La historia que no se contó de la Mediación no se contó de la

OSORNO, Domingo 8 de junio de 2008
6
7
Gerson Candia Morales
A
l cumplirse 30 años de un hecho
tan significativo para nuestro
país como fue la iniciación de la
mediación papal en el conflicto
entre Chile y Argentina
en 1978, la Universidad
San Sebastián sede
Osorno y la Fundación
Monseñor Francisco
Valdés Subercaseaux
organizaron una conferencia
titulada
“Mediación
Papal,
remembranzas de un
protagonista” a cargo
del general de Ejército
(r), Ernesto Videla
Cifuentes.
Este hombre de
armas fue el encargado de mostrar detalles
inéditos de lo que fue
el “entre bastidores”
del conflicto, ya que en esa época cumplió importantes labores en la
Cancillería Chilena.
En este sentido, el general Videla
demoró cerca de ocho años en escribir el
libro “La desconocida historia de la
Mediación Papal” (homónimo a la conferencia), tomando en cuenta su protagonismo en el conflicto vivido por
Argentina y Chile en diciembre de 1978,
por diferencias limítrofes en el Canal
Beagle.
Rememorando y contextualizando el
carácter estratégico que tuvo la ciudad
de Osorno dentro de este conflicto, el
consejero
de
la
Fundación
Monseñor
Francisco
Valdés
Subercaseaux, Patricio
Firma de acuerdo
de paz entre los
cancilleres
Caputto y Del
Valle y su santidad Juan Pablo II.
El conflicto en ojos de un reportero osornino
L
os vientos de guerra y sicosis
colectiva se respiraban entre los
osorninos. El miedo a un conflicto de guerra con nuestros
vecinos era inminente. Todo se
vio acrecentado en diciembre
del 78, con secretas maniobras y desplazamientos militares en el sector de Puyehue.
En los techos del Hospital Base de Osorno aparecieron dibujadas gigantes cruces de color
rojo. Todo para indicar que se trataba de un
espacio humanitario y de atención a pacientes
en caso de conflicto.
En radio Sago, conocida en la telefonía sureña
El general (r) Enesto Videla Cifuentes fue
subsecretario de Relaciones Exteriores
en 1978 y vivió en carne propia el conflicto limítrofe con Argentina ese año.
Esta semana presentó en Osorno su
libro donde cuenta entretelones de lo
que fue esta casi guerra entre dos países
“
hermanos.
La historia que no se contó dee la Mediación Papal
sector y nuestras fuerzas eran miserables...
Anuch, se refirió
”
al importante papel
que jugó el entonces
obispo de Osorno en ese periodo.
“Ante la dramática situación que vivía
el país, el cardenal Raúl Silva Henríquez
acogiendo la solicitud de monseñor
Francisco Valdés, pidió formalmente a
Juan Pablo II que mediara en el conflicto, el que aceptó de inmediato y nombró
al Cardenal Antonio Samoré para que
asumiera en su nombre las gestiones de
mediación. Este hombre de fue uno de
los impulsores de la paz entre ambas
naciones, pero no hubiera sido posible
sin que se manifestara el entonces obispo Valdés”, aclaró.
DETALLES
En entrevista con T&R, el general en
El papel de
Monseñor Valdés
fue clave.
Conflicto limítrofe entre Chile y Argentina en diciembre de 1978, bajo el prisma de un protagonista
Por los conflictos con Perú y Bolivia, dejamos de lado
el frente oriental... nos vimos desprovistos en todo este
Ernesto Videla
Ex subsecretario RREE
como la onda azul y verde, transmitían instrucciones en clave al contingente de soldados y reservistas del Ejército, para estar en
contacto en caso de partir al frente de combate.
El 78 se vio acrecentada la sicosis de guerra en
las calles osorninas. Todo, adornado con el
mito urbano de las urnas en el sector cordillerano con el vecino país, en caso de trasladar a
las víctimas del enfrentamiento armado. En los
templos católicos y evangélicos oraban por la
paz. Y los gritos de guerra fueron aplacados
por los oficios de Santidad Juan Pablo
Segundo.
retiro comentó sobre los detalles desconocidos de esta histórica mediación, que
tuvo a Chile a punto de participar en un
conflicto bélico.
“Estos son detalles completamente
desconocidos por la ciudadanía, porque
aquel que intente llegar al libro e incursionar en él, se va a dar cuenta que no
era conveniente divulgar antecedentes.
Lo que hice fue dejar pasar el tiempo,
que se tranquilizaran los ánimos y se
restituyera la relación con un país tan
importante como es Argentina. Esto es
necesario para sacar una experiencia
triste y otra provechosa. Para eso se tienen que conocer lo que pasó, pero en su
momento y creo que este es el momento”, apuntó.
Según Videla, hacia 1973, nuestra
nación tenía conflictos limítrofes con
Perú y Bolivia. “Lo que hace Chile es
potenciar el norte, para que no haya conflictos en ese sector. En ese tiempo nuestro país estaba en condiciones muy
miserables y dejamos de lado el frente
oriental, porque nos abocamos al juicio
del Canal Beagle, en una corte internacional. Nadie pensaba que Argentina iba
a desconocer una sentencia. Aquí se
juega una gran carta política, que se
potencia el norte y esa fuerza tiene que
mantener al país. Pero cuando viene la
crisis del 77, nos vimos desprovistos en
todo el sector oriental, lo que nos pone
en contra, después que Argentina desplazara sus fuerzas hacia nuestra frontera”.
OSORNO
-¿Qué papel jugó nuestra ciudad en
este conflicto?
-Los que tienen más años y recuerdan
Ernesto
Videla, un
protagonista
de la historia, dictó una
charla y presentó su
libro en
nuestra ciudad la semana recién
pasada.
lo que pasó, tendrán en su mente la
gallardía de la gente de la ciudad de
Osorno y de la zona en general. Esta
provincia era una ciudad que tenía una
línea de operaciones importante, pero la
mayoría de población se mantuvo aquí y
no dejaron el lugar. Se quedaron a defender su tierra. Qué hermoso es ver a
gente que defiende su tierra, pero lo que
más alegra es que no ocurrió nada y se
ganó la batalla de la paz.
Videla aclaró que las posiciones entre
Chile y Argentina eran demasiado contrapuestas. “Lo único que podía unirles,
era que los dos países estaban en el
Hemisferio Sur, nada más”.
Todo esto comenzó en 1971, cuando
Chile y Argentina solicitaron a la corona
británica mediar en el conflicto por la
soberanía del Canal Beagle y la territo-
rialidad de las islas Nueva, Picton y
Lenox. Seis años después, en 1977 el
laudo declaró ese territorio como chileno
y la Argentina del almirante Rafael
Videla no lo reconoció. Desde ese
momento, las relaciones entre ambas
naciones pendieron de un hilo, tanto así
que estuvieron a horas de enfrentamientos militares.
CONFLICTO
- ¿Cuál fue el momento más oscuro de
esta negociación?
-Los pasajes que tiene son muy curiosos e inéditos con muchas circunstancias
para analizar. Existen dos periodos críticos que corresponden a fines del año 77,
que es un tiempo que no se conoce tanto
y diciembre de 1978, que es el que se
habla hasta el día de hoy. En el 77 fue
muy delicado, porque Argentina y Chile
no tuvieron preparación para la guerra,
con toda una acción sicológica de los
medios de comunicación. Muy por el
contrario, rápidamente se desplegaron
las fuerzas armadas a nuestras fronteras
orientales. Esto hace que se reúnan el
presidente chileno (Augusto Pinochet) y
el argentino (Rafael Videla) en Mendoza
para encontrar una salida y remediar el
conflicto.
Según las investigaciones de Videla,
Argentina tenía planeado su propio “Día
D”, que correspondía al día 22 de
diciembre. “Si no existe una gestión del
gobierno chileno en ese momento determinado, no habríamos tenido la respuesta argentina, que es la que hace comprender que el conflicto es inminente en
pocas horas”.
Pinochet se reúne en Santiago con el
Estado Mayor y los generales para analizar la situación.
“Ya había unidades que se desplazaban, los capellanes despedían a las tropas, se bendicen los estandartes de
combate, salen ataúdes desde las ciudades. La guerra ya estaba lanzada. Ese
día el general Pinochet estaba pensativo
y en una actitud de análisis se puso la
mano en el abdomen y dijo que sentía
algo dentro de él, que le decía “Démosle
un tiempo a esta nota”. Esa era la que
invitaba a Argentina a ir al Tribunal
Internacional, situación que haría que
inmediatamente se entrara en conflicto.
“Luego de eso armamos una nota el 20
de diciembre, era un mensaje conciliador, la llamamos ‘La Nota de Navidad’.
Argentina nos respondió el 21 diciéndonos que no aceptaba la mediación y que
la guerra era inminente, ahí nos dimos
cuenta que el día del ataque argentino
era el 22 de diciembre. ‘La Nota de
Navidad’ fue vital para ver en qué estaba Argentina y nos dio tiempo para alertarnos, sino ellos hubieran atacado sin
previo aviso y Su Santidad Juan Pablo II
PRESENTIMIENTO
Un día clave, según el texto es el 18 de no hubiera alcanzado a mediar la paz, a
diciembre de 1978. El presidente través del Cardenal Samoré”.
-¿Por qué? ¿A cuántas horas?
-A un suspiro. Yo no tengo nada que
especular, esta historia está argumentada, todos los antecedentes son de la
época, son los análisis de las informaciones que aparecieron en los medios. Si
hay algo que asegure la paz, esa fue la
intervención de Chile para evitar el conflicto. En este sentido, el principal conductor fue el general Pinochet para evitar el conflicto, en esto no hay ninguna
duda. Los antecedentes están. Nunca
una guerra es buena.
El escritor confiesa que el 2 de noviembre de 1977, en el acta de Puerto Montt
que convocó a Chile y Argentina, este
conflicto se acrecienta, pues no se reconoce el referendo.
“Argentina se resiste porque lo considera una ‘causes belis’ (causa bélica o de
conflicto). Ese mismo día Chile le ofrece
la mediación de un gobierno amigo, a lo
que ellos se oponen. Luego de eso no
tenemos más salida, nuestras unidades
militares son paupérrimas y Chile trata
de detener el conflicto”, aclaró.