A C U E R D O En la ciudad de La Plata, a 13 de noviembre de 2013, habiéndose dispuesto en el establecido, Acuerdo 2078, de que conformidad deberá con lo observarse el siguiente orden de votación: doctores Pettigiani, Kogan, Genoud, Hitters, Soria, se reúnen los señores jueces de la Suprema Corte pronunciar de Justicia sentencia en definitiva acuerdo en la ordinario causa A. para 70.703, "Montezanti, Néstor contra Caja de previsión Social para Abogados de anulatoria. la Provincia Recurso de Buenos extraordinario de Aires. Pretensión inaplicabilidad de ley". A N T E C E D E N T E S La Administrativo rechazó el Cámara de con asiento recurso de Apelación en La apelación en lo Plata, Contencioso por interpuesto mayoría, por la demandada, confirmó la sentencia de primera instancia en cuanto acogió la pretensión anulatoria y desestimó la pretensión indemnizatoria promovida, revocándola respecto de las costas, las que impuso por su orden (fs. 289/297 vta.). Disconforme con ese pronunciamiento, la accionada dedujo recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley o doctrina legal (fs. 300/332), el que fue concedido a fs. 334/335. Dictada la providencia de autos (fs. 350) y encontrándose la causa en estado de pronunciar sentencia, la Suprema Corte resolvió plantear y votar la siguiente C U E S T I Ó N ¿Es fundado el recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley interpuesto? V O T A C I Ó N A la cuestión planteada, el señor Juez doctor Pettigiani dijo: I. 1. El doctor Néstor Luis Montezanti promovió demanda contencioso administrativa contra la Caja de Previsión Social para Abogados de la Provincia de Buenos Aires solicitando la anulación de las resoluciones emitidas por el Directorio de la Caja en sus sesiones del 18 y 19 de septiembre de 2003 y 12 y 13 de abril de 2004, por las cuales se le otorgó el beneficio jubilatorio pero difirió su efectivización o pago al acto de baja en su calidad de juez federal, fundado en las previsiones contenidas en el art. 45 rechazó de el Requirió la ley recurso también 6716 de que -t.o. decreto reconsideración, se declare 4771/1995- y se respectivamente. ilegítima la omisión incurrida por la demandada, en la medida que se abstuvo de declarar la inconstitucionalidad de los arts. 44 y 45 de la ley 6716 -t.o. decreto 4771/1995-, que al momento de dictar sentencia se disponga el pago íntegro de los haberes jubilatorios devengados e impagos en su totalidad, y que se indemnicen los correspondientes daños y perjuicios (fs. 13/24 vta.). 2. El titular del Juzgado en lo Contencioso Administrativo nº 1 de La Plata hizo lugar a la pretensión anulatoria, declaró la inconstitucionalidad del art. 45 tercer párrafo de la ley 6716, la nulidad parcial de las resoluciones atacadas -en cuanto subordinan el pago de los haberes previsionales del actor al cese en su cargo de magistrado-, condenó a la Caja a pagar a éste los haberes previsionales a partir del 3 de abril de 2003 y declaró la inconstitucionalidad Administrativo, del art. condenando en 51 del costas Código a la Contencioso demandada en calidad de vencida (fs. 215/225). 3. A su turno, la Cámara de Apelación en lo Contencioso Administrativo con asiento en La Plata, por mayoría, confirmó la sentencia de grado, revocándola respecto de las costas, las que impuso por su orden (fs. 289/297 vta.). Sostuvo que las leyes provinciales que imponen la cancelación de la matrícula profesional en todo el país como condicionamiento jubilatorio, para pretenden acceder ejercer una al beneficio competencia extraterritorial con lo que injieren en la regulación de la seguridad social de la profesión en otros ámbitos territoriales sin hallarse legitimados al efecto (art. 75 inc. 12 actual, Constitución nacional). II. Contra ese pronunciamiento, la Caja demandada interpuso recurso de inaplicabilidad de ley o doctrina legal (fs. 300/332). Alega la violación y errónea interpretación de la doctrina legal de esta Corte con relación al art. 45 de la ley 6716, sentada en la causa B. 55.992, "Olivier" (sent. del 14-VII-1998), considerando aplicable al caso la de la causa B. 48.957, "Servini" (sent. del 29-X-1985, publicada en "Acuerdos y Sentencias", 1985-III-342). Asimismo, denuncia la violación de las garantías constitucionales de los derechos de propiedad y del debido proceso y la existencia de absurdo. Los pilares en que se basa la postura de la Caja son (fs. 324/325): 1. El planteo orientado por un abusivo afán de lucro que persigue un miembro de la justicia federal al pretender sumar el cobro del sueldo que percibe en su actual vinculación laboral en dependencia y la percepción del haber Directorio, de a la jubilación pesar de la que le ha prohibición que reconocido el contempla el conserva el párrafo 3° del art. 45 de la ley 6716; 2. la capacidad plena que beneficiario para mantenerse en el servicio activo de la profesión desde la categoría de camarista de la alzada federal con asiento en la ciudad de Bahía Blanca; y 3. la incompatibilidad ética además de la legal cuyo desconocimiento afecta el espíritu, la jerarquía y la dignidad que requiere el ejercicio de un cargo que tiene por objeto incursionar y definir controversias en el seno de la comunidad. Reconoce que en función del alcance de los poderes locales, ninguna Provincia puede legislar sino por las cosas o las personas que se hallan sometidas a su jurisdicción, pero sostiene que de ello no se sigue que la incompatibilidad controvertida extraterritorialidad contrario, sólo de tiene la la configure ley 6716, naturaleza un sino de supuesto que, una por condición de el o requisito impuesto por el Legislador para que accedan al goce de la jubilación quienes se hallan sometidos a su jurisdicción por haber cumplido o desempeñado su actividad profesional en el ámbito de aplicación de la norma (fs. 325). Agrega que tal recaudo no compromete ni restringe el derecho constitucional de trabajar (art. 14, C.N.) ni dentro de la Provincia de Buenos Aires ni tampoco fuera de ella, puesto que quien se halla en condiciones de acceder a la jubilación momento- el ordinaria puede reconocimiento de obtener ese -en derecho cualquier mediante el pertinente acto administrativo, sin perjuicio de continuar ejerciendo su profesión de abogado (art. 44, ley 6716) y sólo lo hará efectivo cuando decida hacerlo. Asimismo, después de estar gozando del haber respectivo, el abogado jubilado por el régimen de la Caja demandada, puede solicitar la suspensión del beneficio sea para reanudar el ejercicio activo desempeñarla de desde su profesión un cargo autónoma público sea para judicial o administrativo para el cual se requiera ser abogado (arts. 45 párrafo 5° y 75, ley 6716). III. El recurso extraordinario interpuesto no prospera. a. La circunscripta concreta facultad al revisora contenido impugnación que de contra la de esta Corte sentencia ella se está según formule en la el recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley (causas L. 85.098, "Fernández", sent. del 4-X-2006; L. 87.394, "V. de C.", sent. del 11-V-2005). De allí que el éxito de la postulación recursiva dependa de que se baste a sí misma para que, de su lectura, pueda advertirse el error en la aplicación de la ley o de la doctrina legal (causas L. 79.507, "Saravia", sent. del 1-III-2004; L. 73.381, "Nespeca", sent. del 4-IV-2001). Ello exige, entonces, una crítica concreta, definitorias y directa argumentos y eficaz en que de las conclusiones se funda el fallo recurrido (causas L. 80.274, "Magnoni", sent. del 20-VIII2003; L. 89.439, "Lescano", sent. del 10-XII-2008). b. El recurrente no rebate adecuadamente el fundamento central de la sentencia impugnada. Se limita a exponer su expresando disconformidad consideraciones con la subjetivas solución adoptada inconducentes para revertirla. Liminarmente, en el fallo se destaca la analogía sustancial existente entre la situación del abogado jubilado de la caja de previsión demandada que mantiene su matrícula en otras jurisdicciones y ejerce la profesión con la del que ocupa un cargo del fuero federal. Como consecuencia de ello, el sentenciante afirma que la ley provincial no puede tener el efecto extraterritorial de imponer condiciones ajenas al ámbito de su propia jurisdicción como requisitos para el goce del beneficio acordado. La Cámara se refiere al límite de la potestad reglamentaria de la Legislatura local para establecer incompatibilidades que importen regular materia que le es ajena, con sustento en la jurisprudencia que dimana de la Corte federal (in re "Rebagliatti" y posteriores) en tanto ha sido asimilada por esta Suprema Corte de Justicia (causas B. 56.606, "Bauzer", sent. del 25-III-1997 y B. 55.992, "Olivier", sent. del 14-VII-1998). Desde ese ángulo, no se advierte apartamiento de la doctrina legal de esta Corte. Como expresa el fallo impugnado (fs. 295 vta.), el antecedente judicial "Servini" (causa B. 48.957, sent. del 29-X-1985) cuya aplicación pretende la demandada (incompatibilidad entre la jubilación y el ejercicio de un cargo de juez federal en la Provincia), es anterior al cambio jurisprudencial "Olivier") motivado nacional (S.C.B.A., en la censura -"Rebagliatti", (incompatibilidad entre la causas de "León", la "Bauzer" Corte Suprema entre jubilación y el y otrasejercicio profesional en otras jurisdicciones). De allí que pueda seguirse la misma línea hermenéutica y de razonamiento en la evaluación jubilación de local la con incompatibilidad el desempeño del del goce abogado de en la otras jurisdicciones, tanto en forma autónoma como en relación de dependencia. c. Por otra parte, el recurrente expone su criterio personal, distinto al del sentenciante, en orden a la interpretación de las disposiciones a las que se han subsumido los hechos, sin conseguir demostrar que haya existido una errónea aplicación o interpretación del plexo normativo en cuyos términos fue fundada la sentencia, tal como lo exige la norma procesal (art. 279, C.P.C.C.). A este respecto, debe recordarse que quien afirma que la sentencia viola determinados preceptos legales no hace otra cosa que anticipar una premisa cuya inmediata demostración debe hacer en el mismo escrito, no resultando suficiente a ese efecto la mera exposición de un criterio interpretativo distinto al del juzgador (conf. Ac. 83.804, sent. del 24-V-2006; Ac. 93.816, sent. del 3-X-2007; A. 70.456., sent. del 13-XI-2012). d. Tampoco alcanza a acreditar el vicio de absurdo que denuncia. En relación a ello, no cabe perder de vista que -por vía de principio- los jueces de grado son soberanos en la fijación de los hechos litigiosos y en la valoración de la prueba por lo que el control casatorio queda por regla excluido, incurran salvo en los absurdo supuestos o en que arbitrariedad los magistrados (conf. causas Ac. 52.204, sent. del 25-IV-1995; Ac. 57.124, sent. del 20-II1996; A. 69.841, sent. del 7-IV-2010; A. 70.187, sent. del 15-XII-2010). Cabe recordar que esta Suprema Corte ha definido al absurdo como un error grave y ostensible que se comete en la conceptuación, juicio o raciocinio al analizar, interpretar o valorar las pruebas o los hechos susceptibles de llegar a serlo, con tergiversación de las reglas de la sana crítica aplicables de en violación todo lo de cual las normas resulta una procesales conclusión contradictoria o incoherente en el orden lógico-formal, e insostenible en la discriminación axiológica (Ac. 89.918, sent. del 3-XII-2003; C. 88.669, sent. del 11-VI-2008; C. 89.083, sent. del 12-XI-2008; C. 101.294, sent. del 15-IV2009, entre muchas otras). Considero que el impugnante no ha logrado patentizar la presencia de un error palmario en la tarea valorativa del tribunal a quo, antes bien las objeciones al fallo aparecen como meras discrepancias con lo resuelto, lo cual no constituye base idónea para los agravios, ni configuran un supuesto de absurdo que dé lugar al recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley, puesto que -como quedó expresado- dicha anomalía se configura cuando media cabal demostración de su existencia. e. No corre mejor suerte la invocación en el caso de los arts. 17 y 18 de la Constitución nacional pues, tal como ha resuelto este Tribunal, resulta ineficaz la denunciada violación de derechos constitucionales cuando, como en la especie, se apoya en una no acreditada infracción a preceptos legales (conf. Ac. 66.045, sent. del 17-II-1998; Ac. 77.461, sent. del 13-XI-2003; Ac. 85.091, sent. del 22-IX-2004; C. 93.390, sent. del 7-II-2007; A. 70.242, sent. del 9-V-2012; entre otras). IV. Por los fundamentos expuestos, no habiéndose demostrado las infracciones legales denunciadas como tampoco la violación a la doctrina legal invocada (art. 279, C.P.C.C. y su doctrina), corresponde rechazar el recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley o doctrina legal interpuesto. Costas a la recurrente vencida (arts. 60 inc. 1°, ley 12.008, texto según ley 13.101, 68 y 289 in fine, C.P.C.C., doctrina de la mayoría en la causa A. 68.914, "Larrauri", sent. del 22-XII-2008). Voto por la negativa. A la cuestión planteada, la señora Jueza doctora Kogan dijo: 1. Discrepo con el criterio del distinguido colega que me precede en la votación y, por los fundamentos que paso a desarrollar, juzgo que corresponde declarar la procedencia del recurso extraordinario interpuesto por la Caja de Previsión Social para Abogados de la Provincia de Buenos Aires y revocar la sentencia impugnada. Las normas cuya interpretación originaron el conflicto son las siguintes: El art. 44 de la ley 6716 -texto según decreto ley 9978/1983-, prescribe: "El abogado adquirirá el derecho a la jubilación establece la cuando presente reuniere ley, aún los cuando requisitos continuare en que el ejercicio de la profesión, sin perjuicio de lo cual podrá solicitar a la Caja el acto administrativo que así lo declare". "Para tener derecho a percibir el beneficio deberá acreditar la cancelación de su matrícula profesional en todas las jurisdicciones del país que estuviere inscripto, mediante certificación pertinente". "El pago de la jubilación se liquidará a partir de la fecha de la solicitud del beneficio, en el caso de que la cancelación de las matrículas fuere anterior a la solicitud y desde la fecha de la última cancelación, si fuere posterior a la misma". Por su parte, el art. 45 -texto según decreto ley 9978/1983- dispone: "Al hacerse efectiva la jubilación se pondrá en conocimiento del Colegio de Abogados de la Provincia de Buenos Aires, del Colegio Departamental de la inscripción del jubilado, del órgano que ejerza el gobierno de la matrícula en las demás jurisdicciones del país en que hubiere estado matriculado y de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia". "El jubilado no podrá ejercer la profesión de abogado, ni la de procurador, ni el notariado, en forma directa ni indirecta, ni tampoco integrar con su nombre estudios propia o jurídicos. de su No obstante cónyuge, podrá ascendientes, litigar en causa descendientes y hermanos, pudiendo en esos casos devengar honorarios con arreglo a las leyes, cuando hubiere condenación en costas a la parte contraria". "La percepción del beneficio jubilatorio será, además, incompatible con el ejercicio en todo el país de cargos judiciales, en tribunales administrativos y en cualquier función pública que requiera para su ejercicio el título de Abogado, excepción hecha de la docencia en todos sus niveles". "Mientras dure la incompatibilidad, se interrumpirá el pago del beneficio". "En cualquier momento el jubilado podrá solicitar la suspensión del pago del beneficio para ejercer alguna de las actividades profesionales enunciadas en el párrafo anterior". "Para lograr la rehabilitación del beneficio, el jubilado deberá acreditar que transcurrió un plazo mínimo de doce (12) jubilación, meses como desde así que también dejara los de percibir restantes su requisitos exigidos en el art. 39". "Toda violación a lo dispuesto en el presente artículo será sancionada con la cancelación temporaria o definitiva del beneficio". Tal como se dijera en la causa "Servini", sent. del 29-X-1985, el decreto ley 9978/1983 (dictado por el gobierno de facto el 5 de julio y publicada en el Boletín Oficial el 3 de agosto de 1983) fue sancionada con el fin de explicitar los alcances de las limitaciones allí previstas. Los fundamentos de la ley, son claros en este sentido al decir que: "... el alcance del requisito de la cancelación de la matrícula para hacer efectivo el derecho jubilatorio, había dado lugar a diversas interpretaciones, de manera tal que a través de la sanción de la nueva normativa se intentó clarificar el texto legal a fin de evitar las dudas y los disímiles enfoques que existen sobre el tema". 2. Adelanto que coincido con el criterio del voto en minoría del fallo recurrido y, en esa dirección, habré de emitir el mío. Juzgo beneficio razonable jubilatorio previsional derivado la -ya de prohibición reconocido los aportes de por percibir el el organismo efectuados por el ejercicio de la profesión de abogado en el ámbito de la Provincia de Buenos Aires- mientras el actor se desempeñe como magistrado en el fuero federal en la Provincia. No advierto en ello afectación de derechos de rango constitucional, ni de derechos adquiridos en el marco de la ley 6716 -texto según decreto ley 9978/1983-, motivo por el cual el planteo de inconstitucionalidad del art. 45, párrafo 3° de la misma, debe ser rechazado. Es que, desde el reconocimiento del derecho por la Caja, el goce del haber previsional estuvo supeditado a la desaparición de la incompatibilidad contemplada en la norma cuya inconstitucionalidad procura el accionante. Estimo que los argumentos relativos al ejercicio de la profesión liberal en las distintas jurisdicciones del país para declarar la inconstitucionalidad del art. 44 trascripto, resultan ajenos a la materia debatida en esta causa que trata acerca de la incompatibilidad entre el goce efectivo del beneficio jubilatorio reconocido y el ejercicio de un cargo de juez federal en la Provincia, cuestión que ya ha sido resuelta por el Tribunal en una causa análoga (B. 48.957, "Servini", citada) invocada en el recurso. Insisto, la discusión no debe ser confundida con la que se refiere a la potestad normativa de las provincias para establecer incompatibilidades que importen la regulación de materia que le es ajena -ejercicio autónomo de la profesión-, tema superado en las causas B. 56.606, "Bauzer" (sent. del 25-III-1997) y B. 55.992 "Olivier" (sent. del 14-VII-1998), posteriores a la censura de la Corte Suprema nacional -"Rebagliatti", "León", entre otras-. La prohibición que aquí se debate gira en torno del ejercicio de la magistratura nacional y a la incompatibilidad que de dicha situación deriva para acceder a un derecho -que si bien está reconocido- será usufructuado conforme las previsiones de la norma de la cual se pretende su inconstitucionalidad. De esta manera, corresponde diferenciar la incompatibilidad prevista en el art. 44, párrafo 2° de la ley 6716, que se refiere al ejercicio autónomo de la profesión, de la contemplada en el art. 45, párrafo 3° de la misma norma, que se refiere al desempeño de un cargo público -judicial o administrativo- y la percepción simultánea de un haber jubilatorio reconocido por la Caja. El desestimado párrafo el 3° del fallo en art. 45 crisis cuya aplicación ha al tacharlo de inconstitucional no prohíbe el desempeño de la profesión autónoma ni en relación de dependencia. Lo que sí prohíbe es que, justicia un o beneficiario en la ejerza un administración cargo para público cuyo en la desempeño se requiera el título de abogado a excepción de la docencia y, al mismo tiempo, goce del haber jubilatorio. Entiendo, por ello, que el supuesto de autos subsume en la doctrina legal sentada -por mayoría- en la causa B. 48.957, "Servini" (sent. del 29-X-1985). De un lado, porque se refiere concretamente a la incompatibilidad entre el goce efectivo de la jubilación y el ejercicio de un cargo de juez federal en la Provincia exhibiendo la misma base fáctica. De otro, porque la situación planteada en la especie no se beneficia por aplicación de la doctrina elaborada en torno al art. 44 de la ley 6716 invocada por el actor como fundamento de su pretensión y pilar de la sentencia de Cámara, por cuanto la incompatibilidad legal alcanza a las distintas jurisdicciones que coexisten en el ámbito territorial local, tanto provincial como federal. El art. 45 párrafo 3° de la ley 6716 -texto según decreto ley evidente 9978/1983- entre el establece beneficio una incompatibilidad jubilatorio y el ejercicio profesional. No se puede, concomitantemente, percibir la jubilación y ejercitar el oficio de abogado. Tanto es así que el jubilado no podrá ejercer no sólo la profesión de abogado, en virtud de cuyo ejercicio se jubiló, sino que tampoco podrá ejercer otras profesiones algo vinculadas con aquélla, como la de procurador o como la de notario, en forma directa o indirecta, ni integrar con su nombre estudios jurídicos. Si lo hiciere, será sancionado con la cancelación temporaria o definitiva del beneficio (conf. art. 45, cit.). Todo ello me lleva a afirmar que la sentencia impugnada, legal de como esta alega Corte el recurrente, en cuanto viola hace la doctrina hincapié en jurisprudencia que resulta inaplicable a los hechos del caso e interpreta y aplica erróneamente el art. 45 párrafo 3° de la ley previsional de los abogados. Cabe recordar que existe violación a la doctrina legal, con consecuencias invalidantes del fallo de grado, cuando el mismo transgrede la interpretación efectuada por esta Suprema Corte respecto de las normas legalesáque rigen la relación sustancial debatida en una determinada controversia, la que guarda identidad con la que está en tratamiento (doct. causas A. 69.210, sent. del 26-VIII2009; A. 70.410, sent. del 18-V-2011; A. 69.949, sent. del 18-V-2011; A. 69.981, sent. del 31-VIII-2011; A. 71.111, sent. del 19-IX-2012; entre otras). Tal lo acontecido en autos. 3. Lo expuesto es suficiente para declarar la procedencia del recurso extraordinario interpuesto y revocar la sentencia impugnada. Costas 12.008, texto a la vencida según ley (arts. 13.101, 60 inc. y 289 68 1°, in ley fine, C.P.C.C.). Voto por la afirmativa. Los señores jueces doctores Genoud, Hitters y Soria, por los mismos fundamentos del señor Juez doctor Pettigiani, votaron también por la negativa. Con lo que terminó el acuerdo, dictándose la siguiente S E N T E N C I A Por los fundamentos expuestos en el acuerdo que antecede, por mayoría, se rechaza el recurso extraordinario de inaplicabilidad de ley interpuesto (art. 279 del C.P.C.C.) Las costas se imponen a la recurrente vencida (arts. 60 inc. 1°, ley 12.008, texto según ley 13.101, 68 y 289 in fine del C.P.C.C.). Regístrese, notifíquese y devuélvase. DANIEL FERNANDO SORIA JUAN CARLOS HITTERS HILDA KOGAN LUIS ESTEBAN GENOUD EDUARDO JULIO PETTIGIANI JUAN JOSE MARTIARENA Secretario