ESGUINCE DE TOBILLO ¿Qué es el esguince de tobillo? Un esguince de tobillo hace referencia a un desgarro de los ligamentos del tobillo. El esguince de tobillo más común ocurre en la parte lateral o externa del tobillo. Se trata de una lesión sumamente común que afecta a muchas personas durante una amplia variedad de actividades. Puede ocurrir en el contexto de una fractura de tobillo (es decir, cuando los huesos del tobillo también se quiebran). No obstante, es más común que ocurra de manera aislada. ¿Cuáles son los síntomas del esguince de tobillo? Los pacientes reportan dolor después de haberse torcido el tobillo. Por lo general, esto ocurre debido a una lesión por inversión, que significa que el pie gira por debajo del tobillo o la pierna. Ocurre comúnmente cuando se realizan deportes. Los pacientes se quejan de dolor en la parte externa del tobillo y se presentan varios grados de hinchazón y hemorragia debajo de la piel (es decir, aparecen hematomas). Técnicamente, estos hematomas son conocidos como equimosis. Dependiendo de la gravedad del esguince, una persona podrá o no soportar peso con el pie. ¿Cuáles son los factores de riesgo del esguince de tobillo? Como se observó antes, estas lesiones ocurren cuando el tobillo gira por debajo de la pierna, lo que se denomina inversión. Los factores de riesgos son aquellas actividades, como el fútbol o basquet y deportes que implican saltos, en las que un deportista puede caer y doblarse el tobillo o pisar el pie de un oponente. Algunas personas están predispuestas a los esguinces de tobillo. En las personas con retropié varo, que significa que la naturaleza general o postura de los talones está orientada ligeramente hacia el interior, estas lesiones son comunes. Esto se debe a que es más fácil girar el tobillo hacia afuera. En las personas que sufrieron un esguince grave previamente, también es más fácil doblarse el tobillo y que se produzca otro esguince. Por lo tanto, uno de los factores de riesgo del esguince de tobillo es tener inestabilidad. Las personas que tienen músculos débiles, en especial los que se denominan peroneos, que se extienden a lo largo del exterior del tobillo, pueden estar más predispuestas. Anatomía Hay varios ligamentos en el tobillo. Los ligamentos, en general, son las estructuras que conectan hueso con hueso. Los tendones, por otra parte, conectan músculo con hueso y permiten que esos músculos ejerzan fuerza. En el caso de un esguince de tobillo, hay varios ligamentos que normalmente resultan afectados. Los dos más importantes son los siguientes: 1. El LPAA o ligamento peroneo astragalino anterior, que conecta el astrágalo con el peroné en la parte externa del tobillo. 2. El LPC o ligamento peroneo calcaneo, que conecta el peroné con el calcáneo. 3. Por último, existe un tercer ligamento que normalmente no se desgarra. Se extiende en mayor medida por la parte posterior del tobillo y se denomina LPAP o ligamento peroneo astragalino posterior. Estos deben ser diferenciados de los llamados ligamentos del esguince del tobillo superior, que son totalmente diferentes y se ubican en una zona más arriba en la pierna. ¿Cómo se realiza el diagnóstico del esguince de tobillo? Los esguinces de tobillo se pueden diagnosticar de manera bastante sencilla dado que son lesiones comunes. Es muy sugestiva la ubicación del dolor en la parte externa del tobillo con sensibilidad e hinchazón en un paciente que tiene inversión del tobillo. En estos pacientes, las radiografías normales también sugieren que el hueso no se ha quebrado y, en cambio, los ligamentos del tobillo se han desgarrado o esguinzado. No obstante, es muy importante no considerar cualquier lesión como un esguince de tobillo porque también pueden ocurrir otras lesiones. Por ejemplo, se pueden desgarrar los tendones peroneos mencionados. También puede haber fracturas en otros huesos en torno al tobillo, como el quinto metatarsiano y la parte anterior del calcáneo. En casos muy graves, se puede justificar una resonancia magnética (RM) para descartar otros problemas en el tobillo, como daño al cartílago. Una RM normalmente no es necesaria para diagnosticar un esguince. ¿Cuáles son las opciones de tratamiento? No se requiere cirugía en la gran mayoría de los esguinces de tobillo. Aún en los esguinces graves, estos ligamentos cicatrizan sin cirugía. El grado del esguince determinará el tratamiento. Los esguinces se clasifican tradicionalmente en varios grados. Sin embargo, tal vez lo más importante sea la capacidad del paciente de soportar peso. Los pacientes que pueden soportar peso, incluso después de la lesión, posiblemente vuelvan a jugar con bastante rapidez. Quienes no pueden caminar tal vez deban ser inmovilizados. En general, el tratamiento en las primeras 48 a 72 horas consiste en hacer reposo con el tobillo, colocar hielo por 20 minutos cada dos a tres horas, comprimir con una venda y elevar el tobillo, que significa posicionar la pierna y el tobillo de modo que los dedos de los pies se encuentren por encima del nivel de la nariz del paciente. Los pacientes que no pueden soportar peso se tratan mejor con el uso de una bota ortopédica (Walker) para caminar desmontable hasta que puedan soportar peso de manera cómoda. Uno de los pilares es la fisioterapia. Los pacientes deben aprender a fortalecer los músculos en torno al tobillo, en particular los peroneos. Recomendamos el uso de una tobillera ballenda acordonada hasta que el fisioterapeuta considere que el tobillo este lo suficientemente fuerte como para abandonarla. En muy pocas ocasiones se indica una cirugía, pero puede ser necesaria en un paciente que tiene dañados los cartílagos u otras lesiones relacionadas. Los ligamentos solo se reparan o fortalecen en los casos de inestabilidad crónica donde los ligamentos han cicatrizado pero no de manera fuerte. ¿Cuánto tiempo demora la recuperación? La recuperación depende de la gravedad de la lesión. Como se comentó, si las lesiones son menores, las personas pueden retomar las actividades deportivas en varios días. Si el esguince es grave, puede transcurrir más tiempo y hasta varias semanas. Los resultados que se obtienen en los esguinces de tobillo son, en general, bastante buenos. La mayoría de los pacientes se recupera del esguince de tobillo y puede retomar su vida, deportes y actividades normales. No obstante, algunas personas que no rehabilitan el tobillo de manera adecuada y que tienen un esguince grave pueden seguir teniendo inestabilidad en el tobillo. La inestabilidad crónica ocurre en los pacientes que se esguinzan el tobillo de manera repetida. Dichos episodios repetidos pueden ser peligrosos porque pueden provocar daños dentro del tobillo. Estos pacientes deben ser identificados y considerarse para una reparación. Posibles complicaciones Las cirugías casi nunca son necesarias. Como se observó, no obstante, un tobillo que no se rehabilitó adecuadamente puede terminar con inestabilidad crónica. Es importante abordar esto con la terapia o la cirugía antes de que ocurra más daño en el tobillo. Preguntas frecuentes ¿Qué es un esguince de tobillo superior y es diferente de un esguince de tobillo regular? Un esguince de tobillo superior hace referencia al desgarro de los ligamentos que conectan la tibia con el peroné (esta conexión también se denomina sindesmosis). Estos esguinces son diferentes y mucho menos comunes que el esguince de tobillo lateral estándar, es decir, que ocurre al costado del tobillo. ¿Los esguinces de tobillo alguna vez deben repararse de manera aguda? En muy pocas ocasiones, o nunca, los esguinces de tobillo deben ser tratados con cirugía. La gran mayoría simplemente se debe tratar con reposo, hielo, compresión y elevación, seguidos de fisioterapia y el uso temporal de una férula. Me esguincé el tobillo varias veces. ¿Debería preocuparme? Sí. Cuanto más se esguince el tobillo, mayores son las posibilidades de que se desarrollen problemas. Por ejemplo, doblarse el tobillo puede producir daños al cartílago dentro de la articulación del tobillo. Debería consultar con un especialista en Cirugía de Tobillo y Pie si esto ocurre. Cómo Tonificar el Tobillo Después de un Esguince Después de un esguince de tobillo, deben realizarse ejercicios de tonificación una vez que pueda resistir peso y su rango de movimiento sea casi completo. Hay muchos tipos de ejercicios de tonificación. Para comenzar, los más sencillos son los ejercicios isométricos que realiza al oponer resistencia a un objeto fijo con su tobillo. Una vez que haya llevado a cabo esto, puede pasar a realizar ejercicios isotónicos, que implican utilizar el rango de movimiento del tobillo frente a una forma de resistencia. Las fotografías que aparecen a continuación muestran ejercicios isotónicos realizados con una banda de resistencia, que puede obtener de su terapeuta local o tienda de artículos deportivos. Coloque su tobillo en la posición "debajo y adentro" contra el objeto fijo, como un sofá. Mantenga esta posición durante un conteo de 10. Repita 10 veces Coloque su tobillo en la posición "arriba y afuera" contra el mismo objeto. Mantenga esta posición durante un conteo de 10. Repita 10 veces. Con una banda de resistencia alrededor de su antepié, mantenga los extremos de la banda con su mano y empuje ligeramente su tobillo cuanto pueda y luego vuelva a la posición inicial. Repita 10 veces. Ate las bandas de resistencia alrededor de un objeto fijo y envuelva los extremos alrededor de su antepié. Comience con su pie apuntando hacia abajo y empuje su tobillo hacia arriba cuanto más pueda. Vuelva a la posición inicial y haga un ciclo con su tobillo de 10 veces. Ate las bandas alrededor de un objeto al lado externo de su tobillo. Comience con los pies relajados y luego mueva su tobillo hacia abajo y hacia adentro. Vuelva a la posición relajada y repita 10 veces. Ate los extremos de las bandas alrededor de un objeto a la parte interna de su tobillo y mantenga su pie relajado. Mueva su pie hacia arriba y hacia afuera y luego vuelva a la posición de apoyo. Repita 10 veces. Una vez que haya recuperado el movimiento y la fuerza de su tobillo, estará listo para realizar actividades deportivas como andar en bicicleta o trotar. Después de sentir que la fuerza de su tobillo es de aproximadamente el 80% del otro tobillo, entonces podrá comenzar a practicar deportes de fricción. Ejercicios propioceptivos para equilibrio, coordinación y agilidad Manténgase de pie con su pierna afectada sobre una almohada. Mantenga esta posición durante un conteo de 10. Repita 10 veces. Manténgase de pie con su pierna afectada con la banda de resistencia aplicada a su pierna no afectada. Mueva la pierna no afectada hacia adelante y luego vuelva a la posición inicial. Repita 10 veces. Comience lentamente y aumente la velocidad para incrementar la dificultad del ejercicio. Nuevamente, comience de a poco y aumente la velocidad a su propio ritmo, mueva la pierna no afectada hacia adelante y luego vuelva a la posición inicial. Para un ejercicio más avanzado, balancee la pierna no afectada hacia atrás y luego vuelva.