Jueves 13 marzo 2014 Expansión 21 ECONOMÍA / POLÍTICA George Soros critica las medidas “impuestas” por Alemania a España El inversor dice que la crisis del euro se debe a la “ignorancia” de las autoridades que piden austeridad y cree que los hedge funds pueden activar la economía ante la pasividad de los bancos. La UE retrasa al 19 de marzo el pacto sobre quiebras bancarias VISITA A LONDRES/ George Soros, durante su visita de ayer a Londres. Italia llegara a tener una deuda del 230% del PIB”. Ahora, Italia y España se encuentran sin flexibilidad para devaluar su moneda y aliviar el peso de esa deuda, por lo que tienen que realizar un “doloroso ajuste a pequeños pasos para recuperar competitividad”. Abandonar el euro no es una solución para esos países, opina Soros, ya que tendrían que suspender pagos provocando un colapso del sistema financiero. Una alternativa es la división del euro en dos bloques, uno con los países del norte liderados por Alemania y otro del sur con Francia. “Ello permitiría una depreciación de moneda en el sur para facilitar su ajuste. Pero haría falta un gran acuerdo difícil de alcanzar”, advirtió el inversor, a cuyas operaciones en 1992 se atribuye el hundimiento de la libra y su salida del mecanismo europeo de divisas que existía entonces. En el caso actual del euro, Soros cree que su existencia está asegurada, porque Alemania “hace lo mínimo” para que subsista, aunque la austeridad que dicta Berlín “está provocando una proceso de deflación que no se vivía desde 1930”. Sobre las opciones del BCE para combatir la caída de precios, Soros afirmó que el principal problema que encuentra su presidente Mario Draghi es que la banca europea no transmite a sus clientes las inyecciones de liquidez que recibe del banco central. “El sistema de transmisión monetaria está roto y no hay préstamos para las pymes, porque los bancos se centran en elevar sus reservas. Los hedge funds [fondos que utilizan estrategias de inversión alternativas más allá de la compra de acciones o bonos] sí pueden permitirse asumir este riesgo y prestar a las empresas”. Por ejemplo, los fondos de Soros han invertido en empresas españolas como la constructora FCC y la inmobiliaria Hispania. El financiero no quiso comentar estas operaciones. “Estoy retirado de la gestión diaria”, adujo. Soros, quien presentó en Londres un libro que reúne sus declaraciones sobre la situación europea a un periodista alemán, no rehuyó preguntas sobre otros temas de actualidad. Ante la situación en Ucrania, pidió a la Unión Europea una posición común “para lanzar un Plan Marshall” que facilite inversiones en el país y le permita liberarse de la presión rusa. Sobre el futuro de Reino Unido, Soros advirtió que salir de la UE “costaría muchos puestos de trabajo” y dijo que una hipotética Escocia independiente tras el referéndum de septiembre lo tendría difícil para seguir usando lo libra, por lo que debería “intentar entrar en el euro”. El G-7 sancionará a Rusia si absorbe Crimea M. Roig. Bruselas Ante la política de hechos consumados del presidente ruso, Vladimir Putin, Occidente sigue respondiendo con amenazas. El grupo formado por las siete economías más industrializadas del mundo, el G-7, advirtió ayer a Rusia de que adoptará “acciones individuales y colectivas” si Moscú se anexiona Crimea tras el referéndum que la región autónoma ucraniana ha convocado para el próximo domingo. Estados Unidos, Japón, Alemania, Francia, Reino Unido, Italia y Canadá, junto con el presidente de la Comi- sión Europea y el del Consejo Europeo emitieron ayer un comunicado conjunto en el que criticaban duramente el modo en que Rusia está interviniendo en la crisis de Ucrania: “Hacemos un llamamiento a la Federación de Rusia a cesar todos los esfuerzos para cambiar el estatus de Crimea en contra de la ley ucraniana y violando la legislación internacional”. El G-7 advirtió de que el referéndum previsto para el próximo domingo “no tendría efectos legales”. Pero no tan solo por la falta de soporte legal, sino también por la “ausencia de preparación y la presencia intimidatoria de tropas rusas”. Según indican los siete países en el comunicado, “no reconoceríamos el resultado”. Además, advierten a Rusia de que la anexión de Crimea violaría la Carta de Naciones Unidas, los compromisos del Acta de Helsinki, el Tratado de Amistad, Cooperación y Partenariado firmado con Ucrania en 1997, el acuerdo marco firmado con Ucrania ese mismo año y los compromisos del Memorando de Bucarest de 1994. Por ello, aseguran que si Rusia incorpora la region ucrania a su territorio, el G-7 “adoptará nuevas acciones, individual y colectivamente”. El presidente francés, François Hollande y su homólogo ruso hablaron ayer por teléfono para permitir la entrada de observadores internacionales en Ucrania. Ambos líderes, a los que se unió Didier Brukhalter, el secretario general de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Euro- Crimea cierra su espacio aéreo hasta el 18 de marzo de cara al referéndum del domingo pa (OSCE), emplazaron a sus ministros de Exteriores a seguir debatiendo el 18 de marzo en Moscú. Crimea blinda su territorio Crimea cerró ayer su espacio aéreo hasta el 18 de marzo, de cara al referéndum del próximo domingo para impedir la llegada de ciudadanos desde otras regiones de Ucrania, cuyas autoridades han declarado que no planean enviar tropas a la península, informa Europa Press. Desde hace dos semanas, hombres armados controlan todos los nudos de transporte clave de la península. El Consejo Europeo y el Parlamento Europeo no llegaron ayer a un acuerdo sobre el Mecanismo Único de Resolución, el segundo pilar de la unión bancaria europea, que debería permitir liquidar entidades financieras problemáticas con una autoridad central y un fondo común finanicado por los propios bancos. Los negociadores de ambas instituciones se han emplazado al próximo 19 de marzo, un día antes de la Cumbre de Jefes de Estado y Gobierno de la UE. “Todavía queda mucho trabajo por hacer y todavía esperamos detalles concretos del Consejo sobre cómo quedaría el texto [...] Esperamos tener una reunión constructiva la semana que viene en la que sea posible redactar un borrador concreto para llegar a un acuerdo”, aseguró el Parlamento Europeo en un comunicado. Sin embargo, la Eurocámara reiteró que “todavía quedan asuntos cruciales por ser acordados”. “Básicamente no hemos recibido suficientes propuestas tangibles sobre el papel para poder avanzar hacia un acuerdo, aunque verbalmente hemos recibido signos de que hay movimiento en la mayoría de los asuntos”, afirman fuentes parlamentarias. Ambas instituciones discrepan en tres puntos clave: cuán común es realmente el fondo común de resolución del MUR; la posibilidad de crear una red de seguridad pública en caso de que se quede sin dinero y restar influencia al Consejo en la toma de decisiones. Según la última oferta del Ecofin, los bancos deberán aportar 55.000 millones de euros al fondo de resolución en ocho años en lugar de en diez, y podría acelerarse también el proceso de mutualización del fondo (que empezará con compartimentos nacionales, que serán usados primero para rescatar los bancos de cada país). La Eurocámara, por su parte, pide que el fondo esté mutualizado al 50% al cabo de tres años. Además, el proceso de toma de decisiones apenas se modificó y Berlín vetó cualquier mención a un apoyo público al MUR. Esto último quedó en una vaga referencia a que el fondo podrá endeudarse, titulizando ingresos futuros. opez Alegre. Propiedad de Unidad Editorial. Prohibida su reproducción. El inversor George Soros criticó ayer al Gobierno alemán por imponer a España medidas de austeridad “contraproducentes”, ya que están generando una espiral de deflación en el país que dificultará el pago de sus deudas. En una rueda de prensa celebrada en Londres, Soros aseguró que la zona euro ha quedado dividida tras la crisis en “dos clases de miembros”. Por un lado están los países acreedores, liderados por Alemania, “que tienen todo el poder”. Por otro, los países endeudados como España, que deben aceptar sus exigencias. “Las decisiones en Europa ya no se toman por consenso. El Parlamento alemán impone políticas a España, mientras el Parlamento español no tiene nada que decir sobre las de Alemania”, dijo Soros. A sus 83 años de edad, y con una fortuna estimada por la revista Forbes en 23.000 millones de dólares (16.500 millones de euros), George Soros no disculpó ni a políticos ni a otros inversores en su diagnóstico de la situación europea. A su juicio, la crisis del euro se debe a “un problema de ignorancia. Autoridades y mercados no se dieron cuenta de que los países, al ceder la capacidad de imprimir dinero al Banco Central Europeo (BCE), pasaron a endeudarse en una moneda extranjera, el euro. Sólo así fue posible que Bloomberg News R. Casado/A. Polo. Londres Miquel Roig. Bruselas