83-A-2012 CAMARA DE FAMILIA DE LA SECCION DEL CENTRO, SAN SALVADOR, A LAS DIEZ HORAS Y QUINCE MINUTOS DEL DIA VEINTIOCHO DE SEPTIEMBRE DE DOS MIL DOCE. Conocemos del recurso de apelación interpuesto en forma subsidiaria por la Licenciada MARISOL PASTORA SANDINO, como apoderada de la señora […], de este domicilio. Impugna la resolución proveída por la JUEZA CUARTO DE FAMILIA SUPLENTE DE ESTA CIUDAD, Licenciada NIDIA MIRA DE HERNANDEZ en el REGIMEN DE VISITAS, RELACIONES Y TRATO promovido por el señor […], a través de su apoderada Licenciada BLANCA DAYSI ALBERTO DE AYALA. También ha intervenido el Procurador de Familia adscrito al juzgado a-quo, Licenciado ROMEO ALBERTO PORTILLO. Se admite el recurso por reunir los requisitos de ley. I. La resolución impugnada se agrega a fs. 219/220, en la cual con respecto al punto impugnado, la jueza a-quo resolvió No ha lugar a tener por interpuesta la contrademanda a instancia de la señora […] a través de su apoderada en contra del demandante del juicio. Fundamentó su resolución la juzgadora que la demandada pretende interponer tres pretensiones nuevas, que son divorcio por vida intolerable, que se le otorgue el cuidado personal de su hija y alimentos a favor de la misma. Que conforme el Art. 49 L.Pr.F. estas pretensiones no guardan en ningún sentido conexión con la pretensión de mérito ya que respecto a la pretensión de divorcio, así como el cuidado personal y los alimentos, no existe una identidad de parte ya que la pretensión de la demanda es declarar un régimen de visitas, comunicación y estadía, por lo cual estas pretensiones deben ser interpuestas en un proceso nuevo, tal como ha sido expresado en la contrademanda de conformidad al Art. 111C.F, en razón que al momento de decretarse el divorcio habrá pronunciamiento respecto al cuidado personal, alimentos y régimen de visitas, comunicación y estadía de la niña, para efectos de no vulnerar los derechos de la niña y que no existan diferentes sentencias respecto a cada pretensión, pues lo que se resuelva en el proceso de régimen de visitas puede ser modificado en el proceso del divorcio. Inconforme con dicho proveído a fs. 225/227, la Licda. PASTORA SANDINO interpuso recurso de revocatoria con apelación subsidiaria de la referida resolución, argumentando en síntesis lo siguiente: Que no está de acuerdo con dicha resolución por causarle agravios a su poderdante y por ser manifiestamente injusta, además de considerarla incongruente, diminuta y haber errónea aplicación de preceptos legales así como la inobservancia de otros. Sostiene que el demandante pretende un régimen de relaciones y trato, el cual es accesorio al divorcio y guarda conexión con éste, desde luego todas las pretensiones accesorias al divorcio que señala el Art. 111 C.F se pueden postular individualmente y por separado, pero no es el caso pues su mandante contrademanda el divorcio, ello no la inhibe que dentro de dicha reconvención postule el cuidado personal para sí y alimentos para su hija (Art. 111 C.F). El nexo entre ambas partes es el matrimonio por un lado y que son los padres de la niña […], en relación al matrimonio ambos pudieron tomar diferentes acciones, a saber divorcio, protección de la vivienda, alimentos para el cónyuge, cuidado personal, régimen de relaciones y trato, desacuerdos en el ejercicio de la autoridad parental, éstos últimos respecto de los hijos sometidos a su autoridad parental. El señor […] tomó la de establecer un régimen de relaciones y trato, y su mandante, teniendo la oportunidad procesal de reconvenir al contestar la demanda, ha tomado la acción por el divorcio por el motivo tercero del Art. 106 C.F, desde luego y siendo procedente postula de todas las posibilidades que contiene el Art. 111 C.F el cuidado personal y los alimentos a favor de su menor hija. Amparándose en la sentencia de la Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia con referencia 59-C-2006, sostiene – entre otros- que “Para que sea procedente la acumulación, tanto la pretensión inicial como la reconvención deben tener cierta conexidad, por razón del objeto o causa según el Art. 49 L.Pr.F, y se tramitarán y decidirán conjuntamente mediante una sola sentencia de fondo”. “existe conexidad de pretensiones cuando no obstante su diversidad, poseen elementos comunes o interdependientes que las vinculan, ya sea por su objeto o causa, de tal suerte que las decisiones que recaigan en uno u otro proceso necesariamente deban tener el mismo fundamento que no podría ser admitido o negado en una u otra, sin incurrir en contradicción. En razón de la jurisprudencia citada considera que la jueza a-quo hizo una mala interpretación del Art. 49 L.Pr.F, pues constriñe a su mandante que inicie otro proceso aparte, en el cual se podría modificar lo que resultare del presente proceso, eso riñe con los principios de economía procesal y concentración, pues no encuentra el por qué desperdiciar recursos valiosos de la administración de justicia, cuando legalmente es procedente tramitar la contrademanda que se ha postulado. En las pretensiones de cuidado personal, régimen de relaciones y trato, y alimentos, el elemento común es su vinculación al ejercicio de la autoridad parental, lo que la lleva a que por parte de la a-quo pareciera que el propósito es rechazar la contrademanda y no darle el trámite que legalmente corresponde, lo cual implica la inobservancia de lo dispuesto en el Art. 2 L.Pr.F, y lleva a la conclusión que la resolución que impugna es injusta y causa un gran agravio a su mandante, además de no estar arreglada a derecho . Pide que se revoque la resolución impugnada y que se admita la contrademanda presentada por su poderdante, deje sin efecto las demás providencias dictadas y se le dé el trámite que legalmente corresponde y se continúe con el trámite de ley hasta dictar sentencia, y en el caso que no se acceda a su recurso de revocatoria, solicita que se envíen los autos a esta Cámara para que resuelvan lo que se solicita en apelación subsidiaria. Por su parte la Licenciada BLANCA DAYSI ALBERTO DE AYALA, en su escueto escrito de fs. 236, manifestó que no está de acuerdo con las pretensiones planteadas por medio de la Licenciada MARISOL PASTORA SANDINO, pues se adhiere a la resolución emitida en el juzgado a-quo por considerar que se encuentra conforme a derecho, ya que en el presente caso no procede la contrademanda por ser incoherentes las pretensiones planteadas al presente caso, pues la demanda que se promueve es clara y específica en el sentido que en su calidad de padre de la niña […], solicita que se le conceda un régimen de visitas a efecto de relacionarse con su hija, tal y como lo regula el Art. 217 C.F. No obstante haber sido notificado del recurso interpuesto el Procurador de Familia adscrito al juzgado a-quo no hizo uso de su derecho de pronunciarse al respecto. El recurso de revocatoria interpuesto por la Licenciada SANDINO fue declarado sin lugar por resolución de fs. 237. La jueza a-quo fundamentó su decisión manifestando que el Art. 49 L.Pr.F. establece que la reconvención procederá siempre que la pretensión del demandado tenga conexión por razón del objeto o causa con la de la demandante, lo cual no procede, ya que el divorcio por la tercera causal es una pretensión principal y no pueden acumularla en un proceso que ha sido iniciado como el establecimiento de un régimen de relaciones y trato. De igual manera se ha expresado en el recurso de revocatoria que el juez podrá resolver respecto a los alimentos de los hijos, cuidado personal, régimen de visitas, pero siempre que se haya iniciado como pretensión principal el divorcio de los cónyuges (Art. 111 C.F), o cuando exista acumulación de dos procesos ante el mismo o diferente juzgado, debiendo cumplirse con los requisitos del Art. 71 L.Pr.F. III. La presente alzada se circunscribe a determinar si es procedente la reconvención de divorcio planteada por la señora […], en el proceso de REGIMEN DE RELACIONES Y TRATO procediendo entonces a su admisión o por el contrario revocando la resolución impugnada. En el sub lite no estamos frente a una acumulación de procesos que es a lo que se refiere el Art. 71 L. Pr. F.; que es otra forma de conocer varias pretensiones en un solo proceso, sino ante la reconvención a través de la cual se pretende la acumulación de pretensiones de distinta naturaleza. El trato procesal es diferente cuando se inician por separado cada uno de los procesos y posteriormente se acumulan en uno solo para conocer de los diferentes pretensiones sin que se incurra en la situación que el apelante aduce; que con ello se acarrea una dilación innecesaria. La demanda de régimen de visitas ha sido interpuesta por el señor […] a fin de que se decrete un régimen de visitas a su favor y de su hija […], en el sentido que la niña le sea entregada el día viernes a las seis horas con cuarenta minutos de la mañana, regresándola el domingo a las seis y treinta de la tarde, para efectos de llevarla por lo menos un día al kinder donde estudiará la niña, y compartir con ella los días sábado y domingo, cada quince días y los días de vacación como Semana Santa y Fiestas Agostinas; de manera alterna un año la de Semana Santa con él y las Fiestas Agostinas con la madre, y al siguiente viceversa; y las vacaciones de diciembre un año el veinticuatro con el padre y el treinta y uno con la madre, y al siguiente año viceversa, y de esa forma sucesivamente en forma alterna. La niña, se refiere en la demanda tiene un año dos meses de edad y se encuentra bajo la guarda y el cuidado personal de su madre, señora […], de quien se encuentra separado el señor […] desde el mes de mayo de dos mil once. La demandada por escrito de fs. 13/21 contestó la demanda en sentido negativo en lo referente al régimen de visitas solicitado, reconviniendo al demandante por divorcio por ser intolerable la vida en común entre los cónyuges, solicitando a su vez el cuidado personal de su hija […] y alimentos a favor de la misma. IV. Así las cosas tenemos que efectivamente la pretensión de régimen de visitas, comunicación y trato es una pretensión que no tiene conexión con la pretensión de divorcio ni en razón del objeto ni de la causa pues en una el objeto de la pretensión es la fijación de un régimen de visitas y en la otra la disolución del matrimonio; y la causa de pedir es la obligatoriedad y reciprocidad de mantener una relación padre- hija y en la otra la separación de los cónyuges debido a una disfuncionalidad conyugal. En la pretensión de divorcio si bien las partes procesales son los mismos que en este proceso y que de conformidad al Art. 111 C. F. deban resolverse puntos conexos con la pretensión de divorcio, tales como la cuota alimenticia, régimen de visitas, y cuidado personal a favor de los hijos por ministerio de ley, lo que permite reconvenir en esas pretensiones en el proceso de divorcio, o bien la acumulación de procesos si se hubieren iniciado independientemente; sin embargo, tratándose de un régimen de visitas, cuidado personal, etc, no procede la reconvención tal como lo sostiene la a-quo, no existe identidad ni conexidad de la causa petendi, pues los motivos del divorcio son diferentes a los del régimen de visitas solicitado, el que se pide por encontrarse imposibilitado de hacerlo según se refiere, por acciones de la otra progenitora, tampoco existe conexidad en el objeto de la pretensión, pues el objeto del divorcio es la separación legal y en el régimen de visitas es para relacionarse con un hijo en beneficio del hijo y del progenitor. Además, como sabemos, no existe reconvención de reconvención en cuyo caso el señor […] verá limitado su derecho de defensa en el proceso de divorcio por intolerabilidad de la vida en común que pretende incoarse en su contra, lo que implica que quedaría circunscrito su derecho simplemente a la contestación de la reconvención, sin poder ejercer otros derechos en este tipo de procesos restringiendo el derecho al contradictorio. De tal suerte que en este caso no procede la reconvención, que es una figura diferente a la acumulación de procesos, que no permitiría ejercer ampliamente el derecho de defensa en particular al demandante como ya lo mencionamos ut supra. . En apoyo de lo anterior la jurisprudencia de la Sala de lo Civil de la Corte Suprema de Justicia: 631 Ca. FAM. S. A. del 13 de Oct. de 2003, sostuvo que la, reconvención es el derecho que tiene el demandado de formular su propia demanda contra el demandante, de manera que las dos partes asuman recíprocamente la calidad de demandante y demandado... sin embargo esta facultad procesal en los juicios de familia exige no solo una conexión subjetiva, sino que requiere una conexión causal o real según que exista una vinculación en el bien de la vida reclamado (real); o bien, con relación al elemento jurídico o causa de pedir (causa petendi). Sigue exponiendo la Sala que de acuerdo a lo anterior, el Art. 49 L. Pr. F. exige que la pretensión del demandado tenga conexión por razón del objeto o causa con la pretensión del demandante. En este orden de ideas, citando a la doctrina podemos afirmar que el objeto de la pretensión es la materia sobre la cual recae esa pretensión y se halla representado por la relación material o sustancial, así como en el bien de la vida que tutela esa relación; mientras que la causa de la pretensión es entendida como el móvil determinante de su proposición, es decir, la constituyen los hechos jurídicos sobre los cuales el demandante fundamenta su petición y se distingue entre razones de hecho y de derecho. (Cf. VESCOVI, Enrique, Teoría General del Proceso, Universidad, Buenos Aires, 1997. Pág. 219, entre otros.). Por todo lo expuesto y con fundamento en los Arts. 106. 248 C. F. 49, 71, 82. 153. 161 L. Pr. F. en nombre de la Republica de El Salvador esta Cámara RESUELVE: Confirmase la resolución impugnada que declaró sin lugar la Reconvención de Divorcio interpuesta por la señora […] en el proceso de régimen de visitas, relaciones y trato promovido por el señor […] respecto de su menor hija […], por estar dictada conforme a derecho. Oportunamente devuélvanse los autos originales a su tribunal de origen con certificación de este decisorio. NOTIFIQUESE. PROVEIDO POR LAS MAGISTRADAS: LICDA. SILVIA GUADALUPE BARRIENTOS ESCOBAR LICDA. RHINA ELIZABETH RAMOS GONZALEZ. A. COBAR A. SECRETARIO.