“Señor, tú me sondeas y me conoces” Qué podemos pensar o hacer

“Señor, tú me sondeas y me conoces”
Qué podemos pensar o hacer que Dios no sepa de nosotros, estamos todo el tiempo vigilados por Él.
Dignifiquémonos con Dios con nuestra lealtad y transparencia de corazón.
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Tesalonicenses (2,9-13):
Recordad, hermanos, nuestros esfuerzos y fatigas; trabajando día y noche para no serle gravoso a nadie,
proclamamos entre vosotros el Evangelio de Dios. Vosotros sois testigos, y Dios también, de lo leal, recto e
irreprochable que fue nuestro proceder con vosotros, los creyentes; sabéis perfectamente que tratamos con
cada uno de vosotros personalmente, como un padre con sus hijos, animándoos con tono suave y enérgico a
vivir como se merece Dios, que os ha llamado a su reino y gloria. Ésa es la razón por la que no cesamos de dar
gracias a Dios, porque al recibir la palabra de Dios, que os predicamos, la acogisteis no como palabra de hombre,
sino, cual es en verdad, como palabra de Dios, que permanece operante en vosotros, los creyentes. Palabra de
Dios
Lectura del santo evangelio según san Mateo (23,27-32):
En aquel tiempo, habló Jesús diciendo: «¡Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que os parecéis a los
sepulcros encalados! Por fuera tienen buena apariencia, pero por dentro están llenos de huesos y podredumbre;
lo mismo vosotros: por fuera parecéis justos, pero por dentro estáis repletos de hipocresía y crímenes. ¡Ay de
vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que edificáis sepulcros a los profetas y ornamentáis los mausoleos de los
justos, diciendo: "Si hubiéramos vivido en tiempo de nuestros padres, no habríamos sido cómplices suyos en el
asesinato de los profetas"! Con esto atestiguáis en contra vuestra, que sois hijos de los que asesinaron a los
profetas. ¡Colmad también vosotros la medida de vuestros padres!» Palabra del Señor
Oración y Petición
Santísima Trinidad, perdóname mis miserias humanas, mis desaciertos y falta de sinceridad con mi fe, muchas
veces digo creer en ti, pero mis actos y pensamientos dicen todo lo contrario, ayúdame a ser honesto, justo,
coherente con mi fe, dirige mi vida para que no me convierta en un sepulcro blanqueado, lleno de apariencias
físicas pero con un corazón podrido por la maldad y la desobediencia a tus Mandatos. Santísima Virgen María,
madre de la Verdad, intercede por todos los que sufren por las inquisiciones humanas. Amen
Reflexión y Meditación
Los Apóstoles predicaron la Palabra de Dios imitando a nuestro Señor Jesucristo con respeto y amor, vivieron
como Jesús les enseñó, humildes pero fortalecidos en la fe y la esperanza de que nunca serían desamparados
por Dios. Por donde pasaban llevaban la Buena Nueva. La Palabra de Dios, por eso, hubo tanta conversión y fue
el inicio del cristinanismo, no eran los hombres los que hablaban, sino Dios a través de ellos, ungidos por el
Espíritu Santo. Y es que la Palabra de Dios transforma corazones, cambia vidas, soluciona problemas y resucita
almas. La Palabra de Dios se hizo hombre en nuestro Señor Jesucristo, quien unió el cielo y la tierra con su
divinidad y humanidad por siempre.
La traición, la mentira, la injusticia, la deshonestidad, la soberbia y la insensibilidad, son algunos de los
sentimientos que conforman el corazón de todos los hipócritas, el buen ser humano rechaza todo lo que hace
daño a Dios y a los demás, porque sabe que también le hará daño a su propio ser, así no podemos conformar
una sociedad con este tipo de sentimientos destructores. Una sociedad se construye con principios y valores de
lealtad, justicia y verdad. Quien cree en Dios y se dice ser Cristiano Católico, se debe convertir en un ejemplo
vivo de Jesús, empezando por su propia familia. Muchas veces vivimos con nuestro esposo (a) aparentando serle
fiel, pero algunas veces engañan y traicionan no solamente a su pareja sino a sus propios hijos, hoy vemos
ejemplos de padres y madres que están en la cárcel porque han robado el dinero del pueblo, se han dejado llevar
por la ambición olvidando que a sus hijos les deben dar buen ejemplo para que sean seres humanos de bien, con
sanas costumbres que construyan una sociedad justa y honesta para las nuevas generaciones.
Hoy a lo malo lo llamamos bueno y a lo bueno lo llamamos malo, hemos desfigurado la esencia humana porque
nos creemos superiores en inteligencia a Dios, cuánta humildad nos hace falta para reconocer que somos
creaturas de Dios, que nos creó a su imagen y semejanza para hacer siempre el bien y ayudarnos unos a otros,
siempre basados en la verdad y el amor que nos enseñó nuestro Señor Jesucristo. Él que es, el camino, la verdad
y la vida. Quien ama a Dios le obedece y actúa en consecuencia, siendo siempre fiel y limpio de corazón
siriviéndole a Él y a la humanidad con amor y desinterés propio, eso es Evangelizar.
Propósito
Vivir plenamente los Mandamientos de Dios como Él nos manda para ser auténticos en todo lo que decimos y
hacemos.
Frase del día
La ceguera del corazón es peor que la ceguera visual, porque conduce a cometer todo acto de maldad.