Secretaría General Departamento de Conducta de Mercado y Reclamaciones Ref. Expediente: R- Informe del Departamento de Conducta de Mercado y Reclamaciones del Banco de España en relación con la reclamación presentada por D. XXX, en fecha 31 de marzo de 2014 contra la entidad XXX I. OBJETO DE LA RECLAMACIÓN El reclamante interpuso, en tiempo y forma, reclamación ante el Servicio de Atención al Cliente de la entidad reclamada en relación a la tramitación del expediente de testamentaria con motivo del fallecimiento de su padre. Así, en fecha 3 de octubre de 2012, tuvo entrada en este Departamento escrito por el cual el reclamante manifestaba que su padre había fallecido el día XX de mayo de 2012 y que el XX de agosto de 2012 había entregado toda la documentación (testamento, certificado de últimas voluntades, certificado de defunción, aceptación de herencia y liquidación de impuestos) a la entidad con objeto de poder gestionar el capital de la cuenta XXXX, sin que la entidad haya puesto a su disposición los fondos de la herencia. Ante el mencionado escrito, este Departamento requirió al reclamante, en fecha 5 de octubre de 2012, a fin de que aportara acreditación de haber formulado su reclamación con carácter previo ante el servicio de atención al cliente de la entidad reclamada, así como certificado de defunción, certificado del Registro de Actos de Última Voluntad, testamento o declaración de herederos ab intestato, aceptación de la herencia y, en su caso, contrato de cuenta corriente, en caso de obrar en su poder. En fecha 12 de enero de 2014, tuvo entrada en este Departamento nuevo escrito del reclamante reiterando que la entidad, sin estar legalmente autorizada, le impide gestionar su patrimonio (fruto de la herencia de su padre) y le obliga a tener el capital depositado en una cuenta sin rendimiento alguno y cobrándole comisiones. Además, en el apartado de “Antecedentes de la queja/reclamación”, expone: <<Considerando que mi padre XXXX disponía de la cuenta nº XXX en XXXXX, oficina de XXX antes de fallecer el día XX de mayo de 2012 a las 5:00 AM. Ese día se le permitió a XXXX la extracción de la cuenta de 12.000 euros primero, y de 3000 euros después. Mod. 3/2696.0/2 Calle Alcalá, 48 28014 Madrid Teléfono + 34 91 338 5000 Fax + 34 91 531 0059 www.bde.es Pág . 2 R- El día 1 de junio de 2012, el Sr. XXXX, subdirector de la sucursal de XXXX, extrajo dinero para pagar en efectivo una factura de funeral de 32.673,30 euros. Este mismo procedimiento se usó para pagar una factura de mudanza emitida por un constructor, el día 11 de junio de 2012 por un importe de 1.121 euros. El día 18 de junio de 2012 se cargó en la cuenta una comisión de 15 euros. (…)>>. Por último, en fecha 3 de agosto de 2014, se recibió escrito del reclamante por el que daba respuesta a las alegaciones de la entidad, exponiendo, entre otras alegaciones; que en la actualidad no existe ningún proceso judicial contra la entidad por el tema objeto de reclamación y que la entidad no menciona nada en relación a los gastos de mudanza. Damos por reproducidas en su integridad las alegaciones del reclamante por ser conocidas por ambas partes. II. ALEGACIONES DE LA ENTIDAD RECLAMADA La entidad reclamada presentó las mismas mediante escrito de fecha 20 de mayo de 2014. En síntesis, expone que el asunto de referencia está sometido a decisión judicial por lo que, de conformidad con la Orden ECC/2502/2012, de 16 de diciembre, debe ser causa de inadmisión, informando a este Departamento que el saldo de la cuenta sobre la que versa la reclamación se encuentra consignada judicialmente ante la falta de aceptación de la herencia por parte de los herederos. Por otro lado, alega que en fecha 18 de diciembre de 2009, D. XXXX abrió en XXXX contrato de cuenta nº XXX. Posteriormente, en fecha 29 de diciembre de 2009, D. XXXX solicita que se incorpore como autorizado en la cuenta a su hermano, D. XXXX. En fecha 25 de mayo de 2012, el autorizado en la cuenta D. XXXX, sin comunicar a la entidad el fallecimiento del titular, procede a realizar dos reintegros en la referida cuenta por un importe total de 15.000 €. Por lo que, al no constar a la entidad el fallecimiento del titular, desconocía que se debía proceder a la extinción de la autorización dada. En fecha 1 de junio de 2012, D. XXXX comunica a la entidad el fallecimiento de D. XXXX y, en su condición de coheredero conforme al testamento que el reclamante facilita, ordena la trasferencia por importe de 32.673,30 € para el pago de gastos de sepelio del causante, de tal forma que, al tratarse de gastos de funeral o entierro y venir autorizados por uno de los herederos la entidad procedió a atender la orden de transferencia. Por otro lado, en fecha 28 de septiembre de 2012, el reclamante solicita a la entidad la disposición de los bienes, aportando documento de aceptación de herencia solo suscrita por el reclamante, y no por el conjunto de los herederos, por ello, al no tener el documento validez de partición de herencia, la entidad deniega la disposición de los fondos, consignado la cantidad depositada en la cuenta (57.595,84 €) en el juzgado. Damos por reproducido en su integridad el escrito de alegaciones de la entidad por ser conocido por ambas partes. Mod. 3/2696.0/2 Pág . 3 R- III. OPINIÓN DEL DEPARTAMENTO 1.- Cuestiones Previas.A este Departamento le corresponde enjuiciar la actuación de la entidad desde la óptica de la normativa de transparencia y de protección a la clientela, así como de las buenas prácticas y usos financieros. Por otra parte, este Departamento de Conducta de Mercado y Reclamaciones sólo puede emitir un pronunciamiento sobre aquellas cuestiones que se someten a su conocimiento y cuentan con la debida acreditación documental, no pudiendo entrar a valorar las manifestaciones verbales que no sean admitidas por ambas partes, ya que ello implicaría dar credibilidad a lo expuesto por una de ellas en detrimento de la otra. En el presente caso, con carácter previo a la resolución de la cuestiones planteada, es necesario establecer los hechos controvertidos, a efectos de determinar tanto la competencia de este Departamento como la responsabilidad de la entidad sobre lo sucedido. Así, de los acontecimientos que se infieren tanto de las alegaciones como de la documental, podemos concluir que el reclamante muestra su disconformidad con: La negativa de la entidad de poner a disposición del reclamante los fondos de la cuenta nº XXX. La disposición por parte del hermano del causante, D. José XXXX, sobre la cuenta nº XXX, por un importe total de 15.000 €, el mismo día del fallecimiento del titular. El cargo en cuenta de los gastos funerarios, en fecha 1 de junio de 2012, por importe de 32.673,30 €. Factura de mudanza emitida por un constructor el día 11 de junio de 2012, con cargo a la cuenta del causante, por un importe de 1.121 €. El cargo de una comisión por valor de 15 € el día 18 de junio de 2012. Por otro lado, la entidad alega que el asunto de referencia se encuentra sometido a los juzgados y tribunales, y por ello, este Departamento debe declararse incompetente para resolver el presente expediente, mientras que el reclamante sostiene que la entidad no es parte en ese procedimiento judicial. Así las cosas, observada la documental obrante en el expediente (únicamente dos de las declaraciones habidas en el proceso, la primera del responsable de la funeraria, y la segunda del hermano del causante) cabe decir que, si bien los hechos debatidos en aquel proceso (Proceso Abreviado XXXX-D) coinciden con los hechos expuestos en este reclamación, el objeto de ambos procedimientos no coincide. Por un lado, el Proceso Abreviado XXXX-D tiene como objeto el discernimiento de una posible ilicitud en la disposición de los bienes de la herencia por parte del hermano del causante (único denunciado en aquel procedimiento), mientras que el presente expediente versa sobre el análisis de la conducta de la entidad, como depositaria de los fondos y encargada de la custodia de los mismos, a la hora de permitir las disposiciones Mod. 3/2696.0/2 Pág . 4 R- realizadas, así como su negativa a poner a disposición del reclamante los fondos de la cuenta y el cargo de una comisión en la cuenta por importe de 15 €, hechos estos últimos, que por otro lado, no son debatidos en el proceso ante el Juzgado de Instrucción nº 3 de XXXX. Por todo lo expuesto, este Departamento se considera competente para valorar la actuación de la entidad como depositaria y custodia de los fondos del causante. 2.- Disposición de fondos por parte del reclamante.Con carácter general, en caso de fallecimiento del titular de una cuenta, las entidades deben asegurarse que quienes acuden a ellas solicitando, en su condición de herederos, información o la puesta a disposición de los fondos del difunto, ostentan tal condición. Para ello, y a efectos de determinar a quienes debe facilitarse información sobre las posiciones que mantenía el causante y atribuirse los fondos, recabarán de estos una serie de documentos que acrediten su condición de herederos. En este sentido, lo habitual es solicitar certificado del Registro de Actos de Última Voluntad, copia del testamento o de la declaración de herederos abintestato. Además, como requisito adicional, en los casos en los que se solicita la disposición de la herencia, hay que señalar, que una vez se ha justificado por los interesados el derecho hereditario, los herederos deben acreditar ante las entidades el derecho a la adjudicación de los bienes concretos, para lo cual éstas pueden exigir la documentación justificativa de la aceptación, partición y adjudicación de bienes, que podrá formalizarse tanto en documento público como privado, siempre que, en este último caso, venga firmado por todos los herederos o sus representantes y se lleve a cabo el reconocimiento de firmas mediante la pertinente diligencia. En el presente caso, la parte reclamante solicita que se le permita disponer del saldo de la cuenta del causante en la proporción que le corresponde como heredero, sin embargo, comprobada la documental, se observa que no obra en el expediente la partición de la herencia legalmente hecha, toda vez que, de conformidad con el código civil, la partición de herencia únicamente puede ser testamentaria (realizada por el testador), convencional1 o judicial2, siendo este documento imprescindible para que la entidad pueda proceder a la puesta a disposición de los bienes a los herederos. En el supuesto que nos ocupa, no hay partición realizada en el testamento; del documento aportado por el reclamante como partición, se aprecia que el mismo es una manifestación de aceptación de herencia, sin que conste partición realizada por acuerdo de los herederos, por lo que, tampoco nos encontramos ante una partición convencional; siendo así, si los herederos no logran realizar un documento de partición por acuerdo, deberán incoar el pertinente procedimiento judicial recogido en los 782 y siguientes de la Ley de Enjuiciamiento Civil, sin que en ningún caso, sea la entidad quien, a solicitud de parte de los herederos, proceda al reparto. 1 El artículo 1058 del Código Civil dispone: <<Cuando el testador no hubiese hecho la partición, ni encomendado a otro esta facultad, si los herederos fueren mayores y tuvieren la libre administración de sus bienes, podrán distribuir la herencia de la manera que tengan por conveniente>>. 2 Así lo establece el artículo 1059: <<Cuando los herederos mayores de edad no se entendieren sobre el modo de hacer la partición, quedará a salvo su derecho para que lo ejerciten en la forma prevenida en la Ley de Enjuiciamiento Civil>>. Mod. 3/2696.0/2 Pág . 5 R- Por todo lo expuesto, no procede acoger la pretensión del reclamante en relación a la solicitud de entrega de los fondos obrantes en la cuenta del causante. 3.- Disposiciones realizadas por D. XXXX sobre la cuenta nº XXX, por un importe total de 15.000 € el mismo día del fallecimiento del titular y de 1.121 € el día 11 de junio de 2012.D. XXXX, hermano del reclamante era autorizado de la cuenta nº XXX, estando habilitado por tanto para la disposición de los fondos en ella depositados. No obstante, debemos recordar a la entidad que el servicio de caja derivado del contrato de cuenta corriente es asimilable al mandato y ante el fallecimiento del cuentacorrentista, dado que el mandato se extingue por la muerte del mandante (caso de ser el mismo, su único titular), la entidad, para la realización de nuevas operaciones con cargo a la cuenta, debería requerir a aquellos a los que ahora pertenecen los fondos cuestionados –sus herederos- a fin de que las autorizaran expresamente. Por ello, la figura de autorizado del hermano del causante sobre la cuenta en cuestión quedó extinguida por el fallecimiento de su hermano. Sin perjuicio de todo lo anterior, es obvio que para que pueda derivar algún tipo de responsabilidad por parte de la entidad en este sentido, la entidad debe tener conocimiento del fallecimiento, resultado que, respecto de la disposición de 15.000 €, la misma fue realizada el mismo día del fallecimiento del titular, alegando D. XXXX en su Declaración como imputado en el Proceso Abreviado XXX-D que <<su hermano falleció sobre las siete de la mañana del XX de mayo y a las ocho de la mañana el declarante fue al banco a hacer lo que le había mandado su hermano>>. Por ello, puesto que la puesta en conocimiento de la entidad del fallecimiento del titular no se hizo hasta días después, no cabe apreciar por parte de la entidad actuación falta a la diligencia exigible en estos casos y, por tanto, contraria a las buenas prácticas y usos financieros en este extremo. No así, respecto de la disposición realizada el el día 11 de junio de 2012 por importe de 1.121 € con objeto del pago de una mudanza, toda vez que la propia entidad reconoce que tuvo conocimiento del fallecimiento el día 1 de junio de 2012, por lo que, desde ese momento, no debió permitir ninguna disposición como la de la naturaleza de la indicada sobre la cuenta por el autorizado, resultado que, en estos casos, las disposiciones deben venir autorizadas por todos los herederos. Por ello, este Departamento aprecia que la conducta de la entidad es contraria a las buenas prácticas y usos financieros en este extremo. 4.- Gastos funerarios.En relación con los gastos de sepelio, este Departamento ha venido sosteniendo de forma reiterada que no constituye una mala práctica bancaria que las entidades, antes de la adjudicación de la herencia, admitan disposiciones singulares, siempre y cuando éstas vengan autorizadas expresamente por todos los herederos, se trate de gastos referidos al sepelio o funeral, o Mod. 3/2696.0/2 Pág . 6 R- se refieran a operaciones ordenadas en vida del titular que impliquen el mantenimiento del caudal hereditario, entre las que se pueden incluir las domiciliaciones de recibos de compañías de suministro eléctrico, de telefonía, impuestos, seguros, etc., cuya devolución podrían suponer recargos e inconvenientes a todas luces innecesarios; ello, claro está, salvo que exista orden expresa en contrario dada por el conjunto de coherederos. Precisado lo anterior, lo expuesto en relación a las precauciones a adoptar en caso del fallecimiento del titular de una cuenta no debe ser óbice para que la entidad haga frente al pago de los gastos de sepelio y enterramiento que se encuentren debidamente documentados y acreditados, pues el mismo se encuentra dentro de las disposiciones singulares que este Departamento entiende que la entidad debe atender en buena práctica bancaria, y ello aún antes de contar con la escritura concreta de adjudicación de herencia. Efectivamente, aunque las entidades deben extremar su diligencia en el cumplimiento de todas las formalidades debidas en los procesos de testamentaría, tanto para proteger los intereses de los herederos que pudieran verse perjudicados por disposiciones indebidas del caudal hereditario, como el suyo propio en aras de salvaguardar su responsabilidad subsidiaria en el pago del impuesto de sucesiones, en el caso de los gastos de sepelio y funeral como los que nos ocupan, la oposición a realizar un reintegro por parte de la entidad este Departamento viene entendiendo que no se encuentra justificada, pues, por lo demás, son deducidos a la hora tanto de determinar el caudal relicto a distribuir entre los herederos y legatarios como al establecer la base imponible sujeta a gravamen (Artículo 14 Ley 29/1987, de 18 de diciembre, del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones y Artículo 33 Real Decreto 1629/1991, de 8 de noviembre, por el que se aprueba el Reglamento del Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones) en cuanto se justifiquen y hasta donde guarden la debida proporción con el caudal hereditario, conforme a los usos y costumbres de cada localidad. Conforme a lo dispuesto en el párrafo segundo del artículo 1.894 del Código Civil “los gastos funerarios proporcionados a la calidad de la persona y a los usos de la localidad deberán ser satisfechos, aunque el difunto no hubiese dejado bienes, por aquellos que en vida habrían tenido la obligación de alimentarle”. Sensu contrario, parece evidente que habiendo dejado bienes el causante, como es el caso, habrán de aplicarse éstos en primer lugar, antes incluso de hacer frente a obligación fiscal alguna, a hacer frente a dichos gastos. Así se desprende también, a mayor abundamiento, de los artículos 902 y 903 del Código Civil, en el sentido de que corresponde a la masa hereditaria soportar los gastos originados por la contingencia indicada. La jurisprudencia se ha manifestado también en diversas ocasiones en el sentido indicado. Así: a) La sentencia núm. 102/2003 de 13 marzo de la Audiencia Provincial de A Coruña (Sección 1ª), en relación a la procedencia de los gastos de sepelio y funeral del causante, con cargo a fondos existentes en la cuenta corriente entregados al hermano de las recurrentes para el pago de las exequias3, 3 La referida sentencia señala en sus Fundamentos Jurídicos: <<PRIMERO.- Para centrar debidamente la cuestión que se somete a consideración de la Sala, se debe partir del hecho -no debidamente tratado en la resolución apelada- de que los fondos existentes en la cuenta corriente, de la que era titular el finado padre de las demandantes, se emplearon para el pago de las exequias de aquél, satisfechas Mod. 3/2696.0/2 Pág . 7 R- b) Y ello al margen de que se acredite o no la condición de heredero, como indica la Sentencia núm. 240/2000 de 26 mayo de la Audiencia Provincial de Zamora (Sección Única), en sus fundamentos jurídicos4. En el presente caso, tanto reclamante como entidad aportan factura emitida por la funeraria, por lo que, a la luz de lo anteriormente expuesto no podemos declarar la conducta de la entidad contraria a las buenas prácticas y usos financieros. 5.- Comisión de 15 €.Por último, el reclamante muestra su disconformidad en su reclamación por el cargo de una comisión por importe de 15 € en la cuenta del causante. En este sentido, si bien el reclamante no especifica la naturaleza de esta comisión y la entidad no la menciona en sus alegaciones, del documento de detalle de movimientos de la cuenta se observa que el concepto es “Liq. Cta. Vista XXX”, por lo que parece que el cargo se debe a una comisión de mantenimiento de la cuenta. En relación con este extremo, cabe indicar que la comisión de mantenimiento suele retribuir el servicio prestado a los titulares del depósito consistente en el mantenimiento de los registros (informáticos o de cualquier otra naturaleza) que la entidad debe habilitar para el funcionamiento del depósito, el servicio de caja básico asociado (ingresos en efectivo, reintegros en efectivo o disposiciones mediante cheque, adeudos e ingresos que se derivan de las liquidaciones periódicas de la propia cuenta y la entrega de los medios de disponibilidad habitual del depósito: talonarios de cheques o libretas) así como la emisión de las informaciones y documentos (de movimientos y/o liquidaciones) que obligatoriamente deban facilitar a sus clientes. Así pues, la entidad se encontraría legitimada para repercutir a su cliente el importe de la comisión de mantenimiento, mientras la cuenta permanezca vigente –aunque ésta presentase saldo cero- y, por tanto, no haya sido cancelada, dentro de los límites, claro está, del contenido del contrato formalizado entre las partes y de las tarifas de la entidad. IV. CONCLUSIÓN En relación con los hechos que motivan esta reclamación este Departamento estima que la entidad reclamada se apartó de las buenas prácticas financieras al permitir una disposición de 1.121 € por gastos de mudanza sobre la cuenta del causante por el hermano del fallecido. por su hermano. Así se ha acreditado debidamente mediante la declaración de éste último y la presentación de unas facturas por importes superiores, incluso, al saldo de la mencionada cuenta después del óbito (…). TERCERO.- Así expuestas las cosas, hemos de concluir que no existió extralimitación por parte de la demandada al abonar los gastos de entierro y funeral del titular de la cuenta corriente con los fondos existentes en la misma, en tanto esos fondos son parte del metálico de la herencia, y como tal están sujetos al pago de los servicios en cuestión, y habida cuenta, además, de lo dispuesto en el precitado art. 1893 del C. Civil en relación con la gestión ajena>>. 4 “TERCERO (...) Lo cierto es que la actora ha prestado unos servicios en beneficio de la comunidad de herederos, como lo son por el funeral de su padre, sin que haya percibido el importe íntegro de los gastos. La falta de acuerdo o desavenencias entre los deudores no debe afectar al acreedor que se ha visto impelido a reclamar la cantidad adeudada para obtener la satisfacción de su crédito. Mod. 3/2696.0/2 Pág . 8 R- Este Departamento no es competente para valorar, decidir, ni pronunciarse sobre los posibles daños y perjuicios que se hayan podido ocasionar a los clientes y usuarios de los servicios financieros. Dichas cuestiones podrán someterse, en su caso, y de considerarlo el perjudicado, a los correspondientes órganos judiciales. Se recuerda que este informe5 no es susceptible de recurso ni ulterior tramitación en esta sede, dejando a salvo los derechos de los particulares para proceder en la forma que estimen conveniente a sus intereses ante la jurisdicción competente. 5 Le indicamos que no ha sido posible emitir el informe dentro del plazo máximo de cuatro meses a contar desde la fecha de presentación de la reclamación, debido a la carga de trabajo existente en el Departamento de Conducta de Mercado y Reclamaciones. Mod. 3/2696.0/2