EF-11-13 SANCIONES DENTRO DEL DERECHO DE LA COMPETENCIA El Derecho de la Competencia español tiene inmerso el principio constitucional de la libertad de empresa dentro del ámbito del mercado económico. Sus dos objetivos son: Controlar conductas injustas, reprimiendo aquellas empresas que lleven a cabo conductas contrarias a la libre competencia y; Controlar la estructura del mercado, evitando la formación de concentraciones peligrosas para la competencia. Las conductas anticompetitivas previstas en la Ley Española 15/2007, de 3 de julio, de Defensa de la Competencia son: Las conductas colusorias (Artículo 1) y el abuso de posición dominante (Artículo 2). Ambos artículos han utilizado el Derecho de la Competencia Europeo como referente. Se consideran conductas colusorias, todo acuerdo, decisión o recomendación colectiva, o práctica concertada o conscientemente paralela, que tenga por objeto, produzca o pueda producir el efecto de impedir, restringir o falsear la competencia en todo o parte del mercado nacional y, en particular, los que consistan en: La fijación, de forma directa o indirecta, de precios o de otras condiciones comerciales o de servicio. La limitación o el control de la producción, la distribución, el desarrollo técnico o las inversiones. El reparto del mercado o de las fuentes de aprovisionamiento. La aplicación, en las relaciones comerciales o de servicio, de condiciones desiguales para prestaciones equivalentes que coloquen a unos competidores en situación desventajosa frente a otros. La subordinación de la celebración de contratos a la aceptación de prestaciones suplementarias que, por su naturaleza o con arreglo a los usos de comercio, no guarden relación con el objeto de tales contratos. Incluso un mero intercambio comercial y confidencial sobre información sensible puede conllevar a un serio incumplimiento del Derecho de la Competencia. Se considera abuso de posición dominante, la explotación abusiva por una o varias empresas de su posición de dominio en todo o en parte del mercado nacional. Dicho abuso podrá consistir, en particular, en: La imposición, de forma directa o indirecta, de precios u otras condiciones comerciales o de servicios no equitativos. La limitación de la producción, la distribución o el desarrollo técnico en perjuicio injustificado de las empresas o de los consumidores. La negativa injustificada a satisfacer las demandas de compra de productos o de prestación de servicios. La aplicación, en las relaciones comerciales o de servicios, de condiciones desiguales para prestaciones equivalentes, que coloque a unos competidores en situación desventajosa frente a otros. La subordinación de la celebración de contratos a la aceptación de prestaciones suplementarias que, por su naturaleza o con arreglo a los usos de comercio no guarden relación con el objeto de dichos contratos. Una Compañía en posición dominante tiene una responsabilidad especial vis-à-vis en el mercado. Algunas prácticas consideradas perfectamente legítimas cuando son llevadas a cabo por empresas no-dominantes, son gravemente sancionadas cuando son conducidas por empresas en posición dominante puesto que pueden afectar severamente la competencia. Cabe señalar que el incumplimiento del Derecho de la Competencia puede suponer para empresas, serias consecuencias económicas y pérdida de prestigio, independientemente de su dimensión. Como consecuencia de dichas conductas prohibidas, el legislador ha previsto una serie de sanciones para poder disuadirlas. Las sanciones previstas en la Ley Española 15/2007 de 3 de julio, de Defensa de la Competencia han sido elaboradas conforme a las disposiciones Europeas. Debemos diferenciar las dos vías por las que se puede sancionar: Vía Administrativa: En el caso que se den conductas anticompetitivas, las compañías estarán sujetas a una multa cuya magnitud dependerá de la gravedad del incumplimiento. Pueden ascender del 1% al 10% del volumen de negocios total de la empresa, en función de si la infracción es leve, grave o muy grave. Además, la Ley establece que cuando el infractor sea una persona jurídica, se podrá imponer una multa de hasta 60.000 € a cada uno de sus representantes legales o a las personas que integran los órganos directivos que hayan intervenido en el acuerdo o decisión. Finalmente, en caso de que no sea posible delimitar el volumen de negocios, las infracciones tipificadas en la presente Ley serán sancionadas en los términos siguientes: - Las infracciones leves con multa de 100.000 a 500.000 €. Las infracciones graves con multa de 500.001 a 10 millones de €. Las infracciones muy graves con multa de más de 10 millones de €. La Comisión Nacional de la Competencia (CNC) es la autoridad competente para conocer de las acciones que conllevan las mencionadas sanciones. Dichas acciones podrán interponerse por denuncia, o bien ex officio. Vía Civil (Juzgados Mercantiles): Declaración de invalidez de los acuerdos y compensación por daños y perjuicios. Para cualquier modificación o implantación que quieran realizar en las empresas en materia de la competencia, les recordamos que Bufete Escura tiene un departamento específico. Esta información ha sido proporcionada por Bufete Escura, el cual tiene un convenio con AEBALL. Los profesionales de Bufete Escura están a su disposición para cualquier consulta o aclaración en el teléfono 93.494.01.31. (Aurora Cantero). Hospitalet, marzo 2013