Poder Judicial de la Nación EJECUCIÓN FISCAL. IMPUGNACIÓN DE LIQUIDACIÓN.IMPROCEDENCIA.PRECLUSIÓN DEMANDADA QUE GUARDO SILENCIO ANTE EL TRASLADO E IMPUGNA LA APROBACIÓN. LA RECTIFICACIÓN POR CAUSAS GRAVES O EVIDENTE ERROR ARITMÉTICO. Al margen de su acierto o error, la apreciación realizada por el juzgador derivó y tuvo su justificación en las imputaciones de “desproporción” y falta de equivalencia de USO OFICIAL las tasas aplicadas con las corrientes de plaza realizadas por el recurrente. No demostrado el error o el apartamiento de las pautas contenidas en la sentencia resulta improcedente volver sobre permitiendo litigio actos alcanzados por la preclusión, de este modo que se replanteen aspectos del que, en cuestionamientos, tal su el momento, caso de las no tasas merecieron de recargos a aplicar. La posibilidad de enmendar interés defectos no se extiende a los que pudieran provenir del contenido pronunciamientos en la firmes. estabilidad jurisdiccionales una exigencia al de El fundamento que adquieren quedar orden presupuesto ineludible de firmes, y de de ello reside las esa y decisiones cualidad es público, en tanto constituye un la seguridad jurídica.¨ PODER JUDICIAL DE LA NACIÓN // Plata, abril 28 de 2009.R.S.3 T.168 f*17/19 Y VISTOS: Este expediente N° 16.173/09, caratulado: Humberto s/ "AGUAS ARGENTINAS ejecución fiscal", S.A. c/ DORSO, procedente del Juzgado Federal de Primera Instancia n°3 de Lomas de Zamora, Secretaría n°8; Y CONSIDERANDO QUE: I) La causa es elevada en virtud del recurso deducido por la ejecutada contra la decisión (…) que desestimó la impugnación a la liquidación practicada por la ejecutante aprobada (…) por la suma de $(…)(comprensiva de capital e intereses); recurso que concedido(…), es mantenido con el memorial (…). II) Visto el memorial bajo examen, se advierte que la impugnación a la resolución del a quo se sustenta garrafales en en la la existencia liquidación de que errores ameritan su corrección. El recurrente entiende fuera de contexto el decisorio recurrido en cuanto sostiene que “no puede juzgarse a la tasa de interés vigente en esta materia con la misma vara con la que se meritúan los intereses que deben regir un incumplimiento entre particulares(…) ya que por la función que cumple debe calcularse de conformidad a lo dispuesto en los respectivos ordenamientos legales y las modificaciones que ulteriormente se hubieren dispuesto y que rijan al momento del efectivo pago”, por cuanto con ello no se reconoce Poder Judicial de la Nación ni se rechaza la existencia de error material denunciado, introduciéndose el a quo en el análisis de la legitimidad de la entidad de tasas. Sostuvo que si las normas y reglamentos a los que remite la sentencia no variaron cómo es posible explicar que entre el año 1995 –fecha del primer período en mora- y el año 2001 –fecha de emisión de los títulos de autos- la deuda haya USO OFICIAL crecido un 55% y luego, entre el año 2001 y el año 2004- fecha hecho en de la liquidación aproximadamente un objetada605% es lo decir haya una evolución dos veces mayor que la que sufrió el tipo de cambio con el dólar estadounidense. Indicó que esta simple observación refleja que no es posible aceptar que la liquidación cuestionada pueda haberse ajustado a la normativa aplicable por cuanto ninguna tasa vigente, normativamente dispuesta y judicialmente aceptable entre los años 2001 y 2004 podría haber prácticamente generado el 605% , un es acrecimiento decir, más del de 200% anual. Situación que de haberse producido de todas formas hubiese tornado inaplicables dichas disposiciones en tanto la confiscatoriedad evidente de las tasas eventualmente dispuestas por ellas las hubiera tornado inconstitucionales. III) fácticas Examinadas las constancias que brinda el subjudice, se advierte que en la oportunidad del traslado de la liquidación que ahora se impugna, la demandada guardó silencio y que sólo al serle notificada la aprobación de la misma planteó la necesidad de su revisión en razón – a su decir- de la existencia de error material. En razón de ello el juzgador se abocó al tratamiento de la cuestión y, por los motivos que ahora esgrime el apelante, es que se solicita la intervención de esta instancia revisora. La rectificación de un error de la naturaleza que se esgrime prevista en el art. 166, inc. 1°, del CPCCN busca amparar la solución real prevista por el juez, por lo que puede procederse a la misma en cualquier estado del proceso y aún de oficio sin que ello importe vulnerar la intangibilidad de un derecho adquirido. Es así que la resolución que aprueba la liquidación se estima pronunciada en cuanto hubiere lugar por derecho, dejando abierta su rectificación por causas graves o por un evidente error aritmético en cualquier momento anterior a la percepción de las sumas. Lo anterior ha llevado a señalar que, en las liquidaciones, si bien se ha aceptado el re- Poder Judicial de la Nación examen de las cuentas sin sujeción a plazos perentorios, el motivo debe estar constituido por la existencia de error puramente numérico o aritmético, mas no cuando se pretende cuestionar extemporáneamente la metodología utilizada para los cálculos corrección indexatorios, (cfr. CCom.C independientemente in re “López, de su Jorge c/ García Carlos s/ ejec”, del 21/11/85). Los razones esgrimidas por el apelante USO OFICIAL no son demostrativas de que en rigor de verdad esté en presencia de un error de se cálculo que habilite su rectificación, pues es obvio que con una simple operación aritmética –aplicación mediante de las tasas que corresponden en la materia a la deuda exigida- podría el apelante haberlo evidenciado, lo que no hizo. Tampoco demuestra que la liquidación se aparte de las pautas establecidas por el a quo en la sentencia(…) limitándose a señalar a cuánto asciende la tasa computada y a considerarla confiscatoria. No resulta erradamente le imputa el “fuera de contexto”, como recurrente, lo expresado por el a quo respecto a la apreciación de las tasas vigentes en esta materia con parámetros diversos a los que rigen entre particulares, dada la finalidad compulsiva que tienen en función del interés de la comunidad en el ingreso en término de las obligaciones de que se trata. Al margen de su acierto o error, la apreciación realizada por el juzgador derivó y tuvo su justificación en las imputaciones de “desproporción” y falta de equivalencia de las tasas aplicadas con las corrientes de plaza realizadas por el actual recurrente (…). En síntesis, no demostrado el error o el apartamiento de las pautas contenidas sentencia resulta improcedente volver alcanzados por la preclusión, sobre en su cuestionamientos, tal momento, el caso no de la actos permitiendo este modo que se replanteen aspectos del que, en de litigio merecieron las tasas de interés y recargos a aplicar. La posibilidad de enmendar se extiende contenido fundamento que al los de de quedar presupuesto jurídica. pudieran ello reside las firmes, de que pronunciamientos adquieren exigencia un a orden en defectos no provenir del firmes. El la estabilidad decisiones jurisdiccionales y esa cualidad es una público, en tanto constituye ineludible de la seguridad Poder Judicial de la Nación IV) Por las consideraciones expuestas, SE RESUELVE: 1) Confirmar la decisión (…)2) Imponer las costas de esta Alzada en el orden causado atento a la ausencia de réplica contraria. Regístrese, notifíquese y devuélvase. Firmasdo Jueces Sala III Dres.ANTONIO PACILIO.CARLOS ALBERTO NOGUEIRA. Dra.Concepción Di Piazza de Fortín.Secretaria. NOTA: Se deja constancia que el señor Juez Carlos A. USO OFICIAL Vallefín no suscribe la presente por hallarse en uso de licencia (art. 109 del R.J.N.).Conste. Concepción Di Piazza de Fortín (Secretaria). FDO.: