C.A.D.I.U. Coordinadora de Docentes e Investigadores Universitarios de Andalucía Sevilla, 15 de octubre de 2003 Se presentan a continuación algunas sugerencias para la modificación de la redacción actual del articulado del Proyecto de Ley Andaluza de Universidades. Al margen de las propuestas específicas que en ellas se recogen, las preocupaciones de la Coordinadora en relación con la LAU y su desarrollo posterior se resumen en los siguientes puntos: 1) En relación con la transición LRU-LOU: De la redacción de la Disposición transitoria segunda del Proyecto se deriva que quienes a la entrada en vigor de la LAU se encuentren contratados en régimen administrativo como personal docente e investigador en alguna de las Universidades públicas andaluzas podrán participar en un concurso público para ocupar plaza de profesor contratado doctor en la Universidad en la que presten servicios, siempre que a la fecha de la convocatoria (las Universidades podrán convocar dichos concursos hasta el 13 de enero de 2006) acrediten una antigüedad mínima de cinco años a tiempo completo como profesor contratado en régimen administrativo y cumplan los requisitos a que se refiere el artículo 52 de la LOU. El profesorado que supere dichos concursos públicos será contratado como profesor doctor ordinario con carácter indefinido, sin necesidad de pasar por la contratación inicial de cinco años prevista en el art. 40.1 del Proyecto. En primer lugar, es necesario señalar que las transformaciones y adaptaciones que se proponen están sujetas en todo caso a la evaluación de una agencia externa, sea ésta la ANECA o la Agencia Andaluza de Evaluación de la Calidad y Acreditación, y que por tanto el proceso cuenta en todo caso con garantías suficientes tanto para la institución universitaria como para el profesorado. Sin embargo, la redacción actual presenta ciertos problemas y deja en situación 1/ 10 incierta a un amplio número de profesores. Un problema esencial estriba en que, tal y como subraya Javier Barnés en su voto particular al dictamen del consejo consultivo, al que se adhiere Aurora González, se contraviene el principio de proporcionalidad: en el proyecto no contempla otros colectivos que, aunque no merezcan idéntico trato, no se diferenciarían tanto del tipo contractual incluido (Asociado Tiempo Completo LRU) como para quedar tan distanciados en lo que a la transición se refiere. Como en el mencionado voto se señala, en primer lugar, el criterio de diferenciación elegido (disfrute o no de una contratación a tiempo completo y disfrute de un contrato administrativo) es uno de los problemas principales: excluye a becarios y a tiempos parciales y a contratados laborales, cuando es la carga docente del Área, la política de recursos humanos de cada Universidad y las dificultades inherentes al desarrollo en estos dos primeros años de la LOU, en muchos casos la que ha fijado la política de contratación. La redacción definitiva de la LAU a la hora de predicar el régimen transitorio - o cualquier posición de ventaja - de unos y otros no puede desconocer esa realidad. El dictamen del Consejo Económico y Social señalaba también de forma clara a este problema al apuntar que “si la voluntad del precepto es integrar en el colectivo de profesores doctores permanentes a aquellos profesores que con una determinada antigüedad en la universidad obtengan la evaluación positiva de la Agencia, la exigencia de cinco años con ‘dedicación a tiempo completo’ deja fuera a auténticos profesores, dedicados en la realidad plenamente a la universidad, pero que por razones del servicio o de la carga docente de sus respectivos departamentos no han podido tener ‘administrativamente’ la dedicación a tiempo completo, lo que parece una doble discriminación” (p. 18). Además de este hecho, es necesario señalar que excluye también a un amplio sector de profesorado asociado LRU, dado que sólo contempla la transición de algunos de los que pudieran acceder a la figura de profesor contratado doctor, ignorando que la puesta en marcha de la LOU ha supuesto también una alteración sustancial de la carrera docente para muchos otros que no podrán 2/ 10 acceder a la acreditación de esta modalidad contractual. Estas observaciones generales se concretan en los siguientes puntos: – El Proyecto de LAU es más estricto en cuanto a contratación de profesorado doctor que el de la propia LOU. El requisito de cinco años de experiencia docente debiera ser asimilado a la experiencia que solicita la propia LOU, de modo que el período fuera el mismo en uno y otro caso (3 años), y que cualquier miembro del profesorado en situación de ser contratado como contratado doctor, pudiera serlo. Del mismo modo, debieran contemplarse otras situaciones de profesorado cuya máxima categoría al final de transitorio post-LOU (hasta el 13 de enero de 2006) no será la de contratado doctor. Finalmente, habría que contemplar una respuesta a las situaciones de profesorado que, cumpliendo los requisitos para la acreditación como profesor Colaborador (pertenencia a un área con autorización para contratar esta figura), Ayudante Doctor (posesión del título de Doctor) o como Contratado Doctor (antigüedad postdoctoral de 3 años) y, habiendo solicitado la acreditación, no hubieran obtenido respuesta aún de la agencia correspondiente en enero del 2006. De estas observaciones se derivaría, al menos, la inclusión en la transitoria de la posibilidad de participación en concursos para las figuras de ayudante doctor y de profesor colaborador. – Se ignora totalmente la realidad de un número considerable de áreas de conocimiento al no mencionar siquiera la figura de profesor colaborador, de posible duración indefinida en la LOU. De este modo, no se contempla la posibilidad de que el profesorado LRU con antigüedad equivalente a 5 años, informe favorable y pertenencia a un área autorizada, pudiera obtener la estabilidad en la figura de profesor colaborador. Este hecho es especialmente llamativo cuando en muchos casos se trata de profesorado que no cuenta con los requisitos académicos necesarios para acceder al grado de doctor. Por tanto, la disposición transitoria debiera incluir la posibilidad de un concurso equivalente al dispuesto para la figura de profesorado contratado doctor, para el profesor colaborador que implique la exención del período transitorio inicial 3/ 10 de 5 años de temporalidad. – Es necesario contemplar la situación del profesorado contratado a tiempo parcial con dedicación exclusiva a la Universidad. En la redacción actual, no hay posibilidades de continuidad de dicho profesorado. En caso de optarse por una redacción definitiva similar a la actual, debiera contemplarse la posibilidad de que el profesorado contratado a tiempo parcial pueda ver computado su tiempo de permanencia en la Universidad, con algún mecanismo de ponderación (por ejemplo, incrementando proporcionalmente el tiempo exigido a un tiempo completo para acogerse a la transitoria). La situación de los tiempos parciales, en cualquier caso, parece lo bastante compleja como para requerir la creación de una comisión mixta sindicatos-Consejería para su estudio y seguimiento detallado. Ello requiere la supresión en la disposición transitoria del requerimiento de antigüedad a tiempo completo. – Hay que considerar al profesorado contratado no administrativo. Muchos profesores cuentan en la actualidad con contratos laborales de profesor colaborador, profesor interino, Ayudante Doctor o Contratado Doctor interino, cuando el concurso original al que se presentaron se realizó bajo la LRU. De haberse resuelto estos concursos a tiempo, serían profesores acogidos a la disposición transitoria segunda. Muchos de ellos acreditan larga experiencia docente e investigadora y debiera optarse por una regulación que los considere en igualdad de condiciones que el profesorado asociado LRU. En otros casos, se trata de investigadores acogidos a convocatorias como la "Ramón y Cajal", con amplia experiencia investigadora y con acreditación ya obtenida, pero cuyos contratos no son de carácter administrativo. Se deriva de aquí la necesaria eliminación del requisito de estar en posesión de un contrato “administrativo”, aceptándose la existencia simple de un contrato. –Finalmente, no se recogen expresamente las situaciones del profesorado que posea una experiencia docente e investigadora superior al límite marcado, pudiera haberla obtenido en diferentes universidades y centros de investigación a lo largo de un período no continuado. Aunque no se señala que los cinco años de antigüedad deban ser necesariamente continuados, es 4/ 10 evidente que cabe dicha interpretación que habría de ser expresamente excluida, señalándose la posibilidad de una antigüedad acumulada obtenida en diferentes instituciones. 2) En relación con las nuevas figuras contractuales: La LOU permite que las figuras de contratado doctor y colaborador tengan carácter indefinido. Sin embargo, en la LAU, los primeros contratos de estas figuras son por cinco años, tras los cuales es necesario superar una nueva evaluación externa. Más que minimizar los efectos de la LOU, en este caso lo que se hace es agravarlos. Por otra parte, queda abierto el debate en torno a los criterios de evaluación de la futura Agencia Andaluza de Evaluación de la Calidad y Acreditación Universitaria en lo que respecta al profesorado contratado doctor tipo 1. Téngase en cuenta que la ANECA actualmente proporciona una acreditación para el acceso a una figura contractual que en la mayor parte del territorio nacional es de duración indefinida. Cabe la duda de si la obtención de dicha acreditación se considerará homologada a la reevaluación a la que este profesorado ha de someterse al cabo de sus primeros cinco años de contrato. Por otro lado, el texto no especifica si la no evaluación positiva al cabo de dicho período implica la no renovación del contrato o simplemente impide que se formalice un contrato indefinido. 3) En relación con el personal becario e investigador en formación: En una situación como la actual de futuro incierto, la LAU menciona poco a los becarios y becarias y demás personal en formación, y no postula mecanismo alguno para su formación y promoción. Por ejemplo, el profesorado ayudante habrá de pasar dos años fuera de su Universidad para seguir con su carrera (según la LOU). El desarrollo de la LAU deberá contemplar mecanismos mucho más concretos en este sentido, contemplarles como personal investigador o, al menos, crear una sección específica que defina su vinculación con las Universidades. 4) En relación con la Agencia Andaluza de Evaluación de la Calidad y Acreditación: esta Agencia será crucial tanto en los procesos de selección de 5/ 10 profesorado, como en la evaluación de titulaciones y departamentos. Su estructura final habrá de ser tal que se asegure su independencia, y que actúe como un verdadero impulsor de la calidad docente e investigadora en nuestra comunidad. Asimismo, dada la más que discutible actuación de la ANECA, sería conveniente una mayor regulación del funcionamiento de la Comisión Técnica. Tal y como apunta el dictamen del Consejo Consultivo, la Ley debe ir tan lejos como le sea posible: - determinando si los criterios o elementos de juicio técnicos son básicamente de carácter formal (antigüedad, nº de publicaciones en determinadas revistas cuando proceda, etc.) o de fondo (enjuiciamiento sustantivo de los distintos méritos) lo que supone la inexcusable presencia de expertos en esa materia. - debiera compensarse la discrecionalidad técnica (o si se quiere, la renuncia a predeterminar en un alto grado los distintos supuestos) con el fortalecimiento de los derechos procedimentales: amplia motivación técnica de la decisión; derechos de acceso y consulta del expediente; audiencia , en su caso; máxima transparencia, etc. - debiera contemplarse expresamente la diferente naturaleza de las áreas de conocimiento, la necesidad de presencia de expertos acreditados en las comisiones de valoración y la publicidad y estabilidad de los criterios y baremos empleados por éstas. 6/ 10 DETALLE DE LAS PROPUESTAS DE MODIFICACIONES AL ARTICULADO DEL ANTEPROYECTO DE LEY ANDALUZA DE UNIVERSIDADES Octubre 2003 Nota: se señalan entre corchetes los fragmentos de texto del Proyecto a eliminar y en negrilla los añadidos al mismo. Artículo 32 El personal docente e investigador de las Universidades andaluzas está compuesto por funcionarios de los cuerpos docentes universitarios, por el personal contratado, de carácter indefinido o temporal, de conformidad con lo establecido en la LOU y en esta Ley, y por el personal investigador becario y/o en formación, Artículo 37 2. Las Universidades, en el marco de la normativa del Estado y la Comunidad Autónoma, regularán el régimen de licencias y permisos, en particular a través de programas de licencias septenales, del que pueda disfrutar el personal docente e investigador con el fin de incrementar sus actividades de intercambio, su aportación al sistema de innovación y desarrollo, a las actividades de transferencia de tecnología o su participación en actividades académicas en otras universidades o centros de investigación. 3. Se establecerá un mecanismo específico para facilitar la movilidad del profesorado ayudante entre las Universidades Andaluzas, que permita asegurar su formación y completar los requisitos legales para la continuidad de su carrera docente. 7/ 10 Artículo 38 1.a) Profesorado ayudante. Este personal será considerado personal investigador y docente en formación. Para facilitar la misma y posibilitar una carrera universitaria profesional de calidad, las Universidades establecerán los mecanismos apropiados. Podrán adoptarse las siguientes modalidades de contrato: - Ayudantes ordinarios, de entre quienes hayan superado en su totalidad las materias de estudio de los programas oficiales de doctorado. - Ayudantes extraordinarios, de entre quienes ostenten el grado de doctor. Los ayudantes extraordinarios podrán asumir una mayor carga docente con el objeto de completar su formación docente. Gozarán de plena capacidad investigadora. 2. a) Profesorado Asociado a tiempo parcial, de entre especialistas de reconocida competencia que acrediten haber ejercido durante los tres años anteriores a su contratación, una actividad laboral, empresarial, profesional o en la administración pública que guarde relación con la actividad a desarrollar. Artículo 40 1. La contratación de [profesores] profesorado doctor en la modalidad ordinaria y [profesores] profesorado colaborador será a tiempo completo y con carácter indefinido. El [profesor] profesorado contratado (extraordinario) doctor en la modalidad extraordinaria lo será a tiempo completo y por la duración que se fije en el contrato en función de la naturaleza de la actividad docente o investigadora a realizar. Supresión del resto del párrafo primero [Para que su contrato pueda ser renovado, los profesores doctores contratados con carácter ordinario y los profesores colaboradores habrán de someter a evaluación 8/ 10 de la Agencia Andaluza de Evaluación de la Calidad y Acreditación la actividad desempeñada en los primeros cinco años de vigencia del contrato. Superada esta evaluación positiva, el contrato pasará a tener carácter indefinido, con los efectos que reglamentariamente se establezcan]. 2. La contratación de ayudantes doctores y ayudante será con dedicación a tiempo completo y su duración será de cuatro años. Supresión del resto de párrafo [Los Estatutos de la Universidad fijarán el plazo de duración del contrato y su posible prórroga. La duración del contrato y sus eventuales prórrogas no podrá nunca ser superior a cuatro años.] 3. De conformidad con lo establecido en el artículo 53 de la Ley Orgánica de Universidades, [los profesores] el profesorado asociado será contratado, con carácter temporal y dedicación a tiempo parcial. La duración máxima de dichos contratos y las condiciones para su renovación se fijarán en los Estatutos de la Universidad. En todo caso, la renovación requerirá la evaluación positiva de la actividad docente por la Agencia Andaluza de Evaluación de la Calidad y Acreditación Universitaria, y el mantenimiento del ejercicio de una actividad laboral, empresarial, profesional o en la administración pública relacionada con el área. Artículo 39.2 El profesorado contratado, tendrá plena capacidad docente, salvo el profesorado ayudante ordinario. Todo el profesorado contratado que posea el Título de Doctor tendrá plena capacidad investigadora. 9/ 10 Artículo 43 Supresión del apartado 3.b. [El profesorado contratado no podrá superar en ningún caso las retribuciones de un Profesor Titular de Universidad, sin perjuicio de las retribuciones adicionales por méritos docentes investigadores y, en su caso, de gestión contemplados en esta Ley. Quedan al margen de esta limitación los profesores contratados doctores extraordinarios]. Artículo 63 1. El personal investigador en formación es aquel que desarrolla un periodo de preparación académica, investigadora y docente [con una duración mínima de 4 años] que culminará con la obtención del grado de doctor. Dicha formación deberá realizarse bajo un sistema de vinculación que le permita desarrollar su labor con el régimen de derechos y obligaciones que legalmente se establezca, con especial reconocimiento de la protección social, medios y garantías adecuadas para la actividad desarrollada. Mientras dure la vinculación, el personal investigador en formación tendrá la consideración de personal docente e investigador de la Universidad en la que realice su formación. 2. [El cumplimiento de los cuatro años de formación del personal investigador] La vinculación como personal investigador en formación será considerado mérito preferente en los concursos para el acceso a los contratos de ayudante, sin perjuicio del cumplimiento de los requisitos establecidos en el artículo 49 de la Ley orgánica de Universidades. Artículo 84 3. La Comisión Técnica elaborará las propuestas de protocolos de evaluación, en las que se determinarán los criterios o elementos de juicio técnico sobre los que se 10/ 10 basarán las decisiones de evaluación y acreditación que se realicen. Estos protocolos serán aprobados por el Consejo Rector de la Atencia y publicados en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía. 4. Para los procesos de acreditación de profesorado, los protocolos deberán incorporar criterios y baremos explícitos de evaluación, diferenciados por área de conocimiento. En estos casos, los protocolos serán aprobados para un período no inferior a seis años. 5. La resolución de solicitudes de acreditación para las distintas figuras de profesorado será informada necesariamente por comisiones integradas por expertos del área de conocimiento del solicitante o áreas afines. Dichos expertos serán elegidos al azar entre el profesorado universitario con igual o superior categoría a la figura para la que se solicita acreditación. Disposición adicional novena La Comunidad Autónoma desarrollará, de acuerdo con las Universidades Andaluzas, un nuevo modelo de financiación que contemple las necesidades financieras de las mismas derivadas de la aplicación de la Ley Orgánica de Universidades y de la presente Ley. Disposición transitoria segunda1 Eliminación de la disposición y sustitución por la redacción siguiente Los contratos del personal docente en investigador contratado de las Universidades andaluzas que, desde la entrada en vigor de la presente Ley hasta el 13 de enero de 2.006, cumplan los requisitos del artículo 52 de la Ley Orgánica Universidades, serán transformados, a petición de los interesados, en contratos de profesores doctores ordinarios, con carácter indefinido, sin aplicar las normas establecidas en el artículo 39 de la presente Ley, y previa 1 Véase el punto 1) de la introducción a este documento para un detalle de los problemas suscitados por la redacción original 11/ 10 evaluación positiva de la Agencia Andaluza de Evaluación de la Calidad y Acreditación Universitaria o la ANECA. En caso de no cumplir los requisitos de dicho artículo 52 de la LOU, los contratos del personal docente en investigador de las Universidades andaluzas serán transformados en contratos de profesores ayudantes doctores, en caso de cumplir los requisitos del artículo 50, o en profesores colaboradores, en caso de reunir los del artículo 51, previa evaluación positiva o informa favorable, respectivamente, de la Agencia Andaluza de Evaluación de la Calidad y Acreditación Universitaria o la ANECA, a petición de los interesados. El profesorado que, habiendo solicitado de la Agencia Andaluza de Evaluación de la Calidad o Acreditación Universitaria o la ANECA la acreditación para alguna de las figuras contempladas en esta disposición, no haya recibido notificación positiva o negativa de la misma, será contratado con carácter interino de acuerdo con dicha figura en tanto en cuanto ello suceda. Su contratación final se ajustará a la acreditación efectivamente obtenida. 12/ 10