LA SUSPENSIÓN IMPERFECTA DE LABORES Y LA

Anuncio
LA SUSPENSIÓN IMPERFECTA DE LABORES Y
LA VIOLACIÓN AL DERECHO AL TRABAJO
A propósito de la sentencia recaída en el Expediente N° 00328-2011-PA/TC
José Luis Velarde Acosta
Abogado. Estudios de
Maestría y Doctorado
en Derecho
En los últimos días, el Tribunal Constitucional (TC) publicó en su portal
electrónico el texto de la sentencia recaída en el Expediente N° 00328-2011PA/TC. En está se declara fundada la demanda, pues al demandante se le
suspendió en forma imperfecta en sus labores por más de dos años
consecutivos, sin tener en cuenta que la dirección del Ministerio de Trabajo y
Promoción del Empleo (MTPE) había desaprobado el procedimiento de cese
colectivo por motivos económicos y estructurales que inició la demandada, en
virtud del artículo 48º del TUO del Decreto Legislativo N° 728, Ley de
Productividad y Competitividad Laboral, razón por la que el TC concluyó que
existió una vulneración al derecho constitucional al trabajo.
Para arribar a esta conclusión, el Tribunal tuvo en consideración la reiterada
negativa empresarial de incorporar al trabajador a su puesto de trabajo, luego
de que el MTPE desaprobará la solicitud que diera inició al referido
procedimiento y en perjuicio de los distintos requerimientos presentados por el
demandante, luego de la mentada desaprobación. Así, el TC consideró que la
conducta de la empresa impedía que el trabajador preste sus servicios, sin
ponderar que el vínculo laboral continuaba vigente con aquel.
Aquí, más allá de que si estamos o no de acuerdo con el fallo o con la forma de
cómo se fundamentó esta sentencia, resulta oportuno indicar dos cuestiones
transcendentes e importantes.
La primera se encuentra relacionada con el procedimiento de extinción de los
contratos de trabajo por causas objetivas vinculadas a los motivos económicos,
tecnológicos, estructurales o análogos, el cual, muchas veces es requerido por
los empresarios ante situaciones de
coyuntura económica nacional o
internacional. Estas causas objetivas de extinción del vínculo laboral,
únicamente proceden en aquellos casos en los que se comprenda a un número
de trabajadores no menor al diez (10) por ciento del total del personal de la
empresa. Para tal efecto, la empresa debe brindar al sindicato o a los
representantes de los trabajadores la información correspondiente, vale decir,
los motivos que se invocan y la nómina de los trabajadores afectados, lo que se
deberá comunicar al Ministerio de Trabajo.
Luego de ello, la empresa iniciará negociaciones con los trabajadores para
acordar las condiciones de terminación de los contratos de trabajo o las
medidas que puedan adoptarse para evitar el cese de personal. Entre estas
medidas se pueden considerar la suspensión temporal de las labores (en forma
total o parcial), la disminución de turnos, días u horas de trabajo; la
modificación de las condiciones de trabajo; la revisión de las condiciones
colectivas de trabajo, entre otras.
Asimismo, de forma simultánea o sucesiva, el empleador debe presentar al
Ministerio de Trabajo una declaración jurada de que se encuentra incurso en la
causa objetiva invocada a la que acompañará una pericia que acredite la
procedencia de la medida adoptada, la misma que debe ser efectuada por una
empresa auditoria autorizada por la Contraloría General de la República. De
igual forma, el empleador podrá solicitar la suspensión perfecta de laborales
durante el período que dure el procedimiento, solicitud que se considerará
aprobada con la sola recepción de dicha comunicación, sin perjuicio de los
controles posteriores.
De todo lo actuado y presentado en el MTPE, se pondrá en conocimiento de
los trabajadores, con el fin de que estos presenten pericias adicionales en un
plazo de quince (15) días hábiles. Vencido el citado plazo, el MTPE convocará
a reuniones de conciliación a los trabajadores y al empleador, las que deberán
llevarse a cabo dentro de los tres (3) días hábiles siguientes. Posteriormente,
el MTPE se encuentra obligado a dictar resolución dentro de los cinco (5) días
hábiles siguientes, al término de los cuales se entenderá aprobada la solicitud
si no existiera resolución. Ante esta decisión, y en el plazo tres (3) días hábiles,
procede recurso de apelación, el que debe resolverse en el plazo máximo de
cinco (5) días hábiles.
La segunda cuestión es la que se encuentra vinculada a la suspensión perfecta
de labores de los trabajadores inmersos en el procedimiento de extinción de los
contratos de trabajo por causas objetivas. Así, la empresa que se encuentre en
este procedimiento puede solicitar al MTPE la suspensión perfecta de labores
de aquellos trabajadores afectados, lo que equivale a decir que, durante este
procedimiento se puede requerir que cese la obligación de la afectada de pagar
la remuneración correspondiente a los trabajadores inmersos en el
procedimiento, toda vez que no prestan sus servicios de forma efectiva.
De modo tal, aquella suspensión perfecta se diferencia de la suspensión
imperfecta de labores que se caracteriza por el hecho de que el empleador
debe seguir abonando la remuneración (casos típicos de este tipo de
suspensión imperfecta lo constituyente las vacaciones, las licencias con goce
de haber, la licencia por maternidad y enfermedad, entre otras).
Así, lo que resulta interesante, según se logra apreciar o deducir del texto de la
sentencia recaída en el Expediente N° 00328-2011-PA/TC, es el hecho de que
existió una suspensión imperfecta de labores, es decir, durante el
procedimiento de cese colectivo y luego de que esté fuera desaprobado por el
MTPE, la empresa demandada cumplió con el pago de la remuneración, a
pesar que, durante ese tiempo el trabajador no prestó de forma efectiva sus
servicios. Por ello, se observa que, a petición del demandante, el TC sancionó
la afectación a su dignidad y la vulneración al derecho fundamental al trabajo,
en la medida que la empresa demandada era adversa a que se reincorpore de
forma efectiva a su puesto de trabajo.
Vale la pena recordar que el derecho al trabajo es un deber y un derecho. En
efecto es un deber, pues todo ciudadano se encuentra en la obligación de
participar en el desarrollo productivo y sostenible de la sociedad de la cual
forma parte; y es a la vez un derecho, ya que, en la medida que se encuentra
obligado a participar en la actividad productiva y económica que elija, no puede
ser excluido de forma arbitraria o injustificada al momento de prestar sus
servicios.
De tal modo, aquella persona que elija prestar sus servicios de forma
subordinada y en relación de dependencia, en virtud a un contrato de trabajo,
no puede ser despedida sin que exista una causa justa e imputada
debidamente, en el correspondiente proceso administrativo. Y de igual manera,
no podrá ser objeto de actos que atenten contra su dignidad, con el único
propósito de lograr un despido de manera indirecta y hostil. Y es que, a nuestro
juicio, el hecho de que la demandada abone al trabajador la respectiva
remuneración, sin que esté tenga la certeza o seguridad respecto de su
incorporación efectiva o no al puesto de trabajo, genera una incertidumbre
irrazonable, desproporcional y arbitraria que propicia una natural preocupación
y ansiedad en el afectado, más aún cuando existió la desaprobación del
procedimiento de cese colectivo por parte de la autoridad administrativa.
Consiguientemente, creemos que la empresa demandada no sólo atentó contra
el derecho constitucional al trabajo, sino también contra la moral y la dignidad
del trabajador, en la medida que era contraria a otorgarle una ocupación
efectiva, pese a estar obligada a ello, ya que el vínculo laboral continuaba
vigente.
En ese sentido, resulta oportuno recordar que la Constitución determina que la
defensa de la persona humana y el respeto de su dignidad son el fin supremo
de la sociedad y del Estado, y que todos tenemos derecho a nuestra integridad
moral y psíquica; y en función a ello, se reguló en el literal g) del artículo 30 del
TUO del Decreto Legislativo N° 728, Ley de Productividad y Competitividad
Laboral, que los actos contra la moral y todos aquellos que afecten la dignidad
del trabajador son actos de hostilidad equiparables al despido.
En esa línea de razonamiento, debemos afirmar que, si bien estamos de
acuerdo de forma parcial con el fallo del TC, tenemos que señalar que en esta
sentencia apreciamos una insuficiente motivación, pues desde nuestra
particular perspectiva, se desperdició una magnífica oportunidad para atender
una situación de hecho que transgredió la dignidad y la moral de una persona ,
que fácilmente se pudo consagrar en un despido indirecto, vale decir, que en
algunas ocasiones una suspensión imperfecta de labores puede constituir una
violación al derecho constitucional al trabajo.
EXP. N.° 00328-2011-PA/TC
AREQUIPA
FERNANDO JULIO
KCANA PUMACHARA
SENTENCIA DEL TRIBUNAL
CONSTITUCIONAL
En Lima, al primer día del
mes de junio de 2011, la Sala
Segunda
del
Tribunal
Constitucional, integrada por los
magistrados Eto Cruz, Vergara
Gotelli y Urviola Hani,
pronuncia
la siguiente sentencia
ASUNTO
Recurso
de
agravio
constitucional interpuesto por don
Fernando Julio Kcana Pumachara
contra la sentencia expedida por la
Primera Sala Civil de la Corte
Superior de Justicia de Arequipa, de
fojas 127, su fecha 29 de octubre de
2010, que declaró improcedente la
demanda de amparo de autos.
Relaciones
de
Trabajo,
que
desaprobó la solicitud de cese
colectivo, por lo que de conformidad
a ley la Sociedad emplazada debe
proceder a reincorporarlo.
Alega que la Sociedad
emplazada
en
reiteradas
oportunidades
ha
venido
postergando
y
negándose
a
reincorporarlo, argumentando que
no cuenta con el lugar, ni las
labores a ser asignadas, lo que
constituye una vulneración de su
derecho al trabajo.
El Cuarto Juzgado
Civil de Arequipa, con fecha 28 de
abril de 2010, declaró improcedente
la demanda, in límine, por estimar
que conforme a la STC N.º 02062005-PA/TC
la
pretensión
demandada por tener relación con
el
régimen
laboral
privado
corresponde ser dilucidada en el
proceso laboral.
La Sala Superior competente
confirma la apelada por el mismo
fundamento.
ANTECEDENTES
FUNDAMENTOS
Con fecha 26 de abril de
2010 el recurrente interpone
demanda de amparo contra Xstrata
Tintaya S.A. solicitando que se deje
sin efecto la indefinida suspensión
de su contrato de trabajo, y que por
consiguiente se le reponga en el
cargo que venía desempeñando.
Manifiesta que el procedimiento de
cese
colectivo
por
motivos
económicos y estructurales al que
estuvo
sujeto
la
Sociedad
emplazada
culminó
con
la
Resolución Directoral Nacional N.º
032-2009/MTPE/2/11.1,
expedida
por la Dirección Nacional de
Procedencia de la demanda y
delimitación del petitorio
1.
Tanto la resolución recurrida
como, en su momento, la
apelada, han declarado la
improcedencia liminar de la
demanda por considerar que en
aplicación
del
precedente
vinculante establecido en la STC
N.º
0206-2005-PA/TC,
la
controversia debía ser dilucidada
en la vía ordinaria laboral. No
obstante el referido rechazo de
la demanda en el presente caso
corresponde
emitir
un
pronunciamiento de fondo en
atención a la edad del recurrente
(58 años) y a los más de 20
años laborados, de manera que
se
evite
consecuencias
irreparables.
2.
Asimismo de fojas 108 de
autos encontramos el informe
presentado por la empresa
emplazada, en la que realiza
una defensa de fondo, lo que
constituye
propiamente
el
ejercicio de su derecho de
defensa, puesto que es evidente
que tiene pleno conocimiento de
los
argumentos
que
se
demandan.
3.
Al respecto resulta de
aplicación el criterio establecido
por este Tribunal en la
STC
N.º
03828-2006-PA/TC,
consistente en que “(…) una vez
finalizada la suspensión perfecta
de labores el empleador debe
proceder
a
la
inmediata
reincorporación
de
los
trabajadores suspendidos. En
caso contrario, se estaría frente
a una vulneración del contenido
del derecho al trabajo (…)”. Por
tanto, siendo que la pretensión
se refiere a la supuesta
vulneración del derecho al
trabajo, corresponde ingresar al
fondo de la controversia.
4.
La demanda tiene por objeto
cuestionar la renuencia de la
Sociedad
emplazada
de
reincorporar al recurrente en su
puesto de trabajo, a pesar que
ha concluido el procedimiento de
cese colectivo por causas
económicas y estructurales que
inició ante la Autoridad de
Trabajo.
Análisis de la controversia
5.
La Sociedad emplazada,
invocando el cese colectivo de
los contratos de trabajo por
motivos
económicos
y
estructurales, con fecha 4 de
febrero de 2009 formalizó su
solicitud ante la Dirección de
Prevención y Solución de
Conflictos de la Dirección
Regional
de
Trabajo
y
Promoción del Empleo del
Cusco, en la que se incluyó al
recurrente (conforme obra a
fojas 3). Dicha solicitud de cese
colectivo
fue
desaprobada
mediante
la
Resolución
Directoral Nacional N.º 0322009/MTPE/2/11.1, de fecha 24
de
septiembre
de
2009,
expedida por la Dirección
Nacional de Relaciones de
Trabajo del Ministerio de Trabajo
y Promoción del Empleo.
6.
Finalizado el procedimiento de
cese colectivo y habiendo sido
desaprobada
la
solicitud
respectiva por la autoridad de
trabajo, la Sociedad emplazada
con fecha 30 de octubre de
2009, le cursó al demandante
una carta notarial, mediante la
cual le comunica “(…) que
estimamos poco probable que
podamos asignarle tal labor
antes del día lunes 4 de enero
del año 2010, hacemos de su
conocimiento que mientras no
hayamos determinado una labor
a serle asignada, su relación
laboral continuará suspendida
en forma imperfecta, quedando
usted liberado de su obligación
de prestarnos sus servicios
hasta que nosotros indiquemos
la labor concreta que deberá
usted ejecutar y el lugar donde
deberá desempeñarla”. De ello
se desprende la negativa por
parte de la Sociedad emplazada
para
proceder
a
la
reincorporación del demandante,
la misma que conforme obra en
autos ha sido reiterada, pues
con fecha 23 de diciembre de
2009 le informa la prórroga de
su posible reincorporación a
mediados de marzo de 2010 y
con fecha 6 de marzo de 2010,
le informa que prorroga su
reincorporación hasta fines de
mayo de 2010.
Asimismo se debe precisar que
en autos a fojas 45 y 108 obran
los escritos de apersonamiento y
la solicitud de informe oral
presentado por la Sociedad
emplazada, en los que, sin
embargo, no acredita haber
dado
cumplimiento
a
la
reincorporación del demandante.
Por
tanto
de
autos
se
comprueba que la demandada
no ha cumplido con reincorporar
al demandante, a pesar de que
la solicitud de cese colectivo fue
desaprobada.
7.
Por lo tanto este Colegiado
considera que, subsistiendo y
estando vigente el vínculo laboral
entre las partes, la Sociedad
emplazada debe proceder a la
inmediata reincorporación del
demandante, debido a que la
solicitud de cese colectivo que
presentó ante la Autoridad de
Trabajo fue desaprobada. En
caso contrario se estaría frente a
una vulneración del contenido del
derecho al trabajo, toda vez que
el propio empleador impide que
el trabajador preste el servicio,
pese a existir vínculo laboral. Por
tanto,
comprobándose
la
negativa y omisión de la empresa
demandada de reincorporar al
demandante, se ha producido
una vulneración de su derecho al
trabajo.
8.
En la medida que en este caso
se ha acreditado que la
emplazada ha vulnerado el
derecho constitucional al trabajo
del demandante, corresponde, de
conformidad con el artículo 56.º
del
Código
Procesal
Constitucional, ordenar el pago
de
los
costos
y
costas
procesales, los cuales deberán
ser liquidados en la etapa de
ejecución
de
la
presente
sentencia.
HA RESUELTO
1.
Declarar FUNDADA la
demanda
por
haberse
acreditado la violación del
derecho
constitucional
al
trabajo.
2.
ORDENAR que Xstrata
Tintaya S.A. reponga a don
Fernando
Julio
Kcana
Pumachara en su mismo puesto
de trabajo o en otro de igual o
similar nivel, en el plazo de dos
días, bajo apercibimiento de
que el juez de ejecución aplique
las
medidas
coercitivas
prescritas en el artículo 22.° y
59.º del Código Procesal
Constitucional, con el abono de
los costos y costas del proceso.
Publíquese y notifíquese.
SS.
ETO CRUZ
VERGARA GOTELLI
URVIOLA HANI
Descargar