientas para llegar a la verdad material en el proceso penal. Como un intento para llenar este vacío, es importante estudiar ¿qué tipo de prueba es la autopsia psicológica, y su viabilidad en Colombia ya que el resultado de esta investigación; dará la pauta y los lineamientos para que se pueda aplicar. 9 Otro problema que encontramos, es el convencimiento en el juez, que se desarrolla en forma superficial, haciéndose necesario el aporte de otras arcas del conocimiento, que permitan identificar a los actores del hecho punible, sin embargo, el juez solamente se ve obligado a conocer la ley que debe aplicar, razón por la cual se ha relegado la colaboración que pudieran brindar otras profesiones y/o disciplinas que estudian el comportamiento del hombre, como la medicina forense, criminología, criminalistas, psicólogos, psiquiatras, trabajadores sociales y antropólogos, esenciales para la investigación del delito. Tal como lo afirma el Doctor Gustavo Rodríguez “... El derecho no puede andar divorciado de los hechos, del proceso científico y técnico, los cuales dan diariamente nuevas formas de conocimiento que pueden escapar de la consideración legislativa dado el dinamismo de la ciencia y de la técnica. Hay, pues, disponibilidad sí los jueces no las partes pueden 10 introducir nuevos medios de prueba no previstos en la norma positiva...”3. 3 RODRIGUEZ, Gustavo. y Carolina. De las pruebas penales. Tomo II. De la prueba en particular. Bogotá: Editorial Temis, , 1992 11 0.2 OBJETIVOS Como lo planteamos desde la presentación de este proyecto de Tesis a la Facultad de Derecho, desarrollaremos los siguientes objetivos: 1. Aplicación de la psicología Jurídica, específicamente de la Autopsia Psicológica, en el campo del Derecho Procesal Penal colombiano, como herramienta fundamental para la Investigación y resolución en los casos de muerte dudosa: Homicidio y Suicidio. 2. Concientización de los estudiantes, profesionales e investigadores de las distintas ciencias sociales, de la importancia de integrar las ciencias, para el mejor desarrollo de cada una de ellas, del hombre y la sociedad. 12 3. Incentivar la integración científica, la investigación interdisiciplinaria y los distintos programas de todas o algunas de las ciencias sociales en la Pontificia Universidad Javeriana. 13 1. RELACIONES ENTRE EL DERECHO Y LA CIENCIA DE LA PSICOLOGIA: PSICOLOGIA JURIDICA 1.1. HISTORIA Para el mejor entendimiento de la Autopsia Psicológica, se hace obligatorio, definir la interrelación activa entre el Derecho y la Psicología, buscando el origen de la Psicología Jurídica como una de las manifestaciones actuales de dicha interrelación. “ Como señala Anne Anastasi (citada por Luis Muñoz Sabaté, Ramón Bayes y Frederic Munne, 1980), fue el derecho quien protagonizó un papel importante en el avance hacia uno de los primeros campos de la psicología aplicada. Entre los pioneros se encuentra William Stern que 14 realizó estudios y publicaciones sobre este tema, al igual que Alfred Binet, conocido por sus tests de inteligencia”.4 Así se denotan los primeros visos de la Psicología Jurídica, a través de la historia, específicamente en España a partir del Código Penal de 1822 se estudia el delincuente y la imputabilidad, y en el siglo XIX la corriente de la Frenología (proclamación de diagnóstico bien fundados de las personas, en sus conductas, proponiendo un modelo determinista de la mente, llegando a caer incluso en la craneoscopia para determinar la conducta) toma auge con la figura del Catalán Mariano Cubí quien indicaba: "En virtud de este descubrimiento (de la frenología), se puede formar juicios a priori de mas o menos aproximada exactitud respecto al carácter, talento e inclinaciones de la mayor parte de los individuos que por primera vez se presentan ante nosotros"5 Transcurren las corrientes doctrinales entre ellas la obra de Pedro Mata, este importante médico, pensador y novelista en quien “son visibles en su obra huellas de la 4 5 NUÑEZ op.cit. p.34-35 CLEMENTE, Miguel. Fundamentos de Psicología Jurídica. Madrid: Editorial Pirámide, S.A. 1995, p 59 15 influencia de autores como Luys, Griesinger, Flourens, o Gall, entre otros”6 determina los criterios de salud mental y una razón no perturbada, llegando a concluir que la razón no es una facultad, sino un estado, y por ende, pueden darse estados paranormales e incluso enfermedades, pero conservando facultades inafectadas. Así, se podría transcurrir por otras doctrinas como el pensamiento Krausista (movimiento inspirado en K.C Krause) y conformado entre otros por Francisco Giner de los Ríos, Adolfo Posada, Aniceto Sela; para quienes “... el Derecho aparece como el sistema de actos y prestaciones concretas con que ha de contribuir cada uno para el cumplimiento del destino de todos en el mundo (Díaz, 1973,73)”.7 Otra corriente española importante, la del Correccionalismo, elaborada por el profesor Carl David August Roeder (1806-1879) e interpretada por Miguel Clemente, en los siguientes términos: “El delincuente, incapaz para llevar por sí una vida libre, ha de ser tutelado por la autoridad, que 6 7 Ibid., p. 71 Ibid.,p.76 16 debe procurar de modo individualizado su “regreso al orden jurídico” (Fernández, 1976, 27). La pena tiene pues, un sentido eminentemente ético; debe producir la reforma personal. Conlleva por otra parte, una gran atención a al figura del delincuente como persona, lo que obliga a entenderlo desde su mundo subjetivo”8 . Con el Positivismo, cuyo padre fue Cesare Lombroso (1836-1909) médico de las cárceles de Turín, quien al practicar la autopsia de un célebre bandido calabrés llamado Vilella, “encuentra en su cráneo lo que él denominó foseta capital media, y que es rarísimo encontrar en el hombre, siendo en cambio frecuente en los animales inferiores como los peces”9. Según este descubrimiento Lombroso formula su teoría del hombre delincuente, y cuyo aspecto fundamental 8 consiste en afirmar Ibid.,p.76 JIMENEZ DE ASUA. La ley y el delito. Caracas: Editorial Andrés Bello. P.54. Citado por GAITAN MAHECHA, Bernardo. Derecho Penal General. Bogotá: Facultad de Ciencias Jurídicas. PUJ. 1995. P. 52 9 17 que todo criminal es un ser atávico que reproduce los estigmas del hombre primitivo y en quien hay una predisposición innata al delito”10 . Vemos entonces con esta escuela, como la antropología y la psiquiatría, “... pasaron a ocupar la primera línea en la consideración de los estudiosos y de los técnicos. También otras ciencias generales, como la psicología, la estadística, la economía, la sociología, ofrecieron datos y razones importantes que determinaron en los estudios criminológicos una orientación enteramente nueva” 11 . Estas escuelas como lo ratifica el autor, basado en Fausto Acosta, buscan defender el cuerpo social contra la delincuencia, anteponiendo los intereses sociales a los del individuo. La Antropología Criminal, con Rafael Salillas buscó las causas del delito, creando una escuela que formara personas especializadas en este estudio. 10 11 Ibid.p.52. REYES ECHANDÍA, Alfonso. Derecho Penal. Bogotá: Editorial Temis. 1996 p. 16-17 18 Los Institucionalistas con Francisco Santamaría desarrolla la psicología del Testimonio de la cual indicaba “ si en lugar de tomar el testimonio en conjunto, como un bloque, se analiza y descompone en diversas clases de datos, se ve que cada uno de estos datos alcanza una veracidad diferente y, por tanto, merece un grado distinto de credibilidad”12. Con la llegada de Sigmund Freud y la psicología profunda, se despierta un especial interés en los juristas entre los que Miguel Clemente estima como más importantes: Luis Jiménez de Asúa, Cesar Camargo, Rafael Vásquez Zamora y Manuel Hidalgo. De Jiménez de Asúa (1889-1970) Clemente resalta “ Esta concepción implica una necesaria aplicación de la doctrina psicológica para lograr la comprensión del delito y del criminal”13 . 12 13 CLEMENTE, Op.cit. p. 82 CLEMENTE Ibid. P.85 19 De este autor se enfatiza la necesidad urgente de abolir las penas, por un tratamiento resocializador, junto con medidas educativas y protectoras. Consideramos que ésta posición fue asumida por los legisladores colombianos de 1981 al colocar como uno de los fines de la pena la resocialización, de acuerdo con el artículo 12 ” La pena tiene función retributiva, protectora y resocializadora. Las medidas de seguridad persiguen fines de curación, tutela y rehabilitación.” Cesar Camargo considera que no es necesario ni audiencias, fiscales ni juicio oral, “el juez haría su diagnostico, no en resultados y considerandos, ni ajustándose a ninguna formula consagrada, sino consignando: 1. El hecho delictivo con todas sus circunstancias y detalles; 2. Los móviles de la acción (complejos, medio ambiente, etc); 3. La psicología o psicopatología del delincuente, y 4. El tratamiento a que 20 haya de sometérsele. Inútil es decir que tampoco nos hacen falta Códigos Penales”14. Otra obra importante la encontramos en Emilio Mira quien con su “Manual de psicología Jurídica” sitúa la psicología Jurídica como un campo ubicado entre la psicología y la psiquiatría, y considera viable aplicarla en los siguientes campos: psicología del testimonio, confesión con pruebas, motivación psicológica del delito, entre otros. Todo este recorrido histórico hasta llegar al enfoque actual en España, en la que la sociedad que emergió de la guerra civil española no fue un campo muy propicio para que la psicología Jurídica pudiera desarrollarse en él. Como lo indica Clemente en su obra; sólo hasta los años 70 la psicología Jurídica vuelve a resurgir de sus cenizas, en el primer periodo antes estudiado, se parte del Derecho y la Psiquiatría a la psicología; “en nuestros días, en cambio, el desarrollo de una psicología Jurídica, desde la psicología, ha hecho que cambie nuestro punto de vista”15. 14 15 CLEMENTE Ibid. P.87 CLEMENTE ibid. P.94 21 En Colombia y a pesar de que el Instituto Nacional de Medicina Legal fue creado en 1914, la aplicación de la psicología en el Derecho Penal es reciente, sólo hasta 1974 con la vinculación de la doctora Victoria Eugenia Villegas al Instituto Nacional de Medicina Legal, se hace real aplicación de la psicología en los campos de “atención del menor, secuelas mentales y perturbación psíquica, como consecuencia de violación, y delitos sexuales, homicidios.”16. En el campo académico colombiano se destacan entre otros los trabajos de Roberto Solórzano Niño, médico, psiquiatra y abogado quien permite tratar cada tema desde el punto de vista jurídico en su obra “Medicina Legal, criminalística y toxicología para abogados”, y la obra ”Principios de Psiquiatría Forense” de Lisandro Durán e Idalid Carreño, médicos cirujanos con amplia experiencia psiquiatra forense; de igual forma el reciente postgrado de psicología Jurídica de la Universidad Santo Tomas 16 NUÑEZ. Op.cit.p.59 22 de Aquino en su Facultad de Psicología y en la Universidad Javeriana el trabajo de grado de la Facultad de Psicología, citado con anterioridad. Como vemos, hoy en día la relación entre el Derecho y la psicología se intensifica, y aunque este campo aún es muy nuevo, se ve una clara necesidad de interrelacionar estas ciencias sociales, pues ambas están orientadas a la conducta humana y el desarrollo de esta en la sociedad; además consideramos apremiante que nuestra legislación Penal este a la par de otras como las de Estados Unidos, Inglaterra, Alemania, España, Argentina, entre otros, en donde “la psicología forense cuenta con un alto status teórico y metodológico con diversos campos de aplicación; al mismo tiempo que se exhibe en dichos países un acelerado ritmo de investigación interdisciplinaria, divulgación científica e intercambio de experiencias a nivel mundial”17. 17 Ibid. p.21 23 1.2 DEFINICION DE PSICOLOGÍA JURÍDICA El comportamiento humano debe ser visto desde dos perspectivas, como lo indica Miguel Clemente en su obra: Consenso sobre la existencia de los fenómenos: las sociedades, establecen parámetros de lo que es bueno y malo, y es indudable que estos van siendo reflejados en los códigos y normas de cada una de ellas. Existencia a partir de la Ley: hoy “la realidad debe ser entendida en cuanto que la ley la reconoce”18, así si se compra un bien inmueble, esta venta sólo tendrá validez cuando es registrada como tal en el respectivo registro, de igual forma sucede cuando una persona nace o muere. Partiendo de lo anterior la definición de Clemente, que consideramos más acorde con nuestro estudio es la siguiente: 24 "Es el estudio del comportamiento de las personas y de los grupos en cuanto tienen la necesidad de desenvolverse dentro de ambientes regulados jurídicamente, así como de la evolución de dichas regulaciones o leyes en cuanto que los grupos sociales se desenvuelven en ellos “19. 1.3 CAMPOS DE APLICACIÓN DE LA PSICOLOGÍA JURÍDICA Munne (1987, citado por Clemente) señala que “la psicología Jurídica ha enfatizado demasiado los aspectos penales, dejando de lado los civiles, administrativos, políticos y fiscales”. De acuerdo con lo anterior, Mira y López (1981, citado por Clemente, 1995), afirma: “La psicología Jurídica es la psicología aplicada al mejor ejercicio del derecho. Por desgracia el estado actual de la ciencia Psicológica no 19 Ibid. P.25. 25 permite utilizar sus conocimientos en todos los aspectos del derecho y ello hace que la psicología Jurídica se encuentre hoy limitada a determinados capítulos y problemas legales” Es importante considerar entonces que la aplicación de la psicología Jurídica, no se circunscribe solo al campo de lo Penal, y aunque este estudio se realiza sobre la aplicación de la Autopsia Psicológica como medio para esclarecer las muertes dudosas como el Homicidio y el Suicidio, no por esto se deja de lado la importancia del genero Psicología Jurídica en todo el campo del Derecho, como ejemplo de esto tenemos y de acuerdo con lo que lo indica Munne (1987, citado por Clemente Díaz, 1995) los campos de conexión entre estas dos ciencias pueden ser, entre otras: Orientación en la elaboración de unas leyes más adecuadas a la persona y a los grupos humanos y una organización más idónea del sistema administrativo de la justicia. 26 De igual forma para Muñoz Sabaté (1975, citado por Clemente, 1995) la psicología Jurídica presenta tres visiones: Psicología del Derecho: Es necesaria la psicología en el campo del Derecho para que este pueda funcionar adecuadamente puesto que “está lleno de componentes psicológicos.”20. Psicología en el Derecho: “En este caso se trata de una “psicología normativa”, una labor de estudio de las normas jurídicas como estímulos verbales que mueven la realización de las conductas.”21 Psicología para el Derecho: “La psicología como ciencia auxiliar del derecho, para establecer la verdad de los hechos, la imputabilidad, la interpretación de las conductas, etc.” 22 . Además de las anteriores, Clemente agrega otras categorías, a saber: 20 21 Ibid. p.26 Ibid. P.26 27 Psicología Policial: Integrada como lo indica el autor por los cuerpos de seguridad del Estado: en Colombia estarían allí la policía, él ejercito, la fiscalía; él DAS, entre otros. Psicología Judicial: “Incluye las actuaciones de los psicólogos dentro de las posibles áreas del Derecho.” Clemente especifica en los casos de familia, menores y derecho laboral. Psicología Penitenciaria: “Comprende la actuación del psicólogo dentro de las instituciones penitenciarias, se trata de un trabajo más organizacional y de trabajo social. En España esta es el área más desarrollada.” Psicología jurídica del menor: Da cuenta de un trabajo dirigido al menor y a las instituciones encargadas de reinsertarlos socialmente, cuando han sido delincuentes. 22 Ibid p.26 28 Psicología preventiva del delito: Tiene por objeto prevenir la aparición del delito y los problemas con la justicia. Victimología: Atención a las víctimas del delito como, al detenido, a la mujer violada, o a la preparación de programas de restitución. Se definió en el Primer Simposio Internacional celebrado en Jerusalén (1973) como: “el estudio científico de la víctima de un delito, de su personalidad, de sus características biológicas, morales, sociales, y culturales, de sus relaciones con el delincuente, y del papel que ha desempeñado en la génesis del delito”23 Sobre el tema de Victimologia la doctora Tania Patricia Ibañez, en su tesis sobre “La Autopsia Psicológica como Técnica Reveladora del Grado de Participación de Víctimas de Homicidio”; realizado en San Sebastián, 29 da un nuevo enfoque a la aplicación del PAP indicando que “el estudio retrospectivo a nivel psicológico de víctimas de homicidio, permitirá aclarar el grado de responsabilidad de ésta y del autor, y por ende, el desarrollo de un proceso penal más objetivo y justo…”24 En el Homicidio, la ciencia de la Psicología, ha venido desarrollando las distintas clases de Víctimas de Homicidio, así Von Hentig estable que las víctimas perfectas de homicidio pueden ser: “El depresivo: falto de prudencia, discreción, su instinto de conservación esta debilitado, inconscientemente desea ser aniquilado. El Codicioso: la expectativa de ganancias fáciles actúa en el como una droga, que remueve todas las inhibiciones normales. IBAÑEZ GOMEZ, Tania Patricia. La Autopsia Psicológica como técnica reveladora del grado de participación de víctimas de homicidio en el delito. Instituto Vasco de Criminología, San Sebastián, 2000, P. 9 24 Ibid. P. 1. 23 30 El lascivo: principalmente mujeres muy jóvenes o en el climaterio, cuya debilidad las hace exponerse. El Atormentador: que presiona y tortura a sus hijos y mujer, amante, empleados, hasta que su tiranía se vuelve insufrible y viene la liberación”25 La Doctora Ibañez por su parte, indica que pueden ser víctimas, entre otros: En el Homicidio Pasional: la víctima donde ella misma ha participado y provocado inconscientemente la muerte. En el Tiranicidio o el Homicidio Justiciero, en el cual la víctima ha realizado actividades contra la sociedad y sus valores, buscando su muerte como reflejo de esto. 25 Ibid. P 25 31 El atormentador – atormentado: donde no se distingue quien es la víctima y el victimario y donde las personas son movidas por una actitud de reivindicación propia; En la Eutanasia: muerte de una persona por otra, con el objeto de evitarle intensos sufrimientos, es el único caso donde la victimización es a favor de la víctima; En el Homicidio por Envenenamiento: en donde suele haber una relación personal (familiar, amistad, amor) entre la víctima y victimario antes de la muerte; Víctima en el Homicidio en Estado de Emoción Violenta: en donde antes de la muerte se presentan conductas impulsivas, irreflexivas, de enfrentamiento, humillación, rechazo provocando la muerte. 32 De lo anterior analizamos como la victimologia, no sólo permite estudiar la relación de víctima – victimario y víctima- estado, si no que utilizada en conjunto con la Autopsia Psicologica, permitirá además de realizar el estudio psicológico del occiso (relaciones personales, documentos, entorno) que ésta se puede extender a las víctimas relacionadas con el mismo; con el objetivo de verificar si pudieron participar del hecho punible. Con este nuevo aporte para el Derecho Penal, se dan nuevas luces al juez para el correcto desarrollo de su proceso lógico, asunto este muy importante en las muertes dudosas, en donde la esencia de la investigación está en determinar si hubo o no la participación de un tercero en la muerte de una persona. Así lo reitera Landrove Díaz: “ se ampliaron sus objetivos (de la victimologia) entre ellos el estudio del papel desempeñado por las víctimas en el desencadenamiento de hecho criminal”26 26 Ibid. P. 11 33 2. ASPECTOS LEGALES DEL HOMICIDIO Y DEL SUICIDIO 2.1 EL HOMICIDIO En este punto es necesario señalar nuevamente que, como el procedimiento de autopsia psicológica, encuentra su aplicación en el esclarecimiento de muertes dudosas, se hace necesario estudiar a continuación las directrices legales y doctrinales que se relacionan con los delitos contra la vida en especial el homicidio, y las implicaciones jurídicas del suicidio. 2.1.1 Evolución normativa y concepto del homicidio. El homicidio, como bien lo señala Barrera Domínguez "sigue los pasos de la humanidad"27. 27 BARRERA DOMÍNGUEZ, Humberto. Delitos contra la vida y la integridad personal. Editorial Derecho y Ley y Jurídica Radar. 1985. P. 8 34 Aunque en los primeros siglos de la vida del hombre en comunidad esta conducta no era sancionada, es bien conocido el hecho de su inclusión en el Código de Hammurabi, proceso que fue de por si un poco pausado, ya que se temía legislar sobre este hecho si se afectaba la venganza privada.28. Sin embargo, diversas legislaciones antiguas, como las leyes de Manu, el Derecho Romano y Griego, las Siete Partidas entre otras, fueron reconociendo la importancia de condenar este tipo de actos. Es preciso reconocer el aporte que hizo el cristianismo, el que Luis Carlos Pérez señala en su obra29 como el artífice de la filosofía actual del delito de homicidio: castigar la privación de la vida humana sin diferenciar el rango o jerarquía, como solía discriminarse en las legislaciones antiguas. Así, básicamente el homicidio se refiere a la muerte provocada por una persona a otra. 28 Ibid. P.8 35 Ahora, la concepción doctrinal acerca del homicidio ha tenido algunas particularidades dignas de mencionar. A manera de ilustración, Levene30 señala que Vannini afirmaba que el homicidio era la muerte causada a una persona por otra injustamente (el subrayado es nuestro), lo cual es errado. Mal actuaría el legislador en determinar dos veces la injusticia de la conducta, ya que basta con que la contemple como hecho punible para que se entienda ilícita31. Por lo pronto, se adoptará la concepción simple y llana antes mencionada. 2.1.2. Definicion legal en diferentes legislaciones. En la mayoría de códigos penales de América Latina, el tipo penal parte del mismo principio: ocasionar la muerte a otra persona, aunque en algunos legislaciones se añaden componentes como la "malicia premeditada" en 29 PEREZ, Luis Carlos. Derecho Penal. Partes General y Especial. Tomo V. De los delitos en particular. Bogotá: Editorial Temis. 1986 P. 176 30 LEVENE, Ricardo. El delito de homicidio. Buenos Aires Ediciones De palma. 1977. P.7 31 PEREZ, Op.cit. P 7 36 el Código Penal de Puerto Rico o la "intención criminal" de Paraguay. Pero en general el tipo es idéntico32. 2.1.3. Antecedentes en Colombia. Inicialmente el artículo 583 del Código Penal de 1890 contemplaba el homicidio como tipo penal, excluyendo de punición la muerte ordenada por la autoridad, lo cual fue derogado al expedirse la reforma de 1910, que prohibía la pena de muerte, hecho al que se refería dicha exclusión. En el Código Penal de 1936, se incluyó reiterativamente "el propósito de matar", elementoque como se señaló anteriormente, se enuncia en otras legislaciones, el cual finalmente se eliminó. El tipo penal actual se consagra en el artículo 323: 32 Ibid p. 15 - 17 37 "El que matare a otro incurrirá en prisión de veinticinco (25) a cuarenta (40) años." En esta forma, debe contemplarse que se sanciona la muerte dolosa de una persona, según el concepto del artículo 90 del Código Civil, el cual ha sido discutido pero que no es tema oportuno.33 2.1.4. Clasificación del tipo. Se encuentra una interesante clasificación en la obra "El homicidio" del mexicano OSORIO 34 , la cual enmarca el delito de homicidio dentro de las siguientes categorías, según el punto, el delito será: Por la conducta del sujeto: de acción u omisión pudiendo ser esta simple omisión o comisión por omisión. 33 Artículo 90.- La existencia legal de toda persona principia al nacer, esto es, al separarse completamente de su madre. La criatura que muere en el vientre materno, o que perece antes de estar completamente separada de su madre, o que no haya sobrevivido a la separación un momento siquiera, se reputará no haber existido jamás. 34 OSORIO Y NIETO Cesar Augusto. El homicidio. Estudio Jurídico, medicina legal y criminalistica. México: Editorial Porrúa, 1991.p. 10 38 Por el resultado: material o de resultado Por el daño: delito de lesión Por la duración: instantáneo Por el lemento subjetivo: doloso, culposo o preterintencional Por su estructura: delito simple Por el número de actos que comprende: unisubsistente. 2.1.5. Elementos del tipo. 2.1.5.1. Sujetos. otro. ACTIVO: quien despliega la conducta para matar a Es un sujeto común, es decir, no requiere ninguna calidad espec¡fica para ser el agente. La calidad solamente interferir en lo que se refiere a la agravación o atenuación. 39 En esta forma, cualquier hombre independientemente de sus condiciones de sexo o edad puede incurrir en este delito, sin importar los medios que utilice. Solamente se establece una diferenciación, pero únicamente en cuanto a la autoridad competente y el tratamiento especial frente a los inimputables por inmadurez psicológica o trastorno mental.35 PASIVO: La doctrina y la ley coinciden en afirmar que el sujeto pasivo quien soporta la conducta del agente, debe ser una persona VIVA. Este concepto debe ser entendido desde los dos extremos que comprenden la vida de una persona, nacimiento y muerte. Claro esta que este tema, ha generado gran discusión entre los doctrinantes de todas las ‚pocas y de todas las escuelas. 35 BARRERA, Op. Cit p 40 Se señalarán, por lo tanto, los puntos que importan más al tema central de la tesis, acogiendo lo que determina la ley colombiana. Contempla entonces el art¡culo 90 del Código Civil, que la existencia de la persona empieza cuando se separa de la madre, cuando inicia el proceso de respiración por si solo. Por lo tanto, se tendrá como homicidio, la muerte del que se separa de la madre y vivió después de este procedimiento. Ahora, el fin de la persona es la muerte, contemplándose a partir del momento en que cesa la actividad cerebral. En esta forma, como el sujeto activo es una persona, no hay delito de homicidio cuando la conducta recae sobre un cadáver. Esto es bien conocido en la doctrina como delito imposible.36 36 LEVENE. Op.cit P 70. Al respecto Gomez Mendez señala, haciendo referencia al Código de 1936 y citando a Jorge Gutierrez Anzola: “en el homicidio tratándose de supresión de vida humana, habrá delito imposible cuando la posibilidad jurídica (vida) no exista. Es factible que una persona , queriendo dar muerte a otra , emplee sobre ella las violencias adecuadas para eliminarla, sin saber que esta persona – sujeto pasivo- estaba muerta antes del ataque, es decir, que el presupuesto (vida) no está latente. La ley a pesar de todo, considera en el sujeto activo la inminencia de un peligro evidente, y le impone, aunque de manera atenuada , al sanción proporcionada a la peligrosidad......El código de 1980 elimino la responsabilidad peligrosista al suprimir la figura del delito imposible 41 2.1.5.2. Objeto: bien jurídico protegido. El bien jur¡dico protegido es conceptualmente, aquello que por su especial sentido sustancial es digno de obtener la misma protección jur¡dica que el ordenamiento pueda otorgarle. En nuestro caso, ese bien jur¡dico es la VIDA HUMANA. As¡, se protege la vida de la persona sin distingo de raza, sexo, condición social o religiosa. Bien afirma Luis Carlos Pérez, al referirse a la protección de la vida, que esta deja de ser un bien jur¡dico que se enmarque dentro del derecho sino que pertenece a él, por el contrario, ella es el origen de todo reconocimiento jur¡dico que pueda hacerse. puesto que se trata de una figura de atipicidad por falta de sujeto pasivo.” GOMEZ MENDEZ, Alfonso. Delitos contra la vida y la integridad personal. Bogotá: Universidad Externado de Colombia. 1998. P.30 42 En ese orden de ideas, y como cita el mismo autor, el maestro Carrara afirma que el homicidio es una infracción natural porque esta actuación esta lesionando un interés que existe independientemente de la ley o la sociedad37. 2.1.5.3 Elemento subjetivo: dolo. Dentro del ordenamiento jur¡dico penal, los hechos punibles deben cumplir con tres caracter¡sticas para que se constituyan como tales: TIPICIDAD, ANTIJURIDICIDAD Y CULPABILIDAD. Tipicidad se refiere a que la conducta del agente se enmarque dentro de lo que contempla la descripción del art¡culo, tal como se señaló antes. La antijuridicidad es el detrimento que se causa en el interés jur¡dico tutelado por la ley. 37 PEREZ, Op.cit p.163 43 En cuanto a la culpabilidad, el hecho debe realizarse a título de dolo, culpa o preterintención. En este trabajo de tesis solamente se hará alusión al homicidio doloso que es del que principalmente se ocupa el procedimiento de autopsia psicológica. Como dolo o intención, se puede entender que es aquel elemento subjetivo por el cual elagente representa la conducta que va a realizar y el resultado que se producir y en forma voluntaria decide efectuar lo que ideó. Cuando se trata del homicidio, el dolo consiste en la intención de matar (animus necandi o animus occidendi)38, es decir, del desplegamiento de todas las actividades necesarias para producir la muerte de la persona. Ahora, es necesario que exista una relación de causalidad entre la actuación y el resultado para que se configure no solo el dolo sino el 38 LEVENE, Op.cit.p 23 44 delito. La doctrina ha clasificado el dolo en las categor¡as que se señalan a continuación y la posición de los diferentes autores: BARRERA: DOLO DIRECTO: Resultado il¡cito obtenido realmente coincidente con lo buscado. INDIRECTO: El resultado es mayor al inicialmente propuesto. DETERMINADO: Intención y resultado concuerdan perfectamente. INDETERMINADO: No coinciden perfectamente. EVENTUAL: El resultado se presenta como apenas posible pero el agente actúa. No hay resultado querido sino probable ALTERNATIVO: La acción puede producir varios resultados pero el agente actúa independientemente de ellos. LEVENE: DETERMINADO: Prevee‚ consecuencias y las quiere. EVENTUAL: El efecto sobrepasa el deseo. El agente pudo preverlos pero no los ha previsto ni los quiere prever. 45 CARRARA: DETERMINADO: La intención del sujeto activo es expl¡cita. INDETERMINADO: La intención es impl¡cita (como el empleo del arma o los medios que por su naturaleza dejan prever que el resultado sea la muerte). Vistas las diferentes posiciones en las que puede enmarcarse la intención de matar, es preciso señalar que de la ocurrencia de la muerte puede presumirse que el sujeto activo por lo menos debió prever el resultado. Sin embargo, esta presunción puede reforzarse o desvirtuarse teniendo en cuenta las circunstancias del crimen, (como el arma homicida o las heridas) y la personalidad del sindicado. Por ello, debe considerarse también que la personalidad obtenida del perfil de la v¡ctima a través de la autopsia psicológica, servir de apoyo para el juez al intentar aceptar o rechazar la presunción antes vista. Hay dos figuras que la doctrina ha contemplado que tienen relación directa con el dolo y la responsabilidad 46 del agente, como son el error in personam (matar a X cuando se quer¡a matar a Y) y la aberratio ictus (o desvio del golpe, cuando se dispara a X y accidentalmente lesiona a Y que est presente en el hecho). Para la mayor¡a de los autores, estas conductas no excluyen el dolo, porque la intención del sujeto es matar. A manera de conclusión, podemos señalar lo contemplado por la Corte Suprema de Justicia con respecto al dolo: “el elemento de culpabilidad del delito de homicidio (dolo), o sea el nexo psicológico entre el agente y el hecho, es la voluntad conscientemente proyectada al evento muerte, a sabiendas de la ilegitimidad del comportamiento.... en el homicidio simple el dolo puede concurrir en cualquiera de las especies en que doctrinariamente se suele distinguir” 39 . 2.1.6. Causalidad y medios de comision. El art¡culo 21 del Código Penal, contempla que "Nadie podrá ser condenado por un hecho punible, si el 39 Sentencia de la Corte Suprema de Justicia , Casación Penal Mayo 6/72. En Régimen Penal Colombiano. Bogotá: Editorial Legis. 47 resultado del cual depende la existencia de este, no es consecuencia de su acción u omisión. Cuando se tiene el deber jur¡dico de impedir el resultado no evitarlo, pudiendo hacerlo, equivale a producirlo." Del anterior artículo podemos señalar; primero, la relación causal y segundo las modalidades de comisión del hecho. Se debe entender entonces, como causalidad, la relación existente entre la conducta del sujeto activo y el resultado producido. La actuación del agente será entonces el elemento causal del homicidio. La muerte del sujeto pasivo debe ser producto de la acción u omisión del sujeto activo. Por acción se entiende la actividad del sujeto para producir la muerte y por omisión la ausencia de actuación para evitarla, siendo este su deber jur¡dico tal como lo señala el ordenamiento penal, si su inactividad ha sido voluntaria. 48 A su vez, cada una de estas formas, puede ser directa o indirecta, y esto se relaciona espec¡ficamente con los medios utilizados para su ejecución. En cuanto a los medios, se puede mencionar la clasificación que adoptan la mayor¡a de doctrinantes: Medios materiales y medios morales. Medios materiales: Son aquellos que al aplicarse al organismo atacan su integridad. Se subclasifican en: DIRECTOS: F¡sicos (Armas de fuego) Químicos (Bacterias, gases) Patológicos (Contagio enfermedades) Mecánicos (Maquinaria) INDIRECTOS: Se refiere esta categor¡a a elementos que por s¡ no son mortales pero a través de actos de agente pueden serlo, como 49 alambradas, grandes estanques (por ejemplo, el sujeto activo empuja a la v¡ctima) Medios morales: Se dirigen a atacar el psiquismo, la sensibilidad o voluntad persona. Es clásico el ejemplo de quien sabiendo que el sujeto pasivo tiene problemas card¡acos los asusta o le da una mala noticia. Sobre esta clasificación hay muchas discusiones que no se mencionarán. Basta con señalar que no son descartadas de plano, no por el conflicto doctrinal que pueda existir, sino por la dificultad de su prueba. Solamente cuando aparezca acreditado el propósito de matar y el convencimiento del sujeto activo de que el trauma psicológico causar la muerte en el sujeto pasivo. Aun as¡ es necesario probar el nexo causal. Pero, independientemente de los medios utilizados (salvo que estos constituyan una causal de agravación), siempre que se halle probado el nexo causal y que este se encuadre dentro del tipo penal, se considera acreditado el homicidio. 50 Si existen dudas sobre la relación del medio utilizado con la conducta y el resultado, el juez podrá bien valerse de su experiencia y de los principios de la sana cr¡tica o apoyarse en dictámenes periciales para que se determine la causa del fallecimiento. 2.2 EL SUICIDIO El suicido lo consideramos como un fenómeno individual que tiene injerencia social, por esta razón resulta esencial para éste estudio y para las ciencias sociales conocer su desarrollo legislativo e histórico en las diferentes sociedades. 51 2.2.1 Historia. La palabra suicidio viene del latín sui= de sí mismo, y cadere= matar, de acuerdo con Roberto Solórzano Niño (1996) el suicidio es “el acto por el cual una persona se quita la vida voluntariamente”40 Partiendo del estudio que al respecto realizó Carmen Juanatey Dorado, en los Pueblos Primitivos se reconocen fines altruistas en estos tipos de muerte, a modo de ejemplo podemos encontrar: Los Visigodos permitían la muerte de sus ancianos ya cansados de la vida, precipitándolos desde “la roca de los abuelos”41. En los Celtas, el designio eugénico se completaba con el propósito eutanásico, lo que llevaba a que se diera muerte (muerte voluntaria) a los ancianos valetudinarios.42 40 NUÑEZ. Op. Cit. P.108-109 JUANATEY DORADO, Carmen. Derecho, suicidio y eutanasia. Madrid: Ministerio de Justicia e Interior. Centro de Publicaciones. 1994. P.30 42 JIMENEZ DE ASUA. Libertad de amar y derecho a morir. Citado por JUANATEY Op. Cit p 31 41 52 Los Hindúes practicaban el suicidio y lo justificaban como un paso para mejorar la condición de su alma. En la India los enfermos incurables eran muertos introduciéndoseles barro en su nariz y boca hasta ahogarlos. Así Carmen Juanatey concluye que el obedece a una “tratamiento del suicidio no pauta común, si no que mas bien depende de las circunstancias concretas (geográficas, económicas, culturales, etc...) presentes en cada una de las sociedades estudiadas por la antropología jurídica”43. Así , Juanatey, coloca solo dos ejemplos , en lo que el suicidio parece haber sido una sanción jurídica”:44 En las islas Trobriand (Nueva Guinea) donde el acusado de incesto, se arrojaba voluntariamente desde una palmera. 43 JUANATEY Op.cit. P.32-33 53 Los Ashanti (en el sur de Ghana) para quienes el suicido era un grave delito. En Grecia las opiniones de los autores se encuentran divididas, Garrisson, Geiger y Durkheim consideran que el suicidio era ilegítimo pero si era autorizado por el estado era considerado como válido. Así, “en Atenas, el hombre que se había matado (..) le eran rehusados los honores de la sepultura regular; además, la mano derecha del cadáver era cortada y enterrada aparte”,45 considerando esta última como una sanción jurídica para la persona que no había pedido permiso a la polis para su muerte voluntaria. Sin embargo Juanatey indica “... No hay ninguna fuente que confirme que los mismos tuvieran un carácter jurídico y que se impusieran coactiva 44 45 Ibid. P. 33 DURKHEIM, E. El suicidio. Citado por JUANATEY p.35 54 e institucionalmente y que tuviesen un respaldo moral. Mas bien parece tratarse de operaciones rituales precautorias y purificadoras ligadas al temor supersticioso o religioso suscitado por el suicidio”46. Respecto del Derecho Romano se ven varias etapas del desarrollo del suicidio, a saber: En las XII tablas, existe divergencia de opiniones, mientras para el autor Durkheim en ellas no se habla explícitamente del suicidio, sí podían existir “prescripciones análogas” 47 con la legislación griega que si regulaban el asunto. Diferente lo que piensa Marra 48 para quien las XII tablas no tienen ninguna mención para los casos de suicidio y menos aún una sanción. Parece ser que esta posición es la más certera si consideramos que lo que no se estipule en la legislación no puede ser tenido en cuenta por los 46 JUANATEY Op. Cit. P 39 DURKHEIM. El suicidio. Citado por JUANATEY Op. Cit. P40 48 MARRA, R. Suicidio. Citado por JUANATEY Op. Cit. P40 47 55 súbditos de un estado y es claro que el suicidio no es regulado en esta normatividad. Mas bien y de acuerdo con Marra y Juanatey parece que en los casos de suicidio por ahorcamiento y por motivos ilícitos, la costumbre religiosa era no hacer funerales en estos casos, más que todo y como lo reitera la autora “... Estamos mas bien ante una suerte de obligación social, y no ante una verdadera obligación jurídica respaldada coactivamente”49. El final de la República y primeros años del Imperio “sostiene la vigencia del principio <<crimen estinguitor mortalitate>>, y por tanto, que el suicidio de un acusado antes de la condena, como toda muerte, extingue el delito; ello hace imposible la imposición de una pena y, con mayor razón, de una pena accesoria como la confiscación de bienes. La vigencia de este principio puede deducirse del Digesto y de las noticias que aparecen en algunos escritores del siglo I d.c, especialmente en Tácito”50. 49 50 JUANATEY Op. Cit. P 42 Ibid. P.45 56 Ya en el siglo II d.c el principio << crimen estinguitor mortalitate>> se ve excepcionado por otro: <<crimen perduellionis>> establecido en el Digesto, en el Código y desarrollado por la constitución de Alejandro Severo año 226 en la cual “ se establece que el suicidio <<metu criminis>> del acusado antes de la condena impide la sucesión ordinaria y dio lugar a la confiscación de los bienes del suicida” 51 . Lo anterior porque se evitaría el fraude contra el fisco. Sin embargo los herederos tenían la posibilidad de demostrar inocencia y así poder iniciar la sucesión ordinaria. En conclusión Juanatey indica: “ La normatividad referente al suicidio, en la última fase de la República y en la época del Imperio, parece obedecer, no tanto a una reprobación del acto de quitarse la vida en sí mismo considerado (respecto al cual regiría más bien el principio <<liber 51 Ibid p.46 57 mori>> como a una finalidad práctica de defender el fisco frente a la tentativa de fraude que pudiera significar el suicidio”52. El desarrollo del Derecho Canónico, frente al suicidio, se puede estudiar en varias etapas: La influencia de San Agustín “quien efectivamente equiparó el suicidio al homicidio”53 y que orientó todo el pensamiento de la Iglesia al respecto. En el Concilio de Arles (año 452) “el suicidio fue considerado como un crimen que no podía ser efecto más que de un furor diabólico”54. Al mismo respecto Marra y Bayet consideran que “el derecho Canónico de esta primera fase (...) revela una cierta ambigüedad en relación con el suicidio: las acciones suicidas se consideran con una cierta indulgencia si sus agentes son miembros de las clases privilegiadas, pero se les hace 52 53 Ibid p.49 Ibid p.49 58 objeto de reprobación e infamia si quienes lo realizan son las clases inferiores”55. Durante el Concilio de Orleáns (año 533) bajo la influencia del Derecho Romano, se prohiben realizar ofrendas al suicida, pero sólo para aquellos suicidas que “se quitan la vida antes del juicio condenatorio”56. En el año 563 el Concilio de Braga avanza y consigna la misma sanción para todos los suicidas: “prohibición de cualquier conmemoración en el Santo sacrificio de la Misa, así, como la de que el canto de los salmos acompañase a los cuerpos de los suicidas a la tumba”.57 El Concilio de Toledo (año 693) establece dos penas al suicidio: Intento de suicidio = excomunión. Suicidio = prohibe la sepultura en campo Santo. 54 Ibid p.50 BAYET, A. Le suicide et la morale. Citado por MARRA. Suicidio. Citados por JUANATEY Op cit p.50 56 JUANATEY Op. Cit p.50 57 DURKHEIM. E. El suicidio. Citado por JUANATEY Op.cit p. 51 55 59 En el Siglo VI el suicidio “es considerado como un acto moralmente reprochable, asimilable al homicidio y castigado en consecuencia, con sanciones rigurosas” 58 . Desde el Sínodo de Nímes de 1284, hasta nuestros días: El Derecho Canónico prohibe las exequias religiosas y sepultura en Campo Santo para los muertos por suicidios. En la época Moderna, la Ordenanza criminal Francesa de 1670 “marca también el inicio de una nueva época en la consideración del suicidio que culmina con su total despenalización”59. Así es como en 1791 por el Decreto Guillotin se permite entrega del cuerpo a la familia y el derecho a una sepultura honorable. 58 59 JUANATEY Op. cit. P.51 Ibid p.52 60 Así “El suicidio desaparece como figura jurídico-penal, pero no - claro está - la participación en el suicidio de otro o el homicidio consentido....”60. Específicamente Prusia (1796), Austria (1850), Italia (1889) continúan con la idea despenalizadora de Francia. Sin embargo cabe anotar que otras legislaciones como la de Gran Bretaña tardan hasta el Siglo XX específicamente hasta 1961 para despenalizar el suicidio. En Estados Unidos ocurre algo similar a Europa, a pesar de que los Estados de Rhode Island, Massachussets y Virginia penalizan el suicidio de diferentes formas, a lo largo del siglo XVII y XVIII “la incriminación a la muerte voluntaria prácticamente había tocado fin” 60 61 Ibid p.57 Ibid p.58 61 61 . 2.2.2 FUNDAMENTO JURIDICO Extendiéndonos al caso colombiano, el suicidio no es ni ha sido considerado como una acción punible, en el Código Penal de 1936 se contemplaba en su artículo 367: “ El que eficazmente induzca a otro al suicidio, estará sujeto a pena de 3 meses a 2 años ”. Además se duplica la pena si se procedía por motivos innobles o antisociales. En el actual Código Penal de 1981, artículo 327 se prevé como conducta punible la inducción y ayuda al suicidio: “ El que induzca a otro al suicidio, o le preste una ayuda efectiva para su realización, incurrirá en prisión de dos a seis años”. Tres cambios trajo la nueva legislación penal: 62 Se suprime la duplicación de la pena por motivos innobles o antisociales, se agrega la acción de AYUDA al suicida, y se da aumento de la pena. Desde el punto de vista legal, el suicidio no puede considerarse como una conducta delictuosa, aunque pueda resultar social y moralmente censurable. En esta forma, diversos autores han considerado la irrelevancia del suicidio como conducta punible. El maestro Beccaria 62 señalaba, que considerar el suicidio como delito era imposible, porque quien recibiría la sanción, no sería el sujeto activo (quien se quita la vida), sino sus sucesores inocentes, desde la perspectiva punitiva. Ahora desde la perspectiva preventiva sería inocua cualquier sanción represiva sobre el sujeto agente, salvo las sanciones pecuniarias. 62 BECCARIA, C. De los delitos y de las penas. Citado por BERNAL PINZON, Jesús . El Homicidio Bogotá: Editorial Temis, 1971. P 257. 63 Así, han coincidido la mayoría de los autores en afirmar que el derecho penal no puede inmiscuirse en asuntos que pertenecen al fuero interno de la persona, y que no están afectando el interés jurídico general. Sin embargo, la mayoría de las legislaciones no han dudado en penalizar la conducta de quien efectivamente colabore al suicida en su propósito, por medio de su determinación o inducción. Para esto se ha consagrado un tipo penal autónomo, porque no puede tratarse a quien presta la ayuda bajo la figura de la participación, porque no se presenta la figura del cómplice en una conducta que no se tiene como penalizada, pero no puede dejársele sin castigo porque esta coadyuvando en un hecho que resulta socialmente lesivo. Así, el Código Penal, consagra en su artículo 327: “Inducción o ayuda al suicidio. El que eficazmente induzca a otro al suicidio, o le preste una 64 ayuda efectiva para su realización, incurrirá en prisión de dos a seis años.” Se ha orientado nuestro legislador por el pensamiento de varios doctrinantes, entre ellos Rocco, quienes afirman que el derecho a la vida no significa una facultad arbitraria, sino que es un derecho inalienable y que su titular no tiene la capacidad de disponer del mismo, en contraprestación de lo señalado por la escuela positivista de Enrico Ferri63, escuela que propugna por el derecho a la muerte, campo que no puede ser intervenido por la Ley penal, por pertenecer a la esfera privada de cada sujeto. 2.2.2.1 Elementos del delito: 2.2.2.1.1 SUJETO ACTIVO: En este caso el sujeto activo del tipo descrito es quien colabora o induce a otra persona para que sea ella misma la que 63 BERNAL PINZÓN. Op cit. P. 259. 65 se ocasione la muerte, aun cuando sea aquel quien le proporcionó los medios necesarios para tal fin. 2.2.2.1.2 SUJETO PASIVO: Quien efectivamente, y por su propia actividad, se quita la vida. Se requiere específicamente que sea una persona capaz, de lo contrario estaríamos frente a un homicidio agravado por las circunstancias de inferioridad de la víctima, porque lo que el delito requiere es que la ayuda o la inducción produzcan en el sujeto pasivo tal grado de convencimiento que le permita realizar todos los actos necesarios para darse muerte por su propia mano. 2.2.2.1.3 OBJETO JURÍDICO Y MATERIAL: Concuerdan con los establecidos para el delito de homicidio ya que ambos protegen la vida de la persona. Es un DELITO DE RESULTADO, es decir, se requiere efectivamente la producción del suicidio para configurar el delito, porque no puede haber 66 inducción o ayuda más eficaz que la que conduzca al suicidio. Por ello mismo, no procede la tentativa, porque lo que se castiga es que la determinación del sujeto agente, sea de tal magnitud que provoque el suicidio. En esto hay que recordar que si el hecho no cumple con el requisito de la tipicidad (que se configure el acto tal como lo contempla la norma penal) no puede el legislador castigarlo. Sin embargo, si la consumación no se da, pero el acto había iniciado ya su ejecución, debe considerarse que se encuentra el tipo penal descrito, porque con el solo principio de ejecución y el empleo de todos los actos preparatorios necesarios para llegar a su consumación, se entiende que la inducción o colaboración fue eficaz, porque todo estaba determinado para llegar al resultado final. Es un DELITO AUTÓNOMO, como ya se había mencionado anteriormente acerca de la inexistencia de la participación bajo el tipo del homicidio. 67 2.2.2.1.4 CONDUCTA: Debe dirigirse, en primer lugar, sobre una persona o personas determinadas e individualizadas, en forma explícita e inequívocamente dirigida a obtener el resultado suicidio. La actividad del sujeto debe ser entonces: la inducción o la ayuda. La inducción debe ser tal que impulse moralmente a otro a ejecutar una actividad antijurídica, no típica ni culpable. Circunstancias como la edad, la posición del sujeto activo frente al pasivo, el carácter, la ocupación, son elementos que determinan la seriedad que pueda revestir tal inducción. CULPABILIDAD: Se requiere la presencia del dolo de la persona que induce. Es por esto, que la conducta del sujeto activo debe ser intencional. Ahora, hay que tener en cuenta que no es lo mismo la inducción al suicidio que el homicidio consentido. Porque la actividad en los dos tipos es diferente. Mientras que en la inducción al suicidio la acción del sujeto activo es la determinación pero la muerte se la ocasiona la misma 68 víctima, en el homicidio consentido lo que hace el agente es matar al sujeto pasivo, aunque este mediando su consentimiento en el acto. 2.2.3. Aspectos psicológicos del suicidio. Para Solórzano Niño (1996) y a diferencia Delmas citado por Solórzano “...piensa que la depresión produce seis veces más suicidios que el resto de la patología mental. Aunque no es la única variable que entraría a jugar allí, pues aunque toda depresión lleva consigo la idea de suicidio, no toda idea de suicidio está determinada por una depresión, agrega el mismo Solórzano (1996); así como no todo suicidio implica una enfermedad mental como afirma Delmas, pues también existen otras variables que tienen que ver con el contexto, las circunstancias y la relación de esto con la historia y personalidad del individuo”64. 64 NUÑEZ. Op.cit.p.110-111 69 Desde otro punto de vista Rojas (1984) divide en tres factores el fenómeno del suicidio: Factores de incidencia biográfica: entre estos encontramos: Error Existencial: “sentimiento de fracaso que experimentan las personas adultas inclusive algunos jóvenes, cuando su carrera profesional ha sido truncada, o no ha sido del todo exitosa” 65 . Trabajo carente de Gratificación: “... estas personas se caracterizan por haber realizado trabajos que no eran de su agrado presionados por las circunstancias, o por factores económicos característicos por esta sociedad utilitarista, o por trabajos vividos como Frustrantes”. 66 Problemas Económicos y Encronizados: “... puede que un hombre viva con bastantes dificultades económicas y no piense en el suicidio, pero un 65 66 Ibid p.112 Ibid p 123 70 hombre con estas características y además sin un proyecto vital en curso, sin esperanzas ni planes para el futuro se convierte en un posible caso de intento de Suicidio...”. 67 Factores Predisponentes: en este se acumulan: Factores Biológicos: Edad: “...el suicidio ha sido siempre un problema de los años medios y últimos de la vida, aunque hoy existe una enorme incidencia de intentos de suicido entre adolescentes y ciertos grupos de Universitarios...” 67 68 Ibid p.125 ROJAS. Enrique 1984. Citado por NUÑEZ Op.cit p.126 71 68 . Sexo: “ En el hombre, la frecuencia estadística es mayor, que en la mujer (se suicidan tres veces más hombres que Mujeres)”69. Familia “...a principios del siglo XX Ritti creyó sobre la existencia de familias suicidas, sin embargo más tarde se afirmó que la herencia y predisposición constitucional están relacionadas con otros factores como las depresiones y el alcoholismo en los casos de suicidas”70. Factores Culturales: Cultura técnica: “con el capitalismo moderno, nace la idea de obtener mayor capital con el menor esfuerzo posible y en el menor tiempo (...) Llega de esta manera la máquina a reemplazar las labores del hombre 69 70 NUÑEZ. Op.cit. p127 Ibid p.128 72 cambiando la forma de vida (...) A eso se suma la angustia y desencadenan ideas y pensamientos Suicidas”71. Civilización Hedonista: “... el hedonista ha escogido una base sobre la cual apoyarse, la búsqueda del placer a través de todas las situaciones de la vida. Cuando esto ocurre, cuando se presentan situaciones dolorosas o angustiantes decidiéndose ir por el camino de la muerte (...)” 72 . La Deshumanización: “... es hablar de soledad, de alejamiento y anonimato, de ausencia de comunicación, de no vínculos, de falta de Relación”73. La Vida Competitiva: “...ser tildado como un fracasado es como la Muerte(...)” 74 71 Ibid p.130 Ibid p. 131 73 Ibid p.131 74 Ibid p.132 72 73 Factores psicológicos: Temperamento: “...los temperamentos de tipo impulsivo relacionado con otros factores como frustración o miedo pueden condicionar un intento de suicidio (...)”75. El Plano Estimativo Axiológico: “...este es el caso de los genios o de los individuos que llegan a un ambiente inadecuado para desplegar su vocación de vida. Desde el aspecto patológico quedan aquí incluidas las personalidades psicopáticas y los neuróticos”76. El Estado Civil: “...el número de suicidas era mayor en personas solteras, que en personas casadas dentro de estos primaban como posibles suicidas los que no tenían hijos”77. El Aislamiento. 75 76 Ibid p.133 Ibid p.134 74 Factores Desencadenantes: “ estos hacen referencia a aquella pequeña cosa, situación o emoción que faltaba para tomar la decisión y acabar con la propia vida (las crisis ideológicas, los planteamientos incorrectos de la existencia u otras situaciones similares)”78. 77 78 Ibid p.134 Ibid 136 75 3. LA AUTOPSIA PSICOLÓGICA 3.1 HISTORIA Para el caso específico del Derecho Penal, la Psicología Jurídica, ha realizado un aporte importante para el esclarecimiento de muertes dudosas: la AUTOPSIA PSICOLÓGICA. El origen de la Autopsia Psicológica se remonta a los años 50 en la ciudad de Los Ángeles (EU), específicamente “es el Doctor Shneidman quien a partir de los años 60, junto con Farberow, describen en detalle el procedimiento, que mas tarde retoman Liman, Curphey y Tabachnick” (Citados por Young, 1992)79. 79 NUÑEZ. Op. Cit. P.142 76 3.2 DEFINICION La Autopsia Psicológica es entendida como “un proceso de recolección de datos que permite reconstruir el perfil psicológico de una persona y su estado mental antes del deceso por causa dudosa (suicidio, homicidio, muerte accidental o natural)”80. El Doctor Shneidman (citado por Ebert, 1991) indica que son cuatro los objetivos de este proceso: “1. Determinar el modo o la causa de la muerte en casos equívocos. 2. Averiguar el tiempo en el cual se produjo la muerte. 80 NUÑEZ Op.cit. p.1 77 3. Obtener la información suficiente para evaluar los datos obtenidos de diversos intentos de suicidio, con el fin de prevenir dichos intentos y la letalidad de los mismos. 4. Terapéutico para con los amigos y familiares del occiso”81. Los puntos anteriores son la pauta que desarrollan y perfeccionarán posteriores investigaciones del PAP, realizadas por Weisman 1967 (citado por Ebert, 1991), Neill, Benensohn, Farber y Resnik, 1974 (citados por Ebert, 1991) quienes agregan 5 objetivos más como son: notas y apuntes del occiso, entrevistas a los amigos, compañeros de trabajo y familiares, eventos precedentes a la muerte, revisar la historia psicológica del paciente y su historia de vida, tratando de encontrar a alguien que pudiera estar al tanto de los sentimientos del occiso. 82 81 82 ibid p.147-150 Ibid p.151 78 Como se observa, los autores Neill, Benensohn, Farber y Resnik, dan un gran avance para el PAP, al considerar como importante tener el estudio del entorno del occiso, teniendo en cuenta las circunstancias y personas que lo rodearon hasta su muerte. Como nos damos cuenta cada científico que ha estudiado el PAP le da un matiz y forma de desarrollarlo diferente, por ejemplo Ebert (1991) propone una lista de 26 puntos que se deben tener en cuenta: “1. Historia referida al consumo de alcohol 2. Notas suicidas 3. Correspondencia 4. Libros 5. Evaluar y analizar los tipos de relaciones que mantenían 6. Relaciones conyugales 7. Estado de animo 8. Estresores psicosociales 79 9. Comportamiento presuicida 10. Comunicación-Lenguaje 11. Consumo de drogas 12. Historia medica 13. Estado mental 14. Historia psicológica 15. Estudios de laboratorio 16. Informe de forense 17. Motivo de la evaluación 18.Evaluar los sentimientos hacia la muerte, preocupaciones y fantasías 19.Historia militar 20.Historia de las muertes en la familia 21.Historia familiar 22.Historia laboral 23.Historia académica 24.Familiaridad con métodos o formas de muerte 80 al igual que las 25.Reporte policial 26.Reconstrucción de eventos”83 De la misma forma varios autores colocan sus distintos criterios sobre el momento, qué parientes, documentos, deben considerarse como más importantes; lo mismo que el énfasis en determinadas pautas dependiendo de la forma como se produjo la muerte. Asunto muy importante para este trabajo de grado, es considerar, “que la aplicación del PAP se hace de acuerdo con la legislación de cada país, que se encarga de decidir cuándo y por qué se debe llevar a cabo este procedimiento. Así como el tiempo necesario para realizarlo”. A pesar de que este procedimiento ha sido avalado en varios países, especialmente Estados Unidos de donde proviene, estudiosos del tema como, Paul Durbestein, Christopher Cox y John Hermann critican el PAP, 83 Ibid p.155-156 81 indicando que “los aportes del PAP dentro de una investigación no son suficientes; tiene bastantes limitantes, ya que la información que se recoge es retrospectiva, es decir, se deja pasar un tiempo después de la muerte y se comienza la investigación, es aquí donde la memoria entre a jugar un papel bastante subjetivo, según los autores, ya que es capaz de borrar, aumentar, minimizar o sustraer acciones o información importante para los resultados de la investigación...... Se deben utilizar otros mecanismos para profundizar en la investigación y así obtener resultados mucho más completos y confiables”84. La tesis de la Facultad de Ppsicología85 identifica, entre los que consideramos más importantes, los siguientes problemas: Ausencia de proceso estandarizado; las entrevistas a amigos y familiares están influenciadas por la empatía que el entrevistador tenga en el momento de realizarla y el sesgo de las personas que son entrevistadas para narrar 84 85 Ibid. p.170-171 Ibid p.171 82 situaciones o eventos que de alguna manera las podrían beneficiar o perjudicar. De igual forma este procedimiento también puede ser utilizado en procesos civiles y como herramienta terapéutica para personas que han intentado suicidarse. 3.3 ESTADO ACTUAL DE LA AUTOPSIA PSICOLOGICA EN COLOMBIA En Colombia la aplicación del PAP la realiza el Instituto Nacional de Medicina Legal, desde la perspectiva de la psiquiatría, específicamente “en 1994 se tuvieron en cuenta los siguientes aspectos: 83 1. Frases o cartas de despedida. 2. Precauciones de la persona para evitar ser salvada. 3. Estudios de posibles motivaciones para consumar el acto suicida como: recientes pérdidas, depresión, alteraciones mentales significativas, etc. 4. Evidencias de suicidio dadas por el informante y su posible corroboración con el protocolo de la necroscopia. 5. Conocimiento por parte de la víctima de la letalidad del medio de morir e ideación suicida previa. (Manifestación verbal deseo de quitarse la vida)”86. De la misma manera se concluyen dos aspectos más: Que “los rasgos de personalidad más frecuentes fueron los de tipo narcisista, limítrofes y psicopáticos”. “Se entenderá por narcisistas aquellas personas que tienen una visión egocéntrica del mundo, con un pronunciado interés por el bienestar 86 Ibid p.201 y ss. 84 propio desestimado el de los otros, además afirman Jiménez, y. Y Cols (1998) que son personas que necesitan de manera sistemática reconocimiento de las demás personas y tienen poca tolerancia a la frustración”87. “Los trastornos límite de la personalidad se caracterizan según O. Kernberg (Citado por Jiménez, y. Y Cols, 1998) por la llamada difusión de la identidad, la cual consiste en no tener un concepto claro de sí mismo ni de los demás. Generalmente estas personas utilizan mecanismos de defensa de adaptación de tipo primario como: la idealización primaria, la omnipotencia, la identificación proyectiva y negación entre otros, y generalmente se acompaña de impulsividad, mal manejo de la angustia y dificultad para sublimar”88. “Por su parte, la personalidad psicopática se le atribuye a personas incapaces de conducirse de acuerdo con las normas y cuyas relaciones 87 88 Ibid p.202 Ibid p.203 85 interpersonales son superficiales e irresponsables, creando muchas veces malestar en el grupo social”89. Como segunda conclusión señalan que “Se encontró un crecimiento del fenómeno del suicidio entre los periodos de 1992 a 1998. La población más afectada fue la de Santa Fe de Bogotá, entre jóvenes de 15 a 35 años de edad y encontrándose un mayor porcentaje de hombres que de mujeres que llegan a consumar el suicidio”90. 89 90 Ibid. P.203 Ibid P.204 86 Asunto este que no puede ser ignorado por el Derecho, considerándolo como fenómeno social creciente que debe ser resuelto por todas las ciencias sociales de forma interdisciplinaria, como es el objetivo de este trabajo de tesis. A continuación se presentará de forma general y esquemática el nuevo Protocolo91 para el experticio psicoforense en casos de muerte dudosa, utilizando el procedimiento de Autopsia Psicológica; elaborado en Trabajo de Tesis aprobado en la Facultad de psicología de la Pontificia Universidad Javeriana y que tuvo como fin unificar el PAP para el caso de su aplicación en Colombia. Este protocolo se realiza basado en los estudios y conclusiones de Ebert, B., (1991), del cual ya se ha hecho mención en este trabajo. Existencia de Muerte Dudosa e inicio de una investigación Penal. 91 Ibid p.224 87 El Fiscal encargado solicitará PERITAJE a un psicólogo o siquiatra pidiendo la realización del PAP. Inicio de PAP, colocando fecha, motivo de investigación, modo y causa de la muerte. El PAP constará de cuatro ejes principales: Datos personales del occiso y detalles de la muerte: Para la mejor elaboración de este eje, se requiere de todos los medios de prueba necesarios como: Balística, Grafología, y Documentología entre otros, que se necesiten para el esclarecimiento de los hechos. Historia del occiso a través de documentos: En el trabajo de tesis de la Facultad de psicología clasifican los documentos en públicos y privados, determinando que documentos públicos “son aquellos solicitados a diversas instituciones por las cuales haya transitado la persona y que puedan dar cuenta de diversos datos del occiso desde sus registros 88 médicos, psicológicos, y psiquiátricos anteriores, reportes de la vida académica, laboral, militar y judicial de la persona”92. De los documentos privados indican que son aquellos “que rodearon a la persona hasta el momento de la muerte como libros que leía la persona diarios, cartas, notas, escritos, poesías, libros que llevara la persona de contabilidad, testamentos”93. 92 93 Ibid p.227 Ibid. P.230 89 Sin embargo no estamos de acuerdo con la clasificación que realizan, ya que en términos jurídicos tal como lo señala el artículo 251 del C.P.C.: “Documento público es el otorgado por funcionario público en ejercicio de su cargo o con su intervención. Cuando consiste en un escrito autorizado o suscrito por el respectivo funcionario es instrumento público; cuando es otorgado por un notario o quien haga sus veces y ha sido incorporado en el respectivo protocolo se denomina escritura pública. “Documento privado es el que no reúne los requisitos para ser documento público” . Es preciso señalar lo conceptuado por Arenas Salazar, donde determina que “para que exista documento público se requiere: que sea expedido por funcionario público, en ejercicio de sus funciones y con las formalidades legales”94. 94 ARENAS SALAZAR, Jorge. Pruebas Penales. Bogotá: Ediciones Doctrina y Ley. 1996 p.495 90 Por lo tanto, consideramos que debe tenerse en cuenta la procedencia del documento, toda vez que el juez los analizará en forma diferente dependiendo de su calidad de públicos o privados. Construcción retrospectiva de la personalidad y conducta social: allí se analizan adiciones a las drogas o el alcohol, las relaciones de pareja y vínculos de amigos, relaciones laborales y académicas, sentimientos de rabia o ira por alguna persona en especial por parte del occiso, la historia familiar, historia de muertes en la familia, la afición del occiso por instrumentos con los cuales se pudiera hacer daño o causarse al muerte, la diversión y hobbys, gastos personales, círculos sociales como comunidades religiosas, filosóficas, e ideológicas, estresores psicosociales (muerte pariente querido, separaciones, cambios de localidad, ascensos o remoción de cargos) 91 Anotaciones y conclusiones: allí se establecen las anotaciones de las entrevistas y las percepciones del examinador. Desde la perspectiva de la ciencia de la psicología se considera que los comportamientos y acontecimientos donde se involucre la vida humana, siempre tienen su razón de ser y por lo tanto tienen que ser examinados a fondo, como lo afirma Marcó, Martí y Pons la psicología: "…debe servir primordialmente para ayudar a los jurídicos (…) en lo referente a la comprensión de la génesis y manifestaciones típicas de ciertos comportamientos que pueden ser la base de actos delictivos, así como información sobre los métodos de interrogatorio y exploración y aspectos de la personalidad del actor de un actor de un hecho antilegal o implicado en ejercicio en ejercicio de una capacidad jurídica"95. Para el optimo desarrollo de este procedimiento es importante que los profesionales de los campos de la psicología, medicina, y derecho se 95 NUÑEZ Op.cit. p 6 92 unan para identificar las causas y consecuencias de las muertes dudosas. En el caso del derecho es importante la reglamentación de este nuevo procedimiento en la Legislación Colombiana, especialmente si consideramos uno de los fines esenciales del derecho la Justicia. 3.4 EXPERIENCIAS DEL PAP EN CUBA En Cuba encontramos estudios realizados por la doctora Teresita Garcia Perez, este país es un ejemplo positivo de la aplicación del PAP en los estrados judiciales. Al respecto la doctora ha indicado: “ Como antecedente histórico del surgimiento de la autopsia psicológica se recoge en nuestro país el análisis del Teniente Jack Lester Mee, víctima de un homicidio a manos de su amante, en los años 40, este fue solicitado por el letrado de la defensa a los peritos psiquiatras para probar que el occiso era "anormal y peligroso" como justificación al gesto homicida de su cliente. En aquella ocasión los Doctores Díaz Padrón y 93 Henríquez estudiaron cartas, el diario íntimo y un libro de poemas escrito por el finado, tambien revisaron la historia clínica de un hospital militar donde había estado recluido el que resultara víctima, pudiendo establecer que padecía un trastorno de la personalidad particularmente centradoensuvidasexual” 96 . A partir de los antecedentes mencionados se estudian los diferentes Protocolos de Autopsia Psicológica a nivel internacional y Cuba llega a su “Modelo de Autopsia Psicológica” modelo estructurado y sistematizado validado por investigaciones realizadas entre los años 1990-1994, así mismo la doctora García hace relevancia de que la Procuraduría General de Justicia del estado de Querétaro, en los Estados Mexicanos utiliza el modelo cubano para muertes dudosas. A continuación algunos casos mencionados por la doctora García, en los que se ha utilizado el Modelo de Autopsia Psicológica: 96 GARCIA PEREZ, Teresita. Tomado de http://www.medicinalegal.com.ar/index.html/ 94 Caso 1: “ Se trata de la muerte equívoca de un joven de 27 años después de precipitarse de un edificio en horas de la madrugada, se manejaba la posibilidad de un suicidio por tratarse de un individuo con trastornos nerviosos referidos por los vecinos al investigador policial, se hablaba de accidente por el antecedente de ingestión de bebidas alcohólicas, pero también se pensaba en el homicidio por el antecedente de discusiones recientes con un vecino. La autopsia psicológica pudo concluir que se trataba de un retrasado mental con conducta sociopática y un abuso de alcohol y drogas sin dependencia, así como también descartamos cualquier elemento de un síndrome presuicida. Dadas las dificultades en las relaciones interpersonales y el ambiente disocial en el cual se desenvolvía se encontró un franco predominio de factores de riesgo heteroagresivo, lo cual, unido a la ausencia de un estado presuicida y de antecedentes de accidentalidad, nos hizo dar como hipótesis más probable la homicida. Al avanzar las investigaciones aparecieron elementos que confirmaron esta hipótesis.” Caso 2: “ Se trata de la precipitación de un individuo del cuarto piso de un hotel en el cual se encontraba hospedado, todas las personas presentes en las inmediaciones lo vieron arrojarse, a ojos vistas era un suicidio, el problema venía dado porque este señor poseía un seguro de vida, el cual no sería pagado si se había privado voluntariamente de su vida. En este caso existía un testigo directo que, poco antes del hecho, había sido llamado por la seguridad hotelera para ayudar a calmar al que resultara occiso ya que estaba alterando el orden, había salido desnudo al pasillo y 95 "parecía que estaba borracho". Previa revisión de la declaración de este testigo, hicimos una reconstrucción de su dicho en el lugar del hecho, resultando que éste se le había encarado a la víctima pudiendo comprobar que no tenía aliento etílico a lo cual él pensó: "si no está borracho está loco", lo llevó hasta un diván en el lobby del cuarto, en lo que el guardia de seguridad bajó a buscar un médico para que lo inyectaran. En ese breve tiempo trató de darle un beso en la boca al testigo y a otro huésped que pasaba le tocó los glúteos y acto seguido le dijo al testigo: oh, mira, mira que larga trenza, y colocó las manos como quien tuviese la trenza atrapada y salió corriendo por el pasillo al final del cual saltó la baranda y cayó al vacío. Este testigo nos explicó todo esto muy gráficamente comentando además que lo miró "como si no me viera", que sudaba profusamente al punto de que él trató de sujetarlo cuando emprendió su carrera y no pudo, pues estaba "tan mojado" que el brazo "se le rodó de las manos". Luego recibimos un resumen de historia clínica donde se refería el antecedente de un traumatismo craneal con pérdida de conciencia después del cual había tenido episodios de automatismo de semiología compleja por lo cual estaban estudiando la posibilidad de una Epilepsia Post-Traumática. El episodio gráficamente narrado por el testigo era perfectamente compatible con un estado crepuscular epiléptico con alucinaciones complejas visuales y táctiles (veía y tocaba la trenza) y con un estado de excitación que le provocaba entre otros sudoración profusa. El estado crepuscular epiléptico es un estado de total turbación de la conciencia donde el suicidio es implanteable pues conceptualmente el suicidio es la decisión consciente y voluntaria de privarse de la vida y aquí es imposible hablar de decisión consciente y voluntaria al estar completamente tomada la conciencia. De esta manera el caso fue cerrado como accidente y la familia cobró su seguro de vida. 96 En estos ejemplos se pone de manifiesto una vez más la necesidad de trabajar muy unidos a todos los compañeros de la investigación policial, sin su ayuda nuestra pericia no puede ser buena y sin la nuestra su investigación no será completa. La autopsia psicológica es una pericia difícil con la cual solamente cuentan algunos países desarrollados donde el estudio de las muertes equívocas exhibe un alto nivel científico, el tenerla a nuestra disposición supone un paso de avance importante en la elevación de la calidad científico-técnica y la profesionalidad de la investigación criminal.” Caso 3: “ Se trata de un homosexual de 34 años que aparece muerto en su domicilio con evidentes señales de violencia en el área genital, incluso desgarros anales, había sido estrangulado con un cordón después de golpearlo con un objeto contundente, vivía solo y recibía atención por seguridad social. El autor del hecho fue detenido en las 24 horas siguientes y expresó que "se había dado unos tragos" y "le había dado por eso" porque sabía que la víctima era homosexual. Al realizar la autopsia psicológica se logró establecer que se trataba de un retrasado mental de moderado a severo que hacía frecuentes descompensaciones psicóticas y que comportaba alteraciones conductuales que incluían incursiones homosexuales, de manera que se trataba de un enajenado mental, carente de facultad para comprender el alcance de su acción y dirigir su conducta. Nuestras conclusiones, unidas a evidencias policiales de tentativas de abusos sexuales anteriores de este mismo individuo contra la víctima y la 97 presencia de claras señales de violencia en el área genital (que hablan de la utilización de fuerza física para vencer la resistencia de quien resultara occiso) dieron por resultado que lo que inicialmente había sido homicidio (incluso de posible móvil "pasional") fuera tipificado como asesinato y la petición fiscal de sanción fuera elevada hasta la pena capital.” Caso 4 “ Se trata de un señor de 75 años que aparece muerto en su lecho y sus conviventes (no familiares) llaman al médico de la familia para que haga el certificado de defunción, cuando éste llega se percata de que el anciano tenía signos de violencia en el rostro y se niega a extender el certificado, avisa a la policía y a la guardia de Medicina Legal y al realizar la necropsia se observan infiltrados hemorrágicos de las conjuntivas y del diafragma lo cual habla de maniobras combinadas de sofocación. Al realizar la autopsia psicológica se logró establecer con toda certeza que al menos dos meses antes de su muerte este anciano había instalado un cuadro demencial, lo cual sirvió no solo para la tipificación del asesinato al actuar criminalmente contra un enajenado mental, sino también para invalidar una certificación de matrimonio y un testamento firmados por él 12 días antes.” 98 De igual forma el modelo es también aplicado en Cuba para la prevención de muertes dudosas en la comunidad, y el avance en estudios de la victimologia. 4. LA AUTOPSIA PSICOLÓGICA COMO MEDIO DE PRUEBA EN LA LEGISLACIÓN COLOMBIANA 4.1 LA PRUEBA EN EL PROCESO PENAL COLOMBIANO Para la resolución de las causas de una muerte dudosa y poder dictar sentencia acusatoria; el juez debe aplicar lo consagrado en el artículo 247 del Código de Procedimiento Penal: “No se podrá dictar sentencia condenatoria sin que obre en el proceso prueba que conduzca a la certeza del hecho punible y la responsabilidad del sindicado”. 99 Del artículo en mención consideramos que se requiere de 3 elementos esenciales para dictar sentencia condenatoria: las pruebas, la certeza de la comisión del hecho punible y la responsabilidad. Para el caso especifico de muertes dudosas se analizarán los medios de prueba partiendo del estudio del Método Reconstructivo; haciendo énfasis en el Dictamen Pericial y el Indicio aplicado en el PAP. 4.1. 1. Concepto de prueba. En general la prueba tiene como función principal otorgar el conocimiento de un hecho al funcionario judicial, con el fin de crear la suficiente certeza para determinar, en especial en lo que atañe al proceso penal, la ocurrencia del hecho punible, la responsabilidad en cabeza del sindicado, y en nuestro caso el tipo penal en el que se enmarca la conducta investigada, en caso de muertes dudosas. 100 Como lo señala Florián en su obra,97 el tratadista Romagnosi determina que la prueba, es el medio que produce un conocimiento cierto o probable acerca de cualquier cosa. Entonces, en esta forma, el componente fundamental de la prueba es la obtención de la certeza. Para llegar a ella, tal como lo señala Dellepiane, la acción de probar comprende la confrontación de los diferentes elementos de juicio que se presentan ante el juez en el transcurso del proceso. En este sentido, determina que “la certeza resulta de la confirmación o acuerdo entre las cosas u operaciones confrontadas”98. La certeza que se produzca en el juzgador, sin embargo, nunca podrá ser determinada como la verdad verdadera, sino que la misma se limita a la verdad puramente material. 97 FLORIAN, Eugenio. De las pruebas penales. Tomo II. De la prueba en particular. , Bogotá, Editorial TEMIS. 1982. P 43 98 Ibid p. 7 y 8. 101 En esta forma, la dificultad de obtener el conocimiento total de un hecho, obliga a la autoridad judicial a obtener el mayor número de instrumentos probatorios para crear su propia certeza, orientado por el sistema de valoración de la sana crítica. Este sistema permite, que tras analizar todo el acervo probatorio recaudado, el juzgador pueda realizar una operación de raciocinio lógico deductivo, cuyo resultado determinará la forma en que se cometió el delito, su autor, y demás circunstancias. 4.1.2. Principios de la prueba en materia penal. En el proceso penal, el régimen probatorio resulta más exigente frente a otros tipo de procesos. Fundamental resulta, entonces, el principio del debido proceso, consagrado en el artículo 29 de la Constitución Política: “. Nadie podrá ser juzgado sino conforme a leyes preexistentes al acto que se le imputa, ante juez o tribunal competente y con observancia de la plenitud de las 102 formas propias de cada juicio….”. En el mismo sentido, y siguiendo lo determinado por la Norma de normas, el artículo 1 del C.P.P. establece: “. Quien sea sindicado tiene derecho a la defensa…. a presentar pruebas y a controvertir las que se alleguen en su contra…..” De acá entonces se pueden determinar, principios que han sido reconocidos como básicos dentro de todo proceso penal, en especial refieriéndose al aspecto probatorio: DERECHO A LA DEFENSA. Siendo derecho primordial del implicado, y según como lo expone Jorge Arenas Salazar en su obra99, el mismo tiene implícitos los siguientes componentes: La petición, debate, práctica y valoración de todo medio probatorio, con observancia de la plenitud de formalidades propias del juicio. 99 ARENAS. Op.cit. p. 103 Permanece como garantía durante todo el proceso aún durante la investigación previa. Lo anterior sin perjuicio de rechazar las pruebas impertinentes, inconducentes, ilegales, prohibidas o ineficaces. Este concepto esta regido por los principios generales de la prueba. De especial interés en el tema resultan los siguientes aspectos: LEGALIDAD: aunque en Colombia el principio de valoración probatoria es el de la sana crítica, no implica que las pruebas no respeten la Ley que las rige, en aplicación igualmente del principio de favorabilidad. Es decir, que si en materia probatoria hay modificación normativa, no pueden aplicarse leyes que sean desfavorables para el procesado, teniendo en cuenta el momento en que ocurrió el acto. 104 Ahora, tal como lo señala el autor antes citado, no puede confundirse LEGALIDAD con ILICITUD, puesto que esta última hace referencia a la irregularidad en el proceso de petición, decreto, práctica y valoración de la prueba, en cuanto este se realice por medios al margen de la Ley, como la utilización de la tortura o la violación de la habitación ajena, entre otros métodos.100 CONDUCENCIA: Fabio Espitia 101 expresa que, la prueba conducente o pertinente es aquella que demuestra el hecho que se pretende probar y crea convicción en el funcionario que debe valorarla. Así, será inconducente la prueba que acredite hechos que en nada importan al asunto que se discute en el proceso. A su vez Devis Echandía102, determina que las pruebas son conducentes por estar permitidas: por que la Ley las enumera taxativamente, por no estar prohibidas para el hecho que se investiga y por que el juez 100 101 FLORIAN. Op.cit P. 597 ESPITIA GARZON, Fabio. Instituciones de Derecho Procesal Penal. Bogotá: Ed. Jdcas Gustavo Ibañez 1998. 105 reconoce valor probatorio, en el evento en que la Ley le ha dado tal libertad, tal como lo determina el artículo 253 del C.P.P. CONTRADICCION: con miras a obtener la mayor claridad en el proceso penal, se hace necesario que todos los intervinientes, en calidad de sujetos procesales, tengan la posibilidad de acceder a las pruebas recaudadas, con el fin de discutirlas según su interés y teniendo en cuenta las normas propias de cada una de las mismas. LIBERTAD PROBATORIA. Artículo 253 C.P.P. “Libertad probatoria. Los elementos constitutivos del hecho punible, la responsabilidad del imputado y la naturaleza y cuantía de los perjuicios podrán demostrarse por cualquier medio probatorio, a menos que la Ley exija prueba especial y respetando siempre los derechos fundamentales” (La negrilla es nuestra). 102 DEVIS ECHANDIA, Hernando. Teoría General de la Prueba Judicial Citado por ARENAS op.cit. p. 608 106 Artículo 248 C.P.P. “Medios de prueba. …..El funcionario practicará las pruebas no previstas en este código, de acuerdo a las disposiciones que regulen medios semejantes o según su prudente juicio, respetando siempre los derechos fundamentales.” El ordenamiento entonces, ha determinado que los sujetos procesales podrán solicitar la práctica de cualquier prueba que sea necesaria para determinar lo requerido, según su posición procesal. Esto implica tener en cuenta a su vez, lo relacionado con la práctica de pruebas especiales, en casos estrictamente considerados por la Ley cuya verificación probatoria implica un medio determinado, es decir si se requiere prueba exclusiva y excluyente.103 Adicionalmente es necesario tener en cuenta que la Ley, no prohiba la práctica de esa prueba, o la misma contravenga los derechos fundamentales consagrados constitucionalmente. Esto es lo referido al proceso de legalidad comentado anteriormente. Así, señala Arenas que 107 no procederá la prueba cuando se refiera a imputaciones de hechos punibles que fueron objeto de Sentencia Absolutoria, preclusión de la investigación o cesación de procedimiento y los referidos a la vida sexual, conyugal o de familia del sujeto pasivo de delitos contra la libertad y pudor sexuales.104 4.1.3. El Método Reconstructivo. Es claro que el Derecho Procesal es una ciencia reconstructiva por cuanto que tiene por objetivo la verificación de hechos pasados, con el apoyo de ciencias auxiliares como la historia, la medicina legal y la psicología entre otras, las cuales al entrecruzarse proporcionan datos e información y por lo tanto documentos que suponen la posesión o reconocimiento de datos, huellas o rastros de las cosas, seres o hechos del pasado. Nos acogemos entonces a lo expresado por Dellepiane: 103 104 ARENAS, Op.cit p. 611 Ibid p.599 108 “Es un método compuesto que a semejanza del método estadístico utiliza y combina varios procedimientos lógicos, por no decir todos los procedimientos lógicos conocidos”105. “...cumple agregar que no deja de tener cierta semejanza con el método que los lógicos y psicólogos, han estudiado bajo el nombre de método deductivo de composición o de construcción; procedimiento por medio del cual, se llega a determinar que causas han podido producir un afecto complejo, en el caso de la composición de causas y efectos”106. El proceso de Reconstrucción consiste, no en una operación material, si no mental, de la cual se derivan los siguientes pasos: Buscar los rastros. 105 106 DELLEPIANE. Antonio. Nueva Teoría de la prueba. Bogotá: Editorial Temis. 1997 p.24 Ibid. p.25 109 Recolección de los mismos, directamente o con el auxilio de peritos e inspección in situ. Conservación de los rastros. Descripción o representación figurada de los mismos. Descripción del lugar y reproducción figurada por medio de la fotografía, etc. Observación y estudio de los rastros directamente o auxiliándose con peritos ad hoc. Formación de inferencias e hipótesis basadas en los rastros recogidos. Crítica de los mismas para establecer su valor. 110 Comparación y combinación de inferencias para investigar el acuerdo o desacuerdo de los hechos (aplicación del principio de confirmación) Exclusión de hipótesis contradictorias (de intervención del azar, de la falsificación de prueba, etc) De esta forma concluimos, que a la certeza podemos llegar por medio de estudio minucioso de todos los hechos que forman parte del expediente penal, específicamente a través de un estudio y correcta valoración de los distintos medios de prueba. 4.2. EL DICTAMEN PERICIAL El juez, en su tarea de llegar a la verdad, solo esta obligado a conocer la Ley, pero en la reconstrucción que se realice durante el proceso pueden aparecer hechos o situaciones que para su comprensión o esclarecimiento requieren de cierta complejidad que cognoscitivamente no está al alcance 111 del juzgador, por requerir conocimientos técnicos específicos. Por eso, el Código de Procedimiento Penal, establece en su artículo 264 que en el evento en que dentro del proceso se requieran conocimientos técnicos o científicos especiales, el juez podrá decretar la prueba pericial. En este sentido, el juez podrá solicitar a quienes se consideren expertos en determinado campo, un concepto que le permita entender, bajo las reglas de la sana crítica, orientar su criterio, como consejeros de este. En este sentido “lo que el perito aporta al juzgador no son los hechos sino sus conocimientos técnicos o artísticos sobre los mismos que puedan resultar necesarios para su correcta aplicación...”107. Los peritos actúan como auxiliares de la justicia, lo cual de entrada esta determinando que el valor que el resultado puede arrojar no es absoluto, porque todo concepto que finalmente comprometa la libertad de una persona debe estar fundado en la ley, por lo que de entrada debe considerarse el dictamen como un valor de probabilidad. Con esto no se 112 pretende tasar el valor de la prueba, como se determinaba en el sistema de la tarifa legal. Sin embargo, no puede rechazarse esta prueba, es innegable reconocer que la posibilidad de producir certeza en el juzgador, es más accesible si se proporciona un mayor número de pruebas, porque el juez, deberá analizarlas en conjunto, por lo que cada una puede resultar el complemento de otra. 4.2.1.Fases del dictamen pericial. La doctrina, en especial el Dr. Jorge Arenas Salazar ha establecido 4 fases dentro de la producción de la prueba pericial: PREPARACION : Procedencia y oportunidad Petición 107 Jurisprudencia T.C. 18 Marzo de 1993 tomado de MUÑOZ SABATÉ, Luis. Técnica probatoria (Estudios sobre las dificultades de la prueba en el proceso). Temis 1997. P.361. 113 Ordenamiento Nombramiento de perito Impedimentos y recusaciones Posesión de peritos Elaboración de cuestionarios Señalamiento de condiciones, entrega y fijación de plazo. PRODUCCION: Proceso de conocimiento Sujeto cognoscente Objeto por conocer Relación sujeto – objeto Moralidad del perito Elaboración del escrito del peritaje Entrega oportuna CONTROVERSIA: Examen preliminar 114 Publicidad y traslado Petición de aclaraciones, adiciones e impugnación VALORACION 1.2.1.1. Fase de preparación. Dentro de esta se determina la procedencia de la prueba, en concordancia con lo establecido por el artículo 264108. En esta forma, si el juez considera pertinente su práctica, la decretará, presentando al perito el cuestionario que debe absolver. Refieriéndonos al dictamen pericial, y siguiendo lo establecido por el artículo 268 del C.P.P., el cuestionario, que determine el juez o presenten las partes, debe orientarse entre otros, por los siguientes aspectos: 1. Identificación de la víctima 108 Artículo 264 C.P.P. “ Procedencia. Cuando se requieran conocimientos especiales científicos, técnicos o artísticos, el funcionario judicial decretará la prueba pericial”., 115 2. Rasgos de la personalidad de la víctima que permitan deducir intentos suicidas: a través de su historia psicológica (terapias o tratamientos preexistentes), entrevista con los familiares, etc. 3. Determinar si, desde el punto de vista psicológico pudo haber sido suicidio. 4.2.1.2 Producción de la prueba 4.2.1.2.1 Proceso de conocimiento 4.2.1.2.2 Idoneidad del perito. El objetivo del perito es entonces, aportar nociones técnicas al juez. Por ello debe reunir una serie de características esenciales, no sólo relativas a su capacidad en general (mayor de 18 años, inscrito o no, no incurso en impedimentos ni recusaciones), sino a su especificidad: tener especiales capacidades, conocimientos determinados o aptitudes relacionadas con su ciencia. 116 Adicionalmente, se le exige que en el momento de presentar el dictamen al juez, que lo haga en forma seria y entendible. Sin embargo, no es limitante ni para el juez ni para las partes, el hecho de no existir dentro de la lista de Auxiliares de la justicia (peritos), se podrá proponer la posesión de un perito no inscrito, que llene los requisitos necesarios para desarrollar el dictamen que se requiera. 4.2.1.2.3 Objeto por conocer. El objeto por conocer, es sobre el que recae la peritación. En procura de la realización óptima del mismo, debe mantenerse, no solamente intacto el objeto, sino conservar la identidad del mismo (en el caso de entrevistas a personas, que no existan suplantaciones). Es importante, para el caso que nos ocupa, tener en cuenta, en especial frente al PAP, que hay ciertos objetos que no pueden conocerse en forma absoluta, así, las conclusiones que de 117 este se deriven solamente podrán ser aproximadas, que son una probabilidad, dejando márgenes de duda no solamente al perito sino al funcionario109 Por ello y citamos textual “el perito está en el deber de advertir la naturaleza del objeto que se quiere conocer y los márgenes de duda insuperables que en sus estudios quedan, para que el juez o el fiscal dimensionen adecuadamente el alcance de la información que por esta vía les llega” 110 . Ahora, es importante que el perito conozca la complejidad que puede revestir el objeto por conocer, y que el mismo este preparado para asumir este conocimiento, es decir, que esté verdaderamente capacitado acertado. 109 110 ARENAS. Op.cit p.152. Ibid p.153 118 para brindar un concepto Es conveniente anotar que en algunos peritajes, en especial en el PAP, el experticio (psicólogo) necesita tener conocimientos previos antes de iniciar el procedimiento111 en especial en lo referente a las entrevistas, es decir tener referencias de satisfactorios. la persona, para obtener resultados Así mismo, el espacio para realizar el dictamen debe ser el adecuado según el tema y las técnicas que se empleen, por ejemplo, siguiendo el criterio de Arenas, aplicado al PAP, es inconveniente obtener una entrevista imparcial si se realiza la misma en el lugar donde la víctima fue hallada. En ese orden de ideas, la misión del perito a través del PAP, es procurarle al juez una serie de criterios técnico – psicológicos, para que a partir de ellos, y de la conclusión del 111 Ibid p.153 119 experticio, se logre determinar si se esta ante un caso de suicidio o de homicidio 4.2.1.3 Moralidad del perito. De vital importancia para mantener la transparencia del proceso penal, es necesario señalar que el perito debe reunir ciertas calidades morales, para diferenciarlas de las profesionales o científicas, que le permitan producir un concepto que realmente permita al juez acercarse a la verdad o a la certeza alrededor del hecho que se investiga. En nuestro concepto, siguiendo adicionalmente lo establecido por Arenas 112 serían dos tales calidades: La imparcialidad: es primordial evitar que el perito tenga interés en el resultado, no sólo del dictamen sino del proceso. Por ello, vale la pena hacer énfasis nuevamente en las causales de recusación y los 112 Ibid p.163 120 impedimentos, que deben ser tenidos en cuenta a la hora de nombrar un perito. La honestidad ante el juez: nos parece importante, en especial frente al PAP, que el perito le señale claramente al juez que el grado de probabilidad o certeza que producirá su concepto, es necesario aclarar, en aras del derecho de defensa y el principio del in dubio pro reo, que el resultado del peritaje puede ser aproximado pero no definitivo, y que el mismo le otorga un campo de apreciación un poco más amplio acerca de los hechos que se ventilan en el proceso, pero que en ningún momento puede darle una conclusión única y exclusiva. Obviamente, sin perjuicio de la no obligatoriedad del dictamen pericial por parte del juez. 4.2.2 Controversia. A partir de esta etapa, el perito deja de ser el sujeto principal para darle paso al juez y a los demás sujetos procesales, para entrar a analizar el resultado que el primero ha producido. 121 Dentro de este proceso, el primer paso que debe dar el juez es verificar que el dictamen cumpla con las partes esenciales, anteriormente mencionadas, debe, entonces, examinar “ la coherencia del proceso cognoscitivo y su congruencia con las conclusiones, y todo el conjunto con las preguntas contenidas en el cuestionario”113. El resultado del dictamen deberá ser serio, concreto y sobre todo, claro para permitir la comprensión del juez. Adicionalmente, una vez analizados estos aspectos, el juez dará el respectivo traslado a las partes, para que ellas discutan el contenido del mismo. Este es el desarrollo del principio de contradicción, dónde no sólo se le da la oportunidad a las partes de acceder a las pruebas, sino que están siendo otra forma de 113 Ibid p.165 122 control, adicional al juez, para garantizar que las mismas estén acordes a los principios fundamentales del proceso penal y a los hechos que se discuten. En este momento se hace vigente nuevamente lo mencionado acerca de la aceptación y obligatoriedad del dictamen, porque las partes podrán, pedir aclaraciones, correcciones u objetarlo, si no consideran pertinente o acertado el resultado producido. 4.3. EL INDICIO El cuestionamiento del PAP como medio de prueba necesariamente nos conduce a realizar un análisis del indicio, por cuanto podría llegar a considerarse que el resultado de ella sea un indicio grave de responsabilidad. 123 Para el estudio de este medio de prueba, partimos de la definición de Jorge Arenas Salazar para quien el indicio “es el medio de prueba resultante de una operación lógica mediante la cual, a partir de una circunstancia fáctica plenamente demostrada en el proceso, se infiere, la existencia de otro hecho llamado “indicado”114. En el mismo sentido, el Código de Procedimiento Penal en el artículo 303 expresa que “todo indicio ha de basarse en la experiencia y supone un hecho indicador, del cual el funcionario infiere lógicamente la existencia de otro” Así mismo el ordenamiento exige como uno de los requisitos para dictar resolución de acusación y medidas de aseguramiento la existencia de por lo menos un Indicio Grave de Responsabilidad; es lógico por cuanto la sanción penal, conlleva la limitación de la libertad del hombre y por tanto un cambio radical en su entorno, que no podría realizarse sin un 114 Ibid p.306 124 referente material que lo sustente, si así se hiciere se violarían los Derechos Humanos Fundamentales. En materia penal, y a diferencia del Procedimiento Civil, la ley califica el indicio, como GRAVE, ¿pero que significa este calificativo? Para distintos doctrinantes, entre ellos Hernando Londoño Lozano el indicio grave “resulta ser un calificativo sobre el cual no se pueden suministrar derroteros precisos para su calificación, todo depende de la prueba que se haya originado… Es por tanto una valoración subjetiva, en la cual el criterio para clasificarlo de esa manera estriba en su seriedad y fuerza de convicción”115. Por el contrario, para Germán Pabón 116 el término no es lo suficiente claro y explicativo y por tanto el legislador debería sustituirlo por el término connotar, entendido éste como lo que debe expresar, mostrar o revelar el indicio. 115 PABON GÓMEZ, Germán. Lógica del indicio en materia criminal. Bogotá: Ediciones jurídicas Gustavo Ibañez.1994. p.388 125 En nuestro concepto, la gravedad del indicio dependerá de dos elementos: La cantidad de hechos indicantes que proporcionen certeza para el juez y el análisis que el juez realice de ellos, de acuerdo a cada caso, entendiendo que no deja de ser subjetivo, por cuanto que el concepto de grave varía en cada persona, pero es allí donde entra a jugar el papel serio y lógico del juez. Como vemos entonces, este medio de prueba debe partir de un hecho conocido y probado por testimonios, documentos, peritajes, entre otros; para llegar a uno desconocido (responsabilidad en cabeza del sindicado, móviles del crimen y su ejecución). De esta forma el juez debe analizarlos en conjunto y no separadamente, para que en su proceso lógico deductivo pueda acercarse a la verdad material del caso. 116 Ibid p.390 126 Según parámetros de Jorge Arenas Salazar (1996), las distintas clases de indicios pueden ser: Indicio de Preparación o antecedentes: son los actos preparatorios que ejecuta el agente para cometer el delito, como el plan de ejecución y las medidas necesarios para la comisión del hecho punible. Indicio de Declaración de Intención: es la revelación de los propósitos o proyectos que puede ser una manifestación pura y voluntaria Pag 349 Indicio de Amenaza: que se da cuando ha existido una amenaza de crimen con la intención adicional de crear una alarma. 350 Indicios Concomitantes: son los más cercanos al hecho punible, por ejemplo el número de heridas encontradas en el cadáver, el instrumento empleado, etc. 127 Indicio Subsiguiente: se concreta “ en la conducta posterior de la conducta de la persona indicada, en el cambio de sus costumbres, en la restitución y muchos otros”117 Indico Real o Material: Los medios de los cuales se vale el agente para materializar al conducta Ejemplo: el arma homicida. Determina la relación entre el sindicado y el cuerpo del delito. Indicio de Capacidad Personal: hace referencia a cualidades técnicas que se emplean en la consumación de un delito, por ejemplo el uso de sustancias venenosas, que no son detectables a simple vista. Deducimos entonces, que pueden existir varios hechos indicantes, que debidamente probados, pueden llegar a conformar el hecho a descubrir, así como también pueden existir varios indicios, que se presentan cuando no es suficiente un indicio para crear la certeza en el juez. De acuerdo 117 Ibid p.370 128 con Dellepiane “cuando los indicios no revisten ese carácter (vehementes o necesarios) se necesitara del concurso de varios para llegar a la certeza; no pudiéndose racionalmente fiar número alguno mínimo, necesario y suficiente para producir convicción. Ese número variará según las circunstancias de cada caso, o sea, según la fuerza o peso de los indicios que entran en la combinación”118. 4.4 LA AUTOPSIA PSICOLOGICA: ¿ DICTAMEN O INDICIO? Habiendo analizado estos dos medios de prueba, y aplicados al PAP podemos llegar a dos conclusiones: La autopsia psicológica, es un dictamen pericial, es decir se podría constituir como prueba autónoma, por cuanto es un concepto de carácter técnico – científico, rendido por un perito experto en un determinado 118 DELLEPIANE Op.cit p.95 129 tema, en este caso un psicólogo o psiquiatra, encuadra en la forma legal del artículo 267 del C.P.P. Teniendo en cuenta que, dentro del ordenamiento penal y tal como se señaló en el capitulo correspondiente a la prueba dentro del proceso penal, nada impide que los diferentes sujetos procesales, soliciten la práctica de esta prueba. La conclusión del PAP como producto de entrevistas, documentos, experticios, huellas, necropsias, se constituiría como un hecho indicador o indicante que llevaría al juez al hecho desconocido: homicidio o suicidio. Dellepiane, en su “Nueva Teoría de la Prueba” propone invertir el orden natural de la didáctica de la prueba, toda vez que afirma que se le ha dado más importancia a los medios de prueba directos (documentos, peritajes, inspección ocular) dejando de lado el indicio como medio de prueba. Esto se verifica en nuestro código de procedimiento penal, en donde este medio es regulado solo por tres artículos (301,302 y 303). Así vemos una clara contradicción, existe poca regulación, pero al mismo 130 tiempo el artículo 388, tal como lo señalabamos antes, le da una importancia superior, calificándolo como grave y necesario para dictar medidas de aseguramiento y resolución de acusación. Propone Mittermaier, citado por Dellepiane, “el testimonio de los testigos y todos, absolutamente todos los medios probatorios se resuelven en verdaderos indicios de culpabilidad o inocencia, al ser apreciados para la formación de nuestros juicios”119 lo que consideramos una posible solución a la contradicción que encontramos. Efectivamente si se hace un análisis del tema probatorio, todas las pruebas formarán un indicante que llevarán al juez a vislumbrar el hecho desconocido. Así lo reitera el mismo Dellepiane, al indicar: ”Ninguno de los medios de prueba es autónomo en absoluto; solo es indispensable relativamente hablando. 119 Todos los llamados directos o naturales Ibid p. 53 131 requieren el auxilio del indiciario o artificial, y, por su parte, este también necesita el apoyo de los directos”120. Esta teoría implicaría un cambio en el ordenamiento jurídico y una nueva posibilidad de llegar a la certeza de forma más diáfana, clara y justa, tanto para el sindicado como para las víctimas. En esta forma, consideramos que la autopsia psicológica es un dictamen pericial, cuyo resultado se podría constituir como un indicio grave de responsabilidad. 120 Ibid p.53 132 CONCLUSIONES La sociedad colombiana sumergida en la impunidad consecuencia de homicidios, secuestros y muertes dudosas regulares y cotidianas reclama no sólo una “cascada” de normatividad justa y aplicable a cada caso, si no también pide que aquellos que legislan y aplican las leyes, tengan la preparación y conciencia de su contexto histórico social además del conocimiento integral de las ciencias humanas. En el caso especifico del Procedimiento Penal el tema del papel del juez asume una importancia sin límites, así lo reitera el estudio del Ministerio de Justicia de marzo de 1991, por medio del cual establece el “perfil” para el cargo de Juez Penal, allí se alarma de la necesidad imperante de que el juez no sólo conozca el Derecho si no también de Lógica Jurídica, 133 Criminalística, Etica Profesional, Sociología, Psicología, Economía, Valores, Historia, Filosofía del Derecho, Ciencia Política. Todo lo anterior lo concreta en 3 perfiles: Perfil Ocupacional: “El juez penal debe presentar como características personales unas condiciones físicas normales, equilibrio emocional, dominio de si mismo, capacidad para tomar sus decisiones, sinceridad, rectitud y sentido práctico”121. Perfil Corportamental: “El juez penal debe estar dispuesto a desempeñar el rol de orientador, planeador, de jefe de oficina, de psicólogo social, y esta obligado a generar nuevas y mejores metodologías de trabajo, orden y disciplina”122. 121 122 MINISTERIO DE JUSTICIA. Perfil para el cargo de Juez Penal. 1991 Ibid p.138 134 Perfil Prospectivo: Para poder mantener la vigencia personal y profesional en la sociedad contemporánea, el juez debe presentar como características personales la capacidad para vencer obstáculos, la vocación por el estudio, la vocación política y social, el dinamismo transformador de las relaciones sociales, del ordenamiento jurídico y de las instituciones políticas”123. En ese orden de ideas, los jueces en la medida en que tengan una visión amplia de nuevos métodos de investigación, como el PAP, permitirán al Procedimiento Penal estar acorde con la legislación internacional, y con una mayor justicia social, integrando diferentes ciencias sociales. Teniendo en cuenta, que desde la Constitución Política, en su artículo 29, al contempla el debido proceso, el cual desarrolla a su vez, en materia penal, el principio del in dubio pro reo y la libertad probatoria, deben 123 Ibid p. 137 135 permitirse la aplicación de los avances de las distintas ciencias dentro del proceso penal, en aras de procurar la efectividad de los mismos. La efectividad de la justicia material, requiere que se les permita tanto al sindicado como a los sujetos de la parte civil, acceder a herramientas novedosas, que aunque no las contemple específicamente el legislador y sean de poco conocimiento dentro del mundo procesal, no contrarían los principios fundamentales del derecho penal, sino que por el contrario, facilitan su cumplimiento. Para esto somos conscientes de que el gobierno no puede regular un procedimiento que no es general y que aún no ha sido valorado por expertos con el objeto de determinar el Protocolo único de Procedimiento de Autopsia Psicológica para nuestro país; sumamos a ésta dificultad y de acuerdo con el doctor Jorge Oswaldo González citado en nuestro trabajo investigativo, la falta de mayor recurso humano en el Instituto Nacional de Medicina para investigación y posterior desarrollo de nuevas 136 técnicas; pero no nos desalentamos en nuestra idea de que se realice un esfuerzo mayor para mejorar nuestro sistema judicial colombiano. Recomendamos que más que copiar un modelo de protocolo de autopsia psicológica, se siga el ejemplo de Cuba, donde se hizo un estudio científico de los distintos protocolos a nivel mundial, creando uno adoptado a sus instituciones y realidad social. Con este trabajo de tesis pretendimos incentivar la interdisciplinariedad científica tanto en el Derecho como en la Psicología, y en sus facultades en la Universidad Javeriana, con el objetivo de que cada una de las ciencias, encuentren nuevos horizontes en común que les permitan hallar elementos aplicables en las dos áreas y un mejor estudio de la conducta humana. Finalmente, esperamos que este trabajo de tesis sea la continuación de nuevos interrogantes no sólo en la Universidad, si no también en las 137 distintas instituciones y personas que tienen la responsabilidad de dar una mejor y más eficaz justicia en Colombia, considerado en el mundo como un país ejemplo de injusticia, desinterés social y uno de los más violentos del mundo. 138 BIBLIOGRAFIA ARENAS SALAZAR, Jorge. Pruebas Penales. Bogotá: Ediciones Doctrina y Ley. 1996. ARENAS, Antonio Vicente. Comentarios al Código Penal Colombiano. Tomo II. Parte Especial. Bogotá: 1986. BARRERA DOMÍNGUEZ, Humberto. 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Bogotá: Editorial Temis, 1992 141 SUICIDIOS EN SANTAFE DE BOGOTA, ENERO A DICIEMBRE DE 19981999 ARMA O CASOS 1997 CASOS 1998 CASOS 1999 MECANISMO ARMA DE FUEGO 50 149 126 TÓXICOS 19 65 80 ASFIXIA MECANICA 13 113 92 OTRAS 13 34 35 TOTAL 100 361 333 333 TOTAL 100 OTRAS 13 35 34 92 ASFIXIA MECANICA 13 TÓXICOS 19 ARMA DE FUEGO 113 80 65 126 149 50 0 CASOS 1997 361 100 200 CASOS 1998 142 300 CASOS 1999 400 HOMICIDIOS EN SANTAFE DE BOGOTA, ENERO A DICIEMBRE DE 1998-1999 ARMA CASOS 1997 CASOS 1998 CASOS 1999 ARMA DE FUEGO 2115 1754 1800 ARMA 573 573 532 CORTOPUNZANTE ARMA CONTUNDENTE 42 55 39 OTRAS ARMAS 70 100 106 TOTAL 2800 2482 2477 3000 2500 2000 1500 1000 500 0 ARMA DE FUEGO ARMA ARMA CORTOPUN CONTUNDE OTRAS ARMAS TOTAL CASOS 1997 2115 573 42 70 2800 CASOS 1998 1754 573 55 100 2482 CASOS 1999 1800 532 39 106 2477 143