Inauguración de la 16ª Setmana de la Ciència en Catalunya, que tiene lugar del 18 al 27 de Noviembre “Para mejorar nuestra competitividad se hace imprescindible crear ecosistemas de innovación mediante alianzas público-privadas” En palabras de Antoni Esteve, presidente de ESTEVE, ello contribuirá a impulsar definitivamente un modelo basado en la economía del conocimiento en nuestro país Desarrollar nuevas vocaciones científicas y retener y atraer jóvenes con talento científico, principales objetivos de la Setmana de la Ciència Barcelona, noviembre de 2011.- Esta mañana, en el Parlament de Catalunya, durante el acto de inauguración de la 16ª Semana de la Ciencia en Catalunya, el presidente de ESTEVE, Antoni Esteve, ha afirmado que en nuestro país hace falta una visión amplia y a largo plazo que permita crear ecosistemas de innovación para favorecer la investigación y sobre todo la generación y atracción de talento científico. La clave está en la creación de redes de colaboración entre la industria y expertos de diferentes campos científicos y en la mejora de las políticas en estos ámbitos por parte de la Administración. “Se trata de innovar en el proceso de innovación, en una estrategia disruptiva que debe llevar a la investigación aún más allá”, según Antoni Esteve, quien opina que la colaboración, el partenariado y las alianzas público-privadas no deben verse como casos excepcionales o un signo de debilidad de alguna de las partes, sino como el mejor modo de combinar talento, experiencia y capacidad en las distintas etapas del proceso investigador y en un engranaje que aporte beneficios a todos y con un objetivo competitivo. Ante la Presidenta del Parlament, Núria de Gispert y el Secretari General d’Universitats i Recerca de la Generalitat de Catalunya, Antoni Castellà, y una amplia representación de entidades que apoyan la iniciativa y parlamentarios, Esteve ha reivindicado una apuesta en firme por lo que la Unión Europea ya definió en el año 2000 y que ha ratificado en la estrategia de innovación Europa 2020: “un camino hacia la competitividad basado en la economía del conocimiento y en la innovación, mejorando las políticas relativas a la sociedad de la información, la investigación y el desarrollo científico”. También ha destacado el papel de los jóvenes emprendedores, creando proyectos y realidades de éxito, “ya que sin talento no hay ideas ni innovación”. En este sentido, ha señalado que “debemos ver la crisis económica actual como una palanca de oportunidades. Sobre todo aquellos jóvenes con inquietudes científicas, quienes no deben dejarse llevar por la tentación del victimismo, porque son la generación mejor formada de la historia y tienen que saber identificar y aprovechar las oportunidades que se generen”. Antoni Esteve ha subrayado la situación de Catalunya, que con un sistema universitario y de investigación pública de primer orden y con un potente sector industrial, “tiene unas condiciones privilegiadas para convertirse en un ecosistema de innovación de vanguardia. Siempre con el apoyo de la Administración y con una sostenibilidad que dependerá de la capacidad de crear nuevo talento y de moverse entre el sector académico y empresarial”. Para ello es clave seguir invirtiendo fuertemente en conocimiento, destinando todavía más esfuerzos tanto a nivel institucional como particular “para que los jóvenes que tienen talento puedan desarrollarlo en nuestro país, cerrando así este círculo virtuoso de competitividad en conocimiento, motor indispensable para que Catalunya se convierta en una potencia de primer nivel en investigación e innovación”. Actualmente, ya es responsable del 1% de la producción científica mundial, con universidades, compañías privadas y organismos públicos trabajando conjuntamente para incorporar las mejores instalaciones, tecnologías y equipamientos para desarrollar la I+D, como los parques científicos y los centros de investigación punteros. Acerca de ESTEVE ESTEVE (www.esteve.com) es un grupo químico-farmacéutico líder en España y con una importante presencia internacional. Desde su fundación en 1929, mantiene un firme compromiso con la excelencia, dedicando todos sus esfuerzos a promover la salud y mejorar la calidad de vida de las personas. La investigación en ESTEVE constituye su principal seña de identidad y cuenta con un portafolio de proyectos altamente innovadores cuya última finalidad es aportar respuestas a necesidades médicas no cubiertas adecuadamente.