Procesos Parlamentarios para realizar una Asamblea Tomado del

Procesos Parlamentarios para realizar una Asamblea
Tomado del Manual de Procedimientos Parlamentarios escrito por
Reece B. Bothwell
Los procesos parlamentarios se hacen para llevar a cabo una
reunión o asamblea en orden, democráticamente y en forma
expedita.
Se utilizan para facilitar la libre discusión de los asuntos del
temario de la Agenda.
Son normas
y reglas de orden que hacen posible el uso
organizado de la libertad de expresión.
RESUMEN DE LAS REGLAS BASICAS DEL DEBATE
Para que la discusión en una asamblea sea fructífera, es
necesario observar ciertas reglas que son fundamentales para
iniciar y desarrollar el debate. Estas reglas son sencillas,
pero sumamente importantes. El seguimiento de estas reglas
permite lograr la mayor efectividad de las asambleas:
1- Todo miembro de la asamblea debe tener una legítima
oportunidad de expresarse.
2- Todo turno para participar en el debate debe iniciarse
solicitando la palabra a la Presidencia y hablar cuando
la Presidencia acceda dicha petición.
3- La
persona
que
hace
uso
de
la
palabra,
deberá
identificarse y salvo impedimento físico,
deberá
mantenerse de pie mientras habla.
4- Nadie debe consumir un segundo turno para hablar sobre el
mismo asunto ante la asamblea, mientras alguien que desee
hablar sobre el mismo tema, aún no haya tenido la
oportunidad de hacerlo.
5- Nadie deberá consumir más de dos turnos en el debate de
un mismo punto.
6- Los turnos no deben exceder de 10 minutos (en asambleas
numerosas se dan hasta 3 minutos). Para extenderse en el
derecho de palabra por más de 10 minutos, se requiere el
consentimiento unánime o la aprobación de una moción con
este fin por 2/3 partes de los votantes.
7- Todo participante en el debate deberá ceñirse al tema de
la discusión, es decir, al asunto ante la consideración
de la asamblea. En caso que se aleje del tema deberá ser
llamado al orden por la Presidencia.
8- Ningún participante en el debate tiene derecho a
dirigirse a otro miembro de la asamblea directamente.
Debe siempre dirigirse primero a la Presidencia y solo
indirectamente a cualquier otro miembro de la asamblea.
9- Cuando un debatiente se ve obligado a aludir a otro
miembro de la asamblea, debe evitar, siempre que sea
posible, mencionar a este último por su nombre. Es
preferible usar frases como “La señora delegada o el
señor delegado o el caballero que acaba de hacer uso de
la palabra o el señor tesorero en su informe”, etc. Estas
palabras deberán siempre precedidas por la frase señor
Presidente.
10- Nadie tiene derecho a hacer una pregunta a la persona
que hace uso de la palabra, a menos que se le pida
permiso a la Presidencia. La forma correcta es “Señor
Presidente y al ser reconocido por la Presidencia, añadir
¿ Me permite la señora o el señor en el uso de la palabra
una pregunta?
11- Toda persona que en el derecho de palabra proceda
descortésmente o alude a otra persona en la asamblea en
forma desconsiderada o irrespetuosa, o que emplee un
lenguaje ofensivo, deberá ser llamado al orden por la
Presidencia. Si las circunstancias lo requieren, puede
ser disciplinada, privándosele el uso de palabra o en
cualquier otra forma al alcance de la asamblea.
12- La Presidencia no debe terminar prematuramente una
discusión o debate mientras haya personas que deseen
expresarse en la asamblea y aún no hayan tenido la
oportunidad de hacerlo. Una vez que todos hayan tenido la
oportunidad de hablar y se haya procedido a la votación,
no está en orden interrumpir la votación para escuchar a
alguna persona que no indicara a tiempo su deseo de
hablar.
13- La Presidencia protegerá al que consuma un turno en la
asamblea, contra interrupciones impropias tales como
comentarios en alta voz de algún delegado, silbidos,
movimientos por el salón en forma desaforada, etc.
14- La Presidencia declarará fuera de orden a quienquiera
que ocurra en ataques personales contra algún miembro de
la asamblea.
15- Cualquier persona que en el uso de la palabra sea
declarada fuera de orden por la Presidencia, deberá
sentarse inmediatamente.
16- El proponente de una moción no tiene derecho hablar en
contra de la misma.
17- El proponente de una moción tiene el derecho a iniciar
y a cerrar el debate sobre la moción, si no ha agotado el
límite de tiempo en los turnos previos.
Cortesía de un buen amigo del Junko Golf Club, a propósito de la celebración
de la Asamblea Ordinaria de 2012.