SANOFI PASTEUR ADACIL VACUNACION VIAJERO SON 2 MEDIAS FORMANDO UNA PÁGINA Estrategias actuales de vacunación - Estrategia individual - Estrategia Capullo • No existe razón para sufrir enfermedades si las vacunas son seguras, eficaces y las previenen, además de su utilidad y efectividad, probada una y otra vez”.(1) Dr. Hugo Dibarboure Rossini Post-Grado de Epidemiología de la Universidad de la República Gerente de la Unidad sanofi pasteur, Uruguay Palabras clave: Enfermedades transmisibles, prevención, estrategias, vacunas. Resumen La población en su conjunto es del interés de la macrogestión. Las vacunaciones dirigidas desde allí se basan en estrategias poblacionales. Mientras tanto, en la gestión clínica, la historia de vacunaciones de la persona puede analizarse de manera integral. El individuo, el paciente, es el centro de todo análisis y destino de las acciones, con sus hábitos, su actividad diaria, su entorno ambiental y social (familiar, escolar, laboral) y su envejecimiento. Cada vez que pensamos en la prevención con vacunas, el clínico debe analizar a cada uno de sus pacientes de manera particular. De allí que estas estrategias utilizan el criterio individual. Entre ellas, la más novedosa es la estrategia “capullo”, designada con este nombre porque trata de prevenir la enfermedad de los niños menores de 6 meses contra la tos convulsa, vacunando a sus contactos más cercanos. El propósito del presente artículo, es la revisión de estas diferentes estrategias. Introducción Las vacunaciones deben tener claro el principio de cualquier gestión: el pasado, el presente y el futuro. • El pasado se refiere al diagnóstico de situación previo a la intervención, lo que supone disponer y analizar la frecuencia de la enfermedad que se pretende prevenir, y en lo posible conocer su impacto y carga de enfermedad. • El presente se refiere a la intervención en sí misma, la forma, las estrategias para llegar con la intervención a las poblaciones dianas. • El futuro es la evaluación permanente del resultado de la intervención.(5, 6) Noviembre 2011 • en Medicina Otro concepto asociado a la vacunología es que como toda disciplina que se relaciona con las enfermedades de las poblaciones, debe tener presente los pilares epidemiológicos, es decir, los casos de las personas en determinado lugar y en determinado tiempo.(7, 8, 9) Por tanto, la vacunología tiene entre sus aspectos conceptuales, el mensaje que las vacunas disponibles lleguen a las poblaciones para que estas alcancen el estado de protección antes que el evento ocurra -prevención-, y eso significa plantearse una serie de posibles grupos de acciones enmarcadas en estrategias. El presente artículo trata de reflejar y sintetizar las diferentes estrategias empleadas en vacunación, que tienen por objetivo que las vacunaciones lleguen a las poblaciones y también las estrategias con criterio individual. Estrategia de vacunación con criterio poblacional Las estrategias poblacionales, conceptualmente son todas aquellas estrategias que se imparten desde el Ministerio de Salud. Aunque es frecuente asociar que el destino de las acciones son muchas personas, en realidad tienen que ver más por quien las imparte, que por el número de personas que reciben la intervención. Eso es bien claro en vacunaciones. Existe una responsabilidad desde la macrogestión (desde la autoridad sanitaria), y tiene como objetivo llevar las acciones a un grupo determinado de personas. La estrategia poblacional persigue un objetivo claro: a partir de un diagnóstico con indicadores de frecuencia de una enfermedad, existentes o posibles, la estrategia intentará disminuir la frecuencia, evitar su aumento o evitar su existencia.(10) 71 DIBARBOURE H Estrategias de vacunación La vacunación a través de una Estrategia Poblacional logra:(10, 15) • Reducir el riesgo promedio de la enfermedad en la población. • No requiere delimitar a los grupos de personas, aplicado a vacunaciones, generalmente basta con la edad. • Dado que el riesgo absoluto de enfermar de una persona en particular, es bajo, el beneficio para esa persona es bajo. Esto se le conoce como la paradoja preventiva (Rose 1985). En otras palabras, el resultado esperado es el control (el más perseguido de los resultados), la eliminación (no siempre posible) o la erradicación de la enfermedad, pero también esta estrategia persigue mantener el resultado una vez alcanzado (enfermedad controlada, eliminada o erradicada). Las estrategias de vacunación con criterio poblacional incluyen la vacunación sistemática, que puede realizarse a una determinada edad, o a manera de campaña de vacunación. Estas estrategias con criterio poblacional así como los aspectos estratégicos para vencer las barreras a la vacunación, serán tratados en un futuro artículo. Estrategia de vacunación con criterio individual El concepto de salud actualmente aceptado, "completo estado de bienestar físico, mental y social y no solamente la ausencia de enfermedad", supone que el individuo debe tener la capacidad de satisfacer necesidades y cambios o adaptarse al medio ambiente. La salud es un recurso para la vida y el bienestar, y por lo tanto un requisito para el desarrollo humano. Desde Alma Ata y la Estrategia Salud para Todos del año 2000, y sin entrar en la discusión de sus logros, avances y fracasos, es indudable que el individuo debe estar involucrado en su propio cuidado, en su propio bienestar, que le permita una vida productiva. (19, 20) Debe informarse, debe solicitar información para el cuidado de su salud. Esto también puede aplicarse a las vacunaciones, sobre todo de los adultos. Para eso, el binomio médico-paciente adquiere una importante dimensión para promover las acciones de prevención. Coincide con la propuesta de G. Rose en 1981, quien presenta los dos enfoques estratégicos para la prevención y control de enfermedades, el poblacional (responsabilidad de la macrogestión) y el individual (responsabilidad de la gestión clínica).(10) Esta forma de diferenciar acciones, intereses y objetivos, implica reconocer que un factor que sea causa de enfermedad en las personas, no es necesariamente el mismo factor que determina la tasa de enfermedad en la población. Se distingue la causa de los casos (enfermedad del individuo), de la causa de la incidencia (enfermedad en la población).(10, 21, 22) (Ver Tabla 1) La estrategia de vacunación con un enfoque individual permite que el médico conozca la real situación del paciente, determinar los factores de riesgo y a partir de ese análisis recomendar una vacunación. El paciente puede estar en alguna de las situaciones de riesgo: la edad, la actividad laboral o escolar, un viaje, el embarazo, una 72 Figura 1 A Factor de Riesgo: Edad 2) Niño 4) Adultos 5) Adulto mayor Vacunación del individuo con el factor de riesgo Embarazo La vacuna antitetánica y antigripal son recomendadas de manera sistemática durante cualquier momento del embarazo.(23, 24) La vacuna antigripal sin embargo, aún no cuenta con la confianza de muchos obstetras y eso motiva que no la recomienden, o más aún, la contraindiquen. La pandemia del virus A/H1N1 demostró que la infección por el virus de la gripe puede ser grave durante el embarazo por las alteraciones musculares que provoca, y/o por las consecuencias infecciosas y funcionales del aparato respiratorio y estas consecuencias afectan al binomio madre-feto. Exposición laboral La exposición a agentes infecciosos inmunoprevenibles del trabajador en sus diversas ramas de actividad, genera recomendaciones específicas. A modo de ejemplo, la hepatitis A en los trabajadores de alimentos y saneamiento; la vacuna antirrábica en personal de zoológico y trabajadores rurales en zonas donde circula el virus rábico o con casos de rabia animal; vacuna anti-meningocócica en personal de laboratorio que manipula cepas para su cultivo. Sin embargo, la gripe por su habitual tasa de incidencia anual (5 a 15% de la población) hace que la antigripal cuente con la recomendación sin importar la rama de actividad.(25) Exposición por viajes El viaje internacional es un riesgo para determinadas infecciones prevenibles con vacunación. La evaluación del riesgo debe hacerse de manera individual teniendo Noviembre 2011 • en Medicina Vacunación 3) Adolescentes enfermedad crónica. En cada una de estas situaciones (sola y también combinada), el paciente tendrá al menos una recomendación de vacunación. (Ver Figura 1) La edad como riesgo Los extremos de la vida son considerados de riesgo debido a la inmadurez del sistema inmune en el niño recién nacido y por la inmuno senescencia del adulto mayor.(8, 23) En ambos casos las vacunas que corresponden aplicar forman parte de los programas sistemáticos o en campañas (antigripal por ejemplo). Sin embargo, debemos plantear la particularidad de la vacunación antineumocócica en los adultos, que se aplica durante la campaña antigripal para evitar pérdida de oportunidades. De no hacerse de esa manera, puede aplicarse en cualquier otro momento del año debido a que no tiene estacionalidad. 1) Primer año B Factor de Riesgo: exposición (actividades) 1) Actividad exposición y embarazo 1.1) Laboral 1.2) Embarazo 1.3) Escolar 1.4) Viaje o condiciones debilitantes 2) Condiciones debilitantes 2.1) Enf. Crónica sin compromiso inmunológico 2.1) Enf. Crónica con compromiso inmunológico Desde el principio de las vacunaciones, la infancia y en particular los primeros años de la vida del niño han sido el objetivo de la mayoría de los programas de vacunación. Como ejemplos históricos podemos citar la variolización de E. Jenner en la Europa de fin de siglo XVIII, la vacunación antirrábica producto del desarrollo de Louis Pasteur a fines del siglo XIX, la vacunación contra la Polio a partir de 1955 y fundamentalmente la creación del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI) por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1974.(11) en cuenta por un lado, el antecedente inmunológico del viajero (enfermedades o vacunaciones previas), y por otro la situación epidemiológica de la enfermedad en cuestión, tanto en el país de residencia del viajero como la situación epidemiológica de la misma enfermedad en el lugar de destino. Teniendo en cuenta todas esas variables se define la recomendación de vacunas.(23, 26) Condiciones debilitantes Por condiciones debilitantes de las personas se entienden todas las enfermedades crónicas o antecedentes mórbidos que traducen un riesgo aumentado para una enfermedad prevenible, ya sea por ser más frecuente o más severa.(23, 24, 27, 28) En este grupo de personas se interviene en vacunaciones para prevenir la enfermedad (prevención primaria), pero a su vez y por la enfermedad de base, las vacunaciones pueden ser parte de las intervenciones individuales de prevención secundaria, como aquellas que se dirigen a la reducción de las consecuencias más graves. Su objetivo no es reducir la incidencia, sino reducir la gravedad y duración, y en consecuencia reducir complicaciones y la letalidad de la enfermedad ya establecida.(6) Noviembre 2011 • en Medicina Una manera de clasificar al paciente para la recomendación de las vacunas es diferenciando los procesos mórbidos en aquellos sin alteración o con alteración de la inmunidad. La importancia de esta distinción no pasa tanto por las diferencias en las vacunas recomendadas, sino por las que se contraindican. Si bien cada caso hay que analizarlo de manera individual, como principio general las vacunas con diseños de gérmenes vivos atenuados se contraindican en los pacientes con alteración de la inmunidad.(23, 28) Entre las enfermedades sin compromiso inmunológico están las enfermedades crónicas cardiovasculares, respiratorias, metabólicas, antecedentes de neumonía y neurológicas. Entre las que tienen alteraciones de la inmunidad están las renales, la asplenia (anatómica o funcional), cáncer, enfermedades hemato-oncológicas, autoinmunes, infección por el VIH y tratamientos con inmunosupresores (farmacológicos o radioterapia).(23, 24, 27, 28, 29) Vacunación de los contactos Analizar la situación particular del paciente permite establecer los vínculos con el entorno más cercano: los 73 DIBARBOURE H Tabla 1 Estrategias de vacunación Tabla 2 Estrategias de Vacunación Estrategia Poblacional • Pone énfasis en las causas de enfermedad en la población. • Ataca “las causas de la incidencia” de una enfermedad en la población. • Consecuencia: la prevalencia de exposición y el riesgo de enfermar de toda la población disminuyen colectivamente Estrategias de vacunación contra la Tos convulsa sugerida por la Iniciativa Global contra el Pertussis Estrategia Individual • Pone énfasis en la prevención y control de las causas de enfermedad en las personas, en particular las de alto riesgo de enfermar. • Ataca las “causas de los casos” de una enfermedad. • Consecuencia: la prevalencia de exposición y el riesgo de enfermar del resto de la población no se modifican. Quién interviene Quién interviene • Personal de salud vinculado a la Salud Pública (especialistas en Gestión Sanitaria y Epidemiología) • Roles: • Personal de salud vinculado a la Gestión clínica con los pacientes (Medicina general, familiar, pediatría, especialidades de asistencia) • Roles: Cómo interviene Cómo interviene • Describe y analiza los signos y síntomas en la totalidad de los enfermos (población) • Elabora diagnósticos de situación • Planifica, programa, recomienda, ejecuta acciones para lograr las metas contactos. Contactos se refiere a quienes permanecen con el paciente más de 4 horas diarias durante varios días. Si bien la definición es precisa, aunque el riesgo de transmisión disminuye con menos horas y menos días, no es correcto eliminar la posibilidad que otras personas sean quienes transmiten una infección, aunque no cumplan con los criterios citados. Es así que de manera amplia, los familiares, los cuidadores y el personal de salud entran en el grupo de contactos.(24) Personal de la salud y cuidadores Dos vías de análisis del riesgo Las personas que trabajan en el campo de la salud, sea personal o cuidador de enfermos, pueden adquirir enfermedades transmisibles prevenibles con vacunación desde los pacientes, por su permanente exposición. Esa vía del riesgo es tan válida como la inversa. Los pacientes también están expuestos a la enfermedad transmitida desde el personal de salud y cuidadores.(23, 30, 31, 32) La primera de las vías comprende a la actuación de la Medicina Ocupacional, que como en otras ramas de actividad recomienda la vacunación contra determinados agentes, cuya fuente son los pacientes. Sin dudas, una de las enfermedades que más preocupa es la hepatitis B. La otra vía de análisis de riesgo, mirado desde los pacientes, es pensar en su seguridad. No debería ocurrir que un trabajador del sector sea la fuente de transmisión existiendo intervenciones eficaces y seguras como la vacunación. El personal de salud puede ser responsable de brotes dentro del ambiente hospitalario como así también ser el responsable de su diseminación en la sociedad.(23, 24, 30, 31, 32) 74 • Busca signos y síntomas de enfermedad en el paciente • Establece un diagnóstico de caso y su pronóstico • Prescribe tratamientos y recomienda acciones de prevención (primaria y secundaria) Las vacunas que están recomendadas en el personal de salud por alguna de las razones expuestas son: • hepatitis B, • triple viral, • varicela, • gripe, • pertussis y • hepatitis A. Además como todo trabajador debe cumplir con la obligatoriedad de: • refuerzos contra difteria y • tétanos.(23, 24, 30, 31, 32) Pensando en la seguridad de los pacientes, esta estrategia podría integrarse a los Programas de Control de Infecciones Intra-Hospitalarias, en coordinación con Salud Ocupacional. Vacunación Familiar Estrategia “Capullo” Analizar a la familia como núcleo para la recomendación de vacunación es adecuado. Analizando la situación particular de cada uno de ellos, se puede obtener las necesidades de todos los integrantes. La otra manera es partiendo de uno de sus integrantes, por lo general el que tiene una edad con alto riesgo o una condición debilitante, para luego analizar sus contactos. En algunas situaciones se puede encontrar una familia en la que uno de sus integrantes no puede recibir una vacuna. Por ejemplo, la vacuna antigripal no puede aplicarse antes de los 6 meses de vida. En este caso una manera de evitar el contagio del lactante es protegiendo a sus familiares, además de cuidadores y personal de salud. Incluso hay algunos familiares más transmisores que otros según el Noviembre 2011 • en Medicina Estrategia Objetivo Primario y/o mejorar 1. Reforzar vacunación en la infancia 2. Refuerzo escolar 4-6 años Vacunación universal 3. para adolescentes 4. Vacunación de trabajadores de la salud Vacunación hijos de 5. trabajadoresde de la salud Vacunación selectiva de 6. nuevas madres, familiares y contactos de recién nacidos universal 7. Vacunación en adultos Objetivo Secundario Reducir morbi-mortalidad en lactantes y niños Reducir morbi-mortalidad en escolares y desarrollar inmunidad comunitaria Reducir morbilidad adolescentes y desarrollar inmunidad comunitaria Reducir la transmisión a lactantes pequeños Reducir la circulación de B. pertussis Reducir la transmisión a lactantes pequeños Reducir la transmisión a lactantes pequeños Reducir morbilidad en trabajadores de guarderías Reducir morbilidad Reducir circulación Reducir la transmisión a lactantes pequeños Reducir morbilidad en adultos Reducir morbilidad en adultos y desarrollar inmunidad comunitaria Reducir la transmisión a lactantes pequeños La estrategia que se conoce como “Estrategia Capullo” tiene que ver con el concepto de la vacunación familiar. En ese sentido, en determinadas ocasiones que dependen del gérmen y de las características de la transmisión del agente, vacunando a algunos integrantes de la familia, la protección que se alcanza va más allá del que recibe la vacuna, es decir que también se protege de manera indirecta a otros integrantes de la familia no vacunados. Extraído de Global Pertussis Iniciative. (Ref. 37) agente. Volviendo al caso anterior, con la gripe, los niños en edad escolar y sobre todo en guardería, que tiene un hermano menor de 6 meses, deberían ser especialmente considerados. Lo mismo sucede con los abuelos en contacto con los niños en edad escolar. De manera similar, la familia de los pacientes con enfermedades crónicas o con alteraciones del sistema inmune, deberían recibir ciertas vacunas a los efectos de colaborar con la prevención del paciente, independientemente si el niño con la condición debilitante pueda o deba recibir la vacuna. Entran en esta categoría las vacunas contra: • la gripe, • hepatitis A, • varicela y • triple viral. Cada caso debe analizarse de manera particular por el equipo de salud tratante. Una estrategia similar en su concepto es la estrategia "capullo".(33, 34, 35) La estrategia "capullo" (Cocoon en inglés), la más novedosa entre las estrategias de vacunación, tiene el objetivo de prevenir la transmisión de un agente en particular, la Bordetella pertussis. Antes de la vacunación sistemática, la tos convulsa fue un “problema de salud pública”, en el sentido de su impacto por la cantidad de casos, sus características, gravedad y letalidad, la carga de enfermedad (medida en términos económicos) y los costos sociales por la muerte prematura. La vacunación sistemática contra este agente con un esquema de 5 dosis, a los 2, 4 y 6 meses Noviembre 2011 • en Medicina (vacunación primaria) y los refuerzos a los 12-18 meses y 5 años, mantenida durante décadas y con altos porcentajes de cobertura en las cohortes, permitieron controlar la enfermedad.(33, 34, 35) Los sistemas de vigilancia de distintos países detectaron un incremento de casos de tos convulsa en la primera década del siglo XXI, sobre todo en población menor de 6 meses de edad, en quienes la primo-vacunación (2, 4 y 6 meses) aún no generó protección inmunológica. La confirmación de esta tendencia en el seguimiento de estos hallazgos, motivó la creación de la Global Pertussis Iniciative (GPI) formado por expertos en el tema vinculados a la infectología pediátrica: investigadores, epidemiólogos, bacteriólogos, entre los que se destacan personalidades del CDC y del Instituto Pasteur. Este grupo se viene reuniendo regularmente, sumando experiencias; y han llegado a interesantes conclusiones sobre la enfermedad y plantean diferentes estrategias de prevención a partir de estos nuevos conocimientos.(33, 34, 35, 36, 37) Las razones que podrían explicar un aumento de casos de la enfermedad son: • Disminución de las tasas de cobertura de vacunación contra el agente. En algunos países y sobre todo regiones en un determinado país, ha tenido descensos de la cobertura por debajo del 80% (esto no se aplica a Uruguay). • No aplicar la vacuna en el refuerzo a los 5 años (no se aplica en Uruguay). • Pérdida de anticuerpos protectores con el paso de los años. Tanto los anticuerpos generados por la infección como por la vacunación no perduran más de 5 a 8 años. 75 DIBARBOURE H • Ausencia de refuerzo natural por la disminución del agente tras años de vacunación sistemática. • Nuevo y mejor método diagnóstico (PCR). • Gracias a la PCR, confirmación de casos en adolescentes y adultos susceptibles, cuya manifestación clínica no es la habitual. Los casos suelen ser banales, sin embargo, se le reconoce a estos individuos ser el reservorio y los casos fuentes desde los cuales pueden contagiar a niños menores de 6 meses. • Mejoras en los registros y en los sistemas de vigilancia. • Es muy probable el sub-registro, sobre todo en adultos. A partir de estos hallazgos, y producto de antecedentes de algunos países en cuanto a la vacunación contra el Pertussis, la GPI ha propuesto considerar estrategias de vacunación. Estas estrategias con los objetivos que intenta alcanzar cada una de ellas, se presentan en la tabla 2. Algunas de ellas forman parte de estrategias de vacunación sistemática,(1, 2, 3 y 7) mientras que el resto (4, 5, 6) son estrategias más de criterio individual en grupos de riesgo fundamentalmente vinculado a evitar la transmisión a terceros.(33, 35, 37) No se puede vacunar al niño contra el Pertussis (que está presente en las vacunas combinadas) antes de los 2 meses de edad, y aunque lo vacunemos con las tres dosis (esquema primario a los 2, 4 y 6 meses), puede que aún no alcance los niveles de protección hasta pasados los 7 meses (un mes después de cumplido el esquema primario). Hasta ese momento pueden ser susceptibles a la infección. Hay que recordar que la forma de manifestación en los adultos es diferente que en el niño y por eso no se sospecha esta enfermedad en ellos. Sin embargo, son la fuente de contagio, sobre todo quienes están más en contacto con el niño pequeño. En los niños pequeños la enfermedad es severa y hasta mortal.(33, 34, 35, 36) La Iniciativa GPI, ha propuesto la vacunación contra la tos ferina en los adultos contacto del recién nacido, Estrategias de vacunación preferentemente antes que el niño cumpla con el alta de la maternidad o próxima a ella. La vacuna logra proteger a los adultos en un alto porcentaje y así se evita la transmisión al niño, motivo del nombre adquirido por la estrategia.(37) Esta experiencia se viene realizando con éxito en Estados Unidos, Canadá, Costa Rica y Francia, entre otros países. Comentario final El campo de la prevención, en el que la vacunación forma parte de manera específica contra determinados agentes responsables de enfermedades transmisibles, ha sido sin dudas uno de los mayores contribuyentes a los cambios epidemiológicos de las enfermedades y como consecuencia, cambios demográficos. Las vacunaciones se proyectan fundamentalmente bajo dos grandes formas estratégicas: con criterio poblacional y con criterio individual (grupos de riesgo) que no significa que sean antagónicas ni opuestas, ya que muchas veces son complementarias. Declaración de Conflicto de Interés Declaro mi relación profesional con la empresa sanofi pasteur. Todo lo expuesto en el presente artículo ha sido escrito a título personal. Agradecimientos Al Dr. Homero Bagnulo. La mayoría de estos temas los hemos hablado, discutido, estudiado juntos y también algunos de ellos los hemos llevado a la acción. Por eso, mi especial agradecimiento a quien reconozco como un maestro de la vacunología. Bibliografía 1. National Advisory Committee on Immunization. Canadian Medical Association. Canadian Immunization Guide. 6th Edition.2002;Part I, General Considerations:1-3. 2. Mérieux C. La Vaccinologie. La Revue du Praticien, París, 1995;45:1477 3. Robbins FC. The History of Polio Vaccine Development. 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