cerebro muy diferentes como la región occipital, la región temporal media, el giro angular, la región parietal posterior, el giro supramarginal, la región superior temporal, la región precentral, la insula anterior, la región inferior temporal, la región temporal anterior, la región fusiforme anterior, la región ventral occipito-temporal, entre otros. Es decir, la lectura ocupa casi todas las regiones principales del cerebro. Competencias para el aprendizaje de la lectura A pesar de la juventud de la ciencia de MCE, una de sus metas es mejorar la enseñanza de la lectura. Por esta razón, considera que la lectura es más una ciencia que un arte, y ha contribuido a encontrar en los últimos años y con la ayuda de la transdisciplinariedad, los mejores métodos basados en evidencia para su aprendizaje. Basados en información proveniente de la literatura proporcionada por MCE se han identificado doce competencias, es decir, una mezcla de conocimientos, habilidades y actitudes, necesarias para desarrollar el aprendizaje de la lectura (Tokuhama-Espinosa, 2011 basado en documentos de los siguientes autores: Beaton, 2004; Byrne, Olson, Samuelsson, Wadsworth, Corley, DeFries, et al., 2006; Coltheart, 2006; Dehaene, 2009; Fischer, Bernstein, & Immordino-Yang, 2007; Fowler & Swainson, 2004; Hauser, Chomsky & Fitch, 2002; Johnston & Costello, 2005; Joseph, Noble & Eden, 2001; PareBlagoev, 2006; Poldrack & Sandak, 2004; Schlaggar & McCandliss, 2007; Simos, Fletcher, Foorman, Francis, Castillo, et al., 2002; Tainturier, Schiemenz & Leek, 2006; Wolf & Katzir-Cohen, 2001; Wolf, 2007; Wolfe & Nevills, 2004; Ziegler & Goswami, 2005). A continuación mencionaremos 12 diferentes competencias de la lectoescritura. 1. La habilidad física de ver una palabra El mundo se percibe a través de los sentidos (Aristóteles, 384-322 AC). La capacidad de identificar o ver una palabra está determinada por el estímulo que entra por los ojos, que actúan como el “scanner” del cuerpo. Existen dos partes importantes para la estimulación visual: la retina, que recibe la estimulación de la luz sobre una página escrita, y la fóvea (Dehaene, 2009). La fóvea es una depresión situada en el centro de la mácula del ojo que constituye el punto de máxima agudeza visual, y es la parte especializada para la lectura. Si existe un daño a nivel de la retina, en la fóvea, una lesión en el córtex visual o un bloqueo en la fóvea, leer resulta imposible (Dehaene, 2009). El tamaño del estímulo, es decir de la letra, juega un papel en el aprendizaje de la lectura. Siempre será más sencillo leer letras grandes, y se requiere más esfuerzo para leer letras pequeñas. La razón es que mientras más grandes las letras, más espacio ocupan en la retina, y la fóvea permitirá tener la precisión máxima en el centro de la misma (Dehaene, 2009). El cerebro utiliza la atención selectiva: atiende más a lo que le llama más la atención. 9