Maestro Preparatoria por David Robinson Pureza Moral— Comportamiento De Acuerdo con las Normas de Dios EDITOR EN JEFE: Kyle W. Elkins [email protected] GERENTE DE NEGOCIOS: Wayne Sewell [email protected] EDITOR DE NIÑOS: Libby Gill Lección 1 El Origen del Comportamiento . . . 2 Lección 2 Los Principios de la Justicia . . . . . 8 Lección 3 El Único Dios Verdadero . . . . . . . 14 ILUSTRADOR: Connie Spears Lección 4 Reconociendo la Adoración Falsa . . . . . . . . 20 ARTISTAS GRAFICAS: Shawn Blase Jeff Allen Greg Hilterbrand Lección 5 El Maldecir . . . . . . . . . . . . . . . . . 26 Lección 6 Un Día en Siete . . . . . . . . . . . . . . 32 Lección 7 Tratando Bien a los Suyos . . . . . 38 Lección 8 Respetando la Vida Humana . . . 44 Lección 9 Adulterio y Fornicación . . . . . . . . 50 Lección 10 Cosas Que no le Pertenecen . . . 56 Lección 11 Cuidado con lo Que Dice . . . . . . 62 DISEÑADORES DE TRAZADO: Cindy Butler Ashley Elkins Tammie Sutton EDITORES DE PRUEBA: Terry McKellar Deby Turrentine Erin Harris Jim Jones Carolyn Burks Joni Curtis PRODUCTION DE IMPRESA: Charles Easley DISEÑO DE CUBIERTO: Jeff Allen Copyright © 2015 Vol. 15, No. 3 Bogard Press 4605 N. State Line Ave. Texarkana, TX 75503-2928 www.bogardstore.org 1-800-264-2482 Lección 12 Deseando lo Que Otros Tienen . . . . . . . . . . . . . 68 Lección 13 Moralidad Positiva . . . . . . . . . . . 74 7 de junio, 2015 • Lección 1 El Origen Del Comportamiento Versículos Bíblicos: Mateo 5:27, 28, 33, 34, 43, 44 Propósito: Al final de la lección el estudiante hablará de la condición del corazón que es reflejada su el modo de vivir. NOTA: Ésta no es la ayuda tradicional para el maestro; en cambio, es una guía diaria para ayudar al maestro en la preparación de la lección. El uso de esta guía asegurará que el maestro se prepare y que haya suficiente material adecuado para el tiempo disponible en clase. La ayuda para el maestro estará integrada junto con el material de la lección del estudiante. Se sugiere que el tiempo de preparación sea de 10 a 15 minutos cada día por cinco días. Cada sección del material se prepara en uno de estos días de preparación. Esto ayudará al maestro a preparar la clase de forma más relajada y a la vez efectiva. La clave para el éxito, el uso regular y consistente del material. Es vital que el maestro dedique una pequeña cantidad de su tiempo cada día en la preparación de la lección. Plan Diario Introduciendo la Lección 1. Lea el pasaje bíblico de la lección 1. Lea el comentario del texto en la sección de ayuda para el maestro. Tome nota de algún comentario que pueda provocar preguntas en la clase. 2. Lea la sección “Comience Aquí” en el manual del alumno. Considere las siguientes preguntas para utilizarlas en la introducción de su lección. A. ¿Cómo define usted la palabra moralidad? B. ¿Dónde podemos encontrar normas confiables para nuestro comportamiento? 2 3. Busque algunos artículos y otras fuentes de ayuda acerca del El Sermón del Monte. Visite la biblioteca de su iglesia o pida ayuda de su pastor. 4. Escriba al menos dos buenas oraciones declarativas para utilizar en el inicio de su lección. 5. Ore y pida a Dios que lo guíe en su preparación Explicando las Escrituras 1. Lea nuevamente el pasaje bíblico utilizado en el texto de la lección. Revise las notas que hizo en el Día 1 acerca de las preguntas que puedan surgir en respuesta a los comentarios o en los versículos del texto. 2. Lea la Sección “Una mirada más de cerca” en el manual del alumno. Considere las siguientes preguntas para utilizar en la presentación del material de la lección. A. ¿Cuál es el primer paso fundamental en la moralidad? B. ¿Podemos ser realmente morales si nuestro comportamiento solo es externo? ¿Por qué?, ¿Por qué no? C. ¿Cuáles son algunos pecados que la mayoría de personas no cometen en lo externo? D. ¿Podemos escapar de nuestros pensamientos privados y no hacer nada que podamos querer allí? E. ¿Dónde nace el pecado? F. ¿Cómo se relaciona el lenguaje con la moralidad? G. ¿Es correcto utilizar cualquier tipo de lenguaje que queramos? ¿Por qué?, ¿por qué no? H. ¿Está el mundo dividido entre amigos y enemigos? I. ¿Cómo vemos a las demás personas? ¿Cómo las veía Jesús? 3. Utilice diferentes materiales que tenga disponible para responder algunas preguntas que pueda descubrir de su lectura de los versículos del texto. 3 4. Ore con respecto a lo que ha aprendido y acerca de la preparación de su lección. Aplicando el Material a las Vidas de los Estudiantes 1. Una vez más lea el pasaje bíblico utilizado como el texto de la lección. 2. Lea ¨Perspectivas¨ sección trimestral del estudiante. Considere las siguientes preguntas para la discusión en clase. A. ¿Están siempre nuestros motivos o acciones completamente separados? B. ¿Si estamos bien en nuestro interior, nos comportaremos correctamente en nuestro exterior? C. ¿Cómo llegar a ser un “guardián de reglas” nos cambia? D. ¿Cómo ver las cosas como Dios las ve nos cambiará? 3. Escriba una lección específica que haya aprendido de su estudio que esté seguro de compartir con su clase. 4. Ore con respecto a lo que ha aprendido y acerca de su preparación para enseñar. Haciendo Cambios Positivos en las Vidas de mis Estudiantes 1. Lea nuevamente el pasaje bíblico utilizado como el texto de la lección. 2. Lea ¨Construyendo Bloques¨ sección trimestral del estudiante. Considere las siguientes preguntas para desafiar a los miembros de la clase para hacer cambios en sus vidas basadas en su entendimiento de la Biblia. A. ¿Por qué no es suficiente simplemente decirle a alguien que detenga su mal comportamiento? B. ¿Como describe la Biblia en Jeremías 17:9 el corazón del hombre? C. ¿Cuáles son dos puntos de vista diferentes de la humanidad? D. ¿Cuál es el punto de vista bíblico sobre la humanidad? 4 3. En este punto esté seguro de tener respuestas a todas las preguntas sugeridas aquí y en el material de la lección. Si usted tiene otros temas que usted quiera discutir con su clase, anótelos ahora para que pueda investigarlos antes del tiempo de clase. 4. Ore con respecto al material de la clase y pida a Dios dirección en su preparación. Tomando el Material de la Lección para Nuestro Futuro 1. Lea una vez más el pasaje bíblico utilizado como el texto de la lección. Recuerde que la mejor forma de aprender la Biblia es estudiando la Biblia. 2. Lea la sección “trampolín” en el manual del estudiante. 3. ¿Hay estudiantes en su clase con decisiones espirituales personales que tomar? No los confronte, pero presente una oportunidad para abrir una discusión franca de los problemas espirituales. 4. Presente el plan de salvación a aquellos que están perdidos necesitan escucharlo, y aquellos quiénes son salvos necesitan recordarlo. 5. Plantee una discusión sobre varios tipos de normas del comportamiento. Discuta a qué se le llama una situación moral. 6. Haga su propio resumen de cómo usted pretende utilizar el tiempo de su clase. 7. Reúna algunos materiales que utilizará para la clase y organícelos como usted pretende utilizarlos 8. Ore nuevamente. Pida a Dios que lo guíe y prepare su corazón para enseñar de Su Palabra. Comentario del Texto En el Sermón del Monte Jesús dijo claramente que no vino a destruir la ley; mas bien, vino a cumplirla y personalmente observó cada parte de ella. Jesús guardó la ley tal como Moisés la dio y no como los fariseos y los escribas la interpretaban. Amplificó la ley en el sentido que aplicó los principios morales a nivel del corazón del hombre y no solamente a 5 nivel exterior. Jesús no solamente guardó la ley en su vida física, sino que también la guardó en su corazón. Ésta fue la enseñanza que Él estaba impartiendo en los versículos del texto. Para propósitos de la lección, seleccione solo los versículos que se van a utilizar aquí. Pero, si le parece bien, lea todo el Sermón del Monte como ayuda en la preparación de la lección. Para entender la moralidad, necesitamos primero entender que algunas normas son necesarias para evitar el caos. Todos necesitamos un reloj para saber qué hora es. Solo cuando todos los relojes se ajustan a la misma hora tenemos una sociedad regulada. Una brújula es inútil si no ésta apuntando con precisión hacia el norte magnético. Si nuestras brújulas apuntan en una dirección diferente, habrá confusión a la hora de viajar. De igual manera, nos portamos de acuerdo algún tipo de mecanismo gubernamental interno. Este mecanismo puede ser nuestros propios deseos y codicia. Sencillamente podemos hacer cualquier cosa que nos hace sentir bien en el momento. Pero claramente, lo que le hacer sentir bien puede herirme a mí. Podemos comportarnos de varias maneras. Podemos desarrollar nuestra moralidad desde nuestras situaciones, buscando hacer lo que aparenta ser bueno en el momento, pero los momentos pueden cambiar. Muchas situaciones serán nuevas y extrañas, y no sabremos qué hacer de un momento a otro. La mejor forma de obtener nuestras normas morales es por medio de la Palabra de Dios. Cuando hacemos esto, podemos tener una serie de principios aceptados por todos aquellos que creen en Jesús. El beneficio más grande es que son principios duraderos. El cielo y tierra pasarán, pero la Palabra de Dios no pasará. Durante todo el tiempo, aún en la eternidad, podemos estar seguros de que cuando seguimos la Biblia estaremos haciendo lo correcto; ninguna otra guía puede ofrecernos esta seguridad. Es importante notar que nadie es moral por naturaleza. Somos pecadores por naturaleza, y pecaremos. Podemos aprender un comportamiento correcto, pero es solamente a través de nuestra asociación con Jesús. El principio de la moralidad es la salvación. Cuando permitimos que Jesús venga a nuestros corazones, podemos poner un fundamento en el cuál se construye bien una vida agradable a Dios. Si no ponemos este fundamento en nuestros corazones, cualquier cosa que construimos eventualmente caerá. Como Jesús dijo, es como construir una casa en la 6 arena. No importa el cuidado que tengamos al construir, el fundamento se desprenderá y la casa caerá. Si queremos ser morales, tenemos que ver mas allá de nuestro comportamiento externo; tenemos que ver hacia nuestros motivos internos. Nunca podremos separar los dos. Una gran ilustración de esto es el tema del adulterio. El adulterio es la relación sexual fuera del matrimonio. Dentro del matrimonio la relación sexual es buena y adecuada y no hay condenación en ella. Pero el motivo cambia todo. Cuando la lujuria, no el amor, es lo que motiva, el resultado será el pecado. El pecado nace en el corazón antes de que se manifieste en la vida. Jesús enseñó en Marcos 7:21, “Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios.” Lo que hay en el corazón precede a lo que pasa en la vida. Es por eso que necesitamos enfocarnos en nuestros corazones primero. Una de las maneras en que lo hacemos es a través de la lengua. Pensemos en las palabras y si las palabras que usamos para formar nuestros pensamientos son sucias, entonces nuestro comportamiento tomará la naturaleza sucia de nuestras palabras. Muchas personas al parecer piensan que lo que hay en su imaginación no les hace daño. Esto es una mentira que contradice Proverbios 23:7, “Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él.” El Rey David declaró en Salmos 53:1, “Dice el necio en su corazón: No hay Dios.” El ateismo empieza en el corazón. Y así es con toda forma de malicia. Somos lo que pensamos y cuando pensamos maldades, pronto nos encontraremos haciendo el mal. Por eso es vital que controlemos lo pasa en nuestras mentes. No podemos tratar nuestras mentes como un tipo de depósito de basura donde todo tipo de porquería es puesta para luego preguntarnos, ¿por qué nuestro comportamiento es tan malo? Algunos pueden decir, “Yo veo o leo esto, pero eso no me afecta.” Eso no tiene sentido. ¿Por qué cree que pagan millones para pasar comerciales en la televisión? Es precisamente porque lo que vemos y escuchamos nos cambia. En materia de comportamiento y moralidad, el amor es nuestra guía confiable. Jesús enseñó que toda la ley estaba resumida en la simple verdad de amar supremamente a Dios y amarnos los unos a los otros en la manera en que nos amamos a nosotros mismos. Cuando hacemos esto, hemos fundado una base para un comportamiento moral consistente. 7