LICITACIONES Principios Fundamentales LICITACIONES Y CONCURSOS PUBLICOS A partir del desarrollo de diversas actividades económicas que inciden en bienes relevantes para la comunidad o sobre bienes escasos o finitos, los que requieren de una administración y ejecución eficiente, resulta de ordinaria ocurrencia la aplicación de la figura de concursos públicos para la asignación de servicios, concesiones o bienes. En reiteradas oportunidades se han generado controversias en el desarrollo de este tipo de concursos, tanto entre los concursantes, como entre éstos y la autoridad que está a cargo del mismo, las que han dado lugar a una nutrida jurisprudencia a nivel de tribunales ordinarios y administrativos, que ha permitido establecer ciertos principios aplicables en todos los procesos de concurso público. Según lo ha precisado la reiterada jurisprudencia, en todo proceso de concurso o licitación pública rigen como principios básicos e ineludibles: - El principio de sujeción estricta de las bases; y, - El principio de igualdad de los oferentes. El principio de sujeción estricta de las bases implica que una vez aprobadas las bases de un concurso o licitación, sean éstas generales o especiales, son obligatorias tanto para el organismo licitante como para los participantes. Las bases constituyen la fuente principal de los derechos y obligaciones de la administración y participantes, siendo el marco jurídico en el que se encuadra la actuación de los intervinientes en el concurso o licitación. Sobre el particular, la Corte Suprema ha expresado que, tratándose de una licitación, es obligatorio el cumplimiento de las bases, debiendo rechazarse cualquier propuesta que no cumpla con Informativo Legal 1 LICITACIONES ellas, esto con el objeto de garantizar un plano de igualdad entre los oferentes y la transparencia en el actuar por parte de los distintos entes. Este principio ha igualmente encontrado respaldo en la ley, a modo de ejemplo podemos citar lo expresado por el artículo 8º bis de la Ley Nº 18.575, Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración, norma que prescribe que “Los contratos administrativos se celebrarán previa propuesta pública, en conformidad a la ley. El procedimiento concursal se regirá por los principios de libre concurrencia de los oferentes al llamado administrativo y de igualdad ante las bases que rigen el contrato”. En directa relación con el principio de sujeción estricta a las bases, y como emanación de éste, nos encontramos con el necesario respeto al principio de igualdad entre los partícipes. Así, nuestros tribunales han dispuesto en reiterados pronunciamientos que “resulta atentatorio al derecho de la igualdad que poseen los oferentes en un procedimiento de licitación pública, la decisión de la autoridad licitante que administra una propuesta que no cumple con las bases administrativas elaboradas por ella misma”. Este principio de igualdad entre los partícipes es una consecuencia de la garantía de igualdad ante la ley contemplada por la Constitución Política de la República en su artículo 19 Nº 2. Resumiendo los conceptos referidos anteriormente, nos encontramos con el Dictamen Nº 4.718 de fecha 8 de febrero de 2000, dictado por la Contraloría General de la República, el que en relación a los principios rectores de toda licitación, dispuso que “… como reiteradamente lo ha informado esta Contraloría General, toda licitación se rige por dos principios rectores de dere cho público, cuales son, la estricta sujeción a las bases administrativas y la igualdad de los par ticipantes, a través de los cuales se pretende reflejar la legalidad y la transparencia que debe primar en todos los contratos de la administración por lo que aquellos deben ser respetados en 2 CARIOLA DIEZ PEREZ-COTAPOS & CIA. LTDA. LICITACIONES toda propuesta pública, …”. Como excepción a lo anterior, nos hemos encontrado con algunos pronunciamientos de los organismos administrativos, específicamente la Contraloría General de la República, en los que hacen preponderar un criterio de carácter finalista, tendiente a obtener mayores beneficios para el Estado o a permitir la intervención de un mayor número de participantes, por sobre el excesivo respeto a formalismos en los concursos públicos. Nuestros tribunales ordinarios aún muestran algún grado de reticencia para otorgar a la autoridad mayor discrecionalidad en el análisis de las propuestas u ofertas en los concursos públicos. Ello por cuanto se considera que al otorgar mayor libertad para el análisis de los antecedentes presentados a las licitaciones, se podría prestar para situaciones abusivas, que atenten contra el necesario respeto de la certeza jurídica y la transparencia que debe imperar en esta materia. Por lo expuesto, frente a un concurso o licitación resultará fundamental efectuar un minucioso y detallado análisis de los antecedentes que se presenten al mismo, prestando atención tanto a aquellos elementos relevantes y sustanciales, como a aquellos que en principio parezcan de poca significación. En la práctica, nos encontramos con muchos casos en que los participantes no obtienen su propósito en algún concurso sólo por el incumplimiento de formalidades, que no tienen relación con el fondo de la materia objeto del concurso y pese a que quizás la oferta económica puede ser superior a la de los demás partícipes. Informativo Legal 3